La pandemia con mi Madre parte II

Después de lo que pasó, no debería volver a pasar lo que paso.

La pandemia con mi Madre parte II

El día siguiente fue raro, había pasado mala noche, estaba nervioso no sabía cómo reaccionaría ella, después de lo que había pasado, tenía un cargo de conciencia terrible, casi quería llorar, no sabía que iba a pasar cuando fuese a la cocina y viese a mi madre.

Mi madre me llamo,

-levántate y desayuna que tienes las clases online.

Me arme de valor y fui a la cocina, estaba con un camisón liso verde clarito tipo seda. La mesa estaba puesta con el desayuno tenía mucha hambre pero estaba nervioso, le dije:

-          Mama lo de anoche,

Ella me corto,

-          Hijo lo que paso, paso y no se puede volver a repetir pero tiene que ser un secreto y tu padre no tiene que saberlo.

-          Si mama será nuestro secreto.

Me quede más tranquilo desayune en silencio y ella también. Pero yo no podía quitarme de la cabeza su cuerpo y yo encima, me quede mirando su escote, tenía unos pechos espectaculares, muy grandes.  Qué pena anoche no haberlos disfrutado más. Se dio cuente y se subió un poco el camisón para no enseñar tanto. Luego se levantó de la mesa y fue al fregadero, la mire el culo, vaya culazo mientras fregaba los cacharros la miraba el culo y las bragas que se le notaban bajo el camisón.

-venga tráeme los platos que tienes clases, me dijo mi madre.

Yo desperté y se los acerque, aproveche para rozarme y darla un beso en la mejilla,

-eres la mejor mama. Y me fui clase.

Paso el día comimos juntos, hicimos zumba con videos de youtub, yo desde atrás no paraba de mirar sus pechos cuando saltaban y botaban y su culo y entrepierna que con algunos ejercicios me regalaba una vista espectacular.

Nos fuimos a duchar por separado, aunque envié alguna indirecta,

-¿quién se ducha primero tú?

-no yo, dijo ella.

-bueno pues nos duchamos juntos,

  • jajaja pillín que más quisieras ducharte con tu madre.

-si si, así te froto la espalda y tú me frotas la espalda pero no pasa nada más, de verdad mama.

Yo quería verla desnuda otra vez pero no quería hacer nada, de verdad pero quería a la vez estar cerca de ella.

-además mejor tomate un baño y te puedo dar un masaje y te relajas con sales marinas después del ejercicio, te vendrá bien.  Venga te lo preparo yo.

-venga vale hijo prepárame un baño. Me parece una buena idea pero ya sabes nada de nada me das un masaje y ya está.

-Si claro mama, mientras en mi mente se activaban todas las feromonas.

Tenemos una bañera grande, no es que sea como un jacuzzi ni tamaño grande pero te puedes estirar y 2 personas pueden entrar, como digo  son como las de los hoteles

Llene la bañera, eche sales y cuando el agua estaba calentita. la llame.

-mama ya está tu bañera¡

Ella entro en el baño con su bata y me miro, y yo no sabía dónde mirar porque no podía apartarla vista con la boca abierta, ella dijo:

-bueno que más  da.

Se quitó la bata y estaba desnuda, se metió en el agua yo mirando la escena, era preciosa tetas grandes, su concha, su largo pelo negro.

Mientas estaba en la bañera me puse detrás y con la esponja y jabón la empecé a enjabonar. Ella me ofrecía su espalda pero la seguí lavando todo el cuerpo, su espalda, luego se tumbó en la bañera

-Mama, levanta el brazo, luego las piernas los pechos le pase  la esponja por la entrepierna pero la cerró y con el dedo me dijo, no, no eso no se toca.

-Venga dame el masaje que estoy super a gusto en el agua. Me dijo ella.

Se  dio la vuelta y empecé, ella apoyaba la cabeza sobre los brazos en el perfil de la bañera y yo seguía pos su espalda, fui bajando a su cintura, glúteos y piernas. Yo metía los brazos en el agua pero no me atreví a tocar su concha, ella estaba con los ojos cerrados, disfrutando, yo también.

-uhau que bien lo haces hijo,

-Si mama me gusta darte masajes.

-¿Quieres meterte y te lavo yo?

No tarde ni cinco segundos en quitarme la ropa y meterme en el agua, en ese momento no estaba empalmado pero estaba gordo mi pene.

-Donde me meto mama, como me pongo?

-Siéntate aquí de espaldas a mí y dame la esponja y el jabón.

Me situé con mi espalda entre sus piernas y Me empezó a frotar la espalda, los hombros los brazos. Luego fue hacia las piernas y pego sus pechos a mi espalda, dios como se me puso la polla, sentir su mano lavándome.

Entonces empezó a cantar una nana que me cantaba de pequeño.

-mi bebe pequeño, que le quiere su mama, cuando sea grande se lo comerá ¡¡

Su mano se fue posando sobre mi pene, ella seguía cantando la nana, pero ahora empezó a subir y bajar su mano sobre mi polla se fue poniendo más dura con sus movimientos arriba y abajo.

-mi bebe pequeño, que le quiere su mama, cuando sea grande se lo comerá ¡¡

Era un placer indescriptible, sentía sus pechos en mi espalda y sus manos haciéndome una paja.  Ella seguía cantando. Pero empezó a cambiar la última palabra.

-mi bebe pequeño, que le quiere su mama, cuando sea grande se lo follara ¡¡

-mi bebe pequeño, que le quiere su mama, cuando sea grande se lo follara ¡¡

-Ahhh mama siii follame ,

-¿quieres que te folle mama?

-Si la respondí.

Nos dimos la vuelta como 2 animales en celo el agua se salía de la bañera se puso frente a mí. Y se sentó a horcajas sobre mi pene duro. Sus tetas estaban frente a mi cara y empecé a succionar mientras la abrazaba. Ella se movía con mi pene duro en su concha. El agua salía de la bañera.

Ella seguía cantando la canción mientras empujaba su pelvis contra la mía.

-mi bebe pequeño, que le quiere su mama, cuando sea grande se lo follara¡¡

Pero jadeaba más más, y gritaba más.

-Sí, si sigue hijo mío sigue.

-mami, mami decía mientras empujaba mi pene dentro de ella y chupaba sus grande tetas.

Seguimos nuestro baile hasta que vi que ella echaba la cabeza hacia atrás en señal de un orgasmo, entonces empecé a empujar más rápidamente hasta que me empecé a correr.

-mama, me corro, mama me corrooo…

Acabamos los 2 en la bañera tumbados las piernas cruzadas y mi pene dentro.

Se llevó la mano a la cara y me dijo…

-Hijo mío esto no tenía que volver a pasar….. Continuara.