La sobrina (2)

Se hizo de noche y me deseo fue complacido luego de que la tía se habia dormido por la pastilla.

LA SOBRINA – Parte 2

En efecto tío Pablo tuvo razón. A los pocos minutos de subir a la habitación a ponerme algo distinto, llegó tía muy contenta porque había ganado en las cartas. Tío Pablo se hizo el desentendido y siguió leyendo el periódico como si fuese lo único que había hecho en la tarde y yo salí al encuentro de ella con un vestido corto de verano y peinándome como si apenas hubiese salido de la ducha.

Llegó la noche y luego de ver un DVD aburridísimo que tía se empeño en alquilar nos despedimos y nos fuimos a dormir. Tío Pablo como siempre entro en mi habitación y su beso de buenas noches fue un largo y muy caliente beso francés que me dejo extasiada por lo intenso del mismo. Mientras me besaba, su manota buscó entre mis piernas y me acaricio descaradamente la pepita por encima de la tela de la pantaletica. Me susurro al oído que me esperaba en la cocina dentro de una hora y salió de la habitación. Inmediatamente me levante y tomé una ducha de agua caliente larga y extendida y aproveche para deshacerme de cualquier vello inadecuado presente en mi cuerpo y me perfumé cada rincón divino para deleite de tío Pablo. Me vestí con un baydoll negro transparente con unas tanguitas en juego también transparente. Si tía me descubría, le diré que estaba jugando a ser modelo sexy

A la hora convenida bajé a la cocina y lo encontré sentado en la mesa con la bata entreabierta y un bóxer solo cubriendo su piel. Se notaba recién bañado y afeitado, y su cuerpo reflejaba pulcritud. Su colonia llenaba la atmósfera de la cocina y apenas disimulaba el olor del escocés que deleitaba lentamente. No te preocupes por tu tía porque se tomo la pastilla y ni siquiera un camión que pase a su lado la despertaría – me comenta en broma y entiendo el mensaje completamente. Sus ojos vuelven a comerme lentamente la figura. Mis senos suben y bajan rítmicamente por la anticipación de la pasión que esta por desbordarse. Me pide que le modele y gire de manera que pueda apreciar mis curvas debajo de la delgada tela. Danzo como una mariposa a su alrededor y percibo su energía sexual como aumenta en la medida de que abro mis piernas o me subo la dormilona dejando descubierto a sus ojos mis encantos de mujer.

Finalmente me toma por una mano y en un tirón me sienta en sus piernas y me abraza. Acerca su rostro al mío y poco a poco se deleita con mi perfume mientras sus labios van en busca de los míos. La anticipación del momento me vuelve loca y solo quiero sentirlo dentro de mí pero sus movimientos son calculados y exquisitos. Mientras mis jugos comienzan a fluir sus besos se hacen más fuertes. Su lengua penetra rincones entre mis labios y dentadura que envían flechazos de placer directamente a mi cuquita. Trato de contener la avalancha y solo me rindo a sus labios que me chupan, a veces solo me rozan otras veces me muerde suavemente enloqueciéndome por no haber sido besada de esa manera anteriormente. Su mano busca mi entrepierna sedienta de alcanzar mi punto húmedo en mi pepita y toma un breve respiro para mirarme descaradamente las pantaleticas. Me felicita por la decisión de depilarme porque le encanta la sensación de desnudez de unos labios depilados.

Cariñosamente me quita la dormilona dejándome solo con la pequeña tanga negra y toda a su merced. Esta noche es de él y de mi deseo. Esta noche gozaré todas las caricias que este hombre experto quiere experimentar en mí. Esta noche seré una putica muy especial para él. Sentado me pide que me pare frente a él y separe un poco las piernas de manera que pueda divertirse con sus dedos entre mis muslos. Juega a subirme la tanguita haciendo que se meta entre mis labios depilados y es algo ruda la caricia pero efectiva porque la tela araña la pepita inflamada enviando sensaciones encontradas al cerebro de dolor y placer. Continua con sus juegos y me introduce unos de sus dedos largos buscando el punto G. Parece ser muy hábil con eso porque al instante siento como si tocara un timbre mágico en la parte frontal de mi vagína, que produce sensaciones que van desde temblores, ganas de orinar, secreción de mis fluidos y sobre todo mucho placer. Me pide que me mueva y yo tal putica muevo mis caderas buscando la fricción de su dedo en ese punto. Jadeo repetidas veces y dejo escapar un gritito de placer cuando el orgasmo buscado explota desde adentro hacia mi culito y pepita explotando en sendas colecciones de sensaciones y vibraciones que casi me hacen perder la noción. Me quita la tanguita y se levanta de la silla.

Se desnuda lentamente frente a mí y me deja ver una lista y hermosa erección. Me acerco y lo abrazo y con gran fuerza y entonces me levanta en sus brazos dejando que mis piernas arropen su cintura quedando mi cuquita abierta y a solo centímetros de ser penetrada y complacida mi petición. Me sostiene y me besa soportando mi peso tranquilamente.

Me susurra al oído expresiones de sexo puro y me hace sentir puta y traviesa. Mi condición de mujer solo se refleja como hembra y con el deseo, tal perra en celo busco que su verga se acomode dentro de mi. Tío sabe mi intención y me complace, deja que su glande penetre suavemente y separe mis pliegues permitiendo que el resto de su tallo siga su camino. Me siento llena y el calor de su miembro estimula mis secreciones. Creo que mis fluidos bajan por su tallo y siguen por sus muslos. Me apoya encima del counter de la cocina solo para admirar como su miembro entra y sale en mi cuquita que a pesar de mi tamaño lo he soportado todo. Sus testículos comienzan a golpear mis muslos con cada embestida. Mis orgasmos se van acumulando uno detrás de otro y rara vez he tenido varios en una sola follada pero esta vez es casi como estar orgásmica constantemente. El huequito de mi culito abre y cierra como una flor y sus dedos se entretienen en jugar con él. Mis fluidos han mojado toda mi zona vaginal y es fácil humedecerse hasta el huequito en sí. Jadeo en su oído y le pido que me coja duro que no aguanto y dejo escapar un suspiro que solo refleja la huída de unos de mis orgasmos a través de las sensibles paredes de mi vagína haciendo explosión en mi pepita que la siento en fuego. Me deja descansar un minuto y me coloca en el piso nuevamente.

Aprovecho la oportunidad para arrodillarme y limpiarle su verga de todo rastro de mis fluidos y saborear el salobre de sus primeras gotas de semen que se le escapan lentamente. Aún parece un mástil de un velero alto y firme y me lo meto en la boca para saciar mi sed. Me llama putica traviesa y me encanta, solo le digo que es así y quiero

complacerlo pero el parece tener otras ideas. Me coloca en cuatro y casi en el aire me penetra por detrás tipo doggy con la diferencia que prácticamente me tiene cargada de manera que él mismo controla la entrada y salida de su verga en mi cuquita. La situación es extremadamente sexual y exploto en otro orgasmo avasallante que me hace ver estrellas y hasta perder el sentido del tiempo. No se si fueron minutos o solo segundos pero la respiración la siento muy agitada y creo que me esta matando de placer. Su respiración aumenta y sus movimientos se aceleran. Su glande parece palpitar y siento el calor de su semen llenarme y correr fuera de mi cuquita mientras escurre a lo largo de mis muslos. Me siento plena y segura y creo que un orgasmo como ese jamás lo volviere a tener. Fue esplendido y me elevo a niveles de placer que nunca antes había gozado. La sensación de haber sido poseída casi sin poder hacer nada en particular solo gozar, eleva un sentimiento de prostitución interno placentero porque si he de repetirlo con gusto lo haría

Tío Pablo regresa a su cama y yo a la mía. Se podrán imaginar que esto se repitio en incontables oportunidades en vista de que tía había abandonado la vida sexual y se conformaba con un polvo rápido cada dos semanas. Mientras tanto, yo mantenía a tío Pablo satisfecho y él a mí a su vez. Al poco tiempo regrese a España con una beca a estudiar y me separe de ellos con mucho dolor. Fue una experiencia que recomiendo a cualquier chica que lea esta historia. Más sabe el diablo por viejo que por diablo y el tridente lo tienen más caliente

mariepablo@yahoo.es