Las aventuras de Emilia 5
Diversión en el baño durante la fiesta de mi amiga
Mi vida paso de ser la chica sexy a la que todos miraban a ser la chica sexy a la que todos tocaban. Debo admitir que me gustaba la atención y la diversión que era provocar a los chicos.
Era ese sábado cumpleaños de Verónica y nosotras ya estábamos en su casa, sus padres estaban alistando para irse por el fin de semana y nos dieron permiso para hacer una fiesta. No sabía que ponerme, estaba decidiendo entre unos shorts negros con un top rojo o un vestido negro. Nicole me dijo que mejor usaba una falda negra y así combinaba ambas ideas, me presté una falda de Verónica y la usé arriba hasta la altura del ombligo para que me tapara solo el culo y dejara mis piernas completamente al aire. Me puse unos tacones de tiras negros, un choker negro, aretes de aro dorados, y varias pulseras.
A las 7 empezaron a llegar las personas del colegio, amigos y amigas, compañeros de clase y quien sea Verónica haya invitado. Yo saludaba a quien llegaba también y no paso mucho tiempo para que nos pusiéramos a bailar y tomar todos.
Pasaron las horas y yo ya estaba un poco ebria pero me divertía, Pepe y sus amigos incluso me tocaron el culo, supongo que mi falda les provocó tanto que no se contuvieron. A mí no me importaba, me sentía deseada, que era la chica más linda de la fiesta y me gustaba mostrarlo.
En un momento me fui a sentar a un sofá y me puse a ver mi teléfono ya que quería descansar un poco, Pepe vino a sentarse conmigo y empezamos a charlar un rato.
-Que lindas piernas tienes Emy.- Dijo Pepe ya que claro tenía la falda más pequeña de la fiesta.
-Gracias jaja.
Pepe puso una mano en mi pierna derecha y la acariciaba un poco, yo me empezaba a calentar mientras seguíamos charlando. Lentamente vi como crecía el bulto que tenía y yo miraba más su verga que a él. Tiré mi cabello para atrás y me incliné para que viera mis tetas y él estaba perdido en ellas, yo solo sonreía.
Yo andaba ya muy caliente y quería mamársela otra vez.
-Pepe vamos al baño.-
Lo tomé de la mano, me levanté lentamente y moviendo mis caderas, contoneándome como siempre lo llevé al baño pero de arriba para que nadie nos molestara, Verónica y Fernanda me vieron y yo les guiñe el ojo mientras ellas reían. Yo sabía que a Vero no le molestaría que use el baño ya que éramos todas mejores amigas.
Abrí la puerta y entré con Pepe, cerré la puerta con seguro y me arrodillé en la alfombra mientras Pepe se bajaba los pantalones. Su verga ya estaba dura y le di unos besitos.
-Emy métetela a la boca.
Obedecí y empecé a mamársela, lento al principio llegando hasta la mitad de su verga, siempre mirándolo a los ojos y aunque aún no era muy buena intentaba que les gustara. La saqué de mi boca y la lamí de arriba abajo lentamente, le di más besos antes de meterla de nuevo y mamar más rápido. Pepe tocaba mi cabeza cuidando que mi cabello no tapara mi cara y soltaba suspiros de vez en cuando. Yo veía su cara de placer y mamaba con más ganas.
-Que rica estás Emy, déjame ver ese culito.
Sonreí y me levanté dándole la espalda, levanté mi falda lentamente y quedo mi tanga roja de encaje a la vista de Pepe.
-Que rica estás.- Repitió él tocando y acariciando mi culo.
-Te gusta?- Dije casi gimiendo.
-Me encanta Emy.
Le dejé jugar con mi culo un rato hasta que me sorprendió con su pregunta.
-Te la puedo meter?
Dudé, no era virgen pero porque me masturbaba, nunca me la habían metido y Pepe no tenía condones. Pero estaba tan caliente la quería adentro…
-Mmmh, sí… métemela.- Dije apoyándome en el lavabo dándole mi culo.
Pepe me movió la tanga a un lado mientras empujaba suavemente su verga en mi vagina, ya estaba mojada y le fue más fácil. Pronto la sacó y volvió a meter, puso sus manos en mi culo y empezó a moverse, yo gemía y respiraba fuerte, amaba tenerla adentro, estaba con la falda levantada, inclinada sobre un lavabo, siendo cogida en un baño, y me encantaba.
Pepe continuaba metiendo y sacando su dura verga en mí y yo gemía y gemía, en el espejo veía mi cara de puta y me mojaba más.
-Emy me corro…- Dijo Pepe sacándola de mí. Yo me di vuelta y me arrodillé abriendo la boca.
Pepe lanzó un gemido y tiró su leche en mi boca, yo esperé a que sacara toda y la tragué, le lamí la verga y besé la punta viendo su reacción de placer.
-Gracias Pepe estuvo rico.- Le dije dándole un beso.
-Gracias a ti Emy, eres la más rica y la mamas muy bien.
Me limpié la cara y la vagina, me acomodé la tanga y la falda y me arreglé el peinado. Salí del baño contoneándome hacia mis amigas y les conté que me habían cogido en el baño y nos pusimos a hablar y reír de eso mientras les daba detalles.
La fiesta acabó entre 2 y 3 de la madrugada y Nicole, Verónica, Fernanda, Ashley y yo nos fuimos a dormir a la habitación de Vero y mientras todas dormía yo me fui al baño aún vestida como en la fiesta y me tomé muchas fotos sexys para mis redes y le mandé a Pepe algunas fotos con poca o nada de ropa para que se divirtiera.