La tarde con Claudia

Claudia, sin mas nombres, me dio una tarde de placer...

Hola, este relato es una pequeña historia basada en hechos reales. Yo mido 1.80mts, soy colombiano, de consistencia atletica, piel blanca y buen cuerpo. No he sido un Casanova, pero tampoco me ha ido mal con las mujeres. Claro que nunca imaginé que la mujer de esta historia se fijara en mi. Todo comenzó en una ciudad de la costa. Habia estado de visita alli por motivos de trabajo, y regresaba ya a mi ciudad para descansar. El vuelo estaba retrasado, y mientras trataba de leer el periodico para quemar tiempo vi en el terminal esta hermosa mujer, de unos 24 años, unos 1.70mts, pelo negro y largo, y un cuerpo de diosa, en el que sus senos grandes y redondos resaltaban a la vista. Siempre he sido un admirador de los pechos de las mujeres. Asi que obviamente ella llamó mi atención facilmente. Bueno, en el avión oh sorpresa, me tocó al lado de ella. Sorpresa pues siempre me toca al lado de los niños, o nadie interesante. Durante el vuelo me animé y empezamos a conversar. En vez de responder a mis preguntas con monosilabos, como lo esperaba, ella de hecho resultó muy simpatica e interesante. Me contó que se llamaba Claudia, que era casada, y que viaja constantemente por motivos de trabajo. Pero que vivia en mi ciudad. No me contó mucho acerca de ella, sin embargo. Con un par de cervezas a bordo, nos fuimos a temas mas eroticos, y me preguntó de una: "Que fue lo primero que viste en mi? " Yo, como medio atontado no pude responder directamente, pero bajé los ojos a sus pechos y sonreí. Ella se dió cuenta y se echó a reir. Me dijo que le pasaba muy seguido. Y que tambien habia visto algo interesante en mi: mi trasero. Ambos reimos. De ahi seguimos hablando animadamente, y lo unico que puedo decir es que me habia gustado mucho la compañia -por todos lados.- Era un vuelo corto, de mas o menos 1 hora, asi que antes de quererlo ya estabamos aterrizando. Alli en el terminal me esperaba mi novia, de la que ya le habia hablado a Claudia, y tambien su marido Asi que nos despedimos antes de bajar del avion, no sin antes dejarle mis datos y mi telefono. (Por si acaso). Al otro dia, ya en mi trabajó recibí una llamada de ella. Me dijo que habia tambien disfrutado la compañia en el vuelo, y que queria que nos vieramos, pero me puso bastantes reglas de juego, en las que recuerdo que no debia llamarla nunca (de hecho no sabia a donde) y que teniamos que ser muy discretos, pues no queria afectar a su matrimonio, ni mi noviazgo. Tambien me dijo que el nombre se quedaria apenas en Claudia. Nada de apellidos o direcciones. (Ella si tenia mis datos completos, asi que estaba en ventaja). Bueno, para acelerar la cosa, despues de una cita en un café medio escondido, en la cual nos conocimos mejor, nos pusimos una cita en mi apartamento de soltero. Alli vivia yo todavia solo, y entonces la invité a cenar. Me gusta cocinar, y especialmente disfruto cocinandole a las mujeres, que despues de una buena cena y vino, son mucho mas amigables y quedan un poco mas impresionadas. (En mi ciudad latina, a pocos hombres les gusta la cocina). Alla llegó, despues de esperarla un rato, y a pesar de tener una deliciosa cena italiana servida, me dijo que no tenia mucha hambre . de esa. Pasamos entonces al vino tinto, y despues de un par de copas estabamos calientes y besandonos en la boca con pasión. No podia creer mi buena suerte. Empezé entonces a desnudarla lentamente, y cuando sus dos pechos salieron libres de su prisión, se encontraron con un par de labios que los chupaban una y otra vez. Eran definitivamente espectaculares. Grandes pero no demasiados, con unos pezones de color rosado oscuro hermosos. Claudia gemia, y decia que le mordiera los pezones, y asi lo hice. Mientras tanto me iba desnudando tambien yo, y en menos de nada mi verga estaba libre y ella empezaba a pajearme. Mi verga se ponia erecta y caliente cada vez mas. Pasamos entonces a la habitacion y a mi cama, y alla terminé de desnudarla. Una vez admiré su belleza, me sumergí en su cuca, separé sus labios con mis dedos, y empezé a lamerla con mucha pasión. Ella presionaba mi cara contra su sexo, y me rogaba que la hiciera venir. Asi lo hice. Meti un par de dedos en su culito y aceleré mis lamidos, arriba y abajo, y ella respondia retorciendose de placer y gritando y gimiendo cada vez mas fuerte. Finalmente sentí ese temblor caracteristico del orgasmo femenino, y mis labios de llenaron de sus jugos. ella queria mas, MAS. Curiosamente antes de penetrarla me dijo que queria jugar con algo, dentro de ella. Me pidió una botella o un consolador o algo asi. No tenia botellas, asi que fui al baño y encontré una loción que venia en un frasco con un tubo largo y grueso. apenas ideal. A ella le encantó, y antes de darme cuenta empezó a chupar mi verga como una loca, y mientras tanto se hundia la botellita de loción. Arriba y abajo.. ahhhh, se sentia delicioso. Era definitivamente una experta en el arte de chupar una verga, y me lo demostró con creces. Pronto la locion entraba y salia rapidamente de su vagina, y con su boca maravillosa me llevaba al cielo, ahhhh, que riiicoooooo le decia yo. con palabras entrecortadas. No pudimos aguantar mucho, pues ambos nos deseabamos tremendamente, y cuando nos dimos cuenta estabamos llegando al orgasmo al mismo tiempo. ella con su loción, y yo con su boca, sus labios, su lengua. Tomalo, tomaloooooo ahhhhhhh!le dije. Mi orgasmo llegó junto con el suyo, y para mi sorpresa y gusto, se tomó toda mi leche. Luego se sacó la loción y me pidió que la lamiera. Me miraba con deleite y placer mientras yo lo hacia, y claro, sabia delicioso el afortunado tarrito. Una vez satisfechos, nos vestimos de prisa, y me pidió dejarla en un lugar poco concurrido, cerca de un centro comercial. Con esta diosa hablé un par de veces mas, pero era ella quien me llamaba, y nunca, nunca supe su apellido. Despues tuvimos otro par de encuentros, en los que fuimos mas lejos, pero tengo que guardar material para mis proximas historias, no creen ?? Esta historia es entonces para ti, Claudia, para que veas que nunca he olvidado esa tarde "loca" en mi apartamento.