La prima de mi mujer

Estaba en mi casa, viendo la televisión, cuando suena el teléfono.

• Joder otra vez- me quejo de mala leche. Mi mujer es muy sociable y siempre hay alguien llamándola o jodiendo la marrana por el móvil o el fijo. A mí me mosquea mucho, porque encima no me puedo quejar, ya que me reitero, mi mujer es muy sociable.

Pues me dirijo al teléfono y descuelgo.

• ¿sí?- respondo de mala gana.

• hola soy María,- reconozco a la prima mayor de mi mujer y sin apenas esperar le digo:

• hola María, Vanessa no está, cuando venga le digo que te llame.- Espero que me diga que vale y espero que me diga alguna chuminada y poco más.

• ¿sabes si va a tardar mucho?- me pregunta y le noto algo de urgencia en la voz.

• pues no sé, tu sabes cómo es ella, que sale pero se entretiene hablando con la gente.- Me empieza a picar la curiosidad y como no estaba haciendo nada importante intento tirarle de la lengua.- ¿Pasa algo ?- pregunto de forma genérica.

-.... veras, es que necesito hablar con ella...- la nota dubitativa.

• dime mujer, ya sabes que va a tardar, si has llamado aquí, es que no la localizas en el móvil- la zona de mi casa tiene una cobertura muy mala, por lo que a veces no tienes el móvil disponible.

• .... bueno, estoy en un lio, y resulta que necesitaría ayuda. me dice en voz como baja y avergonzada.

Ahora si que estoy picado por la curiosidad, la prima de mi mujer, es una mujer de unos 40 y pocos años, casada y con una niña, además trabaja en un ayuntamiento de administrativa y lo mas bestia que ha hecho en su vida es comprarse un bikini algo sexy.

Tiene un cuerpazo, pero no sabe aprovecharlo, supongo que el marido si lo aprovecha, pero siempre he pensado que está mal follada.

Además me pone burro, esa actitud modosita que tiene. Esta muy bien para su edad, y como siempre está haciendo, alguna actividad está muy bien físicamente.

Mide 1.65, pelo negro, cara bonita, buen culo y pechos normales, le destacan pero nada exagerado. Como os digo, lo que más me pone es su actitud entre sumisa y condescendiente.

Ella vive con su marido e hija en otra ciudad, como 1 hora de coche, nos vemos poco, pero por lo menos 10 o 12 veces al año.

Pues ahí, estoy yo con el teléfono hablando con la prima de mi mujer y esperando que me diga que le ocurre, cuando me dice:

• ¿podrías venir a buscarme?- como nota la angustia en su voz y me pica la curiosidad y seamos sinceros, no tengo nada mejor que hacer, decido decirle que sí, pero dudo un poco y le respondo:

• ¿ahora?- dejo la pregunta en el aire, haber que me dice.

No dice nada durante unos segundos, pero luego me responde:

-.... si por favor, - dice de forma angustiada.

• ok, ¿donde estas?-  me indica una ciudad que está a unos 30 minutos de mi  casa, y me dice que cuando llegue la llame, que me dirá la ubicación exacta. Ahora si que me pica la curiosidad.

¿Qué hará por esa zona?

Como es por la tarde, y verano, me dispongo a salir sobre la marcha. Cojo el coche y me dirijo hacia la zona en la que me indica.

Cuando llego la llamo y me indica que me dirija a un polígono que se encuentra cerca, me dirijo hacia él y la llamo al móvil, me dice que siga por la calle que voy y me pare en un aparcamiento que hay ahí.

Al llegar veo algún coche aparcado, pero esta vacio, es fin de semana y no suele haber nadie en el polígono.

Me mantengo a distancia de los otros coches y cuando me paro, veo que María y se dirige caminando rápidamente hacia mi coche. Cuando se va acercando veo que va vestida de forma extraña, ya que lleva un traje largo. Mas de estar por casa o bajar a por el pan que a esa distancia de su casa.

Entra en mi coche y me dice que arranque, arranco y le pregunto qué ha pasado?.

No me responde, sigo con el coche y cuando estoy a punto de salir de polígono, me echo a un lado y le vuelvo a insistir. Paro el coche y le digo que me diga que pasa o llamo a su marido y por qué no ha llamado a su marido?

• solo llévame a casa por favor- me lo dice casi llorando.

La miro y ahora observo que esta acalorada, como si llevara horas bajo el sol, la llevo a su casa y la acompaño hasta la puerta.

• quieres que suba contigo?- y me dice que no, me da un beso y entra en su casa, cuando está a punto de cerrar la puerta, pongo la mano y le impido que la cierre.

• o me dices que ha pasado o llamo a tu marido y o Vanessa, dime que vas a hacer?- le digo lo más serio que se ponerme y con tono seco. La  miro fijamente y después de un rato me dice que pase.

Entramos a su casa y veo que sobre la marcha se dirige al baño y me dice que espere.

Oigo correr el agua, me dirijo al salón y me siento a esperarla.

Cuando sale, veo que sale solo con una toalla y se dirige a su habitación.

• ahora vuelvo, que me cambio.

Con curiosidad, me dirijo al baño y busco la ropa, veo el baño recogido y me dirijo a la ropa de la cesta sucia, miro dentro y veo la ropa que tenia puesta. Veo el traje, sucio y sudado, y veo el sujetador y las bragas.

Me fijo en las bragas y veo que están manchadas y por el olor y lo que veo eso no es flujo, es una corrida de macho.

Me lavo las manos y veo que ella entra a buscarme.

• ¿qué haces en el baño?- me dice como enfadada y preocupada.

• lavándome las manos- pienso rápido y sé que su marido está trabajando y no termina hasta dentro de unas 4 o 5 horas, tiene turno de tarde.

• Esa corrido es reciente- pienso, aquí está pasando algo que no me cuadra. Si fuera su hermana, que siempre he pensado que era muy puta, lo tendría claro, pero siendo María tenía mis dudas.

Me la voy a jugar y decido hacer una apuesta.

• sabes que fui a buscar una tolla y por no ensuciar la que tienes aquí, fui a coger una prenda sucia, y me encontré esto en la cesta de la ropa?.- Mientras decía esto me fui a por la cesta, mientras la miraba a la cara.

Su expresión cambiaba del pánico al terror y luego a la indignación.

• me dices que es esto ?- me mostraba las bragas manchadas de semen-

• flujo, con el calor me pasa a veces, - me dijo asustada, más que indignada.

• vale, entonces si le digo a tu prima o marido donde te he recogido no habrá problemas- y me dirijo hacia la puerta.

• ¡No!- me grita.

• entonces me vas a decir, ¿qué es esto ?

• veras, a veces tengo citas con otros hombres- me suelta sin más , tapándose la cara con las manos.

• vaya, yo pensando que tu hermana Lidia era la guarra y lo eres tú ?- me dirijo hacia ella y le cojo el culo con mi mano izquierda, mientras que con la derecha le levanto la cabeza, para que me mire a los ojos.

Ella no dice nada, queda sumisa dejando hacer a mis manos.

• quítate la ropa, le digo al oído- ella duda pero empieza a desvestirse, se desabrocha los pantalones, y los deja caer, se levanta la blusa y la tira al suelo también, se queda en bragas y sujetador.

Se baja las bragas y se quita el sujetador, quedando desnuda.

Es muy bella, no está mal.

Vuelvo a hacer una apuesta, creo que le va el royo sumiso y decido probar.

Me alejo de ella y me siento en el sofá del salón. Ella esta quieta de pie, mirándome, y desnuda con la ropa en el suelo.

Le digo que se ponga a cuatro patas y venga hacia mí. Me mira, pero no se lo piensa mucho y lo hace. Esto me confirma que es bastante sumisa. No se ha quejado y encima parece que lo tiene asumido.

Viene despacio y contoneándose hacia mi. Se para delante de mis rodillas y desde abajo me mira como suplicando, pero como suplicaría un perrito por una caricia o por mimo.

• quieta- me pongo de pie y me bajo los pantalones, a estas alturas ya tengo un empalme que ni el pasamanos de una escalera. me bajo los calzoncillos y me vuelvo a sentar.

Con mi polla toda tiesa, me siento cómodamente de nuevo, abro las piernas y decido esperar. Haber que ocurre.

Ella empieza a mirarme a los ojos y a la polla, yo me empiezo a pajear poco a poco, lentamente, subo y bajo mi mano por mi polla, mientras la miro a los ojos, ella, desde su posición me mira la polla como hipnotizada. Se relame.

• ¿qué quieres hacer?- le pregunto

• quiero chuparte la polla.- me dice suplicando con la mirada.

-ok- y se abalanza sobre mi polla.

Dios como chupa, esa boca está hecha para chupar, con la lengua rodea mi polla y con los labios chupa como si no hubiera mañana. Durante un rato cierro los ojos y disfruto de esa mamadora.

Después de 5 minutos, sé que estoy a punto de correrme, por lo que decido probar otra cosa. Me inclino hacia delante y con los dedos, palpo su coño, dios, menuda inundación.

• estas muy mojada- le digo, pero no me responde. - date la vuelta-

Tengo que apartarla de mi polla, ya que no quiere sacársela de la boca. La giro y le dejo el culo y el coño mirando para mi, y empiezo a jugar con mis dedos., su coño esta tan mojado, que me entran 3 dedos sin problemas, mientras lo hago, no deja de gemir. Apoya su cabeza en el suelo y me deja el culo al aire.

Con los dedos tan húmedos, decido meterlos por el culo y observo que esta estrecho, da un respingo pero no se queja, así que decido que lo mejor es ese estrecho agujero que me dará mas placer y morbo.

Me pongo de pie y me quito los pantalones y calzoncillos de los tobillos y se la meto por todo su coño, dios, que rico esta, parece un horno de lo caliente que esta, después de estar un rato, metiéndola y sacándola, decido que ya tengo la poya lubricada, la saco lentamente y veo que gime y oigo.

• noooo.....-

Con la misma se la meto en el culo de un golpe y veo que grita, no muy fuerte, pero grita.

Empiezo a embestirla sin miramientos, la agarro por la caderas y la voy follando, ya no me queda mucho por correrme y su culo está muy estrecho, me extraña, pero lo disfruto sin pensar en nada más.

Después de un rato, y varios orgasmos, creo que por sus gemidos, me corro dentro de su culo.

y sin sacarla y agarrándola por las caderas la arrastro hasta sentarme en el sillón de nuevo.

La sigo agarrando con la polla dentro, para que no se desplome en el suelo.

A los pocos minutos mi poya se sale y la dejo caer al suelo, se cae hacia un lado con el agujero del culo abierto todavía y saliendo mi semen por él.

Creo que se ha quedado dormida, por que respira regularmente y despacio.

Me dirijo al baño y me ducho, me seco y me visto, mientras ella sigue echada en el suelo.

Me dirijo hacia la puerta y me voy a mi casa.