La mama de Alexis, forzada en la cocina
Los lamentos de la señora Rocío solo me excitaron mas y teniendo el completo consentimiento de mi amigo lleve mi verga hasta su orificio anal y comencé a presionarlo
ese día Alexis y yo terminamos de entrenar y como era costumbre nos encaminamos hacia su casa, en el camino comenzamos a charlar de la universidad y de las chicas que nos gustaban, pero Alexis también me contaba de su madre, así es, Alexis sostenía una relación bastante cercana con su madre, claro que para dos chicos de 21 años ansiosos de conocer los placeres del sexo aquella relación nos parecía mas morbosa que prohibida, y es que además la señora roció era una mujer que a sus cuarenta y tantos años lucia un cuerpo bastante exuberante y en especial sus nalgas, era todo un agasajo verla cuando caminaba por su casa contoneando su gran trasero, así que siempre ansiaba que llegara el sábado para poder verla y disfrutar de lo que Alexis le hacia,
-oye ¿y esta tu madre en casa?,
-claro, siempre esta los sábados,
-y crees que se puedaaa....
-que, ¡morbosearla y manosearla!,
-si,
-jajajaja...claro y déjame decirte que se acaba de comprar unos leggins que hacen que sus nalgas se le vean tremendas,
-¿pero crees que este de humor?,
-claro, y si no quiere pues la forzamos... jajajaja
Alexis era un tremendo pervertido, su madre le dejaba hacer de todo con ella y el en ocasiones era bastante pasado, pero eso me fascinaba ya que siempre salía yo beneficiado,
Cuando llegamos a su casa dejamos las cosas en el patio y fuimos directamente a la cocina, Alexis saco dos refrescos de la nevera y nos sentamos en el desayunador y comenzamos a charlar del partido,
-vaya, ahora si estuvo intenso el juego,
-bastante, pensé que no ibas a anotar,
-lo mismo pensé pero ese pase que me mandaron fue la victoria,
Continuamos charlando cuando de pronto apareció la señora rocío,
-muchachos ¿como están?,
Alexis de inmediato le contesto,
-algo cansados,
-Alexis, me hubieras dicho que ibas a venir con Arturo, ¡mira como tengo el fregadero!,
Yo tratando de no hacer sentir mal a la señora roció le conteste,
-no se fije señora roció, ni siquiera lo había visto,
-que caballeroso eres Arturo, en un momento los lavo y me siento a charlar con ustedes,
El fregadero quedaba justo frente a nosotros, así que la señora roció se puso de espaldas y en ese momento pude constatar que en verdad los leggins que llevaba estaban tan ajustados que se le metían tremendamente entre sus nalgas provocando que la curvatura de sus carnes se le marcara bastante bien, Alexis al ver que me había dado cuenta de eso choco levemente la punta de su pie con el mío a la vez que me cerraba un ojo, yo solo sonreí y continué observando las nalgas de su madre,
-oye roció y no vas a salir hoy,
-no Alexis, estoy algo cansada,
-veo que te pusiste tus leggins nuevos,
-si, ¿como se me ven?,
-algo ajustados o ¿tu que opinas Arturo?,
Era más que obvio que Alexis deseaba iniciar un cachondo juego así que le seguí la corriente,
-se ve muy bien señora roció,
-gracias Arturo,
-bien...yo diría que sus nalgas se le ven tremendas, déjame decirte que siempre que vamos a la plaza deja a todos los hombres boquiabiertos con su contoneo,
La señora roció al escuchar el atrevido comentario de su hijo solo comenzó a decir,
-¡Alexis!, ¡que atrevido eres!,
-es la verdad mama, tan solo ayer fuimos a la plaza y dos tipos lograron meterle mano, puedes creerlo Arturo,
-¡Alexis por favor!...
En ese momento Alexis se levanto y llevo su silla justo a un lado de su madre y mientras se sentaba comenzó a decir,
-mira Arturo, cada día se le ponen mas duras,
Y sin decir mas Alexis sujeto una de las nalgas de su madre y le dio un fuerte apretón
La señora roció al sentir los tocamientos de su hijo echo su cuerpo hacia delante a la vez que exclamaba,
-¡aaayyy...! espera Alexis,
-solo deja que Arturo sienta como tienes de duras tus nalgas, ven Arturo acércate,
Claro que yo no me hice del rogar y al igual que el lleve mi silla hasta donde estaba la señora roció y teniendo el consentimiento de Alexis pose mi mano en su otra nalga y comencé a frotarla,
-mmhhh...pues si están bastante duras,
La señora roció algo nerviosa volteo a verme y solo me contesto,
-gracias por el halago Arturo,
Pero Alexis deseaba irse con todo y continúo frotando las nalgas de su madre
-mmhhh...mira que duras las tiene, ¡vamos, apriétaselas un poco mas!,
Deje de acariciarla y cerré un poco mi mano apretando una de sus nalgas, la verdad es que si se sentían bastante duras y podía sentir la tibieza de su piel a traves de la tela de los leggins,
-la verdad si están bastante firmes,
-claro, puedes darle unas nalgadas para estar seguro,
Su madre al escuchar las palabras de Alexis exclamo,
-¡noooo...Alexis!, ¡deténganse!
-vamos roció, solo estamos viendo que tan duras tienes tus nalgas, no te pongas así,
Los dos continuamos manoseando y apretando las nalgas de la señora roció, ella al sentir nuestros tocamientos dejo de lavar los trastes y comenzó a mover su cuerpo de un lado a otro tratando de evitar nuestras caricias,
-¡ya chicos! ¡Ya es suficiente!,
Pero Alexis estaba dispuesto a saciar sus deseos con su madre,
-vamos roció no te pongas así, solo te queremos tocar un poco,
-¡no Alexis!, ¡ya deténganse!,
Alexis no hizo caso y continuamos con los manoseos, mi mano subía y bajaba recorriendo sus carnes por completo podía sentir como en momentos la señora roció apretaba sus nalgas y estas se ponían aun mas duras y yo claro aproveche para apretárselas mas fuerte provocando que ella lanzara un gemido
-¡ayyyy...arturooo!, tranquilo,
al igual que Alexis pase por alto los lamentos de ella y continué con los manoseos, podía ver como las manos de Alexis recorrían las piernas de su madre, mientras que ella solo se movía de un lado a otro hasta que después de algunos instantes Alexis exclamo,
-¿que te parecen Arturo?
-pues me parecen bastante firmes y duras,
-ni que lo digas, pero que te parece si le bajamos los leggins,
La señora roció al escuchar a su hijo exclamo,
-¡no Alexis que no traa!..
-¡no traes quee..!
Alexis sujeto los leggins de su madre y de un jalón se los bajo casi hasta las rodillas y en ese momento Alexis exclamo,
-¡pero mira nada mas!, ¡si no lleva nada debajo!,
Las nalgas de la señora roció quedaron completamente al descubierto y no se si era por la excitación del momento pero podía jurar que lucían mas grandes y mas firmes que antes y Alexis de inmediato poso sus manos sobre las nalgas de su madre y comenzó a nalguearla provocando que ella de nuevo exclamara,
-¡no seas tan tosco Alexis!,
-vamos roció, solo será un momento,
Alexis le soltó dos nalgadas mas a su madre y le dijo,
-por que no te recargas mejor sobre la mesa,
La señora roció volteo hacia atrás y resignada nos dijo,
-esta bien, solo no se propasen mucho,
así con los leggins a medio bajar camino hasta la mesa y se reclino en ella dejando sus nalgas a nuestro alcance,
-a ver ¿así esta bien?,
-claro, solo queremos darte una buena manoseada,
Alexis de nuevo poso una de sus manos en las nalgas de su madre y comenzó a sobarsela lentamente,
-pero mira que belleza Arturo,
Al ver que la señora roció estaba ya completamente dispuesta comencé de nuevo con los manoseos,
-¡vamos Arturo disfrútalas!,
Continué sobando las nalgas de la señora roció y ella comenzó a mover sus caderas de un lado a otro mientras en tono de suplica nos decía,
-solo no sean muy bruscos por favor,
Alexis y yo continuamos con el magreo, mis manos saltaban de una nalga a otra apretándolas y sobandolas, pero Alexis después de unos minutos sujeto los dos glúteos de su madre y los separo un poco a la vez que me decía,
-mira su culito, vamos, tocaselo,
Hasta ese día únicamente Alexis me había permitido manosear a su madre y darle algunos repegones pero se ve que ahora seria distinto, así que tremendamente excitado lleve mi dedo índice hasta el orificio anal de su madre y comencé a presionarlo, lo que provoco que ella intentara enderezarse,
-¡yaaaa, deténganse!
Pero Alexis de inmediato se levanto y apoyo su mano sobre la espalda de ella impidiéndole enderezarse,
-¡estate quieta roció!,
La señora roció sabia que no tenía otra opción así que solo se quedo quieta y metió su cabeza entre sus brazos, mientras exclamaba,
-¡ya deténganse, por favor!
Alexis me miro y me hizo una seña de que me levantara, yo sabia lo que el deseaba, así que me levante y me pare detrás de ella y me baje el short y saque mi miembro que para ese momento ya estaba algo erecto y comencé a restregárselo en medio de sus nalgas,
-¡nooooo...detenganse!
Los lamentos de la señora roció solo me excitaron mas y teniendo el completo consentimiento de mi amigo lleve mi verga hasta su orificio anal y comencé a presionarlo, la señora roció al sentir la inminente penetración comenzó de nuevo a moverse pero Alexis movido por el morbo apoyo su cuerpo sobre el de su madre inmovilizándola completamente y comenzó a alentarme a que la penetrara,
-¡ya metesela de una vez!
Apoye mis manos en las nalgas de la señora roció y comencé a introducirle mi verga ella al sentirse penetrada comenzó de nuevo a moverse pero el peso de Alexis la mantuvo quieta y aproveche para meterle mi verga de un empujón,
-¡aayyyy...nooooo...sacalaaa...sacalaaaa!
De nuevo ignore los gritos de la señora roció y comencé un mete y saca lento, podía ver como el orificio anal de la mama de Alexis se dilataba tremendamente cada vez que mi verga entraba, mientras que el no apartaba la vista de las nalgas de su madre podía ver en sus ojos el morbo que sentía al ver aquella escena,
-¡vamos, metesela duro!,
Apreté con mas fuerza las grandes nalgas de su madre y me comencé a moverme mas rápido lo que provoco que las nalgas de la señora roció rebotaran tremendamente,
-mira Alexis, que rico se mueven las nalgas de tu madre,
-jajaja...si, esas nalgas se hicieron para disfrutarse,
Continué con aquel mete y saca mientras que la señora roció no dejaba de moverse e intentaba mover sus piernas pero los leggins se lo impedían, estaba completamente sometida,
-¡yaaaa!...¡yaaaaa!... ¡por favor... deténganse!
Pero ninguno de los dos hacia caso a sus lamentos y durante algunos minutos mas continué sodomizandola hasta que sentí la imperiosa necesidad de terminar sujete fuertemente sus caderas y comencé a venirme dentro de su lastimado culo,
-¡arrgghhh....siiii....que buen culo tiene tu madre!,
La señora roció al sentir mis fluidos dentro de ella comenzó a llorar,
-¡noooo...por favor, yaaa!,
Satisfecho solté las nalgas de la señora roció y me aparte de ella, y de inmediato Alexis tomo mi lugar y le dijo a su madre,
-ya tranquila, solo unos minutos mas,
sujete los brazos de la señora roció mientras que Alexis se bajaba el short y comenzó a masajear su miembro y cuando este estuvo lo suficientemente erecto para penetrarla sujeto por las caderas a su madre y de un empujón le introdujo su verga, la señora roció al sentirse de nuevo penetrada lanzo un fuerte grito,
-¡noooo...Alexis...!
Alexis estaba completamente cegado por el deseo sujeto fuertemente las caderas de su madre y comenzó a penetrarla duramente mientras reía y me decía,
-jajajaja...mira...como brincan sus nalgas cuando le meto mi verga,
Eso era cierto, las nalgas de su madre brincaban tremendamente con cada embestida que el le daba aumentado nuestra excitación,
-es cierto Alexis, se ven mejor desde donde estoy que cuando la estaba cojiendo,
Los dos reímos y Alexis continuo moviéndose frenéticamente, en la cocina solo se escuchaban los sollozos de la señora roció y el ruido que provocaban las caderas de Alexis golpeando las nalgas de su madre, pero el deseaba humillarla mas y le comenzó a decir
-sii....sii...deja de quejarte roció, no me digas que tu culo no esta acostumbrado a recibir verga,
La señora roció entre lamentos y con voz entrecortada le contesto,
-ees...ees...es que eres muy brusco..oo..oo,
Alexis sin dejar de penetrarla le contesto,
-jajajaja...no exageres, si todos los viernes recibes a tus amantes por la puerta chica,
-¡nnooo..nnooo...yaaaa..deejameeee!
Alexis continuo moviéndose frenéticamente y después de unos minutos lanzo un fuerte gemido y dejo caer su cuerpo sobre el de ella,
-mmhhhh…arrgghh…siiii…..hoy te toco ración doble de leche,
La señora roció al sentir los fluidos de su hijo dentro de ella comenzó a moverse pero Alexis no la soltó hasta que termino por completo,
-ya Alexis por favor…
Alexis la soltó y después de darle dos fuertes nalgadas le dijo,
-no te pongas pesada, que mejor leche que la de tu hijo...jajaja,
La señora roció al sentirse liberada de inmediato se enderezo y nos dijo,
-son unos pesados, ahora no voy a poder sentarme en días,
Y después salio corriendo de la cocina, mientras que nosotros nos acomodamos la ropa y continuamos bebiendo nuestros refrescos,
Continuara...