La venganza siempre es un plato frio (7)

Había pasado un tiempo después de lo ocurrido con Álvaro y Alberto, en mi casa parecía que las aguas habían vuelto a su cauce y por fin parecíamos una dulce unidad familiar como antaño. Pero pronto descubriría lo equivocado que estaba.

- LA VENGANZA SIEMPRE ES UN PLATO FRIO (7)

Ante la solicitud de varios lectores procedo a continuar la serie, agradecerle a todo el mundo sus comentarios y espero que les guste.

Hacía más de un par de meses que había pasado lo de Álvaro y Alberto, en mi casa parecía que las aguas habían vuelto a su cauce y por fin parecíamos una dulce unidad familiar como antaño.

A pesar de haber vuelto la rutina en nuestro hogar, he de reconocer que nunca le quite ojo a mi madre, y durante ese tiempo nunca me dio ningún motivo para pensar que estuviese siendo infiel a mi padre.

Mi madre y yo hablamos sobre lo sucedido y decidimos dar por terminado todo ese mundo de lujuria y libertinaje que tantos problemas nos había ocasionado y que casi se lleva por delante nuestra unidad familiar, todo lo que habíamos vivido juntos dio lugar a relación de confianza  e intimidad muy profunda pero sin volver a pasar esa fina línea entre madre e hijo.

Poco a poco fui bajando la guardia, no había motivos por los que preocuparse ni signos de que pasase algo raro por lo que me volví a centrar en los estudios y amigos, mis padres a sus vidas cotidianas y a disfrutar nuestros momentos en familia como cualquier otra familia.

Un día normal como otro cualquiera ahí estábamos cenando los tres, mis padres hablaban de la situación del país, yo los observaba y opinaba de vez en cuando, éramos una familia unida y feliz y eso me proporcionaba una gran felicidad, sin embargo pronto se truncaría esa felicidad y hasta puntos insospechados.

Estaba a punto de acabar mi año académico, el verano ya se dejaba notar cuando mi padre en una comida nos indicó que desde la delegación central le acababan de comunicar que lo iban a cambiar de sucursal (para los que no lo recuerden mi padre era el director de una sucursal bancaria), se le veía preocupado, varios de sus compañeros también le habían ocurrido lo mismo, la entidad financiera quería quitarse a los más veteranos y por ende los que más cobraban para meter becarios y reducir costes, así que mi padre no tenía más opción que aceptar la propuesta, el problema era que estaba a casi dos horas de distancia, era un pueblo pero casualmente el más alejado de la provincia, con las mismas condiciones.

Lógicamente mi madre le pregunto qué íbamos hacer ahora, estaba preocupada y he de reconocer que yo también estaba preocupado, sin embargo mi padre le indico que no se preocupase, que se desplazaría el en coche, que iría y vendría en el día, que no íbamos a cambiar de residencia, ya que teníamos nuestra vida aquí, y además lo mismo la delegación decidía tres meses más tarde cambiarlo a otra sucursal ya que esto no era fijo y no sería al primer trabajador que se lo hacía.

La verdad que esa respuesta nos tranquilizó tanto a mi madre como a mí, si era una putada para mi padre pero por lo menos el resto seguiría con la misma situación.

Pronto comprobé que la situación en casa se resentía, mi padre si antes estaba poco ahora estaba  menos ya que salía por la mañana bastante antes y llegaba bastante más tarde, casi no lo veíamos al pobre y algún día incluso cogía un hotel en el pueblo ya que tenía reuniones y se le hacía muy tarde para volver.

A mi madre se la veía más triste y aburrida y los fines de semana en lugar de disfrutar y estar juntos no hacían más que discutir y echarse los trastos a la cabeza.

Un día como otro cualquiera, mi padre apareció en casa con JORGE, el antiguo jefe de mi padre en la oficina, cuando lo vi allí en nuestra casa un escalofrió recorrió todo mi cuerpo, ¿qué hacía en casa Jorge?

Este al verme me saludo de la forma más natural, como si nunca hubiese pasado nada, incluso haciendo alguna gracia, preguntando qué tal el becario que estaba haciendo ahora si trabajaba o seguía estudiando.

Yo no salía de mi asombro, no era capaz de articular palabra, como si hubiese visto un fantasma, y la verdad es que Jorge era un fantasma del pasado y no sabía él porque estaba allí, aunque pronto todas mis dudas se acabarían despejando.

Mi padre, me dijo que Jorge era ahora su superior, que era el nuevo jefe de la delegación central, y que al quedar nuestra oficina sin director estaba en el pueblo para guiar al nuevo director, y que esa noche se quedaría a cenar con ellos.

No me lo podía creer pensé que Jorge se había ido a Madrid que hacia allí, por lo que decidí hacerme el tonto y le pregunte que pensaba que estaba en Madrid.

Entonces el me miro directamente y me dijo que hacía más o menos un año se separó de su mujer y por lo tanto no pintaba nada en la capital así que decidió volver por aquí y le ofrecieron ser el director de la Delegacion principal de nuestra comunidad ya que coincidió que el que estaba en esos momentos se prejubilaba.

Yo seguí con mi interrogatorio y le pregunte por su hija, pude notar como ahí Jorge le fallo el subconsciente y me echo una mirada asesina, pero rápidamente se recompuso y me indico que seguía en Madrid con su madre y debido al trabajo la veía ocasionalmente.

Entonces apareció mi madre, que al ver a Jorge se sorprendió y se quedó algo paralizada por la sorpresa, Jorge la saludo y le dio dos besos de forma cordial, y de manera muy natural le echo un par de piropos incidiendo en lo guapa y hermosa que estaba, como si los años no pasaran por ella.

Mi madre se sonrojo, y le dijo que él tampoco estaba mal y que el tiempo lo había tratado muy bien, que seguía muy guapo y tras esto se marchó a la cocina a preparar la cena.

Mi padre cogió a Jorge y se fueron al salón según mi padre para ponerse al día de todo.

Yo fui a la cocina, quería saber cómo estaba mi madre y que había sentido al ver de nuevo a Jorge.

Cuando entre en la cocina mi madre estaba enfrascada en la cena, distraída y normal, eso me relajo, en apariencia mi madre no la sentía diferente o preocupada por la visita de Jorge, pero de todas formas me quede en la cocina echando una mano a mi madre.

Cuando la cena ya estuvo preparada, mi madre me pidió que pusiera la mesa mientras ella subía un momento a la habitación para ponerse algo más adecuado.

Yo obedientemente coloque la mesa y avise a mi padre que la cena ya estaba, por lo que tanto el como Jorge se dirigieron a la mesa para cenar, cuando estuvimos los tres sentados apareció mi madre, estaba guapísima y radiante, se había pintado un poco y se había puesto un vaquero y una camisa que la hacían resaltar ese cuerpazo que tiene.

Me fije en Jorge y pude ver como se la comía con la mirada, estaba claro que Jorge no se había olvidado de mi madre, esa mirada lo traicionaba.

La velada fue normal estuvo entretenida, la conversación de la cena fue normal, de cosas triviales y con la excusa de que mañana tenía que madrugar Jorge se fue pronto, prometiendo que otro día con más tiempo vendría para saber de nosotros, eso me mosqueo bastante, no sabía que se proponía exactamente Jorge pero estaba seguro que no tenía muy buenas intenciones.

A la vez que Jorge se marchaba mi madre saco la basura para tirarla al contenedor y por miedo a Jorge amablemente me ofrecí para tirarla yo, ya que quería evitar que mi madre se quedase a solas con Jorge, por lo que coincidí en la salida, la verdad es que el contenedor no estaba lejos de mi casa, pero la situación era tensa, Jorge no dijo nada y yo tampoco, sin embargo al llegar al contenedor Jorge se ofreció a abrirme la tapa para poder echar la basura, gesto que le agradecí, pero Jorge tras comprobar que no había nadie y nadie nos observaba me dijo que no había olvidado lo que había hecho con su hija y el chantaje que le hice para que se fuera de allí.

Al oír esto un escalofrió recorrió todo mi cuerpo que me dejo paralizado.

Mire a Jorge directamente a los ojos y pude ver una mirada de odio hacia mí, ahora no se molestaba en esconderse, su mirada era fría como el hielo y amenazante, yo seguía bloqueado intentando asimilar lo que me acababa de decir, lo que estaba ocurriendo en ese momento.

Entonces con toda la tranquilidad del mundo pero con esa mirada penetrante y dura me indico que le había destrozado la vida y pensaba vengarse, tarde o temprano lo conseguiría, y entonces sabría cómo se sintió el cuándo le entregue el CD de su hija, y todas las desgracias que le han pasado desde ese fatídico día, ya que perdió su trabajo, su casa y finalmente a su familia.

Tras estas palabras se marchó como si no pasara nada, yo por el contrario no sabía qué hacer, no podía articular palabra, llegue a casa e intente que no se notase nada, no quería preocupar a mis padres, ni tampoco sabía por dónde empezar o que comentarles cuando ninguno de los dos sabía nada del tema, por lo que opte por irme directamente a mi habitación, esa noche prácticamente no pude pegar ojo, pensando en que estaba tramando Jorge, y hasta donde sería capaz de llegar para vengarse de mí.

Estuve unos días bastante preocupado, dándole vueltas a lo que Jorge me había dicho y que podría hacer para vengarse, deduje que Jorge andaría detrás del cambio de oficina de mi padre, y el hecho de que estuviera nuevamente por el pueblo era señal de que el objetivo más factible era mi madre, me parecía el eslabón más vulnerable, y hay seguramente jugarían los sentimientos pasados entre ellos y que se rompieron de forma abrupta gracias a mi intervención.

Por lo que decidí no perder de vista a mi madre, a pesar de la confianza que nos unía a mi madre y a mí, decidí no contarle nada, más que nada para no preocuparla y ante la incertidumbre de no saber cómo reaccionaría mi madre.

Tras varios días detrás de mi madre, y tras no ver nada raro ni en su comportamiento ni en su forma de vestir, desistí, baje los brazos a fin de cuentas mi madre pareció aprender la lección y nos quería, que podía hacer Jorge si mi madre se negaba.

Creo que había echado un farol para asustarme y verdaderamente lo había conseguido pero no tenía cartas para jugar si mi madre no entraba por lo que tras varios días decidí relajarme y seguir con mi vida.

Los días posteriores mi vida había vuelto a la normalidad, yo estaba con los exámenes finales, el calor apretando debido a la proximidad del veranito y plena felicidad por la situación familiar.

Cuando termine los exámenes, decidí preguntar a mi padre que plan tenia para las vacaciones, a lo que me indico que el este año difícilmente podría tener vacaciones debido a que era el último en llegar a la oficina y tenía mucho trabajo, eso me dejo un poco plof.

Mi padre me miro y al notar mi frustración me dijo que no me preocupase que algo miraría ya que además el cumpleaños de mama era el mes que viene y quería hacer algo en familia, así que aunque el solo podría ir el fin de semana alguna cosa pensaría.

Después de los estudios la verdad que la única idea que tenía en mi cabeza era salir de fiesta, y eso es lo que hice el fin de semana, salí con los colegas y me emborrache a gusto el viernes, el sábado estaba más resacoso y aunque también salí fui a otro ritmo, hasta que me encontré con Youssef y Lahcen hacía mucho tiempo que no los había visto, por lo que me alegre de verlos y me fume unos petas con ellos mientras nos contábamos nuestras vidas.

Lahcen me dijo que el otro día había visto a Jorge otra vez por la oficina, yo asentí y le dije que también lo había visto, entonces Youssef con la mirada perdida comento lo bien que nos lo pasamos con su hija, que aún se masturbaba cada vez que lo recordaba, y los tres rompimos en una sonora carcajada.

Lahcen me pregunto si seguía con la mujer casada que se follaron, que también estaba muy buena y me pregunto cómo lo hacía para ligarme a esos pibones, Youssef me pregunto por Álvaro, si sabía algo de él y que había pasado entre nosotros para que me vengase de esa forma.

Yo evadí la pregunta como buenamente pude, pero Lahcen no estaba por la labor de dejarlo pasar, e insistió, por lo que yo les dije que Álvaro se había metido con mi familia, Lahcen se sonrió y de forma socarrona me dijo que si Álvaro se había metido con mi familia o se la había metido a mi madre, y Youssef y Lahcen rompieron a reír de forma grotesca.

Personalmente no me hizo gracia, y mi semblante era serio, no dije nada, no me esperaba esa contestación, pero cuando Lahcen dejo de reírse me indico que lo sabían, ya que cuando nos quedamos con Álvaro mientras acompañabas a casa a la madurita buenorra, Álvaro nos invitó a quedar otro día con otra madurita muy cachonda, y cuando te oímos lo que le dijiste a Álvaro no nos fue muy difícil suponer que la venganza era por haberse acostado con tu madre y que la mujer de la que nos hablaba Álvaro era tu madre.

Yo no salía de mi asombro, como lo podían saber, y sobre todo como podíamos haber llegado a este punto, porque era mi madre el centro de la conversación.

Pude comprobar como ambos no me quitaban ojo, yo no sabía por dónde salir ni que decir, estaba claro que lo sabían pero joder, porque después de tanto tiempo salía el tema ahora, así que decidí ser sincero con ellos y reconocer que Álvaro se entendía con mi madre.

Reconozco que la situación era incomoda, pero una vez que comencé a contarles, su curiosidad no dejaba de crecer, al igual que la excitación de todos los allí presentes, yo lógicamente emití bastantes cosas, pero según contaba podía verles como  sus caras iban mudando, como sus ojos se salían de sus órbitas, como se miraban entre ellos alucinando con todo lo que les contaba, cada vez estaban más excitados y disfrutaban de la situación y yo realmente me recreaba en algunos temas o situaciones ocurridas con mi madre que solo el hecho de recordarlas me excitaban.

Pero claro después de contarles todo eso no estaban dispuestos a dar por terminada la conversación, y ambos tenían preguntas, las cuales alguna de ellas me incomodaron y hacían que la situación se convirtiese cuando menos violenta, ya que  me preguntaron si yo también había participado, si mi padre sabía algo, la verdad es que todo lo que les pasaba por la cabeza lo soltaban, ni siquiera esperaban a que les contestase.

Todo fue bien hasta que uno de ellos me dijo que tenían que hacer para follarse a mi madre, eso sí me ofendió ya que mi madre no era una cualquiera, y menos la manera en la que lo dijo, por lo que les hice ver que se habían pasado y que me marchaba de allí, sin embargo uno de ellos al girarme para marcharme me inmovilizo de forma rápida y hábil dejándome sin margen de maniobra mientras el otro se sonrió y me dijo que ya era hora de probar a esa hembra, que querían disfrutar de mi madre, y que yo les iba a ayudar, yo les respondí que ni de coña, que se habían pensado.

Uno de ellos me dijo como podía ser así, como era capaz de ayudar a un desconocido a beneficiarse a mi madre, y no contaba con los amigos, unos amigos que me habían ayudado siempre que se lo había pedido.

La verdad es que visto desde esa perspectiva no le faltaba razón, pero no estaba dispuesto a permitirlo, joder eran mi madre, no una cualquiera, entonces Lahcen me dio un puñetazo que me dejo un poco aturdido y me dijo que por mi bien más valía que los ayudara o sufriría las consecuencias.

Cuando me recupere, me soltaron, y Lahcen que parecía llevar la voz cantante me dijo que me inventara la excusa que quisiera tenía dos semanas máximo para pensar como esos dos podían beneficiarse a mi madre, si por un casual no colaboraba o avisaba a alguien yo sufriría las consecuencias y ellos violarían a mi madre delante de mí.

Me marche de allí sin mediar palabra, pero podía sentir las miradas y las sonrisas socarronas de ambos capullos, yo estaba alucinando que estaba pasando porque ahora dos de mis mejores colegas tenían esa fijación por mi madre, porque se comportaban así, que podía hacer, sabia de sobra de lo que eran capaces y eso me tenía un poco acojonado, pero ayudarles a follarse a mi madre, ¡de qué coño iban ¡

La verdad es que todo se me estaba complicando la semana estaba bastante avanzada y yo era como un fantasma que deambulaba por casa, no dejaba de pensar en lo que había pasado el fin de semana, deseaba que fuese un sueño que no hubiese pasado pero esto solo era un deseo, era todo muy real y para mi desgracia había pasado, y lo mirase como lo mirase tenía todas las de perder, no veía una salida clara a todo esto.

El miércoles cuando estábamos cenando en familia mi padre nos dijo que este fin de semana tenía que ir a una reunión a Madrid, y por lo tanto el fin de semana no estaría por trabajo pero que después nos iríamos unos días a un chalet a la playa a celebrar el cumpleaños de mi madre.

La verdad es que era una gran noticia, el hecho de que mi padre no estuviese ese fin de semana me aliviaba pero saber que nos iríamos de vacaciones lejos de este pueblo, aun me hacía más feliz, por lo que celebre la noticia al igual que mi madre, aunque cada uno por motivos diferentes.

Tras esto decidí  poner en marcha por si acaso un plan para el fin de semana, y le comente a mi madre si podría invitar a dos colegas este fin de semana a casa, ya que el sol aprieta y ellos y yo éramos de los pocos que quedábamos en el pueblo y como nosotros teníamos piscina para poder disfrutarla.

Mi madre accedió de buen grado, y yo me fui a mi habitación, estaba contento, era la primera vez en toda la semana que sonreía, iba a tener vacaciones y nos íbamos a ir de este pueblo por lo menos un tiempo, lo que no me podía creer es que estuviera ayudando a dos putos negros, los cuales yo pensaba que eran mis amigos a que se beneficiaran a mi madre, pero que podía hacer, sino lo hacía seguramente me harían la vida imposible me darían una paliza y después violarían a mi madre, pero en mi interior me corroía el simple hecho de plantearme el ayudarles a conseguirlo, volver a pasar otra vez por todo lo que pasamos en los últimos años, era cierto que hubo momentos donde lo disfrute como nunca e incluso había momentos que lo echaba de menos, pero también en los que vi nuestra unidad familiar peligrar e incluso la integridad de mi madre.

Esa noche prácticamente no pegue ojo, mi cabeza era un batiburrillo de ideas, miles de sensaciones y emociones encontradas pasaban por mi cabeza, y una nueva sensación comenzaba a aflorar, poco a poco crecían mis ganas por ver a mi madre ser poseída nuevamente, y mis colegas me daban la posibilidad de poder verlo de nuevo, no me podía creer que estuviera pensando en hacerla pasar otra vez por lo mismo y si ella entraría en el juego después de lo mal que lo paso para salir de él, pero lo cierto que cuando recordaba lo vivido en los últimos años mi polla parecía tener vida propia, por un lado la cabeza y el corazón me decían que no pero la polla no estaba de acuerdo y ya se sabe cuándo la sangre se acumula en nuestro miembro la razón se nubla y el corazón desaparece, así que lo que en un principio me parecía una idea descabellada a lo largo de la noche paso a ser una idea posible y realizable para acabar siendo un deseo el hecho de que se realizase.

Así pues al día siguiente fui al chamizo con la esperanza de encontrarlos allí y poder hablar con ellos, cuando entre había varios colegas, pero también estaban los dos como siempre juntos, nunca se separaban, cuando me vieron vi como una sonrisa surcaba sus rostros y se acercaron a mi como si no hubiese pasado nada y siguiéramos siendo súper amigos, he de reconocer que esa actitud me fastidio pero como digo ya no pensaba con raciocinio sino con la polla así que lo pase por alto y les pedí si podíamos ir algún sitio más privado.

Nos fuimos los tres dando un paseo por el parque, a esas horas hacía mucho calor por lo que apenas había gente y se podía hablar sin problemas.

Cuando llegamos a un banco apartado, tome la palabra y les indique que lo que me pedían no era posible, quería tantear el terreno ver si se habían ablandado y sin los porros cambiaban de opinión, pero pronto pude comprobar que no.

Ambos mudaron la cara cuando oyeron mi comentario, y Lahcen nuevamente tomo la iniciativa, me indico que sentía mucho lo que les acababa de decir ya que eso no era lo que quería oír, que si no tenía nada mejor que ofrecer me iban a dar una paliza en este mismo momento, entonces yo les pregunte qué porque lo hacían, éramos amigos, que valía para ellos mi amistad, a lo que ellos rieron y Youssef me indico que en el amor y la guerra no hay amigos que valgan y una mujer como tu madre hay que catarla, cueste lo que cueste, Lahcen lo secundo y me dijo que claro que me consideraban un buen amigo por eso me pedían mi ayuda en lugar de violarla.

Era el momento de poner las cartas sobre la mesa y ver como salía la jugada, así que haciéndome un poco la víctima, les indique que les ayudaría si aceptaban una serie de condiciones mínimas, si aceptaban yo les ayudaría a conseguir su objetivo, sino ya podían empezar a repartir las ostias porque no iba a mover un dedo, y después los denunciaría.

Vi cómo se miraban entre ellos, para después mirarme fijamente, como valorando lo que acababa de decirles, y Lahcen con un breve ¡Te escucho ¡ acompañado de un gesto con la mano me invito a que siguiera hablando.

Entonces les expuse una serie de condiciones que quería que todos tuviéramos claro, yo les ayudaría siempre que ellos se comprometiesen con unas condiciones muy sencillas, la primera es que si mi madre dice que no, es no, no quiero violencia ni que la forcéis, tenéis que ganaros su confianza, ella tiene que estar de acuerdo, siempre con su consentimiento, sin malos tratos,  la segunda es discreción, mi padre no sabe nada y tiene que seguir igual, nada de videos ni fotos, salvo que lo haga yo, y por ultimo siempre se harán las cosas como yo digo, seguiréis mis instrucciones e indicaciones, debo saber en todo momento vuestras intenciones para con mi madre y en la medida de lo posible poder estar presente, esas eran las condiciones que Álvaro respetaba y espero que vosotros hagáis lo mismo.

Tras exponer mis condiciones Lahcen dibujo una sonrisa en su cara, y me ofreció la mano en señal de conformidad, mano que estreche.

Tras esto Lahcen estaba pletórico celebrando el acuerdo al que habíamos llegado, me dijo que lo íbamos a pasar genial y que se alegraba que todo esto hubiese llegado a buen puerto ya que le caía genial y le fastidiaba tener que darme una paliza.

Así pues esa tarde estuvimos hablando como lo podíamos hacer, la conversación fue fluida y ambos negros me dieron varias ideas de cómo lo podíamos hacer para que mi madre acabase sucumbiendo a sus encantos.

Yo les dije que ese fin de semana mi padre no estaba en casa, por lo que era ideal para poder llevar a cabo el plan, así que vendrían a mi casa con la excusa de que nos hemos quedado solos y poder disfrutar de la piscina, que se quedarían a dormir y en esos dos días eran los que tenían para poder seducir a mi madre.

Tras pasar toda la tarde con esos dos capullos me fui a casa era la hora de la cena, estaba excitadísimo, me asustaba el pensar las ganas que tenía de que todo esto volviese a pasar, el hecho de volver a las andadas imaginarme a mi madre penetrada por ese par de pollas negras hacia que me subiese por las paredes, definitivamente estaba enfermo, como era tan capullo de ayudar a dos negros a beneficiarse a mi madre y más después del tormento vivido en la familia no hacia tanto tiempo.

El caso es que ya en casa no sabía si hablarlo con mi madre, ponerla sobre aviso, o que se lo encontrara de golpe, tenía ciertas dudas de como reaccionaria mi madre, después de lo vivido con anterioridad no sé si le quedarían muchas ganas de meterse nuevamente en dicho engorro, si podríamos hacer que saliese ese diablo que lleva dentro o si su lado angelical ya se había apoderado de ella para siempre y más después de las experiencias vividas, aun así deseaba más que nada volver a ver ese lado canalla de mi madre y lo íbamos a intentar.

Y llego el viernes el ansiado día, mi madre y yo acabamos de terminar de comer cuando sonó el timbre, fui a la puerta y allí estaban esos dos negros con una sonrisa de oreja a oreja, les invite a pasar y casi de inmediato mi polla reacciono.

Fuimos a la cocina y tras las presentaciones de rigor, los lleve a la habitación de invitados donde dejaron sus mochilas, y nos cambiamos para ir a la piscina.

Una vez ya en la piscina, mis dos colegas empezaron a realizar comentarios acerca de mi madre, lo buena que estaba, ensalzando sus atributos, la suerte que tenia de tener una madre tan hermosa y caliente y cómo iban a disfrutar de ese cuerpo, yo los excitaba todavía más comentándoles lo fogosa que era y como disfrutaba del sexo, podía ver como se miraban y se animaban en sus comentarios indicando que la iban a destrozar todos sus agujeritos y que después de eso no iba querer otra cosa que una buena polla negra.

Cuando estábamos más animados y comentando como podríamos hacerlo apareció mi madre con un bikini blanco que la hacían estar radiante, los tres nos quedamos embobados, babeando ante esa imagen, cuando llego a nuestra altura nos preguntó si les importaba que tomara el sol con nosotros, a lo que rápidamente uno de mis colegas le indico que por su parte no había ningún problema, mientras el otro fue más recurrente e indico que unas vistas  así no se ven todos los días, ante este último comentario mi madre lejos de molestarse pareció alagarla y con un simple “pero mira que eres zalamero” y la mejor de sus sonrisas comenzó a colocar la toalla en la última tumbona que quedaba libre.

Cuando nos dio la espalda vi como Youssef se tocaba la polla de forma obscena y nos miró para comprobar que nosotros también estábamos viéndolo, la braga del bikini era tipo tanga, como os podéis imaginar muy escasito de tela si a eso sumamos que esa poca tela se perdía entre los cachetes de mi madre la imagen que teníamos era simplemente espectacular y al darnos la espalda y agacharse para poner bien la toalla, la imagen era soberbia, los tres estábamos cardiacos, estoy seguro que las pollas de mis colegas estaban creciendo ante semejante vistas.

Me sorprendía el comportamiento de mi madre, aparecer con ese bikini delante de mis colegas, coquetear tan descaradamente, ese brillo en sus ojos, la sonrisa que le brindo a mi colega ante el piropo, esta inocencia para mi fingida delante de mis colegas no me terminaba de convencer pero el caso es que su actitud me estaba dejando a cuadros.

Pero no solo a mí me descoloco, ya que mi madre cuando decidió darse un poco de crema para evitar quemarse nos dio un espectáculo no sé si queriendo o sin querer pero el caso es que cuando comenzó a echarse la crema solar prácticamente estaba de pie en medio de los tres que no perdíamos ojo de cómo se echaba la crema por todo el cuerpo, y seguramente Lahcen que estaba frente a ella pudo disfrutar del generoso canalillo de mi madre cuando se agacho para darse en las piernas al igual que Youssef disfrutaría del hermoso y duro culo que le ofrecía.

Podía ver como mis colegas babeaban por mi madre y eso hacía que me excitase más todavía, no había duda el diablo que mi madre lleva en su interior estaba aflorando nuevamente, no sabía el motivo pero no me importaba, en ese momento solo quería verla como antaño disfrutar de su sexualidad, anhelaba que volviera ese volcán de mujer, la mujer coqueta y picante que disfrutaba de las situaciones sensuales sin importarle las consecuencias.

Por lo que decidí tomar la iniciativa, y le indique a mi madre que me dejase darle por la espalda, mi madre acepto encantada y me paso el bote de la crema para que se la diese, yo le dije que para estar más cómoda se tumbase en la tumbona, ella pareció gustarle la idea ya que no tardo un segundo, una vez se tumbó, le indique si no le importaba que le desanudase la parte de arriba del bikini para poder extenderle mejor la crema, a lo que mi madre encantada se lo desabrocho con un rápido movimiento, yo haciéndome el gracioso le indique que no se hiciera la estrecha que había hecho mil veces topless que sabía que no le gustaban las marcas, y que no entendía por qué hoy salía tan tapada, ella se giró un poco mirándome extrañada, y me indico que no le parecía apropiado teniendo invitados en casa, que lo había hecho por mí para que no estuviera incómodo.

Yo me sonreí, y le dije que no se preocupase, que mis colegas estaban acostumbrados a ver tetas, ya que las amigas siempre lo hacían en las piscinas y en la playa por lo que no se iban a asustar por ver un par de pechos.

Entonces mi madre miro a los dos negros que estaban atentos a todo lo que sucedía, y les pregunto si les molestaba que hiciese topless, a lo que ambos al mismo tiempo le contestaron que no había ningún inconveniente que estaba en su casa y por el hecho de estar ellos no tenía por qué  cambiar sus costumbres.

Por lo que mi madre se volvió hacia mi como buscando mi aprobación y al ver que no decía nada cogió y se quitó la parte de arriba echándola al suelo, y alegrándose de que no nos importase ya que como bien había comentado no le gustaba que le quedasen marcas.

¿Cómo podía ser tan ingenua a veces mi madre? Claro que me importaba y desde luego si mirase fijamente a ese par de negros se daría cuenta que sus ojos estaban  a punto de salírseles de las cuencas.

Yo comencé un lento masaje mientras le daba la crema a mi madre, entreteniéndome en sus costados donde se podían ver una parte pequeña de esos pechos más blanquitos y que rozaba suavemente como quien no quiere la cosa, después sin preguntar seguí mi masaje por esos glúteos duros y firmes, la sensación era increíble, mientras dos negros estaban ahí delante deleitándose del masaje que le hacía a mi madre, yo podía disfrutar y aprovechar para magrear a mi gusto todo el cuerpo de mi madre, cosa que hice y lo disfrute ¡vaya si lo disfrute¡, más si cabe cuando pase a los muslos de mi madre y esta abrió un poco las piernas para facilitarme el masaje y le roce esos labios vaginales, ella al sentir ese mínimo roce emitió un gemidito casi imperceptible que hizo que mi polla se empalmase de inmediato, mire a  Lahcen que estaba frente a mí y tenía la cara desencajada, la verdad es que dudaba si sería capaz de contenerse y no echarse encima de mi madre y follarsela ahí mismo.

Tras darle la crema los tres decidimos darnos un baño, a lo que íbamos hacia la piscina pude observar que los tres estábamos empalmados, una vez en el agua y lejos de mi madre los dos negros estaban excitadísimos y emocionados comentando lo que acababa de pasar,  y  que se la iban a follar ahí mismo, que iban a petarle ese culo y no sé cuántas burradas más.

Entonces Lahcen en un tono serio me dijo que mi madre no solo estaba muy buena sino que era una calienta pollas que estaba pidiendo a gritos una polla y este fin de semana iba tener dos para ella sola y si quería incluso tres.

Yo lo observe seriamente, valorando si era una bravuconada más o iba en serio, y la verdad es que algo me decía que hablaba muy en serio, entonces me miro y me dijo si tenía cervezas frías, yo le dije que siempre había una docena de cervezas en la nevera, y me pregunto si mi madre bebía cerveza, a lo que yo le dije que si, Youssef al oír esto no pudo evitar reírse de forma nerviosa, como pillando por donde iba Lahcen, yo le pregunte si pretendía emborrachar a mi madre, a lo que él me contesto que más o menos.

Y tras esto ambos negros salieron de la piscina y yo detrás de ellos, estaba claro que Lahcen había tomado las riendas de la situación.

Se dirigió directamente a donde estaba mi madre y dejo que varias gotas frías cayesen en la espalda de esta, que al sentirlas se asustó ya que se había quedado medio dormida.

Tras ese primer susto inicial miro a mis amigos y les obsequio con una gran sonrisa, vi como observaba  a ese par de negros musculosos y que gracias al agua hacia que se les resaltaran esos músculos negros y bien trabajados, estaba claro que lo que estaba viendo le gustaba, de eso no tenía ninguna duda.

Lahcen se justificó que lo había hecho para refrescarla un poco ya que hacía mucha calor, y se podía quemar si se quedaba dormida, mi madre se reía como una colegiala nerviosa, y al incorporarse para hablar pude observar como sus pezones estaban duros, no sé si por el contacto del agua fría contra su piel o por que se estaba excitando ante la imagen de mis dos amigos musculosos.

Entonces mi madre les pregunto si querían beber algo, que tenían lo que quisieran en la nevera, Lahcen le indico que con esta calor le daba igual cualquier cosa aunque una cervecita siempre viene bien.

Cuando se fue a incorporar para ir a por ellas yo colocando una mano en su hombro le indique que no se preocupase que ya iba yo, cosa que mi madre me agradeció, por lo que fui a la cocina y cogí 4 cervezas, mientras estaba en la cocina pude ver como mi madre estaba sentada en la tumbona y hablaba distendidamente con mis colegas.

Cuando llegue repartí las cervezas, y le di una a mi madre que no rechazo, cuando me senté pude ver como mis colegas estaban explicándole como mantenían sus cuerpos así, mientras mi madre les decía que ella no hacía nada, que también influía la genética y que los negros tenían por regla general muy buena genética.

Ellos le reían todas las gracias, y la adulaban en cuanto podían, yo simplemente observaba, mi madre estaba relajada y cómoda con mis dos colegas y yo, a pesar de estar prácticamente desnuda.

Al rato Lahcen pregunto si queríamos alguna cerveza que ya se la había acabado y con esta calor apetecía, cuando me incorpore para ir a por mas cervezas, me lo impidió y me dijo que no era justo que ya iba el ahora.

Cuando llego vi que esta vez había cogido las coronitas y con una bandeja las traía ya abiertas ya que no eran abre fácil como las que traje yo, no le di ninguna importancia preferiría Coronitas.

Estuvimos un par de horas conversando, de forma amena y agradable, nos tomamos tres o cuatro cervezas más en ese rato, la verdad es que estaba contentillo, pero mi madre se la veía sofocada, adormilada, y más afectada que nosotros.

No lo entendía, si es cierto que estaba con el puntillo pero sin llegar a ir chispa, pero mi madre estaba muy afectada, y solía beber cerveza habitualmente, no sé porque estaba así no lo comprendía y tampoco habíamos tomado tantas, acaso ¿estaba disimulando y quería seducir a mis colegas?, ¿Por qué se comportaba así?, pero por otra si estaba actuando, su actuación era de Oscar.

Un par de veces pude ver como miraba furtivamente el paquete de mi colega que dicho sea de paso estaba empalmado y poco o nada hacía por disimularlo.

Yo no dije nada, pero el estado de mi madre era deplorable, se trababa al hablar se reía de todo, se le cerraban los ojos y se la veía apocada, mis colegas parecían darse cuenta del estado de esta ya que cada vez se envalentonaban más y buscaban con una u otra excusa para rozarse con mi madre e incluso los temas fueron subiendo de tono, hasta que finalmente solo se habló de sexo.

Lahcen como toda la tarde llevaba la voz cantante, y le pregunto directamente a mi madre si follaba habitualmente con mi padre y que era lo que más le gustaba, ella se sonrió se la veía acalorada pero ya no sé si por la pregunta o por las cervezas, se movía torpemente pero en lugar de contestar le pregunto a si el tenia novia, Este le contesto que no, mi madre sin embargo insistió y le pregunto porque no tenía novia, a lo que este le indico que no era hombre de una sola mujer, lo que provoco una sonora carcajada de mi madre.

Entonces mi madre le realizo otra pregunta que me dejo perplejo, ya que mirando de manera lasciva directamente a Lahcen le pregunto si el mito de los negros era cierto, a lo que Lahcen le dijo que lo sí lo quería saber tendría que comprobarlo ella misma, y mientras decía esto se levantó de su tumbona colocándose frente a mi madre, dejando su polla a escasos centímetros de la cara, se podía notar la erección de Lahcen y la verdad es que se intuía una buena barra de carne debajo del bañador.

Mi madre reía de forma nerviosa, se la veía preciosa con esos colores que iluminaban sus mejillas que acompañados de un brillo en sus ojos la hacían muy deseable a pesar de su estado, Lahcen aún se acercó un poco más e hizo un ligero movimiento de cadera como invitándola a tocar mientras le preguntaba si ahora le daba apuro,  eso pareció despertar a mi madre de su letargo y pude ver como su mano izquierda se dirigía de forma temblorosa pero decidida a ese pedazo de carne que se dejaba intuir claramente en su bañador.

No me lo podía creer  mi madre parecía hipnotizada, el alcohol la había desinhibido de tal manera que no le importaba que tuviera expectación, ni que uno de los allí presentes fuera su propio hijo, pero hay estaba centrada en darle placer a ese negro cabron, frotándole la polla por encima del bañador delante de los tres, y mientras ese paquete incrementaba su tamaño a cada roce de mi madre, sentí como Lahcen clavaba su mirada en mí, era una mirada de poder y llena de vicio, quería demostrar quien mandaba allí y cuando lo mire vi como una sonrisa triunfal se dibujaba en su rostro, tenía claro que esto ya no tenía marcha atrás, iba a pasar y lo peor de todo es que tenía un empalme bestial y deseaba que pasara, aunque también en el fondo me fastidiaba ver que mi madre no oponía ninguna resistencia ni entendía porque se comportaba así.

Mientras yo estaba observando lo que estaba pasando, Youssef tampoco perdió el tiempo y colocándose en un lateral de mi madre, llevo una de sus manos a la entrepierna de mi madre y con suma maestría comenzó a frotarle el clítoris, y mientras hacía esto comentaba lo mojado que estaba y ambos negros se miraban y sonreían, mientras mi madre sin dejar de tocar la polla de Lahcen cerraba los ojos y echando ligeramente su cabeza hacia atrás abría la boca emitiendo algún gemido tímidamente.

Ambos negros se miraban estaban flipando, y yo más de lo fácil que había sido seducir a mi madre, no entendía en qué coño estaba pensando, el caso es que con suma maestría, Youssef cogió una de las manos de mi madre y se la poso en su miembro mientras en un susurro le indicaba a mi madre lo buena y caliente que estaba, esta al sentir el miembro de Youssef en su mano abrió los ojos y miro a Youssef, momento que aprovecho para comerle la boca con suma glotonería y devoción, estaba claro que Youssef estaba muy excitado, mientras mi madre con su manita lo masturbaba suavemente. Ahí estaba yo viendo como mi madre masturbaba los dos pollones negros de mis amigos mientras la sobaban y comían la boca sin importarle que estuviera allí, ¿Qué diablos estaba pasando ahí?

Lahcen no perdió el tiempo y se quitó el bañador ahora estaba completamente desnudo frente a mi madre, y cuando dejo de comerse la boca con Youssef se encontró un buen rabo negro a escasos centímetros de su cara, momento que aprovecho para introducírsela en la boca, y olvidándose de Youssef comenzó una mamada espectacular, Lahcen estaba fuera de sí, echaba la cabeza para atrás y dejaba hacer a mi madre.

El otro colega, por su parte comenzó a quitarle la parte superior del bikini de mi madre para comenzar a pellizcarle los pezones, para después bajarle la braga del bikini y meter su mano entre las piernas de esta.

Yo estaba atónico el espectáculo que me estaba dando mi madre con mis dos colegas me estaba dejando perplejo, solo dejaba de chupar la polla de uno para meterse la del otro.

Yo estaba algo nervioso no dejábamos de estar en el jardín y cualquier vecino podía vernos, pero no parecía que hubiese nadie, mientras yo miraba a los balcones de las casas más cercanas Lahcen cogió a mi madre como si fuera una muñeca de trapo y la coloco en el suelo a cuatro patas se cogió la polla con una mano y la dirigió a la entrada de mi madre, jugueteo un rato pasándole todo el cipote por los labios de esta hasta que con un certero golpe de cadera le introdujo medio falo en su interior.

Ella al sentir como entraba esa caliente barra de carne en su interior dio un alarido que me asusto, Lahcen entonces le dijo a Youssef que le tapase la boca o medio vecindario estaría en la puerta de casa en dos minutos para protestar por el ruido, y lógicamente Youssef le introdujo su polla en la boca de mi madre que comenzó a chupar con auténtica devoción.

Lahcen comenzó un frenético mete saca que hacía que mi madre se introdujese la polla de Youssef, ahora no chillaba ni gritaba porque no podía, ahora simplemente babeaba y berreaba mientras mis colegas disfrutaban y comentaban lo bien que lo iban a pasar este fin de semana.

No sé el rato que paso pero esa tarde mi madre no parecía tener fin estaba desbocada y esos putos negros se turnaron para profanar todos y cada uno de los agujeros de mi pobre madre, no se las veces que se corrieron pero cerca de las 8 de la tarde mi madre estaba completamente dormida en pelota picada en el césped del jardín mientras ese par de cabrones estaba pegándose un baño en la piscina y comentando lo bien que lo habían pasado.

Por el contrario mi madre presentaba un aspecto deplorable estaba sucia, de sus agujeros corrían borbotones de esperma y ambos orificios estaban completamente deformados del ferrete que habían recibido, la cogí y la lleve a su habitación, le di un duchazo de agua caliente y la acosté en su cama.

La verdad es que me mosqueo bastante que en todo momento mi madre no podía abrir los ojos, era un cuerpo inerte  y no se le entendía lo que decía, ni con la ducha se llegó a  espabilar y dudo que supiera lo que había pasado, aunque he de reconocer que fue mi momento y aproveche para sobar con mimo y cuidado todo el cuerpo magullado de mi hermosa madre.

Cuando llegue al jardín nuevamente me encontré con los dos negros, ambos me miraban con aire de superioridad, felices y con sus pollas ya flácidas, yo no tenía fuerzas para enfrentarme a ellos, sentía una vergüenza por permitir que se beneficiaran a mi dulce madre y más delante mía, así que comencé a recoger las cosas.

Uno de ellos me llamo y cuando me volví hacia el me echo la tanga del bikini de mi madre y socarronamente me dijo que para cuando me la cascase pensando en lo que acababa de pasar esa tarde y ambos negros se rieron.

El otro me pregunto si también me había follado a mi madre ahí arriba, por lo que había tardado no le extrañaría y volvieron a reírse.

Pero lo que me mosqueo fue el comentario que uno de ellos hizo comentando lo efectivas que habían sido las drogas.

Entonces yo fui hacia ellos y les pregunte qué era eso de las drogas, a lo que Lahcen mirándome fijamente me explico que cada cerveza que mi madre se había bebido iba aderezada con su droga correspondiente, para que su resistencia fuese nula y su libido subiese como la espuma y seguramente cuando se despierte no recuerde nada, será como un sueño.

Ahora entendía porque mi madre se comportaba de esa manera, no estaba borracha estaba drogada, eso me enfureció, y les indique que eso no era lo acordado, pero uno de mis colegas me indico que en mis normas no había dicho nada de drogas y nosotros no hemos hecho nada que tu madre no haya querido, y nuevamente rieron a gusto, no había duda que lo tenían todo muy bien organizado y pensado.

Me fastidiaba pero tenía razón, de eso no hablamos nada, sinceramente no se me ocurrió o pensé que utilizarían drogas y lo que se comentó según se mirase lo habían cumplido, yo quise protestar e indicarles que no quería que volviesen a usar drogas, pero entonces el otro colega adelantándose a mis pensamientos, me dijo que ahora no podía cambiar las normas como a mí me apeteciese y además lo había disfrutado igual que ellos así que no me podía quejar, estaba allí y en ningún momento me pareció mal lo que ocurría con tu madre, no quieras ahora dártelas de bueno o inocente.

Me preocupe por mi madre y les pregunte cuanto duraría el efecto, a lo que ellos me respondieron que no sabían, que eso no era exacto como las matemáticas pero al menos un par de horas duraría, yo les pregunte que en vista de que lo tenían todo controlado cual era el siguiente paso, a lo que Lahcen me dijo que ya lo vería que no tuviese prisa, y tras esto se levantó y dijo que se iba a echar un rato ya que la noche prometía ser larga.

Sobre las diez de la noche pude oír como mi madre salía de su habitación, yo salí a su encuentro, mi madre me dijo que le dolía todo el cuerpo y que no se encontraba muy bien, que las cervezas no le habían sentado nada bien, seguramente por el hecho de no haber comido nada, y que no recordaba ni como había llegado a la habitación.

Entonces me pregunto si mis amigos se habían ido, yo le dije que no, que se habían metido en la habitación a echarse un rato ya que al parecer estaban también afectados.

Mi madre entonces se fue a la cocina para preparar algo de cena, y yo fui a la habitación de estos para despertarlos e indicarles que efectivamente mi madre no recordaba nada.

Se levantaron se dieron una ducha y cuando bajaron ya estaba la cena preparada, mi madre se había puesto unas mallas y una camisa cómoda pero que la hacían estar divina las mallas marcaban esos cachetes del culo y dejaban adivinar unos labios carnosos y la camisa se ajustaba a sus pechos como una segunda piel por lo que la hacían muy deseable.

La cena fue de lo más correcta, y amena, estuvimos hablando de todo un poco, los dos negros estaban muy pendientes de mi madre, y a esta se la veía muy a gusto y cómoda con ellos.

Cuando terminamos de cenar mi madre aprovecho para recoger la mesa mientras nosotros nos dirigimos al cuarto de estar, momento en el que Lahcen me dijo que cuando mi madre fuese a salón 15 o 20 minutos después diese alguna escusa y desapareciese, yo no comprendía exactamente que quería decirme, el al ver la expresión de mi cara me indico que era para que mi madre estuviese cómoda ya que si todo iba bien como lo tenían pensado la segunda sesión de sexo con ella seria esta misma noche en su casa y consciente pero no podía estar presente ya que la cohibiría, sin embargo podría verlo todo y oírlo desde las escaleras.

Cuando llego mi madre al cuarto de estar, el único sitio que estaba libre era entre los dos negros, mi madre dudo un segundo pero se sentó, entonces les pregunto si no salían hoy por ahí que era viernes y eran jóvenes, Lahcen le dijo que no se encontraba muy bien y que prefería quedarse en casa viendo una peli y ya si eso mañana sábado salir a tope.

Estaba intrigado por lo que me había dicho mi colega y quería ver como llevarían a cabo su plan por lo que decidí apoyar su idea y yo también comente que no estaba muy bien y no tenía ganas de salir hoy y como no me había echado un rato estaba muy cansado, así que la idea de la peli estaba bien.

Mi madre se alegró y comento que por ella genial ya que siempre solía estar sola, así que estar un día tan bien acompañada le apetecía mucho.

Mi madre pregunto qué peli queríamos ver, entonces uno de mis colegas comento que había traído varias pelis en un pendrive, y mientras decía esto me hizo una señal que mi madre no vio para que me fuera.

Yo me excuse y les dije que no me encontraba bien que me iba a la cama, mi madre se levantó y me pregunto si estaba bien, y le dije que tan solo estaba cansado, y que estuviera tranquila que disfrutase de la peli y ya me la bajaría yo después.

Entonces mi madre aunque algo preocupada acepto y les dijo a mis colegas que pelis tenían para ver, entonces el colega que había comentado que tenía varias películas en un pendrive,  dijo que el pendrive lo tenía en la mochila que había traído y subió a por el a la habitación.

Yo subí con él, mi madre sabía que siempre me cerraba la puerta de mi habitación ya que me encantaba mi intimidad, así que di un portazo para que lo oyese pero no me metí en la habitación me quede en el pasillo esperando, Cuando mi colega salió de la habitación con el pendrive se le veía emocionado y excitado, me vio en el pasillo y se sonrió, me hizo señas para que no hiciese ruido y me quedase ahí un rato y sin perder tiempo bajo al cuarto de estar.

Desde donde me encontraba veía parte del cuarto de estar, los oía hablar, la curiosidad me picaba como harían ahora para seducir a mi madre, los veía muy seguros, ¿la drogarían otra vez?, pronto saldría de dudas.

Cuando mi colega llego al cuarto de estar con el pendrive, lo conecto al televisor, una vez estuvo todo preparado, Lahcen cogió el mando y le dijo a mi madre que la película que iban a ver seguro que le iba a encantar, mi madre ingenuamente le pregunto de que iba, y Lahcen le dijo que pronto lo vería que no fuese impaciente.

No tardo mucho rato en reproducirse una peli en nuestra televisión, el caso es que no se oía bien ni se veía con mucha nitidez por lo menos desde donde yo me encontraba, parecía un Screener, o una grabación casera.

Los tres permanecían callados, inmóviles, mi madre seguía en medio de esos dos mastodontes negros, hasta que comencé a oír gemidos, no me lo podía creer ¿esos cabrones habían puesto una peli porno a mi madre? ¿Así pensaban seducirla?, sin embargo cuando me fije bien en la película que habían puesto, me lleve una sorpresa de órdago efectivamente esos cabrones habían puesto una película porno pero el problema era que la actriz principal era mi madre, ¿cómo coño habían conseguido esa grabación?

No podía ver a mi madre de frente pero podía imaginármela en ese momento muerta de vergüenza, sin saber qué hacer, ya que estaba hay en medio de esos dos maromos viéndose como actriz principal, imagine sus mejillas de un rojo intenso, estuvieron un rato viendo esa película, mi madre parecía desaparecer en el sillón mientras las pollas de mis colegas crecían fruto de la situación, la mirada de ambos negros se cruzaron un segundo y Lahcen tomo nuevamente la iniciativa preguntándole a mi madre si le gustaba la película.

Ella no contesto, lógicamente estaba en shock, en su mundo, preguntándose como ese par de cabrones habían conseguido esa cinta, mientras tanto uno de ellos echo su mano por encima de mi madre, y con suavidad y disimulo bajo su mano hasta alcanzar uno de los pechos, esta al sentir esa manaza en su pecho hizo un gesto de querer escapar de ese manoseo, por lo que Lahcen le dijo a mi madre que esta grabación era una copia y que tenía varias en casa y alguna otra película en la que salía la misma actriz, por lo que si no hacia lo que ellos le indicasen esas grabaciones llegarían a manos de su marido e hijo así como a todos los conocidos y ya se sabe que en un pueblo cuando te colocan un san Benito no es nada fácil deshacerse de él.

No me lo podía creer, esos negros cabrones lo tenían todo muy bien pensado, querían chantajear a mi madre, disfrutar de sus favores sexuales a cambio de su silencio, la verdad es que me excitaba pero también me preocupaba que ese par de chorizos tuviesen esa cinta en su poder, no eran de fiar.

Mi madre lo miro fijamente, sus ojos traslucían miedo, angustia, intento justificarse y convencerlos de que no estaba bien lo que estaban haciendo, sin embargo sus palabras no bastaron no era suficientes, y ellos para nada pensaban dejarse convencer sabiendo que la tenían en sus manos.

Lahcen de manera firme le indico que no había otra opción, o ella accedía de buen grado a sus deseos o el video lo recibirían todas las personas que la conocían.

Mi madre derrotada agacho la cabeza y no dijo nada, sin embargo mi colega insistió, hasta que mi madre con un fino hilo de voz accedió al chantaje.

Eso pareció ser el pistoletazo de salida, ya que cuatro manos negras comenzaron a sobar todo su cuerpo no dejaron ni un solo centímetro por explorar, se los veía excitados por lo que no tardaron mucho en quitarle la ropa de forma algo atropellada mientras esta no hacía nada por impedirlo.

Uno de los colegas fue directo a sus pechos y comenzó a introducirse y succionar con su boca esos pezones ya duros y erectos mientras amasaba y sopesaba esos pechos, el otro tampoco parecía perder el tiempo ya que de un tirón le quitaba las bragas a mi madre y le hacía abrir las piernas para realizarle una buena comida de coño.

Yo estaba alucinado, la imagen era grotesca podía ver como mi madre iba reaccionando a los tocamientos de ese par de negros depravados que estaban coordinados mientras oía los gritos y gemidos que salían de la televisión y que pertenecían a la misma mujer.

Al cabo de un rato uno de ellos decidió apagar la televisión, con la excusa de que yo estaba durmiendo para evitar despertarme, estaba claro que querían humillar más aun a mi madre recordándole que yo estaba en la casa.

Nuevamente como esta tarde allí estaban dos negros profanando todos y cada uno de los agujeros de mi pobre madre, solo que esta vez mi madre estaba siendo consciente de sus perversiones y aunque chantajeada con su permiso, incluso pude ver como poco a poco mi madre comenzó a participar, a ser más receptiva e incluso dejarse llevar y disfrutar de la situación y del momento.

La verdad es que la sincronización y organización de ese par de capullos para disfrutar de los agujeritos de mi podre madre era digna de alabar, mi madre parecía una muñequita de trapo en brazos de esos dos, la hacían contorsionarse de unas maneras que parecía que fuera a romperse en cualquier momento, jugaban con el sillón, tan pronto la colocaban en el brazo como encima del sillón daba igual el lugar y la situación sus agujeros no dejaban de estar tapados, siempre tenía una polla en sus entrañas independientemente de la posición.

Después de varias horas de sexo donde yo me tuve que masturbar varias veces, decidieron continuar en la habitación de mis padres, por lo que me adelante a ellos y me escondí en la terraza de la habitación, dejándola entre abierta para poder oír y observar todo lo que pasara.

Pude ver como llegaban a la habitación y he de reconocer que me impresiono lo que vi ya que los tres iban completamente desnudos pero mi madre tenía a los dos negros uno a cada lado hasta ahí todo normal  pero lo que me llamo la atención fue que los llevaba cogidos de sus pollas.

Entonces cerraron la puerta tras de sí, mi madre fue directa hacia la cama contorneándose de manera provocativa exagerando sus movimientos lo que provocaba que sus pechos bailasen de un lado a otro y mis colegas se quedasen embobados observando el movimiento de sus caderas, al llegar a la cama se volvió hacia mis colegas,  ahora estaba frente a ellos con una sonrisa picarona se dejó caer en la cama  y comenzó a sobarse los pechos, llevándose a la boca primero un pezón y luego otro, para después abriéndose bien de piernas tocarse el clítoris suavemente, estaba muy perra se iba calentando por momentos y comenzó a incitarles, mientras se masturbaba.

Uno de mis colegas fue directo a mi madre y cogiéndola del cuello le introdujo un par de dedos de un solo golpe y de forma ruda en su coñito, ella al sentirlos emitió un gemido y abrió más si cabe sus piernas para que este la masturbara con violencia, mi colega estaba fuera de sí y la saco de la cama para después forzarla a arrodillarse y le metió bruscamente la polla en la boca mientras la cogía de la cabeza, como si le quisiera follar la boca, mi madre emitía ruidos guturales, parecía a punto de ahogarse con la polla de ese cabron, le saltaban las lágrimas, le daban arcadas y se le congestionaba toda la cara.

El otro colega tampoco perdió el tiempo y se colocó en un lateral de mi madre, le cogió su pequeña manita y la llevo a su miembro duro y caliente, esta al sentir ese pedazo de carne comenzó a masturbarlo, pero debido a la brusquedad con la que se estaba follando la boca su otro colega, de vez en cuando le soltaba su polla para evitar que la ahogase colocándola en la cintura e intentar hacer tope, hasta que Lahcen soltaba su cabeza y se la dirigía al miembro erecto de su compañero.

Después Lahcen se dejó caer en la cama y ordeno a mi madre que se colocase encima suya, a lo que mi madre obedeció, dejándose caer lo que hizo que se clavara de un solo golpe casi toda esa barra negra, y tras unos segundos en los que se quedó inmóvil, comenzó un frenético sube y baja que hacía que esa barra de carne negra apareciese y desapareciese cada vez más fuerte, cada vez más rápido, hasta que mi madre tuvo un intenso orgasmo que hizo que se apoyase en el pecho de su macho alfa, desmadejada y con la respiración entre cortada mientras bañaba el miembro de mi amigo con sus fluidos, momento que el otro aprovecho para perforarle no sin algo de dificultad ese hermoso culo.

Cuando mi madre sintió esa intromisión trasera quiso protestar, pero el que estaba debajo la inmovilizo con sus potentes brazos, hasta que su amigo introdujo todo su miembro en su interior, estuvieron un rato inmóviles mi madre parecía boquear como un pez hasta que ambos negros en un movimiento acompasado la penetraban de forma rápida y violenta, lo que provocaba que mi madre estuviese en un orgasmo continuo, no dejaba de animarles, berrear y gritar, cosa que parecía animar a sus machos para imprimir más fuerza y velocidad si cabe a sus embestidas.

No tardaron mucho en correrse y tras el esfuerzo realizado los tres quedaron inertes, eran un sándwich humano, siendo el cuerpo de mi madre el que estaba en medio, lo que no sabía era  cómo podía estar de pie la cama después del traqueteo que acabada de recibir.

Al cabo de un rato el que estaba encima de mi madre se incorporó y pude ver como el culo de mi madre estaba completamente enrojecido y deformado lo que provocaba que los goterones de semen manaran al exterior.

Mi madre al sentir que podía moverse se tumbó al lado de Lahcen boca arriba por lo que me permitió ver como de igual forma que su culo su coño estaba completamente dilatado y enrojecido de la caña que acababa de recibir y de igual forma que su culo podía verse como alguna perla de semen resbalaba hasta sus muslos.

Lahcen se levantó, miro a mi madre y miro hacia donde se suponía que estaba yo y con una sonrisa triunfal le dijo a mi madre que esto no había hecho más que comenzar, que a partir de ahora estaría siempre disponible para ellos, y que más valía que los tuviese contentos o esos videos llegarían tanto a su marido como a su hijo y serian de carácter público para quien quisiera verlos.

Mi madre se incorporó y pude ver como mudaba su cara de felicidad a preocupación, no decía nada solo asentía.

Lahcen al ver la sumisión de mi madre, se vino arriba y continúo con su alegato imponiéndole una serie de condiciones a mi madre, como por ejemplo que no quería que usara ropa interior, y que quería saber en todo momento cuando estaría sola y siempre debería obedecerle sin protestar, tras esto ambos negros se sonrieron y rieron a gusto y el otro continuo indicando que mañana saldría de fiesta con ellos así que ya sabía nada de ropa interior, mi madre los miro asustada, pero estos al ver su angustia parecían disfrutarlo más si cabe y le dijeron que no tuviera miedo que ya vería como le gustaba.

Y tras esto se vistieron y se fueron a la habitación, mi madre se quedó en su cama, sollozando un buen rato hasta que se incorporó y se marchó al baño, al cabo de un rato pude oír como caía el agua de la ducha, momento que aproveche para salir de la terraza e irme a mi habitación.

Ya en mi habitación y a pesar de las pajas que me hice tanto en las escaleras como en la terraza después, no podía dejar de pensar en ese cuerpazo, en cómo habían disfrutado ese par de cabrones de esa hermosa mujer, y nuevamente comencé a masturbarme como un loco.

Ya más tranquilo, comencé a analizar fríamente la situación, gracias a mi esos dos negros habían tenido la ocasión no solo de disfrutar del cuerpo de mi madre sino de ponérsela en bandeja para chantajearla y poder disfrutar de ella sin mi consentimiento, situación que no esperaba y que me cogió por sorpresa, pero lo que más me descoloco de lo ocurrido esa noche era de cómo se habían hecho con ese video, y al parecer por lo dicho por Lahcen no era el único video del que disponían, mi cabeza iba a mil no podía dejar de pensar como habíamos llegado a esta situación cuando ya lo creía olvidado, y así en esas me quede profundamente dormido.

Al día siguiente, cuando me levante me dirigí a la cocina, y como suponía había sido el primero en levantarme, al poco rato apareció mi madre, estaba bastante triste, apagada y cansada, sin duda no habría dormido mucho, la verdad es que me dio mucha pena, no pensé que esta situación la afectase tanto y ahora por primera vez me hacía sentir incómodo y mal.

Le pregunte qué tal anoche si le había gustado la película y que no me entere de a qué hora habían subido a la habitación, pero ella no me contesto estaba ensimismada en sus pensamientos, por lo que le pregunte que le pasaba, ella miro hacia las escaleras como para comprobar que estábamos solos y me dijo que estaba metida en un problema gordo y no sabía cómo salir de él.

Yo me hice el nuevo y le dije que no sería para tanto, ella me miró fijamente a los ojos y me dijo que sí que era para eso y más, yo me hice el asustado y le pregunte que pasaba, ella pareció dudar pero al poco se arrancó y me lo conto todo, yo simplemente escuchaba todo lo que me contaba, después de tanto tiempo y ella seguía confiando en mi ciegamente y para su desgracia nuevamente gracias a mi estábamos así.

Cuando termino ella me miró fijamente, y me dijo que podía hacer, que no sabía cómo reaccionar, si ir a la policía y contarlo todo, hablar con mi padre o dejarse chantajear.

Cuando se cayó para ver cuál era mi reacción, yo comencé por hacerme la víctima y enojado pidiéndole perdón por haber traído a casa a ese par de cabrones, que los iba a matar y que no tenía ni idea de que hubiera videos por ahí de lo que había pasado antes, para después preguntarle si tenía alguna idea de lo que iba hacer y cuáles eran sus opciones, por lo que comencé a enumerar las opciones que veía, en primer lugar denunciarlo por lo que dejar a mi padre era una opción muy real además de quedar marcada y probablemente obligada a irse muy lejos de aquí, y en segundo lugar permitir ese chantaje, ver por dónde van esos dos cabrones y luchar porque esto no vaya a peor y sepamos manejar la situación para que nadie más se entere, y no sé si estas dispuesta a ese sacrificio.

Mi madre pareció darse cuenta en ese mismo momento de todo lo que tenía que perder, era como si le estuviese abriendo los ojos por primera vez, y tras esto me miro y contestándose ella misma en voz alta sobre lo que podía hacer ante esta situación comenzó a realizarse varias preguntas sobre qué hacer: ¿dejarse chantajear?, ¿y hasta cuándo?, ¿y si se cansaban de ella?, que les impedirían que todo saliese a la luz y destrozasen su vida, después de lo que pasamos antes como podíamos estar otra vez en la misma situación y tras todo esto rompió en un llanto desconsolado.

Yo la abrace fuertemente, le dije que no se preocupase que siempre estaría con ella y que saldríamos de esto igual que salimos antes.

Poco a poco mi madre comenzó a relajarse, no quería que la viese así y mucho menos cualquiera de esos dos negros cabrones que aún estaban en casa.

Cuando ya estaba más tranquila me pregunto que podíamos hacer, yo la mire y le indique que por ahora poco o nada podíamos hacer, desgraciadamente estábamos en sus manos y salvo hacerles caso poco más se me ocurría.

Tras esto le pregunte si por lo menos había disfrutado, entonces ella rehuyó mi mirada y pude ver como su cara mudaba de color a un rojo intenso, a lo que yo insistí, quería oírlo de su boca.

Ella en un susurro me indico que sí, que lo peor de todo es que lo había disfrutado, esos dos chavales tenían una buena polla y sabían utilizarla, y habían hecho que se corriese varias veces y con tu padre sinceramente no recuerdo la última vez que ocurrió eso, y con tanto trabajo y la rutina, rara es la semana que tenemos sexo y es bastante malo, aunque sé que no es normal que una madre haga participe a su hijo de estos temas solo espero que no se lo digas a tu padre, sabes que lo quiero con locura y me hundiría el hecho de perderlo.

Yo entonces le dije si realmente quería parar esto, entonces con cierta extrañeza ella me miro directamente a los ojos y me dijo que si, no quería exponer la relación que tenía con mi padre, ya nos salvamos por los pelos la última vez, por encima de todo quería a mi padre.

El problema de esto no era el hecho de que esos dos chavales estuviesen buenos o no, era que mi madre era una mujer insatisfecha sexualmente y que disfrutaba de su sexualidad y el hecho de que su marido no la satisfaga hace que sea más débil y expuesta a otros hombres mucho más duchos y expertos en estas lides.

Y dime mama, ¿llevas ropa interior? Mi madre se sonrió y me dijo que no, entonces yo me sonreí, y le dije que lo disfrutara que por mi parte no diría nada a papa, si él no sabe atender a su esposa no es mi problema, todos tenemos nuestras necesidades.

Ella dudo un segundo y abrazándome me dio dos besos y me dijo la suerte que tenia de tener un hijo tan compresivo.

Yo le dije que si volvía a las andadas solo esperaba poder verlo o que me lo contase todo, a lo que ella con una sonrisa me dijo que eso lo hacía siempre.

Y tras esto nos pusimos a desayunar y cambiamos de tema, después de esto subí a ver a mis colegas, cuando entre podía sentir un olor a rancio que me echo un poco para atrás, estos no se enteraron de que había entrado en la habitación así que decidí abrir la ventana para que entrase la luz, cuando estos sintieron la luz comenzaron a protestar, pero me dio igual, directamente fui a Lahcen y le pregunte qué tal la noche, a lo que él se sonrió y me indico que ya sabía que tal había ido la noche que no me hiciera el tonto.

Entonces decidí preguntarles por el video, ahí Lahcen se incorporó y me miro directamente para preguntarme que video, yo le dije que el que le pusieron a mi madre por la noche y con el que la han chantajeado.

Lahcen tras mirar a Youssef me conto que Álvaro el vecino les había dado el video cuando yo me fui a acompañar a casa a la mujer madura, antes de volver a casa, nos dijo que nos iba a gustar y que te preguntásemos, una vez que lo visualizamos y tras oírte lo que le decías a Álvaro, te vimos un día con tu madre y todas nuestras dudas quedaron resueltas.

Todo comenzaba a ver la luz, esos cabrones habían ido por delante mío desde el principio me habían utilizado a su antojo, pero seguí con mi interrogatorio, y esos videos que decís que tenéis, ¿es cierto? Youssef se rio y me dijo que no, sabían que había más porque Álvaro se lo había contado pero no los habían visto ni los tenían, era un farol para que mi madre accediese.

¿Y lo de las copias? Lahcen me dijo que el pendrive es el que les entrego Álvaro, eso era todo lo que tenían, entonces les dije que me iba a quedar con ese pendrive, no me gustaba que chantajeasen así a mi madre además del riesgo de que su reputación pudiese quedar dañada si alguien más se enteraba, a lo que Lahcen me indico que como muestra de amistad me entregaba el pendrive si le dejaba seguir con esto.

Yo me sonreí y les dije que siempre que no hubiese pruebas y la integridad de mi madre estuviese intacta, y esto quedase entre nosotros no había problemas, así que con un apretón de manos volvimos a sellar nuestro acuerdo y me indicaron que el pendrive se había quedado puesto en la TV.

La cosa no me podía salir mejor, ahora tenía la única prueba de la que disponían para chantajear a mi madre, así que podría parar esto en el momento que quisiera, solo que ahora mismo no quería pararlo, quería ver a mi madre ante el desconocimiento de que ya no tienen nada contra ella y sabiendo que han despertado al diablo que lleva dentro, también sentía curiosidad de que es lo que tenían preparado y hasta donde eran capaces de llegar este par de capullos.

Tras esto les dije que andando que ya casi era la hora de la comida y mientras los deje vistiéndose me dirigí al salón a recoger el pendrive para ponerlo a buen recaudo.

Cuando bajaron, mi madre los recibió con la mejor de las sonrisas, estos al ver a mi madre de ese talante se quedaron un poco extrañados, ya que no se lo esperaban.

Yo les dije que me iba al salón a ver un rato la televisión, mientras mi madre terminaba de hacer la comida, fui como una bala al cuarto de estar y encendí la televisión pero rápidamente fui al pasillo de la cocina para ver de que hablaban y por si acaso pasaba algo.

Lahcen como siempre tomo la iniciativa y dio los buenos días a mi madre, cuando estuvo frente a ella introdujo una de sus manos entre sus piernas por encima de las mallas que esta llevaba en ese momento y pudo comprobar que no llevaba ropa interior, y dándole una palmadita en ese duro culo, le dijo que muy bien, muy obediente.

Youssef igualmente comprobó que mi madre no tenía ropa interior y después de esto le dijo que esta tarde aprovecharían para estar en la piscina y que quería que estuviese con ellos, y esta noche después de cenar saldríamos por ahí y quería que se vistiese con lo más provocativo que tuviese.

Lahcen se sentó en la mesa y cogió a mi madre de un brazo para hacerle ver lo que quería, que no era otra cosa que mi madre se metiese bajo la mesa y le chupara la polla que ya estaba fuera de su pantalón y en un estado de semi erección.

Mi madre debido a los tocamientos y la situación se la veía algo aforada, se notaba que le gustaba y quería jugar, pero se hizo la estrecha y le recordó a mi colega que yo estaba en el cuarto de estar, Lahcen torció el gesto y le dijo que se diese prisa que cuanto antes lo ordeñase antes terminaría.

Entonces mi colega con mi madre a sus pies me llamo, por lo que me tuve que ir al salón con mucho cuidado y una vez estuve allí le conteste que quería, me pregunto si quería desayunar, a lo que le dije que ya había desayunado, entonces me dijo que ellos les apetecía un tentempié así que antes de comer iban a desayunar, yo les dije que tranquilos que estaba viendo una serie.

Lógicamente el tentempié era mi madre, pasado un tiempo prudencial  me volví a acercar suavemente y me asome por el marco de la puerta de la cocina ya que no se oía nada, lo que vi me dejo helado, ambos negros estaban sentados cada uno en una silla, sin nada de cintura para abajo mientras mi madre estaba debajo de la mesa alternándose las pollas de ambos negros, uno de mis colegas me vio que estaba en la puerta por lo que empezó a decirle a mi madre, que a partir de ahora siempre que quisiera desayunar no tendría más que pedirlo que ellos le darían toda la leche que deseara, y diciendo esto hacia señas al otro para avisarle de que yo estaba viéndolo todo.

Cuando el otro me vio, cogió la cabeza de mi madre y la presiono contra su pelvis provocando que todo su miembro entrase por completo en la boca de ella, mientras esta intentaba inútilmente zafarse de el sin mucho éxito.

Cuando la soltó vi como mi madre se separó un poco de el para coger aire, pero poca tregua le dieron ya que esta vez fue el otro colega el que la cogió por el brazo, la saco de debajo de la mesa para tumbarla encima de la mesa, le abrió las piernas y comenzó a comerle el chochito con suma maestría, mientras Lahcen jugueteaba con sus pechos, mordisqueándolos y sobándolos a su antojo, mientras mi madre lo masturbaba con fuerza.

Al cabo de un rato el colega se cansó de comerle el coño y cogiéndola de la cintura la atrajo hacia el para después cogerse su polla y apuntarla a su coño, le paso el glande por sus labios vaginales, para después frotárselo en el clítoris, situación que hizo que mi madre arquease la espalda y le solicitase que se la metiese, que no la hiciera sufrir, que lo necesitaba sentir dentro de ella, que la llenase, Yossef en ese momento era el vivo reflejo de la felicidad, en su rostro se reflejaba el vicio y el deseo de poseer a esa hermosa mujer, con una sonrisa de superioridad y mirando a donde estaba yo, apunto su glande hacia ese chochito expuesto y abierto, y de un fuerte golpe de cadera le introdujo media polla en su interior, mi madre al sentir ese pollazo arqueo la espalda y comenzó un alarido que rápidamente fue sofocado por los labios de Lahcen para evitar que se oyese más de la cuenta.

Tras esto Youssef comenzó un frenético mete saca que hacía que todo el cuerpo de mi madre vibrase, sus pechos bailaban de un lado a otro podía ver como a cada embestida la mesa también bailaba, si seguían así esa mesa acabaría cediendo, pero Youssef lejos de aflojar parecía acelerar, sus embistes cada vez eran más fuertes y rápidos, sin dejar de embestir cogió sus pechos con ambas manos y los apretaba con fuerza, el otro compañero le apremio a darse prisa ya que él también quería disfrutar.

Youssef conforme se corría se echó encima de mi madre y mordisqueo los pechos de esta lo que provoco que esta gimiese y emitiese algún ruidito no sé si de placer o dolor, pero rápidamente y de malas formas Lahcen aparto a su compañero que estaba completamente perlado en sudor y con la polla aun tiesa.

Lahcen no sé si por la excitación que tenia de haber visto a su colega o simplemente por las ganas que tenia de follar se la introdujo de forma ruda y violenta, estaba claro que solo pensaba en su disfrute personal, nuevamente la mesa comenzó a bailar, incluso se podía ver como la movía a cada embestida, mi otro colega al ver que mi madre comenzaba a gemir más fuerte le introdujo su polla algo más fofa y le pidió que se la dejase limpita, mi madre con la ayuda de las embestidas de Lahcen se dedicaba afanosamente a chuparle la polla al otro negro, se la veía muy excitada, Lancen no dejaba de hacer comentarios obscenos como lo húmeda que estaba, o como lo estaba disfrutando, lo puta que era y lo hambrienta de polla que estaba, estos comentarios no creo que fueran para excitar a mi madre que ya lo estaba, sino para humillarme a mí.

Tras un buen rato bombeando ese chochito Lahcen cogió a mi madre y le dio la vuelta, ahora estaba boca abajo en la mesa, las piernas quedaron colgando y cogiéndose la polla la dirigió a su orificio anal, mi madre al sentirlo le dijo que lo lubricase o le haría daño, entonces este protestando le pidió al otro colega que cogiese la botella de aceite que había en la encimera, este obediente cogió la botella y le echo un buen chorro en el ojete a mi madre y le echo en las manos de su colega que se embadurno bien la polla, para después comenzar a penetrarla.

Mi madre tenía la cara contraída y los ojos completamente cerrados, estaba sufriendo, podía ver como se cogía fuertemente a la mesa mientras Lahcen con cuidado se la iba introduciendo poco a poco en su hermoso culo, mi madre conforme sentía esa penetración abría un poco más las piernas e intentaba relajarse no sin dolor, hasta que por fin los huevos chocaron contra la pelvis de mi madre, momento que mi colega con un pequeño bufido nos hizo saber a todos, para comenzar a comentar lo estrecho que se sentía y el gusto que le estaba dando.

Una vez que mi madre se sintió completamente ensartada por esa enorme barra de carne, apoyo su cabeza en la mesa e intentaba adaptarse a ese intruso y respiraba entrecortadamente, hasta que Lahcen tras un segundo en el que estuvo inmóvil disfrutando del momento y las vistas, comenzó a follarla, primero lo hizo poco a poco se la sacaba para introducírsela en dos estacadas, para después comenzar un violento y rápido mete saca que hacía que mi madre bailase con la mesa, no se la veía del todo cómoda tenía los ojos cerrados, la expresión de su cara no era precisamente de placer y sus manos se aferraban fuertemente a los laterales de la mesa mientras que Lahcen palmeaba una y otra vez ese hermoso culo que comenzaba a colorear, cuando sintió que se corría cogió a mi madre del pelo provocando que arquease la espalda y anunciando que se corría dio dos embistes más fuertes y secos y al igual que hizo el amigo anteriormente se echó sobre mi madre a la vez que se corría en su interior.

Hay estaban ambos entrelazados, sudorosos, inmóviles, hasta que Youssef indico que se iba a la ducha, entonces Lahcen saco su polla morcillona del culo de mi madre y vi lo enrojecido que estaba así como dilatado, los glúteos marcados de dedos, sus muslos con chorretones de semen que salían de su coño y los pechos todo enrojecidos y marcados por las dentelladas recibidas, mi madre se movía torpemente desmadejada, pero tenía una cara de felicidad plena, una sonrisa imborrable a pesar de verla con síntomas evidentes de cansancio, alguna lagrima se había escapado de sus hermosos ojos.

Yo decidí irme al cuarto de estar, no quería que me pillasen pero tenía un empalme de caballo, y sinceramente era muy poco creíble que después del espectáculo que habían montado en la cocina yo hiciese como que no me había enterado, pero en fin no me quedaba otra.

Al cabo de 5 minutos mi madre desde la cocina me indico que en 10 minutos comíamos que lo dejaba calentando y que subía darse una ducha rápida, que le echase un vistazo y pusiera la mesa.

Yo fui a la cocina, prepare la mesa y al rato casi juntos bajaron los tres, la felicidad de mis colegas era plena y mi madre también se la veía relajada y feliz, comimos y estuvimos hablando de todo tipo de cosas, nada serio pero de una forma amena y distendida, después de comer nos fuimos a la piscina mientras mi madre recogía la cocina, y fue cuando uno de mis colegas me indico que esta noche tenían intención de salir con mi madre por ahí, yo les dije que eso no podía ser esto era un pueblo y todos nos conocíamos y si alguien lo veía tendríamos problemas, entonces el otro amigo me dijo que no iríamos de fiesta por el pueblo que nos iríamos a la ciudad, para evitar situaciones comprometidas, eso me dejo más tranquilo, pero no las tenía todas conmigo, ya que no entendía la necesidad de salir de casa para echar un polvo.

Lahcen me pidió que tanto esa tarde como por la noche buscase una excusa para dejarlos solos con mi madre que ellos me contarían todo lo que pasa e incluso si lo hacíamos bien podría verlo como hasta ahora, justo cuando estábamos hablando de eso apareció mi madre con un bikini rojo precioso que la hacía resaltar sus curvas, sus pezones se veían muy marcados en la tela imagino que producto de la excitación.

Cuando ambos negros vieron a mi madre la vitorearon y le dijeron lo guapa y hermosa que estaba y que ya les gustaría a muchas jovencitas tener un cuerpazo como el suyo, mi madre se sonrojo y con una sonrisa de oreja a oreja les dijo que eran muy exagerados pero que lo agradecía, ya que a toda mujer le gusta oír esas cosas.

Al poco rato y como me comento mi amigo, me disculpe y les dije que me iba a tumbar un rato que hacía mucho calor y me estaba entrando sueño así que me iba a mi habitación, Lahcen se sonrió y Youssef levanto un dedo en señal de aprobación, mi madre me miro extrañada ya que sabe que no suelo echarme siesta nunca y me pregunto si estaba bien.

Yo le dije que sí pero que había comido mucho y me sentía muy pesado, así que me iba a echar un rato para esta noche estar a tope.

Tras esto fui como un rayo a mi habitación y cogí el móvil, con mucho cuidado para no ser visto fui a la habitación que daba al jardín y me metí con sigilo y cuidado en una esquina de la terraza, desde allí podría observar todo lo que ocurría en el jardín sin ser visto, ahí estaban los tres en un principio todavía no había pasado nada, yo me coloque en mi escondite a esperar, pero no tuve que esperar mucho para comprobar que algo se estaba cociendo ahí abajo.

Mi madre una vez que me marche, les dijo a mis amigos sino les importaba que tomase el sol sin la parte de arriba, ya que había confianza y odiaba las marcas del sol, a lo que ambos con una sonrisa maliciosa asintieron que no tenían ningún problema, y tras esto mi madre con una sonrisa y delante de ellos se quitó sin ningún pudor la parte de arriba, quedando delante de mis colegas dos hermosos pechos con sus pezones ya duros, se podían ver algunas marcas todavía de los mordiscos que le habían dado esta mañana.

Lahcen como siempre tomo la iniciativa, se levantó y fue hacia mi madre, esta permanecía inmóvil con una sonrisa nerviosa parecía una colegiala, este cuando estuvo frente a ella paso suavemente con una caricia varios dedos sobre las marcas de los mordiscos, y le dijo a mi madre que menos mal que yo me había ido a ver cómo le iba a explicar sino esas marcas que ayer no tenía.

Ella bajo la cabeza y se ruborizo, Lahcen con una dulzura desconocida hasta ese momento le alzo la cara para que lo mirase y le dio un tierno beso en los labios que mi madre acepto gratamente, después de eso le pregunto si quería que le diese crema, a lo que mi madre cogió el bote y se lo dio con una sonrisa de oreja a oreja.

Lahcen cogió la crema y se embadurno bien las manos, le pidió a mi madre que se tumbase en la tumbona, y esta obedeció colocándose boca arriba, por lo que Lahcen le extendió la crema por hombros pechos y piernas de esta, lógicamente poniendo especial énfasis en sus pechos y parte interna de los muslos, después le indico que se diera la vuelta y sentándose encima de su culo comenzó a extenderle la crema por toda la espalda, mi madre se contorneaba cuando este pasaba su manaza por el lateral cerca de sus pechos e incluso emitía algún gemidito, no había duda de que mi madre no solo lo estaba disfrutando sino que buscaba excitar a su macho.

Lahcen estaba disfrutando, cuando llego a su culo se echó un poco más abajo y le recrimino a mi madre que ese bañador no fuera de tanga como el de ayer, y diciendo esto cogió la braga del bañador y tiro hacia arriba haciendo que esta se metiese en el culo de mi madre dejando sus glúteos al descubierto, mi madre se reía pero no decía nada y este comenzó a extender la crema por su culo, sinceramente no sabía si estaba extendiéndole la crema o sobándolo a placer.

En un momento dado mi madre sorprendió a Lahcen pidiendole que retirase el bote de crema de su culo para que pudiese darle crema más cómodo, Lahcen en un principio no entendía lo que le decía ya que el bote estaba en el suelo, pero cuando miro al culo de mi madre se dio cuenta que estaba empalmado y que sin querer (o queriendo) estaba punteando el culo de mi madre que sintiéndose observada lo movía de forma sensual y alrededor del “bote” que la molestaba.

Lahcen con una cara de vicio y una sonrisa perversa miro a Yousssef que estaba allí inmóvil disfrutando de la situación, y se quitó rápidamente el bañador para cogerse la polla y apuntarla al coño de mi madre, pero debido a la tela del bikini no podía penetrarla, mi madre movía su culo como buscando el roce de su miembro en su clítoris, Lahcen se retiró un poco, hizo abrir las piernas a mi madre y se colocó entre ellas, retiro un poco la tela del bikini y echándose sobre mi madre le introdujo parte de su polla en el coño, esta al sentirla emitió un gemido de placer y cerró los ojos, como queriendo disfrutar del momento, esta vez era suavemente, con cariño, mi madre movía su culo como queriéndose introducir ella misma ese trozo de carne y Lahcen la dejaba hacer.

Al cabo de un rato, Lahcen se echó sobre mi madre completamente la cogió por la cabeza y le indico que ahora le echaría un poco de cremita para que no se quemase esa zona y tras varios envites se corrió nuevamente en el interior de mi madre.

Youssef estaba muy caliente con la polla en la mano y al ver como su colega se había corrido se fue a la piscina para enfriarse un poco, entonces Lahcen le dijo a mi madre que a lo mejor sería conveniente que se limpiase un poco y cucándole un ojo le señalo la piscina.

Mi madre obedientemente fue a la piscina podía ver como esos hermosos pechos bailaban libremente a cada paso de esta, cuando llego al bordillo de la piscina se tiro de cabeza llegando hasta donde estaba Youssef,  este estaba inmóvil observando como mi madre se acercaba.

Mi madre asomo la cabeza justo frente a él, este se sonrió y le dio un tórrido y apasionado beso que mi madre acepto, mi madre estaba fuera de sí, caliente y excitada disfrutando al máximo de sus dos negros, le cogió la polla y con la mejor de sus sonrisas le pregunto si le hacia el favor de darle un poquito más de crema ya que su amigo no le había dado en todo el cuerpo, y mientras decía esto masturbaba con suavidad ese tronco negro.

Mi colega al oír esa petición mudo su cara, paso del asombro al vicio casi al instante y se abalanzo sobre mi madre, parecía un pulpo, sus manos recorrían todo su cuerpo, mi madre tampoco perdía el tiempo y lo masturbaba más fuerte y con la otra sobaba esa potente espalda e incluso el culo, mientras se comían la boca con pasión y lujuria.

Poco a poco fue llevándola hasta el borde de la piscina el agua les llegaba a media cintura, cuando mi madre sintió la pared de la piscina enrosco sus piernas a la cintura y sus brazos los entrelazo por detrás de la cabeza de su negro, momento que aprovecho para penetrar a mi madre, que en cuanto la sintió en sus entrañas comenzó a gemir mientras este movía sus caderas de manera frenética y se aferraba a sus pechos con fuerza, solo los soltaba para mordisquearle esos pezones erectos y desafiantes.

El ritmo era frenético, era evidente que pronto se correría y no tardó mucho en correrse y como no iba ser menos también se corrió en el interior de mi madre.

Cuando vi que todos se tumbaban en sus correspondientes tumbonas y se quedaban relajados aproveche para ir a mi habitación a sacar el video del móvil y guardarlo con los otros en mi portátil.

Al rato sentí subir a mis colegas a su habitación y poco después a mi madre, iba a salir para hablar con ella pero no me parecía prudente ya habría tiempo, al rato oí alguien estaba por el pasillo, y golpearon mi puerta eran mis colegas, me indicaron que se iban que habían quedado para esta noche, la verdad que eso me descoloco por completo, no esperaba que se fueran, Lahcen me dijo que no me preocupase que habían quedado con mi madre para mañana y que ya me dirían, pero que ahora estaban agotados y preferían irse y reponer fuerzas para mañana.

Yo salí de mi habitación y les acompañe hasta la puerta de casa y me despedí de ellos, les dije que ya me dirían, ellos sonrientes me dijeron que no me preocupase que eso estaba hecho, tras cerrar la puerta fui directo a la habitación de mi madre ya que quería que me contase todo lo que había pasado y porque se iban, llame a su puerta y le pedí permiso para pasar, cuando entre le pregunte si había pasado algo más con mis amigos, bien lo sabía ya que lo había visto pero quería que fuese ella quien me lo contase y efectivamente me conto todo con pelos y señales, tanto lo de la mañana como lo de la tarde, se la veía extasiada y eufórica, estaba  radiante como hacía tiempo que no la veía, no tenía ninguna duda de que ese par de cabrones habían vuelto a despertar el lado salvaje de mi madre, si es que en algún momento se había ido.

Mientras ella me contaba con todo detalle lo que había pasado un escalofrió me recorrió mi espalda, porque ahora, como podía ser que nos volvíamos a encontrar en el mismo punto de partida, con lo que nos costó salir de ese torrente, dudaba que fuésemos capaces de controlar esta nueva situación, algo no me cuadraba, estaba seguro que algo se me estaba escapando y no me gustaba, pero no dije nada, cuando mi madre termino de contármelo todo se tumbó en la cama y cerró los ojos como queriendo recordar todo lo que me había contado, yo le dije que no hacía falta preguntar que lo había disfrutado, y que poco o ningún remordimiento parecía tener de lo echo con mis amigos.

Entonces mi madre se incorporó me miró fijamente y con una seguridad que me dejo helado me dijo que mi padre era la persona que más quería en este mundo después de mí, y que no quería dejarle pero necesitaba sentirse deseada, probar cosas nuevas, disfrutar del sexo en toda su plenitud, de forma habitual y siendo serios eso mi padre nunca se lo daría, para mi padre era más importante el trabajo y las partidas de cartas que su mujer, así que mientras no se enterase y pudiera no pensaba arrepentirse de nada ni dejar de hacer nada, para mi estos dos días con este par de chavales no solo ha hecho sentirme mujer plena y realizada han aflorado sentimientos que estaban dormidos en mi interior, me han hecho sentir importante, deseada y con poder, me he sentido mujer y lo he disfrutado.

Si tu padre se iba con otras, porque ella no podía irse con otros, no lo sabía pero la mujer de su casa estaba muy desatendida, necesitada de cariño, mimos y sexo, y si había alguien dispuesto a colmar mis necesidades sin que su marido se enterase porque no intentarlo.

Esa seguridad en mi madre me inquietaba, de repente una mujer insegura y miedosa era todo lo contrario, no entendía ese cambio más después de todo lo que habíamos pasado en el pasado y que casi acaba con nuestra unidad familiar, ella debió intuir lo que pensaba y me pregunto en que pensaba y que me parecía lo que me había dicho.

No supe que decirle así que con un movimiento de hombros le indique que no sabía que pensar, ella me dijo que lo entendía y le fastidiaba contarle estas cosas a su hijo pero estaba decidida, había sido una mojigata mucho tiempo y aunque en el pasado casi nos descubren, me he dado cuenta en este tiempo que lo necesito, ese morbo esa tensión necesito sentirme viva, deseada, y estos chicos han vuelto a recordarme que hay más vida fuera de estas paredes, al final el tiempo pasa y no voy a dejarlo pasar marchitándome sin remedio y en casa.

Yo la entendía, y la apoye pero me daba mala espina que esto era un pueblo, ya hubo chismorreos la última vez y cada vez más gente lo sabía o intuia y de seguir así no acabaría bien y creo que mi padre no se lo merecía.

En vista de que mi madre no pensaba dejarlo, le pregunte como había quedado con estos, a lo que me indico que se habían marchado y que mañana me llamarían, la verdad es que tenía una chispa en la mirada y una felicidad en la cara que me encantaba.

Cuando estaba con mi madre en la habitación llamaron al teléfono de casa, mi madre salió como un cohete, seguramente pensando que serían estos, sin embargo si había habido pocas sorpresas ese fin de semana aún quedaba una última, ya que tras colgar mi madre el teléfono subió a la habitación, al entrar vi que estaba pensativa, con la mirada perdida, como asimilando algo que acababan de decirle, por lo que le pregunte quien era, esta pareció volver a la realidad y mirándome a los ojos con una cara de flipada me indico que el que había llamado era Jorge que estaba por el pueblo para saber si podíamos quedar a cenar.

Ambos nos miramos y estábamos alucinados, no me lo podía creer, que hacia un sábado Jorge por aquí, entonces me acorde que comento que había vuelto, me había olvidado completamente de él, le pregunte a mi madre que le había dicho, y me dijo que mi padre no estaba y que estábamos solos, entonces Jorge le dijo que perfecto para salir a cenar por ahí, que estaba solo y que solo nos conocía a nosotros.

Y tú que le has dicho, que estaba muy cansada y que no me apetecía salir, que si quería podía venir a cenar a casa, yo estaba flipando, seguramente no lo había pensado bien pero dudo que Jorge solo quisiera cenar, y más sabiendo que estaba sola en casa.

¿Mama está segura? Después de tu pasado con ese hombre de verdad te apetece quedar con el ¿a solas?

Mi madre se sonrió, y me dijo que estaba yo, pero yo le pregunte si verdaderamente quería que estuviera allí, ella se quedó pensativa y me comento que por Jorge estuvo muy pillada, fue el primer hombre después de su marido y la primera persona que la hizo sentirse viva y no sabía porque había roto esa unión así de buenas a primeras y se marchó sin decir nada.

Yo si lo sabía pero no pensaba decírselo, así que en vista de que probablemente pasara algo más que una simple cena le indique que yo me iría a cenar por ahí con los colegas y que ella sabría, pero si pasaba algo quería saberlo todo.

Tras esto mi madre me dio un beso y una sonrisa se dibujó en su cara dejando muy claro que esa noche no iban a cenar solamente, y viendo la hora bajo a la cocina para ver que preparaba. Después de un rato se subió a arreglarse, yo mientras tanto me di un baño, llame a unos colegas y me cambie, cuando estaba a punto de irme vi salir a mi madre con un vestido corto que quitaba el hipo, estaba preciosa, al verme se acercó y me pregunto qué tal, yo estaba con la boca abierta y le dije que estaba preciosa, ella se sonrió y me cuco un ojo, mientras me despeinaba.

Justo cuando iba a salir me encontré con Jorge, este me saludo muy amablemente y sentí una sonrisa socarrona cuando me vio, la verdad es que ese tío no me daba buena espina, pero cordialmente lo salude y le deje pasar indicándole que mi madre lo estaba esperando.

Aún no había andado ni 100 metros cuando la curiosidad pudo conmigo e hizo que me diese la vuelta, no sé porque sabía de sobra lo que iba pasar pero necesitaba verlo, mientras llegaba a casa no dejaba de darle vueltas a la situación, como había cambiado mi madre, y lo peor de todo es que me gustaba, quería que pasara deseaba que pasara, me encantaba ver como ese hermoso cuerpo se retorcía de placer, como disfrutaba de su sexualidad, pero también había un sentimiento encontrado, y no era otro que el remordimiento por mi forma de actuar, por ayudar a mis colegas y permitir que Jorge campe libremente, solo por el mero hecho de verlo, de facilitar la situaciones para que pase y haciendo que mi pobre padre tenga una cornamenta digna de elogio.

Cuando llegue a casa entre por la cochera para que no me oyesen, la verdad es que era pronto por lo que decidí quedarme un rato, aproveche para llamar a los colegas y ponerles una excusa de porque no iba, después de esto, fui a la puerta quería saber dónde estaban, los oía en la cocina, aunque no los entendía lo que hablaban sí que vi que era una conversación normal, trivial como otra cualquiera, fue entonces cuando mi cabeza empezó a pensar que iba hacer si al final no ocurría nada, la espera hasta que pudiera salir de ahí sin ser visto podría ser muy larga, pero justo cuando ya empezaba a dudar que ocurriese algo, pude oír un ruido bastante fuerte, como si algo hubiese caído al suelo, y a mi madre reírse de forma nerviosa, yo comencé a entre abrir la puerta para entrar pensando que estaban haciendo algo en la cocina cuando mi madre salió corriendo de la cocina entre risas y Jorge detrás, me quede inmóvil, sino me vieron fue de casualidad, me volví a esconder en la oscuridad de la cochera con la puerta abierta podía ver todo.

Jorge cogió a mi madre de un pie cuando estaba en la mitad de la escalera, lo que hizo que cayese y le diera tiempo a Jorge a abalanzarse sobre ella, mi madre reía como una loca y le pedía que la dejase mientras Jorge intentaba inmovilizarla con su cuerpo y la sobaba todo el cuerpo, a la vez que le indicaba que esta vez no se iba a escapar, que la deseaba, y la había echado mucho de menos.

Mi madre al oír eso dejo de forcejear y lo miro fijamente, entonces Jorge aprovecho para darle un beso apasionado mientras le subía el vestido y se colocaba entre sus piernas, como supondréis no tardaron mucho en comenzar a follar allí mismo, Jorge estaba fuera de si no dejaba de decirle lo mucho que la quería y que la había echado de menos.

Mi madre no decía nada, tan solo jadeaba disfrutaba el momento, estuvieron bastante rato, cambiaron de posturas y lugar, tuvieron varios orgasmos y Jorge no abandono mi casa hasta bien entrada la noche, momento que mi madre aprovecho para darse una ducha y meterse en la cama para caer en los brazos de Morfeo después de ese día tan movido, cuando yo salí de mi escondite eran más de las 4.

El sexo que mi madre tuvo con Jorge nada tenía que ver con el que había practicado con mis colegas, era un sexo más pausado, sensual y con ternura, nada que ver con el sexo salvaje y rudo que practicaba con mis amigos.

Al día siguiente mi madre se levantó bastante tarde para lo que nos tiene acostumbrados, se la veía radiante con una felicidad que ciertamente no recordaba desde hacía tiempo, estaba bailoteando y canturreando canciones y tan solo llevaba unas bragas y una camisa de deporte de mi padre que le estaba grande y llegaba hasta medio muslo, pero aun con esa ropa estaba muy guapa y deseable, había preparado un desayuno como ella decía especial, no faltaba de nada, yo me senté en la silla, la verdad es que me encantaba verla así, por lo que le comente que por lo que veía esa noche con Jorge hacia sido buena, ella se volvió me dio un beso y me dijo que el día de ayer había sido impresionante, no solo por Jorge.

Yo rápidamente le dije que me diera detalles, y ella sentándose conmigo me dio todo tipo de detalles, no se dejó nada, la verdad es que oírlo todo de boca de mi madre me hacía ponerme cardiaco, y saber que no omitía nada me excitaba, me encantaba esa complicidad y sinceridad que teníamos a pesar de ser madre e hijo.

Sin embargo después del relato, mi madre me indico que tenía que contarme dos cosas, se puso seria y eso me mosqueo, me dijo si recordaba que esta semana nos íbamos de vacaciones, a lo que yo le dije que sí y que tenía muchas ganas, entonces ella me dijo que Jorge le había dicho que íbamos a un apartamento suyo que tiene en la costa y que le ofreció a tu padre, que él también está de vacaciones esta semana, que no pensaba ir ya que en ese chalet le vienen muchos recuerdos y se le cae encima, pero que después de lo de anoche si a mí no me parecía mal también iría.

Yo me quede helado, que me estaba diciendo mi madre, que Jorge estaría con nosotros ¿toda la semana de vacaciones?, mi padre solo estaría con nosotros el fin de semana por lo que durante la semana mi madre estaría a la entera disposición de Jorge, y ahora sí que esto me parecía demasiada casualidad.

Mi madre al ver que no decía nada, me pregunto si me parecía correcto, sino me importaba, yo algo molesto le indique que sí que me importaba, ya que esa semana era para nosotros, para que ella y mi padre se acercasen, no para plantarle unos hermosos cuernos en su cara, ¿qué iba hacer yo solo allí mientras ella estaba con Jorge?

Fue entonces cuando mi madre soltó el segundo bombazo que me dejo sin habla, ya que me indico que no me preocupase que Lahcen le había llamado para quedar hoy y como no podía, ya que teníamos que preparar maletas y dejar la casa bien, les he invitado al chalet, Jorge me dijo que es muy grande y hay varias habitaciones y me dijo que no había problemas si quería invitar a alguien más y he pensado que con ellos tu estarías más cómodo y no estarías solo.

Oír eso me dejo pasmado, ¿en qué coño pensaba mi madre? Que le estaba pasando, de verdad pensaba que ese par de negros iban a ir de vacaciones a estar conmigo, el coctel que había preparado mi madre era de órdago, ya que allí se juntaban tres hombres sedientos de sexo y con ganas de disfrutar de la misma mujer, eso no pintaba nada bien, no me lo podía creer ni sabía en qué estaba pensando mi madre realmente cuando decidió juntarlos a todos y nada más  y nada menos que una semana, ¿realmente era tan ingenua?

Mi madre al ver que no decía nada me pregunto qué me pasaba sino me parecía buena idea, yo le dije si lo había pensado bien, juntar a los negros con Jorge no me parecía la mejor de las ideas, si él sabía que mis colegas eran negros, mi madre se sonrió y me dijo que Jorge era una persona tolerante y si iban con nosotros no habría ningún problema, además son muy majos, educados y son tus colegas.

Yo decidí no seguir con la conversación, pero esto se estaba escapando de las manos si en algún momento lo tuvimos controlado, mi madre estaba loca, se la veía feliz, no contemplaba ningún problema, pero yo no hacía más que ver problemas, en que estaba pensando mi madre de verdad…

Llego el lunes, cuando mi padre se fue a trabajar como siempre, nos llamó y se despidió de nosotros hasta el viernes, pasadas las 9 mis colegas aparecieron en mi casa, tenía la esperanza de que no apareciesen pero no tuve esa suerte.

A las 9.30 estábamos los cuatro esperando a Jorge en la puerta de nuestra casa, al cabo de 5 minutos apareció con un cochazo, cuando lo aparco aproveche para presentarle a mis colegas, una vez echas las presentaciones comenzaron hablar de manera distendida mientras yo aprovechaba a meter las maletas, el grupo ya estaba formado y se podía sentir un buen ambiente y sintonía, aunque no sabía hasta cuando iba a durar.

Yo estaba ausente de la conversación hasta que Jorge comento de salir ya que teníamos un buen rato de viaje y cuanto antes saldríamos mejor, y tras esto me indico que fuera con el delante ya que tres bigardos como nosotros iríamos mucho más incomodos detrás y mi madre era más menudita, iba a protestar pero mis colegas y mi madre ya estaban metiéndose en el coche y no quería dar la nota y mucho menos sin haber comenzado el viaje, por lo que vi como Lahcen corría al otro lado y Youssef educadamente cedía el paso a mi madre, quedando mi madre entre los dos.

Para mí desgracia mi madre iría detrás escoltada por esos dos negros musculosos que solo tenían en mente follarsela.

Cuando salimos Jorge no paraba de darme conversación, me dio todo tipo de explicaciones sobre las características del coche en el que íbamos, al ver que no le hacía mucho caso, me comenzó a comentar como era el sitio donde íbamos, mientras tanto oía como en la parte de atrás había movimientos y ruiditos raros, pero no me parecía correcto girarme, ya que tan poco estaba seguro de querer ver o encontrarme con algo raro, sin embargo podía ver como Jorge colocaba varias veces el espejo retrovisor del coche y no dejaba de mirarlo.

Al cabo de un par de horas hicimos la primera parada, mi madre se fue al baño directamente y Jorge aprovecho para echar gasolina, mientras nosotros nos fuimos a la cafetería, ahí fue donde todas mis sospechas se confirmaron, ya que Youssef llevaba las bragas de mi madre y Lahcen no paraba de olerse los dedos de su mano izquierda mientras me decía lo caliente y guarra que era mi madre y la caña que iba a recibir esa semana, que la iban a matar a pollazos y cosas así.

Esos comentarios me cabreaban bastante pero también me excitaban, pero lo que realmente me fastidiaba era no tener el control de la situación.

Cuando llego Jorge a nuestra mesa, nos miró y con una sonrisa maliciosa nos preguntó qué tal el viaje, Lahcen con las mejores de sus sonrisas le indico que muy bien y más llevadero de lo que pensaba.

Que estaba pasando aquí, ¿acaso mis colegas estaban confabulados con Jorge? Estaba claro que algo había pasado en la parte de atrás con mi madre y que Jorge lo había visto por el espejo pero este comentario a santo de que, a fin de cuentas esos dos negros que estaban ahí sentados disfrutando de mi madre también habían profanado a su linda hija y Jorge lo sabía, no creo que los tuviera en gran estima, pero sin embargo aquí estaban los tres riéndose las gracias unos de otros como si fueran íntimos.

En ese momento apareció mi madre, terminamos lo que estábamos tomando e iniciamos nuevamente el camino, al poco rato nuevamente comencé a oír ruiditos, incluso un gemido pareció escaparse a mi madre, yo delante hice como que no oía nada, pero era inevitable, Jorge no quitaba ojo del espejo retrovisor, mientras yo miraba distraídamente el paisaje, intentando ver o intuir algo con el reflejo del cristal, pero sin mucho éxito, estaba claro que ninguno de los allí presentes excepto yo tenía ninguna prisa por llegar a destino.

Por fin llegamos, y la verdad es que era una especie de urbanización privada, con chalets adosados había una piscina enorme y con muchas zonas verdes y de ocio, realmente era una ciudad en pequeño pero con todo lujo de detalle, no le faltaba nada.

Salimos del coche y entramos en uno de los chalets, todos estábamos alucinados de lo espacioso y lujoso que era todo, con un gran jardín en el que había un pequeño jacuzzi circular para 4 o 5 personas y una piscina privada bastante grande, Jorge nos dio la bienvenida y nos fue ubicando a cada uno en nuestra habitación, a mí me tocó la que tenía las vistas al jardín y el jacuzzi pero casualmente la más alejada de la que le había tocado a mis padres, mis colegas en la habitación de al lado, Jorge tenía la más grande y centrada y mis padres en la última habitación junto a la de Jorge.

Una de las cosas que me llamo la atención es que la habitación de Jorge tenia puertas laterales que conectaban con las habitaciones contiguas es decir por un lado mis colegas y por el otro que casualidad la habitación que le había tocado a mis padres.

Después de inspeccionar todas las habitaciones comunes, jardín y demás, me fui a la habitación de mi madre, y le pregunte que le parecía, ella estaba encantada, le pregunte si en el coche había pasado algo ya que había oído algún que otro ruido sospechoso, ella se puso roja como un tomate y cerrando la puerta me dijo que si, se la veía animada, excitada, parecía una cría con zapatos nuevos, me conto que entre ambos negros la masturbaron y sobaron todo el viaje, y que ella perdió el norte y acabo haciéndoles una paja e incluso a Lahcen que estaba detrás mío le había hecho una mamada mientras Youssef no dejaba de introducirle varios dedos en su coño.

Yo le pregunte si sabía lo que estaba haciendo, a lo que ella rápidamente me corto contestándome que disfrutar, que ya estaba harta eran muchos los años que había sido una mujer ejemplar y ahora sentía que se había dejado muchas cosas por vivir y experimentar.

Yo estaba alucinando no podía creer la cantidad de milongas que me estaba contando mi madre con tal de justificarse.

Tenía claro que mi madre estaba dispuesta a todo pero más claro tenía que esto no podía acabar bien, por lo que deje de insistir, ya que poco o nada podía hacer y me fui a mi habitación, estaba preocupado, me daba miedo las consecuencias de los actos de mi madre, en esas estaba cuando Jorge entro en mi habitación y cerro tras de sí, yo estaba tumbado en la cama y me incorpore preguntándole que pasaba, entonces él se acercó a mí y me dijo que quería hablar conmigo, proponerme un trato que no podría rechazar, yo no dije nada por lo que el continuo con su propuesta.

Como suponía mis colegas y Jorge se conocían, no sabía cómo y cuándo pero ya se conocían, no me quiso dar más detalles de eso, pero el tema era que en vistas de que mi madre no parecía hacer ascos a jugar con los tres Jorge quería ir mas haya y básicamente el trato que me propuso Jorge es que sino protestaba o molestaba mientras mis amigos y él se beneficiaban a mi madre yo podría seguir disfrutando viendo como lo hacían o atenerme a las consecuencias.

La sensación de impotencia y rabia se apodero de mí, no me lo podía creer como habíamos llegado hasta este punto, ¿mi madre estaría al corriente? Pero si era así porque no me había comentado nada, estaba claro que poco o nada podía hacer y viendo que mi madre se estaba dejando llevar y disfrutaba de la situación, muy a mi pesar decidí aceptar el trato de Jorge.

Tras aceptar su propuesta me dijo que fuera con él, y yo así lo hice, me llevo a la habitación de mis colegas, que al vernos entrar juntos se extrañaron, pero entonces como hizo conmigo Jorge les propuso un acuerdo, quería que todos colaborásemos para poder disfrutar de la puta de mi madre, lógicamente después de oír la propuesta de Jorge a mis colegas estos aceptaron encantados y comenzaron a vitorear el acuerdo y a decir lo puta y cerda que era mi madre y que la iban a reventar a pollazos que después de esa semana no tendría ganas de follar en un año.

Cuando salimos de la habitación y nos quedamos solos, le pregunte a Jorge el porqué, porque el compartir a mi madre con ese par de negros cuando sabía que mi madre estaba rendida a sus pies,  entonces él me dijo que por VENGANZA, ¿Por venganza? Me dejo descolocado, y muy preocupado no por la contestación sino por la forma de mirarme.

Me dijo que quería vengarse de mí, que sufriera y sintiese lo mismo que el sintió cuando le di el DVD de su hija, y que ahora tenía la posibilidad, yo le dije que seguramente sabría que los negros con los que estuvo su hija eran los colegas que quería hacer partícipes, y él me dijo que sí que lo sabía y que a todo cerdo le llega su san Martín, no sé muy bien lo que me quiso decir con eso, pero ya no dijo más y se marchó.

A la hora de la comida mi madre nos llamó para que bajásemos, allí estábamos como una familia normal comiendo todos juntos, mi madre y Jorge presidiendo la mesa a un lado mis colegas y al otro yo, todo parecía normal, pero nada era normal, no sabía por dónde rompería pero esto nos iba a estallar sin remedio en toda la cara, quedaban casi 5 días para que mi padre llegara al chalet, una madre deseosa de sexo y tres capullos organizándose para cubrir las necesidades de la única mujer de la casa, era imposible que esto acabase bien, pero reconozco que poco a poco la curiosidad  de ver por donde rompía todo aumentaban en mi interior al igual que el bulto de mi pantalón al pensarlo.

Tras la comida nos fuimos cada uno a su habitación a tumbarnos un rato ya que después de la madrugada y el viaje estábamos cansados, sin embargo oía ruido en la habitación de mis colegas por lo que decidí pasarme, cuando entre en la habitación me lleve una sorpresa al ver allí a Jorge con mis colegas, los tres me miraron de forma lasciva y me invitaron a unirme a la conversación.

Lógicamente la conversación era a cerca de mi madre, estaban valorando como abordar a mi madre, como hacerlo para que se pudiese participar todos y que ella no sospechase nada, la verdad es que oír eso me alegro por lo menos mi madre no estaba en el ajo, era cosa de estos tres degenerados.

Se los veía extasiados, emocionados, como putos críos con sus juguetes nuevos, solo que el juguete era mi madre y eso me fastidiaba y me excitaba a partes iguales, mis colegas no dejaban de decir burradas de todo tipo, pero ahora se veía claramente como era Jorge quien llevaba la voz cantante, como organizaba todo.

Finalmente estaba todo claro, y todos nos pusimos manos a la obra, a mí me tocaba apartarme para dejarles hacerse a mi madre sin que esta se sintiese incomoda por mi presencia, pero a cambio lo harían en sitios donde pudiese verlo todo sin necesidad de ser descubierto, estoy convencido que no lo hacían por verlo yo sino por el morbo de verse observados por el hijo de esta, la verdad que mis sentimientos estaban encontrados por un lado me fastidiaba horrores que se beneficiasen a mi madre pero por otra verla en acción y pensar en el simple hecho de que se la iban a follar hacia que me empalmase.

Esa tarde transcurrió con normalidad, paseamos por la urbanización para conocerla, cenamos en un bar de la urbanización donde pude ver como mi madre era la principal atracción y nos fuimos pronto a la cama, por la noche según me dijo mi madre al día siguiente mientras desayunábamos los dos solos, Jorge se había pasado a hacerle una visita y estuvieron toda la noche follando como conejos.

Ya en la comida estando todos juntos pude ver como los tres estaban pendiente de mi madre, como la adulaban y la piropeaban, como buscaban cualquier excusa o situación para forzar un roce fortuito, cualquier excusa valía para poner una mano aquí o allá, yo me ponía enfermo como no podía darse cuenta mi madre de sus intenciones.

Después de comer y según lo hablado el día anterior en la habitación comenzaría el plan, así pues mis dos colegas comentaron que iban a la piscina, a lo que mi madre les dijo que en cuanto recogiese se pasaba a tomar el sol con ellos, no me lo podía creer el cebo ya estaba echado y al parecer mi madre se lo había tragado, yo me disculpe indicando que me iba a tumbar un rato al igual que Jorge como habíamos acordado.

Y efectivamente así fue a los 10 o 15 minutos mi madre estaba con esa pareja en la piscina, tumbados en las toallas y hablando distendidamente, mi madre estaba radiante con un bikini que poco o nada dejaba a la imaginación, con dos jóvenes negros con un cuerpazo de espanto, riéndole todas las gracias y adulándola.

Allí estaba yo observando lo que pasaba en la piscina cuando entro Jorge en mi habitación sin previo aviso, la verdad es que me asusto, y se dirigió a donde yo estaba, que no era otro sitio que la ventana, ahí estaba yo con Jorge en la ventana viendo como poco a poco mis dos colegas negros se esforzaban por seducir a mi madre.

No sabíamos que es lo que hablaban pero se los veía animados, distendidos, hasta que vi como Lahcen con disimulo le echo a mi madre una de sus manos sobre uno de sus glúteos y esta al sentir el contacto lejos de reprenderle le sonrió, lo que hizo que se envalentonara y se acercara más a ella para darle un beso, beso que también acepto de buen grado.

Youssef en un principio se mantuvo a distancia, viendo como Lahcen le quitaba la parte de arriba del bikini dejando los pechos de mi madre al descubierto, igual que hiciera su compañero se acercó a ellos y comenzó a sobar el culo y los pechos de esta, ahora mismo la imagen era espectacular ya que entre dos cuerpos de ébano estaba el cuerpecito blanco de mi madre, siendo sobado cada centímetro de este por cuatro manos.

Ahí estábamos Jorge y yo observando lo que estaba ocurriendo en el jardín, Jorge sin apartar la mirada me indico lo golfa que era mi madre, yo hice como que no lo había oído y ahí seguimos los dos mirando como ese par de negros se beneficiaban a mi madre, hasta que al cabo de un rato Jorge se despidió de mí y fue para abajo.

A los pocos minutos Jorge apareció en escena, se hizo el sorprendido y ofendido, mi madre rápidamente se separó de sus amantes negros e intento disculparse, Jorge parecía muy ofendido, mientras veía como mis colegas detrás de mi madre se reían de la actuación de Jorge.

Las escusas de mi madre sonaban poco convincentes, y poco a poco por la situación pude ver como bajaba la cabeza con resignación, todo lo contrario que Jorge que sonaba muy convincente haciéndose el ofendido a la vez que insultaba y despreciaba el comportamiento de mi madre.

Dando un cambio radical se acercó a mi madre que para ese momento entre la vergüenza y la humillación no sabía dónde meterse ni que hacer, por lo que aprovechando que estaba de rodillas con la cabeza agachada, la cogió del pelo y la obligo a mirarla para decirle de forma tranquila que si lo que quería es que la trataran como una puta no tenía más que decirlo, y sin dejarla responder tiro de los pelos para que la siguiese, lo que hacía que mi madre fuese como un perrito a cuatro patas detrás de Jorge, mientras le indicaba a mis colegas que lo siguieran.

La llevo a la pared entre el Jacuzzi y la piscina, allí había una manguera que cogió y antes de abrirla miro a mis colegas y les indico que el producto siempre hay que lavarlo ya que nunca se sabe quién lo ha utilizado antes, y tras esto un chorro de agua golpeo a mi madre en los pechos, el agua estaba fría y salía con fuerza, mi madre al sentir el primer chorro dio un grito e intento retirarse pero Jorge no estaba por la labor y no dejo de apuntarla, podía ver como mis colegas se reían de la situación mientras Jorge seguía insultándola.

Al cabo de un rato, Jorge cerro el agua se quitó la ropa y cogió a mi madre que estaba echa un ovillo en el suelo y se metió en el Jacuzzi, , todo lo suave y dulce que había sido hasta ese momento dio paso a un auténtico macarra, obsceno y soez que denigraba a mi madre, esta inmóvil no oponía resistencia, mi madre era como una marioneta en las manos de Jorge, la sentó encima suyo y comenzó a morderle los pezones haciendo que estos cambiasen a un color rojizo, mientras la follaba con fuerza, cuando no tenía uno de los pechos de mi madre en su boca no dejaba de insultarla y humillarla.

No sé porque pero al cabo de un rato mi madre comenzó a moverse para acoplarse mejor a Jorge, este cuando lo sintió se rio de mi madre, y automáticamente invito a entrar en el Jacuzzi a mis colegas, estos excitados como yo de ver lo que estaba pasando fueron raudos al Jacuzzi y pronto mi madre desapareció entre tanto hombre, tantas manos y pollas para ella sola, se la veía disfrutar, no paraba de gemir, ella no dejo una sola polla sin atender mientras que ellos no dejaban un solo centímetro sin sobar o probar y como supondréis todos sus agujeros fueron atendidos por todas y cada una de las pollas de esos tres degenerados que hacían sacar la peor versión de mi madre.

Estuvieron toda la tarde alternándose para que mi madre recibiese su ración de polla, de uno en uno de dos en dos e incluso los tres a la vez, de todas las formas y posturas posibles y en todas las zonas del jardín, ya sea en el jacuzzi, en el césped o en la piscina, yo no sé la cantidad de pajas que me hice, hasta que decidieron dar por terminada la sesión.

Se tumbaron un rato alrededor de mi madre y estuvieron conversando distendidamente o eso parecía ya que desde donde yo estaba no podía oírles lo que decían.

Cuando el sol comenzó a bajar, empezaron a recoger y subieron a las habitaciones, mientras mi madre estaba duchándose, Jorge vino a mi habitación, y me pregunto qué tal me había parecido lo que había visto, yo no le dije nada pero el mirando la cantidad de clínex que había en el suelo y el empalme que todavía llevaba se rio y me indico que no hacía falta que le dijese nada ya lo veía.

Venía a pedirme que mañana miércoles los dejara solos con mi madre, ¿otra vez?, yo quise protestar pero Jorge me lo impidió, me dijo que por la mañana se irían a dar una vuelta en barco y allí no sería posible que me escondiese pero que no me preocupase que me lo contarían todo con pelos y señales y ya por la noche si todo iba bien darían un paseo por la urbanización y entonces podría seguirlos a una distancia prudencial para que viese todo lo que pasaba.

Sin darme tiempo a asimilarlo se marchó de mi habitación, ¿Qué estaba pasando? Mi madre era una marioneta en manos de Jorge, yo no pintaba nada, y mi madre estaba fuera de sí, desde que estábamos allí casi no había estado con ella, ¿qué pasaría cuando mi padre llegase el viernes?, ¿sería capaz mi madre de parar esto? Y ellos harían como que no ha pasado nada o buscarían la manera de follarse a mi madre mientras mi padre estaba distraído en otra cosa, la verdad que esta última situación seria un aliciente y muy morbosa para Jorge y mis colegas, pero y si mi padre los pillase o se enterase, que sucedería entonces.

Esa noche mi madre se la veía bastante cansada y los demás parecían satisfechos después de la sesión de sexo de la tarde por lo que decidimos quedarnos en casa a descansar un poco y ver una película en la TV.

Al día siguiente, como dijo Jorge propuso dar una vuelta en barco a lo que mis colegas vitorearon y se apuntaron y mi madre llevaba por la alegría de todos también se apuntó, yo me borre con la excusa de que a mí los barcos no me gustan y me mareo, mi madre insistió un poco para que fuera pero sin mucha convicción por lo que me quede en casa.

Cuando llegaron por la tarde, venían todos muy contentos y risueños, y con la excusa de ducharse y cenar todos se subieron a las habitaciones, yo hice lo mismo y me fui a mi habitación, a los 5 minutos y mientras mi madre se duchaba, Jorge vino a mi habitación y me dijo con la mejor de sus sonrisas que me he perdido un día precioso en el mar, lástima que te marees, yo quería matarlo, si no fui a la excursión no fue por mi mareo que no existía sino por las indicaciones que me había dado Jorge, este cuando me vio como lo miraba saco su móvil y me dijo que para no tardar mucho tiempo en contarme lo que había pasado y en vista de que habían pasado muchas cosas, en especial con mi queridísima madre me envió varias grabaciones para que pudiese ver todo lo que habían estado haciendo, una vez comprobó que los videos se habían enviado correctamente se marchó de mi habitación, indicándome que lo disfrute.

Al instante sonaron varios pitidos en mi móvil eran las grabaciones, no tarde dos segundos en coger el móvil y abrir el primer video y ahí estaba mi madre, entrando en el barco de la mano de Jorge, más que un barco era un yate, bastante largo y espacioso, mi madre iba sonriendo y contorneándose de forma exagerada, consciente de que la estaban grabando mientras Jorge le enseñaba el barco, cuando entraron al único camarote Jorge se hizo a un lado y cuando mi madre asomaba la cabeza Jorge mirando directamente a cámara cogió a mi madre por los cachetes del culo y estrujándoselos la empujo para dentro, y detrás fueron mis colegas.

Ya dentro de esa pequeña habitación Jorge cogió a mi madre y la echo en la cama que había, la puso a cuatro y mirando a cámara indico el culazo que tenía y levantándole la falda descubrió el culo y coño de mi madre completamente desnudos, ¡No llevaba bragas¡ Jorge rompió en una sonora carcajada diciendo lo buena, obediente y guarra que era, mientras mi madre movía su culito desnudo delante de la cámara, se la veía cómoda e incluso excitada, no le importaba que la estuviesen grabando es más le gustaba, ya que varias veces había mirado directamente a la cámara y forma sensual e insinuante para acabar sonriendo como una cría.

Jorge pronto comenzó a jugar con los agujeritos de mi madre, sus dedos corrían raudos y de forma hábil entre su culo y su coño, esta al sentirlos cerro los ojos apoyo su cabeza en el colchón y se dejó hacer, no tardó en aparecer en escena uno de mis colegas, por lo que deduje que el que lo estaba grabando era el otro colega, la verdad es que esto estaba degenerando bastante mi madre era un vil objeto en manos de esos tres cabrones que la sobaban y follaban por todos sus agujeritos sin que esta protestase, lo que antes era todo delicadeza y cariño, ahora había pasado a ser sexo guarro y sin límites, mi madre estaba fuera de sí, no decía a nada que no, nada parecía molestarle y ellos usaban su cuerpo para su placer y disfrute, parecía una muñeca de trapo en manos de ellos, no había límites.

Había 5 videos más y todos iguales mi madre follando como una loca en todas las zonas posibles del barco y de todas las formas posibles, mientras es animada, degradada y vejada por igual, eso sí siempre con al menos una polla en sus entrañas cuando no dos e incluso tres.

Después de ver todos los videos, me di cuenta que estaba con la polla en la mano cascándomela como un puto mono, ¿qué diferencia había entre esos degenerados y yo?, de acuerdo que ellos disfrutaban del cuerpo de mi madre a su antojo pero yo también disfrutaba igual que ellos observándolo, era un puto voyeur, pero lo peor venia después, cuando me corría y la sangre dejaba de estar concentrada en mi polla, era cuando lo pensaba y aparecían los remordimientos, el temor de no saber cómo iba a acabar esto, me gustaría estar a solas con mi madre y hablarlo pero eso era misión imposible, ella estaba dedicada al placer y la lujuria y esos mamones no nos dejaban solos ni a sol ni a sombra.

Llego la noche y en la cena Jorge propuso dar una vuelta por la urbanización, yo como había comentado con Jorge me excuse diciendo que había una serie en la televisión y que si no les importaba me quedaba en casa, mi madre me miro extrañada, y me dijo si me pasaba algo que me notaba raro, yo le dije que no que solo me apetecía ver la serie,  y además si mañana íbamos a la playa quería estar fresco y descansado.

Mi madre acepto mis explicaciones y tras recoger la cocina se fue a cambiar, momento en el que mis colegas también subieron a la habitación y Jorge antes de irse me dio las gracias y me indico que lo de la playa era muy buena idea, me dijo que de aquí irían al local que estuvimos en el otro día, el que está en la urbanización y después irían a un descampado a escasos metros del bar, que les diera 20 minutos para llegar al bar y después fuese para allí pero con cuidado que no me viese mi madre, no sé por qué pero solo la conversación hizo que me empalmase de nuevo, me sonroje porque no me gustaba la idea de que nuevamente se beneficiasen a mi madre pero el simple hecho de saberlo e imaginarlo hacia que me excitase.

Al cabo de un rato, los tres maromos estaban en el cuarto de estar esperando a que bajase mi madre, momento que aprovecharon para comentar lo ocurrido en la mañana en el barco y lo que iban hacerle esta noche, sin importarles el hecho de que estuviese allí con ellos, estaba claro que ya era uno de ellos aunque no participase activamente o simplemente lo hacían por la situación y el morbo de estar el hijo delante.

Hasta que bajo mi madre, cuando la vimos en las escaleras todos nos callamos y nos quedamos mirando lo hermosa y guapa que estaba, se había puesto un vestido de una sola pieza color negro, que le llegaba hasta medio muslo, tipo gasa de tirantes, lo que hacía que le quedase un escote de infarto y con la espalda al descubierto y cerrándose en la parte baja de la espalda, con un maquillaje suave que hacían que le resaltasen esos ojazos y sus labios carnosos.

Cuando llego hasta nosotros el silencio era sepulcral hasta que ella nos miró y con una sonrisa divertida nos preguntó qué tal.

Al unísono todos alabamos lo hermosa que estaba, Jorge se levantó y la hizo voltear sobre sí misma para que pudiésemos contemplar lo hermosa que estaba, ese simple gesto hizo que sus pezones se marcasen en su vestido signo evidente de que estaba excitada y que nuevamente no llevaba ropa interior, esto no pasó desapercibido por ninguno.

Tras esto Jorge me miro y me pregunto si no me apetecía salir un rato, a lo que les dije que no que ya era tarde, y tras esto salieron, mi madre siempre en medio, siempre agasajada y atendida, yo no hice caso a Jorge y los seguí desde el principio siempre a una distancia prudencial.

Fueron directos al bar donde estuvimos el primer día, se sentaron en una mesa y allí les atendieron, en el bar no había prácticamente nadie, el tabernero y un par de hombres tomándose una cerveza, que parecían conocer Jorge ya que se fue donde estaban ellos y los saludo efusivamente, mientras mi madre estaba en la mesa con mis colegas, hablando y riendo distendidamente hasta que llego el tabernero y pidieron para beber.

Yo podía verlo todo desde la ventana aunque no podía oírlos, estaba detrás de mi madre, por lo que ella no me podía ver pero yo a ellos sí, cuando vino el tabernero traía una jarra de barro grande y varios vasos, habían pedido sangría, y la sirvió dejando el resto en la mesa.

Al poco rato vi como Jorge también hablaba con el tabernero y luego se unió a la mesa con mi madre y mis colegas, el ambiente entre ellos era distendido y alegre, no parecía pasar nada, yo estaba ahí colgado a la ventana intentando oír e intuir lo que pasaba hasta que un hombre me llamo la atención, a mi casi me da un patatús, no sabía que decirle, por lo que me hice el tonto y le pregunte si era a mí, el hombre se sonrió y me hizo señas para que lo siguiese, es cuando vi que el que me estaba haciendo señas no era otro que el tabernero.

Yo fui hacia él y me indico que Jorge le había dicho dónde estaba, que fuera a buscarlo y que si quería ver el espectáculo lo acompañase, yo no dije nada y lo seguí como un autómata, solo esperaba que Jorge no le hubiese dicho quién era ya que me moriría de vergüenza, entramos al bar por una puerta lateral que daba a la cocina y desde esta se podía ver perfectamente la mesa de mi madre sin ser visto y casi podía oír lo que decían, el tabernero me indico que me quedase ahí y que no me moviese ni hiciese ruido, y eso hice, me quede clavado observándolo todo, y la verdad que lo que vi me dejo helado, ya que aunque todo parecía normal mi madre tenía las piernas abiertas no llevaba bragas y uno de mis colegas tenía su manaza en la entrepierna y le estaba haciendo un dedo mientras reían, hablaban y seguían bebiendo como si no pasaba nada, el tabernero saco otra jarra más de sangría indicando que a esta invitaba la casa, cosa que vitorearon en la mesa.

No podía ver a los dos hombres que había en el bar, pero al estar más cerca de donde me encontraba podía oír como comentaban lo buena que estaba mi madre y al igual que yo tenían una visión privilegiada de lo que pasaba en esa mesa y por sus comentarios también se habían fijado en lo que estaba pasando debajo de esa mesa.

Estuvieron un buen rato bebiendo y varias fueron las manos que se turnaron en la entrepierna de mi madre mientras esta bebía como si no hubiese un mañana, la bebida parecía hacer su efecto ya que mi madre se la veía desinhibida, despreocupada con una risita nerviosa y bastante caliente producto del manoseo que le estaban dando en su entrepierna.

El tabernero se acercó a la mesa y les dijo que ya era tarde y que tenía que cerrar, entonces los de la mesa protestaron al igual que la pareja de hombres que tampoco se habían marchado, pero Jorge le pregunto que si podía cerrar dejándolos dentro para no molestar a la urbanización, el tabernero con una sonrisa maliciosa le pregunto que si hacia eso el que ganaba, a lo que Jorge se levantó de su silla y colocándose detrás de mi madre, le dijo que no se arrepentiría y cogiendo las tiras del vestidito de mi madre se las retiro dejando a la vista un par de hermosos y duros pechos con dos pezones erectos y amenazantes.

Mi madre se vio sorprendida por el gesto de Jorge y torpemente intento taparse sin dejar de reírse de forma nerviosa, sin mucho éxito ya que Jorge le retiro las manos y acercándose a su oído le dijo algo que lógicamente desde donde estaba no pude oír.

Pareció surtir efecto las palabras de Jorge o quizá el sobeteo ahora más intenso al que era sometida por debajo de la mesa, no lo sé pero el caso es que mi madre se quedó inmóvil, cerró los ojos y bajo un poco su cabeza como signo de resignación mientras permitió a Jorge que cogiera nuevamente ese par de pechos por su base y sopesándolos miro al tabernero y con una sonrisa malévola le pregunto si quería participar en la fiesta o que la fiesta se fuera a otra parte.

Al oír esto el tabernero fue raudo a cerrar las puertas y las luces exteriores, junto dos mesas y puso un mantel, mientras tanto Jorge en un movimiento rápido desnudo a mi madre, sacándole el vestidito por encima de la cabeza dejándola completamente desnuda ante la falta de ropa interior sentada en la silla, simplemente con unos zapatos como única vestimenta.

Hasta ese momento, todo había sido correcto, dentro de una situación normal, con educación pero justo en ese momento Jorge comenzó a vociferar, a ordenar a todos los presentes que se acercasen a la mesa y ayudo a subir a mi madre a la mesa que le habían preparado y le animo a que nos bailase, a lo que ella obedeció de inmediato, allí estaba mi madre encima de una mesa completamente desnuda bailando para 6 hombres borrachos y con una sola cosa en la cabeza y esta no era otra que violentar los agujeros de mi pobre madre.

Aunque viendo cómo se movía no me parecía tan pobre, sus movimientos eran lentos, cadentes y muy sensuales, los hombres se les veían excitados, la animaban y le vitoreaban, todo esto sin dejar de beber, Jorge se acercó a ella y le comenzó a tocar una pierna mientras le decía lo bien que lo hacía, a lo que mi madre comenzó a descender hasta que se quedó a escasos centímetros de Jorge con las piernas completamente abiertas y flexionadas, momento que Jorge aprovecho para darle un morreo de película, mientras Lahcen aprovecho para meterle dos dedos de golpe en el coño de mi madre que al sentirlo casi se cae de la impresión de no ser porque se apoyó en los hombros de ambos machos.

Mi colega no dejaba de masturbar a mi madre mientras comentaba lo mojada que estaba al resto, Jorge se apodero de uno de sus pezones erectos y lo mordisqueaba mientras mi madre gemía con los ojos cerrados, hasta que no pudo más y Jorge bajo a mi madre de la mesa para colocarla justo en medio de esos 6 hombres, los dos desconocidos tenían las pollas fuera del pantalón y se masturbaban de manera frenética mientras el tabernero seguía bebiendo como queriendo alcanzar a sus compañeros en su estado de embriaguez, Youssef fue el primero que se acercó a mi madre y las separo de las fauces de Lahcen y Jorge que no dejaban de masturbar y sobar el cuerpo de mi madre, para comenzar a bailar de manera muy sensual, si se puede llamar a eso baile, ya que más bien era un perreo, en el que el culo de mi madre se frotaba constantemente en la polla para entonces empalmada de Youssef.

Estuvieron un buen rato hasta que Jorge cogió a mi madre por un brazo para separarla de Youssef y la llevo a la mesa, allí la tumbo boca arriba se colocó las piernas de mi madre en su pecho y sin ningún miramiento se la introdujo de un solo golpe en el coño de mi madre, esta al sentirla dio un alarido mitad sorpresa mitad placer, en seguida mis colegas se colocaron cerca de la cabeza de mi madre que al verlos se alternaba las pollas de ambos en su boca mientras los masturbaba frenéticamente, estaba extasiada fuera de sí, mi madre había pasado de ser la dulce y casi angelical ama de casa a una diablesa necesitada de sexo.

Yo no podía más ahí estaba viendo la escena con la polla en la mano, cuando Jorge miro a los tres hombres que estaban en el bar como espectadores y les invito a unirse a la fiesta, a estos no les hizo falta una segunda invitación y quitándose la ropa de forma atropellada, fueron a donde estaba mi madre y comenzaron a sobarla y comerle los pezones como si no hubiese un mañana, fruto de la excitación que tenían, pronto Jorge se corrió en el interior de mi madre y dejo su sitio al tabernero, este tenía una polla de dimensiones considerables, pero sin embargo el coño de mi madre parecía estar muy hambriento ya que con un par de envites ese pedazo de carne desapareció en su interior, para comenzar un ritmo frenético, no tardó mucho en correrse y al igual que Jorge se corrió en su interior, y así hasta que pasaron los 6 hombres que había en esa habitación, todos se follaron a mi madre y todos se corrieron en su interior.

Mi madre se quedó desmadejada encima de la mesa, pero no pasarían ni dos minutos cuando volvieron al ataque.

La fiesta duro hasta bien entrada la madrugada, los 6 disfrutaron en algún momento de todos los agujeros de mi madre, de uno en uno o varios a la vez, parecían no saciarse nunca no tenían fin, ya eran las 7 de la mañana cuando Jorge dio por terminada la fiesta y el estado en que estaba mi madre era más que lamentable, era deplorable, prácticamente exhausta, sin poder abrir los ojos, tenía goterones de semen en todos los rincones de su cuerpo, sus orificios estaban deformados, rezumando esperma.

El tabernero saco una manta vieja y mugrosa y se la echo encima a mi madre, Lahcen la cogió entre sus brazos y la llevo a casa mientras Jorge cogió las ropas de esta, cuando se fueron todos el tabernero vino para indicarme que ya podía salir y marcharme a casa, cuando salí de mi escondite y me disponía a irme, este me comento lo buena que estaba mi madre y lo caliente que era, eso me dejo descolocado, el muy cabron de Jorge le había dicho el parentesco y eso me fastidio bastante, supongo que los excitaba más si cabe el saber que el hijo estaba en la parte trasera observándolo todo, no dije nada y salí del local como si no hubiese oído nada, pero podía sentir como enrojecían por momentos mis mejillas, pero lo que más me mosqueo es que el tabernero se despidió hasta el sábado, ¿Por qué?, que tenía pensado Jorge, el sábado se suponía que mi padre ya estaría por aquí, ¿acaso no pensaba parar?, algo en mi interior me decía que eso no iba a pasar y me preocupaba.

Por fin llego el viernes, día en el que mi padre supuestamente se reuniría con nosotros, y el día en el que supuestamente cesarían las corredurías amorosas de mi madre con sus amantes, aunque pronto descubriría lo equivocado que estaba.

Por la mañana todos nos quedamos en la cama por lo que no hubo movimiento hasta que a eso de las 3 de la tarde comencé a oír ruidos, baje y en la cocina estaba Jorge con una sonrisa de oreja a oreja canturreando canciones mientras estaba afanoso preparando una paellita bastante apetitosa, cuando me vio se volvió y me saludo muy amablemente, y me dijo que anoche posiblemente había sido la mejor noche de su vida y todo gracias a mi madre, yo torcí el gesto no me hacia ninguna gracia, bien es cierto que también disfrute como un voyeur pero no es menos cierto que me fastidiaba que ese trio disfrutase de mi madre y la vejasen de esa manera y ni mucho menos que la compartiesen con el primero que se cruzaban, pero lo peor de todo era que mi madre no se negase, que le pasaba por la cabeza, no conseguía entenderlo, pero aun así quise meter una pullita indicándole que era una pena que esto se acabase, ya que en breves vendría mi padre.

Jorge me miro y con una sonrisa que me desconcertó me contesto que quien me había dicho que esto se acababa, esto no había hecho más que comenzar y el hecho de que este tu padre no hace más que darle un poco más de pimienta al asunto.

La verdad es que no era la contestación que esperaba oír, estaba claro que Jorge controlaba toda la situación y eso me desconcertaba, él lo sentía y me vacilaba, seguramente para disfrutar de la situación, de su venganza.

Sobre las 4 todos estábamos levantados mi madre tenía una carita de cansada que no podía disimular, los chicos estaban radiantes, haciendo planes para el fin de semana que se avecinaba, y la comida ya estaba preparada.

Después de comer, mi madre y yo nos quedamos a recoger y limpiar mientras Jorge y mis colegas se iban a echar un rato, en breves mi padre estaría con nosotros así que el hecho de que se fuesen a dormir la siesta me tranquilizo y aproveche para hablar con mi madre, le pregunte si estaba bien ya que la veía muy cansada, ella me sonrió y me dijo que si, que no me preocupase, yo le pregunte como iban las vacaciones ya que apenas habíamos estado juntos y había pasado mucho tiempo con esos tres.

Ella como siempre me lo conto todo, lo bien que lo había pasado y lo que estaba disfrutando, y lo peor de todo es que no tenía ningún remordimiento, yo no podía creer lo que estaba oyendo, me daba miedo, y le pregunte que pensaba hacer ahora que mi padre llegaba.

Vi como le cambiaba el semblante, y se quedaba pensativa, entonces me miro y me dijo que con mi ayuda mi padre no tenía por qué enterarse de nada, esa respuesta me molesto bastante, no esperaba esa respuesta, y menos de mi madre.

Yo intente hacerle ver el peligro que corría jugando a ese juego, pero ella pareció darle igual, no estaba dispuesta a dejar de jugar a pesar de que pusiera en riesgo su relación.

Quise saber que pasaba sino la ayudaba, o si mi padre se enteraba, ella me miro y muy seria me dijo que ahora mismo no podía pensar en eso, que ya vería que hacer si eso llegaba a suceder.

De verdad, no conseguía entenderla, me daban ganas de abofetearla, iba a protestar cuando sonó el timbre de la puerta, mi padre había llegado, ¡Por fin¡

Fui abrir la puerta y allí estaba mi padre con una maleta de mano y una sonrisa de oreja a oreja, la verdad es que pocas veces me alegre tanto de verlo y lo invite a pasar, entro en la casa y se la enseñe mi madre pareció algo más fría al ver a su marido, pero este no pareció darse cuenta ya que estaba alucinando con la casa.

Después de dejar la maleta en la habitación y ponerse algo de ropa más acorde con la situación y el lugar, bajo a la cocina a estar con su mujer y le pregunto qué tal lo estábamos pasando, mi madre le contestaba pero sin mucha convicción o ilusión, parecía que estuviese molesta, no sabía si por la conversación anterior conmigo o por el hecho de la llegada de su marido, esa actitud de mi madre hacia mi padre me molestaba bastante, no creo que mi pobre y cornudisimo padre se mereciera ese trato por parte de su mujer.

Al poco rato bajaron mis colegas y Jorge, que al ver a mi padre se presentaron y estuvieron hablando de forma distendida, me sorprendió la actitud tan correcta y normal de estos tres con mi padre, no había doble sentido, ni humillación por parte de mis colegas y Jorge hacia mi padre y eso me tranquilizo y me gusto la verdad, era una conversación normal.

Al cabo de un rato fue mi padre quien dijo de ir a la playa que tenía ganas de ver el mar, todos aprobamos la idea y nos fuimos a la habitación a cambiarnos, a los 5 minutos todos estábamos con nuestros bañadores y toallas esperando a que bajaran mis padres, momento que aprovecho Jorge para indicarme que si no quería que mi padre se enterase del pastel más me valía colaborar, un escalofrió recorrió mi espalda estos capullos no pensaban dejarlo pasar, no habían tenido bastante, querían más.

Mientras yo asimilaba esas palabras Jorge dando gritos apremiaba a mis padres a bajar, al poco rato ambos bajaron mi padre con una sonrisa de oreja a oreja se excusaba indicando que ya sabíamos cómo de indecisas y tranquilas eran las mujeres en cuestión de ropa, mi madre bajo detrás de él protestando haciéndole ver que el comentario no le había gustado.

Ya una vez todos juntos nos fuimos para la playa, que estaba a escasos metros de donde nos alojábamos.

En el trayecto vi como mi madre comenzaba a animarse poco a poco, no sé si por el hecho de ir a la playa, por la presencia de mi padre o que tanto mis colegas como Jorge no dejaran de agasajarla y regalarle los oídos, el caso es que conforme nos acercábamos a la playa mi madre estaba cada vez más alegre, más risueña y participativa en las conversaciones.

Una vez en la playa, vimos que estábamos prácticamente solos, era una pasada, había un chiringuito en mitad de la playa apenas una docena de personas, la arena era fina y el sol pegaba a pleno, colocamos las toallas y nos tumbamos, mi madre quedo entre mi padre y Jorge, mientras yo y mis colegas estábamos más distanciados de ella, el hecho de que mi padre estuviese cerca parecía cortar las intenciones de mis colegas o Jorge.

Poco a poco el sol comenzó a hacer mella, y mi padre propuso ir al chiringuito, Jorge secundo la idea pero mi madre prefería aprovechar las horas de sol para broncearse, por lo que Jorge y mi padre se fueron al chiringuito.

Al rato, Lahcen con la excusa de que el sol apretaba le dijo a mi madre si quería que le echase crema para evitar que se quemase a lo que mi madre accedió, no tardo un segundo en sentarse encima y embadurnarle toda la espalda de crema para después extenderla sobre su espalda hombros y brazos de forma suave, deteniéndose en los laterales justo a la altura de sus pechos, mi madre no parecía molestarse, por lo que mi amigo cada vez se entretenía más en esa zona, cada vez tocaba más pecho de forma más descarada, el otro colega que estaba contemplando como yo la escena, me dio un golpe y comento si le acompañaba al agua, yo iba a protestar pero vi como Lahcen me hacia una seña con la cabeza para que me fuera de allí, así pues mi colega y yo nos fuimos al agua, pero no nos alejamos mucho de la orilla, por lo que podíamos ver todo lo que ocurría entre ellos con bastante claridad y nitidez.

Al dejarlos solos mi colega le pidió a mi madre si podía quitarse el  sostén del bikini, está obedientemente y con un movimiento rápido se lo quito y Lahcen siguió echándole crema, cuando estaba en la parte baja de la espalda, sin pedir permiso cogió la braga del bikini y tiro para arriba, lo que provocó que se metiese entre sus cachetes para después comenzar a sobárselos con la excusa de la crema, y terminar por las piernas.

Terminada la parte trasera le indico si podía volverse, mi madre una vez más le obedeció, y este echo la crema sobre los pechos, y aprovecho para sobarlos a gusto, bajo a su vientre y después a sus piernas, varias veces paso sus manos por el interior de los muslos seguramente buscando el contacto con su coño.

Tras embadurnarla bien de crema se colocó a su lado, y comenzó a sobarla sin ningún disimulo, yo mire hacia el chiringuito y desde allí mi padre no podría ver nada, cuando volví a mirar hacia las toallas, mi madre ya tenía la polla de mi amigo entre sus manos, y el sobaba uno de sus pechos y con la otra mano frotaba el clítoris de mi madre.

Estuvieron un rato sobándose hasta que algo le dijo mi amigo al oído y vi como mi madre se adecento el bikini, se incorporó de su toalla y se fue al agua con mi amigo detrás de ella y con un empalme evidente.

En cuanto el agua les cubrió por encima de la cintura se fundieron en un abrazo, mi madre paso sus piernas por la cintura de este y al poco rato vi cómo se movían y un chapoteo los delataba, estaban follando dentro del agua, y no les importaba que yo estuviese cerca, es más mi madre me miraba fijamente y me sonreía, tenía una mirada llena de lujuria y deseo, Youssef al verlo me sonrió y fue hacia donde estaban ellos, se colocó detrás de mi madre y con sus dos manazas cogía los pechos de mi madre y los amasaba.

No me lo podía creer, mi madre ya no disimulaba directamente se estaba follando a mis colegas sin importarle el que estuviera yo presente, o su marido pudiese pillarles, es más parecía disfrutarlo, su mirada estaba encendida.

Cuando Youssef atino a introducirle su polla, pode ver como mi madre emitía un gemido y le pedía que fuese despacio, estaba entre dos machos jóvenes y con buenas herramientas que la llevaban en volandas y le taladraban sus dos orificios a su antojo.

Estuvieron un buen rato, y cambiaron sus posiciones varias veces mientras yo o cualquiera que se acercase un poco podía ver lo que estaba pasando, y cerca estuvieron de ser pillados por mi padre, ya que ni  5 minutos pasaron desde que salimos del agua cuando apareció mi padre con un par de cervezas, una para mi madre y otra para mí y lo mismo Jorge para mis colegas.

Mi padre se le veía contento, animado, como cualquier persona que está saturada de trabajo y se encuentra en su primer día de playa, la sonrisa no se le borraba de la cara, allí estábamos todos reunidos y disfrutando de unas cervezas, cuando mis amigos comenzaron a comprometer a mi madre, con comentarios con doble sentido y jocosos que solo nosotros entendíamos pero que mi padre pensaba eran inocentes o no comprendía, lo que provocaba que tanto a mi padre como a mí nos humillasen mientras incomodaban a mi madre e incluso la excitaban sabiendo el morbo de la situación, el de estar el marido e hijo presentes mientras recordaban lo de estos días, estaba claro que mi padre vivía en la ignorancia y de verdad en ese mismo momento lo envidiaba y desearía estar en su situación ya que eso no me estaba gustando nada, pero poco o nada podía hacer y estaba claro que ese juego les excitaba y animaba.

El calor seguía apretando y ahora fueron Jorge y mi padre los que se bañaron, uno de mis colegas propuso dar un paseo, Jorge mientras se secaba dijo que iba y mi madre también se apuntó, sin embargo mi padre no le apetecía estaba cansado por el viaje, yo les dije que me quedaba con mi padre, Jorge comento que en uno de los extremos había unas vistas impresionantes y un pequeño parque que merecían la pena, y hacia allí fueron.

Los vi alejarse, y conforme los miraba tenía la sensación de que ese paseo nada bueno traería, me parecía una burda excusa para disfrutar nuevamente de mi madre, por lo que me excuse con mi padre y le dije que había cambiado de idea y me iba a dar una vuelta, que sentía curiosidad por ese parque del que hablaba Jorge y sin darle ocasión a que me contestase me marche.

Mantuve una distancia prudencial, en seguida apareció la arboleda y justo en medio se podía ver un claro, y es ahí donde se encontraban mis colegas y Jorge con mi madre, aproveche la vegetación que había para acercarme lateralmente hasta que pude ver con claridad lo que ocurría, y ahí estaba mi madre, en el centro de sus tres machos, arrodillada y alternándose para darles placer, la escena era súper morbosa, mi madre masturbaba y chupaba tres pollas de forma golosa, ansiosa, no podía entender cómo se podía comportar así teniendo a su marido tan cerca y no solo con un hombre sino con varios, esto estaba degenerando y tenía muy claro que mi madre se estaba dejando llevar por sus emociones y para nada tenía esta situación controlada.

Mi madre sonreía como una estúpida mientras alternaba en su boca las pollas de todos ellos, estaba claro que aparte de disfrutar de la situación se esforzaba por agradarlos, su cuerpo estaba cubierto de manos, pero pronto se cansaron querían más, y mi madre pareció convertirse en un muñeco de trapo en manos de aquellos hombres, bien organizados y dirigidos por Jorge, utilizaban el cuerpo de mi madre a su antojo, sin limitaciones y nuevamente mi madre tuvo una ración de sexo que la dejo exhausta, tras un buen rato donde todos su orificios fueron cubiertos por potentes pollas, hasta que estas quedaron saciadas.

Momento en el que el cuerpo de mi madre dejo de ser interesante para ellos y la dejaron tirada en el suelo como una colilla, sucia y agotada, mientras ellos se vestían y comentaban la suerte que tenían de tener una cerda así y todo lo que pensaban hacerle, ella se acercó a la orilla del mar y se limpió antes de volver con mi padre.

Yo al ver que el show había terminado salí raudo de mi escondite para llegar antes que ellos a donde estaba mi padre, no pasaron ni 10 minutos cuando mis colegas y Jorge venían hacia nosotros.

Pasado un rato en la que mi madre aprovecho para darse una cabezadita y descansar mientras se tostaba al sol y Jorge se fue otra vez al chiringuito con mi padre mientras mis colegas se daban un baño, recogimos las cosas y decidimos que al ser sábado nos iríamos a comer por ahí, así que con todos los bártulos de la playa nos dirigimos a la zona de chiringuitos y estuvimos mirando los menús para ver cual nos gustaba más, no lo teníamos claro y parecía no haber consenso, estaba claro que éramos muchos, así que Jorge nos comentó que conocía un restaurante muy bueno y que no estaba lejos de allí y estaríamos más tranquilos y tendríamos más variedad, así pues nos dirigimos al restaurante.

Cuando llegamos mire por encima la carta y pude observar que era bastante caro, no había muchos comensales seguramente por lo apartado del sitio y el precio, cuando entramos Jorge pregunto por una persona al camarero, este apareció al rato y se fundió en un abrazo con Jorge, Jorge le dijo que venía con unos amigos y aunque no iban vestidos para la ocasión querían saber si los atendería, el dueño con una sonrisa le indico que siempre era bien venido él y sus amigos, y diciendo esto nos observó disimuladamente a todos hasta que llego a mi madre con la cual se entretuvo un poco más, la estaba desnudando con la mirada, incluso hizo un comentario de lo hermosa que era, mi madre en compensación le regalo la mejor de las sonrisas al cumplido.

Nos llevó personalmente a un reservado al final de la sala para que estuviésemos cómodos, mientras seguía hablando con Jorge de cosas triviales, una vez sentados nos preguntó si queríamos algo en concreto o aceptábamos un menú degustación echo por el que era una delicia.

Nos lo vendió tan bien que todos aceptamos el menú degustación, por lo que salió raudo hacia la cocina, una vez allí Jorge nos comenzó a contar lo buen cocinero que era y que nos íbamos a chupar los dedos.

Mi madre miraba ensimismada a Jorge, no lo podía evitar, entonces vino un camarero y nos preguntó que queríamos beber, Jorge tomo la iniciativa y pidió un par de botellas de vino tinto.

Una vez el vino corrió por la mesa, Jorge se excusó con nosotros y se marchó, yo pensé que al baño, pero no, se marchó para hablar con el dueño, los podía ver desde el hueco de la cocina y vi como el dueño escuchaba atentamente y varias veces miraba hacia nuestro reservado, eso me hizo dudar, no sé porque pero había algo en su mirada que me daba respeto.

Al poco rato Jorge volvió a la mesa, y el camarero nos trajo otras dos botellas más de vino, mis colegas y mi padre comenzaron a beber comentando lo rico que estaba ese vino, Jorge casi no bebía y a mí no me apetecía, mi madre se tomó una copita o dos.

Antes de que llegara el primer plato se podía ver como mis colegas y mi padre estaban más animados que el resto, el menú estuvo de primera,  todo delicioso y las botellas de vino corrieron por la mesa como si fuese agua, para cuando terminamos de comer todos a excepción de Jorge y yo quien más quien menos iba contento, pero mi padre se llevaba la palma no había dejado de beber y al ser una persona que no bebía habitualmente se le veía perjudicado, igual que mi madre que al no beber habitualmente también se la notaba alegre pero nada que ver con la situación de mi padre, la verdad es que estaba dando un poco la nota y eso me fastidiaba, varias veces le llame la atención para que bajara la voz pero mis colegas que también estaban animados me protestaban que no tratase así a mi padre que tuviese más educación, eso era el colmo.

Tras los cafés volvió aparecer el dueño y nos preguntó si queríamos algún chupito, mis colegas le pidieron un orujo de hierbas, este saco una botella fría y se sentó con nosotros entre mi madre y Jorge, en la mesa había dos grupos mis colegas y mi padre y Jorge el dueño y mi madre.

El caso es que mi padre y mis colegas se pimplaron la botella de orujo, mi padre ahora paso de la alegría al letargo, se le veía adormilado, los ojos se le cerraban sus mofletes estaban colorados y se le trababa la lengua, mis colegas no iban mejor, mientras tanto en el otro grupo hablaban de esta u otra comida, mi madre estaba muy atenta a los comentarios del cocinero que queriendo o sin querer posaba su mano en el muslo desnudo de mi madre, que parecía no importarle ya que no hacía nada por impedírselo.

El dueño comento si querían para terminar algún cubata y mis colegas vitorearon la idea, entonces cogiendo la mano de mi madre de forma educada la invito a ir a la cocina para enseñarle algún truco para sus platos mientras los chicos tomaban un cubata, y mirando a mi padre le indico siempre que al señor le parezca bien, mi padre dudo que ni siquiera su hubiese enterado de lo que le decían en ese momento fruto de la borrachera que llevaba, así pues Jorge se levantó y los acompaño.

Saliendo del reservado el dueño llamo a un camarero y le ordeno que fuera a cogerles la nota de los cubatas y que les pusiera todo lo que pidiesen, y se dirigieron a la cocina, que para esas horas ya estaba cerrada y limpia, yo me levante y fui hacia la cocina, pero no entre me quede en el pasillo, podía oír como el dueño le mostraba algún producto, y le comentaba a mi madre lo fresco que estaba, yo asome un poco la cabeza por miedo a ser descubierto, vi que eran ostras, mi madre se la veía interesada y comentaba con el dueño como hacerlas, entonces Jorge cogiendo por sorpresa a mi madre le levanto el pareo  por encima de la cintura, por lo que esta quedo completamente desnuda de cintura para abajo justo delante del dueño, mientras Jorge de forma graciosa comentaba que eso sí que estaba fresco y en su jugo, el dueño se quedó de piedra, la cara se le desdibujo y clavo su mirada en esa hermosa concha, mientras mi madre con mucha vergüenza se bajó rápidamente el pareo y llamo la atención a Jorge, este le dijo que no se hiciera la estrecha que esa almeja estaba ya babeando y en su punto para comer, y mientras decía esto Jorge, el amigo comento que por él no había problema ya que no se había molestado, al revés le habían alegrado el ojillo y dicho esto todos se rieron.

Mi madre seguía roja como un tomate y les indico que no fueran tontos que su marido estaba cerca, por lo que el dueño con una sonrisa de complicidad siguió enseñándole la cocina y los productos, retomando como hacerlos, como si no hubiese pasado nada.

Cuando llegaron a la zona donde había varias barquillas mi madre se paró y cogió una pera, y le pregunto dónde compraba la fruta que tenía muy buena pinta, entonces nuevamente Jorge cogió el pareo y lo deslizo hacia abajo dejando sus pechos al descubierto, y mientras cogía sus pechos, los sopesaba y mirando a su amigo le comento que esto si son dos buenas peras y no la mierda que tienes en las barquillas, mi madre dio un pequeño grito de sorpresa y le indico a Jorge que parase que ya estaba bien, pero en ese momento su amigo fue directamente como hipnotizado por esos pechos y cogiendo un pezón ya duro y amenazante, se lo retorció a la vez que le indico a mi madre que Jorge tenía razón, dos peras así no se ven todos los días, y más naturales.

Mi madre se quedó paralizada, sin habla, no se esperaba esa reacción por parte del dueño, Jorge desde atrás le quito el pareo completamente a mi madre dejándola desnuda delante de su amigo, y le pregunto qué le parecía, entonces su amigo tomo el otro pezón igual de duro y se lo metió en su boca, mientras con la otra seguía retorciendo el pezón de mi madre, que emitía pequeños gemidos de placer, y al segundo le respondió que de lo mejor que he probado nunca, esta mujer esta buenísima es el mejor plato que he catado.

Mi madre estaba en medio de ese par de cabrones completamente inmóvil, dejándose hacer, no reaccionaba, incluso pude ver como abría un poco más sus piernas para poder sentir las rudas manos del amigo de Jorge, no me lo podía creer mi madre estaba siendo ofrecida como un pedazo de carne y no parecía importarle lo mas mínimo, esto no podía seguir así, entonces Jorge colocándole una mano en su espalda la hizo agacharse, quedando la polla de su amigo a escasos centímetros de la cara de esta y de forma graciosa le indico a mi madre que ya que no había tomado postre en la comida a tiempo estaba de comerse un plátano… o dos.

Mientras ambos reían la sugerencia, mi madre sin embargo ya estaba fuera de sí, y colocando sus dos manitas en la cintura del amigo, le bajo  los pantalones hasta las rodillas dejando en libertad un miembro duro y gordo aunque no muy largo que casi golpeo en la cara de esta al deslizarle los pantalones, para comenzar a devorarlo con avidez.

Jorge de espaldas a ella no perdía detalle mientras le introducía un par de dedos en su coño y otro dedo en su culo escupiendo a modo de lubricante, su amigo al verlo pareció envalentonarse y le comento a Jorge que la preparase bien que en breves la penetraría, a lo que Jorge le respondió que no se preocupase que esto parecía un horno de lo caliente que estaba.

El amigo al oír esto, cogió a mi madre por los hombros y la volteo para ponerla frente a la pared y mientras con una mano la cogía de la nuca para que no se moviese con la otra la obligaba a abrir bien las piernas y colocar el culo en pompa, cuando lo consiguió se cogió la polla y la apunto directamente a la entrada de mi madre y dando un fuerte golpe de cadera se la introdujo de un solo golpe en su interior, Jorge no dejaba de humillar a mi madre con sus comentarios y animaba a su amigo a que se la follase más fuerte, este cada vez estaba más excitado y animado y haciendo caso a su amigo daba embestidas más rápidas y más fuertes provocando que mi madre respirase de forma entrecortada, la imagen era grotesca mi madre estaba apoyada contra la pared mientras un hombre la cogía de sus caderas y le penetraba de forma violenta, haciendo que el cuerpo de esta quedase emparedado entre la pared y el cuerpo de este, al cabo de un rato y con la espalda completamente perlada en sudor el amigo de Jorge se separó un poco de mi madre y cogiéndola del pelo tiro hacia el provocando que mi madre arquease la espalda y su culo quedase un poco más en pompa para facilitarle la penetración, cuando estuvo a punto de correrse se colocó en el oído de mi madre y le aviso que se corría pero sin cesar en su ritmo se corrió en su interior al tiempo que bufaba como un toro.

Cuando me volví pude ver como al igual que yo el único camarero que quedaba en el restaurante también estaba observando desde el hueco de la cocina lo que había pasado, y por un momento cruzamos nuestras miradas para marcharnos cada uno por su lado.

Cuando fui al reservado mi padre estaba completamente dormido, y mis colegas no iban mucho mejor, al cabo de un par de minutos mi madre apareció, toda sofocada y Jorge y su amigo tenían una cara de felicidad plena, y se miraban de forma cómplice.

Al poco rato y viendo la hora que era decidimos marcharnos para casa, no sin antes saber que la comida había sido pagada por mi madre, cosa graciosa ya que no llevaba cartera, por lo que os podéis imaginar como lo abono.

Costo despertar a mi padre y más hacerlo andar para que fuese a casa, pero finalmente logramos llegar, todos por un motivo u otro estábamos cansados, por lo que Jorge nos dijo de tumbarnos un rato ducharnos e ir a la fiesta que hacían todos los sábados en la urbanización, y así hicimos, mi padre no espero ni a que Jorge lo propusiera ya que según llego a casa se fue a la habitación donde se quedó frito vestido encima de la cama.

Yo me quede un rato en el cuarto de estar viendo lo que había en la televisión, aunque estaba cansado mis pensamientos no me dejaban dormir, pero cuando apague la televisión y decidí subirme a la habitación, pude ver como uno de mis colegas salía de la habitación y se dirigía a la de mis padres, toco la puerta pero nadie contesto, vi como abría la puerta suavemente y se colaba en la habitación de forma sigilosa, yo estaba aluciando que hacia mi amigo entrando en la habitación de mis padres, y mientras pensaba esto y miles de ideas pasaban por mi cabeza y ninguna buena,  subí y fui con mucho sigilo a la puerta de la habitación de mis padres, no se había molestado ni en cerrar la puerta por lo que me asome con cuidado y lo que vi me dejo helado, mi padre estaba roncando encima de la cama, mientras estaban sobando a su mujer en la misma cama a escasos centímetros, no me lo podía creer, oía como mi madre le pedía discreción y cuidado, mientras mi colega se reía y le decía que el cornudo no se enteraba de nada que estaba borracho, y él tenía ganas de follarla, que estaba muy guapa y cosas así, el caso es que cada vez mi madre ofrecía menos resistencia a sus tocamientos y cada vez mi colega iba a más.

Entonces mi colega le dijo que se pusiera de lado, mirando a su marido y si despertaba no lo vería ya que su cuerpo serviría de escondite, ella obedeció, mi colega la cogió de la cintura y coloco su enorme pollon negro en la entrada de su coño, esta al sentirlo pareció ir a protestar pero con un movimiento rápido se la introdujo y para evitar que chillara le tapó la boca y la atrajo hacia él, la imagen era dantesca, surrealista, mi madre estaba siendo follada en la misma cama que yacía su marido con un colega negro y fruto de sus envites provocaba que hasta mi padre se moviera al vaivén de su follada.

Por un segundo mi padre dejo de roncar, lo que hizo que estos parasen en su frenética actividad, quedándose inmóviles observando la reacción de mi padre, la escena era cuanto menos curiosa ahí estaba mi madre ensartada por un pollon negro completamente inmóviles a la espera de que hacia su marido.

Al cabo de un par de segundos que se nos hicieron eternos a todos, mi madre se colocó encima de su negro y  haciéndole señas mientras se la introducía dulcemente para que saliesen de la cama y continuar con lo que estaban haciendo.

Al levantarse de la cama mi amigo cogió a mi madre y la volteo hacia su marido y la penetro desde atrás, debido a la fuerza que este imprimía no le quedó otra a mi madre que apoyarse nuevamente en la cama lo que provocaba que toda la cama se moviese incluido mi padre, mientras su mujer era penetrada de forma violenta por un negro cabron que clavaba su mirada en mi padre para comprobar que no se despertaba.

Al poco rato este con dos envites secos y fuertes se corrió en el interior de mi madre, y tras unos segundos en los que se quedaron inmóviles disfrutando del momento, aproveche para irme a mi habitación y no ser pillado infraganti.

Sobre las 21 Jorge fue habitación por habitación para despertar a todos, había que prepararse para la fiesta, después de las duchas de rigor preparamos entre todos un tentempié para cenar y cada uno se marchó a su habitación para vestirse y prepararse para la fiesta.

Cuando estaba ya preparado y apunto de bajar al salón para esperar a los demás, Jorge seguido de mis colegas entraron en mi habitación, yo les pregunte que querían a lo que Jorge me dijo que hablar conmigo, yo no sabía que querían ahora así que de mala gana le conteste que de que querían hablar, Jorge sin rodeos me indico lo que querían y claro como era de suponer iba sobre  mi madre, Jorge me comento que era la última noche en la que estarían con mi madre pero necesitaban mi ayuda, yo fui a protestar ya que no sabía en qué más podía ayudarlos, entonces uno de mis colegas me dijo que lo único que tenía que hacer era controlar a mi padre cuando ellos no estuvieran sino quería que descubriese todo el pastel, Jorge continuo sin dejarme intervenir explicándome todo lo que tenían en mente para llevar a cabo su plan e indicándome que había varios amigos que entretendrían a mi padre, pero que si llegado el caso necesitaban ayuda yo tendría que intervenir para entretenerlo y que no se enterase de nada y tras explicarme todo esto y sin tiempo para que pudiese procesarlo, de forma condescendiente, Jorge me dio las gracias por todo lo que estaba haciendo por ellos y tras esto se marcharon de mi habitación para bajar al cuarto de estar a esperar a que mi madre bajase.

Yo me quede un segundo en mi habitación repasando todo lo que me acababan de decir, estaba descolocado, ósea no solo pensaban aprovecharse nuevamente de mi madre sino que según Jorge le habían comentado a unos amigos para entretener a mi padre, ¿Cuántos eran esos amigos? ¿Cómo entretendrían a mi padre? ¿Sabrían el motivo por el que lo entretendrían? Miles de dudas recorrían mi cabeza, que tenían pensado esos cabrones para esta noche.

Me fastidiaba sobre manera la forma de tratarme que tenía Jorge me hacía parecer estúpido, además me pedían una ayuda que últimamente ya no necesitaban, sinceramente creo que me lo contaban por el morbo y para fastidiarme, que ganas tenia de acabar estas vacaciones, ¡o no¡ ya que conforme le daba vueltas a todo nuevamente estaba empalmado y emocionado por ver como se desarrollaban los acontecimientos, estaba claro que me gustaba ver a mi madre usada y violentada por varios hombres, la situación y el morbo me arrollaban no lo podía controlar y acababa siempre accediendo a ayudar a que eso pasara, me jodia que ellos lo sabían y lo aprovechaban para su beneficio, pero después una sensación de culpabilidad y rabia me ahogaba al ver o pensar que mi pobre padre era el principal perjudicado y la forma en que lo estaban humillando, también me molestaba el hecho de que dos de mis colegas estuvieran en el ajo ya que eso hacia correr más riesgos de los necesarios.

Mientras pensaba en todo eso salí de mi habitación y baje al cuarto de estar donde vi nuevamente a Jorge y mis colegas, estos estaban emocionados, excitados comentando los detalles e imaginando como seria todo.

Cuando bajo mi padre, lógicamente cambiaron el tema y estuvieron con mi padre, hasta que al poco rato bajo mi madre, su puesta en escena nos dejó a todos sin habla, tenía muy claro que mi madre estaba desatada, se estaba gustando y sabía que gustaba, para la ocasión eligió una blusa blanca de tirantes con una minifalda negra ajustada que no le llegaba ni a medio muslo, con unos zapatos negros de punta y unos taconazos que a su lado todos parecíamos diminutos, no sé cómo podía mantener el equilibrio pero el caso es que nos dejó hipnotizados, verla bajar con esa elegancia, agarrándose la mini para que no se le subiese y nos enseñase más de la cuenta mientras debajo de la blusa esos hermosos y generosos pechos bailaban libres sin ataduras.

Una vez estuvo con todos nosotros Jorge le ofreció su brazo mientras mis colegas la vitoreaban y le decían a mi padre la suerte que tenia de tener una mujer tan hermosa.

A mi padre se le veía orgulloso, no había duda de que le gustaba presumir de mujer, al igual que mi madre que agarrada al fuerte brazo de Jorge no dejaba de sonreír cada halago que recibía y se la veía contenta e incluso nerviosa.

Serían las 23.30 h de la noche cuando llegamos a la fiesta, todo estaba muy bien decorado, lleno de luz y de color, y con toda la urbanización en dicha fiesta, el sitio escogido era la enorme piscina que había en medio de la urbanización había varias barras de bebida y comida, todo gratis, por lo que la gente se arremolinaba en torno de las barras, mientras un DJ ponía música variada pero animada para hacer la velada más llevadera.

Nos acercamos a una de las barras y pedimos algo de beber, mi padre comento que esta noche no quería beber tanto ya que aún le dolía un poco la cabeza de esta tarde, a lo que mis colegas riéndose le dijeron que ellos también estaban jodidos pero que lo habían pasado muy bien.

Por lo que se pillaron unas cervezas, mi madre y Jorge se cogieron un vino blanco, dimos una vuelta para ver toda la fiesta, mis colegas iban con mi padre, mientras Jorge y mi madre se quedaban poco a poco algo más rezagados hablando de sus cosas, yo quede entre ambos grupos y no podía oírlos pero vi como mi madre se reía varias veces y ambos se miraban fijamente a los ojos de manera intensa, saltaban chispas, sin importarles quien estuviera, podía entender a Jorge, a fin de cuentas el no hacia ningún mal y nada tenía que perder, pero mi madre, con su marido e hijo a escasos metros, a que estaba jugando.

Estuvimos un buen rato, paseando tranquilamente, hablando de cosas triviales y bebiendo, sobre todo bebiendo, al parecer mi padre ya había olvidado el dolor de cabeza y ahora estaba con mis colegas bebiendo unos cubatas, mientras Jorge y mi madre continuaban en su mundo, y no fueron pocas las veces que vi como con disimulo Jorge aprovechaba la más mínima ocasión para sobarle el culo a mi madre, rozarle un pecho de forma fortuita, parecían un par de tortolitos, lo que no entendía era como mi padre no se daba cuenta.

Poco a poco la gente, y más los que tenían hijos pequeños fueron marchándose a casa, ya eran más de la 1.30h de la mañana, y el único sitio donde se veía algo de gente era en la zona del DJ, que seguía poniendo música, no habría más de una veintena de personas y todo hombres, la única mujer que quedaba de la fiesta era mi madre.

Nos acercamos a la barra más próxima y la única que seguía en funcionamiento, podía ver y sentir como todos miraban a mi madre, era un bocado muy apetecible, la estaban desnudando con la mirada, y mi madre a pesar de los vinos que llevaba se sentía observada, era el centro de atención, y eso le gustaba, la estaba excitando.

Por primera vez en toda la noche vi a los dos amigos de Jorge que estaban en el bar y al tabernero, no sé porque pero en ese momento tuve la sensación de que el hecho de que el otro día esos dos se encontrasen en el bar no fue fruto de la casualidad sino de un plan muy bien organizado por Jorge, el caso es que al vernos tanto el tabernero como los dos amigos vinieron a nuestro encuentro, mis colegas presentaron a mi padre a los amigos de Jorge y al tabernero, entonces este último comenzó a hablar con mi padre como si fueran amigos de toda la vida, mientras bebían un cubata, mi padre ya para ese momento se le veía muy animado.

Mientras tanto mi madre le dijo a Jorge que se iba a bailar un rato y este le acompaño, hizo unas señas con la cabeza tanto a sus amigos como a mis colegas para que fueran con él, mi madre iba toda emocionada y con ganas de bailar por delante, mientras una manada de lobos la seguía a escasos centímetros.

Mi madre comenzó a bailar, estaba desinhibida, el alcohol también parecía hacerle mella, pero debido a esos taconazos sus movimientos eran limitados, aun así movía las caderas de una forma muy sensual.

El caso es que Jorge, sin que mi madre lo viera con disimulo y a base de señas, organizo todo para que mis colegas se colocasen detrás de el a modo de pantalla, para que desde la barra, sitio donde estaba mi padre no pudiese ver nada, mientras uno de sus colegas se situaba a un lado y el otro colega al otro lado, el circulo estaba cerrado y la presa había caído en la trampa, sin que esta se diese cuenta de nada, la música poco o nada importaba, solo había un objetivo y ese era mi madre.

Vi cómo una vez que todos hacían lo que ordenaba Jorge, este se acercó desde atrás a mi emocionada madre y colocándole las manos suavemente en sus caderas acompaño sus movimientos, cuando mi madre sintió esas manos miro hacia atrás para ver quién era y al ver que era Jorge, se dejó hacer mientras ella levantaba sus manos y movía la cabeza.

Jorge aprovechaba para colocar su paquete en el culo de mi madre, que al sentirlo se echó un poco para atrás para sentirlo mejor y buscar ese roce, con sus manos levanto sutilmente la falda de mi madre lo justo para poder ver todos los que estábamos en ese círculo que no llevaba ropa interior, todos estábamos pendientes e incluso algún que otro hombre  que estaba en la improvisada pista de baile se dio cuenta de lo que estaba pasando.

Allí estaba mi madre en medio de una jauría de lobos, sin inmutarse, bailando para ellos y excitando a todo el personal, la temperatura del lugar subía por momentos y no tenía pinta de que fuera a descender.

Jorge la volteo y le comió la boca mientras le levantaba la falda hasta su cintura y dejaba ese duro y hermoso culo al aire para que cualquiera pudiese disfrutar de las vistas, cualquiera menos mi padre que estaba en la barra con el tabernero tomando chupitos de whisky.

El espectáculo era asombroso, yo estaba completamente empalmado, entonces Lahcen le hizo una seña a Jorge para fueran hacia él, Jorge poco a poco coloco a mi madre entre él  y mi colega, ella al sentir la polla de Lahcen en su culo intento girarse pero Jorge se lo impidió comiéndole la boca con pasión, mi colega se sacó la polla y no sin dificultades se la inserto en el coño de mi madre de un fuerte golpe de cadera, gracias al beso que Jorge le estaba dando pudo amortiguar el grito que esta dio al sentir la intrusión, yo no daba crédito a lo que estaba viendo, ¿se la iban a follar ahí mismo?

Mi otro colega aprovecho para coger uno de los pechos de mi madre y pellizcarlo, mientras un amigo de Jorge le cogía el otro pecho, pude ver como algún hombre al darse cuenta de lo que estaba pasando lo comentaba con otros hombres e incluso algún móvil salió y comenzaron a grabarlo y sacar fotos.

Yo iba a protestar cuando se me adelanto Jorge e hizo que mantuvieran la compostura y comenzó a organizar a los allí presentes, fue ahí cuando mi madre y yo cruzamos nuestras miradas, mientras yo estaba muerto de miedo porque mi padre se enterase, sin dar crédito a lo que estaba viendo y a la reacción de mi madre, pude ver y sentir el deseo en sus ojos, estaba superada y para nada quería parar eso, es más lo deseaba con todas sus fuerzas, al darse cuenta se ruborizo y aparto la mirada.

Entonces Jorge cogió a mi madre por el brazo y tiro de ella sin importarle que mi padre los viera, haciendo que se trastabillase ante la dificultad de seguirle el ritmo por lo taconazos que llevaba, prácticamente la llevaba a rastras hasta la zona de los baños, una zona bastante retirada de miradas curiosas y protegido por una pequeña arboleda, sus amigos y los míos fueron detrás, y varios hombres que habían visto el espectáculo también iban detrás de ellos a una distancia prudencial.

El tabernero al verlo vino hacia mí y con una sonrisa maliciosa me dijo que él ya había terminado con su cometido que ahora me tocaba a mi cuidar a mi papaíto mientras él se cobraba los servicios prestados, y tras esto sin darme tiempo a responder o reaccionar se marchó en la misma dirección que los demás, estaba claro como pretendía cobrarse sus servicios y seguro que los cobraría.

No me lo podía creer en un segundo me vi yo solo en tierra de nadie observando como mi madre iba directa al matadero, fue entonces cuando mire hacia donde estaba mi padre y este estaba devolviendo en la esquina de la barra que por cierto ya estaban recogiendo, no parecía haberse enterado de nada, cosa que agradecí.

Fui hacia mi padre, lo lleve al banco más cercano y le pregunte qué tal estaba, el casi no podía ni hablar tan solo balbuceaba palabras ininteligibles, estaba borracho como una cuba  con los ojos entrecerrados y al segundo se quedó frito.

Yo solo no podía con él, vaya día llevaba no recordaba haberlo visto beber tanto como ese día, pobre ignorante había caído en la trampa de esos manipuladores.

Este era mi momento, el que me había comentado Jorge, tenía que quedarme con él para que no se enterase de nada y llevármelo a casa, pero tras lo visto no podía irme, tenía un nudo en la garganta de saber que mi madre estaba con todos esos hombres, sabía lo que iba a pasar en esa arboleda y necesitaba verlo, ansiaba estar allí, estaba excitadísimo pensando las cosas que estaría haciendo mi madre con esa gente, ¿Cómo podía pensar eso? Era mi madre y mi padre necesitaba mi ayuda, y estaba pensando en dejarlo ahí.

Le di un tortazo a mi padre para que se despertara pero este casi no reacciono, el DJ al ver que casi no quedaba nadie dio por finalizada la sesión y comenzó a recoger sus bártulos.

Yo estaba en una encrucijada, por un lado me sentía mal por mi padre, no quería dejarlo en ese estado y en la intemperie, pero tampoco podía yo solo con él, pero por otro lado no podía dejar de pensar en mi madre, en lo que estaría pasando, necesitaba saberlo.

Cuando uno de los camareros paso cerca de mí le pedí que me ayudara a llevar a mi padre, ya que no podía con él, este a regañadientes accedió a ayudarme y entre los dos lo llevamos al chalet, una vez dentro lo dejamos en el sofá, y tras despedirme y darle las gracias al chaval, espere a que se alejara de la casa y salí como alma que la lleva el diablo hacia donde se suponía que estaría mi madre.

No tarde mucho en llegar a la zona de los baños pero allí no había nadie, sin embargo pude oír algún ruido en la arboleda de al lado, me metí siguiendo los ruidos y a escasos metros los vi, y lo que vi me dejo helado,  era una orgia en toda regla allí había bastante gente ya que no solo estaban Jorge sus colegas y mis colegas había seis o siete hombres más que no conocía pero intuía que eran los que se habían enterado de lo que había pasado en la zona de baile.

Me refugie en unos setos para no ser visto y poder verlo todo con claridad, hay estaba mi madre con la falda subida hasta la cintura mientras un colega de Jorge la penetraba con rabia para acabar corriéndose en su interior, mi madre estaba apoya da en un árbol para evitar caerse fruto de los envites de este, mientras el resto a una distancia prudencial observaban lo que estaba pasando y vitoreaban al corneador de mi padre.

Ya me dejo helado ver tanta gente pero lo que no me esperaba ni mucho menos era presenciar lo que iba a pasar, ya que mientras el tabernero iba directo a donde estaba mi madre para ocupar el puesto que dejaba el que se acababa de correr, Jorge se acercó a la zona de los mirones y les dijo que por 50 € se la podían follar, no daba crédito a lo que acababa de oír, maldije para mis adentros a Jorge, el muy cabron estaba ofreciendo los servicios de mi madre a cambio de una compensación económica, como si mi madre fuese una furcia una vulgar prostituta.

Los hombres se miraban unos a otros, estaban estupefactos, y parecían valorar la proposición de Jorge, este al ver sus dudas les insistió indicándoles que no era profesional que era la mujer de un colega y que pocas veces tendrían la ocasión de follarse a una hembra tan buena y rica como esa.

Yo estaba alucinado estaba ofreciendo a mi madre como un trozo de carne, mire hacia donde estaba ella, pero claro dudo que mi madre estuviera oyendo lo que Jorge les ofrecía a esos hombres o si lo oyó no le prestó atención ya que ahora estaba de rodillas mientras el tabernero se follaba literalmente su boca cogiéndole la cabeza y presionándola contra su pelvis, y cuando la soltaba un poco esta aprovechaba a tomar un poco de aire, mientras mis colegas no dejaban de echarle fotos, en alguna de estas el tabernero posaba para la foto, todo esto era surrealista, no me lo podía creer, no daba crédito a la situación y no podía entender que mi madre accediese a semejante humillación y vejación y mucho menos que lo estuviese disfrutando.

En ese momento uno de los mirones pregunto a Jorge si podría encularla, a lo que Jorge le indico que no había problema previo pago de 100 €, por ese dinero podrían hacerlo por el orificio que quisieran las veces que quisieran y uno de mis colegas se acercó y les dijo que si le daban su teléfono tendrían un suvenir inolvidable.

Esto pareció animar al personal 4 de los mirones decidieron pagar y tras esto comenzaron a desnudarse, los otros tres no se animaron pero se quedaron allí viéndolo todo mientras se masturbaban.

Así pues cuando el tabernero se corrió en la boca de mi madre, le provoco una arcada, ya que la cogió desprevenida, provocándole que tosiera y se atragantara, comenzó a escupir y a limpiarse las lágrimas que hacían que se le corriese el rímel, pero poco tiempo tuvo para adecentarse ya que en breves esos cuatro maromos se acercaron a mi madre y la manejaron a su antojo, disfrutaron de todos sus orificios, la colocaron en las posturas más inverosímiles y mientras sobaban y disfrutaban del cuerpo de mi madre de todas las formas posibles mi colega no dejaba de echar fotos, varios de los que estaban con mi madre, le pedían fotos y posaban con mi madre enculada, chupándosela o simplemente manoseándola.

Una vez se quedaron todos saciados, y parecía que todo iba a terminar, tuvo una última ocurrencia y pidiéndole a mi colega que lo grabara les dijo a todos los que estaban allí que hicieran un corro y se corriesen encima de mi madre, los mirones que ya estaban a punto se acercaron y no tardaron mucho en darle todo su semen, los goterones le cayeron a mi madre por toda la cara, pelo y tetas, mientras los que se acababan de correr le pedían a mi madre que se las chupara para que no tardasen mucho, al final todos más tarde o más temprano, con ayuda de mi madre o sin ella se corrieron, dejándola como un trapo, litros de semen corrían por todo su cuerpo, la estampa que ofrecía mi madre era lastimosa, mugrienta y sucia.

Entonces apareció el tabernero que no se había corrido y comenzó a mearse encima de mi madre, indicándole que a falta de agua para limpiarse bueno es una buena meada, y todos se reían mientras mi madre con cara de asco intentaba alejarse, pero varios ante la ocurrencia del tabernero lo copiaron y también comenzaron a orinar encima de mi pobre madre, mientras mi colega lo grababa todo.

Después de esto mi madre hizo amago de ir al baño para adecentarse a lo que Jorge le pregunto que a donde iba, cuando esta le comento que al baño, Jorge le indico que de eso nada, que cogiera la ropa y para casa.

Mientras tanto mi colega cogía los teléfonos de los hombres que habían participado y les pasaba las fotos o suvenir como les había prometido.

Uno de los mirones le dijo que pasara también el video, a lo que rápidamente mi colega le dijo que el video eran 20 €, no tardaron en aparecer varios billetes por lo que mi colega mando a todos ellos el video.

La fiesta había sido un éxito y prácticamente todos ellos les pidieron incluso rogaron que si organizaban otra fiesta así los avisaran.

Yo viendo que eso parecía terminar, salí de mi escondite y me dirigí al chalet, no quería que me viesen allí, no iba a darles ese gustazo, al llegar vi que mi padre no se había movido del sitio, intente despertarlo pero era imposible, le di incluso un buen tortazo del que apenas se enteró y emitió un gruñido.

En vista de que estos no tardarían mucho decidí dejarlo por imposible y me fui a mi habitación, estaba en estado de shock no podía entender como mi madre se había dejado no solo follar por tantos desconocidos, sino humillar de esa forma, en que estaba pensando, no ya por su reputación que era evidente que ya la tenía por los suelos, sino por el hecho de que le contagiasen algo que no tenía, alguna enfermedad venérea.

Cuando mire por la ventana los vi llegar, mi madre iba descalza con los zapatos en la mano, hecha unos zorros, antes de la fiesta al salir de casa era una princesa, una hermosa mujer que acaparaba todas las miradas, ahora era un pestilente reflejo de esa mujer, cansada y vejada, mientras sus compañeros de viaje antes galanes caballeros que la colmaban en atenciones, pasaban de ella y miraban las fotos y videos que habían hecho.

Pude oír y sentir por la vibración como llegaban a mi móvil varios mensajes, supuse que serían las fotos e incluso el video que habían hecho a mi madre, cuando entraron en casa y vieron a mi padre mis colegas se volvieron hacia atrás para hacérselo saber a Jorge y mi madre, pero al ver que no reaccionaba comenzaron a reírse de mi pobre y cornudo padre, no solo humillaban a mi madre también era el turno de mi padre, sentí una punzada en mi corazón por no haberme esforzado un poco más y haberlo subido a la habitación, mis colegas llevaban la voz cantante, haciendo comentarios ofensivos en la cara de mi padre que debido a la borrachera no oía.

Mi madre comenzó a subir las escaleras, cuando Jorge tuvo una última y macabra idea, que no fue otra que sacar el móvil para hacer las ultimas fotos de la velada, mi madre pareció recuperar la cordura por un momento y recrimino la idea de Jorge, pero mis colegas la idea les pareció genial y fueron hacia mi madre para llevarla hasta donde se encontraba mi padre.

Ella protesto pero estaba muy cansada, y casi no opuso resistencia, quería terminar con todo irse a dar un baño caliente y relajante, pero estos no estaban por la labor, y la comenzaron a desnudar, cuando la tuvieron así parecían pulpos sobando el cuerpo de mi madre, la colocaron de mil posturas siempre cerca de mi padre y se la follaron a centímetros de mi padre para terminar los tres a la vez realizando un último bukkake  con mi padre como testigo de lujo, y lógicamente todo quedo inmortalizado en el móvil de Jorge.

Yo estaba en el piso de arriba, viéndolo todo apoyado en una columna para no ser visto, mi idea inicial era enfrentarme a mi madre para ver su reacción pero después de esto último decidí irme a mi habitación, impotente, abatido y muy preocupado ya que esto ahora si se había ido de las manos, mis colegas los de mi padre, todo el mundo lo sabía, que iba a pasar ahora, como afrontaríamos esto, al poco rato las ultimas fotos y videos me llegaron al móvil, con un hasta mañana de Jorge, esa noche no pude dormir, me masturbe varias veces viendo los videos, pero mis sentimientos estaban encontrados, rabia e impotencia, culpabilidad todo se mezclaba en mi cabeza.

A la mañana siguiente ninguno madrugo, fui el primero en despertar y comprobé que mi padre no estaba en el salón, cosa que me agrado, cuando estuvimos todos juntos, Jorge comento de hacer una comida y después marchar para casa, ya que con la resaca que teníamos todos iba a costar llegar.

El resto del día fue normal, después de la comida que hizo Jorge a condición de que nosotros limpiásemos después, subimos a nuestras habitaciones y preparamos las maletas, el viaje de vuelta había dos coches por lo que yo iría con mis padres mientras Jorge iría con mis colegas.

Pero antes de partir de irnos del Chalet cuando ya estábamos en el coche montados, después de la despedida de rigor, Jorge se acercó a mi padre y le dio un CD, indicándole que eran las fotos de las vacaciones, y que no se preocupase si perdía el CD ya que también se las había mandado por email, y mientras decía esto me miró fijamente a mí.

Un escalofrió recorrió todo mi cuerpo, eso me sonaba, pero no dije nada, entonces mi padre dándole las gracias a Jorge se despidió, mientras Jorge le indico que gracias a él y especialmente a su familia.

Ya en el coche de camino a casa, mi padre comento que no recordaba haberse hecho ninguna foto por lo menos los días que estuvo el, mire a mi madre y esta estaba pálida, muerta de miedo, se volvió hacia mí y nuestras miradas se cruzaron, ambos intuíamos lo que ese CD llevaba.

Durante el viaje estuve pensando cómo podría hacer para evitar que mi padre viese ese CD, de nada me servía que se lo quitara, si luego también lo tenía en su ordenador, hay ya no podía hacer nada, ya que al ser del trabajo no me sabia las claves y no había accedido nunca a él, hasta la fecha no me había hecho falta.

El viaje fue bastante tedioso, mi padre por la resaca, mi madre por el cansancio y la incertidumbre y yo por evaluar cómo hacer para que mi pobre padre no se enterase de nada, el caso es que en ese coche nadie hablaba, parecía un coche fúnebre.

Al llegar a casa dejamos las maletas, mi madre comenzó a recoger las ropas mientras mi padre preparaba algo sencillo para cenar, yo hábilmente cogí el CD que Jorge había entregado a mi padre, con la esperanza de que este se olvidara de él y no se fijase en las que tenía en el ordenador, pero de poco sirvió, ya que después de cenar mi padre cogió su portátil para ver si tenía algo del trabajo y vio el archivo que Jorge le había enviado, entonces nos preguntó si nos apetecía ver las fotos, mi madre no reacciono estaba pálida ante la sugerencia de su marido, yo fui más rápido y le dije que no eran horas que ya era tarde, pero poco caso me hizo ya que mi padre nos dijo que en 10 minutos se verían, y que le hacía ilusión hacer algo en familia, y mientras decía esto ponía el ordenador en red con la televisión para verlas mejor.

Cuando lo tuvo todo preparado, le dio al adjunto que tenía el mensaje de Jorge indicando que esperaba que le gustase.

En primer lugar, salió una pequeña presentación de Jorge que le daba las gracias por hacer posible unas vacaciones inolvidables y esperaba que el disfrutase por lo menos la mitad que habíamos disfrutado todos los demás, y tras esto, apareció un video con fragmentos de videos y fotos de mi madre, muy sugerentes y subidos de tono primero para ir subiendo el tono hasta verse como era sometida, follada y humillada en múltiples posturas y situaciones, las fotos pasaban rápido pero no lo suficiente como para que mi padre no lo viese, este estaba clavado en el sillón, su cara era un poema, cada imagen que salía era una puñalada, mi madre estaba aterrorizada, y yo expectante, nadie sabía qué hacer y cómo reaccionar en ese momento, el video seguía, hasta que al final volvió aparecer Jorge y como epilogo comento que esperaba que lo hubiese disfrutado y que nada de esto habría sido posible sin la colaboración expresa de tu hijo, ósea yo y la actriz principal, ósea mi madre, le volvió a dar las gracias y se despidió indicando que donde las dan las toman.

La pantalla se quedó en negro, un silencio sepulcral inundo la sala, la tensión del momento cortaba el aire, ninguno se atrevía a decir palabra, mire a mi padre y vi como una lagrima corría por su mejilla, mi madre fue a decir algo cuando mi padre con un gesto le indico que se callara no quería saber nada, cerró los ojos respiro hondo y se levantó del sillón, cogió sus cosas y se subió a la habitación.

Entonces mi madre rompió a llorar desconsoladamente, yo me acerque a ella e intente tranquilizarla sin mucho éxito, le dije que hablara con el si quería salvar su matrimonio, pero no había nada que salvar, ya que al poco rato mi padre salió de la habitación con una maleta de mano y nos indicó que se iba, que otro día pasaría a por el resto de sus cosas y que en breves su abogado se pondría en contacto con ella.

Mi madre lo miraba fijamente y le rogo que no se fuera así, que tenían que hablar, pero mi padre ni siquiera se volvió, y se marchó, para nunca más volver.

Y finalmente Jorge como había cumplido tuvo su dulce venganza, todo le había salido a pedir de boca.

Espero les haya gustado, y salvo que me indiquen lo contrario ahora si doy por finalizado la serie…..,

Aunque siempre son bien recibidas las sugerencias e ideas y si alguna veo que se pueda desarrollar no duden que lo intentare.