La zorra que tenía enscondida dentro de mí.
Sexo en lugares públicos. Tentación y excitación que invaden mi mente y hace que salga mi YO más guarra.
Hace unas noches estaba inspirada en juguetear con mi chico y sorprenderle con algo nuevo y diferente ya que por problemas de distancia no salimos de la rutina sexual. Antes de quedar con él y dar una vuelta, me puse un vestido algo ajustado y corto,de color claro con brillantes y escote insinuante, tacones altos y negros, no me puse ropa interior para facilitar la experiencia, simplemente unas medias con encaje en el muslo,bastante sexys y provocativas. Me arreglé el pelo y me pinte los labios color carmín para llamar su atención. Deseando que llegara el momento de verle y sorprenderle con mi aparición imaginaba como sería el momento. Una vez juntos decidí llevarle a un paseo cercano, con apenas luz,donde ya habíamos fantaseado varias veces con hacerlo ahí.
Sin ningún pudor me metí por completo en el papel y me coloqué en la esquina, haciéndome pasar por una puta que paraba por ahí. Le guiñe el ojo diciéndole que me siguiera la corriente,que iba a disfrutar. Le agarré de la camiseta y le llevé hasta mí y con cara de picarona le susurré que no llevaba bragas. Tardó en reaccionar, y tras la sorpresa quiso comprobarlo,sin apenas subirme demasiado el vestido note como sus dedos buscaban mi coño mojado. Empecé a besarle el cuello mientras oía sus suspiros al haber comprobado que estaba desnuda. Pasó su dedo índice sobre mi raja medio húmeda y me metió un dedo mientras con el pulgar acariciaba mi clítoris. En aquel momento supe que el también se había metido en el papel de esa fantasía que llevaba días deseando cumplir.
Tras haberme follando con su mano, me agarró de las tetas y me besó como nunca nadie lo había hecho. Bajó hasta mi cuello donde me produjo suspiros de placer. No dejaba se sobarme las tetas hasta que dejó mi cuello y bajo hasta ellas. Pudo sacármelas por encima del vestido y soltó un leve 'mmmm'.
Mis pezones estaban tan excitados que notaba cada lamida que me daba. Jugueteó con ellos,pasando su lengua,redondeándolos y mordiéndolos hasta el punto exacto para hacerme gemir.
Quise saber como tenía la polla, por sus gemidos sabía que estaba a punto y decidí bajar mi mano hasta su cintura, le acaricié la polla por encima de su pantalón, su glande hinchado asomaba por el borde de su pantalón y lo acaricié mientras me mordía mas fuerte los pezones. Cada vez me humedecía más, así que le susurré que fuéramos calle a dentro donde apenas podía distinguirse algo y él aceptó dándome una palmadita al culo. Le empujé contra la pared cachonda perdida y le desabroche por completo el pantalón mientras me decía lo guarra que era.
Me arrodillé y acto seguido me agarró de la cabeza y me metió su polla dura y gorda hasta la garganta. Soltó un suspiro que me hizo sentirme como una verdadera puta, y eso me encantaba.
Cogí su polla y comencé a besarla, desde sus huevos, hasta su hinchado glande. Nunca le había visto la polla tan gorda como aquella noche.La metí en mi boca,apretando los labios para que me notara, mientras masajeaba sus huevos que chocaban con mi barbilla. Empecé a follarle con la boca tan rápido como pude,tragándomela toda. La saqué y mordí el glande haciéndole suspirar y yo notaba que en ese momento,era mío,le tenía en mis manos y haría lo que yo le pidiese. Agarré la polla de nuevo sacándola de mi boca y golpeándola contra mis labios mientras le miraba fijamente, con cara de zorra. Seguidamente la cogí con fuerza y le hice una paja mientras lamía sus huevos y mordía cuidadosamente.
Solo escuchar sus suspiros y gemidos me transmitía tal excitación que no pude evitar meterme dos dedos en el coño,con la otra mano, y follarme lentamente. Estaba muy mojada y ardía en deseos de que me follara bruscamente, como me gusta que lo haga. No tenía problema en tragarme su polla entera,estaba tan excitada que entraba perfecta hasta mi garganta. Empecé a mastubarme lentamente a la vez que se la chupaba más poco a poco.
Gritó. -¡Puta,quiero follarte! Y apartó su polla rápidamente de mi boca antes de correrse. Me cogió del pelo y me levantó mientras se pajeaba. Me besó y mordió el labio,tras llamarme zorra me giró contra la pared y me hizo inclinar poniendo el culo en pompa. Me subí el vestido para que pudiera follarme bien. Primero me folló despacio, quería notar lo húmedo que estaba mi coño tras haberme masturbado.
A los pocos segundos me embistió contra la pared una y otra vez tan fuerte,haciéndome gemir con tanto placer, follándome duro. Me apollé en la pared con una mano, con la otra, me masturbaba mientras mi chico me la clavaba. Seguidamente se sacó la polla y se corrió en mi culo gimiendo como nunca le había oido gemir.