La novia de mi amigo

Me entrego su virginidad, siendo infiel. Su cuerpo me llevo a la locura.

Todo comenzó cuando llevaba 6 meses con mi novia, que lo sigue siendo, por aquellas fechas, una amiga de mi novia, que no conocía llego a la ciudad. Mi novia me la presento como una amiga, y no le di mas importancia en ese momento, aunque a decir verdad era guapa, pelo moreno por los hombros, ojos marrones, una carita de niña, en ese momento lucia una camiseta, con un pantalón vaquero, que no permitía ver mucho mas allá.

Con el paso del tiempo fuimos quedando a menudo con su amiga, pero al mes, encontró novio, un amigo mío, y empezaron a salir, aun lo siguen haciendo. Por lo cual ya nos veíamos menos, aunque normalmente solíamos salir a tomar copas juntos los fines de semana.

Todo seguía normal, hasta que un día, la amiga de mi novia se empezó a convertir en una obsesión para mí. Ese día llegamos a un local que tenemos con los amigos, mi novia y yo, mi novia llevaba una minifalda con un top, muy guapa, y me dijo que había quedado con su amiga en que se pondrían lo mismo, aunque no le preste mucha atención.

A la media hora llegaban su amiga y el novio y era verdad su amiga estaba simplemente impresionante, al entrar no pude evitar fijar mis ojos en ella, con el pelo liso, un top ajustado que dejaba ver sus pechos, no muy abundantes pero si muy redondos y perfectos, dejaba ver su vientre, musculado como a mí me gusta, y llevaba una minifalda, que apenas le cubría medio muslo, de ahí hacia abajo lucia unas piernas bien torneadas, fruto de su trabajo de gimnasio, y acababa con unas sandalias de tacón que aumentaban aun mas su sensualidad.

Aquella noche no ocurrió nada, pero yo ya no podía quitármela de la cabeza, por lo que no para de imaginarme esa imagen vista, de todos modos, creí que ella también se fijo en mi, aunque no le dimos importancia, esa noche acabe haciendo el amor con mi novia.

Los días siguientes, trascurrieron como si nada, pero un día, decidimos ir los cuatro a la piscina a pasar el día, allí fue donde empezó nuestra relación que hoy en día sigue oculta, al llegar nos fuimos a cambiar al vestuario con mi amigo, al salir nos estaban esperando, las chicas, mi novia lucia un bikini que dejaba ver sus encantos, pero mi mirada se clavo en su amiga, que con un bikini de tipo pantalón estaba para comérsela.

Después de comer, nos fuimos a la piscina, la amiga de mi novia y yo solamente, en el agua no se que paso, pero se desato nuestro deseo, y nos dijimos que nos gustábamos pero que ambos estábamos comprometidos, pero que no se podía quedar así. Así que decidimos que buscaríamos un rato para estar solos.

El día acabo y al final del día, pensé en el momento en que pudiera verla de nuevo, mi novia trabajaba mañana y tarde, y su novio por la tarde, aunque no solía madrugar, así que pensé que podríamos quedar por la mañana temprano con cualquier excusa, y así vernos y aclararlo todo.

Quedamos para el día siguiente, a las 8 de la mañana en el local que tenemos, con la excusa de ir a limpiar y arreglar unas cosillas. A

A la mañana siguiente me levante, duche y salí hacia el local, llegue con antelación, a los 5 minutos llego ella, vestida de manera muy provocativa, una minifalda que parecía un cinturón ancho, unas sandalias de tacón, y un top palabra de honor, en definitiva, muy guapa y provocadora.

Al entrar al local, empezamos a limpiar y demás, aunque nuestras miradas se buscaban cada vez mas, al final me decidí a dar el paso, y la tome por la cintura y la bese, me dijo que que hacia y le dije que era un arrebato, a lo que ella respondió con un beso en los labios, largo y húmedo.

Me quede paralizado, aunque en breve reaccione, la tome por la cintura y la lleve a un colchón que tenemos, allí comenzamos a besarnos, dejándonos llevar, ella me desnudo y empezó a besar todo mi cuerpo, yo me estremecía de placer, no podía aguantar mas y le quite el top, dejando a la vista sus dos preciosas tetas, las cuales acaricie y bese, al mismo tiempo le dije que se tumbara y me dejara hacer, le bese en los labios y comencé: empecé por el cuello, lo acariciaba, besaba, le volvía loca, baje a los senos, los bese con locura y con delicadeza, baje por su vientre, bien formado, mientras tanto acariciaba sus piernas que era lo que más me gustaba junto con su culo, le di la vuelta y comencé a besarle la espalda, hasta llegar a su trasero el cual devore con locura, que rico estaba.

La despoje de su tanga, y comencé a lamer su sexo el cual estaba ya húmedo, me encantaba y a ella se le veía gozar, en ese momento me dijo que le tocaba a ella, comenzó directa a mi pene, el cual estaba erecto, me quito la camiseta, y el pantalón al ver el bulto se sorprendió de su tamaño, me bajo el slip, y directamente acaricio mi pene, el cual iba a reventar, en ese momento se lo introdujo en la boca, y comenzó a chuparlo todo, pese a su tamaño se esforzaba en introducirlo entero, entonces fui yo quien le dije que parase, paro y nos colocamos para hacer un 69, fue escandaloso, ambos entregados al máximo, ambos acabamos en un orgasmo casi simultaneo.

No abrazamos y besamos, para entonces yo ya me daba por satisfecho, pero me dijo que no, comenzó a besarme el pene y volvió a ponerse erecto otra vez, y me dijo que la follara, que era virgen y quería perder la virginidad conmigo, saque un preservativo, me lo coloque y ella sin decirle nada se coloco encima, no noto dolor alguno, puesto que lo hicimos con dulzura, aunque después se puso a cabalgar sobre mi a la vez que yo movía mi cintura para darle mayor placer, estábamos entregados al placer, a continuación me puse yo encima y colocándola en mis piernas le introduje mi pene, ahora con rabia y seguimos así un rato, para acabar, decidimos hacerlo de pie, y ambos acabamos de nuevo con un orgasmo que fue escandaloso.

Tras eso, nos abrazamos y besamos.

Luego ambos volvimos a casa, desde entonces buscamos los momentos libres para tener sexo, puesto que de lo contrario se nos notaria.

Desde entonces le soy infiel a mi pareja aunque he tenido varias historias mas, esta fue la primera y la más especial.

Un saludo a todos.