La Orgía mas sucia / el poder de Vanesa 11a Parte
Parte final , perdón por tardar, muy pronto publicaré toda la serie de golpe, un abrazo y gracias.
Cuando sonó la alarma me desperté con la boca abierta y babeando, y la lengua de N1 dentro de mi boca , habían pasado cuatro horas desde que nos acostamos a descansar, ahora tal y como habíamos planeado, la idea era continuar las perversiones.
– Bien , ahora ha llegado el momento con el que muchos habéis fantaseado desde que me conocéis , vais a follarme el culo.
Es difícil describir la expresión de felicidad que se formó en sus rostros cuando dije esto, mas felices aún , cuando me puse a cuatro patas sobre el sofá cama.
– Mi culo es una parte de mí muy apreciada, por eso antes de hacer nada vais a degustarlo, acercate N3 expliqué y ordené.
N3 acercó su cara a mi culo y siguiendo mis ordenes empezó a pasar la lengua por mi ano , saboreandolo
– Este culo está un poco sucio , va a ser un placer limpiártelo con mi lengua mi reina – dijo N3
– No lo chupes muy rápido o no nos dejaras nada de mierda para nosotros – dijo N4
N3 le tenía muchas ganas a mi culo, me lo estaba comiendo y lamiendo con ansia, entonces decidí que era un buen momento para saldar una deuda que tenía con el y de paso probar mi poder.
– N3 mi amor, pega más los labios y succiona para dentro , me encanta – le pedí
El muy gustoso obedeció, y el momento en que sentí que su boca succionaba el agujero de mi culo , yo solté un ligero pedo en su boca, no salió nada de mierda solo un ligero y apestoso aire, aunque siendo la boca de N3 no me hubiera importando en absoluto haberme cagado, pero un pedo estaba bien como reprimenda por intentar follarme el culo sin que yo se lo pidiera.
– ¿ Que ocurre? ¿ No te volvía loco mi culo? – pregunté irónicamente mientras los demás se reían – si tanto te gusta mi culo que no puedes aguantar por follártelo, debe entonces agradarte que te cague en la boca.
Su cara era de sorpresa total le asqueaba lo ocurrido y le dolía mi humillación pero era un pervertido y repetiría , todo por saborear mi culo de nuevo.
– Tu ya has terminado de comerme el ano, ahora es el turno de N1 – dicho eso, N1 vino como un perro a chuparme el culo y me lo comía muy gustoso.
Todos por turnos vinieron a comerme el ano, comentaban que estaba un poco, sucio, muy poco, lo justo para darle un toque delicioso, estaban tan cegados por la lujuria de mi culo que empecé a pedir que me lo lamieran de dos en dos, era otro nivel, el sentir dos lenguas a la vez dentro de mi culo dando vueltas y saboreando.
Tras casi una hora durante la cual mis esclavos me habían dejado el ojete a rebosar de babas , ahora tocaba el plato fuerte.
Uno a uno me follaron el culo, se tomaron su tiempo, cada uno a su estilo, N1 con fuerza, N2 con pasión , N3 con ansia , N4 con cariño pero raro y N5 con timidez pero acabó pegándome una buena follada. Los cinco como era de esperar se corrieron dentro de mi culo, dejando el semen cayendo a chorro de el
– Habéis unos buenos perros, pero la noche aún no ha terminado.
Fui a la cocina y traje un cuenco de cristal, de gran tamaño, lo coloqué en medio del salón y oriné en el, meé muchísimo y mi pis olía muy fuerte, un pis amarillo y caliente.
– Bien, esto es para N1 y N2 , cada uno se va a poner al lado del cuenco y vais a beberlo como perros , sin dejar ni una gota-.
– Pero… – comentaron.
– Sin peros, ! Hacerlo ya !- grité – N1 se negó a follarme la primera vez que lo pedí y se negó por que N2 lo paró. Ahora vuestro castigo es disfrutar de mi meado, al igual que N3 ha disfrutado de mi pedo.
– Eso no es un castigo es un premio – dijo N4 – ya quisiera yo poder beberme tus meados y comerme tus pedos – dijo N4, y lo decía muy enserio.
Yo solo me reí al oírlo , y observaba el espectáculo, ellos dos bebiendo el meado desde el cuenco , agachados en el suelo como dos perros, sus caras eran raras, caras de sorpresa de sumisión, a veces de asco , a veces de gusto.
Se lo bebieron todo.
– Que buenos son mis chicos – les dije mientras les acariciaba.
Me puse otra vez en medio de los cinco.
– Bueno, ahora durante lo que queda de noche hagamos “ juego libre” , lamerme , tocarme y follarme como queráis – dicho esto me entregué a ellos , quería ser testigo de ver hasta donde se inflamaban sus perversiones.
Me chuparon mi cuerpo entero el cual estaba lleno de semen, me tocaban , metían sus dedos en mis follados orificios, me besaban , me follaban de nuevo, el juego libre fue toda una bacanal , incontables corridas cayeron sobre mi piel, me besaban con pasión segundos después de que alguien se corriese en mi boca , me comían el ojete sin parecer importarles que había pasado en el segundos antes.
Tras horas donde todo tipo de barbaridades sucedieron, donde limites higiénicos y sexuales se rompieron, donde creo que algunos de ellos tragaron mas semen que yo incluso , donde el semen y los flujos vaginales no eran los únicos fluidos protagonistas d ella noche, tras horas de vaciar sus pelotas y perder el alma por mi , todos cayeron, no dieron a mas, yo tampoco, empapada y cubierta de semen , sudada y sucia , me tiré en la cama, mis hombres conmigo , mientras me dormía solo un pensamiento daba vueltas en mi cabeza:
Hay que hacerlo mucho más sucio.