La primera vez en mi casa

Hola, antes que nada quiero agradecer a todas aquellas personas que se tomaron el tiempo de enviarme comentearios sobre mi relato anterior, no saben cuanto aprecio eso.

Hoy les voy a contar una de las tantas aventuras que tuve con uno de mis novios, que tiene por nombre Alex, en ese entonces yo tenía 17 años y solo vivía con mi papá y una prima, y una de mis hermanas de vez en cuando se quedaba en la casa.

En mi casa Alex no era muy bien aceptado, ya que era mucho mayor que yo, pero con todo y eso respetaban mi decisión de estar de novia con él. Dado que yo era menor de edad, tenía que acatar las reglas de mi papá para poder ver a Alex, y teniamos un horario para vernos, él no tenia que estar en mi casa o yo no tenía que estar con él después de las 10 de la noche.

Uno de esos días, en los que él iba por mi a la escuela y después nos quedabamos en mi casa viendo televisión, empezamos con el típico cachondeo de los novios, pero después yo le decía que mejor no siguieramos, pues a fin de cuentas nos quedariamos con las ganas los dos. Cabe mensionar que ya antes habiamos tenido relaciones, en hoteles o cuando no habia nadie en el cuarto donde él dormia, puesto que compartia ese cuarto con otros dos tipos. Total que el cachondeo estaba bueno, y obviamente los dos teniamos muchas ganas de cogernos en ese mismo momento, pero no podiamos, ya que mi papá estaba en su recamara mirando la televisión y mi prima en la recamara que compartiamos ella y yo, y corriamos el riesgo de que nos cacharan en plena faena cualquiera de los dos.

No recuerdo exactamente de quien fue la grandiosa idea de hacerlo ahí en mi casa, pero ya que todos se hubieran dormido, para eso Alex tendria que irse a la misma hora de costumbre, y regresar mas noche, (no era tanto problema, ya que él vivia en la misma calle que yo) si no me equivoco la idea fue de él, y yo estando tan caliente como estaba en ese momento no me negue, mas bien estaba anciosa por que ya todo mundo se durmiera para poder calmar mi calentura. Empezamos a planear todo, y le di las llaves de la entrada del edificio para que no tuviera problema al entrar; quedamos que yo me iba a dormir esa noche en la sala, para que no entrara a mi recamara, pues como ya mensione antes, en esa misma recamara dormia mi prima.

Al fin llego la hora acordada; yo fingi quedarme en la sala para ver la televisión, y tendi los cogines del sillon y unas cobijas para sengun yo, dormir ahi; cuando llego la hora en que Alex iba a llegar yo ya tenia la luz y la tele apagada, y la puerta estaba entreabierta para que él entrara, lo estaba esperando acostada y desnuda sobre la improvisada cama que habia preparado para nuestro encuentro.

Cuando el llego le dije que no hiciera mucho ruido, pues yo estaba muy nerviosa pensando que podrian despertarse y cacharnos, pero no fue asi; él tambien se quito la ropa y se acosto junto a mi, comenzamos a acariciarnos y a besarnos, después yo me meti entre las cobija para llegar a su rica y apetitosa verga, tenia una verga deliciosa, y aunque el no era muy alto, considero que su verga estaba de muy bien ver, ademas de que sabia como usarla, comence a pasarle mi lengua por la punta, y cada vez bajaba mas saboreando aquello que tanto me enloquecia, mientras tanto el acariciaba mi cabello y gemia de placer, para mi el hecho de saber que lo que yo estaba haciendo le gustaba, hacia que me exitara aun mas.

Despues él se puso sobre mi y empezo a penetrarme, para entonces yo estaba mas exitada que nunca, tan solo pensar que estaba haciendo el amor con mi novio a escondidas en mi propia casa me exitaba demasiado, ademas de la exitación, sentia que la adrenalina corria por todo mi cuerpo, sentir el nerviosismo, la adrenalina y la exitacion al mismo tiempo es algo que me gusta mucho, y en esos momentos lo estaba descubriendo. Yo no acostumbraba a hablar cuando tenia relaciones, solo gemia o mi respiracion era muy agitada, pero ese dia de tan exitada que estaba le comence a decir cositas como “me gusta tu verga”, “que rico es sentir tu verga dentro de mi” o “me fascina que me cojas”, (despues me conto que le habia sorprendido mucho todo lo que le habia dicho en ese momento, pero que le habia gustado que lo hiciera) mientras le decia todo aquello sentia como su deliciosa verga me penetraba por completo, y yo entrelazaba mis piernas a su cintura como si quisiera amarrarlo y apretarlo para que nunca se saliera de mi; a la vez nos besabamos y el acariciaba mis pechos, y yo con mis uñas le acariciaba en los costados, por que sabia que eso le gustaba mucho.

Despues de estar un rato disfrutando de esa posición me pidio que invirtieramos y que ahora yo estuviera arriba, y yo dije que si, pues no se por que pero esa posicion era una de las mejores para mi, pues al estar yo sentada en su verga podia tener el mando de la situación, e ir al ritmo que yo quisiera, primero subia y bajaba muy despacio, para sentir como entraba y salia esa rica verga calientita, y como rosaba con las paredes de mi vagina, mientras tanto el masajeaba mis pechos o los chupaba saboreandolos y mordisqueando mis pezones paraditos. Cuando sentimos que estabamos a punto de terminar, yo empece a acelerar el ritmo y frotaba aun mas mi clitoris con su cuerpo, entonces él tambien comenzo a decirme cositas que me gustaba oir, y asi, juntos explotamos en un alusinante orgasmo. Me recoste sobre él para descansar por un momento despues de tan agotador ejercicio, los dos estabamos bañados en sudor, y yo lo abrazaba con mucha fuerza, pues aun no podia creer que lo habiamos hecho en mi casa, no podia creer que estaba conmigo a esas horas y sobre todo no podia creer que habiamos tenido una de nuestras mejores experiencias sexuales juntos. Nos dormimos casi una hora abrazados, pero despues lo desperte pues eran ya casi las 5 de la mañana y no queria que lo fueran a encontrar ahi.

Ese fue el primero de varios encuentros que tuvimos de esa misma manera en mi casa. Espero que les haya gustad mi relato, y si tienen alguna pregunta o algun comentario no duden en hacermelo saber.