La Puta y el Cornudo

LA PUTA Y EL CORNUDO

Hola. Mi nombre es Santiago. Vivo en un pueblecito de Madrid donde se vive mejor que en la ciudad y tengo una consultoría con otros 2 socios. A mi cargo tengo a 15 personas trabajando. Primero deciros como va a ir este relato porque es un poco complicado. Para que sea los más completo posible he empezado con la vida de la puta y el cornudo desde antes de que me conocieran a mí. Esto lo sé porque he hablado con ellos y me han contado todo. Así, la primera àrte sera contada por Juan, el cornudo, y la segunda sera contada por mi.

Tengo 53 años y a los 27 me quedé en una silla de ruedas por una enfermedad neurológica, pero mis padres me ayudaron con dinero y pude montar la consultoría que ahora me pertenece en parte.

Deciros también que dicen que soy atractivo, aunque no soy yo el que tiene que decir eso y para follar de vez en cuando, suelo ir a pubs de intercambio de parejas a ver si se presenta la oportunidad de echar un polvo.

Pasaremos a contar la historia:

Me llamo Juan y mi ahora mujer se llama Maria. Los 2 tenemos 35 y somos de Madrid. Yo mido 1,80, peso 85 kilos estoy cachas a qe voy al gimnasio a menudo. Ella es Morena, pelo largo tiene un cuerpo de modelo. Es mi ni bonita como siempre le digo. Siempre había tenido la ilusión de ver a mi chica con otro.

La primera vez que eso ocurrió fue en un camping en Málaga. Teníamos entonces 24 años los 2 y fuimos con un amigo, los 3 en la misma tienda. El segundo día de estar allí, ella se cambio y no se si por descuido o no, dejo la tienda abierta, de modo que el la pudo ver desnuda, Siempre ha sido muy exhibicionista.

Por la noche ya y bastante calientes los 3, empezamos a jugar a las cartas y para hacerlo mas entretenido, dijimos que cada vez que perdiéramos nos quitaríamos una prenda de ropa. Todos llevábamos 2, Maria bikini y nosotros camiseta y bañador.

Maria perdió enseguida y se quedo allí desnuda sin jugar ya.

• ¿Que te parece si hacemos esto mas interesante?. - dijo el

• ¿Que ha pensado?

• Si yo gano, me la follo

Yo estaba con 2 prendas aun y el con solo una, así que Maria estaba confiada y se reía. Yo por supuesto acepte. Como supondréis, al final perdí (para mi me guardo si lo hice a posta jeje)

• ¡No sera verdad -dijo Maria pero le veía en la cara que lo estaba deseando.

Si no lo deseaba aun lo hizo en cuanto se quito en bañador pues tenia una polla enorme y con los huevos colgando.

• Las deudas hay que pagarlas. Ven aquí y chúpamela.

Maria se acercó a el y empezó a chupársela como si fuese el mejor caramelo que se hubiese comido en la vida. Cuando la tuvo bien dura, la tumbo en el suelo y la penetro. Empezó a empujar y cuando vi que se iba a correr le dije que no lo hiciera dentro. En el momento dado, se salio de ella y se corrió en su cara y su pelo. Verla así con la corrida de mi amigo en su cara fue lo mas para mi

Desde aquel día follábamos los 3, no haciendo tríos, si no cada uno con ella cuando nos apetecía o le apetecía a ella hacerlo. Estuvimos toda una semana así.

Pasada esa semana paramos y no volvimos a hacer nada por el estilo durante un tiempo. Yo se lo pedía constantemente, pero ella me daba excusas, que si no le apetecía, que la dejase un tiempo, etc... Y así pasaron 2 años.

Yo seguía insistiendo y a los 2 años, un buen día, vino y me dijo que quería tener una aventura con un compañero de trabajo. Al principio no reaccione pensando que era una broma, pero cuando vi que iba en serio, le dije que adelante, con la esperanza de que se animase y volviese a estar con más gente.

A esos encuentros yo no iba. Ella solo me contaba cuando iban a quedar. Estuvo unos meses que no me contaba nada de sus encuentros por lo que, una vez nos mudamos a vivir juntos, me decidí a hablar con ella, y decidimos que mientras me contaba lo que pasaba en sus encuentros amoroso, nos desnudaríamos y me haría una paja.

Una noche, estando yo tumbado y ella de rodillas a mi lado pajeandome, fui a tocarle el coño y noté por primera vez el semen de otro en él. Entonces la mire entre extrañado y preocupado ya que ella en aquel entonces no tomaba nada.

¿Y esto? Siempre lo haces con preservativo porque no tomas anticonceptivos.

Bueno, mi compañero me ha querido follar así y por una vez que lo haga, he pensado que no pasaría nada.

Sin estar convencido de todo, lo deje pasar por temor a que se volviese a encerrar, pero no me gusto lo que hizo. Así estuvieron aproximadamente un año, quedando regularmente para follar. Yo conocí un día al compañero, pero no la vi follar con el nunca.

Cuando teníamos 28 años, cumplí otra fantasía mía que era que ella tuviera un amante fijo maduro, un desconocido aún. Por eso, la convencí de poner un anuncio en el portal de internet muy conocido. El anuncio decía:

“pareja joven busca hombre maduro con sitio para encuentros”

Quedamos en que yo revisaría el perfil, y ella eligiría el candidato ideal. Nos llegaron multitud de solicitudes de todo tipo, desde los típicos hola cornudo y puta hasta las sofisticados y educados. Viendo las fotos, Maria eligió uno. Se trataba de un hombre de 49 años que se llamaba Jaime. Nos pareció un hombre bastante apuesto y elegante. Asi que con el consentimiento de Maria le escribí.

Por la tarde ya tenia una contestación suya diciéndonos que quería ver a Maria bien, que le enviase fotos, así que le hice varias en ese momento y se las envié. En media hora, recibí contestación diciendo que lo que quería era verla desnuda pero que si no queríamos no había problema, nos dejaría en paz y podríamos seguir buscando. Yo me preocupe y llame a Maria enseñándole lo que ponía. Lo pensamos bien y nos decidimos a hacer lo que pedía. Maria se desnudo y yo le hice varias fotos en varias poses, algunas bastante provocativas.

En seguida recibimos contestación diciéndonos lo mucho que le gustaba Maria que se le había puesto dura solo con verla. Decía también que lo justo era ahora que le viéramos también a el y adjunto había una foto de su polla. Lo cierto es que era bastante grande. A Maria le encanto.

Empezamos un poco una serie de correos, el diciéndonos lo que quería hacer e intentando convencer a Maria y nosotros preguntándole mas cosas para conocerle mas. Nos decía que con él, Maria disfrutaría y probaría cosas nuevas si yo la dejaba.

Así pasamos casi un mes hasta que por fin nos decidimos a quedar. Lo hicimos un Viernes por la noche en su casa. Maria iba preciosa con un conjunto de lencería negro compuesto por tanga y sujetador. Se notaba que quería gustarle. Levaba una minifalda negra por encima de las rodillas y una blusa de satén blanca.

Al llegar a la puerta, llamamos y nos abrio el. Nos hizo pasar al salón y nos sirvió algo de beber. Estuvimos hablando un rato. De repente muy serio dijo:

• Cabrón, desnudala para mi.

Nos quedamos algo helados los 2 pero nos pusimos de pie y empece a desnudarla. Así la deje en ropa interior.

• Quitale el sujetador.

Lo hice. El estaba sentado en el sofá. La mando acercarse a el. Lo hizo y empezó a tocarle el coño por encima de la braga.

• Ven aquí cornudo – me dijo.

Yo me acerque y entonces vi algo que no había visto hasta entonces. El le había roto el encaje del tanga y estaba sobándole el coño directamente, metiéndole un dedo dentro.

• ¿Has visto que tengo un dedo metido en el coño de tu novia?

Empezó a follarla con el dedo, metiéndolo y sacándolo. Maria no decía nada, solo gemía de gusto, lo que le animaba aun mas. Dándose cuenta de esto dijo

• Quiero que beses a tu novia. Quiero que notes su respiración de puta.

Así estuvimos un rato hasta que de repente se levanto .

• Ahora quiero que le comas el coño a tu novia. Lubrícala bien para que luego me la pueda follar yo.

Al rato, apareció desnudo y la cogió de la mano. La levantó y la llevó a la mesa del salón. Allí la tumbó dejándola con su culo expuesto y me dijo que fuese hacia allí. Al llegar vi que estaba restregando su polla contra el coño de Maria. Le pedí que por favor usara preservativo cuando se la fuera a follar. No quería que se quedara embarazada de otro. El me miro muy serio y mientras se la empezaba a meter me dijo

• Este coño es mio y lo follo como quiera. Eres un cabrón muy joven pero a esta puta me la voy a follar cuando quiera.

Me tuvo mirando como su polla entraba y salia de Maria, cuyos gemidos iban en aumento según pasaba el tiempo. No paso mucho tiempo cuando Maria se corrió. El continuó follandola hasta que se corrió, inundandola con su semen.

Me encanta dominar parejas porque me gustan las relaciones a largi plazo y creo que es lo mejor para algo asi.Estaré encantado de vuestros comentarios en garvil42@hotmail.com. También podéis agregarme para hablar si queréis.