La vida Secreta del tercer niño

Algo sobre el tercer niño que nadie sabia sera revelado.

Shinji estaba extrañado de Rei quisiera hablar algo con él. Releyó la nota escrita de su puño y letra:

"Te espero después de las pruebas. Tengo que hablar contigo. Ven solo. Te esperare en el pasillo 11, cerca de la jaula F-6. No muestres esta nota a nadie"

La nota había sido introducida en su maletín, sin él darse cuenta en el colegio. Cuando se encontraron solos ellos dos en el ascensor tuvieron solo un breve dialogo que solo aumento la curiosidad del tercer elegido.

-Shinji, ¿leíste mi nota?- Dijo Rei. El ascensor bajaba y ellos dos estaban solos.

-Sí…- Dijo el chico

-¿No se la enseñaste a nadie?-

-No, pero…-

  • ¡Entrégamela!- Shinji se la dio y Rei la rompió en mil pedazos. Los guardo en su bolso- Te lo explicare todo después. Te esperare donde acordamos.

Las pruebas eran las mismas de siempre. Asuka había acordado ir con sus amigas al centro comercial y Misato estaría en su oficina lidiando con el papeleo y la burocracia. Rei lo esperaba y ella se comportaba en forma… ¿extraña?... ¿normal? Normal era la palabra adecuada. Pero en Rei era lo extraño. Se veía intranquila, impaciente, insegura. Nada que ver con su carácter serio y estoico de siempre. Shinji estaba más intrigado, pero Rei no le dio tiempo de pensar o de decir nada. El muchacho escucho como la chica chasqueaba los dedos tres veces y luego decía:

-¡Volemos hasta la luna!-

Shinji se detuvo en seco. El iris de sus ojos se dilato.

  • Shinji, ¿No le enseñaste la nota a nadie, verdad?-

-No- Dijo el chico. Le explico con lujos de detalles la forma en que había encontrado la nota. Rei suspiro con las manos en el corazón. Sonrío feliz y aliviada con los ojos cerrados. Nunca debió de enviar la nota, solo necesitaban un momento a solas.

-Ikari-Kun, olvidaras la nota y todo lo que hagamos en el momento en que despiertes. Solo me obedecerás sin rechistar.- dijo ella en forma insegura, pero tratando de aparentar lo contrario.

-Si- Dijo el chico. Rei se tranquilizo, todo iba bien. Como lo había planeado. Se toco el pecho, su corazón estaba acelerado. "Esto es sentir miedo" se dijo. Nunca en su vida había deseado algo con todas sus fuerzas. Todas las precauciones les parecían pocas.

-Sígueme- Dijo ella por fin

Se encontraban en una habitación sobria, una cama y al fondo un baño con ducha. Rei apoyaba su espalda contra la pared y veía al muchacho que solo esperaba sus ordenes. La sangre en sus venas estaba caliente. Tenía frío en sus manos.

  • Desvístete- Dijo por fin.

El muchacho obedeció y su cuerpo de niño-hombre quedo a la vista. Puro Músculo y nervio, más bien era un chico delgado y para nada corpulento. Un joven efebo que para los ojos de Rei era un Adonis. Sonrío satisfecha.

-Acércate- Dijo. El joven lo hizo. Con timidez, con miedo a despertarlo o de romper el hechizo con que lo tenía dominado Rei toco la cara, labios y mejillas del joven Ikari. Toco su pecho, sus brazos en un suave roce con las yemas de sus dedos. Lo beso en los labios en forma fugaz. La joven seguía sin creerlo todavía. Pero ya tenía en mente su siguiente orden.

-¡Bésame, acaríciame!…-

El joven la beso en la boca, en el cuello y las orejas. Acariciarla era tocarla, rozarla con todo su cuerpo. Rei no se esperaba que fuera tan delicioso besar y ser besada. Tocar y ser tocada así. Sintió calor entre sus piernas y un líquido espeso humedecer su braga y mojar su entrepierna. La piel debajo de su ropa protestaba al sentir las manos y la piel del tercer elegido. Rei se apoyo de la pared para no caerse y se abrió de piernas. Respiraba entrecortadamente. Shinji se detuvo por que sintió que eso quería Rei. Las manos del muchacho estaban en sus muslos, arriba de su falda. Rei sintió un alivio momentáneo.

-¡Súbeme la falda!- exclamo.

Shinji se arrodillo ante ella como quien se arrodilla ante un altar. Le subió la falda en forma lenta, el roce de la tela era una tortura para Rei. La joven casi se desvaneció al sentir las manos del muchacho en sus muslos desnudos. Se abrió un poco más y sintió al muchacho oler sus bragas, el liquido escurrirse entre sus piernas.

-¡Límpiame!- Ordeno.

Rei se sentía relajada, laxa, en paz con el mundo. Shinji lamía sus muslos. El muchacho lamía la tela de su prenda intima. Sus bragas blancas de colegiala. Dio un respingo cuando Shinji introdujo sus dedos para mover la tela y cumplir a conciencia la orden. Su vulva estaba hinchada y sus labios vaginales se resaltaban en la tela. En cada manipulación de la tela, en cada roce de dedos, en cada lamida, Rei deliraba.

-¡Quítamela y sigue!- Dijo ella en un susurro.

El muchacho le quito la prenda intima y siguió lamiendo, tuvo que chupar después. Era algo de nunca acabar. Shinji sin embargo no se rendía. Los Muslos, las entrepiernas y el bajo vientre eran limpiados a conciencia con la lengua, a pesar de que Rei se retorciera como lo hacía. El muchacho estaba ahora enfocado en el sexo de la chica. Rei acariciaba y mesaba los negros cabellos de él. Ella cerró los ojos y dio otra orden.

-¡Traga!-

Rei exploto en un orgasmo liberador. Shinji trago sus jugos sin derramar una gota. Rei no lo soporto y lentamente se fue sentando, deslizando su espalda por la pared. Respiraba con dificultad y su ropa estaba ensopada de sudor. Sentía su cuerpo de la cintura para abajo lleno de saliva. Sonreía. El muchacho la veía esperando nuevas órdenes.

  • Desvísteme-

El muchacho le quito la ropa pieza por pieza y Rei le ordenaba besos o caricias a cada parte descubierta. Cuando Rei quedo desnuda le ordeno que se pusiera con la espalda contra la pared y no se moviera. Rei empezó a sobar el miembro del muchacho. Este no reaccionaba para nada. ¡Entonces era cierto que en ese estado el tercer elegido podía controlar la erección y la eyaculación a voluntad! Rei se sintió algo contrariada. Ordenárselo le quitaba la magia. Empezó a razonar que clase de orden sería la más adecuada.

  • Shinji, solo deja que te dé placer…- Dijo al fin.

Ya el muchacho no era indiferente a sus manoseos. El miembro semi-erecto era calido en sus manos, en sus pechos. Shinji le había proporcionado un placer indescriptible, pero ella sentía otro raro placer en darle placer. En sentir al muchacho crisparse, retorcerse. La joven usaba ahora su boca. La joven jugueteo con el glande ensalivado entre sus pechos.

  • No te contengas, suéltalo todo en mi boca

El miembro soltó un potente chorro de semen que lleno la boca de la joven y la baño de pies a cabeza. La joven se acostó en la cama.

  • ¡hazme el amor!

  • ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!...¡Despacio!, ¡suave!... así, así, ¡asiiiiii!... ¡ah!, ¡que bien!... que bien!...¡que bieeeen!, ¡sigue!, ¡sigue!, ¡sigue!.... ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡sigue!, ¡sigue!, ¡sigue!, ¡sigue!, ¡lento y duro!, ¡lento y duro!, ¡lento y duro!.... ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH! ¡Que bien!, ¡que bien!, ¡que bieeeen!,… ¡Duro, rápido!.... ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡Siiiiiiiiiiiii!, ¡así!, ¡así!, ¡asiiiiii!.....

  • ¡Más!, ¡más!, ¡más!, ¡más!, ¡más!.... ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡Siiiiiiiiiiiii!... ¡OOOOOOOOH!, ¡más!, ¡más!, ¡más!, ¡más!.... ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡Siiiiiiiiiiiii!... ¡más!, ¡más!, ¡más!, ¡más!.... ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡Siiiiiiiiiiiii!... ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!,

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  • ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH! ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH! ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH! ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH! ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH! ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH! ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH!

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¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH! ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH!...¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡mmm!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah!, ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH! ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH! ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡AAAAAAAAAAAAH!... ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH! ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡Oh!, ¡OOOOOOOOH!

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Rei estaba extenuada, estaba acostada de espaldas con la cabeza apoyada en el regazo del tercer elegido. Shinji le sonreía sin ella ordenárselo. Le metía unas uvas, una por una, en la boca a la muchacha. La joven se masajeaba los muslos, abria y cerraba sus piernas, su sexo y su ano estaban llenos a rebosar del semen del muchacho. ¡Ufff!..., ¡le habían dado la mejor cogida de su vida!... ¡ya sabía por fin lo que era un orgasmo!... ¡Diooooooooos! ¡Para que le quedara claro el concepto tuvo varios y de todos los tipos!... pensó en el Comandante Ikari… se contuvo para no reír… ¡Sencillamente no había punto de comparación!... ¡el pobre viejo no podía ni con su alma!... lánguidamente Rei abrió la boca y Shinji le puso otra uva… ¡Solo era quedarse quieta y esperar a que el viejo terminara para irse a dormir!, el comandante era como la regla, una molestia pasajera de una vez al mes, que duraba menos que un bostezo… ¡No sería problema!... se sorprendió por tener semejante pensamiento irrespetuoso hacia el Comandante Ikari, su amo y señor. El centro y Dios de su universo… pero se le paso con otra uva.

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Shinji y Misato iban a pasar el fin de semana en un balneario. Asuka no quiso acompañarlos por que prefería quedarse ese fin de semana con su amiga Hikari. Ella se encargaría de Pen-Pen. El balneario se encontraba cerca, de ocurrir algún percance podrían ser movilizados en el acto. Shinji y Misato parecían sobrino y tía. A Shinji le gusto estar con su tutora y se divertía en forma inocente. ¡Era relajante el anonimato, no pensar en EVA o NERV o en los Ángeles!

El primer día pasó volando. Shinji subió al apartamento. Era lujoso, con todas las comodidades, era hasta más grande que el apartamento en que vivían

  • Shinji, no te preocupes. Es bueno consentirnos de vez en cuando… no nos cuesta nada, al gerente solo le preocupa que esta zona se convierta en campo de batalla entre los EVAS y los Ángeles… es un pequeño soborno inofensivo, un gesto de buena voluntad que no nos compromete a nada… Por supuesto que a los Ángeles solo parece interesarles los cuarteles generales, ¡pero eso es información secreta!...

Shinji sonrío. "¡El pobre es taaaaan ingenuo!" se dijo Misato. Era bueno verle alegre y no deprimido como siempre. Verlo jugar en la playa, como un joven normal que era, le dio algo de remordimiento.

  • Misato, ¿Cuál es mi cuarto?- Dijo el chico.

Misato chasqueo los dedos tres veces y dijo: "¡Volemos hasta la luna!". El muchacho se paralizo. El iris de sus ojos se dilato y su mirada se perdió en la lejanía.

  • Shinji, tu cuarto es este y te iras a dormir a él cuando te lo diga. En la mañana olvidaras todo lo que hicimos… ¡Vamos a mi cuarto!

Misato lo llevo a su recamara y se puso a pensar cual sería la siguiente orden. No le apetecía estar con un maniquí. Finalmente tomo sus manos entre las suyas y lo beso en la boca.

  • Shinji, es un beso de adultos y lo que vamos a hacer es algo de adultos… solo sígueme la corriente…quiero enseñarte a recibir placer y a darme placer

Misato volvió a besarlo y Shinji le correspondió. Se desnudaron mutuamente. Misato sintió morbo al ver al chico desnudo que apenas le llegaba al hombro. Ella siempre tuvo esa pasión malsana hacia él desde el momento en que lo conoció. No era una pasión malsana en realidad, simplemente no podía amarlo y verlo como un hijo. Le tomo de la mano y fueron a la gran cama.

Misato estaba sobre él comiéndolo a besos. Degustándolo y saboreándolo con caricias. Comenzó a ensalivar y mamar la verga del muchacho como una posesa. La mujer estaba encima de él, sujetando el sexo del joven con una mano y abriendo el suyo con la otra. Misato subía y bajaba de la verga del muchacho con sus propias piernas. Shinji la sujetaba por las caderas o le masajeaba los senos con sus manos. Misato sintió llegar el clímax, arqueo la espalda y se echo hacia atrás. Sus pezones puntiagudos apuntaron el techo. Luego se desplomo exhausta.

Shinji quería demostrar a su maestra que había aprendido la lección. Estaba sobre ella apuñalando su sexo sin piedad. Misato no quería gritar y ahogaba sus aullidos y rugidos de placer como podía. El chico era un buen alumno, creativo y con iniciativa. Ella estaba en cuatro patas y el atrás bombeando su ano. Estremeciéndose en cada brutal embestida. Tuvo otro orgasmo. El chico parecía que podía continuar toda la noche, continuar indefinidamente

Misato lo beso tiernamente en los labios.

  • ¡Es suficiente, Shinji!... tenemos todo un fin de semana… vamos a bañarnos e irnos a dormir

Se bañaron entre besos y arrumacos, Misato tuvo que recordarle al muchacho que seguirían mañana en la noche. El muchacho dormía por fin placidamente, Misato tuvo remordimientos de nuevo.

Shinji se despertó rejuvenecido y revitalizado. No entendía porque. Era como el otro día. El no recordaba nada de lo que había hecho en la tarde de ese día, solo recordaba lo bien que se sentía y lo sorprendido que estaba por como corría el tiempo.

Misato se levanto también de buen humor. Era casi medio día, cosa que choco al muchacho por que se acostaron temprano. Misato no le dio importancia. Tomaba su cerveza con alegría y miraba de reojo al muchacho en forma hambrienta. Shinji le sonreía inocentemente con su carita de niño bueno. "¡Unas cuantas clases más y serás digno rival de Kaji!" se dijo ella entre dientes.

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-Shinji, ¡eres un idiota!…- Dijo Asuka

-Sí, lo sé- Dijo el muchacho bajando la mirada. No era su culpa haber olvidado el obsequio de ella en el Balneario. Pero era mejor decir si y disculparse para salir del paso. Pero a Asuka pareció enfurecerla más. Misato la había engañado haciéndole creer que iban a estudiar con un profesor en el dichoso Balneario. En realidad ella quería que ellos creyeran que iban a un Balneario cuando en realidad los esperaba un aburrido profesor… por supuesto que esa mentira tan burda solo se la podía creer un idiota como Shinji y ella, con un titulo universitario, no iba a pasar su fin de semana estudiando las mentiras sobre el Segundo Impacto. Pero resulto que la mentira era verdad. Asuka se devanaba los sesos tratando de entender como Misato la había enredado. Lo que le quedaba claro era que solo se quiso llevar a Shinji y a ella no.

-Apresúrate Kinder, llegaremos tarde… estamos en la hora pico y el maldito tren debe estar lleno de gente.

Shinji se disculpo una y otra vez. El desayuno era un asco. El desayuno lo hizo tarde. Todo era su culpa. Era la rutina de todos los días. Asuka se exasperaba cada vez que el tercer elegido se disculpaba y decía si a todo. En ese día en especial sintió que no lo soportaría más. Se paro en seco, un temeroso y pusilánime Shinji se detuvo también. El muchacho evadió la furiosa mirada de la alemana. Asuka chasqueo los dedos tres veces y dijo: ¡Volemos hasta la luna!

Shinji se quedo de piedra. Sus iris se dilataron. Se enderezo y apretó la boca. Miraba a su compañera a la cara, con los ojos perdidos en la lejanía.

  • Shinji, no volverás a disculparte. No volverás a contenerte, ni amedrentarte. Quiero que aunque solo sea una vez en tu vida seas audaz, valiente, intrépido. Dime No y desafíame. ¡Que no te importe nada, ni nadie!... sé impredecible… loco… irracional… no te doblegues… ¡Haz lo que quieras sin importar nada!...- Asuka se callo mientras miraba con repulsión y asco a su compañero. Shinji seguía inmóvil. Asuka dio un suspiro. ¡Ni con eso cambiaria!... las ordenes debían ser simples, claras. El muchacho debía estar relajado, con la guardia baja…Asuka le dio la espalda y bajo la mirada desanimada.

  • Asuka… se nos hace tarde… es hora de irnos- escucho detrás de ella. La joven ni se molesto en responderle.

El tren estaba atestado de gente. Ellos apretados como sardinas. ¡Era una pesadilla! Shinji estaba detrás de Asuka, demasiado cerca para el gusto de la Alemana. Ella estaba de frente con los senos aplastados contra la pared del vagón. Asuka se preguntaba cuando terminaría la tortura.

  • Shinji… ¡me estas aplastando!

-No puedo evitarlo… ¡Hay mucha gente!- le dijo en un susurro que le calentó la oreja. El Muchacho puso sus manos contra la pared del vagón y aparto a otros dos estudiantes que estaban al lado de Asuka. La joven tuvo un poco de más espacio, pero Shinji se le pego más por detrás- ¿Estas más cómoda así?- dijo en otro susurro. Ella estaba ciertamente más cómoda, pero aprisionada con el cuerpo del muchacho. La cabeza al lado de su cabeza, los brazos a los lados, su espalda a pocos milímetros de su pecho, su culo restregándose en el paquete del muchacho.

  • ¡No lo estoy!- dijo molesta. Shinji la aplasto. Ella sintió el paquete del muchacho en toda la raja de su culo. Estaban mejilla a mejilla con él.

  • No hagas una escena, ni des un escándalo. ¡No es mi culpa!… apenas me puedo mover…-

-¡Todos ustedes son iguales! ¡Sucios!, ¡cochinos pervertidos!... ¡solo espera a que nos bajemos!- Dijo ella apretando los dientes.

La hora pico era una pesadilla. Asuka sentía al muchacho estrujarla y luchando por el espacio. Sentía ese paquete en su raja, en sus nalgas en cada forcejeo del joven contra la masa. Su pelvis chocar con la pared del vagón, junto a sus senos. Ella luchaba por liberarse de su abrazo protector, pero el muchacho no la dejaba. Ella sentía los brazos a sus costados moviéndose y acomodándose. La respiración en su nuca, en sus oídos. Ella sintió una mano en todo su seno. Esta vez era a todas luces adrede. La otra mano en su falda. Asuka sintió un escalofrío al oír la voz del muchacho en un susurro retador.

-¿Qué?... ¿nada de gritos, ni protestas, no armaras un berrinche, ni darás una pataleta?... -

Asuka miro a los lados. Sin ella darse cuenta estaba arrinconada. Las personas que estaban a su alrededor no podían verla tapada como estaba por el cuerpo de Shinji. No le dio tiempo de responder o hablar. La mano apretó el seno y Shinji empujo descaradamente su paquete entre las nalgas de la chica. Ella sintió su pelvis aplastar la palma de la mano. A su sexo solo lo separaban de esa mano las capas de tela de su ropa.

  • ¿Te gusta, verdad?... ¡por eso no gritas!

  • Cuando lleguemos… ¡sucio bastardo!... ¡vas a ver!

  • No has entendido nada… no llegaremos… ¡solo disfruta!... te diré cuando bajemos.

Shinji siguió restregándose. Asuka se estremecía cuando alguien se les acercaba. El chico se detenía y eso era peor. ¡Presionaba su pelvis y el desgraciado movía los dedos! El tipo en cuestión solo estaba preocupado de sus asuntos y de no ser aplastado. Cuando el muchacho sentía que no los veían, que no los sentían o les daban la espalda seguía incordiando a Asuka en forma implacable. Lo hacía según la circunstancia.

Asuka estaba entre asustada y excitada. Se maldijo por no haber pensado bien la orden. El lado desatado de Shinji tenía la pinta de ser un Hannibal Lecter. Estaba excitada hasta más no poder, con la cabeza hecha un revoltijo. ¡El desgraciado la tocaba como un instrumento musical! Se odiaba por cooperar, por moverse y restregarse al ritmo que quisiera su captor. Por no gritar y por no querer escapar. Su cuerpo se negaba a obedecerla, la traicionaba.

Sus pezones estaban abultados y sus senos duros. Jadeaba imperceptiblemente. El muchacho realizaba movimientos circulares con la cadera y restregaba más la pelvis de la muchacha hacia su mano. Deslizó su otra mano entre su ropa hasta llegar a la piel desnuda entre sus senos. Desde allí sus dedos se deslizaron nuevamente por debajo de su sujetador. La yema del dedo medio llego al pezón. Rozo la aureola. Asuka dio un respingo, ahogo un grito involuntario.

  • ¡Shhhhhhh!.... ¡buena niña!... – Dijo el chico en un susurro, con el mayor de los descaros. Cuidadosamente el muchacho le fue subiendo la falda. Su otra mano ya estaba entre sus piernas. Asuka o mejor dicho su cuerpo lo ayudaba en su tarea. Ella respiraba entrecortadamente. Se debatía entre gritar y salir corriendo o… Shinji la beso en la nuca. Ella se aparto el cabello y el muchacho le dio un suave mordisco en su cuello. Ella se estremeció nuevamente.

A medida que disminuía la gente, Shinji le daba más espacio. Había poca gente ya y ellos dos estaban sentados agarrados de la mano. Asuka estaba seria, mirando el piso. Presa del pánico y el terror. Shinji le apretaba la mano en señal de dominio. Pronto se quedaron solos en el vagón. Shinji la atrajo y le abrió el vestido, le bajo el sostén sin ella oponer resistencia. Era el final de la hora pico y estaban en la zona que mas atacaban los Ángeles. No verían a nadie en horas.

  • ¡No te imaginas todo el tiempo que tenía soñando con estas tetas Asuka!…- fue el cruel comentario del chico. El muchacho comenzó a sorberlas y mamarlas. Lamerlas con fuerza, chuparlas en forma demoníaca. Asuka simplemente no podía oponer resistencia. Sentía miedo y gusto a la vez, era algo que sencillamente nunca le había pasado. El chico le bajo las pantaletas y se las dejo en una pierna. Devoro el sexo de la alemana. Asuka se sorprendió al sentir una brutal fuerza hasta ahora dormida dentro del muchacho. Los músculos en tensión de él eran fuertes, ella los sentía de acero.

Asuka fue penetrada y sodomizada por el muchacho sin ella emitir ni un solo sonido. Las ropas estaban desparramadas por todos lados y el chico seguía sobre ella sin parar y ella sin negarse. El muchacho por fin se dio por satisfecho y le dijo que se vistiera. Se bajaron en la siguiente estación. El vagón apestaba a sexo. Shinji sonrío perversamente.

Asuka caminaba con dificultad, ¡estaba metida en un buen lío! Shinji se detuvo de repente. Sus iris nuevamente estaban dilatadas. Era hora de despertar, pero no podía hacerlo sin la orden de quien lo puso en trance. Asuka suspiro aliviada.

  • Sígueme- dijo, obedientemente el muchacho lo hizo.

Los de la sección 2 estaban buscando a ambos pilotos por toda la ciudad. Ellos llegaron por sus propios medios. Asuka dijo que los dos se escaparon por que estaban aburridos y era un fastidio ir al colegio en un día como ese. Misato los regaño a ambos con dureza, pero de allí no paso.

Ya en casa y castigados por una semana Asuka le guiño un ojo a su camarada:

  • ¡Nos divertimos mucho! ¿Eh?- dijo la alemana. Shinji confuso asintió.

La alemana se acostó pensando en su extraña aventura. "Solo tengo que pensar mejor la orden la próxima vez… un punto medio… aunque tengo que admitir que Shinji de psicópata asesino… ¡¡¡Estuvo geniaaaal!!!" se dijo a si misma. "¡Hace el amor mejor que Touji y aguanta más que Kensuke!" fue su pensamiento final antes de dormirse.

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Shinji estaba en el despacho de su padre con la mirada vacía, fija en la lejanía. El comandante Ikari y Kouzo Fuyutsuki estaban presentes. Era la primera vez que el comandante miraba con atención a su hijo.

La doctora Akagi había hecho un informe detallado. Durante un chequeo rutinario se encontró en el pulso de ego del Piloto un punto de resonancia. Tres golpes de sonido y una frase.

FLASHBACK

LABORATORIO DE INVESTIGACIÓN Y DESARROLLO DE NERV

Shinji, Asuka y Rei miraban sus graficas de pulso de ego. Misato estaba presente. Maya y Ritsuko explicaban. Los pulsos de ego eran algo así como el ADN de la mente, sus huellas digitales. No era algo estático, era dinámico y cambiante.

Shinji era el que tenía el pulso de ego más nítido y claro. Una línea roja con puntos negros era Misato. Gruesa negra, Asuka. Amarilla, delgada y fina era Rei. Las demás líneas no habían sido aún identificadas. El grafico era súper complicado y parecía que solo Maya y la Doctora Akagi lo podían entender.

  • Shinji, "¡Volemos hasta la luna!"... ¿Qué significa para ti?- Pregunto la doctora Akagi.

-Nada, Doctora – Dijo el chico. La frase no le sonaba a nada. Estaba sentado en un banco, con su uniforme y con el cintillo neural puesto. Maya Ibuki estaba detrás de él leyendo las lecturas en su Laptop. Ritsuko palmeo tres veces y repitió la frase. Nada. Golpeo la mesa tres veces con sus nudillos y repitió la frase. Nada. Chasqueo los dedos tres veces

  • ¡Doctora!... ¡punto de resonancia activado!...- grito emocionada Maya. Ritsuko repitió la frase. ¡Nada!.

  • Doctora, el punto de resonancia se abre solo por cinco segundos, inténtelo de nuevo, pero diga la frase en el momento de terminar de chasquear los dedos.

Ritsuko lo hizo y Shinji entro en trance hipnótico. Las cinco chicas se quedaron perplejas. Rei extendió la mano y toco al muchacho en la frente. En el acto la retiro como si hubiera tocado algo caliente o recibido una descarga eléctrica. Sentía un hormigueo en su mano que subía por su brazo. Era un hormigueo… ¿agradable?... ella no podía describirlo. Lentamente el hormigueo se extendía por todo su cuerpo. Las demás lo tocaron también, pero no sintieron nada.

El profesor Fuyutsuki entraba en el laboratorio y vio una escena que lo dejo pasmado. Rei se masturbaba en un rincón. Maya abrazaba por detrás al tercer elegido, lo besaba en la boca. Ritsuko y Misato le levantaban la camisa al muchacho y chupaban de sus tetillas, una para cada una. Asuka le estaba bajando los pantalones.

  • ¡¿Qué significa todo esto?! – Trono. Las mujeres sintieron que despertaban de un sueño. Shinji seguía en trance.

Fuyutsuki les explico que la frase era algo que la difunta Yui Ikari le decía a su hijo cuando jugaba con él. Lo lanzaba por los aires y lo atajaba. Shinji se reía. La frase en cuestión quedo grabada en su subconsciente en forma clara y nítida, para el muchacho era su mayor momento de felicidad. Su madre lo amaba y no iba a dejar que se lastimara.

Cuando el muchacho entraba en trance su nivel de sincronización alcanzaba el 100%, pero en su estado puro la sincronización era diferente para el hombre y la mujer. En la mujer era usado en forma inconsciente para la gestación y el embarazo. Los hombres lo usaban para el apareamiento y la reproducción. En teoría el muchacho era irresistible en ese estado. En teoría controlaba erección y eyaculación a voluntad. Era el semental definitivo. El amante perfecto… ¡en teoría!

FIN DE FLASHBACK

Gendou Ikari había leído el informe. No le interesaba en realidad los métodos usados por su amante, la doctora Akagi y la asistente de esta para recabar la información. Impasible y sombrío, solo pensaba en como podría beneficiarse o como sacarle provecho. Desafortunadamente no servia en ese estado como piloto.

  • En ese estado se le puede inducir el Berserk, pero no lo utiliza contra los Ángeles

  • ¡Explíquese!- Ordeno el comandante. Fuyutsuki sonrió en forma enigmática. El antiguo profesor chasqueo los dedos tres veces y dijo: ¡Padre!

Shinji le dio al comandante Ikari un izquierdazo a la mandíbula. El comandante se mordió la lengua por la sorpresa y casi quedo noqueado. El muchacho era una tormenta de puños asesinos, patadas certeras y golpes demodelores. Tenía al comandante contra el suelo, aplicándole una llave. El comandante tenía lágrimas en los ojos y bramaba de dolor.

  • Shinji, ¡basta!... regresa a tu vestidor. Cuando despiertes olvidaras todo. ¡Retírate ahora!- dijo el viejo profesor.

  • Fuyutsuki, ¡se arrepentirá por esto!… ¡juro que me lo pagara muy caro!… ¡con sangre, lagrimas y dolor!… ¡DE MI NADIE SE BURLA!...- Rugió el Comandante una vez que quedaron solos.

Fuyutsuki chasqueo los dedos tres veces y dijo: ¡Yui Ikari! El comandante enmudeció y su mirada se hizo vacía, perdida.

  • Por cierto, el punto de resonancia es por la forma del cráneo del muchacho… es algo genético, hereditario, que pasaba de generación en generación… ¡no por el lado de su madre!… parece que nadie más en el mundo lo tiene… por lo visto ese pobre muchacho solo recibe lo peor de usted…- Dijo el antiguo profesor a su antiguo alumno. Gendou Ikari ni se movió, no reacciono. Necesitaba órdenes, no confusas explicaciones. Fuyutsuki se bajo los pantalones con toda la calma del mundo.

  • ¡Desnúdate!- ordeno el viejo.

EPILOGO

El comandante Ikari sentía dolor en todo su cuerpo. Todo lo que recordaba era que se había dado una fea caída en la calle. Le dolió al sentarse en su silla en una forma endemoniada. Tenía una amargura en la boca que no se le quitaba con nada. Ambas cosas le recordaron sobre el aumento de sueldo de Fuyutsuki.

Fuyutsuki estaba con la doctora Ritsuko. La doctora había eliminado la resonancia en el cráneo del muchacho. Fuyutsuki estaba satisfecho, el tercer elegido podía ser secuestrado o manipulado en forma peligrosa por gente sin escrúpulos... Lo mejor era prevenir. Nadie, solo ellos seis, se entero jamás de la extraña anomalía.

Shinji escucho tres chasquidos de dedos y el conocido ¡Volemos hasta la luna! Miro extrañado a quien se lo hacía y esta persona se dio cuenta de que ya no funcionaba.


Rei estaba desnuda encima del muchacho desnudo, subiendo y bajando por su verga. Llego al clímax y se desplomo sobre él. Lo beso en la boca y se acurruco en su pecho.

  • No se lo digamos a nadie… ¿si?- dijo ella en un susurro, cerca de su oído.

Misato estaba desnuda duchándose con su desnudo pupilo. Se habían escapado a un hotel discreto por solo unas horas. Era hora de regresar para que nadie sospechara.

  • ¡Será nuestro secreto!... ¿si?- le dijo ella con un guiño.

Asuka estaba desnuda, con solo una cuerda amarrándole las manos por las muñecas, con las manos detrás de la espalda y una venda negra en los ojos. Mientras no le dejara marcas, el japonés podía hacerle lo que quisiera

  • ¡Ni una palabra de esto a nadie!- Dijo Asuka en forma de amenaza. Shinji por toda respuesta se le echo encima sin previo aviso y comenzó a violarla.- ¡Pervertido!... ¡sucio cerdo!... ¡maldito bastardo!- grito ella ebria de felicidad

Shinji pensó que lo mejor era no tratar de entender o buscar una explicación. ¡A las mujeres solo el Diablo las entiende! Pensó en Hikari, la delegada de la clase. ¡Ella sola valía por las tres juntas!... era insaciable, viciosa y zorra a más no poder. Le tenía el ojo puesto a Touji para novio y por eso se la daba de santa e inmaculada. Shinji era solo para pasar el rato de vez en cuando. Lo de ellos era solo sexo. A Shinji le hubiera gustado chasquear los dedos y tenerla a su merced. De momento solo esperaría que ella lo volviera a llamar. El muchacho chasqueo los dedos tres veces y dijo: ¡volemos hasta la luna! pensando en Hikari, la zorra, más zorra de las zorras y la puta más puta de las putas. La chica que le quito su virginidad a él… y a medio colegio.