La noche más hermosa de mi vida (2)

Continuo contandote mi encuentro con Valeria

Tienes razón. Si digo que fue la noche más hermosa de mi vida debo hacer sentir que verdaderamente lo fue.

En todo momento me sentí muy excitada. No podía creer que por fin me encontraba completamente sola en casa. Yendo y viniendo de una habitación a otra, escuchando el sonido de mis zapatos altos. Sintiendo el ligero calor que las medias daban a mis piernas. Sintiendo la tela de la tanga entre mis nalgas. El vestido lo sentía ligero y fresco. Buscaba todos los lugares posibles en que se viera reflejada mi imagen de mujer. Me sentía radiante, feliz. Encendí el pequeño radio que me acompañó todo el tiempo.

Tanta era mi emoción que me olvidé que no había probado alimento. Me dirigí a la cocina a preparar un platillo sencillo pero sustancioso. Era nueva para mí la sensación de estar vestida en la cocina. En la puerta que da al patio alcanzaba a ver mi imagen. Una mujer no muy alta, delgada, con un trasero delicioso, unos senos pequeños, cocinando.

Serví mis alimentos y me senté tomando mi vestido por los costados, crucé mi pierna derecha y encendí el televisor. Así transcurrió media hora.

Al finalizar me dirigí al baño a lavar mis dientes y a retocar mi maquillaje. En ese momento pensaba en cual sería el siguiente conjunto de prendas a utilizar. Por fin me decidí. Únicamente cambie mi vestido por uno de likra mojada en color rosa, corto y ajustado. Este me trae lindos recuerdos ya que es el primero que me compré.

En ese momento nuevamente sentí cómo se levantaba mi pene, me producía una ligera molestia ya que hacia que la tela de la tanga entre mis nalgas se ajustara más (cual molestia, en verdad sentía delicia y placer).

Me decidí a realizar acercamientos de mi trasero estando yo en las poses más sugestivas:

Déjame decirte que sólo te mostraré las que a mi juicio son las mejores tomas, tu puedes opinar acerca de ellas. Escríbeme, dime qué opinas, no me voy a ofender, al contrario, me ayudas a mejorar.

Rato después me decidí por el siguiente conjunto: La misma tanga, pantiliguero y encima un vestido en color negro ( alguna vez me dijeron que me vi elegante, tú ¿qué opinas? ):

Te has de preguntar quién me toma las fotos y yo te respondo que nadie. Mi secreto es el siguiente: como la cámara es digital y tiene su pantalla LCD pongo un espejo detrás de ella, ahí alcanzo a ver qué es lo que está enfocando, obviamente la dirijo hacia donde sé que hay más luz y hacia donde está el mueble (un sillón en este caso). Realizo varias tomas. Cuando estoy satisfecha las que no me gustaron son eliminadas y entonces me preparo para el siguiente cambio de ropa.

Por el momento te dejo con este relato, aún faltan varias imágenes así que no dejes de buscarme. Me fascina estar compartiendo contigo este lado de mi personalidad. Nos vemos en el siguiente relato. Un beso de Valeria