La primera vez
Es la historia de como perdí mi virginidad en una situación poco usual.
La Primera Vez
Todo comenzó en la época de colegio, mazo menos cuando cumplía los 15 años de edad.
Estábamos yo y mis amigos en las cogidas de café, esta actividad consiste en tomar un par de hileras de plantas de café para recoger su grano maduro, estas hileras son de gran longitud y muy extensas. Bueno yo estaba en dicha actividad y a un lado de mi estaba esta chica que ya era todo una mujer, que a pesar de su vestimenta se dejaba ver sus buenos atributos corporales, tenía una cara morena preciosa de cutis fino y suave, ojos color miel, una boca que con solo verla me decía ven bésame y cómeme, un pelo negro como la noche de colochos en los cuales me quería envolver, unos pechos que se veían duros y firmes que sobre salían de una blusa pequeña y los cuales estaban muy junto y que tenia un nudo a la altura de su ombligo el cual me trastornaba cuando lograba verlo y los cuales mas tarde comprobaría que eran así, un trasero majestuoso, firme y duro el cual era marcado por su peña tanga.
A la hora del almuerzo ella se acerco a mi arrastrándose como un animal que iba tras su presa, se sentó a mí lado desenvolvió su termo de comida y comió a mi lado, y entablo conversación, me pregunto mi nombre, de donde era, mi edad y al final pregunto si tenia novia, alo que conteste que no, ella sonrió y me dijo que entonces yo era virgen y yo le dije que si, que si ella no lo era!, ella sonrió mas y me dijo que no, que ella tenia mucha experiencia, que había tenido muchas relaciones pero nunca había estado con muchacho virgen, yo le dije que seguro su vagina estaba muy abierta y ella se acerco más, hasta sentir mi respiración y mi corazón que latía a mil por hora, y me dijo, "averígualo" y me beso, metió su lengua dentro de mi boca, la cual movía cada ves mas y mas tomo mi mentón para abrir mas mi boca y meter mas profundo su lengua, a la vez que me tocaba con fuerza mi pene, el cual creía que se iba a salir de mi pantalón pues ya estaba fuera de mis calzoncillos, ella tomo mi mano y la puso en sus pechos y después de ahí comense a tocarla, saque esos deliciosos pechos de su blusas y brasier y me los comí como si estuviera muy hambriento, baje luego mi mano y la metí entre sus piernas firmes y duras que ahora temblaban como una hoja, pero se que era de excitación y deseo, en ese momento la empujen con fuerza de sus hombros y la acosté en el suelo sucio y lleno de hojas la tome de sus caderas y le arranqué literalmente su pantalón y sorpresa estaba con una tanga de encaje rojo, que enloquecí al vérselo, ella se incorporo algo y pomo mi cabeza y la metió en medio de sus piernas y la bese la lamí y cuando oía sus gemidos mas me excitaba, entonces le baje esa tanga que aun conservo, y comencé a tener sexo oral por primera vez y sin saberlo del todo, la cogía pasando mi lengua por toda su vagina que estaba muy caliente y mojada para entonces y sus gemidos que me enloquecían cada vez mas, ella en eso brinca se levanta y me mira como si fuera algo que deseara, que fuera a devorar, ella solo me quito mis pantalones y mis calzones tan rápido que cuando mira ya estaba manado mi pene el caul estaba muy lubricado y me dolía pero a su vez sentía muy rico, su lengua pasando por la cabeza de el, sus labios que me lo apretaban, sus dientes que me mordían apenas la punta y provocaba que mi cuerpo se encogiera como si fuera un gusano.
De un momento a otro ella se subió encima mío y comenzó a moverse como yo no lo podía imaginar se movía en círculos, brincaba, iba de arriba así abajo y al revez, yo solo apretaba y metía sus pechos en mi boca, los tocaba y apretaba con fuerza pues me encantaba oírla gritar cuando tocaba o pellizcaba sus pezones los cuales estaban muy duros y levantados, los cuales formaban sus tetas en dos enormes conos firmes, ella no dejada de moverse y cuando se excitaba mas ella parecía que me quería tragar con su vagina pues así un movimiento asía adentro contrayéndose y tragando mi pene, eso me encantaba, pues a la vez que contraía su vagina, movía su cuerpo así atrás poniendo sus manos sobre mis rodillas y empujando su pelvis al frente, luego se echo en pecho y lo arañó y me pidió que me quedara quieto pero yo no podía, ahí sentí un flujo que bajo de ella y recorrió mi pene hasta mojar mis testículos, comenzó a besarme mas tierno pero con igual pasión y comenzó a moverse de nuevo mas lento, pero fue aumentando su velocidad, y de un tiro dio vuelta sin dejar de estar penetrada por mi y me tomo de las nalgas me las abría tan duro que creí que las iba separar, metió uno de sus dedos en mi ano, mmmmm eso me encantó y yo la bese como un loco desesperado, luego me tomo de la cintura y comenzó a moverme asía arriba y abajo como para enseñarme el camino y luego seguí yo solo me movía lento, pero con forme entendí el movimiento aumente el movimiento a la ves que seguir besándola y metiendo mi lenguas en su boca como me enseño, luego subí una de sus piernas y la coloque casi en su pecho y ella sonrió y yo también y en ese momento la vi cerrar sus ojos y dar un suspiro y enclavar sus uñas en mi espalda y yo seguí jineteado, ella presentía que ya casi me iba, y me puso las manos en el pecho para separarme y saliendo de ella comenzó a masturbármela con una fuerza increíble que pensé que ,me la arrancaría y cuando me estaba yendo puso mi pene en su cara y le dio mas duro hasta que me regué y eche mi leche en su bellas cara, y ella me limpio con su lengua y me mamo un rato mas y nos quedamos acostados desnudos en las sombras de ese cafetal.
Después lo seguimos haciendo pero ya en su casa hasta que ella se caso incluso en su despedida de soltera fue la ultima vez, ahora solo somos amigos.
Esa fue mi primera vez, y como se imaginaran, ese día no recolecte casi nada, pero valió la pena.
Alexander Delgado Sáenz, C.R.
Dedicado a: Verónica García. Arg.