La vecina por la webcam
Una señora liga por internet y acaba follando de verdad con su ligue.
LA VECINA POR LA WEBCAM
Elena era una mujer casada que hacía poco había sobrepasado la barrera de los cuarenta años, feliz en su matrimonio pero a la que Internet había descubierto un nuevo mundo, un universo misterioso y desconocido pero a la vez fascinante. Había trabado amistad con un chico de veinte años y poco a poco las conversaciones fueron subiendo de tono hasta que hacía un mes ya eran completamente eróticas o pornográficas como lo prefiráis.
Los dos instalaron webcams en sus respectivos equipos y micrófonos para poder escucharse y hablar al mismo tiempo, la tarde del sábado iban a estar solos los dos en sus respectivos domicilios, Jorge la había dicho que el era de Madrid pero la mujer había mentido y le había dicho que ella era de Barcelona cuando en realidad vivía en Madrid también pero ella guardaba muy celosamente su intimidad.
Esa tarde Elena se había duchado y perfumado como si fuera a salir y se había puesto cómoda con un albornoz y debajo un body negro de encaje. El también se duchó y se puso un bóxer negro bien prieto. Llegó la hora convenida y pusieron la webcam, la cara no se la iban a mostrar por miedo a no gustarse, el juego comenzó y la temperatura iba subiendo y las ropas disminuyendo hasta quedar completamente desnudos los dos.
Empezaron a jugar con sus cuerpos masturbándose hasta que terminaron, ya serían las ocho de la tarde quedaba poco para que Jorge se fuera con sus amigos de juerga porque sus padres estaban en el pueblo y así podía volver más tarde. Elena iba a prepararse algo para cenar porque el fin de semana estaba sola porque su marido estaba de viaje. La mujer cuando fue a cocinar notó que necesitaba un poco de sal y en albornoz salió a pedírselo a la vecina, hacía poco que se había trasladado a vivir a aquel piso con su marido y ya había establecido una cierta amistad con vecina.
Llamó al timbre de la puerta de al lado y salió un chico de unos veinte años vestido con una camiseta y unos pantalones cortos, ella pensó que se parecía a Jorge pero pensó que no podía ser porque le hubiera reconocido por la webcam pero a Jorge casi le da el infarto cuando la vió porque reconoció enseguida el albornoz pero por si acaso la llamó por el nombre.
Ella lo oyó y comprendió quien era y acercándose se fundió en un apasionado beso y le atrajo hacia su piso y cerró la puerta, esa noche sería suya e iban a follar hasta el amanecer. Le fue conduciendo hasta el salón y le sentó en el sofá arrodillándose ella en el suelo delante de él, le bajó los pantaloncitos cortos y el bóxer mientras él se quitaba la camiseta y la quitaba el albornoz.
La mujer se levantó y en un sensual movimiento de caderas se fue deshaciendo del body negro hasta quedar completamente desnuda, a pesar de su edad era una mujer sumamente apetecible, morena de pelo teñido de caoba y largo a media espalda o un poco menos, ojos marrones, boca pequeña, pechos pequeños pero firmes con los pezones color café oscuro, el coño de vello negro en un abundante mechón y un culo que era una delicia, duro, levantado y redondito, con los jeans se le marcaban bien las nalgas introduciéndose parte de la tela en medio, lo sabía porque la había visto en las escaleras varias veces pero nunca hubiera podido imaginar que era su compañera de juegos virtuales.
Ella se volvió a arrodillar y cogiendo la polla completamente tiesa con la mano la dio unos cuantos meneos arriba y abajo masturbándola para luego poner la boca en la punta y darla suaves mordiscos en el puntita del glande para luego ir deslizándola dentro de su boca mientras a veces la apretaba como queriéndola exprimir.
Con la otra mano le cogía los huevos y se los palpaba acariciándoselos y repasando el vello mientras la verga todavía iba creciendo más en la boca de la mujer. El se fue tumbando en el sofá como indicándola que se pusiera sobre él en un 69. Ella se fue deslizando sobre el chico hasta quedarse con el coño en la boca de Jorge y la polla en su boca, la polla la fue lamiendo y mamando con suavidad primero y luego con muchísima pasión.
Se incorporó poniéndose como una amazona encima del chico y metiendose la polla en el coño de un golpe comenzó a cabalgarle en cuclillas sobre él mientras le acariciaba el pecho y jadeaba como una posesa por la excitación que estaba sintiendo, en esa postura fue girándose sobre él haciendo que la polla girara dentro de ella y dándole la espalda, él en esa postura la acariciaba los pechos para luego bajar las manos hasta sus nalgas y jugar con ellas entonces la acariciaba en el anillo del ano muy suavemente haciendo que la mujer todavía se excitara más y tuviera su primer orgasmo.
Se levantó y se puso boca arriba, el chico la cogió las piernas y las apoyó en sus hombros y la penetró muy fácilmente entrando todo el pene dentro de la mujer hasta que los huevos chocaron con sus nalgas, se la follaba con velocidad con autentica pasión hasta que notó que se iba a correr entonces se la sacó y se sentó encima de ella sobre su abdomen y colocó la polla entre las tetas que ella cerró para masturbarle con las mismas mientras le chupaba la punta en cada acometida hasta que en una de ellas Jorge eyaculó soltando varios chorros que cayeron sobre la cara, el cuello y los pechos de la mujer.
Se quedaron tumbados abrazados en el sofa, el chico entonces empezó a besarla en la espalda y fue bajando por su cuerpo hasta llegar a las nalgas, la acariciaba con apasionamiento mientras se las abría y cerraba, con las yemas de los dedos fueron bajando hasta el ano.
Por favor soy virgen por ahí---- le dijo ella.
¿Tienes un poco de crema de manos?---- respondió él dándola un suave y profundo muerdo.
Ella se levantó y fue a por la crema trayéndola donde el chico que ya tenía la polla muy dura. Jorge colocó un cojín y la hizo tumbarse boca abajo sobre el mismo y que abriera ligeramente las piernas. Entonces él con dos dedos untados en crema se le fue embadurnando el agujerito hasta que venció la resistencia del mismo y los fue introduciendo hasta que no encontraba resistencia, mientras la iba lamiendo el conejito cosa que hacía que Elena gimiera de placer, ahora probó con tres dedos, los giraba y los abría dentro de ella, cuando notó que la mujer estaba lubricada se untó el pene de la misma sustancia y colocándola en la entrada del culo comenzó a empujar suavemente, muy suavemente, la polla fue entrando poco a poco, primero la puntita que iba saliendo y entrando lentamente, luego entraba el tronco hasta la mitad para con un empujón de la pelvis meterla toda y quedarse así durante unos segundos, ella se apretaba los dientes por el dolor, Jorge comenzó entonces a follarla el culo lentamente mientras la acariciaba los pezones que se iban poniendo duros, el dolor de ella se fue convirtiendo en placer, cada vez más placer, la mujer jadeaba y gemía más intensamente, él la follaba cada vez más salvajemente ya estaban ella a cuatro patas y él cogiéndola del pelo detrás metiéndosela y sacándosela para luego follarla cada vez más rápidamente y con una mano masturbarla, la mujer que estaba a mil empezó a encadenar orgasmo tras orgasmo, siempre había tenido facilidad para llegar al orgasmo pero nunca había sentido tanto placer hasta que el chico no le dio tiempo a salir de dentro o no quiso salir y se corrió dentro de la mujer.
Se quedaron un rato pegados y luego fueron a la ducha a lavarse, ella chorreaba por los muslos un autentico riachuelo de semen, se ducharon, cenaron y se pasaron follando todo el resto de la noche, del día siguiente hasta después de comer que se despidieron, se habían convertido en amantes, ahora cada vez que tenían una oportunidad se veían, follaban o tenían cualquier tipo de contacto sexual.
Este relato es imaginario pero si queréis podéis escribirme a: