La Pasion en el Fútbol (3)

Hola mi nombre es Marco y ahora les presento el siguiente capitulo de la serie "La pasión en el fútbol" esperando que sea de su total agrado, recuerden que están basados en futbolistas famosos y que son historias sacadas de mi mente calenturienta y cualquier semejanza con la realidad son puras coincidencias. Por último, para cualquier sugerencia o comentario lo pueden hacer en jjra2304@yahoo.com.mx .

La Pasión en el Fútbol

Capitulo Tercero

Descubriendo nuevas facetas

De inmediato Fernando Morientes se puso de pie y mientras trataba de esconder su miembro totalmente erecto dentro de su pantalón, Raúl rápidamente se enredo una toalla a la cintura y le indicaba a Morientes que se escondiera en uno de los grandes closet que había en la habitación.

Cuando Raúl estaba cerrando el closet donde Fernando Morientes se había metido a esconderse, la esposa de Raúl abrió la puerta

¿Qué estas haciendo? –dijo su esposa al observar a Raúl prácticamente desnudo con solo una toalla en al cintura

Ahh… solo vine a cambiarme de ropa… -contestó Raúl sin darle importancia y observo que su esposa quería una explicación ya que lo miraba con mucha extrañeza –bueno es que cuando salí a ver lo de la instalación eléctrica me manche la camisa y me sentina incomodo y pues vine a cambiarme

Bueno y a donde dejaste al compadre –preguntó su esposa

Se quedo en la computadora del estudio –contestó Raúl que caminaba por toda la habitación disimulando que buscaba algo

Que raro, pase ahí a buscarte y no había nadie –contestó

Bueno yo ahí lo deje a lo mejor fue a ver como estaban lo niños –dijo Raúl

Si puede ser –contestó su esposa

Pero ¿Por qué me buscabas? –contestó Raúl apresurando a su esposa

Porque dice el contratista que tienes que firmar esta factura –mientras le entregaba el papel en su mano –para no se que cosas que es urgente.

Después de que le dio el papel que tenia que firmar, su esposa avanzo hacia el closet donde estaba Fernando Morientes escondido con la intención de buscarle otra camisa a Raúl, quien al ver las intenciones de su esposa de inmediato la alcanzo cerrándole el paso y sin ningún pudor por haber estado mamando una verga hace unos segundos, Raúl le planto un beso a su esposa, quien se sorprendió ante la reacción de su esposo. Raúl de inmediato llevo sus manos para acariciar el cuerpo de su esposa desarreglando de alguna manera su vestido, después de algunos minutos, su esposa se separó

Me encanta como besas –dijo su esposa separándose mientras se arreglaba el vestido y el peinado –pero acuérdate que tenemos unos invitados que atender y si no te apuras

Si, en unos minutos bajo –dijo Raúl -¿podrías buscar a mi compadre ya lo deje mucho tiempo solo?

Esta bien… no tardes mucho –contestó y antes de salir nuevamente se besaron.

Apenas cerró la habitación y de inmediato se dirigió a abrir el closet, Fernando Morientes salió visiblemente molesto, pero Raúl se dio cuenta que en su entrepierna había algo que todavía estaba duro.

Te dije que no estaba bien, por poco nos descubren –dijo Morientes molesto

No paso nada, no te enojes conmigo –contestó Raúl mientras se acercaba a su lado para intentar consolarlo –yo solo quería estar contigo

Pero es que aquí no es el lugar adecuado, además tenemos muchos días por delante para estar juntos –decía Fernando abrazado a Raúl mientras sentía su piel desnuda.

Fernando Morientes salió de la habitación con mucho cuidado, vigilando que no fuera visto por nadie, cuando logro llegar al piso de abajo, de inmediato se metió al estudio y encendió la computadora que estaba sobre el escritorio.

Observo que la computadora le pedía una contraseña, entonces comenzó a jugar con las palabras y después de varios intentos se le ocurrió probar con su nombre y tampoco y cuando estaba a punto de darse por vencido escribió: Morientes y la computadora inicializo.

Mientras cargaba la configuración del usuario, Morientes se sintió muy bien al recordar varios de los detalles de Raúl y llego a la conclusión de que existía un enorme amor por parte del capitán de la Selección y eso provocó muchas emociones y sentimientos encontrados.

Recordó que después de la dolorosa separación con Iker Casillas, Raúl había sido el único que estuvo a su lado apoyándolo, ayudándole a sobre llevar la pena que le había provocado el rompimiento con Iker, ya que realmente llego a amarlo como nunca ante lo había hecho con nadie más. También fue Raúl quien más lo motivo para irse al equipo de Mónaco en busca de la oportunidad que en el Real Madrid le estaban negando. Raúl tuvo el detalle de ir hasta Mónaco solo para verlo jugar y finalmente fue durante un partido del Mónaco, por la lucha en el ascenso a semifinales en la UEFA, cuando Raúl le hizo saber de todo el amor que siempre había sentido por él y que había callado por temor y por la amistad. Ahora Fernando Morientes sabía que su presente y su futuro esta a lado de Raúl.

Por instinto, Fernando Morientes entro a Internet con la finalidad de verificar algunas notas futbolísticas respecto a la Eurocopa y se dio cuenta que la página de inicio del Explorer cargaba una página de gays y a pesar de que desde hace ya más de un año había iniciado relaciones con hombres, nunca antes se le había presentado la oportunidad de explorar ese tipo de páginas y hoy por la curiosidad y por todo lo que había pasado en la habitación de Raúl decidió explorar.

La página estaba llena de accesos a galerías de fotos, a videos y relatos, pero Fernando se intereso por la extensa gama de foto, clasificadas en: jóvenes, lampiños, velludos, negros, solo torso, solo trasero, corridas, en acción, cámaras escondidas, etc., pero a Fernando le dio curiosidad por la sección en acción y de inmediato comenzó a deslizarse por esas fotos que le mostraban todo tipo de posiciones sexuales protagonizadas por hermosos modelos con enormes miembros.

Sin darse cuenta, Morientes comenzó a jugar con su verga bajo el pantalón, estaba fascinado observando fotografías imaginándose que pronto las podría poner en practica con Raúl. Su verga comenzaba a ponerse dura y su mano la apretaba sin parar.

De pronto Raúl se asoma, con nueva ropa, y le indica que ya están arribando varios de sus compañeros y que lo acompañe a recibirlos. Fernando Morientes le da un clic a opción de apagar equipo y por levantarse rápido no se percata de que no confirmo la orden de apagar, dejándola encendida y lo único que hizo fue bajar la pantalla de la Laptop.

Fernando Morientes salió con Raúl al jardín y mientras llegaban le comento en voz baja que tenía algunas cosas planeadas para cuando estuvieran solos, a lo que Raúl le contesto emocionado que esperaba el día de mañana con muchas ansias.

Raúl junto con su esposa se dispuso a recibir a los invitados que iban apareciendo. El primero en arribar a la casa de la Familia González fue Iván Helguera.

Iván Helguera llego acompañado de su novia y de un hermoso joven que resulto ser su cuñado de nombre Alejandro. Cuando Iván fue al encuentro del anfitrión, este se encontraba de espaldas platicando con Fernando Morientes y su esposa.

Iván saludo y de inmediato Raúl volteo y saludo efusivamente a Helguera, con un fuerte apretón de manos y un calido abrazo, cuando de repente se percató de la presencia del cuñado de Helguera llamándole sumamente la atención. Raúl de inmediato se separo y Helguera presentó a su novia y a su cuñado.

Raúl en ningún momento le quito la mirada de encima y mientras continuaban saludo al resto de las personas que estaban ahí paradas, Raúl se lo comía con la mirada, le parecía un joven extremadamente atractivo y hermoso. Alejandro en todo momento se mostró muy entusiasta ya que era la primera vez que tenía contacto con tantos jugadores y su sonrisa mostraba una perfecta dentadura blanca. Fernando Morientes se percato de las miradas insistentes de Raúl y fue cuando Raúl reacciono y los llevo a una de las mesas.

Mientras caminaban, el chico Alejandro, muy extrovertido por cierto, comenzó a conversar con Raúl, diciéndole lo mucho que lo admiraba y de lo buen jugador que era. Raúl se sentía muy emocionado atendiendo al jovencito, que era incluso menor que el jovencito que había conocido por la mañana. Sumamente excitado, Raúl se retiro porque continuaban llegando otros jugadores y cada vez que tenía oportunidad sus ojos se dirigían hacia el jovencito, admirando su delgado cuerpo, que a pesar de no ser esbelto aún así le excitaba mucho.

Raúl reacciono hasta que observo como Fernando Morientes saludaba al portero Iker Casillas que acababa de llegar y que de inmediato se pusieron a platicar y es que el saludo entre los dos fue demasiado afectuoso y eso le molestó mucho a Raúl, porque sabía perfectamente lo que Morientes había sentido por Casillas y no pudo evitar sentirse muy celoso.

Fernando Morientes, sin darse cuenta de que era observado con suma atención por Raúl, acompaño a Iker Casillas a una de las mesas más alejadas y comenzaron a platicar sobre lo que había pasado con sus vidas desde la última vez que se habían visto. Iker Casillas le comentaba que ahora lamentaba mucho no haberle sabido corresponder como él quería, Morientes le contestó que eso ya había quedado en el pasado y que afortunadamente ahora vivía una nueva relación que le llenaba mucho. Iker Casillas lo felicitó a pesar de sentirse un poco celoso.

Fernando Morientes e Iker Casillas estuvieron hablando bastante tiempo como dos buenos amigos que tuvieron su pasado y que ahora cada quien tenía un presente diferente. Raúl por su parte seguía celoso y en un impulso de dirigió hacia donde estaban Fernando e Iker, después de darle la bienvenida a Casillas y de saludarlo, se llevo a Fernando Morientes con el pretexto de que necesita su ayuda.

Mientras se alejaban, Raúl comenzó a reclamarle la excesiva atención que le había prestado a Casillas, Fernando solo se reía de observar lo celoso que estaba su amado Raúl.

Llegaron al estudio y Raúl continuaba con su escena de celos, explicándole lo incomodo y lo inseguro que se sentía ante una persona que había llegado amar demasiado. Después de escuchar toda la letanía de Raúl, Fernando Morientes simplemente se puso frente a él, lo tomo de la cintura y le plantó un beso, demostrándole cuanto lo quería y que ahora él era su presente y su futuro. Raúl, que continuaba excitado por los dos jóvenes que había conocido, correspondió de inmediato a ese placentero beso llevando sus brazos a la ancha espalda de Morientes.

Pero esta vez ambos decidieron que lo mejor era volver al jardín para evitar algún problema mayor. Fernando Morientes salió por el pasillo que del estudio da directo al jardín mientras que Raúl lo hacía por la entrada principal.

Los seleccionados continuaban arribando a la casa de Raúl, algunos acompañados de sus familias y otros tantos solos, como el caso de Vicente Rodríguez, quien prácticamente había asistido a la reunión por simple compromiso y es que a pesar de la excelente temporada y de los trofeos obtenidos con su equipo y de ser una pieza fundamental en la selección, Vicente se sentía muy confundido y su vida personal estaba de cabeza.

Lo que a Vicente Rodríguez le preocupaba era que desde un tiempo a la fecha sentía muchas sensaciones que antes nunca había experimentado, confundiéndolo y transformándole su existencia. Cuando llego de inmediato saludo a cada uno de los seleccionados, recorriendo cada uno de las mesas y cuando finalmente terminó se fue a sentar solo en algún extremo de las mesas, un poco alejado de todos.

A la mayoría no les sorprendió esta actitud, ya que los pocos que lo conocían sabían que Vicente es una persona muy introvertida y tímida y que le costaba trabajo interactuar con las personas a su alrededor y que era un proceso en el que poco a poco se integraba, así que no lo presionaban y dejaron que Vicente se integrara en cualquier momento a la reunión.

Pero Vicente Rodríguez se sentó y de inmediato sus pensamientos lo invadieron nuevamente y es que le costaba mucho trabajo aceptar todas estas nuevas sensaciones que invadían su ser y recordó nuevamente lo que tanto le daba vueltas por su mente:

desde aquella tarde, a unas semanas de terminar la liga española y después de mucho entrenamiento físico, durante las duchas de los vestidores y a pesar de estar acostumbro a ver los cuerpos desnudos de sus compañeros de equipo, Vicente alcanzó a ver a Rubén Baraja de espaldas con el agua cayéndole por todo el cuerpo, enjabonándose con una extraña sensualidad y pensó que era extraña porque nunca antes había despertado ese tipo de interés y Rubén al sentir una mirada insistente se giró para descubrir quien lo miraba fijamente:

¿Te pasa algo amigo? –preguntó Rubén intrigado por la actitud de Vicente Rodríguez

Na… nada –respondió Vicente apenado y nervioso –es que me… quería dar un calambre… en la pierna derecha –y disimulo acariciar su pierna para ser más creíble su explicación

Vale tío –dijo Rubén –pensé que me estabas observando –terminó de decir Rubén en medio de risas

Pero lo que Rubén no sabía es que Vicente había observado todo su cuerpo, especialmente su trasero. Vicente Rodríguez sumamente excitado de inmediato se dirigió a su lugar del banco que le correspondía y se encontró que en el suelo había un montón de ropa percatándose por el número de la camiseta que era la ropa de Rubén Baraja y nuevamente una extraña curiosidad lo invadió y metió las manos buscando entre toda esa ropa empapada de sudor y allí encontró el bóxer que llevaba puesto Rubén durante todo el entrenamiento de este día. Sin saber porque, Vicente los tomo y de inmediato los guardo en su mochila cuidando que nadie lo observara.

Vicente se cambio con mucha prisa y de inmediato se subió a su automóvil y se dirigido a toda prisa a su departamento. Mientras conducía, a cada rato volteaba a mirar su mochila y fue un semáforo rojo cuando saco el bóxer y lo colocó en su entrepierna para ocultarlo de la vista de todos y de inmediato su miembro comenzó a cobrar vida bajo su pantalón

Apenas llego a su departamento y de inmediato se desnudo por completo aventando al suelo toda su ropa, pero sin soltar de su mano el bóxer de su compañero. Se sentó en un sillón y de inmediato comenzó a acariciar su verga y sus huevos.

Con la imagen del culo y la espalda de Rubén Baraja grabadas en su mente y además el penetrante aroma a sudor, a orines, a macho del bóxer que mantenía en su rostro, Vicente Rodríguez comenzó a hacerse una fuerte paja (chaqueta, masturbación), una paja tan salvaje que se estaba convertido en la mejor paja de toda su vida, la apretaba fuertemente de la base agitando al aire su glande, de en cuando cubría su verga con el bóxer, jugaba con la prenda pasándola por todo su cuerpo, la olía absorbiendo ese olor que lo mantenía preso transformando todos sus sentidos y era tanta la excitación que sentía que de inmediato alcanzó una brutal corrida, misma que cayo sobre su perfecto abdomen marcado y parte de su rostro y era tanta la calentura que sentía que sin pensarlo saco su lengua y se comió los restos de semen que había cerca de su rostro.

Cegado por el deseo y la pasión, Vicente recogió con su mano todo el semen que había en su pecho y se lo fue comiendo poco a poco, mientras que con la otra mano seguía acariciando su verga y sus huevos.

Fue después de que terminó de limpiarse y comerse su semen cuando reacciono y de inmediato fue a tirar a un bote de basura el bóxer de Rubén Baraja y comenzó a sentirse el ser más sucio del planeta, sintiendo vergüenza y arrepentimiento por haber atrevido a hacer algo así y sobre todo por sentir algo así.

Regreso nuevamente a la realidad cuando se decía una y otra vez que no era gay y que todo había sido por el morbo de la situación, el ver algo que se intuye como prohibido y querer saltarse la prohibición.

Esa era la manera con la que había podido sobrevivir en los últimos días y precisamente todo esto lo que había hecho que su mente estuviera llena de dudas. Fue Iker Casillas quien saco de sus pensamientos a Vicente, ya que al verlo tan solo y pensativo y sobre todo al sentirse también tan solo, Casillas se había acercado para saludarlo y hacerle compañía.

Los pensamientos que invadían a Vicente Rodríguez comenzaron poco a poco a desaparecer con la conversación tan amena que mantenía con el portero de la selección y es que a pesar de que otras veces ya habían convivido era la primera vez que platicaban sin tocar el tema del fútbol.

Pero para desgracia de Vicente sus sentimientos encontrados y confundidos invadieron nuevamente su mente. Cuando de repente Iker Casillas se levantó para ir al sanitario y Vicente sin querer giro su cabeza para seguir a Casillas y fue cuando se percató de su perfecto cuerpo, sus brazos marcados, su espalda ancha contrastando con su pequeña cintura y justo cuando posaba su miraba en su trasero, Iker Casillas tuvo que inclinarse porque se percató que las agujetas de sus tenis estaban desabrochadas y al hacerlo su enorme y espectacular trasero se marco llamando enormemente la atención de Vicente que quedo como hipnotizado imaginándolo en la misma posición pero sin ropa.

Iker Casillas termino y continuo caminando hacia los sanitarios y Vicente lo siguió con la vista y fue cuando se percató de lo atractivo que era el portero y nuevamente esos sentimientos que tanto miedo tenía de aceptar llegaron a su mente, le era imposible aceptar que tenía sentimientos homosexuales.

Xabi Alonso, que estaba a punto de acercase a Casillas y Vicente, se quedo parado observando todo lo que había pasado y se pudo perfectamente dar cuenta de la manera en que Vicente observaba a Casillas, tal vez con un poco de morbo o un poco de lujuria y apunto de que Vicente desviará su mirada en otro objetivo que no fuera Iker Casillas, Xabi Alonso llego a su lado y le dijo al oído:

¿Verdad que tiene un trasero muy excitante? –le dijo Xabi Alonso al oído

Vicente Rodríguez se quedo mudo de la impresión, no esperaba que alguien se diera cuenta y sobre todo que alguien pensara lo que en el fondo de su mente estaba pensado: que Iker Casillas además de tener un buen cuerpo tenía un par de nalgas muy antojables. Xabi Alonso se alejo sin decir más dejando a Vicente consumido en la vergüenza.

Por su parte, Raúl González recibiendo a los jugadores que faltaban por llegar y de vez en cuando recorría las mesas para comprobar que sus invitados estuvieran muy bien atendidos.

Solo cuando pasaba por la mesa donde estaban sentados Iván Helguera, su novia y su cuñado Alejandro se quedaba más tiempo, poniendo especial atención en ese joven de escasos diecisiete años. Se sentó a su lado para conversar cualquier frivolidad, lo único que podía hacer, al menos, era admirar su perfecto rostro casi infantil y que tanto le excitaba. Alejandro le hacía toda clase de preguntas referentes a su carrera futbolística y Raúl le contesta todo con mucho entusiasmo sin dejar de mirarlo a los ojos.

Pero Raúl sentía la necesidad de algo más que solo verlo y escucharlo, porque lo último que desearía sería pasarse toda la tarde platicando con este chico, Raúl, quería tocarlo, sentir la suavidad de su piel:

Y tu ¿de seguro ya tienes varias chicas tras de ti, verdad? –le digo Raúl al tiempo que llevaba su mano derecha hacia el brazo delgado y suave de Alejandro para acariciarlo

No… pues… no… al menos no tengo a ninguna "chica" a mi lado –contestó Alejandro un poco sorprendido por la caricia de Raúl pero que tampoco le desagrado, además puso mucha énfasis cuando dijo chica

¿Cómo no entiendo? –contestó Raúl haciéndose el sorprendido por la respuesta del joven

Mmm… olvídalo –dijo Alejandro para terminar ese tema que lo ponía un poco nervioso.

Obviamente Raúl entendió lo que el chico le quiso decir y eso lo excito de sobremanera al darse cuenta de que probablemente el chico era gay y que le gustaba todo este rollo. Pero sabía que era muy arriesgado intentar algo delante de toda la selección nacional y sobre todo de su esposa, además desde hacía ya bastante tiempo que había dejado por un lado esa obsesiva tentación que tenía por los jovencitos y ahora menos que tenía a alguien a su lado para saciar todas sus fantasías con respecto al sexo con hombres: Fernando Morientes.

La única persona que se había percatado de la excesiva atención que tenía Raúl hacia el jovencito era Iván Helguera sobre todo porque alguna vez le llego a sus oídos el rumor de que a Raúl le gustaba follar con jovencitos y a pesar de que algunas veces también le parecía atractivo sabía que no podía hacer nada por guardar las apariencias ante su novia.

Así Iván Helguera se levantó y le pidió a Raúl que lo acompañara un momento porque deseaba pedirle un favor y avanzaron:

¿Qué es lo que pretendes hacer? –le dijo Iván en un tono suave sin reclamos

¿A que te refieres? –contestó Raúl confundido

Como ¿a que?, todo mundo se puede dar cuenta de la excesiva atención que le prestas a mi cuñado –dijo Iván sin tapujos

No se a que te refieres –dijo Raúl tratando de apartarse de su lado

Si lo sabes bien, me doy perfectamente cuenta que mi cuñadito te gusta y te puedo asegurar que si hubieras estado solo con el ya te lo estuvieras cogiendo ahora –le dijo Iván Helguera –pero no te preocupes no te estoy reclamando nada, solo ten mucho cuidado

¿En serio mis intenciones son muy obvias? –contestó avergonzado Raúl

No te preocupes… es mas aquí en confianza te confieso que yo muchas veces he sentido lo mismo, es mas lo he visto desnudo en su casa y ganas no me han faltado de follarlo con locura –dijo Iván en medio de risas sin apartar la mirada que tanto Raúl como Iván le dirigían al jovencito que se había parado para estirarse

Presiento que a este chico le va este rollo –dijo Raúl

De hecho te lo puedo asegurar, pero yo no he intentado algo más con él, no me atrevo por temor a que suelte la boca.

Esta bien –dijo Raúl –pero antes déjamelo follar mi primero

Y los dos comenzaron a bromear con esta situación, poco después Raúl continuaba recorriendo las mesas, pero a pesar de eso, su mente se absorbía pensando en: Marco, el joven que había conocido hace unos, Alejandro, el cuñado de Iván Helguera y en Fernando Morientes su actual pareja, su mente trabaja a mil por hora imaginando todo tipo de actos sexuales con ellos, con uno solo, con los dos jovencitos o con los tres al mismo tiempo y eso lo estaba excitaba demasiado.

Por su parte Vicente Rodríguez seguía avergonzado por el comentario de Xabi Alonso cuando de repente llego y se sentó a su lado:

Entonces que Vicente ¿sigues pensado que Iker Casillas tiene un culo muy excitante? –le dijo Xabi Alonso con un tono de ironía y juego

Yo no estaba pensando eso –decía Vicente apenado

¿Cómo no Vicente? Si estabas como hipnotizado mirándole el trasero a Iker –le contestó Xabi Alonso convencido de lo que decía –además no tiene nada de malo, porque de verdad Iker Casillas tiene un culo hermoso

Jajaja... Jajaja... ¿que ya se lo vistes? –decía Vicente que a pesar de sentirse avergonzado quería descubrir más cosas de ese culo

Mmm... –duda Xabi Alonso en contestar –la verdad solo una vez y si tiene muy bueno su culo, tiene un par de nalgas enormes... imagínate su ojete como lo ha de tener... además déjame contarte que se rumora que le gusta que le llenen el culo con ya te imaginaras que... y la verdad si yo tuviera la oportunidad con gusto se lo llenaría

Órale... –contestó muy sorprendido Vicente Rodríguez –cuidado que ya se acerca

Iker Casillas se acercaba a sentarse nuevamente y se sentó quedando Vicente Rodríguez en medio de estas bellezas de hombres. Raúl paso por la mesa a recordarles que podían tomar lo que quisieran, excepto bebidas alcohólicas, y les recordó que por el día de hoy no se podía hablar de fútbol. Vicente se mantuvo callado escuchando la conversación muy atentamente y de repente se dio cuenta que tanto Iker Casillas como Xabi Alonso eran dos chicos sumamente atractivos, mientras los escuchaba observaba su rostro, sus gestos, sus cuerpos y a pesar de sentirse culpable por esa situación también comenzó a sentirse excitado.

Por su parte, Raúl seguía atento a todos los detalles que de repente surgen en una fiesta, atendía a los invitados, supervisaba meseros, en fin quería que la comida de hoy fuera un éxito y al observa como convivían las diferentes familias comenzó a sentir satisfecho con los resultados. Varias veces recibió felicitaciones del entrenador por que estaba resultado un éxito su idea, los seleccionados se estaban integrando como si fuera solo una familia.

Pero también una de las razones por las que Raúl González andaba de arriba abajo verificando cada detalle, porque de una manera el deseo y la excitación que sentía desde la mañana se le olvidaban por momentos. Pero aún así en su mente continuaban pasando imágenes de él teniendo sexo con alguno de los jovencitos que hoy lo habían cautivado.

Pero por mas esfuerzos que hacía el deseo esta ahí consumiéndolo internamente, de pronto a su lado llego un personal de seguridad y le informo que alguien lo buscaba en la entrada y Raúl llevado por la curiosidad se dirigió hacia la entrada principal de su mansión. Y tremenda fue su sorpresa cuando miro quien estaba detrás de la reja: Marco, que venía vestido con una playera pegada a su cuerpo sin mangas y una bermuda que mostraba sus piernas moldeadas y lampiñas, lucía muy radiante.

Continuara