La pequeña ladrona

Me encuentro a una adolescente intentando robar en mi casa. Termina llevándose algo que no esperaba

Estaba llegando a mi casa, después de todo un día en el trabajo, quería llegar cambiarme de ropa y ver una peli, o algún capitulo de mi serie favorita.

Estaba llegando a mi casa, vivo en una casa terrera alejada, del pueblo. Esto me gusta ya que los vecinos además están como a 30 ó 40 metros.

Por el camino salude a algún que otro vecino, incluso pare para saludar a alguno, debe ser cortes.

Pues estaba accediendo al garaje de mi casa, cuando veo a una persona alrededor de la casa.

Dejo el coche delante de la casa y me bajo, dirigiéndome a la persona que estaba dentro del garaje. Mi garaje no tiene puerta, ya que es más un cuarto para que no le dé el sol y la lluvia.

Tengo algún trasto, más que nada porque siempre se almacena algo.

Me dirijo a la muchacha que estaba dentro del garaje, que al verme se giro nerviosa y salió como para fuera, yo le pare el coche delante, por lo que tenía que rodearlo.

Cuando me bajo y me dirijo a ella, voy suave, pero me imagino lo que pasa, intenta robarme, o tomar algo "prestado".

Esta chica es famosa en el barrio y si está en mi casa y no viendo el coche de mi mujer, sé que no está haciendo nada bueno.

Es una chica joven, de unos 16 años, algo gordita, en el pueblo se sabe que pertenece a una familia sin padre conocido. Su madre es bastante ligera de cascos, se cree que incluso es prostituta y vive de alquiler. Siempre ha sido una familia con problemas.

Preveía problemas, con esta.

  • ¿ qué haces aquí?- le pregunte los más neutral posible.

  • mmmm, veras....., - la veía mirando hacia los lados, intentaba no mirarme a la cara-

  • ¿ qué haces aquí?- esta vez fui más serio  y empecé a buscar el móvil.

  • perdona, buscaba a tu mujer, me debo ir.- lo decía mientras me rodeaba y me evitaba haciendo un circulo.

  • mi mujer, no llega hasta tarde- la agarré por el brazo y cogí el móvil.

Amenace con llamar a la policía, mientras marcaba. No me iba a tocar las pelotas la niñata esta.

La veía seria, mientras ponía el auricular en mi oreja.

  • si llamas a la policía diré que me trajiste hasta aquí y me has intentado violar- me decía mientras sonría, con cara de sobrada.

Ahora sí que me jode la tía.

Antes de darle a la llamada, le digo para ver por donde tira.

  • Haber niña, primero, acabo de hablar con Perico, delante de su casa, incluso me pare delante de él, con lo que ha visto mi coche por dentro y pudo comprobar que no estabas dentro. Segundo, le dije mirando hacia una de las lámparas que tenía en la casa para iluminar por fuera, en esa lámpara hay una cámara que abarca delante del garaje.-  le dije mirándola a la cara y acercándome lo justo para echarle el aliento a la cara.- por lo que dime ahora que vas a hacer?.

El color de la cara le cambio, casi se queda blanca y ya no se resistía, ni oponía a que la sujetara por el brazo.

Empecé a pensar que lo tenía todo a mi favor, por lo que tente a la suerte y quise ver hasta dónde podía ir. Cogí su mano y la acerque a mi polla, que pareciera casual, sin que me rozara, solo que la atraje hacia mí, y tire de su mano para que quedara cerca de mi paquete. La mire a los ojos y le dije.

  • Dime,¿ qué vas a hacer?- empezó a hacer pucheros.

  • pppor favor, no llame a la policía. - dime que quieres?, solo estaba por aquí, para ver si encontraba algo.- Decía  esto llorando.

La lleve al garaje ,la lleve al fondo, donde no se ve nada. Ya iba dándole vueltas en la cabeza como sacar partido de esta situación.

  • haber solo dime que harás para agradecérmelo. Solo dime por qué no debo llamar a la policía- Esta vez hable de forma más calmada y tranquilizadora.

-Si quiere le puedo dar las gracias- me dijo poniéndose de rodillas.

  • ¿ a qué te refieres?- me hice el loco.

  • Veras, si no me denuncias puedo ser muy agradable- mientras estando de rodillas y sonriéndome, empezó a palparme la polla por encima del pantalón.

  • Bueno veas, cuan amable eres. - le dije.

Ella siguió sobándome la polla, por encima del pantalón, luego me desabrocho los pantalones y me bajo los calzoncillos.

Mi miembro ya estaba todo tieso, mi polla mide 18 cm y es gruesa, la chiquilla, cuando la vio, se le abrieron los ojos y dijo un ooo.

  • ¿qué grande es?- comento y empezó a chupar.

Se trago toda mi polla, poco a poco, mientras que con su manita, me agarraba la base de la polla. Primero empezó tragándose el capullo. Con su boquita, se trago media polla mientras que con su manita, me la meneaba.

Movía la lengua con habilidad, lo que me hizo pensar que no era la primera vez que lo hacía y con la fama que tenía esa familia, por lo menos la madre, me da que había practicado algo.

Me succionaba la polla, con destreza, se la metía en la boca lo mas que podía, y chupaba haciendo vacio, dios, es como se la intentara arrancar, que delicia. Además con la lengua, frotaba todo lo que podía. Que arte tenia la jodia, como quería algo mas,  intente ver hasta donde podía llegar. Mientras estaba chupándola le dije.

  • necesito algo mas, con esto solo no me vale-

Se saca mi polla de la boca, sin soltarla y me dice.

  • ¿no es suficiente?, ¿que mas quieres?- mirándome desde abajo, con una sonrisita.

  • ¿que mas sabes hacer?- le dije.

  • si quieres me puedes encular, o follar, lo que quieras. Le dije que se fuera quitando la ropa.

Busque una manta, en el garaje y la puse en el suelo, mientras ella se quitaba la ropa. Cogí la ropa y me la quede y fui a la casa a buscar condones.

Como los tenia localizados, volví a los pocos segundos. Estaba en el suelo, totalmente desnuda y tocándose la almeja, que estaba totalmente húmeda.

  • ponte a cuatro patas- le dije.

Sin pensarlo se puso a cuatro.

  • dime,  la quieres ¿por el culo o el coño ?- le pregunte.

  • la tienes muy grande, solo ten cuidado- que si no me vas a dejar dolorida.

  • cuantas pollas te has metido ? , le pregunte mientras me ponía el condón.

  • unas cuantas- me dijo mirando la cabeza hacia atrás y sonriendo.

Le empecé a meter la polla en el coño, poco a poco, de forma lenta, ella gemía y decía despacio. Note como mi polla tocaba el fondo de su coño, le estaba tocando el útero.

Espere un poco a que sus labios se adaptaran a mi tamaña. Ella misma empezó a moverse, adentro y afuera, metiéndose mi polla. Me apoye en ella y le mordisqueaba la oreja.

Ponía una rodilla en el suelo, mientras que con la otra pierna, flexionada en un lado, jugaba para no echarle todo el peso, ella era poca cosa y su cuerpo no me aguantaría.

De esta forma estuve un rato largo, mientras le agarraba los pechos o le lamia en la nuca o mordisqueaba las orejas. Ella tuvo varios orgasmo y en el tercero tuve que aguantarla, porque ya no pudo más.

Esta vez, se la saque de su coñito lubricado y se la metió por el culo. Se quejo algo, pero al estar tan agotada de los orgasmos, se dejo hacer.

Yo no podía aguantar mas, pero quería probar su culito antes de correrme.

Me puse de rodillas detrás de ella, la cogí por las caderas y la empecé a embestir, sin miramientos. Me corrí al cabo de unos pocos minutos. Para mi sorpresa su culo acepto bien mi polla, lo que me hizo pensar que no era la primera vez.

Ella apenas, hacia nada, estaba como inconsciente y se dejaba hacer.

Me quite el condón y le puse la polla en los labios y le dije.

  • límpiamela-

Ella abrió los ojos como si estuviera dormida, se notaba que se había quedado relajada y empezó a lamerla de la base hasta la punta, apretó la base con su manita subiendo y extrayéndome todo lo que había quedado dentro.

Luego se quedo acostada en la manta.

Yo aproveche para vestirme, mientras le hacía varias fotos con el móvil.

Como tenía el coche delante del garaje y mi mujer no llegaría esa noche, no tenía prisa.

Espere y al cabo de un rato se despertó y empezó a vestirse. Mientras tanto, le preguntaba cosas que me habían llamado la atención.

  • Veo que eres una chica experimentada.- le comente.

  • si he visto cosas en mi casa, mi madre se acuesta con bastante hombres y yo me he acostado con algunos de ellos, a veces junto con mi madre y otras yo sola. Depende de lo que ellos quieran. Pero nunca lo había disfrutado tanto como contigo. Además la tienes muy grande y me has hecho disfrutar mucho. - me dijo.

-¿ puedo venir algún otro día?- me pregunto acercándose a mí y pasándome la mano de nuevo por la polla.

  • Ya veremos, vete- le comente.