La pianista 3

MARCELA

Salí de la habitación con emociones encontradas, por un lado me encontraba feliz por volver a verla, había ido hace unos años a un concierto que realizo en España, pero no intente contactarla, ella había cambiado, a parte que la mirada de amor que le ofrecía a la chica que iba a su lado me hizo desistir, (ahora se que se llama Gabriela) es una chica hermosa  y la mira con el mismo amor.

Cuando estoy examinando a Alicia observo las marcas y las cicatrices, esto me preocupa aun cuando no creo que Gaby la haya golpeado, no se que pueda estar sucediendo en su vida; me di cuenta que estaba embarazada aproximadamente de un mes y medio, pero luego cuando sus valores se estabilicen me encargare de examinarla exhaustivamente.

Aun cuando deje a Alicia, se que Alicia no admitirá sus sentimientos, es muy penosa como para hablar, espero que Gabriela pueda sacarla de esa zona que desde que la conozco le gusta estar, ella no le gusta entrar en contacto con sus sentimientos, o por lo menos no dar el primer paso, cuando estuvo conmigo siempre me toco llevar las riendas en cuanto a lo sentimental.

Llegó a la casa y me recibe máxima últimamente hemos tenido problemas, su familia le ha estado presionando para que regrese a Europa, pero yo no quiero dejar a mi país, aunque creo que es lo más cuerdo que se puede hacer en una situación así, para nosotras, nosotras somos esposas, y si ella se debe ir yo tengo que seguirla, aunque si es por mi la sigo hasta el fin del mundo.

Hola amor, como estas? – la salude cuando la vi sentada en la sala rodeada de papeles.

Bien beba y tu como estas, como te fue hoy?- respondió ella, parándose y caminando hacia mi, deleitándome con su figura, en esta ocasión tenia unos short súper cortos, que dejaban ver sus piernas largas y una franelilla blanca que remarcaba sus hermosos senos.

Nuestros problemas no son tantos por problemas de nosotras como parejas, es decir; de caracteres, sino más bien de celos, ella es una persona muy carismática y donde llega se vuelve el centro de atención, yo por el contrario me gusta pasar desapercibida, soy sumamente celosa, lo admito, para que les voy a mentir o negar la verdad, pero ¿que harían ustedes si su novia le viven regalando flores, chocolates, que se lo dejan  en la oficina?, y lo peor de todo es que ella es bisexual, lo que no me da mucha seguridad, porque por presiones sociales puede terminar escogiendo a los hombres.

Bien amor, ven que necesito contarte algo.- le dije sentándonos ambas en el sofá, ella se sentó primero y luego yo me senté en sus piernas.

Amor sabes que hoy me toco atender a una cantante, bueno en realidad pianista, pero eso no es lo importante sino que la pianista es Alicia.- dije de sopetón ya que sabía que a Máxima no le agradaría nada, porque ya hace unos años le había contado la historia de Alicia y yo, aunque no le gusto mucho porque según ella yo sigo enamorada de Alicia. (Algo que no es cierto).

QUE? Y por que tu la atendiste si tu eres obstetra no internista?- Dijo ella en tono serio.-

Amor la atendí yo porque ella esta embarazada, y su asistente pidió al mejor médico de la clínica, o sea yo, por cierto beba te informo que Alicia es una asalta cunas, jajaja deberían compartir historias.- Dije divertida y burlándome de la situación para quitarle seriedad al tema, jaja por cierto Máxima me lleva diez años, pero en comportamiento yo parezco más adulta que ella.

Cuando su familia se entero que Máxima estaba saliendo con una mujer, pegaron el grito en el cielo, primero porque era la primera vez que salía con una mujer, segundo ellos provienen de una familia muy pudiente de Europa, y aun cuando yo no es que sea pobre pobre, no tengo la misma capacidad adquisitiva de ellos, ellos poseen viñedos y fabricas textiles en Europa, pero luego de unos meses interminables en los cuales Máxima no dejaba de viajar y recibir llamados para explicar su nueva crisis de experimentación, lograron entender hasta cierto punto que no era un experimento, ahora nos llevamos bien yo digo que hasta me quieren, bueno hasta cierto punto también, mejor lo dejo en que nos toleramos por Máxima.

Mmm y bueno no hay mas especialistas? ¿Por qué la debes atender tú?- dijo ella ya molesta.

Amor porque yo soy la mejor ya te dije, y aparte con las marcas de maltrato que vi en su cuerpo no voy a dejar que otro médico la vea, aun cuando yo ya no siento nada por ella, no indica que no me preocupe.- dije un poco molesta por su actitud.

Amor porque mañana no vamos las dos y te la presento, así ves por tus propios ojitos que ella ya tiene dueña como yo tengo dueña.- dije volviendo a acercarme para darle un beso en los labios.

Lo que comenzó como un beso lento y dulce, se fue convirtiendo en un beso apasionado, mis manos pasaron por su cuello acercándola más a mi, luego mis manos fueron recorriendo su cuerpo, le quite la camisa y le bese el cuello.

Dime quieres que te haga mía, aquí en el sofá señora de Hernández.- le pregunte seductoramente en su oído.

Si, si quiero.- respondió Máxima en un gemido quitándome la camisa, bueno abriéndola en dos rompiendo los botones de la misma.

Oh, beba quieres jugar rudo, espero que sepas que acabas de romper mi camisa Ralph Laurent, beba y por eso te voy a castigar.- Dije con una sonrisa mordiendo su labio inferior.-

Ah Dios amor, mm vamos al cuarto mejor.- dijo ella dándome una nalgada juguetona.

Llegamos a la habitación y le indique que se acostara, y desnudara mientras yo buscaba unas cosas, me perdí en el closet, un closet walk in, y agarre unos juguetes que se que a ella le gusta usar cuando esta así como hoy, cuando salí la vi acostada en la cama tocándose; yo inmediatamente me subí a ella y con voz de regaño juguetón le dije.-. mmm creo que mi orden fue que te desvistieras y te acostaras no que te tocaras, ahora por eso te sale castigo, y le mostré las esposas.

Ella me sonrió y me puso sus manos, las cuales espose al copete de la cama, una vez que la tenia esposada, empecé a besarla toda, dándole mordiscos suaves en el cuello, chupe sus senos, mis manos recorrían sus piernas, acariciando sus muslos, casi tocando su entrepierna, sintiendo  sus ansias por mis caricias, fui bajando hasta que me conseguí su entrepierna totalmente depilada, comencé a hablarle para que sintiera mi respiración ahí, rozaba sus labios con mi lengua.

Oh nena, no seas mala, por favor no me hagas sufrir más.- me dijo entre gemidos, subiendo sus caderas para que entraran en contacto con mi boca.

Sin hacerme de rogar, recorrí su entrepierna con mi lengua sintiendo su sabor.

Ohh nena, oh dios.- grito ella cuando llego a su primer orgasmo de esa noche, yo la limpie toda saboreando su divino sabor, y subí a sus labios para que probara de mi boca su sabor.

La desate de la cama y ella se coloco sobre mí dándome un beso apasionado que casi hace que acabe en ese instante, con algo de esfuerzo ella se paro, y fue al closet, salio con un arnés doble, o sea la persona que lo lleva también era penetrada por un miembro más pequeño que se encontraba en el interior de la pantaleta que sujeta ambos miembros.

Me vio con cara picara y con una sonrisa me dijo.- querías jugar, pues nena vamos a ver cuanto aguantas.

Yo que sabía lo que me venia sentí un cosquilleo y una presión en  mi vientre.

Ella se coloco el arnés y con un gesto me indico que me parará, cuando lo hice me beso en los labios mordiéndome el labio inferior, y luego con las manos me indico que bajará, me colocara de rodillas.

Es un juego de dominación en la cual casa una sabía donde estaban los limites de la otra, una vez que lubrique el arnés con mi boca me indico que fuera a la cama, me puse en cuatro y ella agarro el lubricante y unto un poco en su dedo y fue lubricando mi ano, que ya estaba más que acostumbrando y deseoso de los deseos de mi hermosa novia, cuando Máxima sintió que ya estaba preparada guío el arnés al interior de mi, sentía como iba adentrándose más y más, era una sensación de dolor y placer, y cuando sentí que sus caderas tacaron mis glúteos solo pude gemir.

Oh Dios bebe ahh.- dije entre gemidos.

Ella solo me sujeto más de las caderas, retiro el arnés para luego volver a meterlo hasta el fondo en un solo movimiento.

Ahh beba Dios ahh era lo único que yo podía decir, estaba extasiada en uno de sus adentros y afuera, me sujeto del cabello, y mordiendo mi espalada me dijo.- voy a poseerte hasta que olvides tu nombre bebe.-

Oh ahh ahh estoy cerca Maxi, estoy cerca.- decía yo entrecortada por los gemidos.

Acaba para mi nena vamos dame tu placer.- dijo dándome una nalgada y penetrándome con mas fuerzas, lo que desencadeno una serie de orgasmos que me dejo casi desmayada en la cama.

Gracias a los que comentaron mis relatos, escribo para ustedes, con la historia volver a empezar, me disculpo se me había olvidado que esa historia no tiene final por eso no he finalizado, pero ya inicio su transcripción.

Este capitulo es mas largo solo que mi querida madre no me dejo transcribir todo lo hecho, porque se puso a merodear, y eso a mi no me gusta por lo cual tuve que resumir, pero ya que volví al viejo método estaré publicando mas seguido espero.-