La novia ninfómana IV los videos de Cris
En esta versión aumentada y corregida de la serie, Cris le relata el primer video de su viaje a Túnez en donde una pareja adicta al BDSM y a la humillación extrema y a otras perversidades, le cumplen un deseo perverso a Cris. Está en categoria de Dominación, pero contiene de todo.
LA NOVIA NINFOMANA
Capitulo IV
Los videos de Cris
primera parte
Los dos días siguientes antes de ver a Cris fueron días de un sentimiento extraño para mí, confuso sin saber que me pasaba, ¿Me estaría volviendo un cornudo?, ¿Un degenerado? Porque la realidad era que cada vez que pensaba en ella me la imaginaba con otros y eso me ponía a cien y acababa masturbándome.
Cuando me volví a presentar en su casa ese fin de semana, me recibió con esa cara de niña traviesa y perversa de la vez anterior, llevaba una pequeña bata transparente que le cubría apenas el monte de venus y debajo su magnífica desnudez.
__” Hola mi amor, te estaba esperando, ya tengo todo preparado para una velada inolvidable, y dime ¿has estado pensando en tu novia ninfómana?, quien lo diría, una ninfómana, de novia de un timorato, jajaja”.
Yo me sonrojé con sus ocurrencias, pero era la verdad, yo era un timorato, siempre me imaginé a mí mismo con una novia virginal y una relación apegada a las viejas costumbres, y heme aquí, con la niña más liberal y ninfómana que pude haber encontrado.
Me tomó de la mano amorosamente y pasamos a su dormitorio en donde estaba colocada una televisión enorme, y varias cajas de videos puestas muy ordenadamente en la mesa, tomó una carpeta de piel y me dijo:
--“Mira, aquí está el índice de todos los videos en orden cronológico y por categorías, esta tarde hice una selección de las que vamos a ver, no necesariamente en orden cronológico, sino de aquellos que más me gustan y que disfruté más veces viéndolos con Walter, pero, vamos querido, quítate de una vez por todas esa ropa, te quiero desnudo, quiero ver como se te empina cuando veamos mis películas y poder tomar con mi boca esa tranca que tanto me gusta.”
Y diciendo esto empezó a desvestirme mientras me besaba eróticamente.
“Lo que vas a ver tiene mucho de lo que catalogas como “sucio”, o “degradante”, pero espero que al final te excite tanto como a mí”
--“Primero te voy a contar de cómo se hicieron esas películas, esto me excita mucho porque revivo esas maravillosas experiencias y también te pondrá a tono pues te veo muy nervioso, jajaja.
--Verás, antes de ir a Túnez, todas las tardes visitaba la biblioteca de Walter, tenía una gran cantidad de películas eróticas y libros, desde lo clásico hasta lo más pornográfico, yo disfrutaba muchísimo viendo las películas, porque me daban ideas de las que quería hacer con Walter, pero más importante, hacían despertar en mí sensaciones nuevas, deseos de realizar cosas y situaciones que iba descubriendo y que me daban un morbo especial imaginándome como protagonista.
Hubo películas en las que descubrí, que hay ciertas cosas que para la mayoría son consideradas pecaminosas o sucias, producto tal vez de la religión en que se es educado, y que, sin embargo, en mí despertaban pasiones y deseos nunca antes sentidos, y que tal vez vivían dentro de mí desde mi niñez y aún no habían despertado.
--Una de esas películas, despertó en mi un deseo que podría ser catalogado por un moralista de esos que abundan hoy en día, como insano, y, sin embargo, para mí, despertó un deseo de realización, oculto hasta entonces. ¿Has visto alguna vez la película clásica de Luis Buñuel, “Bella de día” ?, ¿con una maravillosa y hermosísima Catherine Deneuve?
--Pues bien, una tarde después de haberla visto como dos veces y cuando cenábamos Walter y yo, le comenté que había dos pasajes en la película que despertaron mi mayor excitación y un deseo morboso, de vivirlos en carne propia, y que quería tener una experiencia semejante, pero, además, que las filmaran para que gozáramos juntos viéndolas.
--Una de esas experiencias, era el ir a trabajar algunas tardes a un burdel, en algún lugar oculto y sórdido, en donde se especializaban en atender clientes con manías o vicios extraños, y que yo fuera la puta más puta del lugar, aquella que gozaba satisfaciendo todos los vicios y siendo degradada al máximo.
--La otra, era la fantasía que hacía soñar despierta a Severine (el personaje que interpretaba C. Deneuve), en donde su marido la llevaba en un carro tirado por caballos, conducido por dos criados, hasta llegar a un bosque en donde ordenaba a los cocheros que la amarraran desnuda a un árbol, y después los criados agarraban un fango de excremento y se lo lanzaban mientras le decían que una puta se merecía ser bañada en mierda y ella mostraba una cara de felicidad y éxtasis.
--Walter se rio, y me dijo que era la niña más perversa que había conocido y que, cuando se presentara la ocasión me iba a cumplir esa fantasía con creces.
--Pues bien, no pasó mucho tiempo y, cuando los amigos tunecinos de Walter le hicieron saber de sus deseos de que pasáramos con ellos una semana completa, me dijo que les había comunicado que él no podía ir, pero que, si yo estaba dispuesta, que aceptaba la invitación con la condición de que en alguna de las filmaciones me cumplieran esos deseos morbosos que habían despertado en mí la película. Después de esta plática y hasta el día que partí a Túnez, no dejé de pensar un solo día en esas escenas conmigo como la protagonista principal.
--Así, ese es el primer video que vamos a ver, me hace ilusión que veas como gocé con ser humillada, y tal vez, gocemos juntos viéndola, como Walter y yo lo hacíamos. Y posiblemente descubras como, el verme ultrajada, degradada y humillada, despiertan en ti pasiones ocultas como nunca habías experimentado”.
No dejaba de asombrarme cada confesión de Cris, no me atrevía a decir nada, pues era algo insólito para mí, nunca me imaginé lo que iba a ver y lo que me excitaría al verlo.
--“Antes de ver el video, déjame contarte algunos de los antecedentes:
_Cuando llegué a Túnez, me esperaban dos de los guardaespaldas del Sr. Alamín, el tunecino amigo de Walter. Ellos me guiaron en una limousine por la ciudad y me dijeron que la mansión del Sr. Alamín quedaba en las afueras y que, a petición de él, íbamos a atravesar por algunos de los lugares prohibidos más peligrosos de Túnez, pues quería que los recorriera en forma segura y que lo iba a ver más de cerca al día siguiente.
Esto me causó una gran curiosidad llena de morbo, imaginando cosas sucias y peligrosas.
Empezamos a circular por callejones en donde proliferaban mendigos y vagos con pinta de drogadictos y criminales, ya estaba atardeciendo, lo que volvía todavía más tenebroso y sórdido el escenario. Pasamos por un lugar en donde estaban las putas callejeras, llamando a sus clientes, todas ellas feas y viejas, esto despertó en mí, un deseo morboso de bajarme y ganarles la clientela.
Uno de los guardianes me explicó, que allí estaba la peor escoria de la prostitución y que cobraban de dos a tres euros por un servicio sexual.
En el recorrido pasamos por una calle en donde había una hilera de hombres formados, haciendo cola frente a un pequeño cuartucho de apenas dos por dos metros hecho con láminas y cartones, esto me llamó la atención, y les pregunté que daban allí, y me respondieron que era el equivalente a lo que en América llamaban “Glory hole”, que el cuarto tenía agujeros en donde los hombres metían sus miembros después de pagar un euro, y una vieja puta se los mamaba. Al ver eso y oír de lo que se trataba, se despertó en mí el deseo de sentir una humillación semejante: Mamar vergas anónimas y sentirme usada.
(Esto se lo dije después al Sr, Alamín, y él, con una risilla perversa, me dijo que ya lo arreglaría para que trabajara allí un rato y se me cumpliera ese deseo).
Cuando salimos de esos lugares, llegamos a otra zona muy diferente, con grandes residencias, calles elegantes y jardines, pasamos como media hora más, hasta llegar a un lugar muy hermoso, como un Oasis en el desierto, en donde se veía una gran residencia tipo mezquita. Allí estaba el Sr. Alamín, esperando con una gran sonrisa.
Después de los saludos, me hizo pasar a un gran salón en donde estaba una pareja, él parecía japonés, era bastante bajo y rondaba los cincuenta años, vestía un smoking elegante, su pareja era una mujer hermosísima, rubia y alta de tipo Europeo y que no pasaba de la treintena, perecía una “top model”, me los presentó como el Sr. Suzuki y su esposa Katia, después supe que efectivamente había sido una “top model” alemana apenas hacía dos años.
El Sr. Alamín me dijo que los Sres. Suzuki me estaban esperando ansiosamente y que les había contado de mi relación con Walter, al que conocían por motivos de negocios, pero que también les había contado del maravilloso video que le había mostrado Walter así como de mi ilusión por revivir la escena del carruaje de la película “ Bella de día” y que iban a ser mis guías durante dos días para unas experiencias eróticas inolvidables, y que también iban a registrar mis vivencias eróticas en video para placer de Walter tal como él lo había solicitado.
Me explicó que eran afines al BDSM y sexo de degradación máxima, pero cuidarían de mí y que no tuviera cuidado de mi integridad física.
Esto me alivió un poco la inseguridad que se me manifestaba al estar en un país extraño, pero a la vez estaba ansiosa de empezar mi primer recorrido en el Imperio de los Sentidos, como ellos lo llamaban.
Al día siguiente me estaban esperando en una limousine, iban los mismos guardaespaldas, esta vez vestidos con una especie de uniforme de cuero negro que los hacia ver imponentes. El Sr. Suzuki y Katia me esperaban en el asiento de atrás, Katia, únicamente llevaba una camisa de cuero negro y desnuda completamente, una especie de collar de piel negro y con picos, semejante a un collar de perro, adornaban su cuello.
A mí me hicieron vestir de colegiala para aparentar todavía menos edad que la que tenía. Y debajo del vestido iba completamente desnuda, la faldita era tan corta que con cualquier movimiento se descubría mi culo.
Detrás del auto iba otro vehículo caravana.
Cuando subí a la limousine, Katia me dio un collar de perro con una correa semejante al que llevaba ella y me ordenó ponérmelo. Me dijo que le había entusiasmado mucho la idea de escenificar la escena de la película “bella de día”, y que la estuvo viendo varias veces con todo cuidado y que ya habían ordenado que prepararan todo, que iba a ser igual al de la película, pero mejorada, y que nada iba a ser ficticio, ni los azotes, ni las humillaciones sexuales y tampoco el “material” que se iba a usar, esto último me lo dijo con una sonrisa maliciosa, y supe inmediatamente que se refería al fango con excremento que salía en la película.”
Cris me tomó de la mano y me atrajo hacia la cama, se quitó el batín y quedamos desnudos, se recostó en mi pecho y dio el play en el DVD, diciéndome que las películas tenían sonido y estaban sub tituladas, pero que, adicionalmente me iría haciendo más comentarios.
En la cinta se veía a Cris con un vestido corto, de esos que usan las niñas en los colegios religiosos, llevaba su pelo dorado suelto e iba jalada de un collar de perro por una dama hermosísima, rubia y alta , supuse que era Katia, basado en la descripción que me había contado Cris, iban precedidos por dos hombres enormes de tipo árabe, vestidos con unos atuendos como los de los verdugos de una escena de BDSM, Katia le venía gritando a Cris en alemán, pero la película ya tenía subtítulos ----“Vamos niña puta, vas a aprender a no ser tan guarra, te voy a azotar hasta dejarte el culo sangrante”, enseguida, llegaron a un lugar con un gran árbol de ramas bajas en donde colgaban correas, allí se encontraban cinco hombres totalmente desnudos,
Eran tres negros y los otros dos tenían tipo árabe, con barbas y todos rondaban los cuarenta o cincuenta años, y eran, sin excepción, robustos, y uno de ellos más bien gordo. Allí Katia ordenó a los guardias:” Amarren a esta puta zorra a ese árbol para que le dé su castigo”. —Y en seguida le arrancó el pequeño vestido haciéndolo jirones y mostrando la desnudez de Cris,
--Me quedé pasmado viendo ese cuerpo de niña que parecía una escultura, con sus pechos pequeños pero firmes, su piel dorada por el sol, y con un pubis apenas cubierto por una tenue pelusa adolescente, su altura era casi la actual
(1.67 m).
La entregó a los guardias, quienes casi arrastrándola, la amarraron, atando una cuerda en cada muñeca, a las ramas del árbol, con los brazos separados y también amarraron sus tobillos con cuerdas atadas a unas argollas que estaban estratégicamente clavadas en el terreno para mantener sus piernas abiertas, así quedó Cris en un estado de indefensión , entonces Katia agarró un fuste, de esos que tienen varias tiras de cueros en un extremo y se lo mostró a Cris gritándole…--“ Mira puta guarra, esto te hará ser más dócil y aprenderás a obedecer a tus amos”—
Entonces la alemana empezó a dar fuetazos en las nalgas de la pequeña Cris mientras ella gritaba que tuviera piedad.
--En ese momento, Cris me susurró al oído que los fuetazos eran reales y que le dolían, pero que estaba gozando como loca.
Siguió la alemana azotándola hasta que Cris tuvo las nalgas rojas con las señas de los azotes, entonces, Katia les gritó a los hombres, que estaban hasta ese momento rodeando la escena y masturbándose mientras veían como sometían a Cris a base de fuetazos.
---¡Vamos haraganes! Traigan el fango mierdoso, vamos a darle a esta niña la mierda que merece—
Entonces uno de los hombres acerca una carretilla llena de un fango negruzco
--¿Es la mierda que encargué? Les pregunta Katia.
--Si señora, es fango hecho con mierda de caballo, de camello y de perro y alguno que otro humano.
- “Bueno que esperan ¡llenen sus manos y láncela sobre ella hasta que quede cubierta de mierda!”
Y entonces los cinco hombres toman en sus manos el asqueroso fango y lo empiezan a lanzar sobre el cuerpo de la pequeña Cris, cuando está casi cubierta, le enfocan su preciosa cara que muestra una sonrisa de placer.
Cris se acercó y me dijo al oído” Esto no es fingido cariño, estaba teniendo orgasmo tras orgasmo y me imaginaba que era Catherine Deneuve”.
Yo me había quedado sin palabras, nunca imaginé lo que estaba viendo.
En ese momento, la alemana, en el colmo del paroxismo, agarra ella también un puñado del fango y acercándose a Cris le empieza a embadurnar su cara,
y acercándose, la empieza a besar apasionadamente abrazándola, y embarrándose ella misma del fango mierdoso, al juntar cuerpo con cuerpo.
--“Mira querido”, me dijo Cris, “era la primera vez que me besaba una mujer en forma apasionada, no soy lesbiana, pero me dio un gran morbo sentir su lengua en mi boca llena del fango que lamió previamente de mi cara”.
La alemana entonces, se separó de ella y ordenó dirigiéndose a los hombres:
--“Ahora es suya la putilla, llénenle los tres agujeros con sus sucias vergas, ¿qué esperan? ¡Viólenla! Métanle la polla en su culo, en su sucio coño, y en su boca.
Los hombres desataron a Cris y la aventaron materialmente, en unas sábanas que estaban previamente en el suelo, y mientras uno le levanta las piernas para penetrarla otro se arrodilla junto a su cara y le pone la enorme verga en sus labios, y ella, sin perder tiempo la engulle ávidamente, mientras esto pasa, los otros dos se embarran la verga con el fango asqueroso, para tomar el lugar de su compañero. La alemana se empieza a masturbar mientras les ordena—“Ponedla a cuatro patas, como una perra y fóllenla por el culo” ---Entonces Katia, ya desnuda, se une a la orgia y le ordena a uno de los negros que le folle el culo mientras le dice—“Embárrame el culo de esa mierda para que resbale”—
El negro agarra un puñado del fango y se lo unta en el culo a la escultural ex modelo, __”Ya, ya está bien embarrado vamos, encúlame como dios manda, negro asqueroso” y así, mientras el negro está enculando a la alemana, los otros cuatro atienden a Cris quien no para de gemir pidiendo más, entonces Katia la llama y le dice que se ponga detrás del negro y que le embadurne el culo con el fango mierdoso., Cris agarra el fango y le mete la mano entre las nalgas esparciéndolo todo alrededor y en especial el ojete. todo esto acaba de excitar al negro quien esta frenético en su mete saca del culo de la rubia, y esta le grita a Cris—“Ahora enculate al negro con la lengua, puta”, entonces Cris mete su cara entre las enormes nalgas del negro y empieza a lamer el culo mierdoso y a meter su lengua en el sucio ojete, lo que hace que el negro lance un gran grito y eyacule abundantemente en el culo de la hermosa rubia. Cuando el negro termina los estertores de la eyaculación que vacía en el culo de Katia, esta le ordena a Cris—“Ven putita y bebe el esperma que me dejo este desgraciado.
Cris se levanta obedientemente y se acuesta boca arriba permitiendo a Katia sentarse en su boca mientras entierra su lengua ávidamente y traga el semen del negro que ella le deposita en su boca.
Termina el video cuando Katia se levanta y le ordena a Cris que se arrodille en el suelo mientras llama a todos los hombres incluidos los dos guardianes y les dice que se paren a su alrededor –“Ahora limpien a la putilla de toda la mierda que tiene”.
Todos empiezan a orinarla mientras Cris trata de lavar su cuerpo y beber el néctar ambarino que logra atrapar en su boca.
Cris entonces me empezó a besar hasta llegar a mi miembro que lo tenía casi a reventar, y me empezó a dar la mejor mamada de mi vida.
--“Mmmmm, se ve que te excitaste querido, me llenaste la boca dos veces con tu rico semen, y dime ¿Te gustó ver a tu novia degradada al máximo?”
No le contesté, en su lugar, la abracé y nos besamos largamente. “Fue lo más excitante, morboso, sucio y lujurioso que he experimentado en mi vida” Le dije.
--“Antes de pasar al siguiente video te voy a contar lo que pasó después.
--Cuando terminamos la filmación, supe el uso que se daría a la caravana que nos seguía, y es que dentro, estaba montado un baño enorme, con tina y sillones de reposo, en donde Katia y yo nos bañamos para quitarnos toda la porquería.
--Al llegar a casa estaba agotada, nunca había experimentado tantos orgasmos, Katia me llevó a mi aposento y nos recostamos en la cama quedándonos dormidas hasta bien entrada la tarde. Katia me despertó con un dulce beso en mi boca y poco a poco fue bajando por mi cuerpo desnudo hasta besar mi coño que ya estaba ardiendo en deseos, esta fue la primera vez que hice el amor con otra mujer y fue delicioso, aunque seguía prefiriendo a los hombres.
--Me dijo que cenáramos y descansara, y que el día siguiente iba a ser de reposo para recuperar fuerzas, por la mañana iríamos a la playa y después en la tarde me tenían una sorpresa, pero por lo pronto la cena iba a ser algo muy especial.
Te lo voy a relatar porque fue algo único, Katia tenía unos gustos muy exóticos también en la comida, me preguntó si me gustaban los escargots, yo le dije que me encantaban, es más, era el plato favorito de Walter y me hizo muy aficionada, me miró muy pícaramente y me dijo que estos que iba a probar eran con una receta de ella y preparados especialmente para mí.
Esa noche estábamos solas Katia y yo para la cena, nos sentamos en la sala de su dormitorio que era muy amplio, sonó unas campanitas e inmediatamente acudieron dos jóvenes sirvientas de rasgos árabes y les indicó Katia que ya íbamos a cenar, hicieron una reverencia y dieron unas palmadas, se abrieron las puertas y entraron seis negros jóvenes y atléticos “ Estos sirvientes son los recipientes vivientes de nuestra cena “ me dijo Katia, los negros eran muy altos, estaban cubiertos de sudor y lo característico de sus cuerpos era que resaltaban unos miembros enormes con un glande casi deforme por su tamaño y cubierto en su totalidad por un prepucio cuyo pellejo colgaba de una manera casi cómica, me dijo Katia que los escargots los habían preparado con dos semanas de antelación para que estuvieran bien macerados, le hizo una señal a uno de los negros que se paró justo delante de nosotras, y me explicó Katia: “ los escargots están preparados con especias y macerados en mantequilla producida naturalmente por nuestros recipientes humanos durante dos semanas”, y agarrando la verga gigante del sirviente le empezó a subir el prepucio dejando al descubierto el glande en donde se alojaba el escargot cubierto de una mantequilla amarillenta, el olor fuertísimo a marisco y orín inundó la habitación, entonces Katia con sumo cuidado se metió el glande en la boca y tomó el crustáceo saboreándolo lentamente y mirándome con la lujuria en sus ojos, luego tomó un pedazo de pan que embarró de la mantequilla que estaba en la verga hasta dejarla limpia, y al final la empezó a chupar no sin antes decirme que después de cada escargot el semen de los recipientes venía a culminar el platillo, al terminar se volteó hacia mí y me invitó a degustarlo …nos terminamos todos los caracoles que portaban los cuencos vivientes, como decía, es la comida más afrodisíaca que he comido…me encantó…uno de estos días los prepararé contigo como mi recipiente amado y viviente, ja, ja. cada una nos comimos los tres escargots que nos tocaban como aperitivo y una botella de vino tinto.
--Al día siguiente cuando regresamos de la playa me dijo.
“Nos comentó Alamín, que te había hecho ilusión hacerte pasar por una puta barata, y estar una hora en el “glory hole”, pues bien, vamos a cumplir tu deseo mi adorada niña” Me dio un beso muy húmedo y me susurró al oído, “tengo tantos deseos de ver como mamas las vergas de esos desgraciados como tú de hacerlo”.
--Esa tarde no hubo grabación, pues la ubicación y el entorno no se prestaron, pero te lo voy a relatar.
--Llegamos como a las seis de la tarde, como siempre, acompañadas de los dos guardias, Katia me dijo que me desnudara completamente “para que los clientes vean la mercancía”, dijo riéndose.
Me desnudé, y luego, como de costumbre, los guardias me pusieron el collar y me jalaron hacia la caseta. Había una cola como de diez hombres esperando. Cuando me vieron se quedaron estupefactos, yo creo que nunca habían visto una chica como yo, pues siempre esperaban a las peores putas del lugar, todos lucían como obreros y algunos más bien parecían mendigos. Uno de los guardias les grito en árabe algo como, “Hoy tienen suerte, van a pagar únicamente un dinar (aproximadamente 50 céntimos de euro) por meter sus sucias pichas en el agujero para ser mamadas por esta bella jovencita. Todos gritaban diciendo palabrotas en árabe.
--Katia me iba acompañando cuando entré al cuartillo, me dijo que quería verme y me besó en la boca. En el cuarto había un pequeño banco y dos cubetas, una de ellas con agua y un jabón, le pregunté a Katia para que eran y me respondió que la cubeta con agua y jabón la utilizaban las putas cuando la verga en turno estaba muy asquerosa para mamarla, y la cubeta vacía, para escupir el semen que eyaculaban en sus bocas. Yo le dije que no utilizaría ninguna, ella me miro con cara de perversidad y volvió a besarme en los labios.
--empezaron a desfilar los hombres, era emocionante y morboso ver vergas de todos tamaños y tomarlas con la boca sin saber cómo eran ellos, me podía imaginar algo por el tamaño y el color, algunas estaban casi flácidas e imaginaba que era de algún anciano, otras pequeñas como de algún chico adolescente, casi inmediatamente se corrían en mi boca y apenas podía tragar toda la lefa, Katia después de la mamada me tomaba de la cara y besaba mi boca buscando un poco de esperma y oliendo mi aliento, especialmente cuando la verga que había mamado estaba sucia y llena de esmegma.—Mírame querido me tragué el esperma de más de veinte hombres.
--Cuando salimos, la cola era como de cincuenta personas pues se había regado el rumor.
--Fue una experiencia fantástica, lo único que faltó fue haberla filmado, se lo dije a Katia, pero me dijo que al día siguiente iba a tener algo más excitante y allí sí estaba preparado todo para filmar sin que se notara nada.
Esa noche estuvimos platicando largamente, le pregunté si siempre había estado interesada en el sexo duro y guarro, fue entonces cuando me contó de cómo se inició en estos vicios.
Historia de Katia:
Como sabes fui una modelo profesional desde que cumplí los diez y siete años
Fue entonces cuando conocí a Bruno, él era fotógrafo profesional de modelaje y me adoptó, por así decirlo. Yo, que entonces era casi una adolescente, me enamoré perdidamente de él, sin embargo, nuestra relación no fue siempre muy romántica, él ya era un hombre maduro y con muchos vicios, especialmente las drogas y el alcohol que predominan en ese ambiente. Cada vez era más autoritario y me tenía a su entera disposición cuando él lo requería, eran más frecuentes las fiestas en donde el alcohol, las drogas, y el sexo, eran el principal ingrediente, a tal grado, que nuestra relación empezó a desmejorar notablemente, únicamente le gustaba presumir de mi compañía para exhibirme como su esclava sexual.
Fue en ese tiempo, cuando en una gira de modelaje fotográfico para una compañía muy importante de perfumes, tuvimos como sede Nueva Orleans, y después de una de las acostumbradas fiestas bacanales, salimos ya entrada la noche, Bruno, que ya estaba algo borracho, me dijo que quería que fuéramos a un barrio especial de la ciudad, cuando él estaba en ese estado era imposible no seguir sus caprichos, el barrio resultó la zona roja de Nueva Orleans, en donde proliferaban los shows de sexo en vivo, casas de juego, bares y prostitutas ambulantes, yo me sentía muy insegura caminando por esos lugares, rodeados de negros con pinta de maleantes y drogadictos, y después de estar en un antro de mala muerte con una prostituta que hacia un show fumando por el culo, le dije que nos largáramos de allí. El asintió de mala gana y al caminar por las calles ya semi desiertas en busca de algún taxi, me dijo que lo acompañara porque tenía ganas de orinar, así que, en un callejón en donde había una señal de mingitorios públicos, me dijo que pasaría un momento, lo acompañé hasta la puerta pero insistió en que entrara con él dada la hora y lo peligroso del barrio, así que entramos, el lugar era espantoso, era un cuarto de tres por tres metros oliendo horrible a meados y mierda, no había más que una especie de canal a todo lo largo de las paredes que servía como orinal, pero en realidad todo el piso estaba lleno de meados, y en una esquina estaba un único retrete sin puerta alguna, rebozando de orines y mierda, yo me quise salir de inmediato pero Bruno me detuvo fuertemente insultándome y diciéndome que ahora me tenía que aguantar hasta que terminara. Se acercó al canal y con trabajo pudo abrir su bragueta pues ya estaba bastante alcoholizado, entonces me dijo que le agarrara la verga y apuntara al canal, me dio risa y lo tomé, entonces me ordenó que me hincara mientras orinaba, yo al principio me rehusé, pues le dije que el suelo estaba asqueroso y lleno de meados, entonces me dio un bofetón y prácticamente me tiro de mis cabellos para que lo hiciera, lo hice llorando de rabia y de impotencia, pero a la vez empecé a manifestar cierto sentido de placer en lo que estaba haciendo, cuando empezó a orinar entró un negro con pinta de vago, todo sucio y medio borracho, al vernos se quedó estupefacto, y ya empezaba a retirarse cuando Bruno le llamó y le dijo que, entrara, que había espacio para los dos, él se puso a un lado de mí sin quitarme la vista de encima, viendo como Walter lanzaba un chorro inmenso de meados mientras yo le sostenía su miembro, casi al terminar Walter me gritó ¡ Ya termino! , apúrate y chúpala toda para que la dejes bien limpia!, Yo lo miré extrañada , pues nunca me había pedido algo semejante, pero al ver su cara no dudé y tome la verga en mí boca y trague los últimos chorros de orina, él se volteó hacia el negro que no se había movido de su sitio, ni había empezado a orinar y dirigiéndose a mí me dijo ¿ Que no vas a atender igual a nuestro amigo?, diciéndole al negro, “vamos, aquí a mi puta le gusta sostener vergas mientras mean, ándale querida, no hagas esperar a nuestro amigo”.
Entonces me acerqué, hincada como estaba, al lado del negro, y abriéndole la bragueta, le saqué su sucia polla sosteniéndola hacia el canal, el negro comenzó a lanzar una gran meada, mientras Bruno, que estaba a mi lado empezó a masturbarse. Cuando el negro estaba por acabar me dijo Bruno,” ¿Qué esperas, puta?, vamos chúpala”, yo tomé la verga que todavía lanzaba pequeños chorritos y se la empecé a mamar sin importarme lo mal que olía y lo sucia que estaba, no es que no hubiera chupado otras vergas antes, sino que yo estaba acostumbrada a pollas olorosas a loción y muy aseadas, había leído de que en los penes no circuncidados y sin aseo se acumulaba una sustancia llamada esmegma, pues bien, esta olía a sudor, a sexo y orines y tenía una gran cantidad de esa sustancia alrededor que yo tenía que chupar, pero todo esto, en lugar de repugnarme, encendió más mi lujuria y lo metí en la boca empezando a saborearlo como si fuera el mejor manjar, pues para entonces ya estaba ardiendo por dentro.
Entonces Bruno, al ver que el negro iba a eyacular en cualquier momento, le dijo, “ ¿No quieres follártela?, el negro volteo con cara de incredulidad y le hizo un signo de si, entonces Bruno me dijo que me pusiera en cuatro, yo no quería apoyar mis manos en ese piso, pero Bruno materialmente me forzó y me dijo que me apoyara con las manos en el canal y me quitara las bragas, así lo hice y sentí como mis manos se embarraban de los meados anónimos y otras cosas, el negro ni siquiera se quitó los pantalones para metérmela en el coño, que ya estaba húmedo con mi calentura, estuvo unos minutos metiendo y sacando su sucia picha mientras Bruno se seguía masturbando en el paroxismo de su malsana excitación, entonces, no pudiendo más, eyaculó en el canal de orines, directamente delante de mi cara, que estaba a escasos centímetros de la cloaca, y le dijo al negro que no se corriera dentro de mí y le señaló el canal, cuando se salió de mí apenas alcanzó a acercarse al canal y eyacular copiosamente en él, mezclándose con el esperma de Bruno y los meados anónimos que estaban estancados formando una nata asquerosa.
Entonces como punto final me dijo que lamiera el esperma y que no dejara ni una gota, y así, me tienes lamiendo el meadero sucio de semanas mientras Bruno se reía, y, para terminar, el negro escupió en el canal y no necesitó decirme nada para que yo lo buscara de inmediato con mi lengua y lo tragara.
Cuando salimos nos fuimos al hotel y después de un buen baño en la tina de hidromasaje, hicimos el amor como nunca, y ¿sabes que le dije?, que teníamos que repetirlo al día siguiente, y así fue, al día siguiente volvimos al mismo sitio, y esta vez entraron cinco negros.
Este fue el principio de mi afición por este tipo de satisfacción sexual, pero no duró ni seis meses pues Bruno murió de una sobredosis, después, en una de mis giras a Japón conocí a mi esposo y nos compenetramos muy bien en nuestras preferencias sexuales o vicios, según quieras llamarle.
Te platico esto, pues mañana, en nuestra última excursión hice el guion basándome en esta experiencia que tuve, claro ampliada y mejorada y sobre todo filmada para la posteridad,ja,ja,ja.”
“Esta filmación la dejaremos para después, es por el estilo del DVD que filmamos con mis amigos de Barcelona que creo que ya la viste, yo les di la idea de cómo hacerla basada en este film de Katia y les gustó mucho, aunque la original es un poco más fuerte y prefiero que lo veas después, te adelanto que se hizo en un bar de putas a orilla de una carretera vecinal, habían arreglado con el dueño de que iba a estar unas horas limpiando los retretes y atendiendo a los clientes que hicieran uso de ellos e incluso servir de retrete si así lo desearan, ya te podrás imaginar cómo estaban aquellos retretes.
Pero ya estuvo bien por hoy, mi amado, ahora cenaremos unas estupendas ostras que encargué especialmente para esta ocasión, y así estarás listo para que mañana veamos mi filmación favorita, esta tiene un valor especial para mí, y la gocé muchas veces viéndola con Walter y después, cuando estaba sola, la veía para masturbarme. Es la primera vez que experimente la zoofilia, pero no te diré más, quiero que sea una sorpresa para ti.”
Cris pasó una bandeja con varias ostras vivas de Galicia que había encargado especialmente para esta ocasión, descorchó una botella de un Champagne estupendo y nos recostamos en la cama a degustar el opíparo manjar.
Cris me pasaba las ostras y delicadamente me las ofrecía en una cucharilla especial, luego, tomó una ostra en la boca y me la dio en un beso sumamente erótico.
“¿Te gustan las ostras como te las estoy ofreciendo?”, Me preguntó maliciosamente.
--“Ahora te las voy a dar con un sabor especial…con sabor a mí.”
Entonces se acostó de espaldas y abriendo las piernas expuso su hermosa vagina hinchada por la excitación, y separando los labios vaginales con una mano, con la otra depositó una ostra en su sexo ya lubricado por sus jugos, y me dijo:
“Ahora prueba las ostras a la Cris”.
Yo me abalancé y tomé la ostra con la boca, saboreándola y dándole un beso en sus labios llenos de deseo.
Después me dijo:
, “Ahora toca mi turno querido, túmbate en la cama y déjate hacer”.
Yo seguí sus órdenes como hipnotizado ante tal voluptuosidad, tomó mi verga ya erecta, la descapuchó y depositó un pedazo de ostra, para después subir el prepucio cubriéndola y me dijo:
“Déjala un momento para que se macere en tus jugos, mientras, voltéate y acuéstate cómodamente boca abajo mientras yo te hago el amor como yo solo sé”.
Diciendo esto, se montó sobre mi espalda y empezó a besarme empezando en la nuca, para después lamerme lentamente toda la espina dorsal hasta llegar a mi culo, lentamente me abrió las nalgas y me dijo al oído:
“Esta ostra va a tener un condimento más fuerte”.
Abrió mi culo levantándome la cadera ligeramente y empezó a lamerme el ojete susurrándome cosas como, Mmm me deleita el olor y el sabor de tu mierda, y abriendo el ojete precipitó una ostra en el para después absorberla, diciéndome:
“Deliciosa, ahora voltéate que creo que la otra ya está en su punto, ¿no crees?”
Me volteó y tomando mi verga bajó el prepucio, y antes de que resbalara la ostra se la metió en su golosa boca, y mientras deglutía el crustáceo
me susurró al oído “Sabe doblemente a marisco”.
Yo ya no podía soportar más, tenía una erección de caballo, al verme, Cris me dijo:
“Espera, deja un poco para mi platillo final, y acercando el plato de ostras con una mano, con la otra tomo mi verga y empezó a masturbarme hasta que casi en un grito comencé a eyacular grandes cantidades de semen directamente en las ostras, cuando me hubo exprimido hasta la última gota, tomó el plato con las ostras rebozando de esperma y empezó a comerlas de la forma más erótica que haya visto, cada vez que comía una, la siguiente la tomaba en la boca y me la daba a degustar.
Fue una experiencia única.
Después caímos abrazados como dos perfectos amantes (que lo éramos) y le dije que me había hecho sentir el hombre más feliz y que desesperaba por ver el DVD que era tan especial para ella.
Continuara …