La Traición de Mía 12

Sin más se acerca a Lorenza y la besa con pasión, el nudo en su garganta por las lágrimas retenidas, no desaparece… las caricias que Lorenza comienza a otorgarle la hacen relajarse… ha decidido no pensar más, es tan doloroso, y ya no quiere sufrir, disfrutará del cuerpo de Lorenza que es precioso. H

Gracias por esperar… no tengo excusa jejeje bueno sí, el trabajo. Lo bueno es que hay muuuuchos relatos bonitos en ésta categoría, así que no me preocupaba mucho :D

Pequeña Introducción

Rosaura: Reclusa enamorada de la directora, engañada por Mía. Amiga de Laisha, Mónica, Carolina y Sandra. Tuvo que ver con Carmen ahora pareja de Laisha, problemas con Loise y compañera de celda de Sara drogadicta.

Directora/Lorenza: Enamorada de Rosaura, pero que la obligo a darle cierta atención sexual cuando la conoció, cayo en su juego y ¡zas! Se enamora jejeje. Tiene un pequeño, Julián sordo.

Laisha: Policia que por circunstancias X ha sido dada de baja y  no sabe que sólo es una reclusa más. Es manejada por su ex jefe y su excompañera policía Alma que  finge ser sordomuda.

Mónica/María: Ex militante de una agrupación guerrillera, muy peligrosa, pero que ha rectificado el camino y necesita de amigas verdaderas, siempre ayuda a Rosaura.

Carmen: Mujer de Laisha, se enamoro un poco de Rosaura pero ya pasó, ahora le tiene celos por Laisha. Es proxeneta, y es por lo que Laisha se ha relacionado con ella, sin embargo ambas se enamoran.

Mia: Apenas en éste capítulo aparece la condenada jajaja.

Esto era para recordarles un poco… los que la siguen ya se acordaron :)    Bye

DOCEAVA PARTE

En el momento de la pelea entre Mónica y Laisha, Mía sabía que era la oportunidad que había estado esperando.

-¡Mía, las amigas de la tal Rosaura se liaron a golpes!-

-Antonia, sabéis si ella está ahí, en la bronca-

-¡No! a esa no la vi-

-Bueno, venid,  seguidme, y sí hay alguien que quiera interrumpirme lo impides-

-¡Sí jefa!, tú mandáis jajaaja-

Mía y Antonia a toda prisa recorren el patio y módulos con temor de las demás internas, Mía no sabe que tan peligrosas son, los días que tenía no eran suficientes para determinar que tan riesgoso era andar por otros módulos, pero deseaba verla… hablar con Rosaura.

Había investigado con otras internas y dándoles pequeños obsequios se ganó la simpatía y de dos o tres presas, quienes no tardaron en investigar quien era Rosaura y en dónde estaba su celda, la llevaron casi a ésta y le indicaron claramente cual era. Sólo necesitaba ser paciente, pero las ansias la carcomían, algo que nunca había sentido la invadía… A ella no le interesaba, pero tenía cierta curiosidad.

Espero que esté en su celda… que le diré… joder… que quiero saber que está bien… no, ¡no está bien! la vi, y no lo está, está demacrada y muy pálida, ella  no era así… La ha cambiado este lugar… y es mi culpa… probablemente quiera matarme cuando me vea… Mentiras sólo mentiras le puedo contar… me creerá es bastante estúpida… por eso la detestaba, parecía obcecada por siempre disculparme por mi mal humor y mis groserías. Me desquiciaba su actitud de servicio, no tiene carácter es tan manejable que resulta aburrida. Sólo unas lágrimas y será suficiente para que confíe… total que mejor muestra de ser inocente, que estar aquí. Sí, fuimos engañadas ambas… espero lo crea la muy gillipollas.

No podía creer su buena suerte, Rosaura estaba sola un poco callada pero bastante serena, como si la esperará.

-¡Rosaura!-

-Mía… tú aquí… La verdad te imaginaba disfrutando de tu amor y de otros placeres-

-Parece ser que yo no tengo ningún amor y los placeres no los habrá, gracias a Iker… ya vez  nos engaño bastante bien… no sé cómo, pero hizo que desconfiará de ti, y después yo caí en su trampa  -

-¡¿Iker?!… ¡basta Mía!… ¡mejor vete!…. ¡No sé por qué me buscas!… ¡estás muy bien lejos! arréglatelas cómo puedas. O necesitas algo?… ¡Mírame! ¿Crees que pueda darte algo? Nada, no tengo nada.  Mira está celda, está casi desnuda… sólo tengo lo indispensable, para mi… ¡No me busques!…! ¡No me importas!... ¡Vete!

-Todavía me quieres y te duele verme ¿verdad? Podríamos ayudarnos, apoyarnos, nos conocemos y podemos buscar la manera de salir lo más pronto posible…

-Sabes… ¡vete!… ¡no necesito de ti!… ¡estoy muy bien sola!-

  • Jajajaja  muy bien sola… mírate, eres la sombra de la Rosaura que era mi novia y paseaba en los pubs.

-No me importa lo que pienses de mi y esa no era yo, en apariencia me cambiaste nada más llegamos a España,  no podías quedar mal, fue por ti más que nada… además nunca me diste mi lugar de novia en ningún lado, sólo en la cama y créeme, me daba miedo hacer algo incorrecto, enfadarte…nunca quede satisfecha contigo, ahora lo sé bien-

-¡Ahora lo sabéis bien! …  ¡coño! eso me suena bastante a que ahora eres una puta-

-¡Puta!....   ¡yo puta!… bueno, ¡Sí!… soy la puta de alguien, y será mejor que te cuides por que no le va a ser gracia que estés aquí… he sido la puta de por lo menos dos aquí… y  créeme, no soy libre… por lo que te pido te largues y no me busques.

-¿Te preocupas por mi? Dime ¿Qué me puede hacer tu bollera? pero te contradices primero me decís que estáis sola jejeje y ahora que tenéis mujer o sea mentiras…-

-¡Eso no te importa! he cambiado. Márchate y no me busques ni te metas en mi vida, saliste y no entrarás más-

-Sé que aún me quieres Rosaura, sino por qué te desmayaste… te impresionó verme, me quieres, fui la primera mujer en tu vida y supongo que eso vale de algo-

-De nada vale… tú no vales nada para mi… He sido lo más educada posible contigo, vete y no me busques-La serenidad de Rosaura intrigaba y molestaba a Mía.

-¡No sé por qué vine! tal vez por nostalgia… Fracasada… eso eres… te veo y no sé cómo pude siquiera tocarte… qué te vi… no tienes lo que me gusta, espíritu de ganadora… ¡no!… sólo un mujercita tonta que se empeñaba en tenerme contenta… sin aspiraciones…-

-Mi aspiración eras tú… el espíritu ganador supuse que lo tenía, te había ganado y fracasada tal vez… sí eso es, no tener dinero, en cuanto a qué me viste… Por desgracia hubiera preferido que nunca jamás te hubieras fijado en mi, pero te doy toda la razón… no soy nada, haz de cuenta que no existo y no me conoces.

Ahhh y no sé con que cara vienes a insultarme, si me acusaron de todo y nada, no entendí eso de blanquear dinero y la malversación de fondos de ese inversionista rico, yo no era socia suya, por qué a mi me han refundido y a ti por qué apenas, y supongo que a él también lo habrán apresado… Mía ¿dijeron la verdad? ¿Saldré pronto?... Mía quiero irme de aquí… ¡Contéstame!-

-¡Nos engañaron! ya sabéis quién… y no sé qué pasó a ciencia cierta… Y no te ofendo, sólo digo lo que pienso y siento, lo sabéis bien. ¡Adiós Rosaura!… aahh ¡nunca me ganaste! Y más bien hasta luego… cuando ambas nos calmemos podremos proseguir- Sin darle tiempo a replicar salió.

Nada de lo que dijo Mía le sorprendió a Rosaura sabía de cierta forma lo que la cara de Mía siempre le dijo, que no estaba a su altura, por un momento tuvo la falsa esperanza de poder salir… pero Mía no movería un dedo para sacarla  menos Iker.

Mía caminaba con un malestar en el estomago por haber averiguado que R. tenía a alguien en su vida, su proceder fue erróneo, necesitaba reconciliarse con ella y lo que consiguió fue ofenderla y reprocharle su humildad. Lo último que dijo la perturbó y en el fondo le dolió, acaso siempre había estado equivocada su apreciación de Rosaura y quién podría estar interesada en ella. Esperaba que Rosaura pensará que ella era igual tan sólo una victima de Iker, la observo casi imperturbable, por lo que dedujo que estaba perdiendo algo de poder en ella, se enfado ya que a su parecer Rosaura debía estar orgullosa de haber sido elegida como novia de una mujer así como ella, y si ahora la buscaba debería estar agradecida por tener su compañía.

Al parecer nadie la apoyaba económicamente y se veía físicamente mal, se molesto al pensar que la nueva pareja de Rosaura la maltratara… tal vez la explotaba… Por primera vez en su vida en verdad se preocupo por ella. Una cosa era saberla en la cárcel y otra muy diferente era verla así, en una celda sola, tal vez enferma y sin nadie. Las observaciones que tuvo Mía de Rosaura aunque eran equivocadas, le dejaron claro que era cuestión de tiempo para que ella volviera a ser su perro fiel, la vanidad y soberbia era lo que le decían.

Y un hilo de sentimientos trataban de aflorar, dejo de pensar en ella misma para preocuparse inconcientemente por Rosaura.

Si para estúpida no se estudia ¿se venderá?… ¡no!  pero dejo claro que es la puta de alguien… lo dijo… ¡¿yo era su inspiración?! Jeje,  Estoy segura que ninguna infeliz de aquí podrá evitar que Rosaura se interese en mi y volverá a hacer lo que yo quiera… es demasiado tonta… pero no debe de seguir así… está  mal… qué no lo ve.

Mía estaba más que segura que Rosaura era maltratada… por sus ojeras y su palidez, pero fue el castigo que tuvo, más la impresión de verla que dieron a Rosaura esa apariencia algo desafortunada… Ella una vez pasado el trago amargo de hablar con Mía, pensó en su amor… ese que no le ha importado que ella sea una reclusa extrajera, ni tampoco que no tiene nada… y  la ha hecho sentir una reina… porque así se sintió cuando abrió los ojos en la enfermería, esa mirada que la veía como si ella fuera lo más importante en el mundo nunca la olvidaría… tal vez fue el sedante pero estaba casi segura que ella la vio con amor.  Una sonrisa acompañada de una lágrima corrió por su mejilla al recordar que alguien pensaba en ella.

Mía llegó de mal humor a su celda

-¡Guapa! ¡Espera! ¡Cómo corréis!… Cómo os fue con la mujercita esa-

-No sé, bien, le deje claro lo que ella fue para mi… y creo que no le cayó de sorpresa, aunque mi intensión era otra no me pude aguantar el molestarla-

-Jajajaja  joder, así que serás una piedra en el zapato para la india esa-

-¡Cuida la lengua!… que sólo yo la puedo joder ¿entendéis?-

-¡Como mande la jefa! jajajaja siempre y cuando me tengas contenta, por ahora esté abrigo es suficiente, pero esa chulería os traerá problemas, queda advertido-

-Quiero que sigáis averiguando todo acerca de Rosaura…  por mínimo que sea… aaah  y no puedo cambiar, así que acostúmbrate-

-Vale, vale. ¿Y cómo la conociste?-

-Me la traje de Méjico en un viaje de trabajo, aburrida pero en su trabajo era  inteligente… ella podía beneficiarme en algunas cosas, no lo pensamos mucho. Yo no quería involucrarme con una mujer… Iker fue quién pensó en ella…. Y sin decirme le coqueteaba y nada que Rosaura se mostrara interesada y con tan buen ojo, intuyo que a ella le iban las tías y me aventó al ruedo, me convenció diciéndome que ella probablemente no sabía mucho de relaciones lésbicas así que sería como tener una cría por novia. Y así fue… bastante predecible… muy sincera y bastante enamorada de mi, tanto que me molestaba que no tuviera un poco de dignidad por tantas cosas que le hice, pero me sacaba de mis casillas, cada vez la soportaba menos. No veía  la hora de acabar con el teatrito… lo peor fue que la tuve que presentar con mis amigas, como mi novia… Todas quedaron en shock,  había sido bastante coqueta con los hombres, muy ligona y por mi vida pasaron infinidad, pero la vergüenza de ser la lesbiana del grupo se la cobre a la pobre, recuerdo que ella se quedaba al margen, mientras nosotras reíamos y bailábamos con cuanto hombre nos lo pidiera, ella ahí sin hacer ningún reproche. Sólo una vez, la última en que salimos juntas, un tipo se le acercó y no sé que le dijo al oído… y bailó con él… se veía contenta y tan desinhibida como sí se hubiera drogado, pero estoy segura que no… ese noche la vi radiante con una sonrisa que no era para mi, era para ese hombre… mientras bailó con él no volteo ninguna vez a mirarme, yo no la perdí de vista, quería ver hasta donde llegaba, estaba segura que ella me quería dar celos y no iba a caer en su juego, estaba muy equivocada si pensaba que iría a separarla, si quería cogérselo pues muy su gusto, y sería una excelente oportunidad de botarla; el tío tampoco dio señas de propasarse con ella, sólo bailaban y reían, así  se lo pasaron como media hora, te mentiría si te digo que no me cabreo pasado ese tiempo, y sin más el tío se despidió de ella amablemente y se fue, que sepas… ella es de esas que los hombres buscan para hacer una familia, creo que es su trato suave y serio, ese que tanto me caga… Tuve la maldita curiosidad de preguntarle si lo conocía, pero me no me rebajaría a demostrarle algún tipo de interés. Ah y no fueron celos, sólo que mis amigas comenzaron con “a qué te supo la cucharada” eso fue lo que me irritó más,  pudo desquitarse, haciendo casi lo mismo que yo. Después de irnos no hice ningún comentario la trate igual que siempre…. Fríamente-

-¡Qué perra habéis sido!-

-Esto por lo que pasamos las dos ha sido por el mal parido de Iker que me jodio la existencia poniéndome de condición el emparejarme con ella para lograr una sociedad que importara y exportara nuestros productos, conocíamos bien el mercado pero para que confiarán en la negociación nos trajimos a la mejicana para acabar de convencerlos, pero esa es otra historia.

-Contadme de la tía-

A ella no le gustaba salir con nosotras a divertirnos, nunca quiso involucrarse en el jaleo. Mis amigas no se la creían, porque delante de ella yo seguía siendo coqueta con cuanto hombre se me cruzara, mis amigas se reían mucho de lo sinvergüenza que era. Aunque se molestaba un poco, le decía que ese era mi carácter y era un alma libre, no me interesaba tenerla contenta ni hacerla feliz, cada vez me pesaba más, y me soportaba todo. Aunque ella no lo sabe nunca tuve nada con los hombres de las discotecas ni pubs, era exclusiva de Iker y de vez en cuando de ella, se conformaba con tan poco.

La mala suerte de Rosaura y mía,  fue la jodida crisis… bueno eso según Iker es que ya no sé que demonios hizo para que sólo él saliera bien librado… pero me ha dicho que me ama y que será cuestión de tiempo para que yo pueda salir.  Quiero confiar en él, así que he seguido el consejo de acercarme a Rosaura a bien no sé por qué, es por ello que quiero saber de ella, estoy segura que no despreciara tener a alguien que la conoce tan bien… ya la convenceré de que soy inocente de haberla involucrado en todo, con algo de tiempo…-

-¿Mía en verdad no sentís nada por la Rosaura esa?-

-Jajajaja ¡No!… ¡No me importa!… ¡yo amo a Iker!… es mi alma gemela, somos iguales, nos conocemos plenamente y a pesar de todo confió en que me sacará y estaremos juntos-Después de haberse reído, una pequeña incertidumbre la abrazó, ella lo quería, pero él qué tanto la amaba.

-Suerte maja, si te contará todo por lo que pasan las mujeres aquí por la culpa de un hombre… no dormirías nunca por la preocupación de que tu hombre haga lo mismo contigo-

-¡Cállate! Cerrad esa boca, él me quiere-

-¡Sí mujer! Lo que tú digas.  La Rosaura, crees que aún te quiere, porque por lo que  contáis os pasó muchas y sinceramente no creo que sienta ya nada por ti…-

-¡Ya verás! Que aún me recuerda y caerá…-

-¡Sería muy cabezona!… Tú desperdiciando amores y una en franca sequía. Ha de ser bonito ser querida por alguien, aunque sea otra mujer… a mi ninguna mujer se me acerca de esa forma no soy lesbiana pero a estás alturas, me dejaría mimar por alguna-

-Dale gusto al cuerpo, si a alguien le apeteces jajaja no te quedéis con las ganas-

-Que alguien este pendiente de una… cariñitos… miradas bonitas… besos dulces… el amor de alguien… definitivo me haré lesbiana jajajaj, ¡coño! Lo que hace la soledad-

Mía lejos de reírse se queda seria mirando al infinito, pensado en el significado de esas palabras, de lo que Rosaura le dio y nunca reparó en reconocer… había recibido amor… un amor que desprecio y del cual se aprovecho, pero su lógica intervino y le dicto una practica conclusión, Rosaura no era el tipo de mujer para ella, demasiado simple.

En su celda, Rosaura sonrió al pensar que el nombre de “Mía” tan sólo lo había magnificado como algo dañino para ella, tras su visita se quitó esa carga de emociones que pensó se revolverían en su ser,  no las había. La inquietud de ver a Lorenza  se fue agrandando de un momento a otro y sin pensarlo caminaba hacia donde su corazón le indicó.

-Señorita Jenny, podría hablar con la Sra. directora-

-Dime, en que te puedo ayudar, ella no esta… y no creo atienda a nadie, tiene un poco de trabajo y hoy  ha sido un día difícil… sería bueno que vinieras mañana si es que te interesa hablar con ella-

-Me gustaría esperarla, tal vez… pueda atenderme-

-Como queráis, sólo que te lo advierto, no es seguro que habléis con ella-

-Sí, no importa, yo espero-

Sentándose en el recibidor Rosaura no quiere dar marcha atrás, dará el primer paso para enfrentar sus sentimientos con ella, le enferma la incertidumbre, por lo que se ha vuelto casi una agonía el vivir con la duda de saber qué es lo que ella siente.

Lorenza camina sumida en sus pensamientos, por inercia se dirige a su oficina, no repara en mirar a su alrededor porque no ve a nadie, la charla con María ha sido totalmente inesperada y la ha dejado un poco preocupada. Y de repente está ahí sentada tan serena, la dueña de su insomnio, que el corazón se le paraliza, no debe exteriorizar su emoción, ya no, es demasiado peligroso, se sigue de frente, solo le dirige unas palabras a su secretaria mientras entra a su lugar de trabajo.

-¡Jenny los pendiente por  favor!-

-¡Si Señora!-

Una vez cerrada la puerta.

-Lo ves ella no creo te atienda, anda liada-

-Sólo dile que puedo esperar, si está ocupada… por favor, es que no creo volver otro día-

-¡Vale!… sólo porque quiero que sonrías un poco maja, es que te ves triste-

-¡Gracias!-

Adentro

-Sra. estás son sus pendientes y llamadas que recibió. Su hermano dijo que la vería en su casa por la noche… y una Interna quiere hablar con usted… le he dicho que tal vez no podrá recibirla… y no sé, tal vez sepa algo de la pelea de sus amigas… pensé que estaría bien que la recibiera… no cree volver después-

-Gracias Jenny… y pasad a Rosaura en 5 minutos, tal vez tenéis razón y sabe algo de sus amigas-

El corazón de Lorenza impactaba fuerte contra su pecho, verla… siempre lo desea, y hablar con ella será un regalo de dios.

-¡Rosaura! Tenéis suerte, espera un poco y podréis pasar-

-¡Gracias!- Ahora Rosaura tiene un miedo enorme que casi la hace arrepentirse de encontrarse ahí.

-Toca un poco la puerta y entra, ella sabe que eres tú-Esto último emocionó a Rosaura.

-¡Gracias Jenny!-

Pasado este tiempo, toca y entra, ve a Lorenza sentada con la mirada en unos papeles y decide acercarse apenas al escritorio… la observa, tan elegante, intelectual, seria, bella, que por un instante piensa que está soñando el observarla, una sonrisa dulce asoma en su rostro, pero no, en verdad está ahí de pie, a punto de arrojar su alma al mismísimo infierno si Lorenza no tiene algún sentimiento por ella. Esa duda es la que debe de terminar. Para olvidarse de una vez por todas con las tontas ilusiones que se han despertado en ella.

-¡Podéis sentarte!

-Sí… gracias-

Lorenza sigue observando papeles, no hace caso de la presencia de Rosaura… ese es signo de que Lorenza no piensa en ella y mucho menos la quiere…. El corazón de Rosaura resiente la indiferencia, quiere salir pero sus piernas no responden espera un milagro, pero ya no cree en ellos.

Tonta, idiota, estúpida… eso soy, por qué vine. Impulsos pendejos impulsos, ahora cómo me voy, todo lo imagine… estoy loca de pensar que a ella le intereso…

Dolida, reúne fuerzas y  se levanta rápido, se dirige a la puerta. Y una voz fuerte y autoritaria la detiene.

-¡Espera!-

Lorenza corre y escasamente llega a detenerla en la puerta, apoyando su mano en la puerta impidiendo ser abierta queda detrás de ella, su cuerpo se pega al de Rosaura de espaldas y le susurra al oído.

-¡Perdóname! Tengo miedo de hacer algo… mal y no sé… yo no soy así… pero me pones mal, y no sé que debo hacer cuando estoy contigo… me alteras… me dueles… me emocionas… me vuelves loca… y no tengo el valor de decírtelo, hasta ahora que te quieres ir… así-

Rosaura ha quedado parada recibiendo toda esta información que la hace renacer, sintiéndola a su espalda, un escalofrío la recorre, el susurro ha hecho un gran trabajo, no tiene defensas, le ha robado el alma. Pero ésta esperanza es acompañada de una duda, por qué no escuchó la palabra mágica “amor”.

Las manos de Lorenza ante el silencio de Rosaura deciden aferrarse a ella, su cintura es asida fuertemente y la boca de Lorenza se interna en el cuello… besándolo despacio, buscando espacios para seducir, se apropia de ese cuerpo que no tiene voluntad, los gemidos de Rosaura la animan a seguir, sin aguantar más le da vuelta y sus manos le toman el rostro, y lentamente cierra lo ojos para depositar un beso suave en Rosaura, que lo recibe.

-Señora… yo, necesitaba tan sólo que me respondiera a una duda-

Lorenza se mortifica por lo dicho por Rosaura,  queda petrificada.

-¿Cuál?- Pregunta totalmente descolocada y temerosa

-¿Me ama? … Sé que no es lo mismo amar y querer… tal vez sólo me quiera, o sienta deseo por mi, somos adultas y tenemos ganas de cosas, ya sabe… ¿Para qué me quiere usted?… Aun estoy a tiempo de tratar de salvarme del infierno que podría ser mi vida si me enamoro más de alguien que no me ama. Y de hecho, si es así dígalo y le aseguro que tendrá de mi lo que quiera, pero no me diga mentiras ni me haga ilusionarme con el amor.  Despierta en mi pasión y más cosas, pero debo saber hasta dónde debo llegar…- En sus ojos hay lágrimas.

-¡Yo! Sólo sé que te necesito Rosaura. No te puedo ofrecer nada, tendría que ser una relación furtiva, en la que tendrás que ser un fantasma. Lo sabes, esto es algo    prohibido totalmente para mi, está situación se escapa de mis manos y debo dejar en claro que me haz seducido que te pienso y te deseo, eso esta claro… -Rosaura se ha separado de ella y escucha casi las mismas palabras que alguna vez escucho de Carmen… sólo quieren sexo, sin compromiso alguno, sin la intervención de sentimientos…-

-¡No diga más!… sé bien para lo único que significo para mujeres así como usted, pensé que era muy mala suerte el que las dos primeras mujeres en  mi vida me usaran… pero una tercera… jaja. Sólo puedo pensar en dejarme llevar, no sentir, ni analizar mis sentimientos… sólo disfrutar de lo que me ofrezcan y si usted está siendo clara que sólo va a ser sexo… yo lo acepto. Sólo le voy a pedir una simple condición, que nunca me pregunte de mis sentimientos, porque desde ya le digo que no los tengo-

-Rosaura yo…-

-Shhhh, no diga cosas que no pueda cumplir… ni mienta… aceptó esto, por el tiempo que dure… ni siquiera puedo ser tan exigente en mis condiciones-

Sin más se acerca a Lorenza y la besa con pasión, el nudo en su garganta por las lágrimas retenidas, no desaparece… las caricias que Lorenza comienza a otorgarle la hacen relajarse… ha decidido no pensar más, es tan doloroso, y ya no quiere sufrir, disfrutará del cuerpo de Lorenza que es precioso. Hará el amor con ella y después dios dirá.

Lorenza desea explicarle, decirle que está equivocada pero de que sirve si en algún momento romperán, esa situación en imposible, por lo menos ahí en el centro.

Rosaura se acerca suavemente y la mira a los ojos le detalla la cara y sonríe, las manos toman la cintura y se siente tan bien con esa aproximación, una vez claras las cosas tiene permiso de demostrar su deseo… la abraza suavemente y ahora es ella quien hunde su cara en el cuello de Lorenza, la aspira y frota su cara contra éste. Huele tan bien que desea alguna vez despertar una mañana así… sentir el cuerpo deseado así de cerca la ha trastornado y sus manos comienzan a desabotonar la camisa de Lorenza sin mirar.  Para Lorenza esa falsa sumisión le está costando, ya no aguanta más y sin más besa acaloradamente a Rosaura que se impacta con la pared levemente y mueven una lámpara que hay en un taburete. Lorenza la toma de la mano y la guía al servicio, no opone resistencia sabe que las dos están con ganas y es mejor así, Habiendo otra puerta.

Una vez dentro Lorenza se sabe la cazadora, besa el cuello, clavícula de Rosaura y abriendo un par de botones del uniforme mete una mano para sentir los atributos más apetecibles para Lorenza que frota delicadamente sin perder de vista la cara de Rosaura, tiene cerrados los ojos por la caricia tan exquisita, el jadeo que comienza, hacen saber a Lorenza que le gusta, pero más cuando saca uno para probarlo, lo degusta tan atrevidamente que Rosaura se sonroja, parece explotar, sus senos han crecido por las atenciones de Lorenza y rebozan en sus manos y boca. La flor de vida de Rosaura está llegando al máximo, tiene necesidad de ser tomada, unos contracciones desquiciantes así lo indican, desea ser llenada necesita de atención urgente, no dice nada solo se aferra fuertemente a Lorenza y  aprieta fuertemente la boca para no exigir lo que su cuerpo pide, decide no decirle nada, ella debe de descubrirlo. Lorenza baja una mano para subir la falda de Rosaura y no resiste la tentación de sentir, acariciarle las piernas, quiere ser sutil, sin embargo los jadeos de Rosaura la animan a ser un poco más rápida y sin perder tiempo su mano se introduce en la ropa interior, palpa el sexo de Rosaura tan excitado como lo tiene ella misma, su mano ha quedado bastante lubrica a su contacto, acaricia levemente. Para Rosaura esa mano es un alivio y un tormento, está ahí pero no entra, sigue jadeando apretando fuertemente su espalda con sus manos, hasta que al fin Lorenza se interna en ella despacio a lo que Rosaura con en movimiento pélvico le indica que es urgente la posesión.**

Para desgracia de Rosaura es tan incomoda su ropa que al notarlo Lorenza, deja su tarea, para desabrocharle la falda y botarla, se arrodilla y baja con afán la ropa interior de Rosaura quiere ver su monte Venus por primera vez y es tal como se lo imaginó, deposita un beso, levanta la vista y Rosaura tiene las manos aferradas al mueble de baño fuertemente,  Lorenza ríe e intenta besando sus piernas  el que Rosaura se abra para probarla, subiéndole una pierna en su hombro comienza el   reconocimiento de esa intimidad que ya ha degustado y que sufría por no saber hasta cuando lo haría de nuevo, la emociona, sus manos aferran el trasero y cadera de Rosaura para apoyarse, ella quiere ser sutil pero los jadeos y sonidos guturales de Rosaura la enardecen, hacerle sexo oral le produce un fantástico orgasmo, nunca imaginó que también dando fuera posible, pero aún más extraño es que sólo en pensar hacérselo se le hiciera agua la boca, es un placer  y pasa a un estado de transe que no puede parar, se levanta rápidamente y la besa mientras su mano le sigue dando atención, sus dedos sienten el interior de Rosaura tan delicada y suave que le da miedo lastimarla, sin embargo los movimientos pélvicos le sugieren que siga, ella es un manantial pero su objetivo es hacer que Rosaura disfrute, una mordida en el hombro de Lorenza son muestra del orgasmo de su amada que se ha quedado jadeando aferrada fuertemente a Lorenza. Las mil sensaciones que siente son paga justa de tantas lágrimas que la vida le debe, piensa que ahora mismo puede morir sin reclamarle nada a la vida, ha sido tan feliz en los brazos de Lorenza que sabe que nada podrá superar esos momentos… Es simple, la ama y cualquier caricia de ella es y será maravillosa.

Rosaura desabrocha la blusa de su amante y el brass, se repega a ésta, encontrando una satisfacción avasalladora en la fricción, miles de sensaciones recorren su cuerpo, se siente explotar, nunca nadie le había proporcionado tal gusto. Decide desnudarla, no quiere arruinar la ropa de Lorenza y lo hace a pesar de que no tiene la cordura suficiente. Las dos desnudas de pie se besan mientras sus muslos se masajean mutuamente, Rosaura sabe que Lorenza necesita de ella

-Amor… si no quieres, no lo hagas… he sido feliz… sintiéndote…-

-Haz dicho… ¿amor?… no sé si enojarme o alegrarme… ¡no mientas! Te lo pedí-

-Yo… no miento, amor, amor, sólo quiero que seas mi amor… de nadie más… no me diste oportunidad de explicarte… ¿pero me sentiste? Estoy segura, trate de demostrarte lo que me importáis… mi Rosaura- A Rosaura se le quitó un extraño dolor en el pecho, se sintió liviana y la felicidad le invadió su alma.

-Lorenza mi Lorenza, Te amo como a nadie y alejarme de ti, físicamente desde ya me duele, aunque estoy acostumbrada a que me duelas… antes, de que no supieras de mi y ahora de tener que aparentar. Amor… es una bella palabra… gracias por decírmela, amor… Necesito también sentirte-

-Tontita, crees que sólo tú sufrías… Mirar que eras de otras, hablarte y demostrar indiferencia ha sido un infierno, me abandono el apetito muchas veces del dolor que tenía clavado… aquí, en el corazón cuando sabía cosas de ti… Los celos me han acompañado desde que me conociste, bien caro lo pague… ¡perdóname!… amor… ¡perdóname!…-

-Shhhhh, gracias a eso, estamos juntas, y sentimos amor… así que valió la pena-

Besos y unas manos endemoniadas parecían lastimar a Lorenza por tanto placer  y un camino de besos fueron bajando mientras sus manos se negaban a dejar un par de juguetes que le daban gran felicidad a Lorenza, hasta que los abandonó por apoyarse en las piernas de Lorenza, ahora las apreciaba y acariciaba con verdadera pasión, eran suyas y todo lo demás también, era increíble, Rosaura introdujo intempestivamente la cara en la entrepierna de Lorenza, haciéndola saltar y un estremecimiento nació ahí y subió hasta la nuca, fue electrizante…  Rosaura encontró un mar, queriendo devorar todo, sus labios y lengua encontraron gran placer al succionar esa flor maravillosa llena de mieles, y una sagaz lengua que intentaba penetrar lo más posible tomándose pequeños descansos en los que tan sólo recorría todo ese espacio tan deseado.

Lorenza desfallecía a un más que la primera vez que Rosaura la probó, tuvo la necesidad de tomar la cabeza de Rosaura para indicarle en dónde moría, estalló, no lo pudo evitar… Rosaura era su cura para la asexualidad que por mucho tiempo la mortificó, ahora era plena. Se aferró a lo que pudo, su orgasmo fue intenso, Rosaura lo comprendió y  se levantó para abrazarla quería sentir ese cuerpo estremecerse. Metió un muslo para tratar de sentir las contracciones de su Directora. No podía dejarla así, su mano reclamaba el sentirla también. Mientras le decían al oído “te amo” su mano se interno en ella y fue maravillosamente bien recibida, ahora era ella la que exigía la posesión, el placer de ella fue alucinante mientras besos llenaban su pecho y una lengua dibujaba el placer en el lienzo más hermoso y maravilloso para Rosaura. El tiempo era su enemigo ya había pasado el suficiente y más como para que Jenny se preguntará qué pasaba, era una suerte que no hubiese llamado.

-Amor, debemos salir-

-Lo sé… pero no sé… cómo sobreviviré sin ti-

-Me tienes, y estamos igual, me hubiese encantado que fuera en otro lugar, no fue muy decoroso-

-Es muy bonito, está decorado maravillosamente, que no parece un baño… no te preocupes-

-El hacerlo casi de pie… me ha costado… pero valió muuucho la pena, piénsame, y ámame. Apóyate en Mónica, ella te ayudará cuando lo necesites y no preguntes pero sabe de esto que sentimos, es muy inteligente-

-¡Qué!... No puede ser.

-Ella no dirá nada, pero igual lo negaré si por alguna razón lo hace…. Perdona por lo que te diré… pero si se supiera lo negaría… espero lo comprendas… hay personas que dependen de mi…. No soy completamente libre… tengo un pequeño que es la mitad de mi vida, la otra eres tú. Pero aún así mis padres también me importan, pero aún más mi Julián. Es por él, espero me comprendas-

-Sí te comprendo,  un hijo es lo primero para una madre, así debe ser-

-Te amo y no te pido nada, tan sólo esa relación furtiva que mencionaste… No nos queda de otra, amor… pero para mi suficiente-

-¡Gracias! ¡Te amo!