La paja al hijo

Le cura al hijo mediante una paja

Elvira llego antes de lo esperado a casa,era un tórrido día de verano, que el termómetro alcanzaba los 40º. En el trabajo se iba la luz cada dos por tres, tenían problemas desde hacia una semana, no daban a basto con la electricidad entre los equipo informáticos y el aire acondicionado, así que el responsable les mando para casa dos horas antes, e iban unos técnicos a solucionar el problema.

Abrió la puerta de casa y se encontró a su hijo Daniel, sentado en el sofá, con el pantalón bajado y mirándose el pene. Elvira se asusto, no supo que hacer, pero su hijo se quedo inmóvil, aterrorizado.

Después de unos segundos que se hicieron eternos, la madre le dijo:

  • Que haces hijo?
  • Na...nada.- Respondió entrecortado.

Daniel, se subió el pantalón y marcho a su cuarto muerto de vergüenza. Eso a Elvira le extraño, al principio pensó que se estaba masturbando, pero reacciono “raro”, y ademas no estaba viendo ninguna película porno, ni viendo ninguna revista. Y por lo que ella intuía, se solía masturbar en el váter o su habitación

Fue tras el inquieta, algo le pasaba a su hijo. Llamo a la habitación

  • Daniel, puedo pasar?.-Pregunto.
  • Ahora no mama.
  • Te pasa algo?.- insistía Elvira.
  • No, nada!!

Abrió la puerta, y asomo la cabeza.

  • Hijo, que te pasa? No me lo puedes contar?
  • Son cosas mías

Abrió mas la puerta y se sentó en la cama, su hijo estaba sentado en la silla del ordenador, casi ni la miraba, lo estaba pasando mal.

  • A ver cariño, cuéntale a mama que te pasa.

Daniel dudo, le daba vergüenza hablar con su madre de eso. Pero ante la insistencia por parte de ella, le contó que tenia todo el “pene rojo”, y alguna herida. Y no sabia que le pasaba, si era alguna enfermedad o que.

  • Pero como te lo has hecho?
  • El otro día estuve con una chica.- Confeso ruborizado.
  • Era la primera vez que “estabas” con un chica?
  • Si.- Respondió mas avergonzado aun.
  • Ven cariño siéntate en la cama y enséñame, que igual no es nada, y se te ha irritado.

Daniel obedeció a su madre, se sentó en la cama y se bajo el pantalón, ella se puso frente a el de rodillas, le resulto una posición incomoda, parece que le iba a chupar la polla a su hijo. Le volvió a insistir y se bajo el calzoncillo. Menudo pollon!!, pensó Elvira, estaba flácido, pero era grueso, no muy largo, pero con buen diámetro Lo cogió con la mano derecha para observarlo mejor, noto el calor del miembro, hacia tiempo que no tenia uno, para ella. Con la mano izquierda le movió un poco el pellejo y encontró un par de llagas pequeñas, dos heriditas.

  • Aquí tienes dos heridas pequeñas, esto es lo que te duele?
  • No, en la punta tengo rojo, y me duele.

Intento bajarle el pellejo, pero se quejaba, la puntita se veía roja e irritada, tenia el pene seco y eso le hacia daño. Daniel al principio estaba muy apurado, pero el ver a su madre sentada frente a su pene, le excito un poco, y se le medio empino. Lo que hacia mas difícil bajarle el pellejillo. Llevaba una blusa con estampado de colores bastante abierta, y desde su perspectiva veía los pechos de su madre escondidos bajo el sujetador negro. Y no podía dejar de mirar esos grandes pechos, Elvira se percato, pero no le dio importancia.

  • Hijo, tienes muy seco el glande y no puedo bajarte el pellejo. Prueba tu, que yo igual te hago daño.

Se bajo pellejo con un leve gesto de dolor. Lo primero que le vino a su madre fue el olor frute de la pija, era mas intenso de lo normal. Tenia todo el “capullo” rojo y lo que parecía un liquido viscoso en la parte inferior.

  • Tienes todo irritado y seco, y alguna herida pequeña, no es nada, se te pasara en unos días
  • Cambien me duele en los “huevos”, estoy incomodo.
  • Que te paso? Cuéntame?
  • El otro día estuve con una chica, ya te he dicho.
  • Pero hicisteis el sexo?
  • Algo estuvimos haciendo, pero creo que de el roce se me ha irritado.
  • Era la primera vez?
  • Si... y de ella también

Elvira no sabia como tenia esta conversación con su hijo, y con la polla frente a ella. Era un poco surrealista Pero estaba agosto, y su hijo parece que también

  • Pero que hicisteis?. Preguntaba curiosa y un poco excitada.
  • Pues me hizo alguna paja, yo a ella también
  • Con la boca también?
  • Si.
  • Y te dolió?
  • Si, me hacia daño, tenia aparato en los dientes.
  • Por eso tienes las llagas. Y la penetraste?
  • Estuvimos intentando, pero no podía, le dolía
  • Seguramente, se te haya irritado por falta de lubrican Tu te corriste? Por que puedes tener molestias por no correrte, estar muy excitado y no llegar a eyacular.
  • No me corrí
  • Te deberías masturbar, para soltar todo lo que tienes acumulado.
  • Lo he intentado esta mañana, pero no podía, estaba nervioso.

Elvira deseaba tener ese pollon entre sus manos, pero no sabia que pensaría el, era una cosa entre madre e hijo, no le ocasionaba ninguna perturbación Le quito los pantalones y el calzoncillo y le abrió ligeramente las piernas. Agarro la polla con una mano y comenzó a mover suavemente el pellejo, la irritación le provocaban gestos de dolor. Elvira acerco su boca al capullo y dejo caer silaba para lubricar el miembro. Continuo masaje ando suavemente, pero por el nerviosismos de Daniel, no alcanzaba la erección Con la otra mano le acaricio el perineo de su hijo, esto funciono, el glande se lubrico de la estimulación, los gestos de dolor pasaron al placer. La madre de rodillas masturbando al hijo, despacio muy despacio. La polla estaba muy dura, y le dieron ganas de chuparla, pero se contuvo. En poco tiempo estaba gimiendo de placer con los ojos cerrados e intento acercarle la polla a la boca, pero no se dejaba. De repente,paro y se levanto.

  • Ya tienes lubricado del todo, intenta terminar tu.
  • Acaba tu mama.
  • No hijo, sigue tu..- Y se dio media vuelta con intención de salir de la habitación
  • Espera mama, quédate hasta que termine, porfi.

No dijo nada, se apoyo en la pared y observo, mientras se masturbaba con energía No tardo en correrse, la eyaculacion fue brutal, tanto por los gemidos, como por la cantidad de semen descargado.

  • Venga, vete a limpiarte y dúchate Mientras yo limpio esto.

Daniel fue al váter a ducharse, y Elvira cogió un trapo de la cocina para limpiar el semen esparcido por el suelo. Tras la ducha Daniel, le comento que estaba mejor y se le había pasado el dolor, aunque seguía teniendo un poco irritado. Pasaron los días y no se volvió hablar mas del tema, aunque los dos lo tenían presente.

Pasaron las semanas y llego el cumpleaños de Elvira. Daniel, se despertó un poco antes de lo normal, le preparo el desayuno se lo llevo a la cama. Se sobresalto un poco al ver a su hijo en la habitación, pero se le ilumino la cara de felicidad cuando vio aquel desayuno y que le cantaban el “cumpleaños feliz”. Después de unos abrazos y besos Daniel marcho al taller, sin darle el regalo, para ella era suficiente regalo el detalle, así que tampoco se acordó

Se volvieron a encontrar en casa a la tarde, y Daniel le entrego una bolsa con un paquete de regalo. La madre le dio las gracias y después de besarle y decir “que era el mejor hijo del mundo” abrió el paquete. Cual fue la sorpresa, que quito el papel de regalo, y se encontró con un juego de braguitas y sujetador negro, y unas medias hasta los muslos del mismo color. Se quedo sorprendida, no esperaba ese tipo de regalo.

  • No se que decir....no esperaba este regalo.... es precioso....
  • Es que no sabia que regalar, y se me ocurrió esto. Espero que te valga, por que creo que no se puede cambiar.
  • Gracias cariño.- Y le dio un pico en los labios.- Me lo voy a probar, ven y dime que te parece.

Daniel se sentó en la cama mientras su madre se desnudaba. Se quito la ropa dejando todo su cuerpo al desnudo, tenían unas grandes tetas caídas, con unos pezones grandes, le sobraba carne por todos lados, con un enorme culo y un coño peludo. Se coloco el sujetador, después la braguita y por ultimo las medias, se miro al espejo y pregunto a Daniel.

  • Que tal me ves? Me queda bien?
  • Si, fenomenal mama. Estas muy buena.
  • Gracias cariño. Te gusta ver a mami así
  • Si, un montón
  • Pues me voy a quedar con esto puesto, te parece?

No dijo nada, estaba encantado que su madre se paseara así por casa. Le seguía a todas partes, y charlaba con ella, lo que mas le excito fue cuando su madre se puso un delantal para la cena. Estaba deseando hacerse una paja, llevaba toda la tarde empalmado. Tras la cena se sentaron en el sofá, el en una esquina y ella en la otra pero con las piernas estiradas. Daniel le comenzó a masajear los pies, ella se dejo no dejaba de observar a su hijo. Siempre le había excitado que le tocaran los pies, le relajaba un montón Se miraban sin decir nada, hasta que se metió el dedo gordo del pie en la boca, entonces Elvira cerro los ojos y se estremeció, y se toco las tetas, el pezón se endureció de la excitación.

  • Mama te puedo hacer otro regalo?.- pregunto con duda el hijo.
  • Otro mas? El que?.
  • Ya lo veras, igual te enfadas.
  • Dime cariño.
  • Sabes que así estas muy sexy?
  • Gracias,tu me haces sentir así
  • La otra vez me hiciste una paja, y me gustaría hacerte yo una...
  • Pero hijo! Eso fue por que tenias mal aquello. Lo que dices tu es diferente.
  • A mi me gusto, y quiero que también te guste a ti.
  • No se si estará bien....
  • Ademas he comprado una cosa para ayudarte.

Se quedo muda, Daniel se levanto y fue a su cuarto y volvió con un dildo de plástico Elvira se quedo asombrada. No sabia que hacer, no se lo esperaba. Ante la cara de su madre dudo.

  • Si quieres te lo quedas y ya esta.
  • No, es que no me lo esperaba. Deja me verlo.

Lo tuvo en sus manos, lo toco un rato, era grande y liso de color rojo. Ante la mirada insistente de su hijo, accedió y se lo metió a la boca como si se estuviera comiendo una polla. Se abrió de piernas bajo la mano y con el dildo rozo la braguita.

  • Quieres hacerlo tu?.-Le pregunto la madre.
  • Si.
  • Vamos a la habitación

Se dirigieron a la habitación de la madre, se quito el sujetador y las bragas, se tumbo en la cama, se acomodo con los cojines para ver bien a su hijo y se abrió de piernas. Se toco el sexo, y se abrió los labios vaginales, dejando al descubierto el agujerito y le invito a que le introduciera esa polla de plástico Daniel estaba nervioso, siguió las instrucciones de la madre, y poco a poco fue introduciendo el dildo, “suave, suave”, “así, poco a poco” le decía mientras se rozaba los pezones. Lubrico rápido, y la entrada del aparato fue fácil, le daba placer, sentía la calentura dentro del cuerpo, se notaba muy mojada. Mientras le introducía y sacaba, ella gemía, sin perder de vista al hijo, estaba en éxtasis Los gemidos eran cada vez mas cortos y respiraba agitada mente, comenzaban los espasmos de placer, se iba a correr, pero quería mas. Le puso la mano a Daniel indicándole que parase. Tenia la cara roja.

  • Por que no terminas tu con los dedos.

Obedeció, le saco el dildo de la raja impregnado de los jugos de mama, ella se lo metió en la boca para saborear su sexo. Mientras que Daniel le metió los dedos y la masturbaba. Elvira jadeaba, pero con la polla de plástico en la boca, como si fuese una de verdad, se estaba corriendo, levantaba el culo de los espasmos, estiraba la espalda, se retorcía, hasta que se corrió, Daniel saco los dedos mojados, lo olio y se embriago de aquel aroma y sin pensarlo los probo, era como probar un coño.

La madre intentaba recuperar la respiración, y el se tumbo junto a ella sin decir nada, la miraba y ella sonreía. Daniel alcanzo con una mano la teta de su madre y empezó a sobarla, la apretaba y tocaba el pezón, se incorporo se puso de rodillas y seguí manoseando las. Elvira se dejo, estiro los brazos hacia arriba dejando que disfrutara con sus pechos, cerro los ojos, y sintió la boca húmeda en sus pezones, que se pusieron tiesos. Su hijo le comía las tetas, primero una y después otra, nunca había tenido tanta teta en sus manos. La madre volvía recibir placer mientras gemía suavemente.

  • Para hijo que tengo que ir al váter

Elvira se levanto, tras ella fue su hijo. Se sentó en la taza del váter y comenzó a mear. Mientras Daniel le seguía sobando las tetas, se estaba calentando otra vez con esa insistencia de su hijo. Le bajo el pantalón a su hijo y le saco aquel pedazo de pollon, y se lo metió en la boca. El gimió de placer y dejo de tocar las tetas. Mientras Elvira seguía sentada en la taza del váter con sus medias negras y desnuda, le comía la polla a su hijo. Tras un rato:

  • Vamos a tu habitación cariño, que mami te va a follar.

Se fueron a la habitación de Daniel, lo desnudo y lo tumbo boca arriba, Le puso un condón, y ella se puso encima y con la ayuda de una mano se sentó sobre la polla de su hijo, noto aquello caliente y soltó un jadeo. Y comenzó a moverse, se le movían las tetas arriba y abajo, y se le notaban los pliegues de la tripa, pero para su hijo era lo mas hermoso. Mientras le cabalgaba se apretaba las tetas, el hijo gozaba de placer, se inclino hacia delante poniendo las tetas en la cara de su hijo, este reacciono cogiéndolas e intentando chuparlas. Daniel estaba en la gloria, no menos su madre. No tardo en correrse, teniendo una corrida muy intensa que le dejo exhausto. Elvira se saco la pija de su coño, todavía no se había corrido, se sentó sobre la cabeza de su hijo e hizo que le comiera el coño, hasta correrse.