La papeleria

Hola, soy “maría” así me llamare para proteger mi identidad, tengo 25 años, soy bajita, 1:55, 34D en busto, con buena pompa porque me gusta el futboll, delgadita, cabello rizado, bonita y me gusta pintarme el cabello rojo,la siguiente historia paso cuando yo tenía 16 años y dpn pamcho 60...

La papelería.

Introducción

Hola, soy “maría” así me llamare para proteger mi identidad, tengo 25 años, soy bajita, 1:55, 34D en busto, con buena pompa porque me gusta el futboll, delgadita, cabello rizado, bonita y me gusta pintarme el cabello rojo o castaño, depende como me sienta, la siguiente historia paso cuando yo tenía apenas 16 años, desde pequeña me gusto ser muy coqueta, y me gustaba sentirme sexy, cosa que a mi padre no le gustaba, pero un día el desapareció sin dejar rastro alguno, nos abandonó, esto paso 1 año antes de que ocurriera lo que voy a contarles, yo tengo 2 hermanas mayores y un hermano menor, por lo cual  pues tuve que ponerme a trabajar para tener mis lujos y ayudar a mi familia.

En ese año comencé a trabajar en una papelería, a mi mama no le agradó mucho, porque se decía que el dueño solía beber mucho, y que era muy morboso y alegre, pero el salario era muy bueno, comparándolo con el horario que para mí, como estudiaba por las mañanas, era muy flexible, entraba a las 2:30 de la tarde y salía a las 11 de la noche, porque la papelería cerraba a las 10, pero tenía que limpiar, entregar cuentas al dueño de lo que se vendió etc. Cuando entre a trabajar me iba saliendo de la escuela, por lo que atendía con mi uniforme, pero paso el tiempo y como me gustaba tener novios y como lo mencione antes sentirme sexy, pues solía llevar ropa aún más provocativa para llegar a la papelería y cambiarme, porque al salir solía pasar mi novio por mí y me llevaba a cenar y divertirnos, y una hora a después me llevaba a mi casa, pero pronto note que “don pancho” por así llamarlo me miraba mucho, y no de una buena manera, esto me daba un poco de miedo y a la vez curiosidad, me gustan los hombres mayores, mis novios siempre eran entre 4 a 10 años mayor que yo, pero don pancho ya tenía 60 años y me daba miedo porque a veces  se me acercaba mucho y estaba tomado, pero no le tome importancia.  Don pancho era alto, media 1.80cm, robusto, barbón con un poco de cabello canoso. Abecés solía tomar un poco de dinero extra y don pancho se hacía como que no se daba cuenta, pero en ocasiones, y note que era cuando solía llevar minifaldas y escotes, por lo cual comencé a vestirme enseñando mucho más y a usar lencería como tanguitas y esas cosas. Un día mi novio no llego por mí, porque tenía mucho trabajo, y don pancho estaba tomando en la papelería, tenía  1 semana que no tenía acción con  mi novio, a lo cual yo tenía muchas ganas de tener sexo, ese día para seducir a mi novio antes de salir, y también para tomar un poco de dinero extra, fui al sanitario y me cambie, quise quitarme el sostén y ponerme una ombliguera blanca, con escote, de esos que no dejan nada a la imaginación, una tanguita de hilo dental rosita fosforescente con una mariposita que sobresalía en mi espalda arriba de la minifalda, y zapatilla blanca de tacón.  Yo vivía muy lejos del lugar donde estaba ubicada la papelería y le pedí de favor a don pancho que me llevase de favor a mi casa en su camioneta.

María: don pancho, disculpe la molestia, podría hacerme el favor de llevarme a mi casa, es que mi novio ya no paso por mí, y pues ya es noche y está un poco lejos donde vivo.

Él estaba bebiendo, y muy amable y con una sonrisa picarona al verme así vestida accedió sin pensarlo.

Don pancho: claro que sí, pero primero tengo que descargar mercancía y acomodarla en la papelería, mira, traigo hasta el asiento del copiloto cargado!

María: estaba bien, le ayudare!

Don pancho: ok! Pero la mayoría son cajas pesadas, si gustas me ayudas a acomodar y contarlas.

María: ok don pancho está bien, con mucho gusto!

Entonces don pancho comenzó a descargar las cajas, el seguía bebiendo, y al mismo tiempo me hacia la plática, mientras yo sentada a un lado contando y viendo como descargaba la mercancía, al mismo tiempo note que cada que me volteaba a ver me miraba con lujuria y excitación, a lo cual me dio un poco de curiosidad saber cómo sería si don pancho se excitara y debes en cuando solía abrir un poco mis piernas dejando ver todo! Así almenos no me diría nada por el poco dinero que tome!

Don pancho: oye maría, como está tu mama? Supongo que debe ser difícil que tu papa los dejara!

María: pues está deprimida, y suele trabajar todo el día pues para sacarnos adelante a mí y mis hermanos.

Don pancho: supongo que debe ser difícil, y por eso trabajas conmigo.

María: así es don pancho, pero creo que buscare otro trabajo, donde gane más, y tal vez deje la escuela para ayudar a mi hermano, ya que mis hermanas mayores ya se casaron y se fueron con el novio.

Don pancho: cómo crees maría? Si tú eres muy inteligente,  porque no haces lo mismo que tus hermanas?  También eres muy pero muy hermosa, espero y no te moleste que te lo diga, además supongo que muchos estarían interesados en ti y en ayudarte.

María: pues no me gustaría hacerlo, me siento obligada a ayudar a mi hermano  y mi mama, aparte mi novio no gana muy bien, y no está interesado en casarnos o juntarnos aun, ni yo.

Don pancho: ok! mira, yo estoy interesado en ayudarte para que no dejes la escuela y doblarte…. El sueldo claro.

María: enserió haría eso por mi don pancho?

Dije yo, sin hacer caso a la pausa que dio, pensé que solo era porque cargaba unas cajas muy pesadas, yo pensé  que no lo había dicho con doble sentido, o albur, como se conoce en el pueblo donde esto ocurrió.

Don pancho: claro que si hermosa, yo encantado de ayudarte, y feliz de poder verte aquí diario!

Entonces dejo las cajas en su lugar y me abrazo de una manera muy extraña y se arrimó mucho, yo podía  oler en su aliento y respiración el alcohol, hasta me mareo de tan fuerte que destilaba el olor, el sentimiento que me provoco el recordar mis problemas provoco que yo le respondiera el abrazo de forma amigable, pero de repente note que lo hacía de una manera morbosa y pude sentir su enorme miembro rosándome, era enorme, más que el de mi novio, En ese instante sentí miedo, y a la vez un cosquilleo extraño y note que comenzaba a mojarme, no entendía porque, si mi primer sensación fue de miedo y pánico a lo que conteste:

María: ok, gracias don pancho!

Y deprisa lo solté y me aleje un poco!

Don pancho: oye, tal vez me tarde unos minutos más, gustas una copa o cerveza, te ofrecería agua, pero no hay y si gustas puedes desahogarte conmigo, no me veas como tu jefe, si no como un amigo, y descuida, será nuestro secreto.

Yo con el sentimiento que tenía por lo de mi papa pues tenía antojo de beber un poco y que alguien me escuchara, a lo cual accedí con un poco de miedo.

María: ok, está bien, gracias don pancho, supongo que ya que me hará el favor de llevarme a mi casa, pues puedo acompañarlo en lo que termina de descargar, además creo que una o 2 cervezas no me harán daño, pero espero y no tardemos mucho, mi mama me espera en casa, y si me tardo demasiado pues se espantara y me regañara.

Cosa que era mentira, mi mama por trabajar todo el dia y tener trabajos pesados,  llegaba por las tardes, comia se dormia para otro dia de trabajo duro, solo lo dije por miedo y precaucion.

Don pancho: si hermosa, no te preocupes, después de todo yo te llevare a tu casa, y si hay problemas pues le diré a tu mama que pues te retrasaste por cuestiones del trabajo.

María: muchas gracias don pancho!

Y yo podía notar su enorme erección y su mirada morbosa que no quitaba de mi escote y mis piernas, pocos minutos transcurrieron, en verdad no fue mucho, yo apenas me había bebido 4 o 5 cervezas, a lo cual me daba más valor para cada vez enseñar más, me divertía ver los ojos que ponía al verme, Ya casi terminábamos de guardar y acomodar todo y hacer inventario, faltaba una pequeña caja de borradores.

María: acabo de revisar el inventario, y noto que falta una pequeña caja de borradores.

Don pancho: creo que cayo debajo del asiento del copiloto cuando baje las otras cajas, podrías ayudarme a sacarla, es que me duele un poco la espalda por cargar, y no puedo agacharme!

Note que lo decía de una manera muy morbosa, y con la intención de ver bien mi trasero al agacharme, a lo cual tuve la idea de enseñar de más de manera en agradecimiento a que me duplicaría mi sueldo!

María: claro que sí, con mucho gusto!

Y una sonrisa medio picarona, ya un poco alentada por las cervezas, que aunque fuesen pocas como no solía beber me estaban haciendo efecto, subí un poco mi minifalda para enseñar mas y me agache, al revisar estaba muy oscuro, voltee la cabeza para pedir una lámpara a don pancho, cuando vi que se acariciaba la entrepierna, y tenía su erección enorme, los ojos le brillaban de emoción y lujuria, y yo más enseñaba mi hermoso trasero.

María: no veo nada, y el asiento me estorba, podría acercarse y ayudarme a levantar un poco el asiento y alumbrarme!

Don pancho: claro que si hermosa, con gusto!

Me agache,  yo trataba de parar más mi trasero, y abrir mis glúteos para que se viera mejor, entonces tuve una idea, aprovechando la situación en la que estaba!

María: entonces don pancho, si me ayudaría doblándome el sueldo? De esa manera ya no tendría que abandonar la escuela, tendría más para comer y ayudar a mi familia!

Don Pancho: claro que si hermosa, si sigues con ese ánimo tan grande que tienes quizá lo triplique!

Cuando de pronto sentí que él se pegó a mí, podía sentir su enorme miembro rosando entre medio de mis nalgas, yo asustada tome rápido la caja y me quite!

María: aquí esta don pancho, tome! Gracias, eso sería mucho mejor!

Conteste un poco espantada

Don pancho: Muchas gracias hermosa! Oye no gustas otra cerveza? Pero creo que ya no hay, solo tengo un whisky, pero yo lo tomo solo con hielo!

Yo por el susto accedí, no solía beber mucho y no savia que me haría más efecto el alcohol de esa manera! Me sirvió y me pidió que le ayudara a acomodar las cosas, en verdad no hice nada, más que sentarme y seguir con mi jueguito de enseñarle debes en cuando mis atributos. Hasta que tenía que subir una caja de esferas de unicel a un anaquel que estaba un poco alto, y la escalera se meneaba mucho.

Don pancho: oye, la escalera se mueve un poco, podrías ayudarme, dudo que puedas agarrarla, no soportarías mi peso, me harías el grandísimo favor de subirla!

Yo dudaba, sabía que quería que me subiese para ver debajo de mi falda, pero accedí, ya que era lo último, para así ya irme a mi casa, y pues faltaba poco para que mi mama comenzara a preocuparse por mí! A lo cual accedí sin pretexto!

Trate de hacerlo lo más rápido posible, pero estando arriba sentí como me maree un poco y sin querer me iba a caer, al hacerme hacia atrás puse mi trasero en la cara de don pancho, pude sentir su nariz en mi recto, e incluso el muy astuto olfateo sin cesar y hasta se dio el lujo de sacar su lengua y la pude sentir en toda mi vagina, que a estaba húmeda! Deprisa me tome de la escalera, y me baje lo más rápido posible muy apenada y asustada, pero al mismo tiempo excitada, ya que jamás había sentido una barba en mi intimidad.

María: disculpe don pancho, me maree un poco por el alcohol, y me iba a caer, oiga ya es un poco tarde, podría llevarme a mi casa?

Don pancho: no te preocupes maría, menos mal que estaba detrás de ti, si no hubiese sido una pena que una jovencita tan bella y escultural como tú se callera y se lastimara, enserio gustas que ya te lleve? No prefieres quedarte a beber otro poco, y tal vez así poder hablar con más confianza, y de más negocios favorables para los dos!

Ya savia que clase de negocios me propondría, y por miedo me tenía que negar, pero pensé que si me negaba totalmente no me subiría el sueldo, y buscaría alguien más a lo cual conteste:

María: hay don pancho, pero ya es tarde, mejor otro día, mi madre debe estar muy preocupada, además tengo que llegar a bañarme, y el día de mañana tengo que salir temprano con mi mama a visitar a mi familia a la ciudad, nos iremos el fin de semana, pero tal vez el próximo viernes!

Don pancho: ok María, como gustes, ya sabes aquí tienes un amigo, y si sigues así de trabajadora tu sueldo puede subir más!

María: gracias, con el triple es más que suficiente!

Don pancho: ok, sube a la camioneta, enseguida voy, cerrare y apagare todo!

subí corriendo a la camioneta sin decir nada, don pancho muy deprisa me llevo en la camioneta, durante el camino no me dijo nada, e incluso se apresuró, yo no savia porque, llegando a mi casa me despedí, agradecí, le pedi permiso para el lunes salir antes, por que seria una ocacion especial con mi novio y baje deprisa de la camioneta!

María: gracias don pancho, nos vemos el lunes, por cierto, el lunes planeaba salir con mi novio, me podría dejar salir antes?

Don pancho: claro que si María, linda noche, sueña lindo disfruta tu baño! Linda noche, bonito fin de semana!

Entre tan deprisa a mi hogar como me fue posible, al entrar note que mi madre y hermano ya dormían, así que fui a mi cuarto, menos mal que no me vieron, por que tenía aliento alcohólico y estaba muy exaltada, tome mis cosas para darme mi baño y procedí a bañarme, al desnudarme note que yo estaba mojada a chorros y mi tanguita estaba muy pegajosa de mis fluidos, cuando me di cuenta que mi sostén no estaba, lo había dejado en el baño de la papelería! Y entendí por que don pancho tenia tanta prisa de dejarme, vio mi sostén y se disponía a pasar un rato agradable con el todo el fin de semana, eso me espanto, pero después paso algo extraño, al bañarme me sentía muy excitada, y solía recordar el enorme bulto de don pancho rosando mi recto, o su barba entre mis nalgas, su lengua degustando mis fluidos y su mirada pervertida, y lo imaginaba olfateando mi sostén y restregando su miembro contra el, sin darme cuenta comencé a tocarme hasta venirme, fue la venida más rica de mi vida, termine, me puse mi pijama y me metí a dormir, estaba agotada! Al otro día desperté y recordé lo ocurrido, moría de pena y no entendía como un hombre mayor me había provocado eso, me prometí no volver a hacerlo y parar con eso y me dispuse a disfrutar mi fin de semana.

El lunes llego, sería un día especial,  ese día cumplía meses con mi novio y tendríamos acción esa noche, incluso  así que me rasure bien mi intimidad para que mi novio la gozara y así permitir a don pancho verme bien y tomar dinero extra para el motel y esas cosas, así que llegue a la papelería, salude a don pancho, y me metí al baño a quitarme el uniforme, me puse un vestido rojo de esos que son cortitos, como para usar con mallon, pegados, casi un blusón, me cubría un tercio de la pierna, y me lo puse sin mayon para excitar a mi novio y a don pancho, al entrar al baño, vi mi sostén, todo lleno de manchas blancas, y algunas estaban incluso húmedas, eran recientes, olía mucho a semen, así que lo tome, lo guarde en una bolsa plástica para después tirarlo, y se me ocurrió que para tener a don pancho feliz dejarle en el baño mi ropa interior, mi calzoncito y mi otro sostén, y solo ponerme así mi vestido, Salí, y todo transcurría normal, yo limpiaba la papelería, trataba de agacharme seguido, y así don pancho veía todo mi ser, estaba babeando, así que tome la escalera y me subía a los anaqueles a limpiar, y dejaba la franela abajo o hacia como que se me caía para que se acercara sin miedo don pancho y me viera, baje y  notaba su cara de que ya me quería hacer de todo, y como la escalera se movía, pues él estaba atrás sosteniéndola, y de atrás veía todo, solo que esta vez no me caí en su cara!

María: disculpe don pancho, ya me puedo retirar, mi novio no tarda en llegar, lo veré en el centro!

Don pancho: si, no te preocupes, solo permíteme voy al sanitario!

Yo pensaba que se tardaría, que se iba a masturbar, pero solo entro y salió, con el bulto aún más marcado!

Don pancho: ya maría, solo ayúdame a cerrar, yo también saldré!

María: claro que si don pancho!

Cerramos muy rápido, me sorprendió la rapidez y me fui…

María: hasta luego don panchito, muchas gracias bonito lunes…

Don pancho: adiós hermosa, oye por cierto, esta semana no abriré la pape, hasta el viernes, pero no te preocupes mi niña hermosa te pagare los días.

María: enserio? Gracias don panchito besos, nos vemos…

Yo savia que era para poder tener mi ropa íntima y disfrutarla bien, pero no me preocupe, tendría vacaciones pagadas jiji. Llegue al punto acordado para ver a mi novio y lo espere, las horas pasaron y no llego, así que me retire triste a mi casa. Al llegar a mi casa le conté a mi madre, ella me dijo que me calmara y que esperara a que me diera una respuesta. Al otro día fui a la escuela, Salí y todo transcurría normal, hasta la tarde que llego mi novio a verme. Dijo que la papelería estaba cerrada y fue a verme a la casa, lo notaba serio y distante, me pidió una disculpa y me confeso que tenía otro amorío y que no podía seguir con esto, yo devastada me encerré en mi cuarto, me sentía tan mal que no fui a la escuela esos días, pero el día viernes tenía que ir por que tenía un examen importante y pues después tenía que ir al trabajo, el viernes llego, antes de salir para la secundaria mama me dijo que tenía que salir temprano a la ciudad, yo le dije que me quedaría, ella pues como vio que estaba deprimida no me dijo nada, solo que estaba bien que me cuidara y que le pidiese  a don pancho que me fuera a dejar a mi casa saliendo del trabajo, yo le dije ok no te preocupes, fui a la escuela, hice mi examen, savia que saldría mal, y estaba deprimida y preocupada, Salí, y me dirigía al trabajo, iba triste, todo mundo lo notaba, hasta el día, porque estaba nublado, al llegar al trabajo, comenzó a lloviznar, cuando entre note que un grupo de señores se despedían de don pancho, parecían felicitarlo, no entendí por qué y no le tome importancia, al entrar todos me voltearon a ver con cara de pervertidos, vi que había muchas cervezas y algunas botellas bacías y unas llenas.

Don pancho: o! miren, es ella, llego, mi hermosa empleada!

Amigos: dijiste que esta niña era hermosa, pero no que era perfecta!

María: gracias! Conpermiso, voy al baño!

No savia cómo reaccionar, solo eso se me ocurrió decir, en parte por la sorpresa y por lo distraída que estaba por los momentos difíciles que pasaba.

Don pancho: muñeca hermosa, guarde lo que olvidaste en mi casa, para que no se perdiera o alguien más lo tomara, luego te lo doy, espero y no te moleste y tampoco como te llamo o sí?

María: ok, no se preocupe, conpermiso.

Llegue al baño, note que no llevaba otra ropa, así que me quede en uniforme, aparte, no tenía ganas de sentirme sexy, estaba un poco deprimida y hacia frio! Entrea la papelería  y ya no estaban los otros tipos, solo don pancho, comenzaba a llover.

Don pancho: hola mi muñeca hermosa, como estas? Aparte de divina.

Maria: gracias don panchito, pues muy bien, gracias y usted que tal?

Don pancho: pues yo un poco entusiasmado, por cierto, tu mama paso a saludarme en la mañana, me conto lo que paso y me pidió que hoy te llevara en la noche a tu casita, le dije que no se preocupara, que te cuidaría, por cierto, no gustas una cerveza?

Maria: o que bien don panchito, me alegro por usted, y eso por qué tan animado? Si gracias, se lo agradecería, la verdad, pues si ya sabe lo que paso,  para que hablar del tema, mejor platiquemos de otras cosas.

Don pancho: pues nomas, me encantan los viernes,  eh tenido muy buen éxito en negocios (saco una faja de billetes mostrándomela) y presiento que hoy será un buen dia.

María: ok!

Don pancho: oye no llegan clientes, y si jugamos un juego, sabes jugar baraja?

María: si, mi papa me enseño, soy buena.

Don pancho, pues juguemos, si pierdes bebes una cerveza, si ganas yo la bebo, te agrada?

María: ok

Comenzamos a jugar, durante los juegos, me platicaba que en de su juventud y que solía ser muy fiestero y todo un gigoló, yo le gane 5 veces y el 2 a mí, pasaron unas horas y comenzó a llover más fuerte y granizar, a lo cual cerramos la papelería, y como no me podía ir a dejar, pues seguimos bebiendo y jugando.

Don pancho: oye maría solo quedan 2 cervezas, que te parece que el que pierda el siguiente se tome las 2 aceptas?

maría: claro!

Me sentía animada por que iba ganando! Y acepte cuando de pronto perdí y tuve que tomarme las cervezas.

Don pancho: wow tuve suerte, pero ya no hay cerveza, Ahora con tequila vale? El que pierda se toma 3 caballitos.

maría: ok!

Yo como quería revancha acepte, gane, el bebió los 3 caballitos, después yo perdí 3 veces seguidas, los caballitos se me comenzaban a subir a la cabeza, me sentía mareada, fui al baño, yo en el baño me miraba al espejo y me decía “aun no estoy mal, tranquilízate don pancho ha bebido más que tú, y si le saco dinero, se me ocurre un plan”.

María: oiga don panchito y si ahora si usted pierde me da 50 pesos y si gana yo bebo 3 caballitos, para emparejarnos!

Don pancho: ok, me agrada, después de todo, creo que ya bebi mucho!

María: ok, platíqueme algo don panchito! Mientras jugamos!

Jugamos, don pancho me conto que era divorciado y sus problemas, después que hace mucho que no tenía sexo, y que tenía muchas ganas, su vida solo etc., no le puse atención, yo me concentraba en el dinero, las horas pasaron, seguía la lluvia, ya había ganado 2000 pesos, pero así como gane, bebí muchos caballitos, ya se había terminado casi la botella, me pare y fui al baño, planeaba ya no beber y solo platicar y jugar, aunque ya animada, con buena racha según yo, decidí que para que don pancho no se arrepintiera de haber perdido mucho dinero me mire al espejo, ya estaba ebria, pero no me daba cuenta y me dije “por qué no animar a don pancho, dale esperanza de verte, juega con el de prensas,  excítalo! Y sácale más dinero” Salí del baño y sin pensar

María: oiga don panchito, como que esto se está poniendo aburrido, y si jugamos algo más interesante?

Don pancho: y como que sugieres mi muñeca hermosa?

María: algo que nos duela perder más, no se… prendas? Si yo gano usted se quita una prenda, me da 100 pesos y bebe  3 caballitos y si yo pierdo, me quito una prenda yo y bebo 3 caballitos, le agrada?

Don pancho: o que te parece si lo cambio a 2 caballitos y 200 pesos si pierdo, te agrada mi muñequita hermosa?

María. Claro, me encanta!

Don pancho solo llevaba 8 prendas y yo 9, lo cual, pues tenía las de ganar, aunque bebería más, pero también ganaría, y pues sentía que yo sabía jugar mejor. Vi su rostro y lo note emocionado y eufórico, en su entrepierna se alcanzaba a ver su gran miembro,

Don pancho: claro mi muñeca hermosa, me agrada el juego, espero no perder!

El juego comenzó, yo ocasionalmente abría mis piernas para según yo distraerlo, pero no siempre caía, a lo cual le conté algo para distraerlo.

María: sabe yo también tengo mucho que no lo hacía con mi novio

Don pancito: si mi muñequita hermosa? Y eso? Yo si fuese él te yo hubiese echo todos los días, todas las veces que pudiera, no descansaría.

María: hay don panchito no sea atrevido…

Don pancho: disculpa muñeca, yo cuando tenía a mi esposa…

Y me conto toda la historia con su esposa y sus amantes

El tiempo paso, parecía que paro de llover, eran las 10 de la noche, don pancho se quedó en calzoncillos, había bebido 14 caballitos y perdido 1400 pesos, se veía su gran miembro erecto, yo solo reía, yo tenía cuatro prendas, mi calzoncito, mi sostén, mi falda y blusa y había bebido 15 caballitos, la verdad ya estaba muy ebria.

María: ok don panchito, ya bebimos y perdió mucho, yo igual, ya me siento ebria, además es noche y a parado de llover, creo que es hora de retirarnos.

Don pancho: ok mi muñequita hermosa, pero una última cosa, bailemos vale? Te gusta la salsa?

El savia que yo la amaba, y que me encantaba bailar, a lo cual accedí.

María: claro don panchito! Pero no se vale ponerse nada, déjeme disfrutar mi victoria

Don pancho: claro ganadora!

Comenzamos a bailar, él se restregaba contra mí, yo pensaba que ya había acabado todo, y me dejaría pronto a mi casa.

María: hay don panchito, si usted es un muy buen bailarín

Don pancho: gracias mi muñequita hermosa, oye, no savias que los buenos bailarines somos buenísimos en la cama?

María: suena interesante

Y de pronto acabo la canción, yo ya estaba mal, tenía muchas ganas de ir al baño, estábamos sudando mucho por el baile.

maría: bueno, pasare al baño, ya casi es hora de irme.

Fui al baño, note que paraba de llover, Salí y hacia mucho aire, eso me mareo más, sentía que todo me daba vueltas, entre a la papelería y me caí, me raspe un poco la rodilla rápidamente corrió don pancho y me cargo, me sentó en su pierna.

Don pancho: Mi muñequita hermosa, mira nomas, te duele? Descuida yo te sobo

Todo eso mientras me acariciaba también la pierna, y como estaba en calzoncillos aun, yo podía ver y sentir su miembro, a lo cual me pare

maría: podría llevarme por favor a mi casa?

Don pancho: Claro mi muñequita hermosa, pero primero pasamos a mi casa y te doy tu ropita que dejaste en el baño ok?

maría: Ok, supongo, pero que sea rápido, ya quiero irme, me siento muy mal.

Don panchito: ok, ni sentirás cuanto paso.

Don pancho se cambió, yo pues tenía mi ropa, solo me puse zapatos y subí a la camioneta, recordé que no había comido, tal vez por eso me sentía muy mal. Durante el camino solo platicamos de en qué gastaría mi dinero, y que saldaría mis deudas, ayudaría a mama y mi hermano y esas cosas, don pancho me alagaba y me decía que era muy buena en la baraja, yo sonreía. Llegamos a su casa

maría: bueno don panchito, aquí lo espero, me duele mi rodillita para bajar, espero y no se tarde mucho.

Don pancho: ok hermosa, me daré prisa, voy por eso y unas cosas.

Regreso, se subió y llevaba más botellas y yo ya estaba ebria, mi ropa en una bolsa, un botiquín y otra bolsa negra, a lo cual no tome importancia.

Durante el camino me quede dormida, al despertar estábamos en mi casa, yo vivo en las afueras del pueblo, ya era muy noche y estaba oscuro.

Abrió la puerta, se bajó, y me cargo, camino conmigo hacia la puerta de entrada, la abrió.

Don pancho: mira ya te cargue como lo hacen los esposos en su luna de miel

maría: jiji si don panchito, gracias

Al llegar me sentó en mi cama, saco el botiquín, me sirvió un caballito y  se incoó enfrente de mí y comenzó a limpiarme, me acariciaba la pierna, lo hacía tan suave que lo deje, note que miraba mis piernas con lujuria y en ocasiones veía mi entre pierna, yo le seguía el juego y abría mis piernas

Don pancho: oye maría, eres muy buena en la baraja, un último juego, perdí mucho, me das un oportunidad de recuperar algo?

María: no lo sé, necesito el dinero, pero y como seria eso?

Don pancho: ok, para que tengas que ganar yo apuesto mis últimos 5000 pesos, si ganas son tuyos, si pierdo me das la mitad de lo que ganaste ok?

Lo pensé, eso sería perder 1400, pero ganaría mucho más que eso, a lo cual acepte, pero me sentía mal

María: ok, pero rápido que es noche

De pronto gane un juego, y yo festejaba, brindaba y el levantaba mi falda, yo de tan feliz que estaba no hacía caso, y pues después de todo ya me había pagado y suponía que estaba bien.

Jugamos: todo en silencio.

Don pancho: genial un golpe de suerte, vaya almenos recupere un poco

Yo necesitaba ese dinero a lo cual le dije doble o nada, necesitaba el dinero y estaba animada por las copas

maría: ok don panchito, doble o nada!

Don pancho: estas segura mi muñequita hermosa, te quedaras si nada…

Maria: si, esta vez me concentrare.

Comenzamos a jugar, todo en silencio, de pronto perdí de nuevo!

Don panco: ni modos mi niña, tuve suerte, no creí que ganaría, y él se reía!

Eso me hizo enfurecer, y me dio en el orgullo, a lo cual dije triple o nada sin pensarlo, ya estaba ebria, y necesitaba el dinero más que nada.

María: triple o nada.

Don pancho enserió? Pero que me darás, te quedaste sin dinero…

María: si pierdo, recibo un castigo vale?

Don pancho: no es justo, 8400 contra un castigo, yo pierdo más. Te propongo esto, si gano te quitas todo y un castigo y si pierdo el dinero será tuyo ok?

Moría de nervios, no quería desnudarme, pero me tentaban los 8400, el alcohol hacía estragos en mi cabeza.

maría: ok, supongo

El juego comenzó, me sentía confiada, pero de pronto perdí

Don pancho se reía, a lo cual sirvió 3 caballitos y me dijo mira, para que agarres valor, yo ya estaba más que ebria, pero no lo suficiente para desnudarme frente a don pancho.

Don pancho: mira para que no te de pena y estemos iguales y no te de pena mi muñequita hermosa.

Dijo mientras se quitaba la ropa y la trusa, cuando vi, su enorme miembro peludo media cerca de 24 cm de largo y 2 o 3 pulgadas de diámetro, me dio miedo, así que en vez de beberme los caballitos, tome la botella y me bebí la mitad de un sorbo.

Don pancho: vaya mi niña, tienes sed, entonces tomare uno y me tomare mi pastilla.

Entonces él se tomó su pastilla, era una azul, yo no le tome importancia. Y entonces me desnude, comencé poco a poco, calo mi falda y mi blusa, solo quede en mis zapatillas negras, del colegio, me senté para quitármelas pero don pancho dijo

Don pancho: no déjatelas.

Continua con lo demás, procedí quitándome el bra y desvanecí mi calzoncito escolar, entonces estaba desnuda, don pancho me sentó en sus piernas, su miembro estaba duro y venoso, la punta babosa por lubricante, entonces me dijo

don pancho: hace mucho que quería tenerte así para mi solito mi putita hermosa, de castigo quiero que te pongas lo que está en la bolsa te hagas dos coletas en el cabello, te maquilles como aquel día que saldrías con tu novio y me hagas un privado, frotándote en mí, como mi putita que eres, véndame los ojos y cuando estés lista me destapas los ojos y comienzas

me pare y me dio una nalgada, tambaleándome de lo ebria que estaba lo vende, entonces saque de la bolsa una diminuta falda de colegiala, unos ligueros y medias blancas, una tanga diminuta con orificios diminutos para tener sexo sin quitarla y una blusa diminuta transparente para amarrarla en mi abdomen, una diadema de gatita y un collar con correa.

Me puse todo, me vi en el espejo y parecía una prostituta me daba miedo y pena, pero dije, ni modos, es solo un baile y le destape los ojos, a don pancho se le caía la baba, se sentó en mi cama

Don pancho: comienza mi putita…

yo tome el resto de la botella y callándome comencé, lentamente bailaba, él me decía, hueles delicioso, y me lanzaba billetes, vi el dinero y me acerque más, tallaba su baboso miembro contra mí, yo solo bailaba, el me manoseaba, me sentía intimidada y caliente al mismo tiempo,  entonces tiro el dinero justo debajo de él y dijo, júntalo, será tuyo después de esto, yo me apresure a juntarlo, quería bajar lentamente de rodillas pero el alcohol me derribo y caí arrodillada ante él, y dijo es hora, me tomo de mis orejas y me acerco a su miembro

maría: dooon panshooo noooooo!....

al gritar introdujo su miembro en mi boca y jalaba mi cabeza de arriba abajo, intente meterle un golpe, pero como estaba muy ebria no tenía fuerza, así que tomo mi mano y con ella frotaba sus bolas grandes y peludas, yo estaba muy ebria, no pensaba claro, y supuse que si hacía que se viniera terminaría y me soltaría así que comencé a hacerlo sin que me obligara

don pancho: savia que querías, ere una putita hermosa, me encantas, savia que querías esto, no pensé que tardaras tanto en acceder, pero valió la pena la espera, vamos cómetela todita como mi putita que eres, y jalaba mi correa

yo comencé y don pancho gruñía de  placer, entonces jalo mi correa, me paro y me arrojo a la cama, y dijo ahora viene lo bueno, me lanzo a la cama y se acostó sobre mí, de manera que quedo invertido, su pene en mi boca y su boca en mi intimidad, el metía sus dedos y me lamia, así que comencé a lamer más rápido para terminar, así pase un largo tiempo, por el alcohol y el placer no se cuánto cuando de pronto

Don pancho: mmmmm que rico coñito amor, me alegra que seas mi putita, desde hace mucho quería esto, hasta pensé en forzarte, pero que bien que estas cooperando, ya decía yo que era una putita, ponte en cuatro, quiero lamer tu culito.

Yo me ponía a su antojo

María: don pansho ya por favor…

Don pancho: te gustara

Me jalo de la correa me puso y comenzó a lamerme, su barba me raspaba, pero se sentía tan rico, comenzó a meterme un dedo, después otro,  yo veía mi reloj en una pared y vi que ya eran las 3 am, mi madre no llegaría hasta el lunes, y yo pensaba en que ya quería que terminara, pero se sentía tan rico, después de una  media hora…

Don pancho: recuéstate así y abre tus piernas mi putita

Yo no savia porque, me escupió mucha saliva en mi ano, cuando de pronto se subió en mí y comenzó a tallar su miembro con mi culito, pensé que ya se vendría y de pronto me metió todo su enorme miembro de golpe yo grite y me quede desmallada.

Desperté y ya eran las 4:05 am ya no me dolía mu culito, todo lo contrario se sentía tan rico y comencé a gemir y balbucear

maría: hay que rico papi, nunca me lo habían hecho así, se siente súper delicioso, vente dentro de mi

Don pancho: no me digas papi, dime amo mi putita, de ahora en adelante me llamaras así…

y me nalgueaba tan rico que gritaba y gemía de placer, de pronto la saco de mi ano y yo me preguntaba por que

Don pancho: ahora voltéate mi putita hermosa.

María: si amo

Se subió en mí y la metió en mi intimidad, con una mano manoseaba mi clítoris y con la otra acariciaba mis senos, yo solo rasguñaba su espalda y gemia de placer

maría: amo bésame, bésame como tu putita

Entonces metió su lengua en mi boca y a los pocos minutos me vine, el siguió así varios minutos, y yo me vine como 3 veces aproximadamente, notaba que estaba a punto de amanecer, ya había luz, cuando de pronto el comenzó a bobearme más rápido y yo comencé a sentir más placer, estaba a viniéndome cuando sentí su venida dentro de mí, en ese momento sentí tanto placer que nunca en mi vida había tenido un orgasmo más rico que ese, nos venimos juntos, nos besamos

María: te amo mi amo, hazme lo que quieras cuando quieras, soy tuya, toda tuya y solo tuya, soy tu putita, se lo dije gimiendo y gritando de placer

Se detuvo y mire el reloj y ya eran las 6 am, así que en plena acción me quede dormida, después no recuerdo nada, cuando desperté eran las 2 de la tarde, don pancho seguía sobre mí, el sacaba fácilmente su gran paquete de mi vagina y la metía en mi ano, y así sucesivamente, yo estaba llena de mordidas y chupetones y ya desnuda totalmente.

Don pancho: ahora eres de mi propiedad mi putita, esta última venida que ya no puedo más, esperaba que despertaras, ya me eh venido dentro de ti muchas veces, atrás y adelante, pero ya me estoy cansando, así que ayúdame a venirnos juntos antes de terminar

María: claro que si mi amo, que rico que me utilices como tu aparato de satisfacción sexual, soy tuya, tu esclava tu gatita, vente papi, vengámonos juntos mi amo

De pronto nos venimos, sentí tanto placer, don pancho me beso tan rico y sentía su semen cálido dentro de mí, es tu turno mi putita móntame, yo me monte dándole la espalda y me recosté, el acariciaba mi clítoris y mis pechos con sus manos, yo lo galopaba y gemía de placer, el jalaba mi correa y decía

Don pancho: arre mi putita arre

María: si amo, que rico, vente de nuevo dentro de mí que me vengo

Me vine un par de veces, después  me puse frente a el pero con penetración anal y seguimos durante horas, yo me venía y el igual, estaba oscureciendo,  cuando le dije

María: mi amo yo también estoy agotada

El llevaba un rato sin venirse, se veía que se estaba aguantando, a lo cual dijo

Don pancho: esperaba que dijeras eso mi putita, deje una pastilla en el buro, tómatela con mi semen,  te daré tu lechita y a dormir

Entonces saco su miembro de mi colita, se puso sobre mí, tomo la pastilla y la metió en mi boca y metió su gran bulto entre mis pechos, colocando la punta dentro de mi boca, y compenso a moverse, así hasta correrse dentro de mi boquita, se me salía por la nariz y me embarró mi cara, yo lo lamia y me lo tragaba mientras él decía

Don pancho: sabes, eres una chiquilla muy putita, pero eres mi putita

Y yo besaba su polla, después se recostó conmigo y quedamos dormidos.

La mañana siguiente desperté por ruido, desperté y don pancho ya se había cambiado, metía dentro de la bolsa la ropa de colegiala, la diadema, el collar, la correa, las botellas y todo, yo me hice la dormida, se acercó y me susurro al oído mientras con su mano acariciaba mis partes

Don pancho: adiós mi putita hermosa, que rico fon de semana, te dejo el dinero en tu buro, nos vemos mañana en la papelería, hoy es domingo, hoy llega tu mama, para la próxima bebemos en mi casa

Me dio un beso en la frente y se fue, yo abrí los ojos cuando escuches su motor alejarse, no podía creer lo que paso, tal vez fue el alcohol o tal vez era una verdadera putita, trate de no pensar mucho en ello  me levante, todo el cuerpo me dolía, tenía mis orificios irritados y babosos, mi cuerpo lleno de mordidas y chupetones, así que cambie la sabanas y cobijas que estaban llenas de fluidos, las metí a la lavadora mientras me daba un baño, al salir me puse pants y un swueter para que no se me viera nada, y me fui a dormir, desperté por la tarde cuando mi madre llego, comimos y me dormí, por suerte no se dio cuenta, me retire a mi cuarto y pensé en ya no regresar a la papelería ni ver a don pancho, pero mire el dinero y decidí a regresar, además era algo que disfrutaba muy placenteramente…