La Puta y el Cornudo XII

Como llevaba unos 2 meses embarazada ya fuimos a su primera consulta.

Para que le llevara todo el tema de su embarazo, hice ir a Maria a un ginecólogo que era amigo de correrías mio. Así, como llevaba unos 2 meses embarazada ya fuimos a su primera consulta. Allí estábamos los 3, algo curioso en la sala en la que solo había mujeres solas o parejas. Esperamos hasta que no toco nuestro turno y entramos.

  • Hola Jorge – dije.

  • Cuanto tiempo – contesto estrechándome la mano. ¿Como estas?

¿Es tu hija?

Me hizo gracia su salida pero era comprensible por la diferencia de edad que había entre nosotros. No le conteste y nos sentamos frente el. Le explique la situación entonces, que los 2 eran un matrimonio y que eran mis perros por decisión propia. Que ella se había quedado embarazada en la luna de miel, donde había sido follada por innumerables hombres. De vez en cuando los miraba para que asintieran, y ellos lo hacían mirando siempre hacia el suelo y con una tremenda cara de vergüenza por la humillación a que les estaba sometiendo.

Jorge empezó a hacerle las preguntas de rigor a Maria pero poniendo énfasis en algunos puntos ya que sabia que eran mis perros y los quería humillar.

  • ¿Cuando es la ultima vez que has follado? ¿Con quien fue? ?Te gusto?

Y Cosas por el estilo fueron las preguntas de Jorge a Maria que se la notaba estar pasándolo mal de vergüenza. A continuación le dijo que la iba a examinar, que pasase tras la cortina y se desnudase, a lo que yo conteste que no hacia falta que pasase tras la cortina si quería. Entonces le dijo que se desnudara allí mismo.

Maria se puso en pie y empezó a quitarse el vestido que llevaba. Juan estaba tan avergonzado de la situación que ni la miraba. Al quitarse el vestido, Jorge vio que no llevaba ropa interior.

  • Vaya, así que eres una putita siempre dispuesta – dijo

  • Para lo que le suele durar puesta, mejor que no lleve ropa interior – dije yo riéndome.

El se levanto de su silla y se acerco a ella observándola con cuidado. Daba vueltas a su alrededor como hace un buitre con la carroña. Maria estaba muy nerviosa porque no sabia que iba a pasar. Estando detrás suya, le cogió con una mano una teta

  • Estas alimentaran a la criatura, pero ahora me alimentaran a mi.

Con una mano en su teta, dirigió la otra a su coño y al ver que estaba empapada, le metió dos dedos de golpe en el

  • ¡Es toda un puta! - rio. Tiene el coño empapado.

Empezó a follársela con su mano y en la consulta se empezaron a escuchar solo el chapoteo del coño de Maria y sus gemidos. Juan estaba a punto de llorar ante la situación y Maria parecía estar disfrutando de la follada de Jorge y al final se corrió en su mano.

Le dije a Jorge que podía hacerle lo que quisiera pero antes que le hiciera el examen pertinente. Así lo hizo. Tras el examen, le dije que era suya. El aviso a la enfermera y le dijo que no le molestaran ya que el paciente que tenia era un embarazo de riesgo y quería examinarla bien. Y ya lo creo que lo hizo. Le dijo a Juan que tumbase a su mujer en la camilla para poder follársela a gusto. Juan se levanto y la llevo hasta allí. Me fije que el muy maricón se había empalmado con la situación.

Jorge abrió la cortina para que todos pudiéramos ver lo que hacia. Le dijo a Maria que se la chupara para ponérsela bien dura. Se puso a la altura de su cara y Maria tumbada como estaba, empezó a chupar. Cuando ya la tenia suficientemente dura, tiro de Maria hacia abajo de la camilla hasta poder penetrarla de pie y eso hizo. Empezó entonces a bombear, primero mas despacio para ir subiendo el ritmo poco a poco, Sus gemidos se mezclaban con los de Maria que estaba a punto de correrse de nuevo. Un pequeño grito nos hizo saber a todos que se había corrido dentro de Maria..

Entonces, mandé a Juan a limpiar el coño de su mujer como siempre me gustaba que hiciera, y el, muy solícitamente, fue hasta el coño de Maria y empezó a chupar y lamer toda la leche de Jorge.

  • Tranquilo que no la dejare embarazada, jaja – me dijo Jorge riendo. Tienes un buen par de perros tío , que suerte tienes.

Yo le sonreí diciéndole que mi trabajo me había costado. Entonces note que Jorge estaba como incomodo.

  • ¿Que te pasa? Te noto algo – pregunte.

  • Me estoy meando tío jeje. Voy al baño un momento.

  • ¿Para que vas a moverte teniendo a la puta aquí?

Se me ocurrió entonces algo para hacer en vez de la típica lluvia dorada. Le pregunte si tenia un especulo a lo que me dijo que por supuesto. Fue a un armario y volvió con el. Le dije que se lo introdujera a la zorra. El lo hizo sin ningún cuidado. Como tiene el coño de dilatado, no creo que le duela,jeje – dijo. Le dije que lo abriera bien. El lo hizo, dejando una agujero de considerables dimensiones. Entonces mande a Juan desnudarse y que, luego, se tumbara debajo de la camilla.

  • Ahí tienes tu baño, jejej. Juan recogerá lo que caiga y todo lo que manche el suelo lo limpiara luego con la lengua.

Jorge, me miro y sonrió. Fue hacia el coño de la puta y empezó a mearla. Así, la puta estaba recibiendo una meada en el coño y el cornudo en todo el cuerpo

  • Mira como disfruta la muy puta. Siempre has tenido unas ideas geniales – decía Jorge mientras meaba.

Estuvo meando un rato. Se notaba que tenia ganas. Juan por su parte estaba siendo empapado con la orina de Jorge, procurando que toda cayese en su cuerpo ya que sabia que lo que no lo hiciese, luego lo limpiaría el. Cuando por fin acabo, me levante y fui a ver la escena. Había caído bastante encima de Juan. Le dije a Jorge que diese papel a Maria para limpiar a Juan. Este, lo hizo después de quitarle el especulo.

Maria fue a limpiarlo, pero la detuve y le dije que antes se tumbara encima de Juan para compartir la orina. Ella puso mucha cara de asco, pero lo hizo sin rechistar. Cuando se levanto, lo dos estaban llenos de orina. Le dije que se limpiaran porque no podían salir así a la calle. Ellos lo hicieron con el papel que Jorge les había dado

El suelo estaba bastante manchado de orina, por lo que Juan, tras una mirada mía, se puso a lamerla para dejarlo bien limpio. Le dije a Maria que ayudara a su esposo por que sino iba a tardar mucho y Jorge tenia que recibir mas pacientes. Maria, con mucho asco, se puso a lamer también el suelo. Cuando ya estaba todo limpio, les dije que pagaran a Jorge por la consulta. Este me dijo que no se debía nada, que la revisaría gratis si todas las visitas eran como esta. Yo sonreí y le dije que de acuerdo, así seria.

Al salir de la clínica fuimos a un centro comercial a comer algo. Antes pasamos por un gimnasio que había al lado de la zona de restaurantes.

  • Hola, buenos días- dije

  • Buenos días - contesto el recepcionista.

  • Vera. ¿Ve es matrimonio que hay ahí?. Resulta que huele fatal y quería saber si es posible que utilizaran su ducha. A cambio de este gran favor, ella se lo sabrá agradecer como es debido.

Los ojos del recepcionista brillaron de lujuria. Me dijo que en ese momento no había casi nadie en el local, ya que era día de diario y se llenaba por las tardes esos días. Me enseño donde estaba el vestuario de chicos para que Juan se duchara. Luego fue hacia el de chicas con un letrero que ponía: no pasar, estamos limpiando. Lo puso en la entrada y entro junto con Maria y conmigo a el.

Le pregunte si prefería que le agradeciera su amabilidad ahora o después de duchada y el me contesto que la cerda olía muy mal, que mejor después de duchada. La desnudo el y la empujo hacia una ducha. Allí, cogió la manguera y empezó a enchufarla con el agua en chorro con fuerza

  • Puta, hoy por fin te vas a lavar – gritaba.

Luego se desnudo el y se metió con la puta en la ducha. Allíempezó a enjabonarla con una lujuria que no había visto en la vida. Cuando estaba enjabonada. Apoyándose en su cabeza, la hizo ponerse de rodillas y en ese momento,. empezó a follársela por la boca. Maria tenia arcadas de la fuerza con la que lo hacia. Cuando estuvo contento con follada por la boca, la puso de pie y la empujo contra la pared. Allí mismo, de pie y desde atrás, la penetro con fuerza y empezó a bombearla. Parecía poca cosa cuando lo vi pero era una bestia follando, pensé. Estuvo así hasta que se corrió dentro de Maria. Luego, la hizo arrodillarse y limpiarle la polla hasta que considero que estaba suficientemente limpia.

A continuación, Maria se vistió y salimos. Fuera nos esperaba Juan ya duchado. Fuimos a recepción y nos despedimos de recepcionista

  • Cuando quieran, ya saben donde tiene una ducha – grito guiñándome un ojo.

Me encanta dominar parejas porque me gustan las relaciones a largo plazo y creo que es lo mejor para algo así. Si alguna queréis conocerme, estaré encantado de vuestros comentarios en garvil42@hotmail.com.