La primera vez con mi amante Max
Un relato bastante diferente a lo que los tengo acostumbrados pero igual espero que les guste, ya que me lo vienen pidiendo desde hace un rato
Hola de nuevo, bien por el título supongo que ya sabrán de que va este relato y siendo sincera no tenía ni un poco de ganas de escribirlo ya que considero que no hay mucho que decir, pero, me han mencionado desde mi primer relato que les interesa saber de mi primera vez con el perro (realmente espero que los que me lo llegaron a pedir lean esto) así que tratare de darles gusto aunque no les prometo que les agrade pero, valga la redundancia tratare de relatarlo de la mejor forma posible y les menciono desde un inicio que será un relato diferente a los otros que tengo.
Quizá se pregunten como es que se me pasó por la cabeza tener sexo con mi perro, no fue por que sea una chica que se acuesta con quien sea, o porque sea una ninfómana, ni tampoco creo estar loca que son cosas de las que algunos han llegado a tacharme; simplemente un día cuando cursaba la preparatoria si no mal recuerdo vi mi primer video de zoofilia y me causó interés y morbo “¿Qué se sentirá tener a un perro metiéndotela?” pensé. En mi casa solo tuvimos perro cuando yo era una niña así que nunca tuve oportunidad de intentarlo en casa de mis padres además de que no creo que me hubiese animado a hacerlo de haber tenido alguno por miedo a que me descubrieran.
No fue hasta poco antes de obtener mi departamento que conseguí a Max de unos cinco meses y me lo lleve a vivir conmigo para tener un perro guardián y no estar sola. Y es que realmente no se me habían pasado por la cabeza mis deseos de años atrás. Hasta que unos meses después comencé a ver videos porno para, ya saben darme placer, y termine viendo uno de una chica montada por su rottweiler que realmente me devolvió esos pensamientos y ese morbo.
Entonces después de un tiempo de pensarlo e “investigar” como tener sexo con un perro me convencí de hacerlo con Max, así pues decidí que sería un día de mi descanso y recuerdo haber esperado con ansias ese día y cuando al fin llego estaba bastante nerviosa e incluso me estaba retractando. “¿Cómo se me ocurrió esta pendejada?... ¿De verdad, vas a dejar que te la meta tu perro?” fueron solo un par de cosas que recuerdo de las tantas que me dije aquel día antes de que me quitara de toda duda y decidiera ir con mi Max.
Recuerdo que me dije “No pasa de que solo lo hagas para quitarte las ganas de intentarlo y nunca más te lo cojas así que, ¿Por qué no? Nadie más lo va a saber” eso fue lo que termino convenciéndome de hacerlo y lo menciono por lo irónico que es , hoy día me considero su perrita, me encanta que me coja y aquí estoy haciéndoselos saber quién lo diría.
Entonces ya convencida de que lo iba a dejar hacerme suya me acerque a donde estaba el y comencé a acariciar su pene, siendo sincera me temblaba todo el cuerpo no podía creer lo que iba a hacer. Cuando su verga creció un poco entonces empecé a jalársela y el me miraba raro como si no esperara que su mami se la estuviera agarrando. Cuando se la saque me excite y sentí un cosquilleo en mi vagina, sabía que lo quería dentro pese a que mi conciencia me traicionase antes pero al ver su roja y bestial verga se fueron todas mis dudas.
Yo me quite toda la ropa y entonces pensé “Bueno ahora es cuando”, El jadeaba un poco claramente también estaba caliente pero a diferencia del Max de hoy en día no tuvo la más mínima reacción al verme desnuda; mi cuerpo al descubierto aun no significaba perra lista para coger para sus ojos, tampoco esperaba algo a decir verdad pero tenía que llamar su atención así que tuve que meterme los dedos en mi puchita hasta dejármela algo mojada, entonces me acosté en el suelo y lo llame “Ven bebe, huele” le dije mientras golpeteaba mi vulva a lo que el obedeció y se acercó no solo a oler, también a lamer y eso me gusto realmente era algo nuevo para mí el sentir esa lengua tan áspera y tan larga degustando mi entrepierna . “Que rico bebe mmmmm que rico” le dije hasta que de pronto paro y se acercó a lamer mi cara.
Pensé por un momento en besarlo con mi lengua pero no quise, lo considere tonto en aquel entonces. Entonces mire su trozo el cual seguía como se lo había dejado grande y rojo aunque no tanto como hago que se le ponga en estos días, claro para mi estaba bien y no creía que se le pudiera poner más dura así que tome una bocanada de aire y luego la exhale para decir “Bien de una vez antes de que me arrepienta” y me puse en cuatro dándome unas nalgaditas diciéndole que se subiera, el solo se acercó a lamer mi vagina de nuevo y no parecía tener interés en montarme hasta que, después de un rato decidió brincarme encima y pensé “Pues ya está ya vas a quitarte la duda” aunque al ser la primera vez de Max él no tenía ni idea de que hacer solo siguió sus instintos para montarme y ya, solo me rasguñaba e intentaba metérmela pero sin éxito mientras yo quería agarrar su verga y metérmela pero solo sentía mi mano y se ponía más caliente creyendo que ya había entrado e incluso aventaba unos cuantos chorros que terminaban en mis nalgas.
Duro mucho tiempo así y yo comenzaba a desesperarme hasta que paro supongo que por cansancio y le dije molesta “¡Tanto para nada perro idiota!” ya iba a quitármelo de encima pero no quise echar todo a la basura por frustración así que me relaje un poco, agarre su verga aprovechando que estaba quieto, el reacciono y volvió a creer que estaba adentro y se puso a empujar pero le grite “¡¡¡CALMATE YA MAX!!!” el entendió y entonces pude meterme su verga y después de eso tuve que moverme para que reaccionara después del regaño pero no lo hacía, “Tanto para que cuando estas adentro no hagas nada cabrón” dije un tanto decepcionada. Poco después reacciono.
Por fin comenzó a embestirme yo estaba que no lo podía creer, entraba y salía de mi rápidamente mientras sentía su verga crecer en mi interior y yo comencé a venirme casi de inmediato más por la excitación de estar cumpliendo mi fantasía que por otra cosa. “Si esta rico” , ”Ya por fin soy una perra” , ”Que siga, que siga” son unas cosas que recuerdo haber dicho mientras me hacía suya por primera vez aunque como todas las primeras veces el macho acabo rápido. Sinceramente no pensé mucho en eso, tampoco nos pegamos ya que sostuve su bola así que a lo mucho fueron tres minutos los que pasaron antes de que me llenara de su leche por primera vez lo cual aumento más mi morbo, el enseguida la saco y se fue a recostar mientras yo solo analizaba lo sucedido decidí que valía la pena volver a intentarlo y le dije “Quiero que volvamos a coger mi amor”.
Y eso fue todo, si esperaban que fuera la mejor cogida de todas pues no lo fue y en retrospectiva, me doy cuenta que seguí practicándolo solo por el morbo que me dio más que porque Max fuera un experto en coger a mujeres desde la primera vez como se pintan a los perros en estos relatos; pero yo ya lo he dicho antes lo mío si es real y no pienso mentir diciendo que me coge igual un Max de hace tres años que uno que me cogió este fin de semana, es por eso que no quería contar mi primera vez con él ya que apenas hay que relatar y por eso recurrí a toda esa larga introducción que espero no los aburriera. Y si leyeron todo en verdad se los agradezco y como siempre los invito a comentar que les pareció y sus sugerencias, sin más por ahora ¡Bye!El jadeaba un poco claramente también estaba caliente