La maestra de mi primo

LA MAESTRA DE MI PRIMO

Tenia tiempo de conocerla, de hecho la conocí desde que tenia 12 años, nunca me había parecido atractiva, a pesar de que me encantan las mujeres morenas,( si son negras mejor), hasta que la volví a ver, ya convertida en una profesora de literatura en una preparatoria allá en Poza rica Veracruz, no me pareció nada fuera de lo normal de hecho recordaba que me caía mal, no se por que, pero el caso es que ahora tenia que platicar con ella por que mi primo iba muy mal en su materia, así que nos empezamos a tratar ya como personas mas adultas, atrás quedaron esos niños que no se soportaban, platique con ella un par de veces, nos frecuentamos, coincidamos en muchos lugares, conocía a mi novia de aquel entonces y jamás pensé que entre nosotros llagar a haber una aventura que aun después de un año y medio ahora yo casado y con un hijo, sigue viva.

De la persona que les hablo es mayor que yo por dos años, es morena, cabello rizado y negro, (en lo particular me encanta), 168mts de estatura, medidas aprox. 96-65-90 , nada extraordinario ni del otro mundo, pero eso si es una bomba sexual. Le pondremos por nombre Ana Luisa.

Como ya les comente tenia tiempo de conocerla y mucho tiempo de no verla así que empezamos a frecuentarnos como buenos amigos Ali pasaron los meses hasta que me invito a una graduación en la escuela en la que es catedrática, por supuesto no invito a mi novia, al contrario invito a un amigo que tenemos en común, después de pasar una velada agradable mi amigo y yo nos ofrecimos a llevarla a su casa cosa que no accedió poniendo de pretexto que como mi amigo vivía lejos mejor se fuera el y yo la acompañara a tomar un taxi, así sucedió, ya en la búsqueda de auto de alquiler empezamos a platicar muy animadamente cosas relacionadas al trabajo, hasta que ella corto la platica y me dijo que esa noche en especial me veía muy guapo en ese traje negro que portaba, la verdad yo no le creí puesto que se que no soy galán, pero eso basto para que me pusiera frente a ella y le plantara sendo beso de casi 5 minutos que la dejo sin aliento.

Ella se me quedo viendo a los ojos visible mente sorprendida, pero también visiblemente excitada, con una respiración rápida y entrecortada me dijo que le avía gustado el beso que le di y sin mas ni menos me sujeto y ahora ella tomo la iniciativa, así que aproveché para acariciar sus senos por sobre su vestido, (que dicho sea de paso es la primera ves que me gusto, pues llevaba un vestido negro ajustado al cuerpo por el cual se le dejaba asomar la figura que posee), lo que ella rechazo y me dijo que no era lo que yo pensaba, que si, yo le gustaba pero que no podía ser mujer de una sola noche y que además de todo era Virgen, al escuchar sendas declaraciones casi me voy de espalda pero retome la calma y le dije que no se preocupara que yo iba a llegar hasta donde ella quisiera, esa noche solo cachondeamos como se dice aquí en mi tierra, pero eso fue el inicio de una relación tan extraordinaria que aun perdura.

Paso el tiempo y después de un mes si señoras y señores un mes de cachondeos y nada de nada, llego el día que me tendría que comer ese rico y delicioso pastelito.

Nada estaba planeado, quedamos de vernos por la tarde para platicar y de paso acariciarnos un poco, para ese entonces yo ya sabia que esa morena ere fuego puro, así que nos vimos en una fuente de sodas de que se ubica en el centro de la ciudad, platicamos un rato salimos y le dije que para no estar en la calle que fuéramos al departamento de un amigo el cual cuando me vio llegar me dijo que iba a salir pero quedaba en mi casa que no me preocupara por que regresaba al día siguiente(yo sabia que mi amigo nos dejaría solos, pero no que se iba todo lo que restaba del día y toda la noche) así que apenas mi amigo cruzo la puerta nos empezamos a besar y a acariciar apasionadamente.

Con desesperación la tome de la cara y hundí mi lengua en su boca ella me correspondió abrazándome y besándome, poco a poco empecé a acariciar su cuerpo, primero frote su espalda con mis manos, después lentamente comencé a besar su cuello, mientras mis manos lentamente bajaban hasta llegar a sus hermosa nalgas, con calma la acaricie y muy lentamente desabotone su pantalón baje el ziper y lo retire, ella se notaba un poco nerviosa pues a pesar de que ya habíamos fajado varias veces nunca llegábamos a tales circunstancias, me acerque a su oído y le dije – tranquila chiquita si tu no quieres no va a pasar nada yo no te voy a obligar—ella no me contesto y solo se remitió a mirarme a los ojos con un gesto un poco sorprendido, la seguí besando pues pensé entre mi ---ya vas ganando terreno chavo— así que ahora me tocaba quitarle la blusa poco a poco mienta la besaba y acariciaba su seno con una mano, con la otra retiraba los botones de su blusa blanca, hasta ese miento no me había percatado de que traía puesto un conjunto interior algo aniñado para su edad, pero en fin retire su sostén y empecé a besarle sus pechos, a estas alturas del partido sabia que me había adueñado ya de su voluntad.

Recorrí desde su cuello hasta donde empezaba su monte de venus con mi lengua, pues aun traía puesto su bikini ( dicho sea de paso truco que me había enseñado una amiga y con el cual me mataba de la excitación) al llegar a ese punto lentamente baje su bikini hasta que la despoje de el, y le dije -- tranquila no pasa nana aun estoy con ropa, si tu quieres no te penetro— así que seguí besándola del vientre hasta su capullo de amor, el cual tenia un aroma embriagador, pase mi lengua por el espacio que queda entre su ano y su capullo de amor y no te como se empezó a retorcer de placer, con mi lengua llegue hasta su conchita y la empecé a ensalivar, claro ella para ese entonces ya estaba lubricada, así que empecé a mamar como nunca en mi vida lo había hecho, poco a poco ella se fue desinhibiendo y se movía como vivara en el suelo, luego decidí meter mi dedo en su gruta y ella lanzo un gemido de placer.

Me incorpore y como desesperado me quite mi ropa y seguí mamando su cosita luego, cuando ella estallo de pacer me recosté sobre de ella y empecé a rozar mi fierro, que estaba duro y parecía estallar contra su concha, lo movía lentamente rozando su cavidad, primero metí la punta poco a poco lo fui introduciendo hasta que iba como a la mitad ella me dijo—hay me duele – le conteste que así pasaba las primeras veces pero que no hiciera caso al dolor que pronto pasaría, así seguí con el mete y saca hasta que en una de esas se la deje ir toda, solo dio un suspiro y luego un gemido que la verdad me éxito aun mas, empecé de nuevo a moverme dentro de ella y le dije en voz baja – lo saco?—a lo que ella respondió, no papacito sigue, entonces me moví como un loco una y otra vez cual barrena entrando en la tierra para perforar un pozo (digo mi tierra es famosa en México por el petróleo así que perdonen la burda comparación) y extraer el preciado oro negro, sobre ella me moví, hasta que después de un momento con un alarido de placer me sujeto fuertemente de la espalda y dejo de moverse yo jadeante di mis últimos esfuerzos y también derrame mi leche dentro de ella, así fue como por primera vez tuve sexo con la MAESTRA DE MI PRIMO.

Pronto les contare nuevas anécdotas que a través de año y medio he vivido con la maestra Ana Luisa y otras aventuras que reciente mente he vivido en el lugar en el que ahora trabajo, Agua Dulce Ver.