La nueva asistenta de Don Ramón parte 9.2

Nuestra heroína soltaba un ¡¡¡ ooooh !!!!, a cada embestida pero no apartaba sus ojos de la escena de la piscina, sin siquiera notar los chorros de fluidos que a cada chap, chap, iban brotando de su jugosa almeja deslizándose a lo largo de muslos y piernas hasta formar pequeños charquitos bajo sus pies.

La nueva asistenta de Don Ramón

Parte 9.2

Jaime, ya había salido de la piscina y se había arrodillado delante de su madre, que sacando los pies del agua y con los talones bien fijados sobre el rugoso borde de la piscina se dispuso a recibir el pago del perdedor  de la carrera sin dejar de reírse a carcajada limpia.

.- Venga Jaimito, a pagar tu prenda que eres un tardón.

.- ¿No nos podrías dejar ganar algún día, mami?. Refunfuño su hijo .

.- A medida que me vuelva mayor, vais a ganarme, mientras tanto yo saboreo mi triunfo sobre la juventud, ja,ja,ja,ja,ja,ja.

Jaime se aferro a los musculosos pero bien torneados muslos de su madre y metiendo la cabeza entre sus piernas la obsequió con una fenomenal comida de chumino.

“El medalla de plata”, Danny, aprovechando la postura de Emma, que tenía que sostener el peso de su cuerpo con ambos brazos, con los dedos de la mano derecha trabajaba los negros pezones de la mulata mientras que con la izquierda se sobaba la verga que por aquellos momentos ya alcanzaba un considerable tamaño.

Jaime trabajó a su madre durante unos ocho o diez minutos sin salir a respirar, el chico parecía tener bastante practica en los menesteres de succión y relamido y aspiraba por la nariz con toda normalidad.

Emma, empezó a respirar profundamente, su poderoso pecho de nadadora subía y bajaba cada vez más rápido, menos mal que los pezones de la hembra debido a la excitación que poco a poco la embargaba estaban creciendo de forma desaforada y Danny los podía pellizcar sin que se le escaparan de los dedos a pesar de la agitada respiración de la morena medallista.

Annabella, literalmente chorreaba, estaba agarrada con todas sus fuerzas al tablero de la mesa de jardín y sus pechos se bamboleaban cual campanas de parroquia, al empuje de las embestidas de Alejandro que sin ningún tipo de resistencia, introducía y sacaba casi al exterior su maduro pero bien plantado tronco de 19 centímetros largos, en la encharcada vagina de la asistenta, produciendo tal chapoteo que debía oírse hasta en el chalet del vecino, había soltado las tetas de Annabella y se aferraba a sus caderas para que no se perdiera ni un caballo de la fuerza de aquel pistón.

Nuestra heroína soltaba un ¡¡¡ ooooh !!!!, a cada embestida pero no apartaba sus ojos de la escena de la piscina, sin siquiera notar los chorros de fluidos que a cada chap, chap, iban brotando de su jugosa almeja deslizándose a lo largo de muslos y piernas hasta formar pequeños charquitos bajo sus pies.

Por lo que podía ver Annabella, Emma estaba a punto de correrse, su hijo le estaba haciendo un trabajo de artista, y los acerados  nervios de su cuello, brazos y tobillos hinchaban la morena piel de la nadadora como si fueran a salirse de ella.

Un profundo ¡¡¡ aaaaaaaggggggghhhhhhh !!! broto de lo mas profundo de su ser y abandonándose al placer que la iba poseyendo se dejó caer suavemente de espaldas sobre las baldosas del jardín, mientras su escultural y moreno cuerpo se estremecía con los últimos espasmos del orgasmo.

¿ Y ahora que, se preguntó Annabella? ¿ qué iba a hacer Jaime ? No, no, no, esto no podía ser, seguro que pasaría directamente al otro conejito, al afeitado chumino de su hermana, mientras tanto Danny se la estaba pelando descaradamente mientras le sonreía a su amigo.

.- Si, si,  se la va a chupar y no, no son gays ninguno de los dos. Le aclaro una suave voz al oído mientras se lo mordisqueaba.

.- Pero, pero esto es una… una…Se medio giro para ver a Alejandro.

.-  ¿Una que ? mi amor. Alejandro no dejaba de metérsela a tope una y otra vez aunque estuviera hablando.

.-  No se, lo encuentro un poco… extraño.

.- ¿Ah, si?, y cuando hace poco más de una hora ¿no le estabas comiendo el chochito a una mujer madura que podría ser tu madre y ella se comía el tuyo?, ¿esto también lo encuentras un poco…extraño?

.- Dios, ¿cómo lo sabes?.  Esta vez Annabella, se dio la vuelta completa y se encaro con su pareja.

.- Ja,ja,ja, yo lo sé todo mi amor, es lo mismo: dos pollas, dos chuminos, culitos, nalgas, pechos, ya ves al final todos buscamos lo mismo por el camino que sea, el placer, disfrutar del sexo, ¿estás con nosotros o no?.

.- Tienes razón Alejandro, nunca lo había analizado bajo este punto de vista, perdóname, ahora por favor acaba lo que has empezado y dame este placer que pregonas y volvió a darse la vuelta agarrándose de nuevo a la mesa ofreciendo sus sudorosas nalgas al hombre que la estaba poseyendo.

Jaime ya se la estaba chupando a su amigo Danny, y este gozaba de la mamada, tenía los ojos cerrados, Annabella pensó en aquel instante  que coño tenía que ver si la boca era de un hombre o de una mujer?, el placer debía ser exactamente el mismo, los roces labiales, con los ojos cerrados no podían distinguir si eran masculinos o femeninos, la lengua menos, entonces ¿ cuál era la diferencia?  NINGUNA, la misma, tal fuera un hombre o una mujer la que te comía el chumino, NINGUNA. En fin, y con el agradable recuerdo de Eleonora debajo de ella consumando aquel  tórrido 69 que mencionó Alejandro, empezó a sentir como el orgasmo la invadía dulcemente.

Aquel cosquilleo que empezaba en los dedos de los pies, subía suavemente por las pantorrillas y se paseaba por las partes interiores de sus muslos, desencadenaba una tormenta en su vagina y explotaba en lo mas recóndito de su cerebro estaba llegando. Dejo que llegara, cerró los ojos y se corrió, instintivamente los músculos vaginales se comprimieron impidiendo que la verga que le daba placer continuara moviéndose, la bloqueó, su instinto animal quería que la semilla regara el campo, pero el macho todavía no estaba a punto, seguramente quería dar y recibir más placer,  dejo de ejercer presión y el falo de Alejandro emergió de la cueva, noto que unos fuertes brazos la sujetaron primero, la levantaron después y finalmente la depositaron en una colchoneta, notó la tibieza del cuerpo masculino a su lado y dejo que la acariciara y se recuperara.

Estaba tumbada de costado, mirando  a la piscina, el espectáculo estaba en su apogeo, Jaime continuaba la homosexual mamada a su colega Danny sin dejar de masturbarse, Emma se recuperaba del orgasmo que tan generosamente le había proporcionado la lengua de su retoño y de espaldas sobre las húmedas losetas de la piscina no dejaba de acariciarse los espectaculares y oscuros pezones que orgullosos cual pequeños volcanes emergían de las achocolatadas aureolas que adornaban los hermosos pechos de la mulata, su hijita para no ser menos que su estupenda mami seguía sus pasos, con la derecha apretujaba sus tetas y pezones y con la izquierda preparaba su vagina para el próximo festín que se avecinaba, sus morenos y finos deditos, índice y corazón hacían verdaderas filigranas con sus labios vaginales y su enervado y rosado clítoris, que valientemente asomaba su dulce carita de entre los pliegues de la oscura piel.

Annabella estaba chorreando como una perra en celo, aquella orgía era demasiado para asimilarla en una sola tarde, y ni se inmutó cuando la polla de Alejandro se coló entre los dos cachetes de sus nalgas, ella levanto un poco la pierna para facilitar la exploración, notó como el duro miembro de Alejandro se frotaba contra sus labios vaginales una y otra vez, pero sin penetrarla ¿ que pretendía ahora aquel estupendo macho?.

No tardó mucho en averiguar las intenciones del maduro padre de Danny, una vez el violáceo glande estuvo bien engrasado con su jugos vaginales, enderezó unos centímetros el rumbo  y apoyándose en su esfínter empezó a presionar.

Annabella se removió un poco inquieta al recordar el diámetro de la verga que Alejandro pretendía introducir en su agujero posterior ( en estos instantes recordó la frase  " procura siempre ir bien limpia ", menos mal que se había metido la ducha fálica en el culo hacía un rato )

.- ¿ No quieres? oyó como Alejandro le susurraba detrás del lóbulo de la oreja.

.- Bueno... no sé... probemos, ve despacito por favor la tienes muy gruesa. Menos mal que entre el juguete de Eleonora y la ducha se le habría dilatado un poco el ano, pensó nuestra heroína.

Y procurando relajarse al máximo, levanto mas la pierna para facilitar la penetración e intento distraerse viendo las travesuras que en aquellos instantes protagonizaban los tres jóvenes.

Jaime seguía succionando la polla a Danny, este ya tenía los ojos cerrados disfrutando de la caricia, Amelia no apartaba los ojos de la escena, había dejado de sobarse las tetas aunque seguía masturbándose, se acurruco mas a la pareja y pasando el brazo libre por el torso de Danny le obligó a inclinarse hacia su rostro y le beso con furia, las lenguas de ambos entablaron una fiera lucha  buscando los rincones más recónditos para proporcionar a sus dueños el máximo placer. Amelia  noto como Danny se tensaba. Estaba a punto de llegar al éxtasis. Le gustaba mucho el semen de su casi hermano.

Dejo de succionar la lengua de Danny y aparto con suavidad a su hermano, se  apodero de la verga del joven y  se la introdujo hasta la garganta, empezando a mamar como una loca, el joven no resistió más que unos segundos, con un bramido se derramó en la boca de la joven inundándola con su cálido y espeso semen, a Amelia como que le gustaba mucho paladear la leche de Danny vio que no sería capaz de tragar toda la ración y sacándose de la boca el duro miembro dejo que una parte bastante sustanciosa de la corrida se deslizara hasta sus tetas mientras que degustaba y se relamía los labios con la parte que había dejado en su boca.

Jaime, que no había dejado de meneársela ni un momento durante el pago de su deuda con los demás nadadores, también estaba llegando al final de su resistencia y al ver como la blanca leche de su querido amigo goteaba y se deslizaba suavemente sobre la negra piel de su hermana, eyaculó con fuerza sobre ella ,  cuatro o cinco abundantes chorretones se mezclaron con el semen de Danny sobre los bonitos y oscuros pechos de Amalia, que no dejaba de paladear la parte de semen que se había guardado para ella sola.

Annabella estaba como embobada disfrutando del espectáculo, estaba tan caliente que prácticamente ni se dio cuenta de que el guapo y maduro Alejandro se la había metido por el culo, aquel pedazo de polla oscura y nervuda la estaba traspasando como un hierro caliente, las manos de Alejandro amasaban sus tetas y pellizcaban sus pezones, sentía en sus entrañas una especie de escozor y placer pero no podía resistirse  (ni quería) a la penetración anal, era totalmente soportable y a medida que pasaban los minutos aumentaba la parte placentera sobre la dolorosa, ella para distraerse estimulaba con las manos sus partes más sensibles, clítoris, labios vaginales y su pubis eran objeto de un interminable manoseo, que aumentaba el placer del coito anal.

De todas formas todo hay que decirlo, ni por un momento Alejandro presionó más de lo debido, su penetración fue lenta y sin prisas, sacando, mojando en la encharcada raja de Annabella y metiendo de nuevo, con lo caliente que estaba aquella espectacular mujer y el prólogo del rojo consolador de Eleonora desvirgando el culo de nuestra protagonista, el trance apenas provoco dolor.

Y mientras Alejandro el guapo, ensartaba analmente a nuestra asistenta una y otra vez, esta volvía a fijar su atención en el borde de las piscina.

Emma la madre de los dos jóvenes de color se había levantado y se acercaba al grupo formado por sus hijos y Danny, sin decir palabra se arrodillo junto a su hija y aunque a Annabella le parecía imposible que aquello estuviera sucediendo realmente, acerco a los pechos empapados de semen de su hija  sus carnosos labios de hembra negra y de ellos asomo una larga y gruesa lengua que sin prisa pero sin pausa fue lamiendo el cuerpo juvenil de su hija hasta que no quedó ni una gota de semen en su oscura piel.

Después del atracón de leche que delataban los restos blancos que adornaban su boca y que no dejaba de relamerse, se dirigió a la pareja que tenía mas cercana que eran don Ramón y Mari Carmen, mientras tanto su hija había adoptado la antigua postura al borde de la piscina y cogiendo con fuerza el rizado pelo de su hermano metió literalmente su cabeza entre sus negros y torneados muslos diciéndole:

.-  Venga hermanito que todavía no has terminado. Y Jaime obediente y sumiso se dedico a terminar su tarea de succionador oficial de la tarde.

Mientras seguía masturbándose para alejar los pocos ramalazos de dolor que le provocaba la verga de Alejandro entrando y saliendo de sus entrañas, Annabella fijo su atención en las andanzas de Emma.

Como decíamos se había acercado a la pareja de don Ramón y Mari Carmen, estos sin prestarle mucha atención seguían con su rítmico polvo, al menos hacía 15 o 20 minutos que follaban lentamente pero sin descanso, el sudor bañaba los dos cuerpos maduros, don Ramón se la metía sistemáticamente a Mari Carmen al parecer sin gran esfuerzo para un hombre de su edad  y la esplendida dama al menos se había corrido cinco o seis veces , prácticamente no le quedaban fuerzas para continuar.

.- Ramón, mi amor, ya no puedo mas, quiero que riegues mi flor con tu leche y luego descansar un rato.

.- Bueno, tú mandas, ¿toda dentro?

.- Si por favor, necesito la cálida y abundante caricia de tu semen para que calme el ardor que me consume.

.- Vaya, y yo que quería un poquito para mí. Interrumpió Emma.

.- Hola Emma, saludo Mari Carmen, eres una negra insaciable amor.

.- Que quieres que te diga. Me gusta , y Ramón es una fuente inagotable.

.- No te preocupes solo quiero tenerla un rato dentro, después si quieres me derramo sobre tu pecho o donde quieras.

.- Perfecto, venga seguid yo os apoyo. Y espatarrándose sobre la tumbona dejo que Mari Carmen apoyara su cabeza y hombros sobre su voluminoso y abundante pecho.

.- Emma, nunca estas satisfecha, menuda ninfómana eres, vas a escandalizar a mi nueva asistenta. Se rió don Ramón.

.- ¿Escandalizar?, me parece Ramón que esta será peor que yo, fíjate como se la mete por el culo mi Alejandro.

.- Por el culo no se si se la está metiendo,  no lo veo con exactitud, pero por algún orificio si se la mete, esto está claro .

.- Venga, Ramón atiende a Mari Carmen.

.- Estoy en ello, avísame cariño cuando te venga el próximo, ¿vale?

.- Vale, de hecho creo que  estoy experimentando un orgasmo múltiple, así que no tendrás que esforzarte mucho.

Y Mari Carmen a pesar de sus 52 tacos tenía razón , el orgasmo que la estaba poseyendo solo necesitó un estímulo de unas seis o siete embestidas de don Ramón, prácticamente solo se calmaba un rato y después volvía con más ímpetu a proporcionarle un interminable placer.

.- Ahooooooora, Ramón, ahooooora me viene.

Y don Ramón cual si de un grifo se tratara, abrió la llave de sus testículos y empezó a regar la flor de Mari Carmen, sin sacar la tranca del viscoso agujero.

.- Ohhhh, Ramón, mi Ramón, mas leche, mas leche, asiiiiiiiiii, asiiiiiiiiiiii. Y don Ramón siempre solícito con sus amigas lleno el recipiente hasta el borde.

Mari Carmen quedo casi desvanecida sobre Emma y esta al ver que Ramón sacaría la tranca del recipiente de un momento a otro acudió rauda a tapar con la mano la enorme y lubricada raja, la cual no tardaría en verter sobre su negra anatomía el preciado líquido.

Deposito suavemente el desmadejado cuerpo de su amiga sobre la tumbona sin descuidar ni un segundo la mano que taponaba la salida del abundante semen de don Ramón.

.- Un segundo cariño, ahora mismo me levanto. Susurro Mari Carmen a Emma, la dama negra.

.- Tú tranquila Mari Carmen, cuando se te pase el telele ya me lo dirás.

.- Si, dejaremos que el líquido benefactor alivie durante unos minutos mis distendidos tejidos vaginales, este hombre es como una tremenda maquina de follar. Después te la pasare toda. Y sustituyendo la negra mano que taponaba su vagina por la suya propia, se dejo caer agotada sobre la  tumbona.

.- Ja,ja,ja,ja, muchas gracias Mari Carmen. Don Ramón mientras tanto se dirigía a la ducha.

.- Annabella, forzando un poco la postura intentó ver a la pareja de tía y sobrino, pero al estar un poco por detrás de ellos no conseguía vislumbrarlos.

.- Alejandro, ¿me dejas cambiar de postura?

.- ¿ Te hago daño ?

.- No en absoluto, al contrario placer excelso, pero me agradaría ver como se lo montan la tía y el sobrinito.

.- Pues, tú dirás. Y sacando la tranca del trasero de nuestra protagonista, dejó que ella escogiera la posición más adecuada.

Annabella se puso a cuatro patas, de perrita. Arrastro la suave colchoneta un par de metros en dirección a Eleonora y Raúl para poder observarlos a placer y le comento a su pareja:

.- Venga Alejandro, ahora mi querido culito está dispuesto a recibirte y yo me siento mucho más cómoda, vuelve a insertar tú falo en mi trasero y agárrame las tetas, sóbamelas y amásamelas como si me las quisieras arrancar, o Dios mío ¿que estoy diciendo?

.- Solo dices lo que realmente sientes cariño, el ambiente y el placer sacan de tu interior las exclamaciones que en un entorno natural no te atreverías ni a pronunciar. Eleonora entre suspiros y gemidos había levantado un poco la cabeza de la colchoneta y entre embestida y embestida de su sobrino intentaba justificar la expresión de Annabella.

.- Gracias por tu comprensión Eleonora ( en el fragor de la batalla Annabella la estaba tuteando), pero normalmente suelo guardar la compostura.

.- Esta tarde, no la guardes,  jajajajajajaja, olvida la compostura y déjate follar por este caballero que es un experto en encular a damas como nosotras haciendo que se retuerzan de placer.

Eleonora  estaba en la posición clásica, pero con las piernas sobre los hombros de su sobrino para facilitar mas la penetración, Raulito había dejado de comerse la almeja de su tía y aprovechando que la encharcada vagina de su lujuriosa pariente no ofrecía ningún tipo de resistencia a su tranca, la penetraba una y otra vez con la fuerza de un caballo. Eleonora alargó la mano y se la tendió a Annabella, nuestra asistenta la aferró con cariño y con fuerza al mismo tiempo.

.- Gracias por el consejo Eleonora, estrechemos nuestras manos para comunicarnos las sensaciones que nos embargan. Y ambas se entregaron a sus respectivos  machos acompasándose al ritmo de sus envites que hacían que los pechos de ambas, unas de plano, y las otras colgantes se movieran al compás del tremendo polvo del que ambas eran objeto y que los dedos entrelazados de ambas fueran casi como extensiones neuronales que transmitían el placer de la una a la otra y viceversa.

Mientras tanto la orgía continuaba en el otro extremo de la piscina.

Jaime después de venirse sobre las tetas de su preciosa hermana, se arrodillo entre sus piernas y apoyando ambas manos en sus redondeadas rodillas las fue abriendo despacito para dejar al descubierto la rosada vagina de Amelia que destacaba sobre la oscura piel de su cuerpo como una rosa bañada por el rocío matutino.  Sus partes intimas estaban totalmente depiladas, ni un solitario pelo afeaba su pubis, ni su ojete, ni las partes exteriores de sus labios vaginales,  era como una muñeca de silicona de color café con leche.

Amelia, como dije,  se abrió del todo, apoyo un codo sobre la mojada piedra de la piscina y con la otra empujo la cabeza de Jaime hacia su tesoro mas querido, ansiaba sentir la lengua de su querido hermano buscando y explorando el salado y húmedo territorio que Jaime sabía como hacer vibrar.

Hacía muchos años que ambos gozaban de sus cuerpos, empezaron de pequeños jugando a médicos, supongo que esto lo hemos hecho casi todos nosotros, después los juegos se convirtieron en  caricias al ver como su madre y su compañero lo hacían prácticamente delante de ellos, Alejandro y Emma nunca se habían escondido para hacer el amor, y ya se sabe los niños lo aprenden todo de sus mayores.

Daniel, el hijo de Alejandro, también participaba en estos juegos porque los tres habían crecido juntos, de hecho habían mamado los tres de las mismas ubres.

Pero esto es otra historia, Alejandro había quedado viudo con un bebe que no sabía que hacer con él y Don Ramón le proporciono una asistenta mulata recién llegada de Cuba, con dos niños pequeños, uno recién nacido, a la que habían dejado viuda por tener su marido ideas controvertidas, ( de poco le había servido la medalla olímpica de su esposa para líbralo de su suerte)  y con unas hermosas  tetas repletas de leche que servirían para alimentar y cuidar a los dos críos.

Don Ramón siempre había tenido buenos contactos.

En fin, como dije esta es otra historia, vayamos a la que relatamos estos días. Amelia, empezó a sentir la deliciosa caricia de la lengua amada, estaba tibia, húmeda, larga, puntiaguda, no tardó ni unos segundos en encontrar el camino, la penetró con suavidad, mas de cinco centímetros de apéndice lingual se le metieron por el pequeño agujero que conducía a su útero y sin descanso iban acariciando aquellas partes tan sensibles de su anatomía, incluso la nariz de su hermano en algunos momentos de la caricia rozaba el inflamado clítoris de  Amelia.

La comida de coño duró unos seis o siete minutos, Amelia empezó a emitir unos pequeños grititos que iban aumentando de tono a medida que el orgasmo se iba apoderando de ella, apartó de un manotazo la cabeza de su hermano de entre sus piernas y se introdujo con rabia un par de dedos en la vagina a los que imprimió un frenético mete y saca, sus dientes se cerraron con fuerza y sus labios entreabiertos temblaban ligeramente, sus oscuros y profundos ojos cargados de lujuria estaban fijos en los de su hermano.

Amalia seguía con el rápido mete-saca de su mano en su vagina, el genital femenino no puedo resistir tamaña presión y de pronto la negrita saco la mano y la vagina cual si tuviere vida propia, latía como un corazón y al tercer o cuarto latido un impresionante chorro de liquido vaginal broto con fuerza de su interior bañando totalmente el rostro de su hermano Jaime que apenas se había apartado unos centímetros de los muslos de su hermana,  recibiendo con alegría el tibio baño y recogiendo con su largo apéndice bucal gran parte de la espectacular corrida.

.- Muy bien hermanita, esto no se ve cada día. Dijo relamiéndose.

Amalia, totalmente extenuada se acostó sobre las húmedas baldosas de gres y quedo allí descansando del tremendo esfuerzo realizado.

Daniel y Jaime pasaron por la ducha y abriendo el grifo se mojaron para refrescarse del tremendo calor que azotaba la terraza.

Después de secarse ligeramente, ya que casi se estaba mejor mojado, ambos se dirigieron a la cocina para tomarse unas bebidas, al pasar entre las parejas formadas por Annabella y Alejandro  y Raul y su espectacular tía, se dedicaron un guiño de complicidad y siguieron hasta la nevera.

.- Oye Daniel, y si le echáramos una mano a tu padre con la nueva asistenta?

.- ¿Tú crees que necesita ayuda? . Contesto socarronamente Danny a su hermano de leche Jaime.

.- No lo creo pero, lo cierto es que la nueva asistenta de Ramón esta para mojar pan.

.- Este pícaro esta vez ha sabido escoger.

.- Según rumores tengo entendido que no la escogió él personalmente, era, bueno es una íntima amiga y compatriota de la señora Esmeralda, venía recomendada. Aclaró Jaime a su amigo

.- Bueno sea como sea, es guapa, guapa y tiene una anatomía que da vértigo.

.- Pues a por ella ¿vamos?

.- Pediremos permiso a mi padre y a ver que sale, mira ya se me esta poniendo dura, solo de pensar en ella, ja,ja,ja,ja.  Jaime, también riendo, lo agarro por la polla y dejando las botellas sobre la mesa ambos se acercaron a la sudorosa  pareja que componían Annabella y el maduro Alejandro.

.- Hola papa, veo que estas un poco ocupado.

.- Pues si hijo, ya ves aquí con Annabella, le estoy enseñando las artes del sexo anal, y parece que no le disgusta aprender.

.- Pues nada, queríamos pedirte si nos dejas participar.

.- Esto se lo tenéis que preguntar a ella.

Entretanto  Annabella al oír las voces los dos jóvenes, había volteado un poco la cabeza y los miraba con cara de lujuria.

Jaime el musculoso hijo de Emma se acerco a la joven.

.- ¿Que dices Annabella? ¿nos dejas jugar también?.

Por toda respuesta nuestra joven heroína dejo de masturbarse el clítoris y agarrando la negra verga de Jaime se la llevó a la boca y se la metió hasta los huevos, el nervudo pedazo de carne que apenas si estaba un poco morcillona, al recibir el cálido y húmedo abrazo de la boca de Annabella reaccionó como un resorte y recupero en unos segundos todo su volumen, llenando por completo boca y garganta de la joven , Jaime le sujetó con ambas manos la cabeza y las embestidas de Alejandro hacían que la verga de Jaime entrara y saliera de tal forma que parecía como si la estuviera follando por la boca.

Daniel, dándose por autorizado, se metió entre las piernas de su padre y las rodillas de Annabella, se deslizo con los codos hasta llegar a las bamboleantes tetas de la joven y empezó a mamar como un desesperado.

Se agarró el enhiesto garrote que ya lucía en todo su apogeo y después de varios infructuosos intentos y acomodaciones logró ensartar a la joven.

Su verga se hundió en la vagina de Annabella cual hierro al rojo vivo en la mantequilla, y siguiendo los compases que marcaba su padre empezó un tremendo mete y saca. Los dos endurecidos apéndices, separados apenas por unos milímetros de tejido carnoso, húmedo y tremendamente cálido abrazaron a ambos en un sugerente mar de caricias de las cuales participaba nuestra amiga Annabella, que casi sin ser consciente de lo que le estaba pasando, imprimía a su sensual anatomía los movimientos de la tremenda follada, y que por inercia transmitía a su boca, que al albergar en su interior la negra polla del joven Jaime, podía considerarse igualmente que la estaba follando por el único agujero que le quedaba libre a nuestra heroína ya que no podemos contar con los de la naricilla ya que los necesitaba para respirar.

Annabella ya había perdido la cuenta de los orgasmos que había soportado su joven cuerpo aquel día, de hecho el placer prácticamente no la abandonaba, subía o  bajaba en intensidad pero casi  era de  forma continuada.

Por unos momentos fué consciente  de que albergaba en sus intimidades las extensiones de tres hombres bien dotados y temió que entre los tres la destrozaran, que al día siguiente tendría que ir a un hospital, pero esto solo duró unos segundos, después aplicó todo su saber a conseguir que los tres se derramaran en su interior y quizás aquello acabaría satisfaciéndola por completo.

El primero en claudicar fue el padre los chicos, bueno casi padre, del otro digamos que padrino, hacía demasiado tiempo que  intentaba aguantar la corrida para complacer a su novel pareja, pero entre el morbo que sintió al ver a los dos jóvenes penetrar a la hembra que él mismo  estaba poseyendo, y la tremenda presión que soportaban sus testículos desde hacía un buen rato, anulo por completo su voluntad y agarrándose con fuerza a las tetas de Annabella dio un último impulso a sus caderas y con un berrido de bestia herida dejó que sus enormes bolas liberaran su carga de caliente y espesa leche que impelida por una fuerza invisible recorrió en una fracción de segundo los veinte centímetros largos que la separaban de su única salida y depositarse, oleada tras oleada en las entrañas de Annabella, que al notar la tibia descarga volvió a sentir como la parte  mas alta de la gráfica del placer la poseía.

Alejandro, no saco el miembro del culo de Annabella, sino por el contrario se apego mas a sus nalgas, taponando la dilata abertura con el tremendo tapón que manejaba entre las piernas, esperaría que poco a poco perdiera su rigidez y después disfrutar al ver como su semen brotaba de la perforada gruta.

Mientras tanto Annabella se aplicaba en la tremenda mamada que le estaba proporcionando al joven mulato,  su lengua no estaba dentro de la boca, estaba casi toda afuera lamiendo la parte inferior de la negra polla mientras una gran parte de ella llegaba a la garganta de nuestra amiga provocándole arcadas que poco a poco iba controlando, Jaime hacía relativamente poco tiempo que se había derramado copiosamente sobre las tetas de su hermana y creía que tardaría bastante en correrse pero aquella mujer era una fiera ansiosa de comerse su polla, aquella forma de mamar era nueva para él y los acontecimientos que se estaban desarrollando en la piscina de don Ramón no eran ni mucho menos propicias a poder aguantar por mucho tiempo lo que la naturaleza y fuerte vitalidad del joven esperaba.

En una palabra, ver como Alejandro se venía sonoramente, la lujuriosa mirada de Annabella mirándole a los ojos, mientras que de su lengua brotaban espesas babas de saliva que caían inexorablemente sobre la cara de Daniel, que no por esto dejaba de follar duramente a la  joven y los gritos que lanzaba Eleonora al ser penetrada por su querido sobrino una y otra vez a escasos metros de ellos, desencadenaron el detonante que provoco su eyaculación.

Apenas si tuvo tiempo de susurrar la pregunta a Annabella:

.- ¿ Dentro o fuera, cariño?

.- Gfffgguentrooo. Barboto Annabella preparándose para la descarga.

Apenas la palabra había salido de sus labios cuando inundaron su boca los chorros del semen de Jaime.

Trago de una sola vez la primera andanada, después aparto la verga del joven  de la boca y sujetándose la teta derecha con la mano izquierda, después de arrebatársela a Alejandro que todavía continuaba agarrado a ella, dejo que los ya débiles chorritos del mulato se derramaran sobre la voluminosa glándula mamaria y el pezón, acto seguido y sin dejar de sujetar su pecho introdujo el rebosante y carnoso apéndice en la boca de Daniel, que al notar el tibio y carnoso tetón en su boca empezó a mamar la teta como un desesperado, como si estuviera convencido de que mas pronto o mas  tarde brotaría del duro pezón un fino chorrito de leche materna.

Annabella estaba en trance, encadenaba los  orgasmos uno detrás de otro sin apenas tener tiempo de reponerse, y justo en aquel instante asumió que en un solo fin de semana en aquella casa y mientras notaba como la leche de Daniel invadía a borbotones su cavidad vaginal se había convertido en una auténtica zorra y que de ahora en adelante solo viviría para follar, después de desmayo de puro placer sobre el pecho de Daniel que aun continuaba con los espasmos de su corrida.

Con el brusco desmayo de nuestra heroína las pollas de padre e hijo salieron de sus respectivos acoplamientos y la leche de ambos se mezcló mientras se deslizaba suavemente sobre el cuerpo de Daniel.

Los tres hombres se asustaron creyendo que a la bella latina le había dado un infarto y suavemente entre los tres la depositaron sobre la mullida colchoneta con cara de susto mientras de sus vergas todavía babeaban las últimas gotas de esperma.

.- No alarmarse, no pasa nada. Les tranquilizó Eleonora al notar como la chica volvía a perder el conocimiento de puro placer.

.- ¿ Que le pasa? pregunto Alejandro acariciándola suavemente y apartando un mechón del hermoso pelo azabache de su frente. Realmente aquella criatura era hermosa aun en aquellas circunstancias y rebozada de leche por casi todo su cuerpo.

.- Esta tarde es la segunda vez que le pasa, al parecer su cuerpo no puede resistir según que dosis de placer y para evadirse se desmaya.

.- ¿Que hacemos?

.- Nada, por ahora, venga sobrinito ¿a que esperas para correrte dentro de tu tiita?. La última frase estaba dirigida a Raúl que con el incidente había aflojado un poco la marcha del bombeo, pero al oír a su tía se tranquilizó y reanudó las embestidas con mas ahínco que nunca. Su tía levantó ambas piernas y las dobló sobre los hombros de su amado sobrino y al momento noto como la verga de Raul la penetraba mas profundamente. Eleonora estaba a punto de correrse cuando Annabella se desmayó, cortándole un poquito el rollo, pero su sobrino rápidamente la hizo ponerse  otra vez a tono, aquel chico era una autentica maquina de follar.

.- Asiiii, asiii, asiii, cariño dame fuerte, que estoy llegando al cielo, asiii, asiii, asii, maaas, maaassss. Gritaba Eleonora.

.- Si tía, te deseo, voy a correrme tiita, voy a regar de leche esta hermosa rosa que tienes entre los muslos.

.- Que me vengo sobrinito, me vengo, riega mi rosa, por favoooooooor.

.- Siiiiiii, toma mi leche. Y Raulito lleno el maduro coño de su tía con el cálido bálsamo de su simiente.

Después de unos pocos minutos de descanso acarició el pelo a su sobrino que se había derrumbado sobre ella  y suavemente le dijo:

.- Apártate un poco Raul, deja que vaya a despertar  a nuestra bella asistenta.

De hecho, Annabella empezaba a volver en sí después del desmayo sin que ninguno de los tres hombres que la habían estado penetrando, se hubiera apartado de ella ni unos pocos centímetros.

.- Venga muchachos apartaros un poco dejadla respirar. Y tú Jaime acércame un poco de alcohol de aquella caja que hay en la ducha, venga moveros, rápido.

.- ¿Que ha pasado? ¿donde estoy?. Eleonora metió una almohada debajo su cabeza. Se seco con una toalla la leche de su sobrino que se deslizaba por sus muslos y cogiendo el alcohol que le alargaba Jaime y humedeciendo un Kleenex lo puso debajo de la nariz de Annabella y la hizo aspirar.

.- Venga, amor, respira profundamente, así, otra vez, muy bien.

.- Eleonora... ¿que me ha pasado?.

.- Lo has vuelto ha hacer, cariño te has desmayado otra vez de puro placer.

Al oír la última palabra de Eleonora.... "placer", volvieron a su mente de un  golpe, todos los acontecimientos de la cual había sido la protagonista indiscutible hacía escasamente diez minutos. Recordó como los tres hombres que en aquellos momentos la estaban contemplando con cierta preocupación en sus rostros,  la habían estado penetrando por sus tres aberturas corporales, como sus líquidos seminales le habían inundado los tres orificios con los cuales podía dar placer: bucal, anal y vaginal y como después de encadenar orgasmo tras orgasmo había perdido la noción de las cosas y su mente había quedado en blanco.

Se puso a llorar desconsoladamente y se abrazó con fuerza a Eleonora.

.- ¿ Que he hecho Eleonora ? soy una puta, soy una zorra, soy un monstruo sexual.

.- No eres nada de esto pequeña, eres una linda mujercita que ha descubierto un nuevo horizonte en su vida: el sexo, y disfrutas con ello.

.- Nooooo,  soy una puta, me han poseído tres hombres a la vez.

.- Exacto, y has conseguido que los tres se vinieran dentro de tí casi al mismo tiempo, esto no es ser una puta, esto es ser una artista del sexo.

.- ¿Que dices Eleonora? ¿como puedes decir esto?. Se había apartado del pecho de Eleonora y esta vio como las lágrimas surcaban el bello rostro de la chica.

.- Porque lo sé, porque se como te sientes, hace muchos años a nosotras nos paso lo mismo y gracias a Ramón aprendimos a disfrutar plenamente del sexo.

.- ¿Don Ramón?, ¿don Ramón me ha visto follar de esta manera? e incorporándose unos centímetros busco con la vista a su jefe.

Allí estaba, a menos de cinco metros del grupo, totalmente desnudo, como siempre y con una socarrona sonrisa en su rostro mirándola descaradamente mientras se masturbaba con suavidad y sin ninguna prisa el enorme cipote que colgaba entre sus musculosas piernas.

.- Buaaaa, me quiero morir, y volvió a esconder la cara entre las acogedoras tetas de Eleonora.

.- Ramón, lárgate de aquí, vete a follar con Emma,  y tú deja ya de lloriquear, vamos a asearnos un poco que estamos pringadas de leche hasta  las cejas.

Alejandro le ayudo a incorporarla y las acompaño hasta el gimnasio.

.- Pon en marcha el yacusi Alejandro, vamos a darnos un buen baño y tú lárgate también, déjanos solas, ve a pasarlo bien con tus amigos.

.- Vaya, yo quería estar un rato contigo Eleonora....

.- Pues tendrá que ser mas tarde, anda, vete, vete...

.- Ok, nos vemos mas tarde.

.- Seguro.

.- Eleonora. Musito Annabella

.- Dime cariño. La ayudó a entrar en la enorme bañera que estaba empotrada en el piso del gimnasio.

.- Creo que esto me viene un poco grande Eleonora.

.- No digas tonterías Annabella, venga enjabóname y después yo lo haré lo mismo contigo, nos secamos ponemos un poquito de crema y después te vas a la cama y descansas tranquila, mañana verás las cosas de otro modo.

.- ¿Tú crees?

.- Estoy segura de ello, por hoy ya has tenido bastante ajetreo.

.- Gracias Eleonora, si no hubiera sido por tí no se que habría pasado.

.- Venga olvídalo ya, y me enjabonas bien el culo y el coño, mete bien los dedos que quiero quedar bien limpia de todo lo que me ha entrado esta tarde, ¿lo podrás hacer?

.- Espero que si, a condición de que tú me hagas lo mismo.

.- Ja,ja,ja, que putona te estas volviendo.

.-  Ja, ja, ja, tengo una buena maestra, te quiero mucho Eleonora y apretándose contra sus pechos la beso muy dulcemente en la boca.

.- Y yo a ti preciosa, y correspondiendo al cálido beso se dejo llevar..

CONTINUARÁ.