La Mujer 2 y 3

Pasaban los días y no podía sacarme de la cabeza a aquella mujer, tenía algo especial.Era enigmática y atractiva, pero lo que más me impresiono de ella fue como me cuido esa noche, y no solo me cuido, sino que me reto por estar ebria. Ni mi madre me había retado así, pero ella sin ningún problema lo hizo.

Nunca fui muy cariñosa con mi familia y amigos, nunca me deje amar sinceramente.Yo los amo y ellos también, solo que soy un tanto fría.

Esa noche fue una de las primeras veces que me deje cuidar por alguien, y no me sentí cuidada por un ser querido, sino por una mujer que a penas había conocido esa noche. Mi cabeza no entendía que le pasaba con aquella mujer, no podía sacarla de mis pensamientos. Decidí hablarle.

-Gracias por cuidarme la otra noche.

Le mande ese mensaje temprano, ese día no fui a la facultad y como aún no trabajo y no tenía nada que hacer estuve todo el día esperando su respuesta. Pasaban las horas y no recibía ningún mensaje,por alguna razón me puse triste, quería que me respondiera, ser impaciente no es bueno y menos cuando no terminas de entender lo que te está pasando. ¿Quien era esa mujer que me estaba volviendo loca?

Por fin me llego un mensaje, era de noche ya, no puede evitar sonreír al ver que era ella. No pude esperar ni dos minutos para contestarle.

-Debes ser la niña tonta que tuve que cuidar la otra noche.

-Si lo soy, pero deja de retarme que no eres mi madre.

-Mira que rápido responde la nena... ¿Estabas esperando mi respuesta?.

Tenía razón, no se lo podía negar. Quería que me hablara , pero ella fue la que dejó su número en mi celular, claramente estaba buscando esto, que le hablara y lo había logrado.

-Te recuerdo que fuiste vos la que dejo su número en mi celular.

-Pero no te obligue a que me escribieras, eso lo hiciste vos solita.

Mierda,la maldita tenía una respuesta para todo, no era buena táctica hacerme la combativa con ella, no sabía que responder. Al final decidí ser lo más directa posible.

-¿Para qué querías que te escriba? No me gusta dar vueltas, decime lo que queres.

-No te hagas la enojada conmigo nena, me debes una por cuidarte la otra noche. Mañana venís para mi casa y cenamos juntas, no acepto un no por respuesta.

Obviamente le dije que si, me paso la dirección y arreglamos el horario. Dijo que no era una cena formal ni nada por el estilo, que vaya cómoda, y que solo sería una cena entre amigas. La última parte no creo que sea verdad, veremos qué pasa mañana.

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Al otro día me levante temprano, me vestí y fui a la parada del colectivo. Tenía más de una hora de viaje hasta llegar a la facultad, odio levantarme tan temprano, me pone de mal humor.

Pero hoy era un día diferente, a la noche tenía una cena entre “amigas”, estaba un poco emocionada por la situación, no veía la hora de llegar a su departamento.

No le preste atención a ninguna de las clases que tuve, sólo pensaba en ella, era tan linda. Revise si tenía foto de perfil,definitivamente tenía , no me dijo su nombre pero si podía ver su foto, que mujer tan enigmática.Tenía el pelo bastante corto, de color negro, resaltaba sus ojos, eran verdes claro o algo celestes, una mezcla divina. Su sonrisa era hermosa, tenía una dentadura perfecta. Llevaba una remera escotada, se notaba que tenía una buena delantera. Hasta ahí era lo que mostraba la foto, tendría que esperar a verla esa noche para saber más de ella. De la noche que nos conocimos no recordaba mucho por lo que tampoco me acordaba de ella. Solo recordaba su voz y el beso que me dio en la mejilla antes de irse.

Llegue a mi casa, faltaban dos horas para verla. Me di una ducha rápida y me vestí, no suelo vestirme muy arreglada, prefiero lo cómodo, y como me había dicho que no era una cena formal, no pensé en vestirme de gala ni nada por el estilo.

Al final me decidí por una remera blanca básica con un poco de escote, un short negro, unas zapatillas blancas y una campera de jean.

La distancia en auto entre mi casa y su departamento era de media hora, pedí un taxi, a las cinco minutos llego. El viaje se me hizo interminable, me estaba poniendo nerviosa. Me debatía entre ir con esa mujer que me estaba volviendo loca o volverme a mi casa como una cobarde.

Sin darme cuenta ya estaba en la puerta de su departamento,le pague al taxista y me baje. Me quede parada un par de minutos antes de tocar timbre, realmente estaba muriendo de los nervios. Cuando por fin lo hice, se escuchó una voz, era ella. Solo dijo “ Hola nena”.

Habilitó la puerta para que entrara y me dirigí al ascensor, era un edificio de 16 pisos, ella vivía en el último. Cada piso que pasaba era uno menos para encontrarme con ella, la deseaba tanto y por fin estaba por ocurrir.

Ahora solo una puerta nos separaba, toque con dos golpecitos tímidos, escuché que me decía “ Ya voy”. Y al fin la estaba viendo, estaba hermosa, pero demasiado formal. Me había dicho que era una cena tranquila. Llevaba el pelo suelto, un pantalón de vestir y un blazer azul oscuro , una blusa blanca y zapatos negros con taco. Era alta, mucho más que yo, y con esos tacos puestos muchísimo más.

Me quede mirándola unos segundos, me tenia hipnotizada.

-¿No me vas a saludar?- lo dijo con una sonrisa de oreja a oreja.

-Si disculpa,hola...estás muy linda - estaba mirando al suelo, mi timidez me estaba invadiendo.

-Gracias nena.. pero salúdame bien - se acerco y me dio un beso en la mejilla- Recién llego del trabajo por eso estoy vestida así, entra y espérame en el sillón, en cinco minutos vuelvo, voy a ir a ponerme algo más cómodo.

Me hizo pasar y la esperé donde me había dicho, veremos como transcurre la noche.

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