La venezolana viciosa

Este es un relato diferente, comienza con Sexo virtual y acaba con Zoofilia

15 - 5 - 2021

6.45.-Hola.

Cuando abrí mi correo vi ese escueto "Hola" acompañado de una foto donde un bombón estaba en la cama con la parte de arriba del pijama levantado mostrando unas tetas preciosas y con la parte inferior un poco bajado.

4.25.-Hola, Conchi. Estás de toma pan y moja. ¡Qué polvazo tienes, jodida! ¿De dónde eres?

11.19.-¿Tienes WhatsApp? El mío es.......... Agrégame.

11.22.-Tengo Telegram.

Me mando su nombre de guerra y le escribí:

11.-25-Ahora me tengo que ir a una comida. A la noche te escribo.

Por la noche le escribí.

22.30.-¿Cómo andas, Cachonda?

22.35.-Hola. Bien. ¿Y tú?

22.36.-Por aquí mirando la televisión.

22.37.-Me encantan tus relatos.

22.38.-A mí me encanta que los lean. ¿Cuáles te gustan? Sexo con maduros, amor filial...

22.40.-Todos. Hoy leí uno de zoofilia.

22.40.-¿Y qué tal?

22.41.-Muy bien, aquí descansando.

Me mandó una foto desnuda de lado y en la que se veía su culo y una de sus preciosas tetas.

22.42.-Joder, si te pillo...

22.43.-Mmmmm. Que lindo.

22.44.-Tú sí que eres linda.

Lo era, en su foto de Telegram vi a una mujer bella de verdad, de esas que hacen girar la cabeza cuando pasan por tu lado.

22.45.-Jajaja. Gracias. ¿Puedo ver una foto tuya?

22.42.-Guardo el anonimato. A escribir lo que escribo hay gente que si pudiera me jodería, en el mal sentido de la palabra. Esto es lo máximo que te puedo mandar.

Le mandé una foto donde se veía mi polla aplastada por el coño de una chavala. Tardó en contestarme, cuando lo hizo me mandó otra foto con un mini camisón de tiras que dejaba ver sus tetas con areolas marrones y pezones gorditos.

23.24.-Estás buenísima.

23.25-Gracias. ¿De dónde sacas las ideas para tus relatos?

23.26.-De cosas que me ocurrieron, de cosas que me contaron, fantasías...

23.27.-Ah, me encanta. Me gustan tus de amor filial, jajaja, y los de sexo con maduras, me identifico con la madura.

23.28.-Madurar te maduraba yo a ti, sí que te maduraba.

23.29.-Jejeje.

Me mandó una foto de su culo.

23.30.-Madura este.

23.31.-Te lo comía bien comido.

23.32.-Ufffff, me gustaría que lo hicieras.

23.33.-Ese culito tan rico lo abriría con las dos manos y le metería mi lengua en el ojete.

23.35.-Mmmmm, que ricura.

23.36.-Debe serlo, sí.

23.37.-Sentir tu lengua en mi culo, taladrándolo.

23.37.-Y lamiendo rico, rico.

23.38.-Mmmmm, sí, así, así

23.38.-Luego iría a por tu coño.

23.39.-Síííí, abierto para tu lengua. Sentarme en tu cara y refregar el coño en ella.

23.40.--¿Te correrías en mi boca?

23.40.-Síííí.

23.41.-Follarte debe ser una maravilla.

23.42.-Mmmmm. Me gusta mucho follar. Soy muy puta.

23.44.-¿Follas bien?

23.45.-Follo cómo me follan. Me gusta comer pollas y tragármelo todo

23.47.-¿Estás casada?

33.48.-Estuve.

23 50-Yo estoy casado, pero poco aprovechado.

23.52-Jejeje. Qué lindo. ¿Tienes aventuras?

  1. 53.-Algunas, el rascar y el follar todo es empezar

23.54.-Así es.

23.55.-¿De dónde eres?

23.56.-De Venezuela.

23.57.-Me gustan los apapachos de las venezolanas cuando están calientes.

00.-Jajaja, sí, leí tu relato en Margarita.

  1. 02.-¿Lubricas mucho cuando te comen el coño?

0.04.-Mucho, me pongo toda mojada, si me lo comen bien.

0.05.-Me encantan los coños que me dan de beber.

0.08.-Y a mí las pollas lloronas.

0.09-La mía lo es. Una noche contigo y te iba a hacer correr las veces que quisieras con orales y follando.

0.12.-¿Qué edad tienes?

Le mentí.

0.14.-Aún no me vacune contra el covid. ¿Cuántos años tienes tú?

0.15.-Cuarenta y cinco

Le volví a mentir.

0.16.-Súmale 5 y casi acertarás mi edad. ¿Dónde estás ahora?

0.18.-En la cama.

Me mandó una foto dónde se veían sus deliciosas tetas y su coño con una pequeña mata de pelo negro, en ninguna de las fotos se le veía la cara pero yo se la ponía por su foto de perfil y veía a una mujer con un polvo brutal.

0.20.-Con pelo, cómo a mí me gustan los coños. Esta noche cae una paja pensando en ti.

0.23.-¿No estás casado?

  1. 25.-Sí, pero mi esposa me tiene muy mal aprovechado.

  2. 25.-¿Cuándo coges con ella?

  3. 26.-Cuando me deja.

  4. 26.-Yo estaría follando todo el tiempo.

  5. 27.-Esta noche me perdería entre tus piernas.

  6. 28.-Uffff. Que rico. Me abriría para ti.

0.29.-Mi lengua en ese coño peludo. Lamería de abajo a arriba, despacito, luego te lo abriría con dos dedos y te enterraría la lengua en el coño.

0.29.-Mmmm, sí.

0.30.-Después lamería tus labios vaginales con dulzura... Volvería a enterrar mi lengua en tu coño y luego subiría lamiendo con la lengua plana hasta tu clítoris.

0.33.-Sí, me gusta.

0.34.-Lamería el clítoris de todas las formas, de abajo a arriba, lateralmente, haciendo círculos con la punta de mi lengua sobre él, te lo chuparía y después te levantaría el culo, lamería tu periné y tu ojete para acto seguido enterrar mi lengua en tu ojete.

0.37.-Mmmm.

0.38.-¿Te gustaría que te comiera así el coño?

0.40.-Me mata.

0.41.-Pues es lo que haría antes de hacerte acabar lamiendo tú clítoris de abajo a arriba cada vez más aprisa y apretando mi lengua contra él. Al correrte dejaría la parte de arriba sobre tu clítoris y el resto de la lengua te la metería en el coño para saborear tu corrida.

0.45.-Me mojo de leerte. Me toco pensándolo.

0.46.-Hazte una paja y cuenta.

Comenzó a hacerla.

0.47.-Aprieto tu cara con mis piernas para que te pegues bien. Mmmmm. Mientras me lames el clítoris penetras mi ano con un dedo, después dos, después tres, para que se abra bien, y luego de estar dilatado embocas la polla en el culo mientras grito de placer.

Saqué la polla y comencé a menearla.

0.50.-Me la vas hundiendo toda. Todo el tallo. Hasta los huevos. Luego la vas quitando de a poco. Miras mi hoyo abierto y la vuelves a meter más fuerte. Así me vas dando, cada vez más fuerte. Te pido que me llenes el culo de leche y me pellizcas mis duros pezones. Me pones a chillar cómo una loca. Uffff. Me pone loca tu polla en mi culo. Síií. Estoy cómo una perra en celo. Tengo la vulva hinchada y brillante. Llena de jugos. deseando que me folles.

0.55.-Te follo.

0.55.-Síííí.

0.56.-¿Estás muy mojada?

0.56.- Síííí´. Párteme en dos.

0.57.-Te parto, tengo un empalme brutal.

0.58.-Mmmm. Así. Dame más. Uffff. Lléname de leche. Voy a acabar.

0.58.-Yo también.

Me corrí cómo un lobo y puse perdido el pantalón. Lo limpié con un pañuelo... Ya le pasaría un trapo mojado en la pileta antes de ir para cama.

1.01.-¿Te has corrido?

1.02.-Sí, acabé rico.

1.02-Yo también me corrí.

Le mandé un pequeño video con mi mano llena de leche de la corrida que me había quitado con sus palabras.

1.05.-Mmmmm. Que rico. La próxima vez me das la polla soltando la leche.

1.07.-Mi mujer ya estaba en cama y no pude resistir la tentación.

1.09.-Jajaja. Que rico. Me imagino esos dedos penetrándome.

1.10.- ¿En los dos agujeros?

1.11.-Síííi. Que delicia.

1.12.-Oye, cuéntame tus fantasías para escribirte un relato.

1.13.-Jajaja. Sexo con dos perros y un viejo.

Me mandó la última foto donde enseñaba su cuerpazo, pero eso sí, no se veía su precioso rostro. Abajo ponía.

1.14.-Con dos viejos y un perro ya lo hice.

1.14.-Mentirosa.

11.15.-Te lo cuento por teléfono, si me llamas. Quiero oír tu voz.

La llamé, escuché y memoricé. Me dio el relato hecho, aunque yo pondré vocablos castellanos de algunos venezolanos. Más o menos, me dijo:

Llegué en mi carro por el pueblo de Cuicas en el municipio de Carache en el estado de Trujillo. Allí tenía que hacer unos trámites para vender una casa que había heredado. Nada más aparcar delante de la casa heredada, una casa de una planta pintada de ocre y pintadas de marrón las puertas y ventanas. Salieron de la casa de enfrente un pastor alemán y dos viejos mulatos que luego supe que eran hermanos. Al llegar a mi lado, me dijo uno de los viejos:

-¿Eres la que viene a vender la casa de la Juana?

-Soy la quien viene a vender esta casa.

El otro viejo me dijo:

-Si nos acompañas te haremos una buena oferta.

Cerrando la puerta del carro le pregunté:

-¿A dónde quieren que los acompañe?

A nuestra casa, merendando podríamos llegar a un acuerdo.

La casa de los viejos era otra casa de una planta pintada de azul y con las puertas y ventanas pintadas de rojo.

Sentados a una mesa, merendando un tumbarrancho, hablando de la venta y tomando unas cervezas, me fijé que cada vez que abría las piernas el pastor alemán se relamía y le daba a la cabeza. El hijo de perra me estaba poniendo cachonda. La verdad es que siempre tuve la fantasía de hacerlo con un perro. Abrí las piernas del todo mientras hablaba. El perro se metió debajo de la mesa y empujo mi coño con su hocico. Uno de los viejos le dio una patada y volvió a su sitio. Me dijo:

-Es el perro de mi sobrina, Tigre se llama. Tiene el vicio de olerle el coño a las mujeres. No sé que carajo busca con eso.

El otro viejo habló claro.

-No la engañes, hombre. Tigre come el culo y el coño cómo los ángeles.

No sé cómo no salí de allí pitando, bueno, sí lo sé, me gustaba la idea de que Tigre me comiera el culo y el coño, claro que eso no se lo iba a decir, les dije:

-Los ángeles no comen coños, señor Nicolás, pero. ¿Cómo sabe usted eso?

-Lo agarramos en plena faena.

Imaginé que lo agarraran comiéndole el coño a su sobrina y no me fue muy difícil imaginar que pasó después.

-No sé que decir, un perro que come culos...

Nicolás, apostilló.

-Y coños, bonita, y coños

Nicolás y Boris tenían setenta años, eran muy altos, fuertes y afables. Me dije a mi misma que si se presentaba la ocasión me follaría los tres, a los viejos y al perro. Eran las ocho, ya oscureciera. Se fue la luz. Mientras Boris iba a buscar unas velas sentí la cabeza del perro entre mis piernas, las abrí y su lengua comenzó a lamer el interior de mis muslos y las bragas, Bajé una mano, aparté las bragas para un lado y el perro lamió mi coño. Si Boris tarda un poco más en dar la luz..., fijo que acabo.

Al encender las velas, vieron que Tigre no estaba en su sitio y Nicolás de otra patada lo devolvieron a él. Boris me dijo:

-No conoces tu nueva casa y con un par de velas que te podamos dar no te vas a apañar, lo mejor es que te quedes a dormir aquí.

-No los conozco de nada. ¿Y si de noche abusan de mí? Una mujer durmiendo en una casa con un perro que hace lo que hace y dos extraños que viven solos...

-Somos buena gente y el perro si no le dejas la puerta de la habitación abierta no te va a molestar.

En fin, que no volví a mi nueva casa. Quedé a dormir allí.

Me metí en cama con la puerta de la habitación abierta a ver si venía el perro y detrás de él los viejos, pero cómo no vinieron, pasado un tiempo, lo que hice, después de desnudarme, fue acariciar mis tetas, meter dos dedos en el coño y masturbarme para echar fuera todos los jugos que tenía acumulados en mi coño, en dos palabras, para correrme, cómo decís en tu país. Estaba casi acabando cuando volvió la luz, giré la cabeza y vi a los dos viejos y al perro en la puerta de la habitación. Los cabrones tardaran, pero allí estaban. Me puse boca arriba, me tapé con una sábana, y les dije:

-¡Ni se os ocurra abusar de mí!

Boris me preguntó:

-¿Por qué dejaste la puerta abierta?

-Se me olvidó cerrarla.

Caminando hacia mí, me dijo:

-No mientas, te gustó que Tigre te comiera el coño al irse la luz.

Me callé y todo el mundo sabe que quien calla otorga. Boris traía una tarrina de Nutella en la mano. Nicolás ató el perro al pomo de la puerta. Boris echó el tarro de Nutella sobre la cama. Se desnudaron. Vi sus largas y gordas vergas flácidas y colgando. El coño se me puso travieso. Sentí cómo lubricaba. Se metieron en la cama. Boris me quitó la sábana de encima. Mi coño y mis tetas decían: "Comernos, cabrones " y mi boca dijo:

-No, por favor, no me hagan daño.

Nicolás me dijo:

-Relájate y disfruta.

Mentí cómo una bellaca.

-No quiero disfrutar.

-Sí te pillamos haciendo una paja. ¿Cómo no bas a tener ganas?

-No es lo mismo...

-Calla que vas a disfrutar cómo una perra.

Callé. Boris cogió la tarrina de Nutella, la abrió, metió dos dedos dentro y luego la untó en mis tetas. Después se pusieron uno a cada lado y a lamidas me limpiaron las tetas de Nutella. Sus lenguas subían por los lados de las tetas, llegaban arriba, lamían mis pezones, mis areolas y después sus bocas mamaban mis tetas... Así estuvieron largo rato, después las cogieron con sus grandes manos y siguieron amasándolas, lamiéndolas y chupándolas. Ya gemía con ganas cuando Boris me preguntó:

.¿Queres acabar?

La respuesta era obvia.

-Sí, quiero.

Boris me llevó la mano al coño.

-Acaba.

No me pude contener, metí dos dedos dentro, me masturbé y al sentir que me venía, le dije:

-¡Voy a acabar, voy a acabar!

Nicolás metió la cabeza entre mis piernas, me quitó los dedos, lamió y me corrí en su boca. Boris se aprovechó y me comió la boca.

Al acabar de llenarle la boca de jugos miré para el perro y vi cómo se relamía, cómo le daba al rabo y vi su polla encarnada subiendo y bajando. Si me pilla me revienta. Nicolás me preguntó:

-¿Quieres que Tigre te coma el culo o es demasiado para ti?

Ya había cogido confianza. Miré para su polla y para la de Boris. Se les habían puesto morcillonas. A lo mejor si jugaba con el perro se acababan poniendo duras. Le respondí:

-Para mí nada es demasiado.

-Sal de la cama.

Salí de la cama.

-Apoya tus manos sobre la tabla de los pies de la cama y abre las piernas.

Hice lo que me dijo. Me untó las nalgas y el ojete con Nutella. Nicolás trajo a Tigre. El perro lamió mis nalgas. Nicolás abrió las nalgas y Tigre me lamió el ojete. Ya estaba cachonda de nuevo. Boris me pringó el coño de Nutella y Tigre lamió con ansia. El perro se moría por montarme, pero Boris lo hizo sufrir para que cogiera con más ganas. Cuando lo soltó, me abrazó con sus patas. Con la punta en la entrada del ojete movió el culo con rapidez y me la clavó en el ano. Después se quedó quieto y se corrió dentro de mi culo.

Boris y Nicolás ya tenían las vergas duras. Tremendas vergas tenían los dos. Al retirarse el perro Boris me la clavó en el coño. Aquella verga llenaba mi coño cómo nunca antes me lo habían llenado. Me dio duro, sin compasión. Sus grandes manos amasaban mis tetas con fuerza. Me folló hasta que sintió mi coño bañar su verga, en ese momento se corrió y me llenó el coño de leche.

Al acabar la quitó. Nicolás me metió su verga en el coño. Con el coño encharcado la verga entraba y salía con suma facilidad. El cabrón me pellizcaba los pezones cada vez que llegaba al fondo después de una fuerte clavada. No le bastó, que cuando dejó de pellizcarme las tetas me aplaudió el culo con fuerza. A punto de acabar me llenó el coño de leche. Me dejó con la miel en los labios y para mi desesperación los dos viejos tenían las pollas flácidas. Sentí las patas del perro abrazar mi vientre. Era la mía. Esta vez le cogí yo la polla y la puse en la entrada del coño. Le dio al culo con violencia hasta que se quedó quieto, con la lengua fuera y mojando mi espalda con sus babas. Lo follé yo a él y me corrí cómo una perra.

Al acabar de gozar me dijo Nicolás:

-Siéntate en un lado de la cama.

Me senté. Boris cogió el tarro de Nutella, llegó a mi lado, me empujó y me dejé caer sobre la cama. Me separó las piernas y me untó Nutella en el coño. Tenía los pies en el piso de la habitación y las piernas abiertas de par en par cuando vi venir a Tigre haca mí. Cerré los ojos. Sentí su húmeda lengua lamer todo mi coño. ¡Qué placer daba sentirla! Lamió hasta dejarlo limpio. Luego vi cómo Boris echaba más Nutella en mi coño... Cómo volvía a lamer el perro... Cinco o seis minutos más tarde, con la verga de Nicolás en mi boca y la de Boris frotándose en mi tetas acabé rico, rico, rico. Tigre lamió hasta que de mi coño dejaron de salir jugos, después puso sus pies sobre la cama y me folló hasta que de nuevo se corrió dentro de mí. Esta vez no la quitó, con ella dentro lamió entre mis tetas, una teta, la otra, lamió la polla de Boris que jugaba con ellas, Al rato Tigre me volvía a follar y se volvía a correr dentro. Yo mamaba la verga de Nicolás y lo pasaba en grande sintiendo la polla del perro dentro de mi coño... Ya eran dos las pollas que entraban y salían de mi boca, turnándose, cuando el perro se corrió por tercera vez dentro de mi coño. Sentí que iba a acabar y me volví loca, pedí leche a gritos.

-¡¡Leche, quiero leche!!

Leche me dieron. Cubrieron de leche mi cara. Tigre al sentir mi coño apretar su polla me volvió a follar a romper y me llenó el coño por cuarta vez.

No sé que pasó después, ya que me colgó, o le hicieron colgar, o yo que sé lo que pasó, lo que sé es que tenía razón cuando me dijo que era una puta, pero una puta de las que a mí me gustan, una puta viciosa.

Quique.