La zorra ahora, de mi hijo – 5º parte

Antes de amanecer estando medio dormida, sentí como me quitaba el tanga y me abría las piernas para luego meter su cabeza entre mis piernas y comenzar a comerme el coño, puse mis manos en su cabeza y comencé a sentir como su legua y boca hacía que me pusiera cachonda perdida, gimiendo poco a poco hasta que ya eran gritos de placer, así hasta retorcerme de gusto al correrme, solo que siguió hasta que me volví a correr más fuerte que la anterior.

Carlos- así te despertaría todos los días si durmiéramos juntos

Me puse de rodillas y luego a 4 patas

Yo- fóllame le culo, amor, venga quiero sentir tu polla dentro de Él

Tenía preparada vaselina en la mesita de noche y me puso en mi ano, extendiéndola bien. Luego se puso detrás y poso su polla a la entrada de mi culo, sentí como entraba, como se abría paso su enorme polla hasta que su huevos chocaron con mi culo, puso sus manos en mi cintura y empezó a sacarla y meterla, cada vez más fuerte

Carlos. Te gusta esto verdad

Yo- sí, me gusta todo lo que Tú me haces, soy tuya amor mío, úsame como quieras

Carlos- que buena puta eres y como se mueven  tus tetazas, seguro que papá no te folla como yo verdad

Yo- nada, el me deja a medias muchas veces y el culo ni me lo folla

Se movía cada vez más fuerte y eso me hacía ponerme más caliente aún

Carlos- menudo imbécil, desde ahora nadie te follara ni él, solo si yo te doy permiso, eres mía y tu cuerpo me pertenece y tu alma

Me dió varios azotes mientras yo jadeaba de gusto

Yo- si amor, solo tú, te pertenezco, sin tu permiso ni tu padre me tocará, lo juro.

En ese instante sentí que me inundaba el calor de la leche de mi hijo el culo, llenándome con ella de placer

Se quedó tumbado encima de mí.

Carlos- ha sido brutal, nunca antes había follado un culo.

Me dí la vuelta y le dije

Yo- tienes mi coño, culo, boca y todo mi cuerpo para lo que quieras, amor

Le besé y nos quedamos tumbados mirando al techo, quedándonos dormidos así.

Nos levantamos entre besos y magreos, desayunamos y no fuimos a la playa, pero a otra localidad donde no nos conociera nadie, allí mi hijo me hizo hacer toples, ¡¡a mi edad!! me dio mucha crema sobre todo en los pezones, me puso caliente y aprovechaba dentro del mar para tocarme el pecho y el coño, cada vez salía más caliente del agua y eso, de que hubiera gente cerca, me ponía aún más y a mi hijo ni lo cuento, menudo pollón le tocaba en el agua, salía con un bulto que más de una miraba. También veía, a través de las gafas de sol, como muchos hombres mi miraban el cuerpo.

Comimos allí mismo y por la tarde nos tumbamos en la cama donde follamos, nos besamos y nos quisimos hasta acabar dormidos.

Por la noche cenamos en el apartamento y ya tarde fuimos a tomar algo a un sitio en la playa que mi hijo conocía. Nos comportamos como madre e hijo y dimos la excusa de que mi marido estaba fuera. Allí me presento a algunos de los conocidos con los que estuve hablando y también vi como mi hijo hablaba con alguna chica y eso me dio celos, en verdad no lo podía creer pero verlo con ella me sentó mal. Después de un par de copas no volvíamos para casa, no fuimos caminando por la playa, lejos del paseo donde me pudo coger por la cintura y yo a Él y besarnos.

Carlos- como te miraban mis amigos, si llegas a estar sola te ligan

Yo- anda, anda con la de chicas jóvenes que había

Carlos- si pero ninguna como tú de buena, lo que te digo, si vas sola ahora estarías retozando en la playa con alguno

Yo- allí van, a la playa?

Carlos- si claro  donde si no, porqué? a ti nunca te follaron en una playa, no me lo creo, venga di la verdad

Yo- bueno sí que me lo hicieron si, un novio que tuve un tiempo

Me cogió de la mano y me llevo hacía unas rocas allí metió las manos por dentro de mi vestido, me lo subió y se bajó los pantalones, luego se apoyó en unas piedras y me cogió de mis culo alzándome y poniéndome su polla a la entrada de mi coño

Yo- por favor, nos puede ver alguien

Me metió su lengua en la boca y acto seguido me metió su polla de un golpe, al principio miraba alrededor por si había alguien pero según sentía su polla entrar y salir y decirme cosas, cerré los ojos y solo me preocupé de disfrutar

Carlos- lo ves puta, como se folla en la playa

Yo- si, si amor

Carlos- lo mismo nos ve alguno de los amigos del pub, ven como follo a mi madre, ellos querían follarte, lo sabes verdad zorra.

Solo sentir sus palabras y tratarme así y follándome en esas circunstancias era suficiente para que me corriera un par de vece antes de que el descargara su leche dentro de mí. Disfrutamos corriéndonos ambos como locos salvajes.

Luego me puso mi tanga metiéndolo por mi coño para que retuviera su leche dentro y nos fuimos para el apartamento besándonos como colegiales, por el camino tuve que limpiarme la leche que me baja por mis muslos en varias ocasiones.

Nada más entrar al apartamento me empujó de cara a la pared, me puso la mano en el cuerpo apretándomelo contra la pared se acercó a mi oído.

Carlos- te he visto hablando con mis amigos y me ha dado mucho morbo y también celos, de verte sonreír y de ver como te miraban con deseo, desnudándote con su mirada

Yo- eso son imaginaciones tuya, amor

Carlos- de imaginaciones nada, miraban tus tetazas, tus culo, tus piernas, te deseaban y eso me daba morbo y celos a la vez

Yo- pero amor mío, aunque así fuera mira

Le enseñé su anillo

Yo- llevo tu anillo puesto, soy tuya completamente amor mío, tuya para lo que quieras. Llevo tu leche en mi coño amor

Me dio la vuelta y mirándonos a los ojos

Carlos- besa a tu amo y señor

Le puse mis labios junto a los suyos y metí mi lengua en su boca

Carlos- bien zorra, dime quien es tu dueño

Yo- tu eres mi dueño y señor, amor mío

Me pellizcó los pezones mientras contestaba, solo el tratarme así como su puta y retorcerme los pezones me tenía caliente, más caliente.

Me quitó el vestido dejándolo tirado en el suelo, luego el sujetador, me estrujó mis tetas, bajó su cabeza y me los besó y besó y sobó y sobó y mordió y mordió

Carlos- de momento en nuestra última noche juntos, amor, quiero que disfrutes como una loca

Me besó y me llevó hacia la habitación, se sentó en la cama y tiró de mi tanga, tenía todo el tanga y el coño lleno de leche, pringoso, pegajoso

Yo- espera que me limpie, amor

Carlos- si buena idea nos ducharemos ahora mismo

Y así lo hicimos nos duchamos, me dio champú en la cabeza, gel en el cuerpo, se recreó lavándome por todo el cuerpo y luego Yo a Él. Salimos de la ducha y nos secamos

Carlos- pareces una diosa con el pelo mojado, sobre tus hombros.

Me cogió de la mano

Carlos- túmbate en la cama

Lo hice y puso su cabeza en mi coño lamiéndolo despacio

Carlos- que rico coño tienes

Yo- es para ti, mi vida.

Apenas llevaba unos minutos cuando arqueaba el cuerpo por el enorme placer y la corrida que tenía, siguió comiéndome el coño hasta que tuve varias corridas, cada vez más fuertes.

Yo- que bien, que bien y que fuerte han sido ah. Quiero comértela ahora

Carlos- luego ahora ponte de rodillas, a 4 patas

Me puse abriéndome bien de piernas y de un solo golpe me la metió por el coño, fuerte, salvaje, sintiendo su enorme polla dentro de mí. Tiro de mi pelo y me puso de rodillas, me giró la cabeza y me besó en la boca.

Carlos- ahora te follaré tu culo de zorra

Yo- si, si, si lo que quieras, soy tuya amor

Me empujó para que volviera a estar a 4 patas, sacó su polla de mi coño y la puso a la entrada de mi ano, la sentí entrar por mi culo abriéndose paso, ocupando todo el espacio, luego empezó a embestir fuerte haciéndome ve la estrellas del placer que me daba, hasta que no pudo más y me lleno por de leche caliente y espesa mi culo. Manteniendo su polla dentro de él hasta que se quedó flácida, saliéndose sola

Yo- amor límpiate pueden quedar restos.

Fue y se lavó su polla y volvió a la cama, se tumbó a mi lado pero yo quería comerle su polla y sin decir nada me puse de rodillas y se la cogí. La tenía limpia y fresca y según estaba bajé mi cabeza hasta su polla y empecé a comérsela, muy despacio al principio para que volviera a estar enorme y dura como un palo. No tardó mucho tiempo en que eso pasara. Le oía gemir de placer y eso me hinchaba de pasión y amor por darle placer, tanto como le se merecía, que era mucho. En un principio quería que acabara en mi boca pero luego pensé que lo mejor sería cabalgar encima de su polla y dejar que toda su leche me llenara, de nuevo mi coño.

Así lo hice, me puse encima y cabalgue como una loca, dejando que mis tetas se movieran más y más, sabía que eso le gustaba y a mí mucho más, me las sobaba y con su polla en mi coño, el movimiento de mi cuerpo cabalgando, sus masajes y pellizcos en mis pezones y verle tan guapo y espléndido de placer me hizo llegar  como una loca, cosa que ayudó a que mi hijo me llenara de leche, de nuevo. Quedando tumbada encima de Él.

Luego me fui a limpiar la leche y nos besamos como niños hasta quedar dormidos.

Aunque nos despertamos temprano y antes de levantarnos tuvimos más y más sexo loco y salvaje, pero mi marido llegaría como siempre sobre las 12, era la llegada del autobús y antes de eso tuvimos que dejar la casa algo recogida.

El resto de vacaciones fue parecido a lo de antes de dormir juntos, por la tarde follábamos como salvajes y luego mi marido llegaba.

Al volver a casa de vacaciones teníamos mucho cuidado porque además estaba mi hija pero buscábamos la forma de estar juntos. Algunas tardes salíamos con la excusa de ir de compras y lo pasábamos en un hotel, lo mismo que algunos sábados por la tarde que tomábamos algo y luego 2-3 horas a un hotel.

Un par de veces fui a recogerlo de una fiesta, con la excusa que no podía volver de la urbanización que estaba por no haber trasporte público. Me hizo pasar donde sus amigos para que me vieran y tomara algo. Yo iba como Él quería algo sexy sin pasarme y sus amigos me miraban con descaro, cosa que a Carlos le gustaba y, tengo que confesarlo, a mí también. Después me recordaba eso diciéndome lo puta que era. Algunos sábados me hacía salir con medias, botas, tangas mini, que me hacía quitar donde íbamos a tomar alguna copa, antes de ir al hotel. Eso me hacía sentir muy puta y zorra y como tal me portaba y porto con mi hijo.

Estamos deseando que llegue Semana Santa, ya lo tenemos todo planeado, Carlos y Yo nos iremos como el viernes antes con el fin de preparar la casa de la playa, bonita excusa. Mi marido y quizás mi hija vaya el jueves siguiente para pasar solo las fechas de las vacaciones. Tendremos 6 días con sus 6 noches para nosotros solos.

Carlos me ha dicho que uno de esos días, el domingo con casi toda seguridad, haremos una especie de ceremonia de boda entre los dos. Tengo que llevarme un vestido blanco y Él un traje, en el salón del apartamento haremos una ceremonia de boda entre los dos, sellaremos nuestro amor dándonos unos anillos y diciendo unos votos. Estoy emocionada, flotando, por fin podré decir que me entrego en cuerpo y alma a mi hijo, que seré suya y el mío. Solo por decírmelo y planearlo le quiero más si cabe. Desde ese momento seré lo mismo que ahora su puta, su amante, su zorra, su madre y, además, su mujer, solo una cosa cambiará que Él me pondrá un anillo en el dedo y Yo le pondré otro.

Ya contaré lo que ocurrió en esas fechas

Gracias y

Besos para todos

Nota de la autora: algunos de vosotros me pedías introducir elementos nuevos, situaciones determinadas, etc. Solo puedo decir que esto es verídico, cuento las cosas como sucedieron, quizás algunas frases no sean literales, pero llevan el espíritu de la situación. Siento que a todos no les guste lo que me pasó o quisieran que fuera de otra forma, pero es lo que es

Besos