La Oficina del Vicio

El secreto que dos personas y cuatro paredes ocultan porque hay que guardar las apariencias.

Hola, soy gata pues nací en Madrid, Linda de nombre y soy una mujer muy sensual, salvaje y apasionada, actualmente tengo 43 años y llevo trabajando 13 de ellos para un buffet de abogados en el mismo Madrid. No soy exuberante pero la genética se porto muy bien conmigo y en definitiva el conjunto resulta apetecible para los hombres. Además se como conseguir su atención sin demasiado esfuerzo.

También os diré que jamás me he casado y tampoco tengo hijos, pues no me gustan demasiado los niños, así que mi única preocupación es mi trabajo y yo misma.

La historia que os voy a contar empezó hace unos 3 años cuando en el buffet donde trabajo me dieron un despacho para mi solita pues me iban a encomendar otras obligaciones y era mejor estar en un despacho sola para poder atender mejor esos asuntos. Cuando vi el despacho lejos de estar contenta me enfade muchisisisimo, era pequeño y no tenia ventana (era un despacho interior en medio de la nada), lo único bueno es que era para mi solita y nadie me iba a molestar, además me dieron la llave para poder cerrarlo cuando yo quisiera y que nadie tuviera acceso a él si yo no estaba.

Al principio entre que no estaba muy contenta con el nuevo despacho y que las nuevas obligaciones me reportaban mucha inseguridad, pues era un trabajo algo diferente de lo que había estado haciendo hasta ahora. Además los nuevos asuntos que iba a tratar llevaba la obligación de atender, trabajar y relacionarme con otros pasantes de un buffet de Soria y otro de Toledo con el que mis jefes están asociados.

Y hasta ahí, pues… todo bien mas o menos, empecé poco a poco a conocer a los nuevos compañeros y pasantes porque eran ellos/as los que venían a Madrid a mi despacho y le fui cogiendo el tranquillo a mi nuevo puesto.

Hasta que diosssssssss un buen día después de unas semanas se abrió la puerta yyyyyyyyyy vi al hombre mas guapo del universo, se llamaba Ricardo, creí morir y estar en el cielo, le sentaba tan bien aquel traje, estaba tan wapo con aquella corbata, era mucho mejor que un modelo de revista. Era tan alto, tan moreno, sus ojos tan verdes, es que tenia todo lo que tiene el hombre de mis fantasías sexuales o sea el hombre de mis sueños, jejeje!!!! Además el tío resulto ser simpático, agradable y muy trabajador, pero casi 10 años menos que yo.

(porque claro está, tenía que saber cosas sobre él, me había impactado y necesitaba saber de su vida, de donde había salido, quien era…)

Así que pregunte aquí, allí, a él también le preguntaba cosas cada vez que venia a verme, hasta que descubrí que nunca se había casado, que actualmente no tenia novia, tampoco había tenido hijos con nadie y había sido un deportista de elite en el pasado y que era nuevo en el buffet de Soria.

Bueno ya solo quedaba saber si yo podría ponerle alguna vez las manos encima y fallármelo. Follármelo como una gata salvaje en celo y eso se convirtió en una obsesión para mí, la sola idea de tocarle, besarle, tener su polla dentro de mí me volvía loca y así empezó mi juego de un tira y afloja.

Debía ser discreta por mi trabajo, nuestro trabajo, además podía ser rechazada por él (aunque nunca ningún hombre me había rechazado, pero alguno tenía que ser el primero) y él era un dios, el dios Adonis.

Así que debía jugar bien mis cartas y hacerme la interesante pero dejándole entrever que lo que realmente me interesaba era su polla, cada vez que iba a venir yo me ponía mis vestidos mas sensuales, mas ajustados, mas frívolos, mis faldas mas cortas y mis blusas mas provocativas, me arreglaba para que no viera a la compañera, sino la gatita que llevo dentro y que entendiera que lo deseaba como mujer y lo deseaba con todas mis fuerzas.

Cuando venia a mi despacho le notaba relajado y a gusto conmigo incluso estaba mas rato de lo necesario, así que eso era muy buena señal y cuando yo le insinuaba cosas sobre cenar, comer o tomarnos algo juntos y le tiraba los tejos, él no de decía que NO pero tampoco que SÍ, con lo cual no sabia quien despistaba a quien. Pero si le tocaba, él no hacia la intención alguna de apartarse, incluso a veces me abalanzaba sobre él con la escusa de coger algún papel del otro lado de la mesa y a él no parecía molestarle, el roce de mis pechos de mi cuerpo, con lo cual mi intuición me decía que ascos no le hacia a mis insinuaciones, pero estaba claro que él no iba a dar el primer paso.

Así que un día me arme de valor y me puse la mini mas mini y ajustada que tenia y la blusa mas ceñida y provocativa que encontré en mi armario junto con mis mejores zapatos de tacón alto, para estar a su altura porque él es muy alto y me prepare como pantera que se prepara para saltar sobre su presa (he de reconocer que estaba muy nerviosa y excitada), pero ya no había vuelta atrás, era el día elegido y sino me lanzaba yaaaaa yo me volvería loca con esta incertidumbre y el plan estaba ideado y no me podía fallar.

Entro por la puerta y como siempre hizo que lo que hacíamos siempre se sentó en la mesa al lado mío saco su portátil, y un montón de papeles, dejando su maletín en el suelo, mienttras yo le miraba de arriba abajo sin perderme un solo movimiento suyo.

Yo estaba tan nerviosa que me empezaron a sudar las manos (vaya momento para ponerme a sudar), estuvimos hablando como siempre de trabajo, tomando notas, intercambiando apuntes, etc…

Y sin saber de donde saque el valor, me levante hacia la puerta y la cerré con la llave. Él desconcertado pero no contrariado porque ya se lo debió imaginar, me dijo: que haces porque cierras la puerta, es que no quieres que entre nadie a molestarnos?

Yo le dije con voz susurrarte mientras despacio muy despacio me acercaba hacía él, mira me gustas mucho, no quiero ser tu novia, ni tu mujer, me conformo con que me folles como una puta perra, me hagas gozar y seas malo conmigo, quiero que todos tus deseos mas sucios y oscuros me los hagas a mí, que me uses como una puta, quiero ser tu putita.

Y antes de llegar donde el estaba sentado con cara de asombro y de chico malo, me quite las braguitas y se las deje caer sobre su ordenador portátil y le dije: me vas a follar?

Él contesto: si si, pero aquí? Yo le dije: pues claro! Donde sino?

Estaba claro, que él querer quería, pero no se atrevía estábamos en mi despacho, éramos compañeros de trabajo y aunque la puerta estaba cerrada con llave y no podría entrar nadie, nos podían oír, corriamos cierto peligro.

Pero a mi en aquel momento me daba todo igual, me desabroche la blusa dejando al descubierto mis pechos y me subí un poquito la mini falda y me arrodille ante él. Empujando su silla hacía un lado para que no me estorbara la mesa y le fui desabrochando el cinturón, el botón del pantalón y bajándole la bragueta, mientras el me miraba con ojos de corderito y me acariciaba el pelo y seguía diciendo aquí no, aquí no, pero yo no estaba por la labor de escucharle, además su aquí no, aquí no, estaba claro que lo decían sus labios, su boca es la que hablaba, porque su polla estaba tiesa y me decía te voy a follar aquí mismo.

Al fin conseguí sacarle la polla y como estaba tan súper excitado su polla babeaba, así que le pase suavemente la lengua, mientras el seguía tocándome el pelo y yo le seguía chupando suave y delicadamente la polla y él seguía acariciandome la cara y jugando con mi melana y le dije susurrando: me puedes quitar el sujetador y veras que tetas tengo.

Me lo desabrocho y entonces aproveche para sacarme la blusa que deje caer al suelo y el sosten me lo quite y se lo solté sobre su cara.

Aun recuerdo su cara cuando vio mis pechos y los toco por primera vez, yo seguía comiéndome su polla con ganas con muchas ganas y me dijo si sigues así me correré, me as puesto muy cachondo y esto no es lo que yo me esperaba, además realmente si tienes unos buenos pechos.

Entonces me puse de pie contorneandome, yo solo llevaba los zapatos y la mini remangada me puse agachada sobre la mesa poniendo mi culito en pompa y le dije pero me vas a follar o no?

Se levanto sujetándose los pantalones con la polla tiesa y fuera de ellos, se puso detrás de mí y me dijo: no se si esto es buena idea, aquí no!

Pero llegada a esta situación… y a mí ya hacia un buen rato que todo me daba igual y quería sentir su polla dentro de mí, la tenia babosilla pues estaba muy cachondo y yo casi casi había conseguido mi objetivo de follarmelo.

Me gire sentándome sobre mi mesa con mis pechos al aire y abriendome de piernas y agarrandole de la polla y le dije: de que tienes miedo no va entrar nadie, somos adultos y estamos cachondos y esta claro que tu polla me desea, así que fóllame, quieres hacer el favor de follarme como una puta y dejar de ser tan formal por una vez.

Me miraba a los ojos, me apretaba los pechos con una mano mientras la otra la tenia entre mis muslos tocandome el chochete, metiendome un dedo dentro, mientras yo le seguia acariciando la polla con la mano, al final se decidió me agarro en el aire y me dio la vuelta, me inclino el cuerpo sobre la mesa del despacho y me metió la polla por el chochete pero por detrás, uffffffffffffff fue como… no se como explicar la sensación de tener su polla dentro de mí, lo había deseado tanto, era un deseo que tenia desde el primer día que lo vi y por fin ya tenia su polla dentro de mi, era incluso mucho mejor de lo que había imaginado, él me follaba con ganas mientras me besaba el cuello y me tiraba del pelo y me decía esto es lo que querías no? Pues ya lo tienes.

Yo aunque parezca increíble me corrí en el mismo momento en el que Richard me metió la polla y mientras me follaba me ponía más excitada y notaba cada vez mi chochete más húmedo.

(así, se me olvidaba ya no era Ricardo, sino Richard, todos los del buffet decidimos que ese nombre le pegaba mucho mas)

EL caso es que Richard estaba a puntito de correrse y como no se fío de correrse dentro de mí y eso que sabe que tomo pastillas y llevo el DIU, pero es igual, le acabe el trabajito con la boca y se corrió en mi boquita y por encima de mis pechos.

Y hay que decir que hasta su semen es de una textura suave y no sabe mal como el de otros hombres.

Saque las toallitas de mi bolso, me limpie la boquita y las tetas, le limpie la polla y le di una toallita para que se limpiara las manos, con otra toallita me limpie y seque el chochete porque lo tenia tan húmedo que parecia que se hubierha corrido dentro de mí, me chorreaba.

Nos vestimos y aun recuerdo como si fuera ahora mismo lo que me dijo: esto ahora que… lo vas a contar? Que va a pasar?

Yo me rei y le dije: que quieres que cuente si aquí no ha pasado nada y que va a pasar si no hay nada que contar, además somos adultos y compañeros y por eso mismo esto no lo debe saber nadie, además yo soy 10 años mayor que tu y seriamos el hazmerreír de todo el buffet a parte de que a mi me dirían de todo menos bonita y tu quedarías por el tonto que se dejo liar por esa vieja. Así que tranquilo que no hay nada que contar.

Y esa fue la primera vez de muchas otras veces, jejeje!!!!! Cada vez que viene a mi despacho ya sabe que me lo voy a follar si u si y él siempre dice lo mismo aquí no, aquí no, pero su polla dice ven que te voy a dar lo tuyo y así llevamos casi tres años de un sexo discreto en mi despacho.

Si mis compañeros/as y mis jefes supieran que ocurre de vez en cuando en aquel despacho, jejeje!!!!! Y sobre todo si alguna de mis compañeras supieran que la que se esta follando a Richard soy yooooo, aunque alguna de ellas le ha tirado los tejos descaradamente delante de mí y sin cortarse un pelo porque claro como yo tengo 43 años y soy mayor que Richard y él es un dios echo realidad, se creen que no soy competencia para ellas, jejeje!!!!

Pobre ilusas, que engañadas y engañados están todos. Las apariencias engañan y es lo primero que toda persona que se precie, ha de saber salvaguardar.

Relato dedicado: a mi semental secreto que me folla discretamente en mi despacho.