La vecina Sonia

Mientras planeaba la forma de cogerme a mi vecina, ella me sorprendió... y descubrí lo gran puta que es.

Este es mi primer relato...a ver que les parece

La vecina Sonia

Preparándome para darle una sorpresita a mi vecina, fui yo el sorprendido...

Todo ocurrió en las vacaciones de verano de hace 5 años, yo vivía en una de las colonias a las afueras de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, tenía entonces 20 años, recuerdo que vivíamos en unas casas duplex, por ser un tipo sumamente calienton desde que llegué cheque el ganado que había y así descubrí a Sonia.

Sonia era una linda morenaza de 1.75 m. de altura, con una larga cabellera ondulada, unas deliciosas caderas que remataban en un precioso y amplio culo, ella tenía 17 años, sus grandes ojos negros contrastaban con su pequeña nariz, tenía unos labios hermosos, carnosos y unos senos que aunque pequeños-en comparación a su culazo- no le pedían nada a nadie; desde la primera vez que la ví me calentó, tanto que me masturbe en más de una ocasión pensando en su culo negro, ni tardo ni perezoso hice lo posible por entablar contacto con ella, aunque debo reconocer que fue con sus hermanas menores, con las primeras que tuve contacto, así una cosa llevó a la otra y poco a poco comencé a tener confianza con Sonia, que era muy callada a diferencia de sus hermanas desinhibidas para hablar de cualquier tema, sin embargo su mirada parecía encendida, en más de una ocasión alcance a ver como se respingaban sus pezones cuando me preguntaban sobre mis experiencias sexuales, que en la mayoría de los casos las conté (obviamente mentí para hacerlas más impresionantes), pero casi siempre mi vecina con algún pretexto se iva "Son puras tonterías"

Era una tipa deliciosa usaba siempre shortsitos pegaditos a sus nalgas respingonas y amplias, que cuando la veía pasar me gritaban cómeme, tócame, muérdeme, cojeme…era toda una delicia en shorts, con su pantaloncitos entallados viendo esos dos cachetes brincar de un lado a otro, así me fui enculado con ella y me dispuse para poseerla. Prepare todo para un sábado, mis padres no estarían en casa por lo que el momento estaría más que pintado.

Aunque fue ella quien me sorprendió… La tarde del viernes previo al día marcado para el destrampe, estaba en la casa sin hacer nada

Pablooooo, estaaaas ahiiiiií, ven por favor

Me grito mi rica vecinita, con tan sólo oír su voz, me excite pues estaba viendo unas películas pornos donde salía una tipaza muy parecida a mi divina Sonia. No lo pensé dos veces y bajé a su casa,

Al verla fue difícil ocultar mi excitación, vestía una blusita blanca de tirantitos, sumamente pegada al cuerpo, tanto que delineaba sus torneados senos y sus hermosos pezones resaltaban por su sujetador de algodón que no dejaban nada a la imaginación, una mini roja apenas ocultaba sus hermosas nalgas y su panochita, el cabello suelto sobre sus hombros…ESTABA FENOMENAL.

¿Qué te ocurre? Pregunté

Necesito que me ayudes a mover unas cosas de mi cuarto

Y sin más, se dirigió a su cuarto, Ahí moví su cama, un espejo, el tocador, todo lo cambió de lugar

Mis padres no están salieron con mis hermanas a casa de mi tía Ruth, van a venir ya tarde y como no tenía nada más que hacer se me ocurrió arreglar mi cuarto, y que mejor que tener a mi nuevo amigo para eso, me dijo mientras dejaba ver parte de sus hermosos senos cuando se inclinó cerca de mí para tender su cama, yo estaba aletargado, con mi pene gritándome deja que me la coja, que le haga sentir una verga caliente y dura a esta putita, pero mi excitación fue mayor cuando uno de sus muñecos de peluche se le cayó y sin más se agachó a recogerlo, dándome una hermosa visión de sus nalgas, su chochito lo ocultaba hábilmente con una tanguita carmín, yo no evite el penetrarla, recorrer sus nalgas, deslizarme por sus muslos y oler su sexo con mi mirada, sentía unas ganas terribles de tomarla por las caderas, romperle su débil tanga y embestirla una y otra vez, meter todo mi aparato en su rica vagina, dejar que sus jugos salpicarán mis huevos, mis muslos, darme un festín de su cuerpo de sus nalgas, mi pene quería salir, mis piernas querían correr hacia ella

Pabloooo ¿Qué me veeees? Me dijo con su deliciosa voz,

Recobre la noción de la realidad, atolondrado por mi pequeño viaje mental tarde en reaccionar para intentar ocultar mi erección

¿Nunca has visto una tanga cubriendo la panocha de una mujer? Preguntó picaramente mientras se levantaba, yo estaba perplejo ante su pregunta, se me acerco a unos pasos

No tengo con que pagar… tu ayuda

No… No… No importa alcance a balbucear

Ven vamos a la sala, creo que tengo algo que servirá para pagar pagarte

Yo era prácticamente un bulto embelesado por su andar, por esas nalgas, por su vagina, por sus caderas, por toda ella… en la sala me sentó en el sillón más grande, mientras sacaba un paquetito de un cajoncito

Es parte de tu paga

¿Y esto?

Es tu regalo de bienvenida

De inmediato se agachó, para sacar mi verga que estaba erecta y comenzó a besarla como loca, la chupaba, la mamaba, la cogía con ambas manos, con frenesí la lamía, yo estaba en el paraíso con su forma de comerme el pene, me besaba el glande su lengua era un torbellino en mi cabeza, en mis huevos

Sigueeeee sigueeeee…. Le suplicaba

PAPI QUIERO QUE ME COJAS… QUIERO TU VERGA

Para mi aquello era un sueño, esa mujer era una gran puta come-vergas, yo le metí un dedo en su rica y mojada vagina, sus jugos abundantes me excitaron aún más

Eso es cogeme…cogeme…dame papi soy tu putita..soy tu putita mascullaba mientras me masturbaba con la mano

Muevete que quiero probar tu panochita..Quiero saborear tus líquidos

Sí papi, chupameeeee… AHHHH!!!! AHHHH!!!!! AHHHHH!!!!

La visión era hermosa su panochita destilaba su excitación su aroma era de una loba en celo, de una perra deseosa de más, comencé a beberla a lamerla, a darle lo que quería su clítoris estallaba en júbilo, su cuerpo me gritaba que le fascinaba como le besaba su sexo, como la taladraba con mi lengua, contrajo su espalda, me pegó su panocha

AHHHHHHH!!!! AHHHHHH!!!! me vengo Pablo… Me Vengo AHHHHH!!!!.

Su excitante forma de terminar hizo que yo acabará también en su boca, ella se esmero para comerse toda mi leche para no dejar escapar nada.

Ven amor dame más placer, cojeme mi panocha ardiente de ti de tu pene

Los minutos siguientes a nuestro clímax, fue de excitantes besos, de una lucha interminable de nuestras lenguas por recorre la cavidad bucal, de sentir nuestra saliva mezclándose produciéndonos placer con nuestros dedos, recorriendo la piel, mis manos estrujando sus senos, sus dedos masajeando mi paquete, y sin más volvió a devorar mi pene.

Lo quiero grande…. Vamos rómpeme mi panocha, penetrarme, quiero sentirte estallar dentro de mí

Sin pensarlo dos veces se acomodó sobre mí, lentamente se introdujo mi verga en su capullito, era la gloria sus jugos eran un festejo por tenerme dentro el mete-saca inició pausadamente, yo besaba, sus pechos mordisqueaba sus tetillas, su excitación se elevó vertiginosamente, gemía de placer

OOOOOHHHH!!!! AAAAAAHHHHHH!!!! AHHHHH!!!! Siii… Sigue…!!! Ahhhhh!!!!

Una gran cojida le estaba dando, sus pechos rebotaban sus nalgas se agolpaban con mis muslos, su vagina, mi pene entraba, salía de su vagina, mis manos la elevaban, la bajaban, su sudor mojaba mi cuerpo, mi lengua invadía su boca, era una fiesta, toda ella disfrutaba de sentirme como la taladraba, como invadía su ser,

AHHHHH!!!! AHHHHH…!!!! Pablooooo Me haces gozar, soy tu putita….!!!!

Un instante más y terminaba violentamente ante la furia de mi embestida, mojó mis muslos sentía como su orgasmo me envolvía en su aroma de zorra gustosa de una buena cojida.

Yo ansioso de más la volteé besé su espalda, estruje sus senos, se los chupé, pero quería más quería taladrarla por su culo, por ese culazo que tanto deseaba, envuelto en esos pensamientos, mordisqueé sus nalgas, las bese, las recorrí con mi lengua quería comérmelas, abrí un poco esos redondos cachetes y vi ese negro culito, ¡Que delicia! Me extasió su sabor saladito, mi lengua lo recorrió en círculos, mis manos abrían sus nalgas, estaba loco de ganas de penetrarla.

Ella sabía lo que yo quería, intentó oponer resistencia, pero estaba demasiado caliente para no dejar que la bombeara por su ano,

Dame por el culo… dame por ahí….

Me masculló mordiéndome el lóbulo de mi oreja derecha, justo al sentir mi pene abriendo su estrecho ano, lentamente me fui acoplando a ella era totalmente distinto a penetrarla por su panochita, su culo se esforzaba por evitar que entrará pero al igual que ella cedía por su excitación, sus jugos me sirvieron para abrir su canalito, se quejó un poco pero continuaba pidiendo que la penetrara, que anidará en su culo, que la abotonara por detrás.

Poco a poco comencé a bombearla sus quejidos de dolor no se hicieron esperar, pero eso me excito más, que delicia!!! Era su culo, tan rico,

OOOOHHHH!!!!! OOOOAHHHH!!! AGGGHHHHH!!!

La bombeaba mientras la ponía en la posición del perrito, la agarre de sus senos que se los aprete con furia, sus quejidos, sólo eran gasolina a mi deseo de romperla de quebrarla de taladrarla, como a una gran puta

SSIIIII!!!! Siiiii!!! SOY TU PUTA…DAME MAS DAME MAS…!!!!

Y movía su cuerpo a mi ritmo abriéndose ella misma para que entrara mi verga, se tocaba su vagina, se estrujaba su clítoris, me pedía más, era la gloria, su forma de moverse de golpear sus nalgas contra mi pelvis, era un sueño, era mi fantasía cumplida en su sala en esa sala pequeña, de muebles rojos, sin mesa de centro, con todos esos cuadros viéndonos, con sus gemidos retumbando, su gran culo, su panocha era mi vecina una GRAN PUTA

Gritaba y gemía con mayor fuerza, yo presa de el éxtasis de perforarla, de tener a mi vecina cojida por su culo, de haberle comido su panocha, de disfrutar de su vagina húmeda terminé por correrme en su culo y en su espalda mientras ella gritaba que quería más que quería que la cojiera otra vez, que la poseyera una y otro y otra vez….

Finalmente nos tumbaos en su sala, aún veía su culo del que emanaba mi semen, su cabellera ondulada, sus grandes caderas, sin lugar a dudas era una gran Puta MI vecinita Sonia.