La muchacha que vendió su cuerpo por dinero (2)

El primer día de Lucía en PPD.

Recomendado leer el anterior relato para comprender este, si tal cosa no quiere ser efectuada dejaré a continuación un resumen para ahorrarles tiempo :

Lucía es una chica con normas estrictas en casa, y su madre está satisfecha con ella hasta que un día saca una mala nota en un examen. Como castigo le obliga a entrar a PPD (Perversiones Por Dinero), un lugar donde los hombres dan ordenes y las mujeres obedecen, y a cambio son compensadas

económicamente.

Un beso se fundió en el cuerpo desnudo y dormido de Lucía, concretamente en su abdomen. Despertó. Era su madre.

-Hoy es el día de tu iniciación. Vístete con la ropa más provocativa que tengas.

Helena se sentó en el sofá para esperar a su hija, y al rato apareció : lucía una minifalda blanca, una camisa del mismo color con un dibujo extraño, y unos tacones blancos bastante altos. Su madre se acercó a ella, y sin más contemplaciones metió la mano bajo la falda.

Lucía agachó la cabeza y se limitaba a maldecir al destino.Quedó sorprendida cuando su madre le sacó las braguitas que llevaba puestas.

-¿Que es eso de ropa interior? Prometí que eras una guarra. Ahora no me falles.

-Yo no soy una guarra, mamá...

-Jaja...no me jodas, hija...te espié chupando pollas, coños, y te corriste en mi mano. No seas maleducada ni mentirosa, marrana.

Helena vio las piernas de su hija llenas de flujo vaginal.

-Cochinita mía...

Fueron hasta un local parecido a un bar, hasta que entraron en una puerta y llegaron al sótano ; látigos, vibradores, cruces de madera donde seguramente ataban a los sumisos, cuerdas, y algunas cosas más.

Ahí estaban todos los miembros del PPD ; los sumisos de rodillas, los líderes de pie, sonriendo, y Gabriela delante de todos, sin saber qué hacer.

Su madre se desnudó y se puso en pie. Ella era de los líderes.

Todos miraron a Gabriela, y se quedó inmóvil hasta oir las palabras de uno de los líderes :

-Desnúdate.

Ella obedeció, pero por un reflejo se tapó pechos y vagina.

-Fuera manos.

No obedeció.

Dos de los líderes le apartaron las manos y se las sujetaron detrás, tocando el culo.

Quien estaba hablando prosiguió :

-Soy el primer líder, y fundador de PPD. Espero que te comportes bien en la presencia de todos y cada uno de los miembros, pero sobretodo en la mía.

No te diré mi nombre, prefiero que me llames Líder, sin más.

-Sí lider...-agachó la cabeza.

-Bien. Todavía no estás dentro de PPD del todo, antes deberás pasar cinco pruebas que todos los sumisos han pasado antes de entrar aquí. ¿Quieres

oirlas?

-Sí, lider.

-De rodillas.

Obedeció, y el lider empezó a hablar :

-Bien...Estas son las pruebas :

Primera prueba :  te follarán 10 de los líderes. Los que yo elija. Tendrás los ojos vendados, y te harán lo que deseen. Sin protesta.

Segunda prueba : vendrás conmigo a un bar cualquiera, un bar público, y ahí obedecerás mis ordenes.

Tercera prueba : estarás atada 24 horas a una cama, estarás sola o con alguien según me plazca. Ojos vendados, y mordaza.

Cuarta prueba : esta noche irás desnuda al aire fresco, a elección mía.

Quinta prueba : Sorpresita.

Y por cierto...Las pruebas se benefician solamente con 50 euros.

-¿No podré saber cuál es la quinta, Líder?

-No hasta que la realices.

Esa noche, Lucía pasaría la primera prueba, y empezaría la segunda...

Dos de los líderes acompañaron a Lucía a un lugar extraño donde había una cruz. La ataron a la cruz, de forma que quedase con brazos y piernas abiertas. Las cuerdas eran fuertes, no podría escapar jamás sin ayuda de los líderes. Eso la aterrorizaba. Fue vendada, y amordazada. Era una sensación horrible, aunque de entrega total.

Llegó el primero, y empezó a lamerle el coño por detrás. Se sentía ofrecida, prostituida, violada.

Luego embistió su coño y se corrió en su espalda/culo.

La segunda le quitó la mordaza y la obligó a comerle el coño.

El tercero solamente quiso comerle el coño, escupirla, y que mease encima suyo. Y eso hizo, con muchas dificultades, Lucía estaba estresada. Y le quedaban siete.

Aunque los siete siguientes solo se la follaron. Terminó llena de corridas.

La limpiaron dos sumisos en una ducha, y fue vestida como una princesa, con una falda y una camiseta elegantes. El líder fue con ella hasta el bar.

-¿Preparada?

-Preparada.

El líder le dio un pequeño azote en el culito en plena calle.

Esa noche, no había hecho más que comenzar...