La primera experiencia
La amante de mi compañera de piso es una cachonda. Se dedica a provocarme y ponerme caliente cuando me ve. Sabe que me masturbo espiandola cuando esta en la habitación con mi compañera.
Esto pasó cuando yo tenía 24 años, vivía con una compañera de piso, Raquel, aunque tenía novio desde hace
dos años y medio, ultimamente se traía a casa a una amiga, Sabrina, que parecía algo mas que una
simple amiga. Pasaban mucho tiempo juntas en su habitación, hasta el punto de que estaba dejando de
ver a su novio.
Bueno pues resulta que una tarde llegué a casa y me dirigí a la habitación de Raquel,
me asome a la puerta y ví que estaba viendo una pelicula subidita de tono donde salian nada mas
que chicas tocandose. Raquel se estaba masturbando. Como ella no me vió, decidí quedarme en la puerta,
aquella situación, para mi asombro, me puso muy caliente, ya que yo siempre he tenido novios y me
considero hetero. En fin, que allí estaba yo, espiandola en el pasillo a traves de la puerta. Empecé a
tocarme los pechos y note como mis pezones estaban duros, bajé mis manos hasta mi entrepierna, y
acaricié mi vulva. Notaba como mi conejito estaba húmedo, toque mi clítoris y me masturbé. Cuando
estaba a punto de correrme, noté como me susurraba alguien al oído: "Asi me gusta, me estas
poniendo cachonda" Me volví y vi a Sabrina que iba solo con un albornoz. Acababa de salir de la ducha
y yo ni siquiera sabía que ella se encontraba en casa. Paré de la verguenza que me dió, y me disponía
a irme a mi habitación, cuando me agarró del brazo, me apretó contra su pecho y me dijo: "No te vayas Elisa,
si todavía no has acabado, sigue masturbandote aquí conmigo, mientras vemos a Raquel. Me has puesto
muy cachonda, no puedes dejarme así amor". La verdad esque aquello me sorprendió, siempre noté a Sabrina
muy callada conmigo, y aquello me dejó alucinada. Pero la verdad es que tenía razón, estabamos muy
cachondas, y teníamos que acabar lo que empezamos.
Nos asomamos a la habitación de Raquel y vimos como seguía tocandose, parecía que se iba a correr ya mismo
por lo que Sabrina y yo para que no nos pillara espiandola, nos dimos prisa. Ella me subió la camiseta y empezó
a lamerme las tetas, me metió la mano por el pantalón y me masturbó con una gran rapidez, con lo cachonda
que yo estaba no tarde en correrme. Al acabar ella me dijo que no le contará nada a Raquel, ya que ellas dos
tenían relaciones a menudo y no quería que nadie más se enterara, ya que ella todavía seguia con su novio.
Sabrina se metió en la habitación de Raquel y se besaron, yo me fuí a mi habitación, alucinada por lo que
acababa de pasar. Fué mi primera experiencia lesbica, algo que nunca imaginé que haría.
Cuando Sabrina iba a casa, nos tratabamos como si nada y Raquel no sospechaba nada de lo ocurrido. Ahora
siempre que se metian en la habitación las espiaba, me ponía super cachonda y me iba a mi habitación a
masturbarme. De vez en cuando Sabrina me rozaba una teta al pasar por mi lado como si nada o cuando iba
con falda, me tocaba mi coñito rapidamente, lo que creaba una situación de calentón por ambas partes.
Una tarde estabamos las tres en el sofá viendo una pelicula de comedia, pero que salían escenas de sexo
que me ponían realmente cachonda. Veía como Raquel apretaba sus muslos, para frotarse el chochito, se notaba
que estaba muy caliente. Sabrina dijo que no podía más, que se iba a masturbar allí delante. Raquel se
quedó sorprendida y le dijo: "Sabri ni se te ocurra, está Elisa aquí, la vas a poner en una situación muy incómoda"
A lo que Sabrina le contestó: "Raquel no te preocupes, seguro que a Elisa no le importa, ¿verdad Eli?, de todas formas
creo que las tres lo estamos deseando. Yo le hice un gesto tratando ver que no me importaba asi que Sabrina
se desnudó y comenzó a masturbarse. Yo ya no podía más y decidí hacerlo yo también, me quité la ropa, y me
abrí de piernas. Me masajeaba el clítoris, lentamente. Raquel miraba de reojo como me masturbaba.
Sabrina le dijo: "Venga Raquel, tu y yo sabemos, que estas deseando de tocarte" Sabrina le tocó las bragas por
debajo del vestido y dijo: "Pero si estan tus braguitas chorreando de lo cachonda que estas, vamos cariño".
Asi que Raquel se puso manos a la obra, y ella también comenzó a masturbarse, aunque sin desnudarse.
Yo miraba como se movía su manos por debajo del vestido, lo hacía rápido, tenía ganas de correrse, yo
preferí hacerlo lento, para que durará más el placer. Sabrina gemia como una loca cuando se corrio.
Se fue al lado de Raquel y le quitó el vestido y le comió las tetas. Se sentó encima suyo y restregó su coñito
en su muslo. Raquel seguía masturbandose hasta correrse de gusto. Sabrina seguía frotandose encima de
Raquel mientras me miraba, yo seguía masturbandome, notaba como el orgasmo estaba a punto de llegar. Veia
como la guarra de Sabrina me miraba poniendo caras de placer, se restregaba mas rapido contra e muslo de
Raquel, gemía sin parar, ella estaba otra vez a punto de correrse. Yo seguí masturbandome el clitoris, mas
rapido, mas rapido, mas y mas, me corrí de placer, fue un orgasmo alucinante, Sabrina se corrió nada mas
ver como disfrutaba de mi orgasmo.
Después de esta experiencia tan caliente, hubo más, pero que contaré en la segunda parte.
Es el primer relato que escribo, espero que os haya gustado.