Las aventuras de Daniela y Karina 5

El príncipe

Me levanté, estaba desnuda sentía mi culito abierto como cuando recién me han cogido y me mire al espejo, Daniela me abrazó por la espalda y me dió un beso en la mejilla, yo la miré a los ojos y ella respondió con un beso en mi boca que yo respondí, ella siguió besándome y luego bajo besando mi cuerpo hasta llegar a mi entrepierna la cual metió a su boca haciéndome gemir hasta ponerla dura, luego me condujo a la cama y se acostó abriendo las piernas, yo me puse sobre ella y ella con su mano dirijió mi verga hacia su concha y yo la hundí profundamente haciendola gemir para después comenzar a bombear mientras nos besábamos, mis manos acariciaban sus pezones duros como piedras, y ella hacía lo mismo con los míos, nuestros gemidos inundaban la habitación, dejando salir todo nuestro placer, aceleré mis movimientos y entonces ella comenzó a tener un orgasmo tras otro, realmente lo estábamos disfrutando, por lo que la tomé de los tobillos y la cogí con más fuerza y no pudiendo aguantar más comencé a venirme dentro de la concha de Dani, lo cual disfrutó completamente, nos quedamos así unos minutos, besándonos hasta que mi verga perdió fuerza y salió de su concha por si sóla, entonces me miró y me dijo...

-Podran cogerme Miles de hombres, pero siempre serás mi favorita.

-Y tu la mía.

Luego de un pequeño beso nos dimos un baño y en la sala de la habitación había dos cajas al abrirlas vimos una tela verde esmeralda que al parecer era seda, era solo una tela rectangular de unos cinco metros, de largo, debajo había varias joyas y en el medio de ambas cajas un sobre con nuestros nombres escritos con la letra de la madre de Dani, al abrirlo leímos la carta...

-Queridas mías, este vestido es un sari un vestido típico de la India, es el color y vestimenta oficial que usan las recién iniciadas, deberán usarlo sin nada abajo, así como todas las joyas que deben usar, las iniciadas deben ir descalsas, cada vez que alguien las coja les dará una ficha, al final de nuestra estancia las fichas se cambiarán por dinero, algunos les darán más de una ficha así que entre más fichas mejor, deberán siempre estar juntas si alguien les da un pendiente con una ficha dorada significa que está noche serán sus acompañantes, es posible que lo hagan muchas veces, si se sienten cansadas hay áreas de descanso donde podrán descansar salgan y háganme sentir orgullosa.

Junto con la carta venía una hoja que detallaba como usar la joyería y el vestuario, en la cintura se usaba una cadena de oro con colgantes y pequeños cascabeles, en los tobillos y muñecas usaríamos pulseras y brazaletes de oro y todo tintineaba al movernos, el sari se envolvía en nuestros cuerpos y se anudaba en el hombro, y tras vestirnos nos maquillamos y salimos, un mayordomo nos indicó el camino a seguir y nos adentramos en un sendero que atravesaba por una arboleda y conforme avanzabamos se escuchaban gemidos y tintineos, al salir de la arboleda había claros dónde muchas chicas estaban siendo cogidas por muchos hombres pero nosotras continuamos caminando hasta que un hombre desnudo de acento extraño nos vió y nos hizo una señal con la mano al ver que no le entendíamos, Dani me dijo que el hombre hablaba ruso, ya estando a su lado debajo de un árbol tocó a Dani y a mí desan

u

dando el sari de ambas al cual cayó al suelo en automático quedando las dos desnudas al momento, al verme el ruso dijo en ingles...

-I know it, Eto rasputnyy mal'chik, kotorogo ya trakhal proshloy noch'yu, i yego voskhititel'naya sestra. -termino en ruso.

No entendíamos lo que dijo pero nos abrazo por la cintura y chupó nuestros pezones, raspando nuestros cuerpos con su barba, Dani emitió un quejido y Vi la mano del ruso que estaba en la entrepierna de Dani que la masturbaba y al mismo tiempo había metido el dedo pulgar en el culito de Dani, mientras a mi me tomó de la nuca y me hizo arrodillarme para mamar su enorme verga, mientras el deboraba los pezones de Dani, luego de un rato me recostó en la banca donde el estaba sentado y subió mis piernas a sus hombros, penetrandome con fuerza, mientras ordenaba a Dani poner su concha en mi rostro, y comenzara a chuparla, Dani comenzó a gemir al mismo que yo, mientras mi excitación crecía al saborear los jugos de Dani, sin embargo sus pezones sufrían el embate de la boca del ruso, quien me cogía con fuerza brutal, en un punto me sacó la verga y acostó a Dani en la banca y me hizo acostarme sobre ella dándole la espalda, yo no pesaba mucho pero no quería lastimar a Dani sin embargo debía cumplir la orden que me habían dado entonces ya una sobre la otra el ruso metió su verga en la concha de Dani y la cogía con fuerza pero en un momento la saco y me la volvió a meter a mi y así alternaba entre mi culito y la concha de Dani...

-YA zabyl, chto u menya yest' dve zadnitsy i rakushka. -dijo el ruso.

Y metió de golpe su enorme verga en el culito de Dani, alternando entre nuestros culitos y la concha de Dani, nuestros gemidos lo excitaban más, entonces mientras cogía a Dani por la concha comenzó a venirse dentro de ella luego de lo cual nos dió la orden de mamar su verga para limpiarla y mientras lo hacíamos se acercó un joven de unos veintitantos vestido finamente, a su lado venían cuatro chicas dos de las cuales reconocimos como las dos chicas que habían estado en nuestra iniciación, ellas estaban desnudas solo con la joyería de las recién iniciadas decorando sus cuerpos, el ruso nos dió dos fichas a ambas y haciendo una reverencia al joven tomó su ropa y se fué...

-Unake nagn shareer meree aankhon aur meree

riyon ke lie ek khushee hain, mujhe aasha hai ki ve jaanate hain ki aaj raat mere seks ko kaise maapana hai.

Dani y yo nos miramos con ignorancia, pues no entendíamos lo que aquel hombre decia, entonces miro a una de las chicas recién iniciadas y le dijo...

-jhuken aur apane pairon ko phailaen. - y la chica puso las manos en la banca y abrió las piernas, el joven se desnudó y penetró a la chica con fuerza y mientras la cogía se dirigió a otra chica más grande y que si estaba vestida. -main jo ane ja raha hoon usaka anuvaad karo, main chaahata hoon ki aaj raat do baar tumhaare shareer mein aanand aae, main tumhen saaree raat cheekhana chaahata hoon, mere naukar raat ke aath baje tumhaare lie hotal jaenge, main nahin main nahin chaahata ki tum koee paridhaan pahano main tumhen shuroo se hee nagn dekhana chaahata hoon.

La chica entonces nos dijo en un perfecto español...

• Mi señor quiere tenerlas a ustedes dos esta noche para deleitarse con sus cuerpos, desea hacerlas gritar toda la noche, sus sirvientes iran por ustedes al hotel a las ocho de la noche, no quiere que usen prenda alguna quiere verlas desnudas desde el principio.

Dani y yo hicimos una reverencia y tras darnos el pendiente con la ficha dorada nos fuimos de ahí mientras la chica a la que se cogía el joven comenzaba a gritar, aunque no sabíamos si era de placer o de dolor.

Caminamos desnudas un rato pues hacía calor seguimos el sendero hasta que escuchamos el sonido característico de las olas del mar, y en efecto llegamos a una playa donde había algo de gente, dos parejas nos vieron y nos hablaron hablaban en español, pero con el acento de España, los hombres al vernos nos dijeron que deseaban probarnos así que nos ordenaron ponernos de rodillas y comenzar a mamar sus vergas, mientras las mujeres observaban con detenimiento la escena el hombre que estaba con Dani la acostó en la arena y la abrió de piernas para luego penetrarla, mientras yo era puesta en cuatro y también era penetrada mi amante me cogía con fuerza y Dani y yo gemiamos ruidosamente mientras las parejas de ambos hombres se fundían en un 69 muy rico, en eso el amante de Dani se recostó y le ordenó ensartarse luego de lo cual mi amante al verla en esa posición, sacó la verga de mi culito y se puso detrás de Dani para penetrarla por el culito, en eso dos hombres que estaban observando se acercaron a mi para que les mamara las vergas y luego uno de ellos se acostó y me ordenó ensartarme, mientras el otro se colocaba atrás de mi y también poco a poco me metió la verga en mi culito, sentir sus vergas dentro era delicioso, Dani gemía pero su rostro reflejaba cierto dolor pues era la segunda vez en su vida que le daban sexo anal, nuestros gemidos eran fuertes y mis nuevos amantes me cogían con fuerza mientras a ambas nos propinaban nalgadas y nuestros pezones eran deborados salvajemente, el hombre que estaba detrás de mi comenzó a gemir fuerte y sentí como se venía dentro de mi mientras el que estaba en la concha de Dani también se venía llenandola de leche ambos hombres se salieron y nos dieron sus vergas a mamar para limpiarlas y en ese momento el hombre que se cogía a Dani por el culito también se vino y también le dió a Dani su verga para que la mamara, al tiempo que el otro hombre que me cogía se vino dentro de mi, y también me dió su verga a limpiar, luego nos dieron tres fichas a cada una y unas fuertes nalgadas dejando nuestras nalguitas rojas, luego de eso Dani y yo decidimos tomarnos un descanso y jugar desnudas en la playa, nadando un poco en el mar luego de arreglar nuestro maquillaje fuimos nuevamente al sendero, decidimos permanecer desnudas pues hacía bastante calor, en medio del sendero nos encontramos a un hombre maduro con una verga enorme que flácida le llegaba a medio muslo y al vernos nos hablo en español, lo seguimos hierba adentro y ahí nos ordenó ponernos de rodillas para mamar su descumunal verga, que ya parada medía unos 30 cm y mientras lo hacíamos sacó de su bolsa dos pares de esposas, las cuales nos puso a la espalda, ya esposadas yo fui la primera, me puso acostada en la hierba abrió mis piernas y me metió la verga la cual entro hasta la mitad, mientras le ordenaba a Dani poner su concha en mi rostro para mamarla, hice gozar a Dani pues deseaba que lo disfrutara, después de unos minutos cogiendome fue el turno de Dani, a ella la puso en cuatro y le metió la verga en la concha, y le entró poco más de la mitad, nuestro amante me ordenó ponerme frente a Dani para que ella mamara mi verga, y ella me devolvió el favor causando mucho placer en mi cuerpo, los gemidos de los tres eran fuertes, pero entonces nuestro amante metió su verga en el culito de Dani, quien se esforzaba por aparentar que lo disfrutaba, pues era claro que no era su sexo favorito, nuestro amante la jalaba del pelo y ella no lo disfrutaba mucho, luego fue nuevamente mi turno y me cogió en la misma posición que a Dani, para poder jalarme el pelo también, entonces dijo que estaba por venirse y nos puso de rodillas a ambas para venirse en nuestras bocas, y tras tragar su leche nos dió tres fichas a cada una, nos dió una nalgada y se fue.

Revisamos nuestras bolsas y vimos que cada una tenía hasta ese momento ocho fichas, pero aún no pasaba el medio día y la hora de finalización de estar afuera recolectando fichas finalizaba a las cinco de la tarde, desidimos ir a tomar un descanso al área destinada a ese hecho, pedimos indicaciones a una pareja que iba hacia la playa y nos dijeron por dónde debíamos ir, llegamos a un amplio pabellón con restaurantes, pero antes de entrar nos pidieron dejar nuestra ropa en la entrada y a mí me pusieron un aditamento llamado jaula de castidad, el cual era un pequeño artefacto que encerraba mi verga, así mismo como yo llevaba el ornamento de las mujeres (los hombres usaban otro tipo de joyería) también metieron un tapón anal en mi culito y lo sujetaron de modo que no podía sacarlo aunque lo deseara, así mismo colocaron unos círculos metálicos en mis pezones y los sujetaron a mi espalda, en el caso de Dani, le colocaron dos tapones en su concha y culito, así como cubrieron sus pezones, el mayordomo a cargo de estos menesteres nos explico que en el área de descanzo y comida estaba prohibido el sexo, y que así nadie podía recibir estimulación física, luego de eso entramos al pabellón, todos estaban desnudos los hombres con jaulas de castidad y las mujeres con tapones, y nadie traía los pezones descubiertos, esto aplicaba para todos sin importar la edad, nos dieron un vale por una comida y fuimos a comer una hamburguesa, nos sentamos a comer y conversamos un poco...

-De verdad no sé cómo aguantas las vergas en el culo. -me dijo Dani.

-Bueno, es por donde me pueden coger.

-Así pero duele mucho, y eso de no poder negarse es terrible, el primero que nos cogió casi me parte en dos.

-Es por qué fue la primera vez, pero dime ¿Que se siente que te la metan por la concha y el culito? -pregunté.

-Pues es muy rico, pero si pudiera quitar el dolor del culo tal vez lo disfrutaría más.

-Te irás acostumbrando, aún nos faltan seis días en este lugar ¿No es así?

-Eso si mi madre lo quiere, no siempre ha estado aquí la semana exactamente, a veces se toma más días.

-¿Ya habías venido aquí?

-El año pasado, pero estuve en el hotel todo el tiempo, tenía una idea de lo que pasaba aquí, pero no me lo imaginaba así.

-¿Cuántos años tiene tu madre viniendo a este lugar?

-Ella dice que era un poco más chica que yo cuando fue iniciada desde entonces no ha faltado ni un solo año.

Terminamos de comer, y luego de eso nos pidieron pasar al área de aseo, donde entre otras cosas hicimos nuestras necesidades para luego ser limpiadas por dentro y por fuera, luego de lo cual regresamos a la entrada donde nos regresaron nuestra ropa y tras vestirnos nuevamente nos dijeron que probaramos los jardines, que ahí solían estar los más adinerados buscando recién iniciadas como nosotras, seguimos el camino, hasta una enorme cúpula de cristal que era un gran invernadero, las plantas eran exóticas, pero los pasillos del invernadero estaban inundados permanentemente con agua turbia pero que despedía olor a agua limpia, en algunos lugares el agua nos llegaba a las rodillas y en otras nos cubría la cintura, afortunadamente nos pidieron nuestra ropa antes de entrar y nuestras bolsas eran totalmente impermeables, desafortunadamente solo había una entrada y para salir debíamos recorrer todo el camino que atravesaba el invernadero, llegando a tener que nadar en un tramo, llegamos a un área donde se escuchaban gemidos por todos lados el camino se bifurcaba en varios caminos que a su vez tenían pequeños caminos que daban a pequeñas rotondas, vimos en varias de ellas a muchas parejas cogiendo a veces entre mujeres a veces entre hombres y a veces entre todos, también vimos a varias recién iniciadas pero en una distinguimos a el hombre de la verga gigante cogiendo a una mujer que tenía las manos esposadas y su cuerpo estaba totalmente sumergido en el agua y solo sobresalía su culo dejando sus nalgas al aire y en un momento el hombre sumergió su mano y tomo del cabello a la mujer que se cogía, sacándola del agua en una gran bocanada de aire y al ver su rostro pudimos ver qué se trataba de la madre de Dani, quien pudo vernos y luego de ello nos sonrió mientras genia con toda la verga de su amante dentro de ella, y tras eso volvió sumergirla en el agua, mire con preocupación a Dani, pero ella me empujó diciendo...

-Ella sabe lo que hace, sigue caminando.

Así que seguimos y llegamos a una rotonda amplia, dónde había una hermosa mujer recostada en un camastro levemente sumergido en el agua, a sus dos lados estaban seis hombres (tres de cada lado) dos de los cuales eran recién iniciados ya que sus muñecas tenían brazaletes plateados, y portaban el cinturón de cadena que portaban todos los iniciados pero sus vergas portaban un aro metálico que rodeaba sus testículos y la base de su verga, y bajo el aro había un candado que cerraba el aro, e impedía que se quitaran el aro, y los pezones de los seis hombres estaban perforados con un aro plateado, los seis hombres tenían una charola en su mano derecha y en ellas había fruta, vinos y copas, y servían a la mujer cuando ella lo ordenaba, al vernos la mujer hablo en español pero con un claro acento extranjero tal vez alemana, y nos invitó a acercarnos, Dani dió un paso al frente pero no nos percatamos que justo en la entrada de la rotonda había un espacio profundo y Dani cayó al agua hundiéndose debajo de la misma, y saliendo a flote un momento después pero ya con el cabello completamente mojado, yo me deje caer al agua también pero sin el accidente de Dani y ambas salimos a flote y subimos nuevamente a piso firme, ya aquella mujer nos hizo acercarnos presentándose como La Baronesa, se levantó de su camastro y nos examinó con las manos, y tras vernos tronó los dedos y le ordenó a sus seis sirvientes que se nos acercaran, los aros metálicos intensificaban el grosor de sus vergas, la Baronesa nos ordenó arrodillarnos, para después ordenar que mamaramos las vergas de sus sirvientes, a quienes su ama las dió permiso de gemir, tres de los sirvientes estaban con Dani y los otros tres conmigo en un momento uno de los que estaba conmigo tomo aire y se acostó sumergiéndose y dejando la punta de su verga en la superficie y la Baronesa me ordenó ensartarme, lo cual hice y otro de sus sirvientes recibió la orden de penetrarme también diciéndole a los sirvientes que estaban con Dani que le hicieran lo mismo, comenzando a cogernos con fuerza a ambas, saliendo a respirar los que estaban bajo el agua cada tanto, luego de un rato la Baronesa ordenó que cambiaramos, y Hasi se hizo hasta que los seis hombres nos cogieron, haciendo al menos nueve cambios, finalmente la Baronesa ordenó que todos siguieran cogiendome a mi, mientras ella deboraba el cuerpo de Dani, hasta que uno a uno se corrió dentro de mi, y luego de lo cual la Baronesa se aseguró de hacer venirse a Dani a gritos, dejándola mareada, luego del espectáculo lamento que ya trajeramos collar con ficha dorada y nos dió siete fichas a cada una de nosotras, y luego de ello nos ordenó retirarnos.

Dani conversaba conmigo sobre lo que había pasado, confesandome que ya lo había hecho con su madre, pero que la Baronesa sabía dónde y cómo tocar, tuvimos que esperar antes de cruzar a nado el último tramo del camino del invernadero, ya que Dani seguía muy mareada, y tras ello salimos del invernadero dónde nos permitieron enjuagar nuestros cuerpos en unas regaderas colocadas para ese hecho, pasar un momento mientras nuestro cabello se secaba y luego ser peinadas y perfumadas, para continuar nuestro camino, eran casi las cinco de la tarde y debíamos regresar al hotel, para poder bañarnos y estar listas para nuestra cita nocturna, cada una teníamos quince fichas, nos aseamos profundamente, y nos pusimos de nuevo la joyería, y cuando estábamos terminando de arreglarnos tocaron a la puerta, y al abrir una muchacha de unos 25 años totalmente desnuda y con muchas joyas en el cuerpo, así como perforaciones en los pezones y la nariz nos indicó que la siguieramos fuimos entonces detrás de ella y al llegar al lobby vimos a la madre de Dani que nos hizo señas de optimismo al ver que íbamos de salida, subimos a un carrito de golf y nos llevó por un camino aledaño a la playa hasta una cabaña oculta por una arboleda en un acantilado que daba al mar y al llegar vimos que solo había chicas por doquier todas desnudas y finamente adornadas, nos sorprendió aquella opulencia, y la chica que nos guiaba nos llevó hasta el interior de la enorme cabaña diciendo...

-Bienvenidas a la morada del principe Adbmud Ali Hassan.

Dani y yo nos miramos mutuamente y preguntamos en voz alta...

-¿Príncipe?