La pijamada

Hikari invita a Asuka y a Rei a pasar un fin de semana de chicas. Una propuesta de Asuka y un invitado inesperado cambiaran todo.

Asuka, Rei e Hikari tomaban una ducha después de una agotadora clase de deportes.

¿Entonces, vendran las dos a mi casa? – Dijo la delegada – mi padre y mis hermanas se van por todo el fin de semana

  • Por mi no hay problema amiga… ¡Pero Rei es la esclava sexual del comandante Ikari!, no creo que le de permiso con todas las cosas sucias y pervertidas que tenía pensado para ella este fin de semana…- le dijo Asuka

Rei ni se inmuto. Había perdido muchas clases y esperaba ponerse al día con la ayuda de Hikari. ¡Que Asuka la molestara era el pan nuestro de cada día!

-Por supuesto que ire delegada Horaki

La casa de Hikari era amplia y bonita. Era de dos pisos. Las tres chicas dormirían en el cuarto de la anfitriona. Asuka tenía puesto una franela amarilla con unos ajustados Shorts de bluejean como ropa para dormir. Hikari una pijama de seda china, roja adornada con dragones. Rei se quito toda la ropa y se disponía ir a dormir desnuda. Hikari estaba horrorizada con la idea. Asuka solo le dijo que se acostumbrara, Rei era un mar de rarezas. Hikari le busco a la muchacha otra de sus pijamas, una azul celeste.

Rei estaba algo incomoda. Entre las puyas de Asuka y la amabilidad de la delegada para con ella, se encontraba totalmente confundida. Asuka e Hikari se llevaban a las mil maravillas. Empezó a pensar que fue una mala idea quedarse a dormir con ellas. Ellas tenían una gran camarería, casi podría decirse una relación fraternal.

-… ¡En lo que los chicos se enteren de que acostumbras a dormir desnuda!…- decía Asuka con malicia

  • ¡Asuka!

  • Solo bromeaba Hikari… ¡lo que se hace y se diga en una piyamada, no sale de la piyamada!

Rei era silenciosa, seria y rígida. Hikari hacia lo posible para que se integrara, pero era algo imposible. Asuka había salido un momento del cuarto y ella trataba de entablar una conversación con Rei de cualquier frivolidad. Rei estaba totalmente desconectada con lo que las chicas de su edad sabían, hacían o les interesaba. Hikari, tratando de justificarla, pensó que era que Rei era demasiado madura. Quizás ella había pasado por muchas cosas, según Asuka y Shinji, ella era una huérfana salida de quien sabe donde.

Asuka regreso con tres vasos y una botella de licor. Misato era una alcohólica incorregible, pero no dejaba que sus pupilos tomaran en su presencia. Ella nunca había bebido y tenía curiosidad. Propuso que las tres tomaran hasta embriagarse.

  • No creo que sea buena idea- Dijo Rei, era la frase más larga que había dicho en toda la noche.

  • Asuka, ¡no creo que deberíamos!...

  • ¡Hablan como dos viejas mojigatas!- Dijo Asuka animada, empezó a llenar los vasos- ¿Qué puede salir mal?, estamos solas en tu casa y no saldremos del cuarto y tarde o temprano nos tocara beber… ¡qué mejor forma de hacerlo que entre amigas!... ¡anímense!

Asuka le dio un vaso a cada una. Rei estaba imperturbable e Hikari todavía dudaba.

  • Sin trampas… ¡a la cuenta de tres!...- Dijo Asuka.

El licor era dulce y suave. No les pareció tan malo. Rei se sintió por fin parte del grupo. Hikari se sintió algo achispada. Asuka estaba algo decepcionada, encontraba la bebida suave, no muy distinta a los refrescos que tomaba.


Shinji estaba en la puerta tocando el timbre. Hikari había llamado y le había pedido que viniera. Le dijo que era urgente. Hikari le abrió la puerta.

-Shinji, ¡menos mal que viniste!... entra… ¡son Rei y Asuka!- Hikari de un jalón lo metió en la casa y cerró la puerta.

El tercer elegido no tuvo tiempo de ni siquiera pensar. ¡Todo fue tan rápido! Hikari tenía la nariz roja y el aliento dulce, anisado. Antes de que pudiera reaccionar sintió un golpe por detrás de la cabeza. Todo fue oscuridad. Despertó amarrado de pies y manos a una silla. Le habían dado a oler sales aromáticas. Hikari era quien se los administraba. Tiro las sales al piso, al lado de la silla estaba una botella de vino champanisado destapado. Hikari tomo un sorbo del pico con una mano y con la otra se limpio la boca. Hipo, un hilillo de liquido salía de la comisura de su boca.

-¡Asuka se te pasó la mano!- Dijo con voz estropajosa. Asuka rio por toda respuesta. Ella estaba detrás de él. Se le acerco a su amiga con un rodillo de amasar debajo del brazo. Caminaba bamboleándose. Hikari le dio la botella y Asuka se bebió el sorbo que quedaba. La botella estaba vacía y el cerebro de Asuka trataba de asimilarlo. Infructuosamente intento sacarle hasta la última gota. La puso boca abajo, la sacudió, miro en su interior. Sus cejas se fruncieron de contrariedad, tiro la botella una vez que entendió que se había acabado el licor.

  • ¡Reiiiiiiii, veeeeeeen!... – Grito a todo pulmón- ¡ya Shinji está aquí!... ¡Tráete otra botella por favooooooor!

Rei apareció con la nariz roja y con otra botella. Su actitud era tímida y vacilante. Miraba al suelo, destapo la botella con la boca y sorbió el licor en un largo trago. Se estaba armando de valor. Le paso la botella a las otras dos, estas se pelearon diciendo que la otra ya había bebido y que era su turno. Rei las ignoro. Se paro firme, hizo una reverencia y con los ojos cerrados dijo:

  • Ikari-Kun me gustas… ¡te deseo!... quiero ser uno en cuerpo, mente y alma contigo. ¡Este sentimiento me ha estado carcomiendo, aunque parezca lo contrario, desde que te conocí!. Ikari-Kun… Shinji, perdóname por mi actitud fría e indiferente… por la bofetada que te di una vez

Rei dio el discurso más largo de toda su vida. De bofetada en adelante Shinji perdió el hilo, lo que le quedaba claro era que estaba a merced de tres borrachas totalmente fuera de sí. Con gritar y forcejear no iba a ganar nada. Pensó en seguirles la corriente y encontrar la forma en que lo desataran.

  • Rei, ¡tú siempre me has gustado!... y si fueras tan amable de desatarme

Rei sonrió de oreja a oreja. Asuka derribo la silla de una patada con el chico amarrado a ella.

  • Siempre me has gustado tercer elegido… ¡pero siempre he odiado tus lloriqueos, tu carácter cobarde y pusilánime!... ¡No pienso perder ante Rei!- le dijo encabronada.

Hikari trato de calmarla. Rei no le hacía caso a ninguna de las dos. Hikari levanto a Shinji y puso la silla como estaba. El joven estaba bien atado, era seguro que si se ponía gritar las chicas lo amordazarían. El muchacho sintió la suave tela del pijama y el núbil cuerpo. Tenía los jóvenes pechos en toda la cara. Hikari era torpe por la bebida y Shinji pesado. Shinji nuevamente estaba cara a cara con las tres chicas.

  • Ikari, siempre me has parecido un chico lindo… ¡pero a mí siempre me ha gustado Touji!- le dijo Hikari, estaba algo avergonzada por el maltrato al chico. Lo beso en los labios- ¡este es un beso de amiga!... ¡no vayas a pensar cosas raras!

El beso sabía a anís. Fue solo un breve y tenue rozar de labios. Asuka y Rei se quedaron de piedra. Hikari las miro desafiante.

  • Se merecen que yo sea la primera que lo bese… en vez de pelear deberían compartirlo como buenas amigas ¿no creen?... Rei, el no puede enamorarse de ti si nunca le dices nada y Asuka, tratándolo mal tampoco lograras nada. ¡Bésenlo también!

Asuka y Rei estaban en un duelo mortal de piedra, papel y tijera para ser la segunda en besar al muchacho. Hikari le preguntaba a Shinji si Touji hablaba de ella, como la veía, si la consideraba una latosa o una molestia. Era una ametralladora de preguntas, ni siquiera esperaba que el muchacho respondiera. Que el chico estuviera atado era algo sin importancia para ella. Shinji pensó que Hikari era un poco como Rei y Asuka. A Touji o lo trataba con indiferencia o mal. Nunca se hubiera imaginado que ella, la delegada de la clase, estuviera enamorada del tosco chico.

Del trío de borrachas, Hikari era la más razonable. Se cercioro de que el golpe en la cabeza del muchacho no fuera serio. Era solo un inofensivo chichón. Shinji pensó que podría lograr convencerla para que lo desatara. Pero no pudo ni insinuarlo, Rei había ganado. Bailoteaba y daba saltos de alegría impropios de ella. Shinji sintió que se encontraba en otra dimensión.

  • ¡En tu cara segunda niña!- dijo ella eufórica.

  • ¡Me agradabas más cuando eras un zombi sonámbulo sin voluntad, primera niña!- Dijo Asuka apretando los dientes- ¡No importa! ¡Los últimos serán los primeros!... ¡después de besarme a mí, no hubiera querido besarte a ti!- le dijo retadora.

Rei dio algunos traspiés, beso al muchacho en forma torpe y brusca en la boca. La silla se hizo para atrás y el muchacho volvió a caer con la peliazul encima de él. "Lo siento" musito en forma inaudible. Shinji tenía nuevamente un par de senos en toda la cara, un suave y núbil cuerpo sobre él, el roce de la suave tela de seda. Rei volvió a ponerlo como estaba.

Asuka se acerco en forma lenta y sensual. El muchacho trago saliva. Se sentó de frente sobre él con las piernas abiertas, a horcajadas. Shinji estaba atado con los brazos en el espaldar de la silla por las muñecas y los tobillos por las patas. Asuka restregaba su sexo en el bulto del muchacho, rozándolo o machacándolo. Los muslos desnudos de la alemana sentían la tela del pantalón del muchacho. Shinji tenía nuevamente un par de senos en toda la cara, pero esta vez era adrede. Asuka bailoteaba sobre él, como si se hubiera olvidado del muchacho.

Shinji estaba sudando frío. Asuka desinhibidamente se masturbaba prácticamente delante de sus dos amigas rozándose y restregándose descaradamente en el tercer elegido. Asuka sentía un gran placer y un morbo total. Las ropas eran el único obstáculo para el sexo puro y duro. Asuka se detuvo de golpe. Relamiéndose fue acercando su cara, sus labios húmedos y entreabiertos, a la cara y labios del tercer elegido. Sus alientos eran ya uno y solo a sus labios los separaban una distancia de pocos milímetros. Asuka se puso de pie y con una sonrisa, entre picara y altiva, dijo desafiante:

  • ¡Si quieres que te bese tendrás que pedírmelo, tercer elegido!- alzo una pierna y de un empujón con el pie en todo el pecho del muchacho volvió a derribarlo. Shinji nuevamente caía de bruces con todo y silla.

-¡Necesito un trago!- Dijo la alemana, más para ella misma que para los presentes. Se sentía acalorada y cachonda. Rei e Hikari se encargaron de levantar al muchacho. Shinji ya no sabía que pensar o hacer. Su miembro erecto abultaba su pantalón como otra nariz. Rei e Hikari estaban acaloradas también y fueron con Asuka por otro trago. La ultima en tomar era Hikari, esta se acerco al muchacho dando tumbos y con la botella de licor en una mano.

-¿Quieres?- dijo

-¡No!, ¡no quiero! ¡QUIERO QUE ME SUELTEN DE UNA BUENA VEZ!- Grito Shinji. Forcejeo con la silla tratando de liberarse, pero lo único que consiguió fue volver a caer de bruces- ¡Maldición! ¡Maldición! ¡Maldición! ¡Maldición!

Hikari rompió a llorar. Primero se le aguaron los ojos, trato de contenerse, pero no pudo. Lloraba amargamente como una niña buena que regañan por algo malo que no hizo. Asuka y Rei se acercaron para consolarla.

  • ¡Eres un bruto tercer elegido!- dijo Asuka fulminando al muchacho de una mirada- ¡te mereces estar tirado en el suelo!

Hikari lloraba en el hombro de Rei y esta le daba palmaditas en la espalda para consolarla. Shinji seguía tratando de liberarse. Hikari se calmaba poco a poco y Rei la abrazaba más.

-Shinji, ¡ya no me gustas!- dijo Rei como un castigo peor que la muerte. Las dos chicas abrazaban a Hikari y miraban a Shinji con odio. Shinji se sintió un poco mal por Hikari, en el estado en que estaban las tres no eran responsables de sus actos y eran capaces de cualquier locura. Se dio cuenta de que no iba poder desatarse solo. Tenía que encontrar la forma de que lo desataran.

-¡Lo siento Hikari, Rei, Asuka!... pero me pegaron en la cabeza y me amarraron a esta silla... ¡eso pone de mal humor a cualquiera!

-¡Uyyy!.... ¡que quisquilloso!.... ¡Eres una gallina cobarde, kinder!... ¡a la primera señal de peligro sales corriendo a esconderte!... ¡Rei y yo te hemos confesado nuestros verdaderos sentimientos hacia a ti y ni siquiera te importa!... ¡No te mereces lo bien que te hemos tratado hasta ahora!

  • Asuka tiene toda la razón, ¡no tenias ningún "drecho" de tratar mal a.... a...!, –Rei se rasco la cabeza y hablaba con voz estropajosa- Asuka, ¿cómo es que se llama la delegada de la clase?

  • ¡Hikari!, Rei, me llamo Hikari y te conozco desde el año pasado. Nunca faltabas a clases, pero no socializabas con nadie...- Hikari empezó a contar a todos la vida de Rei o lo que hasta ahora conocía de ella. Ya había dejado de llorar, olvidando por completo el incidente.

-¡Chicas! ¡por favor, denme otra oportunidad!... Hikari, ¡lo siento!... todo es mi culpa... ¡les prometo que me portare bien!... solo tienen que soltarme...

Las chicas parecían haberse apaciguado. Entre las tres pusieron la silla nuevamente de pie. Asuka sonrió perversamente.

  • ¡Deberás pagar el precio por habernos ofendido, kinder!- Dijo. Las tres chicas se colocaron detrás de él y empezaron a cuchichear. Shinji trato de aguzar los oídos para escuchar. Hikari grito escandalizada:

  • ¡Nada de sacarle los ojos con un cuchillo Asuka!

  • Asuka... en ese estado no podría ser piloto de EVA... al Comandante Ikari no le gustaría eso...-Dijo Rei seria, pero firme.

  • La sangre es muy difícil de limpiar... y yo creo que a Shinji no le va a gustar quedarse sin ojos...- dijo Hikari.

  • ¡Tontas!, si le gusta o no le duele ¿qué sentido tiene castigarlo?- dijo Asuka en un berrinche. Hikari y Rei se mantuvieron firmes. Asuka entorno los ojos- ¡Aguafiestas!- Siguieron cuchicheando. Shinji disimuladamente intentaba desamarrarse entre desesperado y cauteloso. "¡Tirarlo por las escaleras!", "¡No!, era muy pesado y difícil de mover". El tercer elegido trago saliva, los cuchicheos se volvieron más ininteligibles.

Las chicas por fin se pusieron de acuerdo. Las tres soltaron una risita de complicidad. Asuka e Hikari salieron del cuarto un momento y regresaron con algo escondido en sus espaldas para que el muchacho no viera. Las tres estaban detrás de la silla. Shinji se esforzaba en tratar de girar su cuello para verlas y saber que tramaban, pero estaban a sus espaldas en un punto ciego.

  • Shinji, ¿no nos puedes ver, verdad?- le dijo Hikari

-No...

  • Solo mira la pared que tienes enfrente y no trates de voltearte...

Shinji se preguntaba que tramaban cuando el pantalón de pijama de Hikari paso volando por encima de su cabeza. Trato de voltearse, pero Asuka le pego con el rodillo en la cabeza y le puso la punta de un filoso cuchillo en la espalda.

  • ¡Solo mira la pared que tienes enfrente y no trates de voltearte!...- Dijo autoritaria. La joven estaba a su lado calentando su oído izquierdo con su aliento de anís y Champaña. Shinji obedeció y dejo de sentir el cuchillo en su espalda. Hikari estaba detrás de él con solo sus bragas rosas con dibujos de cereza. Ella le susurro en el oído: "¡No mires atrás!". La camisa roja con dragones bailaba delante de Shinji. Hikari tenía sus brazos desnudos a los lados de la cabeza del joven Ikari sosteniendo la camisa y haciéndola bailar. Su torso y senos rozaban la cabeza y la nuca del muchacho. Ella se estremecía al sentir el cabello, las orejas o la piel de la nuca en su piel.

Shinji se sentía excitado y a la vez temeroso. No se atrevía a desobedecer y miraba hipnotizado el vuelo de los dragones. Hikari los aventó lejos y estos volaron en una parábola antes de caer en el piso como una mancha de sangre rojo rubí. El muchacho resoplo y continuo mirando fijamente la pared. Hikari desde atrás le enseño sus bragas rosas que sostenía con una mano delante de la cara del muchacho. Hikari estaba totalmente desnuda detrás de él. Ella le encasqueto al muchacho sus bragas en la cabeza, tapándole los ojos. La suave tela era de algodón, estaba sudada y tibia. El velo en los ojos del muchacho era como una neblina rosa con puntos oscuros que convertía todo en siluetas difusas.

Rei se desabotono la camisa de su pijama lentamente delante de él. la joven era un fantasma rosa, una visión onírica irreal. Su torso desnudo estaba a la vista de todos... menos Shinji, que veía las formas redondeadas en forma de silueta. Rei se bajo sus pantalones y se los quito en movimientos exactos y precisos. Sus pantaletas blancas de colegiala era todo lo que tenía puesto. Se acerco un poco más al muchacho y se las bajo cerca de él. Se inclino para sacarla de una pierna y para la otra se apoyo en el hombro del muchacho. Con la prenda en sus manos también se la puso de sombrero al japonés. El muchacho quedo totalmente a oscuras.

Asuka se sentó nuevamente a horcajadas sobre él. Lo abrazo por los hombros con la cara a pocos centímetros de su cara. Shinji estaba totalmente desorientado, no sabía si Asuka estaba desnuda o todavía vestida. Ella susurro en forma seductora:

-Te debo un beso... ¡solo tienes que pedírmelo, Kinder!...

  • ... -

Asuka se quito su camisa amarilla en un suave y lento movimiento. El muchacho sintió la carne desnuda de sus pechos en la cara.

-Asuka, ¿me darías un beso?

  • ¡No!

  • ... -

  • Kinder, no solo es pedirlo... ¡convénceme!

Shinji se puso a cavilar. ¡Todo había dado un giro tan extraño!. Pensó que el licor debía de haberlas vuelto locas a las tres. Sintió que sería malo aprovecharse de las chicas en ese estado. Si les seguía el juego tal vez lo soltaran. "solo para que me liberen, no son responsables de sus actos en estos momentos". Shinji pensaba que las podría dominar a las tres con facilidad una vez libre.

  • Asuka, me gustas... ¡creo que eres fantástica!... y yo sería el chico más afortunado de la tierra si te dignaras a darme un beso...

Shinji sintió como Asuka se levantaba y se paraba enfrente. Se desabotono el short y bajo la cremallera en forma sonora. Hizo como Rei, para terminárselo de quitar puso un pie en el hombro de Shinji y por ultimo le aventó la prenda a la cara, esta cayo sin pena ni gloria a los pies del chico. Asuka solo tenía puesto una braga blanca labrada de fina lencería con un simple y sencillo lazo rosa por todo adorno. Touji, Kensuke y Shinji ya la habían visto una vez en el portaviones gracias a una ráfaga de brisa marina (¡y pagado el precio!). Shinji no había vuelto a vérselas puestas, pero era quien hacia la colada en la casa (le gustara o no). No veía nada, de nada y se preguntaba a donde iba a parar todo este juego del gato y el ratón.

  • ¡Que decepción tercer elegido!- dijo en ella en un mohín irónico- Boberías como esa escucho todos los días... ¿no puedes ser mas imaginativo?

-Asuka... ¿qué te puedo decir que no te hayan dicho?... ¡eres la chica más linda y deseada de todo el instituto!... yo podría colmarte de halagos pero me quedaría corto...

Asuka bostezó sonoramente. Se quito sus bragas y se las puso de sombrero. Shinji suspiro desalentado, ya se estaba resignando a quedarse atado hasta que amaneciera y a las chicas se les pasara la borrachera.

  • Tercer elegido... ¡ultima oportunidad!- dijo Asuka sentándose a horcajadas sobre él y con la cara a pocos centímetros de la cara del muchacho, abrazándolo confiada por los hombros. No lo iban a liberar y lo pensaban dejar atado hasta el día siguiente. Jugarían y lo atormentarían toda la noche. Ella se preparaba para nuevamente derribarlo de una patada a la próxima estupidez que escuchara. Shinji aspiraba el dulce aliento, sentía el cálido, núbil y desnudo cuerpo. No podía ver. Asuka discretamente y disimuladamente restregaba su sexo en su bulto. Los labios vaginales besaban la tela del pantalón. Asuka solo estaba concentrada en su placer y morbo, absorta a eso y a nada más. Shinji entonces...