La Profesora de mi Hijo
Una magnifica tarde que toda mi vida recordare
Hola a todos antes de nada decir que esto es ficticio y los nombres son inventados, esto es para fantasear y disfrutar todos juntos.
Me presento me llamo Mari Carmen tengo 42 años felizmente casada con Carlos de 45 años dos hijos una hija Carla de 16 años y un hijo Antonio 12, mido 1,70 aproximadamente, pelo castaño liso no muy largo por los hombros, ojos marrones, está mal que yo lo diga pero un culo grande y bien puesto y unas tetas no muy grandes pero tampoco pequeñas, en resumen la mujer que todo adolescente le gustaría follar.
Lo que os voy a contar ocurrió hace unos meses cuando en mi cuerpo se despertó la bisexualidad, el sexo con mi marido es bastante bueno pero estaba dispuesta a probar cosas nuevas, empezaba a ver videos de lesbianas, leer relatos, etc.
Una mañana me llamo la profesora de mi hijo, Trinidad una mujer de 35 años de pelo largo negro rizado, ojos verdes, de 1,55cm aprox. Con unas tetas bastantes grandes y un culo bien grande y duro, en resumen una profesora con la que es difícil estudiar.
Tr: Buenos días Mari Carmen le llamo para recordarle que esta tarde tenemos una cita en la clase para hablar sobre si hijo.
MC: Hola, si es verdad a las 5 allí estaré, adiós.
No me acoraba para nada de la cita que querrá hablar de mi hijo, termine de trabajar a las 2 y fui a mi casa donde ya estaba allí toda mi familia, me dispuse a comer mientras hablábamos de cómo nos ha ido el día y cosas varias fui a ducharme y vestirme para ir a hablar con la profesora.
Me puse mi sujetador negro de encaje y una tanga negra a juego con el sujetador, una camisa blanca con líneas negras y bastante escote, una falda vaquera por la rodilla más o menos y unos tacones negros que me encanta ir siempre con tacones.
Llegue al colegio y allí estaba ella en la puerta esperándome con un vestido blanco de tirantes con un poco de escote y terminado en una falda de tubo a la altura del muslo y unos tacones negros
Tr: Buenas tardes Mari Carmen, llega usted 5 minutos antes, por favor entre y siéntese
MC: Buenas tardes, si no me gusta hacer esperar a la gente.
Me senté en la silla dejando ver mis brillantes piernas como resaltaban con esos tacones, ella se sentó frente mía y en un descuido pude ver que llevaba una tanga roja que eso hizo endurecer un poco mis pezones
Tr: Antes de nada, ¿me permite tutearle?
MC: Si claro, sin problema como si nos conociéramos de toda la vida.
Ella comenzó a hablar y yo empecé a provocar un poco a la profesora cruzándome de piernas a menudo dejando algunas veces ver mi tanga y a ajustarme la camisa para que se me viera también el escote y ella se fuera fijando en mí.
Tr: he de decirte Mari Carmen que últimamente tu hijo tanto sus notas como su comportamiento no es muy bueno por eso te llame para hablar contigo
MC: ¿pero cómo? Si el en casa estudia y hace sus deberes y siempre me dice que se lo pasa bien en clase
Tr: pues te digo sus últimas notas: 3, 3.5, 2, y así, y su comportamiento no para de hablar en clase se pelea con sus compañeros, etc.
Todo esto lo decía mientras yo seguía con mi movimiento de piernas y ajustándome el escote
MC: madre mía… y que ¿podemos hacer o que puedo hacer para que mejore?
Se levanta y se dirige a la puerta mientras va diciendo,
Tr: bueno hay dos cosas que podemos hacer, una es que concretemos otra cita y vengas tú con tu marido y el y hablemos las cosas como son, (cierra la puerta con llave y se dirige a mi) y la segunda es que ahora mismo tú me comas el coño.
MC: ¿perdón? (me moje bastante cuando dijo eso)
Tr: lo que oyes, llevas provocándome toda la tarde desde que has llegado que si cruzándote de piernas que si colocándote la camisa y has ido a provocar a la persona menos indicada.
Se desabrocha la cremallera del vestido y con un simple movimiento de brazos ese vestido blanco cae solo al suelo y ahí esta ella con su conjunto de lencería rojo y sus tacones negros, avanza hacia mí y me coge del pelo y me da un beso y nuestras lenguas se juntan.
MC: pero seguro que esto está bien yo estoy casada y usted es la profesora de mi hijo
Tr: esto está muy bien y si está casada pero bien que me zorreas, anda ven.
Se va hacia la mesa, se sube encima y se abre de piernas y a la vez se aparta a un lado el tanga rojo y me hace una señal con el dedo para que vaya, yo como hipnotizada por ese coño bien depilado me dirijo a esa mesa bastante mojada ya y nerviosa
Me coge del pelo y me dice
Tr: venga no seas tímida que seguro que lo haces muy bien
Empiezo a lamer los laterales de ese delicioso coño con mi inexperta lengua en el sexo lésbico, sabía muy rico, ella empieza a gemir bajito sin soltarme el pelo empiezo a chupar el clítoris bastante mojado y con una mano meto un dedo en ese coño, ella me suelta y se tumba boca arriba sobre la mesa disfrutando de lo que estaba haciendo, meto otro dedo y la lengua también mientras que con la otra mano acariaba el clítoris lentamente ella gemia y las piernas le temblaban, acelero un poco el ritmo y sus gemidos también se aceleran
Tr: mmmm que rico sigue no pares…
MC: ¿te gusta? Estas empapada…
Yo seguía mi función de chupar y frotar el clítoris lo estaba disfrutando mucho estaba teniendo sexo lésbico por primera vez.
Tr: Para, ven
Se baja de la mesa y me empieza a desabrochar la camisa mientras me besa y yo le desabrocho el sujetador y le chupo los pezones, nos volvemos a besar mientras me sube la falda y me coge del culo, mientras me dirige a la mesa donde me pone boca abajo con el culo en pompa y me baja el tanga
Tr: ahora me toca a mí, a ver qué tal sabe la mami de Antonio
Me empieza a azotar el culo mientras con la otra mano me frota el coño sabia riquísimo, cuando ya me suelta el culo se arrodilla y me empieza a lamer el coño, era delicioso como se sentía yo empezaba a gemir, de pronto con la boca me empieza a succionar el clítoris y con una mano me mete dos dedos en el coño, mis piernas tiemblan de placer estaba a punto de correrme de lo rico que se sentía.
MC: ay que rico… como sigas me voy a correr…
Tr: venga no te aguantes, córrete en mi boca que quiero ver lo rico que sabe.
Ella siguió succionando y penetrando con sus dedos y yo no aguante más y me corrí, el mayor orgasmo que tengo un mucho tiempo, las piernas me temblaban y yo gemía y gemía, Trinidad no se separaba de mi coño mientras tenía el orgasmo estaba chupando todo.
Tr: uff mira como me has puesto la cara menudo orgasmo has tenido zorra
MC: ayy dios mío eso fue delicioso… que boca tienes…
Tr: venga que ahora quiero yo correrme no seas tú sola.
Me cogió de la cintura y nos estuvimos besando un buen rato, cuando nos tumbamos en el suelo estaba un poco frio pero con la calentura que teníamos las dos no nos importó en absoluto, ella se inclinó hacia atrás y yo también cuando nuestras piernas se cruzaron
Tr: a ver qué tal se te da esto…
MC: te sorprenderé.
Empezó a mover la cintura poco a poco nuestros coños se frotaban yo hice lo mismo y estuvimos así un rato las dos haciendo el mismo movimiento, después ella acelero, se sentía bastante bien era muy rico, yo acelere también las dos gemíamos como locas nos estaba gustando y mucho, se inclinó hacia mi sin parar el ritmo y me empezó a besar yo le seguí con el beso y allí estábamos las dos abrazadas besándonos con nuestros coños rozándose y acercándonos al orgasmo yo mi segundo.
Tr: ayy si no pares… que rico… te quiero… mmm…
Mc: dale dale… sigue que ya casi me corro… yo también te quiero… ay que rico…
Tr: yo también estoy apunto… no pares…
Las dos seguimos frotando nuestros coños cuando de pronto un chorro de squirt salta a mi vientre y a mi falda acompañado con un gran gemido, al ver ese squirt ya no aguante y yo me corrí también, un chorro salió de mi salpicándole en las tetas a la profesora mientras las dos gemíamos como locas y nos temblaban las piernas.
Nos quedamos las dos tumbadas en el suelo besándonos y abrazadas aun con el temblor en las piernas
Tr: ha sido genial para ser tu primera vez con una chica
MC: es todo lo que deseaba desde hace tiempo pero no me esperaba que fuera con la profesora de mi hijo ha sido genial, que rico…
Las dos nos empezamos a vestir y antes de ponerme el tanga me dice:
Tr: espera, toma mi tanga como recuerdo de esta gran tarde, ¿me regalas tu el tuyo?
MC: por supuesto, aquí tienes.
Yo le entrego mi tanga y ella me entrega el suyo pero yo no me lo pongo lo guardo en el bolso quiero que mantenga ese olor para acordarme de esta magnífica tarde de sexo lésbico.
Ya me abre la puerta de la clase y nos despedimos con un beso en los labios y un azote en el culo, y nos dimos los números por si quien sabe nos apetece otro encontronazo.
Ya me dirijo a mi casa con sin quitarme la imagen de nuestros cuerpos frotándose y con un temblor de piernas que no se me quito hasta la noche, incluso cuando me folle a mi marido ese mismo dia pensaba en nuestros cuerpos tocandose.
Espero que les haya gustado tanto como a mi escribirlo y si tienen algún comentario déjenlo, los leeré todos siempre que pueda y si quieren alguna cosa pregunta opinión, lo que sea o tienen alguna historia aquí tienen también mi correo.