La Purificacion del Monaguillo

Que pasa cuando el cura de la iglesia seduce a un monaguillo.

La "Purificación" del Monaguillo.

Despues de hacer la primera comunión mi madre comenzó a insistir por lo católica que era que fuera monaguillo, la verdad era que no me hacia mucha gracia el asunto pero asentí a regañadientes.

Vivíamos en un barrio humilde y las misas normalmente tenían buena asistencia según mi memoria, tendría yo 13 años (1986) cuando di el paso de ayudar al Padre Alberto que venia de España y que ya llevaba un par de años en Santo Domingo, un hombre recto y justo en sus predicamentos no solo de la iglesia sino de la realidad social que vivía Rep.Dominicana en esos momentos.

Éramos conmigo 6 monaguillos que nos turnábamos durantes toda la semana, una de las grandes incomodidades era confesarse, evidentemente los pecados mas normales eran que decía mentiras blancas, que me gustaba una chica y que me pajeaba.

No puedo recordar con exactitud si fue en la tercera o cuarta confesión que repetí como un disco rayado lo mismo de antes.

Recuerdo si, que fue un jueves alrededor de las 4pm en la cual habíamos llegado temprano ya que el padre nos cito a mí y a otros 2 monaguillos a su oficina...

El estaba sentado con su sotana blanca y nos dejo parados.

Por favor Dominic cierra la puerta y con petillo ya que tengo que decirle algo importante.

Asentí inmediatamente y cerré la puerta como el me indico.

Pues bien debo confesar que sus pecados son casi idénticos, principalmente el que mas me llama la atención es masturbarse.

Quiero ahora mismo que se bajen sus pantalones y comiencen a masturbarse, Juan que era el mayor de nosotros y que tenia 15 de edad y que llevaba ya casi 2 años en la iglesia se bajo los pantalones y calzones, comenzando inmediatamente una paja frente a nosotros dos,

Y a ustedes que les pasa nos dijo el Padre Alberto, yo fui el primero en contestar, es que no se padre me da vergüenza.

Os dais vergüenza, que lindo, eso siente Dios cada vez que ustedes a solas cometen esa barbarie, yo que soy su representante, esta aquí para verle la cara y curarle la vergüenza, así que si no quiere que tu madre se entere que te voy a expulsar por actos impúdicos, te la baja ahora mismo y te comienza a menear tu polla y tambien a ti Carlos.

Al quedar encuero los tres comenzamos a pajearnos frente al padre, viendo todo eso, acto seguido el dijo la masturbación es pecaminosa ya que la leche no se puede perder, Juan como el mas experimentado le dirá como no desperdiciarlo.

Nuestras pijas a nuestra edad no eran extremadamente grandes, Juan se hinco frente a nosotros y agarro nuestras pollas y se la metió en la boca para darnos una mamada, mientras el padre se puso de espalda y me abrió mi trasero para darme una mamada en mi culo, pensé por mis adentros que si esa era la forma de purificarnos, bienvenido sea la purificación.

Sentir la verga de Carlos frotándose con la mía en la boca de Juan me dio una nueva sensación que no podía resistir, había follado en esa edad escasamente (ver historia me follaron a los 9) y la verdad es que esta mamada doble por mi culo y por mi pija era totalmente diferente, la leche mía y la de Carlos fueron casi al unisono, aquellos minutos parecieron segundos.

Ahora el Padre Alberto se concentro en el culo de Carlos y me dijo por favor purifica a Juan y mánaselo tambien.

La polla de Juan a sus 15 era evidentemente mas grande que la de nosotros por lo cual requerí ayuda de Carlos y entre los dos comenzamos a lamerle el tallo y la punta.

Juan me agarro mi cabeza y me hundió su verga en la boca, casi me ahogaba al tratar de complacer los devaneos puteriles.

Juan aguanto nuestra mamada hasta donde pudo, pero no por mucho tiempo, su líquido blancuzco hizo diana en mis labios y Carlos me beso y me lamió hasta que desaprecian las gotas de semen de mi boca.

Acabada la "la purificación" el padre nos hizo ir de nuestra oficina, no sin antes decirnos que aquel acto secreto era un acto permitido por la iglesia y que mucho cuidado si se lo decíamos a los demas...

Al terminar la misa, ninguno de lo que participamos hablo de eso, me dirige a casa sin muchas ganas, todavía tenia el sabor a semen de Juan, todavía sentía como la polla se metía en mi boca, todavía sentía la mamada que me daba el padre en mi culo ni que decir la sensación de mi orgasmo en la boca de Juan.

Demasiadas sensaciones en tan solo unos instantes, al llegar a casa, mi madre me saludaba orgullosa que su hijo estuviera en la iglesia, sin embargo me aterraba que supiera lo que hacia o que si me negaba me expulsara de mala manera.

A esa edad en que uno descubre la sexualidad, todas las neuronas se pelean por tener razón, al asistir al colegio me seguían gustando las chicas, aquellos muslos hermosos, sus deliciosos senos y su manjar escondido que esta entre sus piernas.

De todos modos no me podía negar que deseaba repetir "mi purificación" no malgastar mi leche en pajas solitarias.

Decidí entonces ir a misa ese mismo día, hacer mi fila y confesarme, Padre he pecado, en que mi hijo, no me digas que has vuelto a masturbarte, no padre, va mas,

He tenido sensaciones encontradas donde deseo repetir la "purificación" de mis pecados nuevamente y que usted participe mas activamente,ahora mismo padre he abierto el cierre de mis pantalón y me he sacado la polla, no aguanto mas esta presión que tengo….agggghhhhh.

Que haces Dominic? Estas loco...

agggghhhhh.….me levante y entre la reja que nos separa tire mi lechazo, ahora padre límpielo por favor, no merezco estar aquí, mi semen quedo semí atrapado entre la rejilla y el padre Alberto se dedico a limpiarla con su lengua, mientras me decía, deja que todo el mundo se marche y ve a mi oficina, que yo mismo te purificare

Espero una hora que la iglesia se vaciara y que el me recibiera en la oficina a solas

Dominic lo que ha pasado hoy que no se repita, para mi lo mas importante es la creencia de esas personas pobres y su bienestar….el seguía hablando y yo entendía todo ese rollo, mas in embargo le subí la sotana y busque desesperadamente su polla.

Al conseguir el blanco que me había propuesto, el se reclino en su sillón y me dejo hacerle lo que yo quería hacerle, le baje los pantalones, le abrí las piernas, le comencé a mamarle los muslos hasta llegar a su bolsa, a su tallo y finalmente degustar la punta de su pene que sin duda era mas grande que la de Juan.

Mis manos se encargaron de masturbarlo y subir una y otra vez aquel capullo que se perdía en mis labios, el me viro y nos pusimos en un 69 en el sofá de su despacho, comenzó a lamer el culo de nuevo y a pajearme con sus manos.

Yo ya no sabia que hacer, todos sabemos que hay un punto que cuando uno le maman el culo, desea ser follado sin piedad, pues eso mis amigos lectores me paso esa vez y por primera vez con un hombre.

El al tener mas experiencia tenía guardado un pote de vaselina y me lo unto en aquel orificio juvenil, mis lágrimas brotaron frente al dolo que recibía al tratar de entrar aquella enorme verga en mi culito virginal.

El me empujo y consiguió finalmente violarme consentidamente por mi, no importo que dijera que parara, en esos momentos el que esta en el tope sabe que pueden ser subterfugios de los pasivos, decir que no, que le rompe el culo, eso da mayor excitación, en mi caso el dolor era real, mis gemidos de falta de aire eran totalmente real.

El padre Alberto me follo sin piedad hasta conseguir el bálsamo que tímidamente rescatara mi gran dolor, aquel dolor que busque, aquel dolor mirando la figura de un cristo.

Cuando su pene comenzó a desinflarse en mis entrañas, tuve la extraña sensación de alivio y con un gran temor que el me la sacara.

El comprendió mis deseos sin ni siquiera yo decírselo, tomo mi pija y comenzó una culeada mas lenta, al tener el bálsamo de su semen en mi culo se le hizo mas fácil.

Fue fácil que mi verga tomara un tamaño recto el cual fue aprovechado para darme una rica paja, me puso de frente a el y me levanto mis nalguitas, cuando era inminente mi orgasmo saco su pija y hundió su cabeza en mi verga.

No sentí ni siquiera su lengua, creo que fue a parar directamente en su garganta.

La "purificación" se convirtió en un habito semanal que duro mas o menos 8 meses hasta que fue trasladado precisamente por rumores que se estaba cogiendo a los monaguillos, nunca supe cual de nosotros fue el delator.

Solo se que cuando me entrevisto una persona de la iglesia, le dije lo positivo del padre y me negué a contestar lo de nuestra intimidad.

Intuía que mi propia negación de contestar era una implicación que "algo" sucedía.

Luego de su partida decidí salir de la iglesia, tomar mi ritmo normal y conquistar a las chicas,

Sin embargo aquella experiencia dio origen a mi bisexualidad, no se y nunca sabré si mas tarde hubiera experimentado con hombres, lo que si se, es que realmente marco mi vida.

No puedo decir si es condenable o no, les confieso que es una confusión de valores que se produce por dentro.

Filosofando con el padre, nos decía que las mayores tentaciones la reciben al oír las confesiones de mujeres y las que se ofrecen y se enamoran de los curas.

Nos decía que la iglesia había prohibido las relaciones sexuales para mantener sus riquezas y que no hubiera reclamos de las mujeres, provocando que aquellos seres extraordinarios que nos guían espiritualmente entre en contradicciones con sus deseos normales.

Al ser participe de dicho abuso y disfrutarlo me queda una triste sensación de que soy un pecado total, que fue mi culpa, hoy por primera vez he podido escribir este relato sin que sienta odio por mi mismo.