La noche que preñé a mi hermana
Unas copas, una peli porno, y un secreto que nos acompañará toda la vida.
La ausencia de mis padres durante unos días en casa provocó un hecho que jamás podremos olvidar mi hermana y yo.
Dos dias llevábamos ya solos en casa Eva y yo, 19 años ella , algo menos yo, aprovechando la oportunidad de la ausencia de nuestros padres Eva invitó a tres amigas a casa para cenar y tomarse unas copas en casa, habiendo cenado con ellas cuando se dispusieron a tomar copas decidí meterme en mi habitación para echar unas partidillas del antiguo "tetris", quizás un par de horas después las chicas se marcharon y nos dejaron nuevamente solos, pero mi hermana mostraba un estado "alegre" debido a las dos o tres copas de más que había ingerido.
Con la marcha de las amigas decidí volver al salón donde estaba la tele y sentado junto a mi hermana descubrí que lo que las chicas habían visto en ese televisor era una película porno, así me lo demostraba la cinta de vhf que estaba junto al reproductor de video, como buen adolescente apreté el "play" del reproductor sin el consentimiento de mi hermana, la imagen de dos jovenes follando apareció repentinamente en la pantalla.
El estado de embriaguez que presentaba mi hermana impidió que me arrebatase el mando a distancia de aquel reproductor, en cualquier caso ella decidió quedarse allí sentada mientras la cinta de video seguía su curso, el pudor de la presencia de mi hermana no impidió que mi pene comenzase a cobrarse una dura erección por la imagenes que estaba viendo.
Se me notaba bastante la erección escondida tras mi fino pijama, las risas de mi hermana comenzaron a sentirse cuando observó el estado que presentaba mi miembro :
- Jajajaja, pero ¿ que te ha pasado ? ¿ te has puesto cachondo ?, haber enseñamé lo que tienes escondido ahí detrás.
Me moría de la verguenza ante aquella situación, pero sin duda ninguna el estado de calentura en el que me encontraba era obvio, con algo de forcejeo mi hermana con su alterado estado embriagatorio consigió bajar mi pijama y dejar al descubierto mi erecto miembro.
Me levanté enseguida del sofá para huir de esa absurda situación, pero mi hermana creo que estaba mas caliente que yo aún :
- ¿ Quieres que te enseñe mis tetas ?, yo ya he visto tu juguetito, si quieres te enseño yo el mio.
Ese momento de confusión donde debes de tomar una decisión en décimas de segundo se me presentó en aquel momento :
- Bueno........ si tu quieres....... enseñamelás...
Con firme decisión mi hermana se quitó por completo la parte de arriba de su vestuario dejando al desnudo sus grandes tetas con sus dos grandes pezones.
Me gustó y me calentó aún más de lo que estaba ese pedazo de par de tetas que mi hermana me mostraba al desnudo.
En cualquier caso ella seguía sentada en el sofá y yo de pié justo a su lado con mi erección aún presente, con la desnudez de sus pechos alargó sus brazos a mi pijama y bajó mis pantalones :
- ven acércate -
Colocando mi erecto miembro entre sus tetas comezó a moverlas con sus manos tratando de masturbarme con sus pechos, el pudor había dado paso a la pasión y el deso.
Eva movía sus pechos de manera continua mientras mi pene se encontraba abrazados por ellos, conforme Eva masturbaba el miembro comenzó a bajar su cabeza hasta que su lengua hizo contacto con la punta de mi miembro, entonces fue cuando quitó sus manos de sus pechos y agarró con ansias mi pene con sus manos introduciéndoselo por completo en su boca.
Eva sacaba una y otra vez su lengua lamiendo por completo el erecto falo, lo chupaba y lamía con ganas, con deseo, debido a su apreciable borrachera superada por su calenturiento estado Eva disfrutaba de lo lindo con mi polla dentro de su boca, su lengua se pegaba al miembro como una ventosa y la pasaba desde su base hasta la punta del capullo, allí en el capullo se detenía y trataba de succionar como queriendo exprimir el miembro, eso hacía que mis ganas de correrme fueran aparenciendo de manera rapida, pero finalmente Eva decidió cambiar su postura.
Retirando su boca del miembro Eva aún con una falda puesta y con grandes botas que le llegaban a las rodillas se tumbó en el sofá no sin antes quitarse las bragas, abrió sus piernas y me invitó a que me pusiera encima de ella :
- Tumbate encima mia, y méteme solo la puntita pero no empujes.
Haciendole caso nuestros miembros comenzaron a rozarse cuidadosamente, mi pene solo se quedaba en la entrada de su orificio vaginal, podía sentir el humedo calor que proporcionaba sus labios vaginales en la punta de mi glande, Eva sostenía con su mano mi miembro para que no se introdujese dentro de ella, al mismo tiempo lo manejaba haciendose rozar la punta del capullo por donde mas le gustaba a ella y por donde más placer sentía, Eva comenzó a entorpezer su respiración y pequeños gemidos y jadeos comenzaron a ser presentes en aquel salón.
Los jadeos y gemidos de Eva me estaban excitando aún más de lo que estaba, Eva presentaba ya un extasiado estado de placer cuando quitó sus manos de mi miembro y allí tumbada debajo de mi y con sus botas puestas en sus piernas al vuelo clavó sus manos en mi culo, sin nada que me lo impidiese mi polla se colocó justo en la entrada de su vagina, haciedola caso solo tenía mi puntita dentro de ella, pero sus manos apretando mi culo sumado al calentón del momento hicieron que en un momento de empuje todo el miembro se introdujera dentro de ella.
- Aaaaaaaaaaaaaaaaaah, la has metido entera, aaaaaaaaaaah.
Intenté sacar mi polla de su caliente y humedo coño, pero sus manos clavadas en mi culo lo impedieron, no solo no quiso que me saliese de ella, además apretó con más fuerzas sus manos en mi culo y comenzó a gemir y jadear de manera mas sonora y constante, yo comencé a acelerar mis movimientos de pelvis y sin sacar mi polla de su cuevecita ella adaptó su ritmo pelvico al mio, su respiración jadeante, su estado de embriaguez sin supongo saber que era su hermano el que la follaba comenzó a gritar fuerte :
- Me corroooooooooooo, me corroooooooooooooo, aaaaaaaaaaaah
Al mismo tiempo que decía esas jadeantes frases mi polla comenzó a escupir su leche dentro del caliente coño de mi hermana, ella no se daba cuenta de que me estaba corriendo hasta que mi ultima gota de leche no inundó por completo el interior de su cuerpo, el caso es que mientras me corría ella parecía perder el conocimiento con sus gemidos e incesantes jadeos, que fue en definitiva el detonante de mi corrida.
Por unos segundos Eva me abrazó cuando terminó su orgasmo con mi polla aún dentro de ella, pero como un rayo se levantó cuando notó el calor de mi leche queriendo salir de su vagina :
- ¡ ¿ Pero que has hecho ? ! ¡ te has corrido dentro !.
Como si la borrachera hubiese desaparecido de repente Eva corrió al cuarto de baño a lavarse cualquier resto de leche que yo le había depositado en su interior. Sin decirnos nada más me fui directo a mi habitación sorprendido por lo que había pasado, Eva y yo no volvimos a hablar de aquella noche hasta que su test de embarazo resultó sorprenderla con un incestuoso positivo.
Aquello tuvo repercusiones sin lugar a dudas, las cuales supimos afrontar y remediar en este caso como verdaderos hermanos de sangre...