La posada 1
Historia de como me dieron la cogida de mi vida en la cena de la empresa
Me presento, mi nombre es Milly, tengo 26 años. 1.70, Piel clara, me han dicho mucho que tengo unos ojos preciosos. Trabajo actualmente en un pequeño despacho de construccion, por lo cual es un trabajo donde los hombres son mayoria. Es un trabajo dificl de sobrellevar por una mujer, puesto que es muy pesado, a pesar de eso, estoy a cargo del area de ingenieria aunque soy realmente arquitecta, este puesto me lo he ganado con muchisimo esfuerzo. aunque muchas veces he fantaseado con cogerme a mi jefe, el ingeniero Reyes. Siempre veo que llega en su camioneta negra, con esos pantalones que le quedan pegados a ese culo y le marcan el bulto. me he tocado en el baño cuando Reyes lleva camisas apretadas y se le notan los musculos.
Todo empezo el dia que dijeron que habria una posada de la empresa. y alguien comentó que para la convivencia y esas cosas estaba prohibido llevar a un acompañante y en caso de faltar se descontaria del sueldo y del bono. Eso me puso un poco malhumorada por que no podria llevar a mi novio rogelio pra darle celos a mi jefe, pero tambien me dio la idea de que entonces el no llevaria a su esposa. me imagine cada escenario de la noche, me compre un vestido rojo que se me veia apretadito rico. Rogelio se molesto conmigo por ese vestido pero no le di importancia, me lo puse sin bragas ni sosten para que se viera mejor y no se marcara ninguna costura.
al llegar la noche estaba mojadisima por la sensacion de andar casi desnuda rodeada de tantos hombres. Vi las miradas de todos, me miraban con deseo, como con ganas de arrancarme la unica pieza que tenia y montarme en la mesa. Obviamente no faltaron las miradas de mis pocas compañeras. no podian soportar que yo tuviera toda la atencion. Esa combinacion me hacia sentir poderosa, pero tambien estaba mojadisima pensando en como seria al fin cogerme a Reyes.
cuando llego me miro de arriba abajo, no dejaba de verme con su sonrisita picara.
-Ramirez, ese vestido le queda muy bien. ¿esta buscando un aumento?
me susurro al oido al saludarme mientras me tocaba la espalda con sus dedos helados. Me estremecí. solo pude reir inocentemente y agradecer el elogio.
Bebimos algunas copas juntos, hablando sobre los futuros proyectos de la empresa, el no dejaba de tocarme la espalda, de acomodarme el cabello y de verme discretamente el escote.
no lo podia creer, se me estaba cumpliendo la fantasia. ambos estabamos un poco entrados en tragos cuando llega Altagracia, la jefa de proyectos, que tambien fue su amante.
-Reyes, como esta fernanda? refieirendose a su esposa
-Muy bien gracias, ocupada con las niñas.
Reyes se voltea y me dice -discupa te traigo otra copa y me voy.
regresa con la copa y me explica que lo vuelvo loco pero que en verdad no puede fallarle a su familia.
ahora lo deseo más que nunca. me pongo ya en un plan muy seductor, lamola orilla de la copa, lo miro a los ojos, me acomodo el escote para que lo disfrute entero, cruzo la pierna y le dejo ver por un segundo que no llevo bragas. Me toma por la cintura y con una voz fuerte me dice que nos veamos en su oficina. Estoy emocionada, y muy caliente, se me marcan muchisimo los pezones y el resto de compañeros lo notan.
camino rumbo a su oficina y lo encuentro ahi sentado, con una cara muy seria.
-Pasa Mildreeth, -sientate. me lo dice ordenandolo-. Te repito que no hay nada que este deseeando más en el mundo que arrancarte el vestido y hacerte mia en este escritorio. -Me inclino hacia el y le pregunto -¿entonces que estas esperando?, tomame
no puedo Ramirez, en verdad. Entiendeme, tengo dos hijas y un matrimonio.
-sabes que no llevo nada debajo? nadie le va a contar a monica, este será nuestro secretito. le digo mientras me suelto el vestido y cae al piso.
Se molesta, lo veo en sus ojos. -VETE DE MI OFICINA! lo dice muy serio y levantando la voz. No entiendo, me estuvo seduciendo toda la noche.
me subo el vestido y salgo de ahi llorando, me encierro en el baño, estoy hecha un caos, el maquillaje corrido, el vestido desacomodado.
me siento tan tonta por creer que un tipo como Reyes podria ver en mi algo más que una empleada.
En eso abre la puerta Daniel, el becario.
Daniel, era un gran tipo, desayunabamos juntos los martes cuando no le tocaba salir a obra. Me mandaba videos muy divertidos. Nunca vi a dani con otros ojos, ni mucho menos. El tenia solo 21 años, era tan delgado, y con sus lentes, siempre bien fajado y peinado. me parecia muy mono pero en un plan mas maternal.
-Te vi salir de la oficina de reyes.
-Si, estabamos discutiendo unos proyectos que se vienen en enero
-Vestida asi? y como te vi salir no creo que solo hablaran de estructuras. Sé que te lo cogiste. Putita. todos se lo imaginan pero yo lo sé. Tengo eviencia.
me muestra una foto de mi desnuda, tomada desde la ventana trasera de la oficina.
me quede espectante, en verdad no creia lo que estaba pasando, el becario me estaba chantajeando.
-y que quieres?
-quiero lo mismo que todos allá afuera quieren. te quiero a ti, a ti en ese vestido de puta que te pusiste.
no sé si fue el shock del momento, pero no podia para de sentirme caliente, estaba mojadisima, no me lo podia creer.
me toma del brazo y me da un beso bastante lascivo, me encanta, me dejo llevar en el beso, mientras el me toca de arriba a abajo.
me apretaba con una fuerza impresionante, de pronto me sube el vestido y sin avisar me mete dos dedos. entraron facil por lo mojada que estaba
-estas mojada putita. te encanta que te traten asi verdad? me lo dice mientras empieza a masturbarme con muchisima fuerza.
no podia parar de jadear, hasta que me tapa la boca con la mano.
-quieres que nos corran o que? callate. me abofatea. ahora mamamela. cometela como se la comiste a Reyes.
se saca el miembro del pantalon por dios que es el más grande que habia visto jamas. lo miro sin podermelo creer, se me hace agua la boca tan solo pensar en tenerlo dentro de mi,
Me hinco y comienzo a besarlo. es dificil hacer que entre todo, a penas cabe en mi boca y siento un leve tirón en la quijada. pero lo consigo, me la como entera y lo escucho jadear.
-Mirame a los ojos pendeja. quiero que veas a la cara a quien se la estas mamando, quiero verte ahogandote con mi pito.
me estaba poniendo cerdisima todo ese asunto. me estaba hablando con mucha autoridad este muchachito y eso me encantaba.
de verdad que era enserio eso de verme ahogandome con su pito. la metia cada vez mas adentro y cuando dejaba de verlo me tiraba del pelo. esa situacion de ceder el poder me encantó.
Me estaba comiendo su pene como si fuera mi ultima cena, estaba disfrutando cada centimetro y cada jalon de cabello. Se lo mamaba como poseida, no podia parar, como si se tratara de mi paleta favorita, ya estaba deseando su leche en mi. En eso se quita y me dice
- si quieres la leche vas a tener que rogar por ella, puta
me toma del pelo y me dice
-suplicame por tu lechita nena, ruega por ella
verlo tan fuera de si hablandome como si en verdad fuera su puta me encantaba.
-Dame tu lechita papi, porfavor damela toda, te lo ruego por favor damela
- donde la qieres, putita?
-damela en la boca, porfavor
Comienza a correrse, pero no en mi boca. se corre en mi vestido, que estaba en el suelo.
-limpialo con la lengua, o te quieres salir asi enfrente de todos?
me sentí muy caliente mientras lamia el vestido. me lo puse y apenas se notaba una mancha pequeña. Me besó delicioso y se despidio.
pero esa historia no termino ahi.