La vida de un yerno en la casa de un militar
Una familia castiza, que aparenta una vida, pero en verdad nada es lo que parece
La vida de un yerno en la casa de un militar.
Me presentaré diciendo que me llamó Juan, tengo 35 años y vivo en una urbanización a las afueras de Madrid, tuve la gran fortuna de casarme con Laura hace 10 años, digo fortuna pues es una mujer impresionante, si no fuera porque no soy celoso me tendría que pelear con cada tío que se cruza con ella, tiene un cuerpo de esos que no dejan indiferente a nadie, sus uno setenta de altura le permiten tener unas piernas que impresionan, su culo es redondo y bien trabajado, pues dedica mucho tiempo a él, sus tetas son dos montañas que invitan a llegar a la cima acompañándolas con dos pezones marrones que con un ligero tacto apuntan como pitones, aparte de tener esta mujer lo mejor, es que estamos enamorados , si a eso le sumamos que la casa donde vivimos nos la pago mi suegro y encima me puso la empresa con lo cual, ¿quién quiere algo mejor:?, pero soy de los que dicen que solo se vive una vez.
Mi empresa es de informática, trabajamos a nivel Europeo, el “inconveniente” es que tengo que desplazarme con mucha frecuencia y eso no me permite estar todo el tiempo que “querría” con mi esposa. Laura trabaja en la empresa familiar, bueno creo que más que trabajar cumple un horario pues al ser la hija del jefe no tiene grandes exigencias, mi suegro es un coronel retirado que supo aprovechar sus contactos en el ejército para hacerse de oro, creo mi empresa, hizo la urbanización donde vivimos toda la familia y tuvo tiempo para crear su propia empresa pensando en sus futuros nietos. Me llevo bien con él, aunque siempre se encarga de de dejar claro que gracias a él tenemos la solvencia económica y que igual que nos la dio nos la puede quitar, la vida militar está en su ADN, viene de familia de militares y eso está marcado en su comportamiento.
Voy al tema:
Era lunes y tenía que viajar a Barcelona por temas de trabajo, me despedi de mi esposa, la cual estaba en la cama de costado, enseñándome su hermoso culo, me relamí, habíamos tenido una noche extraordinaria de sexo, y aun así estaba con la polla tiesa viéndolo.- Adiós amor, llámame desde Barcelona, para decirme cuando vuelves.- Si cariño, te llamo.
Al llegar a la terminal me dirigí al bar, había quedado con Susana, mi secretaría y amante, la vi desde lejos, rubia con un culo precioso, llevaba una mini falda negra y una camisa blanca, sus altos tacones hacían sus piernas preciosas, resaltando sus gemelos, me acerque por detrás eche una mano a su culo sujetando una nalga entre mis manos, eran duras como una piedra, se giro me metió su lengua hasta la garganta, y con una mano bajo a sobarme el paquete que estaba pidiendo guerra.
.- Como vienes hoy, que pasa que tu mujercita no te ha despedido en condición.al tiempo que se reía,- Vamos que perderemos el avión. Conteste.
Al subir al avión nos recibieron dos azafatas, una mujer rubia de unos cincuenta años muy bien llevados y la otra más jovencita de unos veinticinco años también rubia y con un buen par de tetas, nos saludaron y la más joven nos llevo al asiento, caminaba delante nuestro dejándonos ver su hermoso culo, llevaba una falda negra a media cintura y una camisa blanca, todo adornado con el pañuelo en el cuello, al girarse para dejarnos sentar pude ver su nombre Patricia. Nada mas sentarnos Susana empezó a comerme la boca, al ver que íbamos solos en clase vip, y podía desmadrarse. .Estábamos en lo nuestro cuando se acerco la chica y nos dijo con cierto rubor._ ¿Por favor se pueden abrochar los cinturones?
Nos miramos y reímos por la cara de la chica, pude observar la cara de Susana. Tenía esa mirada de morbo, supe en ese momento que iba a ser un vuelo especial.
El avión empezó a andar en busca de la pista de despegue, en ese momento las azafatas empezaron a enseñar las normas de seguridad, al estar nosotros en la primera fila la azafata nos tenía delante, Susana aprovecho la ocasión para sacarme la polla y mirarla directamente a ella, me subía y bajaba la piel a la vez que se mojaba el labio inferior con la lengua sin dejarla de mirar, la chica intentaba concentrarse mirando al frente, pero no podía dejar de míranos, sus ojos eran entre asombro y miedo. En un momento Susana se desabrocho el cinturón levanto el apoya manos y hundió mi polla en la boca, comenzó chupando mi capullo despacio, mientras que con una mano me saco los huevos fuera del pantalón, yo me quede mirando a la chica con una sonrisa. Creo que fue una de las veces que menos duraron las instrucciones, acabo como pudo y enseguida se escondió en el cuarto de las azafatas.
Mientras Susana seguía succionando mi polla, yo comencé a sentir que me corría, le apreté la cabeza contra mi polla y descargue en su boca, no dejo que ni una gota se le escapará recogiendo con su dedo algunas gotas y llevándoselo a su boca. Cuando terminó se incorporó como si no hubiera pasado nada, se me quedo mirando con una sonrisa y me dijo._ Crees que tendrán caramelos de menta? _ jajaja seguro que si.
Apretó el botón para llamar a la azafata con una sonrisa y su mejor mirada de puta, tardo un poco la azafata en venir y eso que prácticamente estábamos solos, al fin apareció la chica sin saber dónde mirar, Susana le cogió la mano e hizo que se agachara como si le fuera a hablarle al oído, la chica bajo la cabeza un poco asustada, en el momento que prácticamente estaban las cabezas juntas Susana le cogió la cabeza y le metió la lengua en la boca sin dejar que la chica tuviera tiempo de reaccionar, la chica intentaba separarse pero Susana la tenia fuertemente sujeta, le metió la mano por debajo de la falda y en un segundo la chica tenía el tanga a mitad del muslo, ya tenía su presa, la chica cerró los ojos y se dejaba hacer, la tuvo un par de minutos follandola con los dedos, luego Susana la empujo al centro, entre los dos asientos y continuo con la masturbación con una mano mientras que con la otra acabo de bajarle las bragas hasta sacárselas, la chica se estaba mojando, se mordía el labio, tenía los ojos en blanco Susana me miró y me dijo._ La quieres tu? _ Me quede mirando. _ No primero tú, ya tendré tiempo. En eso que sonó el timbre de otro pasajero, la chica se quedo mirando a Susana, pidiéndole permiso. Susana la tenía cogida con dos dedos en forma de gancho por el coño_ Ves, pero luego vienes. La chica se quedo mirando las bragas, pero Susana le metió el dedo en el culo y le dijo_ Ves y luego vuelves zorrita. Su voz sonó autoritaria.
Me había guardado la polla dentro del pantalón, cuando paso la otra azafata, seguramente la chica le había comentado algo, paso rápido mirando de reojo y entro en la parte de las azafatas, Susana con una sonrisa picara me dijo _ no hay una sin dos. Se levanto y fue detrás de la azafata, cuando acabo de atender a los pasajeros apareció la chica, buscando con la mirada a Susana que en ese momento ya no estaba, le tendí la mano, la acepto y la estire hacia mí, sin hacer ningún esfuerzo se acerco, le cogí por los hombros y la arrodille. No hizo falta que le dijera nada, comenzó a desabrocharme el pantalón, metió la mano y saco mi polla. Comenzó a chupar._ mírame zorrita. Le dije, automáticamente me miró, tenía unos intensos ojos verdes, empezó con mi glande, pasando todo lo largo, con una mano sobándome los huevos. Le desabroche los botones de la camisa y le metí la mano, llevbava un sujetador de encaje, de los que no llevan tirantes, le baje el sujetador dejando dos hermosas tetas, tenía unos pezones marrones claritos, le empecé a estirar de ellos, en ese momento se le escapo un suspiro, baje mi mano a su coño desprovisto de bragas y empecé a meterle dos dedos estaba muy mojadito, ella puso los ojos en blanco, llevándose la mano a la boca empezó a jadear, la estuve follando hasta que levante la vista y vi que salía Susana al lado de la otra azafata, está mirando al suelo y Susana con una mirada de cazador con su presa, me di cuenta que la falda de la azafata hacia una forma rara, Susana la traía con dos dedos metidos en el coño, levanto una mano y me enseño las bragas de la otra azafata, en menos de media hora le había sacado las bragas a las dos azafatas.
Se acercaron y cuando la azafata vio que su compañera me estaba comiendo la polla abrió los ojos de golpe. Susana la dirigía con los dedos del coño. Susana se sentó sacándole los dedos la hizo arrodillar.
_ Aquí no, por favor. dijo la mujer. _ Donde me dé la gana putita. Dijo Susana metiéndole lo dos dedos que habían estado en su coño. Le dio un guantazo y le empujo su cara hacia su coño- comételo zorrita. La mujer comenzó a lamer los labios vaginales, Susana apoyo la cabeza en el respaldo sujetando la cabeza de la azafata, al poco la azafata no necesito presión para seguir comiendo, solo se oía el ruido de la boca chupando, le agarraba el clítoris lo estiraba y lamia, al momento le estaba metiendo un dedo, Susana se retorcía en su asiento. Yo había hecho subir a la azafata y la ensarte, le di una nalgada y le dije follame putita. Gire la cara para ver a Susana, estaba estirada en el asiento con un dedo dentro de la boca. –Joder como chupa esta zorra,ahhhhh. La azafata no dejaba de lamer el coño, su mano dedeaba mas fuerte el coño de Susana, al rato vi como se corría en la cara de la mujer llenándola de flujos, yo estaba para reventar hice bajar a la chica la agache, junte la cabeza de las dos y les ordene que abrieran las bocas que me iba a correr, me corrí en sus caras, se juntaron para besarse entre ellas y limpiarse mutuamente. Sonó el aviso del piloto, nos acercamos al aeropuerto del Prat . Susana les dijo._ Ahora iros zorritas nos vemos en la terminal. Se quedaron mirando como dudando._ Más vale que nos veamos, os tengo grabadas y no se lo que pensaran en la compañía de vuestro comportamiento.
Era mentira, pero ellas no lo sabían .Se miraron y vi en la mas mayor unas lagrimas, se levantaron y se fueron. La cara de Susana era de placer. Me la quede mirando, me miró y me dijo._ ¿Qué voy a hacer mientras trabajas? Mientras me guiñaba un ojo.
Al llegar a la terminal las vimos, estaban con su maletín mirando hacia todos los lados nerviosas, nos acercamos a ellas y Susana cogió a la mayor rodeándole la cintura con su brazo, y al momento bajo su mano hasta posarse en su culo. Cogió de la mano a la más joven y les dijo_ vamos a algún sitio más tranquilo. Salimos de la terminal, mi coche estaba esperando, bajo el chofer a abrirnos la puerta, Susana hizo entrar a la más mayor luego entro ella y la ultima la chica. Quedando ella en medio, yo subí delante, quería que Susana disfrutara. Una vez nos pusimos en marcha Susana puso sus manos en ambos coños, me miro _ estas putas están mojadas. Esta noche os esperamos en nuestra casa, será una cena inolvidable, así nos conocemos mejor._ Tengo esposo e hija....no sé si podre.._ Pues tráetelos. Dijo introduciendo un dedo en su coño. Después mirando a la joven dijo_ Y tu, tienes novio, marido._ Tengo novio. Dijo con cierto temor._ Tráetelo, así estaremos en familia. Le dije al chofer que parara, Susana le dio un morreo a cada una, les dio la tarjeta con la dirección. _ Adiós mis putitas, y. Esta noche se viste con falda y sin bragas. Ahora largo. Abrieron cada una su puerta y se bajaron. Le dije al chofer donde tenía que ir, y nos pusimos en marcha.