La sumisa secretaria (7) - Cambio de rol

Laura por orden de su amo debe buscarse un esclavo en la playa a quien someter.

Capítulo 1: http://www.todorelatos.com/relato/79668/

Capítulo 2: http://www.todorelatos.com/relato/79685/

Capítulo 3: http://www.todorelatos.com/relato/79710/

Capítulo 4 - Ritual de iniciación: http://www.todorelatos.com/relato/79772/

Capítulo 5 - Vuelta a la oficina: http://todorelatos.com/relato/79826/

**Capítulo 6 -

Sorpresas en el baño: http://todorelatos.com/relato/83228/**

Capítulo 7 - Cambio de rol

Después de la salvaje tortura en los baños, Laura se dirigió al despacho de su jefe. Tomó silla una vez tuvo permiso y se quedó callada escuchando.

-Esa mujer que acabas de conocer se llama Sandra. Hace un año era mi juguete, pero fue desobediente y tuve que romper el contrato. Dejó de ser también mi secretaria y le ofrecí un puesto para limpiar la oficina. Ella aceptó el empleo, no quería despegarse de mí e incluso me visitaba por las noches medio desnuda intentando provocarme para que volviera a utilizarla. Yo he pasado siempre de ella, no quiero esclavas desobedientes. Parece que cuando ha visto que tenía una nueva sirvienta la ha tomado contigo, pero no te preocupes, tendrás la oportunidad de vengarte.


Como cada mañana fue al cuarto de su amo a despertarle con una mamada y así tomarse su desayuno.

-Perrita, voy a ponerte a prueba para cosas que me gustaría que hicieras en un futuro.

-Haré lo que usted quiera para que no se aburra, ¿Quiere que me desnude y ponga mi coño a su disposición?

-Eso estaría bien, pero no perrita, lo que quiero que hagas es otra cosa. Vas a ir a la playa a buscar alguien para seducirle, traerle aquí y luego dominarle, hoy quiero verte en un rol diferente al habitual, ¿crees que serás capaz?

-Lo intentaré para contentarle amo. Haré lo que crea que puede divertirle y excitarle.

-Yo te estaré vigilando putita y pondré una cámara en la habitación para poder ver que le estas haciendo. Llevaras este huevo vibrador que puedo controlar a distancia.

Se preparó para salir con un bikini amarillo, un pareo y una camiseta blanca.

Una vez en la puerta su amo introdujo el huevo vibrador en su coño y se despidió de ella con unos pellizcos en sus pezones.

Al llegar a la playa estuvo dando una vuelta buscando algún chico de su edad y que estuviera sólo. El huevo no vibraba aún, pero se movía con cada paso y esto hacia que empezara a mojarse. En la arena aún era peor porque sus pasos eran más imprecisos.

Encontró alguien que le parecía interesante tumbado tomando el sol, no quiso ponerse muy cerca para no ser muy descarada, así que se puso a unos 5 metros de él, pero entre la toalla del chico y el agua, por lo tanto si él quería darse un baño tendría que pasar por donde estaba Laura.

Desplegó su toalla inclinándose hacia delante y dejando una visión perfecta de su culo ya desprovisto del pareo. Se quitó también la camiseta dejando sus pechos a la vista, sólo cubiertos por la parte superior del bikini. Se tumbó en la toalla con unas gafas de sol para así poder seguir mirándole sin que él se diera cuenta.

Después de un rato vio como se levantaba para ir hacia el agua, así que sacó su crema solar y empezó a untarse su piel, haciendo que brillara bajo los rayos del sol. Hizo como que temía problemas para aplicarse la crema solar por su espalda en el momento que él pasaba por su lado.

-Ehm, oye, quieres que te ayude?

-Pues me harías un favor porque no llegó a algunas zonas y no quiero quemarme.

-Sería una lástima que se quemará una piel tan bonita.

-Vaya, parece que ya viene al ataque -pensó Laura. -Tal vez es que se cree un Don Juan. Será entonces más divertido lo que vendrá después.

Él se sentó al lado y empezó a ponerle la crema.

-Siéntate en mi espalda, te será más fácil.-Era la primera orden de la tarde.

Se fue a sentar sobre la parte baja de su espalda, pero en el último momento ella subió un poco y término sentándose en su culo.

-Fóllame.-Dijo ella en voz baja.

-Perdón?-¿Había dicho lo que él había entendido? No era posible.

-Frótame. Que me parecía que te habías quedado dormido, porque no notaba tus manos.

El chico empezó a aplicar la crema aún algo descolocado.

-Como te llamas?

-Eh, yo? Victor, tú?

-Laura. Deshaz el nudo del bikini, así no te molestara para ponerme la crema por la espalda.

Ella había atado el nudo muy fuerte para que su futuro sumiso no lo tuviera nada fácil.

-Que ocurre, no sabes?-Nunca has quitado un bikini o un sujetador?-Dijo Laura en tono pícaro.

-No, es que está atado muy fuerte-Dijo él ya algo avergonzado.

-Prueba con los dientes.

Él se reclinó encima de ella para hacerle caso, con lo que Laura empezó a notar esa polla reposando entre sus nalgas y ya algo dura.

De repente el huevo se puso a vibrar. Fue un sólo instante, lo que hizo que diera un pequeño salto golpeando con su culo la entrepierna de Víctor.

Su amo ya debía estar allí observándola y esa vibración le recordó que no era ella la que estaba al mando.

Víctor empezaba a estar excitado después de estar poniendo crema por esa fina piel y por el salto de Laura que no sabía a que había venido.

-¿Qué edad tienes, Victor?

-23 años, ¿tu?

-Yo tengo 21. ¿Puedes ponerme también crema en mis muslos?

Víctor empezó a cubrir con protector solar las piernas de Laura, subiendo cada vez un poco más y al ver que Laura no le decía nada subió ya hasta la parte de su culo que no cubría el bikini.

Tenía ya una erección moderada que ella vió de reojo y a través de sus gafas de sol.

-¿Estas veraneando por aquí?

-Si, un amigo me ha prestado su casa para que pase unos días y allí estoy sola y algo aburrida.

-Si quieres yo puedo pasarme a hacerte compañía.

-Sería perfecto así no como sola.

Estuvieron un rato más hablando y finalmente decidieron ir al apartamento.

Ella se sentó en la toalla de espaldas a él y empezó a ponerse la parte de arriba del bikini. Si Víctor hubiese estado al otro lado hubiera visto los pechos de Laura, pero no fue así.

-¿Tu amigo es sólo eso o tenéis algo más?

-Soy su esclava y puta particular.-Es lo que pensó, pero le dijo: “Sólo amigos, pero tenemos muy buena amistad, yo haría por él lo que me pidiera.”

Su amo había estado poniendo el huevo en marcha a ratos, pero una vez entró a la finca empezó a vibrar sin pausa.

Una vez en el ascensor pegó su culo a la entrepierna de Víctor y empezó a restregarse suavemente. Él desde atrás lamía su oreja.

Ella se giro y empezaron a besarse, mientras metía una mano dentro del bañador para coger la polla de Víctor.

Una vez llegados a su piso, Laura cogió a Víctor de la mano y lo llevó al apartamento. Ya dentro, él la empujó contra la pared y empiezó a besarla y sobarla por todo el cuerpo. Si ella no tomaba pronto el control, después sería demasiado tarde. Giró a Victor y en ese momento fue él quien se encontró de cara a la pared. Él se lanzó a besarla, pero ella se apartó rápidamente y le dijo que no moviendo la cabeza de lado a lado, mientras mostraba una pícara sonrisa.

Siguió calentándole besando su cuello y frotando una mano por su paquete. Laura se arrodilló enfrente de los pantalones del chico y empezo a bajarle la ropa. Muestraba ya una fuerte erección y pese a no ser tan grande como la de su amo, tampoco estaba nada mal. Finalmente dejó su polla en libertad y le dió unos besos. Luego se la metió completamente en la boca para mostrarle a su sumiso lo que tendría si se portaba bien.

Pero no es aún momento de hacerle disfrutar de esa manera, la mañana iba a ser muy larga.

-Ven perrito -Le dijo cogiendo su polla y estirando de ella como si fuese la correa de un perro.

Llegados a la habitación le echó a la cama de un empujón, se puso encima de su pecho desnudo y le esposo a los barrotes. Él seguía dejándose hacer.

-Así estas mejor, porque serás obediente y no pondrás las manos donde yo no quiera. -Mientras dijo esto fue quitándose la camiseta para dejarle ver de nuevo nuevo sus pechos cubiertos por el bikini.

-¿Quieres ver lo que hay debajo de la parte de arriba del bikini? -Dijo ella cogiendo su polla que estaba apuntando al cielo y empezando a masturbarle.

-Sí por favor.

-Pídemelo bien. -Dijo Laura de la misma forma que le hacía a ella su amo.

-Por favor, ¿puedes quitarte el bikini?

-Depende. ¿Harás esta tarde todo lo que yo te pida?

-Sí, haré lo que tú quieras. -Contestó mientras cada vez le masturbaban más fuerte.

Ella dejó lo que tenía entre manos y se quitó la parte de arriba del bikini y el pareo. Estaba ya casi desnuda ante él y veía como su polla no dejaba de palpitar en plena erección.

Se puso encima y empezó a besarle, frotando su entrepierna con la dura polla de su esclavo. Se mojó un poco la fina tela del bikini con el líquido preseminal.

-Vaya, me has manchado, ahora lo tendrás que limpiar con tu lengua.-Le dijo poniéndose arrodillada encima de su cara, con su coño a la altura de la boca del chico.

Víctor fue lamiendo el bikini, notando el caliente sexo de Laura debajo de la tela.

Ella se giró, dándole la espalda a su esclavo, quien así tenía una vista perfecta de ese culo. Cogió de nuevo su polla y empezó a hacerle una mamada, mientras con la otra mano se dirigía a su sexo para sacarse de una vez el huevo vibrador que su amo iba apagando y encendiendo cuando ella menos lo esperaba. Lo hizo bajo la atenta mirada de Víctor, quien no se perdía ningún detalle.

-Qué haces mirándome el culo, perrito?-Dijo dándose la vuelta.-Será mejor que te ponga un antifaz para que así no puedas mirar que es lo que ocurre.

Una vez hecho continuo con la mamada, poniendo sus piernas a los lados de la cabeza de Víctor.

Él mientras tanto intentaba llegar con su lengua a la entrepierna de Laura, que le facilitó las cosas para que pudiera llegar y lamerle todo lo que ella quisiera.

-Avísame cuando vayas a correrte, esclavo.

-Sí, ama.-Dijo él ya poniéndose en el papel.

Laura empezó a esmerarse, trabajando con su boca, su lengua y sus manos.Succionaba toda la polla del esclavo y pasaba por ella toda su lengua. No dejaba ni un segundo de descanso.

-Ama, voy a correrme.-Avisó Víctor, pensando que el aviso era para que ella pudiera apartarse y no recibir su corrida en la boca. Pero estaba equivocado, después de avisarla ella dejó la mamada, se puso en pie para quitarse la parte de debajo del bikini y fue a gatas pasando sobre el cuerpo de su perrito. Pasando sus tetas por su pecho y el coño por su polla, que estaba roja y parecía a punto de explotar. Le fue dando besos por el cuello y lamiendo su pecho. Jugó un rato con él entre besos y caricias y luego puso de nuevo sus muslos a los lados de las orejas de Víctor.

-Saca la lengua perrito, quiero que pruebes algo que tengo entre las piernas.

Su esclavo sacó la lengua y empezó a lamer, el caliente y encharcado coño de Laura, la cual ayudaba con movimientos de cadera a la lengua de Víctor.

Le cogía de la cabeza y apretaba su coño contra su boca para que su esclavo siguiera dándole placer. Sus jadeos fueron en aumento mientras su esclavo le follaba con la lengua hasta que al final llegó al tan deseado orgasmo.

-Ya puedes dejarlo, como te has portado tan bien voy a darte un regalo.

Se situó entre las piernas del esclavo y empezó de nuevo a pasar la lengua por su polla. Estaba incluso más dura que cuando la había abandonado, tal vez era que se había excitado más lamiendola a ella que mientras le hacían la mamada.

Se la metió lo más dentro que pudo y luego pasó sus dientes por toda su extensión causándole algo de daño.

Se la metía y se la sacaba de la boca cada vez más rápido.

-Ama, para o déjame correrme, pero no voy a aguantar.-Ella hizo oídos sordos y siguió chupando.

-Por favor, no aguanto más.-Siguió sin querer escuchar las súplicas de Víctor y continuo chupando incluso más rápido.

Aguantó todo lo que pudo, pero llegó un momento que no pudo hacer nada y explotó en la boca de su ama, la cual recibió todo en su boca pero luego fue a escupirlo al baño. El único semen que quería que pasara por su garganta era el de su amo.

-Vaya esclavo que no puede ni aguantar con una mamada!. ¿Es tu primera vez?-Dijo ella provocándole. Sabía que nadie podría haber aguantado dentro de su boca, se estaba haciendo una experta.

-Lo siento ama, me ha sido imposible.-Contestó él muy avergonzado por lo ocurrido y aún con la respiración acelerada.

-Te mereces un castigo por desobediente.

Laura fue a por unas pinzas y un cubito de hielo. Puso las pinzas en los pezones de su esclavo y luego fue pasando el hielo por todo su cuerpo, pasando después su boca por cada zona para hacer contraste de temperaturas.

En esa posición en la que estaba le hizo unas fotos por si las necesitaba para chantajearle con ellas más adelante.

Le estuvo besando por varios minutos y le quitó y volvió a poner las pinzas, quería que tuviera de nuevo una erección tan completa como la de antes.

Le quitó el antifaz y le fue colocando un preservativo. Luego le dió la espalda y puso su coño justo encima de su polla para ir sentándose lentamente sobre sus caderas hasta que estuvieron completamente unidos.

Él veía como el culo de Laura subía y bajaba para que el sexo de su ama enguyera su polla. Laura seguía cabalgando encima de Víctor, haciendo cambios de ritmo. En un momento bajo el ritmo y se sento completamente sobre su esclavo, tenía la polla metida hasta el fondo y fue girando lentamente hasta ponerse cara a cara con él.

Empezó de nuevo a cabalgarle y siguió las órdenes que le había dado su amo aquella mañana. Tenía que quitarle las pinzas y ponerselas a ella misma. Esto lo hizo mientras seguía saltando sobre el pene de su esclavo, la otra orden era que no podía tener 2 orgasmos y ya había tenido uno utilizando su lengua, así que tenía que hacer que se corriera rápido para que ella no estuviera a punto de llegar al clímax de nuevo.

Laura fue tocando sus pezones y jugando con las pinzas bajo la atenta mirada de su esclavo, quería excitarle con eso y hacer que se corriera. Iba sacando su polla de su coño cada vez más rápido, notando ese duro trozo de carne en su interior.

El chico finalmente se corrió en su coño, quedando exhausto al lado de aquella joya que acababa de conocer.

-Bueno, ahora fuera y no quiero volverte a ver, si me apetece volver a utilizarte te buscaré en la playa en el mismo sitio el primer sábado de mes.

El esclavo se fue, pero durante los siguientes meses fue siempre el primer sábado de cada mes esperando encontrar de nuevo a Laura y volver a vivir aquellas experiencias.

Continuará.

Espero vuetras opiniones, críticas y recomendaciones.