La preparación de una esclava

Ella va a ser iniciada en el mundo de la humillación. Tendrá que pasar su primera prueba con otra esclava mientras su amo le indica cómo hacerle disfrutar y cómo comportarse como una zorra

Llegamos a una casona antigua, con aire señorial, bastante elegante, todo está perfectamente arreglado, un bonito jardín adorna la majestuosa entrada. Saco una pequeña maleta del maletero del coche y nos dirigimos hacia allí.

-          ¿Me puedes decir dónde vamos?

-          Hoy te he preparado algo muy especial, después de buscar por internet y de chatear con gente que conoce el tema he conseguido encontrar este sitio donde se practica el BDSM. Hoy va a ser tu verdadero bautizo y por tanto debes ser muy cerda para que esté orgulloso de ti. De momento, no te estás portando mal, la gente que te ha follado y que te acabo de presentar fueron los que me hablaron de este sitio al que suelen venir una vez al mes para llevar a cabo todas sus fantasías. En la maleta he comprado una serie de cosas que me han dicho que nos van a hacer falta. Las esposas ya las has probado, la venda en los ojos también, ahora cuando entremos te ducharás y te pondrás un vestido para la ocasión y alguna que otra cosa que luego verás. Durante todo el tiempo que estemos dentro Lucía será nuestra anfitriona, tú te pegarás a ella y aprenderás cómo comportarte y cómo satisfacerme.

Llamamos a la puerta y nos abre un hombre con smoking, tras observarnos detenidamente nos invita  a pasar, allí, una señora con un elegante traje de noche negro nos da la bienvenida, saluda muy educadamente a nuestros acompañantes, está claro que no es la primera vez que vienen, al verte te sonríe y les pregunta a nuestro acompañantes si somos nosotros los candidatos, ellos responden afirmativamente, se presenta como Inés, la mujer del dueño, y le da a Lucía una llave.

-          Os han preparado vuestra habitación, subid si os apetece y limpiaros un poquito porque veo que os habéis estado divirtiendo hace poco, haciendo clara referencia a las manchas de semen que todavía mojaban tu blusa. Si quieres sube con los candidatos, yo me quedo con Pedro y Juan tomando algo mientras esperamos

Subimos por una amplia escalera con una alfombra roja, llegamos al primer piso, debe haber unas veinte habitaciones, Lucía se dirige hacia la número 9, abre la puerta y nos invita a pasar. La decoración es muy moderna, la estancia la preside una enorme cama de unos dos metros aproximadamente, dejamos la maleta en ella y nos vamos al cuarto de baño.

-          Siéntate y ponte cómodo. Voy a preparar a tu puta.

Tomé asiento en el bidé, Lucía se colocó delante de ti, te besó en los labios, lamiéndolos despacio, recorriéndolos con su lengua húmeda, te acariciaba los brazos que estaban pegados a tu costado, como diciendo que los mantuvieses allí y te dejases hacer por ella, empezó a lamerte el cuello, y a susurrar en tu oído

-          Qué suerte tiene Jose de tener una puta tan bonita como tú, gracias a eso y a haberos conocido yo puedo disfrutar esta noche enseñándote a ser tan cerda como yo, te explicaré como conseguir que tu Amo esté orgulloso de ti y te diré como hacer disfrutar a quien seas entregada. Para empezar voy a lavarte, tienes que tener el cuerpo preparado para ser usado, cuando terminen de usarte y humillarte lo tendrás sucio de semen, saliva y posiblemente algo más, pero esa suciedad te dará placer y será el orgullo de tu amo.

Mientras te decía todo eso, no dejaba de jugar con su lengua y sus labios en tu oreja y de acariciar tus brazos excitándote cada vez más.

-          Esta noche va a ser tu iniciación. Esta casa es de un miembro de nuestra asociación, como ves en ella el lujo es tan elevado como la perversión de sus miembros. Mensualmente se convoca una reunión donde se puede admitir a un nuevo miembro y esta vez ha sido Jose el candidato seleccionado, pero para que el candidato sea admitido debe reunir una serie de requisitos, entre ellos aportar a la asociación una esclava que esté a la altura de sus miembros. No sé si serás capaz de hacerlo lo único que quiero que tengas en cuenta es que en cualquier momento, si quieres dejarlo sólo tienes que decirlo e inmediatamente se detendrá todo. Espero que estés tranquila y disfrutes de esta nueva experiencia.

-          Ufffffff, estoy muy nerviosa, pero creo que podré estar a tu altura.

-          El día de mi iniciación yo estaba como tú, pero mi Amo me acompañó, me tranquilizó y ahora estamos aquí los dos. Seguro que lo haces bien, ya en el coche has demostrado que tienes muchas posibilidades.

Mientras todo esto pasaba, yo miraba como te seguía acariciando los brazos y besándote, en ese momento supe que esa noche mi puta estaría a la altura de lo que yo esperaba de ella. Cuando Lucía entendió que estabas tranquila, empezó a desabrocharte los botones de la blusa, despacio, uno, otro, otro más, la blusa se pegaba a tu piel a causa del semen con el que habías sido manchada en el coche. Una vez los desabrochó todos, comenzó a besarte en el cuello mientras te quitaba despacio la blusa y ésta caía al suelo. Con tus tetas ya al descubierto comenzó a besarte los pezones y a bajar su lengua despacio por tu vientre mientras se arrodillaba delante tuya y te desabrochaba la pequeña minifalda haciéndola caer a sus pies, después te quitó los zapatos de tacón y lentamente las medias hasta dejarte totalmente desnuda. Luego comenzó a desnudarse ella, aproveché para observarla bien, era rubia, pelo largo y ojos claros, medía 1, 65 aproximadamente y tenía un cuerpo bastante estilizado, se quitó la camiseta dejando ver sus enormes y preciosas tetas con pezones grandes y oscuros, se quitó la falda mostrando su coño totalmente depilado como se espera de una buena esclava, después los zapatos y las medias. Una vez desnuda, te cogió de la mano y se metió en la amplia ducha, cerró la puerta de cristal trasparente, abrió el agua y te mojó completamente moviendo el teléfono de la ducha  alrededor de tu cuerpo, el pelo, la espalda, las tetas, el culo, el coño, una vez te mojó colgó el teléfono, dejando caer el agua constantemente sobre vosotras. Cogió jabón y comenzó a extenderlo por tu cuerpo, recreándose en cada una de las partes de tu cuerpo, primero tu cuello, los hombros, las axilas, las tetas, el vientre, el coño, las piernas, los pies.

-          Date la vuelta ponte mirando a Jose, voy a enjabonarte la espalda y el culo.

Sus manos empezaron a extender el jabón por tu espalda, de nuevo por tus hombros, las bajaba despacio, masajeándote suavemente, bajó hasta tu cintura, te agarró con sus dos manos de las caderas, apretando su coño contra tu culo, te pegó contra el cristal mientras apretaba también sus tetas en tu espalda.

-          Ahora abre las piernas, mira a tu Amo que te vas a correr para él.

Nada más escucharla, abriste las piernas, ya estabas caliente de nuevo, yo te miraba desde el bidé, te conozco, sé que estás disfrutando como una cerda, estás disfrutando con lo que Lucía te hace, con sus caricias, con sus besos, quiero regalarte ese orgasmo como premio adelantado por el trabajo que tendrás después, Lucía mete la mano entre tus piernas y empieza a enjabonarte el coño. Lo hace suavemente, notas como primero su mano baja despacio por tu espalda, pasa por tu culo, después el coño, después roza el clítoris y de nuevo la mano va hacia atrás haciendo el recorrido inverso. Sigue enjabonándote, sigue deslizando su mano, sigue moviendo sus tetas por tu espalda, sigue totalmente pegada a ti, sigue besándote el cuello, sigue susurrándote al oído lo cerda que vas a ser. Abres los ojos, me ves sentado allí en frente de vosotras, disfrutando de ver cómo te poseen. Ella te sigue masturbando, lo sigue haciendo despacio, espera que el agua que cae sobre vosotras elimine el jabón, en ese momento se arrodilla mientras baja su lengua por tu espalda. Abre tu culo con sus manos, plassssssssshhhhhhhhh, una fuerte palmada en la nalga, presagio de lo que va a suceder esa noche, plashhhhhhh, la otra nalga, cada palmada recibida es un gemido que queda ahogado en tu boca, su lengua lame tu ano, intenta entrar en ti, intenta follarte, plasssssssssh, otra palmada, plashhhhhhhhhhhh, y la lengua no para de lamerte el culo. Su mano que hasta ese momento separaba las nalgas y golpeaba el culo con fuerza se aproxima a tu coño, lo acaricia, lo masturba, dos dedos entran en ti, lo hacen despacio, sientes cómo te los mete mientras la lengua sigue en tu culo sin parar y el agua cae sobre vosotras, abres más las piernas para facilitarle el trabajo y me miras con esa cara de vicio, con la cara de una puta que disfruta cumpliendo las órdenes de su amo. Sus dedos entran y salen de ti despacio, tiene unos dedos largos que te están volviendo loca de placer, plashhhhhhhhhh, plashhhhhhhh.

-          Pellízcate los pezones puta, sufre dolor para mí mientras ella te folla, quiero verte siendo muy zorra.

Lo haces sin dudar, comienzas a pellizcarte los pezones, a ponerlos duros, Lucía te está follando con sus dedos cada vez más rápida y profundamente, continuando con el trabajo de su lengua en tu culo,  es demasiado para ti y estallas en un orgasmo increíble

-          Aggggggggggggg, jodeerrrrrrrrrrrrrrr, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiigue, uffffffffffff.

-          Muy bien zorra, veo que Lucía te ha hecho un buen trabajo. Ahora me voy a meter con vosotras, nos ducharemos los tres juntos y quiero que me dejéis bien limpio putas.

Me desnudé y entré en la ducha, cogí a Lucía la bese, quería agradecerle el placer que te había dado, fue un beso largo, nuestras lengua se juntaron buscando los rincones más profundos de nuestra boca, tú te apretaste a mi espalda haciéndome sentir tus pezones duros contra ella, tus manos acariciándome, mi polla estaba cada vez más dura y quería utilizaros a las dos. Cogiste el jabón y mientras besaba a Lucía comenzaste a frotarme la espalda, masajeándola, después el culo, metiendo tu mano entre mis piernas  buscando mi polla, pajeándola suavemente, notando como crecía en tu mano. Me di la vuelta, quería besar a mi puta, ver tu cara de zorra viciosa, lo hice con pasión, apretándote fuerte contra mí, ahora era Lucía la que se quedaba en mi espalda, la que me enjabonaba, la que metía su mano entre mis piernas buscando mi polla. Después me coloqué en medio, colocándoos a cada una de vosotras a un lado, podía besaros a las dos, primero una, después la otra, vosotras acariciabais mi cuerpo enjabonando el pecho y la polla, junté vuestras cabezas para que nos besásemos los tres, mezclamos nuestras salivas, jugamos con nuestras lenguas, mis manos jugaban con vuestros culos, acariciándolos, apretándolos con fuerza. Subí las manos por vuestras espaldas, hasta llegar a vuestras cabezas, las presioné hacia abajo, estaba claro que quería que me la chupaseis de rodillas como las buenas putas deben hacer, siendo sumisas y serviciales. Una frente a la otra, de rodillas lamiendo mi polla, pasando vuestras lenguas por ella, de vez en cuando vuestras lenguas se rozan y aprovecháis para besaros, ahora tu coges mi polla y la metes en tu boca, sabes cómo me gusta que lo hagas, sabes que me gusta ver como desaparece dentro de ella, la mamas bien, la notas casi en tu campanilla, después la sacas y es Lucía la que la coge fuerte y la introduce en su boca saboreando la saliva que dejaste en ella, mientras ella me come la polla tu pasas tu lengua por mis huevos, lamiéndolos, jugando con ellos. Otra vez te la cede a ti, quiero follarte la boca, cojo tu cabeza con fuerza y te ordeno que mantengas la boca abierta, metiéndola de golpe entera, provocando una arcada al sentirla tan profunda, Lucía pellizca tus pezones mientras yo sigo follando esa boca que tanto placer es capaz de darme, apretando tu cabeza contra mi pubis, asegurándome que te la comes entera. Quiero follarte el culo, te coloco contra el cristal, con las piernas separadas, Lucía se coloca de rodillas entre el cristal y tu coño, empieza a lamerlo y yo detrás de ti abro tu culo, esta vez te voy a sodomizar sin lubricante, quiero violarte el culo y no te lo voy  preparar, quiero provocarte dolor, quiero demostrarte que me perteneces y que soy dueño de tus sensaciones, que soy yo el que decide si vas a recibir dolor o placer. Mientras Lucía lame de forma magistral tu coño, notas como mi polla se aproxima a tu ano, empujo despacio, tú separas las nalgas para facilitar la penetración, duele, no hay lubricante y notas como tu culo se va abriendo despacio, con dolor, para acoger la polla de tu amo, gimes como una perra, de vez en cuando un pequeño quejido sale de tu boca, poco a poco va entrando, tu culo va a acostumbrándose a mi polla que entra cada vez más, hasta hacerlo completamente. Una vez dentro paro de moverme y dejo que te relajes, Lucía te folla el coño, introduce dos dedos en tu coño, y noto como acarician mi polla por dentro de ti, me da mucho placer sentir esos dedos acariciándome el nabo y mucho morbo verte así de sometida.

-          Voy a empezar a follarte ese culo de puta y espero que Lucía te siga follando con sus dedos el coño. De vez en cuando la sacaré de tu culo y se la meteré a Lucía en la boca para que me la chupe.

-          Será un placer comértela cuando la saques de su culo, dijo Lucía, mientras continuaba jugando con sus dedos en tu coño.

-          Hacedme lo que queráis no quiero defraudar a mi amo y quiero darle todo el placer que pueda.

Mi polla empezó a entrar y a salir de ti, mis manos cogían tus tetas y te pellizcaban los pezones con fuerza, tú gemías, la excitación iba en aumento y tu respiración se aceleraba por instantes, los dedos de Lucía te estaban haciendo una paja sensacional, aumentando el ritmo, cuando notaba que aumentaba la velocidad yo hacía lo mismo  con mis embestidas, si paraba yo hacía lo mismo y aprovechaba para sacar mi polla de tu culo y meterla en su boca para que me la chupase, luego la cogía con la mano y la acompañaba otra vez dentro de ti, para que siguiese sodomizándote. De vez en cuando alternaba los pellizcos en tus pezones por fuertes palmadas en tu culo, plashhhhhhhh, plashhhhhhhh, plashhhhhhhhh, plashhhhhhhhhhhhh,.

-          Bien zorra, quiero que te corras, quiero que te corras para mí, quiero que Lucía saboree tu flujo.

-          Ohhh, si, si, si, si, fóllame fuerte, sodomízame, no puedo más estoy a punto de correrme, sigueeeeeeeeeeee, sigueeeeeeeeeeeee, sigueeeeeeeeeeeee, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.

Notaste como las piernas te flaqueaban, tu respiración se aceleró, tus pulsaciones estaban a mil. Te habías corrido como te pidió tu amo, con su polla en tu culo, con los dedos de Lucía en tu coño y con su lengua jugando con tu clítoris.

-          Es hora de que cambiéis vuestras posiciones, arrodíllate y cómele el coño a Lucía mientras yo me la follo, a ella le follaré el coño, no quiero follarle el culo antes que su Amo.

-          Ponte contra el cristal zorra y prepárate que tengo ganas de follarte.

Todavía tu cuerpo se convulsionaba con la espectacular corrida que acababas de tener, pero cumpliste inmediatamente la orden. Te arrodillaste y te colocaste debajo del coño de Lucía, empezaste a lamerlo con suavidad, estaba empapada y merecía disfrutar después de todo el placer que te había dado. Me cogiste la polla, la mamaste bien entre las piernas de Lucía y la acompañaste hasta su coño, permitiéndome comenzar  a follarla. Cuando mi polla estuvo dentro, continuaste lamiéndolo, pasando tu lengua despacio por sus labios, mi polla golpeaba en tu boca mientras se lo comías, de vez en cuando sacaba mi polla y te la metía hasta la garganta, haciendo que saborease el flujo de Lucía en mi polla, ella cada vez gemía más fuerte, y ahora apretaba tu cabeza contra su coño, Plashhhhhhhh, una palmada en el culo, plassssshhhhhhh, otra, sus gemidos iban en aumento, te apretaba tan fuerte contra su coño que incluso te costaba respirar, tu jugabas con su clítoris y ese juego sólo era interrumpido cuando yo sacaba mi polla y te la metía de golpe en la boca, mi polla entraba y salía de ella, tu lengua lamía su clítoris, jugaba con él, su respiración se aceleraba, plashhhhhhhh, una nueva palmada y los gemidos aumentaron

-          Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, dame fuerte, fóllame, métemela, siiiiiiiiiiiiiiiiiii, oh, si, si, si , Diossssssssssssssssssssssssss.

Seguiste lamiendo su coño mientras su cuerpo continuaba con los espasmos, yo le acariciaba por detrás las tetas sin sacar la polla de su coño y le besaba el cuello.

-          Espero que te haya gustado, ahora quiero correrme en vuestras cara, arrodíllate con María quiero que os beséis, os masturbéis mutuamente y que me comáis la polla, después recibiréis mi semen y quiero que os lo lamáis hasta que desaparezca en vuestras bocas. Si os portáis bien os ayudaré.

Otra vez la una frente a la otra, de rodillas, con mi polla en medio, pero esta vez sólo usabais las manos para acariciaros mutuamente, siendo yo el que metía mi polla en vuestras bocas según me apetecía, os follaba la boca como si de vuestro coño o culo se tratase, compartíais vuestra salivas, os cogía fuerte de la cabeza, os apretaba contra mi pubis, os forzaba la boca hasta hacer que mi polla desapareciera en ella, hasta que me corrí entre fuertes gemidos.

-          Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, jodeeeeeeeeeeeeeeeer, uffffffffffffffffffffffffffffff, bebérosla, tragaros mi semen putasssssssssssssssssssssss, uffffffffffffffffffffffffff.

Enormes chorros de leche impactaron en vuestras caras, manchándoos completamente, frente, nariz, mejillas, boca, barbilla, e incluso algún chorro impactó en la tetas de Lucía. Ella empezó a besarte, a pasar la lengua por tu cara, lamiéndote, recogiendo el semen que la manchaba y bebiéndolo. Vuestras manos seguían acariciando el otro coño tal y como yo os había ordenado, mientras, yo te miraba, orgulloso de ti, orgulloso de mi puta esclava, orgulloso de mi propiedad. Después fuiste tú la que le recogías el semen con tu lengua, limpiándola, lamiéndola, saboreando en su piel tu premio, el semen de tu amo.

Cerré el grifo de la ducha, os observé, gemíais cada vez más fuerte, más rápido, os besabais con pasión, juntando fuerte vuestros labios, jugando con vuestras lenguas, follándoos el coño con los dedos, estabais a punto de correros una vez más y os había prometido ayudaros a limpiaros si os portabais bien

-          Ahora zorras me parece que estáis demasiado limpias, me apetece mearos y lo voy a hacer por todo vuestro cuerpo, por vuestro pelo, por vuestra cara, por vuestras tetas, por vuestro coño y en vuestra boca mientras me la chupáis. No paréis de acariciaros y os correréis mientras os meo.

Comencé a mearos, notaste como caía en tu hombro, rápidamente en tu pelo, en el de Lucía, en vuestra cara mientras os besabais, notabais su sabor, el chorro se dirigió a vuestras tetas, os meaba los pezones, y caía caliente por vuestro vientre, lo notabais en la mano al caer por el coño, cogí de tu pelo, estiré de él con fuerza hacia atrás para que mirases hacia arriba y metí la polla en tu boca, esa sensación de ser tan cerda, mi meada en tu boca y la mano de Lucía provocaron un nuevo orgasmo que fue seguido por el de ella que lo tuvo mientras terminó de beberse las últimas gotas y me limpiaba solícita la polla con su lengua.

-          Muy bien zorras, habéis estado a la altura, ahora os tendréis que duchar de nuevo y lavaros bien los dientes porque esas bocas tengo la impresión que van a ser muy usadas esta noche.

Esperamos que os haya gustado nuestro relato, somos nuevos en este juego de la dominación y sumisión. Nuestros relatos son la expresión de nuestras fantasías que esperamos hacer algún día realidad. Os mandamos nuestra dirección por si queréis poneros en contacto con nosotros para comentarnos cualquier cosa o hacer cualquier tipo de proposición: amoyesclava4228@hotmail.com