La leyenda de los Saphirts (M.D.L.S.) 2. Encrucij

El camino sigue y demuestra por si solo, que los caminos son peligrosos; nuestros compañeros de viajes tendrán que enfrentar el peligro, por primera vez.

Nuestro camino sigue, en la misma posicion; los dos alguaciles abriendo camino peleando entre ellos, Sam y yo hablando...mientras que míster peligroso, vigila los alrededores; nuestra retaguardia y a nosotros a la vez.

Empezamos a oír el sonido constante de un goteo, que resonaba en el eco de la pradera; nos paramos en seco, y nos pusimos espalda con espalda Sam y yo.

  • no temáis, son Morrocks; no son peligrosos hasta la noche a menos que les ataquen, así que sigamos andando. - suelta peligroso, parece que todos los demás lo consideran un experto; porque siguen adelante, como si nada.

Me retraso un poco para hablar con el.

  • deberías ir en el centro, aquí si pasa algo; no seré capaz de protegerte. - me recomienda.

  • solo quiero hablar contigo un momento, ¿cómo sabes todo eso, con sólo un ruido? - pregunto sorprendido.

  • me dedico a cazar y proteger las fronteras exteriores de Buena esperanza, tengo investigados a todos los monstruos de la zona...los conejos de cola de pincho, las palomas bobas; los sapos mordedores y los Morrocks, que no son muy peligrosos sino son Rojocks. - me explica tan rápido que apenas captó nada.

  • ¿cómo diferencias a unos de otros? - pregunto, intentando comprender.

-Rojocks son rojos y parecen fuego, también suenan como tal; cómo una llama o algo así, los Morrocks son verdes y suenan como un goteo. - me explica, pero aún no se que relación tienen.

  • ¿y que relación tienen? - pregunto lleno de curiosidad, pues me doy cuenta que; apenas se nada del mundo.

  • fácil, un Morrock que recibe un ataque de fuego o un golpe con una antorcha encendida; incluso que se mete en un incendio, absorbe el fuego y se vuelve un Rojocks. - termina su explicación.

  • gracias por enseñarme - agradezco, sinceramente.

  • vuelve al centro antes de que pase algo. - dice muy serio.

Asiento y vuelvo a mi lugar.

  • ¿por qué hablas con el, da miedo y parece que te trata mal? - pregunta Sam.

  • ¿miedo? A mi no me lo parece, es sabio; puede enseñar muchas cosas, tengo un radar para captar esas cosas. - confieso, ante Sam.

En un momento dado nos paramos.

  • ¿que pasa? - pregunto, entonces me fijo en que frente a los alguaciles hay tres tipos; bastante desaliñados, me temo lo peor así que me preparo mentalmente para lo que pueda pasar. Miro a nuestro alrededor, mientras finjo que estoy tranquilo; Sam se ha quedado de piedra y puede que no reaccione...los alguaciles agarran sus empuñaduras, la cosa parece complicada; peligroso esta con los ojos cerrados.

En un momento dado la conversación se tuerce.

  • ¡soltad las armas y nadie saldrá herido! - dijo el del centro, justo cuando dijo eso; aparecieron dos más por la izquierda y dos más por la derecha; tres mas por detrás, nos tenían rodeados.

Sin pensarlo mucho, al que había gritado; le tire la jabalina, le atravesó la garganta y lo clavo al suelo. Al ver eso los alguaciles, y los dos compañeros junto al muerto; desenfundaron sus armas, para enzarzarse en una batalla. Peligroso se dio la vuelta, para empezar a acribillar con sus cuchillos; a los que venían por detrás. Yo agarro mi lanza y mi escudo, mientras Sam estaba paralizado; cubrí desde dos lados, dos proyectiles que iban hacia el. Uno lo desvió con el escudo y al rotar sobre mi mismo, el otro me paso rozando el casco; había sido lento, y por poco no la cuento. Cuando uno se pone al alcance de mi lanza, use a Sam para atacar por sorpresa; mi lanza rozó a Sam, pero atravesó el estomago del atacante.

Aun con el atacante clavado, golpeo hacia detras; para el que viene por mi espalda, el impacto lo deja descubierto y uso mi escudo para degollarle. Como he soltado la lanza, saco la espada corta; mientras desenfundo me agachó para evitar el corte de una daga, y avanzó para cortar en dos al que me ha atacado. Termino de desenfundar y cuando me doy la vuelta, el tipo esta apunto de acabar conmigo con su daga avanzando hacia mi cuello y peligroso le tira un cuchillo que le asesta en la cabeza.

Jadeando y apenado me arrodilló, he vuelto a ser lento; jamás he luchado con 4 a la vez y protegido a nadie, sino fuera por peligroso hubieramos muerto los dos.

los alguaciles han acabado con los suyos, aunque el gordito tiene una herida grave; el alto solo heridas superficiales, peligroso esta rematando a los tíos y Sam empieza a reaccionar.

  • ¡oh dios tío! Te movias cómo un relámpago, eres increible; me has salvado la vida, gracias a ti solo tengo una rozadura. - me abrazo Sam.

  • he sido lento, debería ser más rápido. - digo cabizbajo.

  • ¿lento? Pero si tus pies volaban tío; yo no he sido capaz ni de moverme. - intento animarme Sam.

  • has luchado bien, no es velocidad lo que te ha faltado chico. - sentenció peligroso.

  • ¿ah no? ¿entonces que? - pregunte con curiosidad.

  • te ha faltado experiencia, costumbre de matar; y Intuir los movimientos enemigos,  has sido más rápido que yo. - argumento su respuesta y entonces entendí a mis padres, quieren que adquiera experiencia para que pueda sobrevivir en la selva negra; que a fin de cuentas es lo que me falta.

  • ¿estáis todos bien? - preguntan los alguaciles, todos asentimos; mientras Sam cuenta mi proeza...

  • ¿quienes eran? - pregunto, queriendo saber; porque iban a matarnos.

  • salteadores de caminos - soltó el alto.

  • gente de la pradera. - añade el gordito.

Tras todo esto seguimos caminando más atentos y Sam, me dice una frase que me llega al alma.

  • ¿sabes? Nunca he visto a nadie luchar cómo tu, quizás con un poco de experiencia; seas capaz de entrar y salir con vida de la selva negra. - suelta, dejándome alucinado.

  • ¿tu crees? - pregunto sorprendido.

  • ya lo creo.

Tras eso llegamos a la encrucijada y cada uno toma un camino, Sam hacia la izquierda; los alguaciles por el del centro y peligroso, parte conmigo hacia la derecha.