La primera vez que me folló un tio

Despues de que mi mujer me habia iniciado en la bisexualidad, y que ella ya no me daba caña, queria probar que me follara un tio, me sentí muy puta y me gustó.

Desde que le compré el arnés a mi mujer me folla con el, pero cada vez mas de tarde en tarde. Parece que se le ha pasado la fiebre de follarme, y a mi me sigue gustando que me folle el culo, pero ella no pone mucho de su parte, así que esto ha hecho que me decida a tener un encuentro con un tío.

Me metí en una pagina de contactos, buscando gente de cerca pero que no sean de mi ciudad, casados, que no sean mayores, etc…

Contacté con varios, algunos con ideas demasiado perversas para mi, otros, que como yo buscan su primera vez y no se terminan de decidir, otros demasiado viejos, y algunos que me enviaron fotos y daba pena verlos. No me gustan los hombres, pero bueno, ya que voy a follar con uno por lo menos que no sea repulsivo.

Otro problema para quedar con alguien era el sitio. Yo buscaba a alguien que tuviera sitio de encuentro, cosa bastante difícil de encontrar. Muchos querían quedar en los servicios de centros comerciales o de estaciones de tren, cosa que no me atraía, otros querían quedar en el coche, en zonas de cruising, que tampoco me agradaba la idea, etc…..

Después de mucho buscar, y dándome ya casi por vencido encontré a uno, soltero pero con novia, Marcos, de 30 años. Me enviaba fotos de su polla y de su cuerpo, y se veía muy bien, una buena polla, del estilo de la mía, buenos huevos, y la verdad, que aunque no me gustan los hombres, tenia que reconocer que estaba bueno, buenos pectorales, sin barriga, buen culo, la verdad es que se veía apetitoso y se me ponía la polla dura viendo sus fotos.

Marcos me decía que el había quedado un par de veces en las cabinas de un sex shop cercano. Que había unas cabinas dobles que estaban pensadas para esto, y que había agujeros en las paredes, para mirar o para meter la polla. Que podíamos quedar en una de estas y hacerlo mientras veíamos una película. La verdad es que fue el que mas me convenció, decía que lo había hecho solo un par de veces, y se veía que tenia las ideas claras. Me envió una foto viéndose su cara y eso terminó de convencerme, tenia buena pinta, pelo cortito, labios carnosos y grandes, daban ganas de comerle la boca.

Me decidí y quedé con el en el sex shop.

-         Hola, ¿Paco?

-         Si, ¿Tu eres Marcos?

-         Si. Vamos a entrar, que no se nos vea mucho en la puerta.

Ya al encontrarme con el se me iba a salir el corazón por la boca, estaba súper nervioso, pero al entrar en el sex shop me parecía que me iba a dar un infarto. El dependiente nos echo una mirada rápida, pero había mas hombres dentro que nos miraban de arriba abajo. Algunos nos desnudaban con la mirada, me sentí como una mujer que entra en un bar lleno de tíos y parece que todos se la quieren follar.

Yo me fui hacia el fondo de la tienda, mirando videos mientras Marcos hablaba con el dependiente.

Al momento se acercó a mi y me toco en el brazo, introduciéndose por un pasillo. Me fui detrás de el y nos metimos en una sala. Había un sofá con vete a saber cuantos millones de corridas, una pantalla plana colgada de la pared, un dispensador de preservativos, una papelera y un rollo de papel higiénico. En una de las paredes había un par de agujeros del tamaño apropiado para meter una polla o mirar sin problemas.

Cerro la puerta con el pestillo, sacó unas cuantas monedas de su bolsillo y las introdujo en la ranura que había debajo de la tele, y de momento empezó una película gay, que suponía que había pedido el.

La película empezó directamente con dos tíos musculosos desnudos y con grandes pollas comiéndose la boca. Yo me quedé embobado mirando la pantalla.

-         Paco

-         Dime Marcos

-         Vamos a ir haciendo lo que veamos en la película

-         Me parece bien

Se acercó a mi y me empezó a quitar la ropa. Yo intenté quitarle la suya, pero estaba tan nervioso que no podía. Al final cada uno nos quitamos la nuestra. Una vez desnudos me abrazó, me agarró la polla e intento besarme. Yo le dije que poco a poco, que era la primera vez y que así de golpe que no era capaz. Los dos teníamos la polla súper dura. Estaba deseando comerle la polla y la boca, pero no me atrevía.

En eso el se puso de rodillas y empezó a comerme la polla y a sobarme los huevos. Uffff como comía la polla, mucho mejor que mi mujer, que gustazo, su boca parecía un coño caliente y húmedo, me gustaba como me la comía. Después se puso de pie, así que no me hice rogar, me puse de rodillas y agarre su dura polla. La tenia allí, delante de mis narices, dura, gorda, grande, con un buen capullo, con sus venas, toda depiladita como la mía, y unos grandes huevos. Empecé a lamerla arriba y abajo, cogiendole los huevos, hasta que me dijo – métetela en la boca—y no dejé que me lo pidiera otra vez, me la metí en la boca y me puse a chuparla. No me cabía en la boca, por supuesto de larga, pero de ancha es que me costaba trabajo, era mas gorda que la mía. Le empecé a coger gustillo al tema, y ya no la quería soltar, solo quería chuparla, era sabrosa, me gustaba chuparla, me sentía como una puta, allí de rodillas comiéndome una polla, y aquello me gustaba. Al cabo de un rato tiró de mi para que me pusiera de pié. Cuando me puse de pie, sin darme tiempo a nada, empezó a besarme, y yo ya no me pude resistir. Abrí mi boca y me abandoné a el. Me metió la lengua hasta la campanilla y yo empecé a jugar con la mía. Estuvimos así un buen rato, de pie comiéndonos la boca, jugando con nuestras lenguas, acariciándonos todo el cuerpo, apretándonos en el culo y sintiendo nuestras pollas contra nuestros cuerpos.

A mi ya la película me daba igual, yo solo quería comerme aquella polla y que me follara.

Nos tumbamos en el sofá y nos fuimos tocando y besando, yo no le quería soltar la polla, le acariciaba los huevos y le comía la boca, y el hacia lo mismo conmigo.

-         Paco

-         Si dime

-         Quiero follarte

-         Soy tuya, dime como quieres follarme.

-         Ponte boca arriba en el sofá.

Fue a su pantalón y cogio un preservativo y lubricante que traía de su casa. Se puso de rodillas entre mis piernas, se colocó el preservativo y se untó de lubricante. Se recostó sobre mi pecho y empezó a darme con lubricante en el culo, metiéndome un dedo, y después dos. Yo me retorcía de placer con aquello y le buscaba la boca para comérsela. En eso se incorporó un poco y mirándome a los ojos apuntó su capullo contra mi culo y empujaba despacio y suavemente abriéndose camino en mi culo. Yo también lo miraba a los ojos, cerrándolos de vez en cuando, y relajándome para que entrara su polla con mas facilidad. Me estaba doliendo un poco, pero eran mayores las ganas de tener su polla dentro que el dolor que sentía.

Así fue poco a poco hasta que me la había metido entera. Ufff, que gustazo, tenia una verdadera polla dentro de mi culo, un tío me estaba follando, me sentía muy puta y aquello me excitaba muchísimo.

Empezó a follarme despacito, mirándome a los ojos.

-         Paco, ¿te gusta?

-         Ummmm, si Marcos, me gusta, me gusta que me folles, me gusta tu polla.

-         Siiiii, me gusta que seas muy puta y que quieras mi polla en tu culo

-         Si, si, soy muy puta, me gusta que me folles con tu polla, follame bien.

Con esto se dejó caer sobre mi pecho y se puso a comerme la boca mientras aumentaba el ritmo de sus embestidas. Aquello me volvía loco, me dolía un poco pero estaba disfrutando como una autentica puta. Así estuvo hasta que note que dejaba de besarme dejando la boca abierta, sabiendo que era el momento…..

-         Siiiiiiiii, siiiiiii, córrete en mi culo, soy tu puta, follame así, dame tu leche en mi culo- y diciéndole esto es corrió.

Después de correrse se incorporó y sin sacarme la polla del culo que la seguía teniendo dura se puso a masturbarme, no tardando yo ni 20 segundos en correrme.

-         ¿Te ha gustado?

-         Si, me ha encantado.

-         ¿Vas a querer que vuelva a follarte?

-         Si, claro que voy a querer, me he sentido muy puta y me ha gustado.

Nos limpiamos un poco, nos vestimos y salimos de la sala. Al salir tropezamos con otro tío de los que andaban por allí cuando entramos.

-         Valla polvazo que acabáis de echar.

-         ¿Lo has visto? – le preguntó Marcos.

-         Si, buenas pollas gastáis los dos. ¿Alguno quiere repetir?

-         Yo no. – le contestó Marcos

-         No, yo tampoco. – Le contesté yo.

-         Bueno, pues es una lastima, por que tengo una buena polla. Si alguno de los dos quiere suelo estar por aquí.

Cuando salíamos iba pensando en que aquel tío habría estado viéndolo todo por uno de los agujeros, y la verdad, es que si yo lo hubiera visto desde fuera también me habría puesto como una moto.

-         Bueno Paco, si quieres repetir ya sabes mi teléfono.

-         Pues si que voy a querer repetir, así que espera mi llamada.

-         Claro que la voy a esperar, me ha gustado mucho follarte, quiero volver a follarte, pero también voy a querer que tu me folles a mi.

-         Bueno, siéndote sincero me gusta mas que me folles tu, pero bueno, haré un esfuerzo y te follaré, jajajaja.

-         Ok, pues estamos en contacto. Adiós.

-         Adiós.

Después de aquello volvimos a quedar un par de veces mas en las que siempre me folló el a mi, se ve que a los dos nos gustaba mas que yo fuera la puta, hasta que un día, sin yo esperármelo me montó un trío con otro tío, pero eso…………………….. es otra historia………………… que contaré otro día.