La vida imperfecta de Aarón.
Este es el primer capítulo de una serie que tengo pensada escribir según la aceptación, por lo que no sean tímidos en comentar su opinión, es básicamente la vida de un adulto joven que se ve atrapado dentro de un triángulo amoroso que termina dando varios giros inesperados.
El relato que a continuación van a leer sucedió al rededor de unos 6 años, yo tenía 19 años. Mi nombre es Aarón, mido 1.85cms mi cuerpo es delgado y velludo con alguna definición en mis brazos pectorales, glúteos y piernas ya que dedicó bastante tiempo a la semana al gimnasio, mi tez es morena clara con algunas pecas en la cara y unos ojos grandes y verdes que a la mayoría gustan.
Mi mejor amigo de bastante tiempo (Itzan) estaba pasando por una mala racha, el tipo con el que salía lo hacía sufrir mucho por mentiras y demás. El estaba cayendo en una desesperación y depresión, por lo que intentaba pasar más tiempo con el para apoyarlo y distraerlo, pero mi novio (Frank)me exigía bastante atención y a decir verdad me intentaba separar de mi amigo por cuestión de celos, el era un poco menor que yo por lo que tenía una hora de llegada estricta, por lo que ideé un plan.
- Frank - gracias por traerme amor, te vas directo a tu casa y en cuanto llegues me avisas. Te amo chao
- Aarón- te amo también, bye!
Texto de Itzan: Aún estás con frank? Necesito hablar contigo.
- Apenas lo dejé, voy a tu casa para que me digas que sucede.
Llegue a casa de Itzan y envié un texto a Frank avisando que había llegado a mi casa y estaba por dormir; solamente no quería una escena más de celos como las que tres veces por semana causaban una pelea.
A estas alturas de mi amistad con Itzan yo ya tenia llave de su apartamento, más que nada por miedo a que fuera a tomar una mala decisión y yo no tuviera cómo ayudarle. A pesar de que ambos sabíamos que el otro era gay, nunca intentamos nada, éramos solamente amigos y nos queríamos y apoyábamos como hermanos. Itzan era un chaval un poco mayor que yo, tendría sus 22 en ese momento, a pesar de esto siempre se vio mucho menor de su edad pues tiene cara de Niño inocente, mide 1.67 y tiene una complexión muy delgada aun que un poco definida con una piel pálida ojos café claro y un cabello dorado medio despeinado.
Cuando aparque y envíe el mensaje de buenas noches a mi novio entre al apartamento de Itzan para encontrarle sentado en la cama llorando.
- Enano. (Era cómo le decía de cariño a veces) todo bien, qué pasa?
Itzan no podía ni hablar de lo desconsolado que estaba por lo que solo me senté a su lado y lo rodeé con mi brazo por sus hombros. El respondió lanzándose sobre mi pecho y abrazándome fuertemente solo para dejar salir un llanto más desconsolado, me acosté y lo acosté sobre mi pecho para poder abrazarlo de una manera más cómoda y poderlo consolar. Al cabo de unos minutos pudo controlarse un poco y duramos un par de horas hablando de que nueva decepción le había traído su “idiota” con el que intentaba tener una relación.
- Itzan, tengo que irme es casi media noche.
- No Aarón por favor no te vayas.
Itzan siempre me pedía que no me fuera y si no lo hacía se ponía visiblemente triste en cuanto anunciaba mi partida.
- de verdad te lo ruego Aarón no me dejes solo hoy, por favor.
Aun que por lo general solo era una escena de Niño mimado está ves lo sentí muy real y no quise arriesgarme a dejarle solo para después arrepentirme.
- está bien, pero solo hoy y no puedes decir nada que si no Frank nos corta los huevos a ambos.
- No es nada malo que te quedes Aarón, solo necesito la compañía, pero si te ahorra problemas no dire nada.
- Gracias, y si la verdad ahorraría mucho drama innecesario. Ordenare algo para cenar quieres que te pida algo, enano?
Llego nuestra cena vimos alguna serie boba para mejorar el humor de mi mejor amigo y a la hora de dormir me dispuse a acostarme en el sofá del living, aun que solo fuéramos amigos quería “respetar” a mi pareja. Nos dimos las buenas noches y cada quien se acosto en su lugar.
- Aarón... Aarón? Aarón... -decía Itzan susurrando.
- Qué pasó, enano? - dije asustado levantándome casi de golpe.
- No no no, perdón no quería asustarte ni despertarte así... - dijo poniendo sus manos en mis pectorales sin dejar que pudiera sentarme. - solo quería saber si puedes dormir conmigo... -Itzan hizo una pausa como de vergüenza- es que estoy teniendo muchas pesadillas y no puedo dormir.
- Ahh... claro, enano. - dije todavía medio adormilado.- vamos.
Me levante del sofá y lo seguí hasta su habitación, cuando iba a acostarme me percaté que solo llevaba un pequeño y ajustado bóxer blanco, lo cual solo pase inadvertido, ya que igual yo solo llevaba una trusa negra.
- Aarón?
- Dime, enano. Qué pasa?
- Te puedo pedir algo? -continuo hablando pero con un tono de vergüenza - no tienes que hacerlo si no quieres.
- Dime, enano. Lo que sea.
- Puedes abrazarme?
Me puse boca arriba estire mi brazo dándole entrada para que se acostara en mi pecho, subió una pierna sobre las mías me dio un beso en el pectoral derecho y me dio las gracias para así quedarnos dormidos.
Al cabo de una hora y media desperté pues tenía calor y sentía una ligera incomodidad. Cuando recupere el conocimiento me di cuenta que Itzan estaba completamente sobre mi, tenía una erección completamente empapada en mi pierna izquierda justo donde mi trusa terminaba, por lo que también mi pierna estaba cubierta del precum que el miembro de mi mejor amigo emanaba en cantidades exageradas. Lo que me empalmó por completo a mi también, presionado mi erección justo debajo de su ombligo; no quise molestarlo y tampoco interrumpir esa escena tan tierna por lo que no lo desperté y solo coloqué mis manos sobre su espalda para así volver a quedarme dormido.
Desperté de nuevo ya con algunos rayos de sol en mi cara y la sensación de los dedos de Itzan jugando con los vellos de mi pecho, acariciando mi pectoral y vientre lentamente.
- Buenos días enano - dije tallándome los ojos y estirando mi brazo izquierdo mientras con el otro sujetaba a Itzan fuerte hacia mi.
- Perdona si te desperté, solo estaba pensando y no me di cuenta de lo que mi mano hacía...
- No no, no te preocupes no me molesta para nada. Puedes continuar si quieres. - giré mi cara hacia Itzan y estaba viéndome directo a los ojos, por un segundo pensé en besarlo pero el pensamiento se desvaneció en cuanto volví a sentir su erección aun húmeda presionada en mi pierna.
Me levante y me dirigí hacia el baño para darme un baño pues tenía algunas clases en la uni, no me importó cubrirme la erección enorme que me cargaba pues el juego que estábamos llevando me interesaba y quería continuarlo, al pasar frente la cama me acomodé el paquete descaradamente para hacerlo más notorio, pude ver cómo Itzan me seguía con la mirada hasta desaparecer por la puerta del cuarto del baño. Me di un baño rápido y me dirigí hacia la universidad.
- ¡Amor! No me llamaste cuando despertaste como todos los días - me dijiste Frank sacándome de mis pensamientos mientras me alcanzaba en uno de los pasillos de la uni.
- Ahh, lo siento amor me quede dormido y solo corrí hacia acá para no llegar tarde.
- Tan tarde despertaste que estás usando la misma ropa de ayer? - dijo juzgándome con la mirada.
Decidí no dar más explicaciones más que encogerme de hombros y seguir caminando hacia mi clase. El día transcurrió normal y durante hice planes para cenar con Itzan después de dejar a Frank en su casa y quede con Frank de pasar la tarde con el, por lo que al final del día corrí al baño a quitarme los calzoncillos ya que al ser negros estaban completamente manchados de precum seco lo cual Frank no iba a pasar por alto al momento de quitármelos ya que cada que pasábamos tiempo a solas salían sobrando, los metí en mi mochila y salí a buscar a Frank.
- Listo para irnos, amor? - dije mientras lo encontraba en una de las mesas del patio.
- Si, vamos. - dijo mientras se levantaba y ambos comenzábamos a caminar al aparcamiento a encontrar mi SUV.
- Aun no encuentro lógica amor, que te hayas usado la misma ropa. - dijo en un tono burlón y sarcástico justo nos subimos.
- Es solo que no tenía tiempo y era lo que estaba fuera del closet, no quería desperdiciar más tiempo buscando algo que ponerme. -por suerte ahí lo dejo y no hizo más preguntas.
Me dirigí hacia un parque a no más de 5 minutos fuera de la ciudad que tenía muchos árboles frondosos lo cual nos brindaba la privacidad suficiente para derrochar nuestra pasión, ya que después del calentón de anoche me urgía.
- ah ya veo cuál es el mood de hoy, mi osito quiere que le de mi tratamiento especial - dijo en un tono bobo y lanzándome una mirada sensual.
Aparqué cerca de nuestro lugar favorito, pues estaba un poco en alto lo cual nos brindaba mayor visibilidad ante cualquiera que pudiera acercarse y al mismo tiempo tenía más árboles lo que lo hacía más privado. Frank apenas bajamos desabrochó su camisa y pantalones dejándome ver sus pectorales y abdominales definidos. (Frank era un año menor que yo, bastante blanco con cabello rubio y ojos azules, media aproximadamente 165cm tenía el cuerpo bastante definido pues siempre se dedicó al atletismo, pero lo que más me gustaba de él era su enorme y jugoso culo. Siempre andaba depilado de todos lados y eso me encantaba.) Al adelantarse en la corta senda la mitad de su culo se asomaba enseñando un jockstrap rosa que el sabía me encantaba.
Se sentó sobre la mesa de campo y abrió sus piernas esperando por mi, apenas llegue a el comencé a besarle los pelones rosados que tanto me gustaban para luego subir a su boca y fundirnos en un beso apasionado y morboso. Metía mi lengua hasta su garganta y su respiración comenzaba a acelerarse. ( al parecer ambos estábamos igual de calientes) me aparto un poco para quitar mi playera, me comenzó a comer los sobacos lo cual le encantaba hacer pues me excitaba mucho, mientras que con su mano buscaba mi verga.
- Quiero que me preñes, amor. - dijo dándome un lento beso y dándome una mirada llena de morbo.
Lo baje de la mesa, le di la vuelta, empuje su cabeza hasta la mesa, baje su pantalón, admire su precioso y enorme culo blanco cubierto apenas por los elásticos del jockstrap rosa y comencé a comérselo desesperado, lo que hizo que Frank comenzará a gemir. Succionaba y presionaba mi lengua en su estrecho hoyito, comenzándolo a lubricar y dilatar, mientras con una mano comenzaba a masturbar mi verga ancha de 18 cm, que extrañamente no lograba conseguir una completa ereccion.
Será por que las imágenes de anoche con Itzan siguen volviendo a mi cabeza aun estando con la persona que he amado por casi un año? Me preguntaba a mi mismo.
Me levante y puse mi pene casi erecto en la entrada ya bastante lubricada de Frank, pensando que la presión y el calor de sus entrañas podrían ayudar a endurecerme por completo. Después de varios intentos fallidos Frank se levantó y comenzarme con la misma o más pasión que los besos anteriores.
- estaba pensando pedírtelo antes, amor. Pero dadas las circunstancias se me facilitó- dijo riendo. - esta ves quiero ser yo el que te preñe a ti.
Frank en la relación solía ser el pasivo, pero una o dos veces antes me había pedido ser activo, por lo que yo siendo bastante versátil nunca me negaba, por lo que está ocasión no fue diferente, al contrario fue un alivio pues podía relajarme.
Me dio la vuelta y repitió mi acción bajando mi cabeza hasta la mesa, solo que el no me comió el culo, “ya que el es bastante pasivo como para hacer eso”. Al contrario comenzó a escupir en mi culo y sus dedos para después comenzar a introducirlos poco a poco. Cómo pude con mi mano hacia atrás saqué por un lado del jockstrap su preciosa verga blanca de 17cm y comencé a masturbarlo, ( su pene era un poco menos ancho que el mío pero aun así tenía muy buenas dimensiones a mi parecer) Puso su pene en mi entrada y poco a poco comenzó a hacer presión, esa acción fue suficiente para que yo comenzara a gemir y soltar precum. Poco a poco se fue abriendo camino dentro de mi, hasta que lo encontró cómodo y pudo acelerar su ritmo. Entraba y salía por completo de mi, sus huevos y pelvis chocaban con tres mi haciendo bastante ruido, sentía cada centímetro y cada borde de su pene dejarme vacío para luego volver a entrar de golpe, tenía sus manos aferradas a cada una de mis nalgas y su sudor caía de su frente y pecho en mi. Ambos gemíamos como animales en la naturaleza procreando, pude sentir que su ritmo se aceleraba y su pene se hinchaba anunciando el final, mientras yo contraía mis entrañas con fuerza para crear más fricción. La última ensartada fue más profunda dejando dentro de mi tres trallazos de semen caliente. Frank sin aliento y sudado me dio la vuelta sobre la mesa, sujeto mi verga y se la metió completa en la boca, comenzó a mover su lengua por todo mi glande y a succionar, ayudándome a lograr un perfecto empalme. Sujete su cabeza por sus cabellos rubios fuertemente y comencé afollarle la boca de manera violenta lo cual los dos disfrutábamos, no dure más de cinco minutos hasta que mi verga se hinchó y comenzó a disparar semen caliente directo a su garganta, se tragó mis seis disparos de semen como un campeón, se levantó puso mis piernas en sus hombros y de un golpe volvió a meter su verga aun erecta en mi culo, el sabía que no iba a poder lograr eyacular de nuevo pero también sabía que mi segunda eyaculacion era mi favorita, siguió con una penetracion fuerte y violenta mientras con una mano me masturbaba igual de rápido haciendo que me volviera a retorcer de placer, poniendo mis ojos en blanco y vaciando otros cinco chorros más de semen espeso y caliente sobre mi pecho y abdomen velludo, por lo que rápido salió de mi para recogerlo todo con su boca y limpiarme la verga.
Frank se tumbo sobre mi, ambos completamente empapados de sudor y sin aliento.
Cómo pudimos recuperamos el aliento y nos medio vestimos para regresar a mi SUV y poder abandonar el lugar.
Está es la primera parte de una serie de relatos que tengo pensada escribir, déjenme saber en los comentarios si les interesaría saber que pasará con estos tres chicos. Muchas gracias por leer!