La lectora (final)

El desenlace de como abe21abe21 me hizo la mujer más feliz del mundo

Por la mañana me levanté muy nerviosa. Papá ya se había ido a trabajar. Pero al encender mi móvil, había un mensaje suyo:

"Hola preciosa. Si aún lo deseas, nos encontraremos en el hotel Conquistador a las 11:00"

Le respondí, por supuesto :"Allí estaré, papi". Después me di una buena ducha para estar bien limpita pare él.

Pasé la mañana sin concentrarme en las clases. Sobre las 10:30 me fui y me dirigí al hotel. A las 10:55 recibí un nuevo mensaje:

"Habitación 302"

Subí en el ascensor. Estaba muy excitada, cachonda perdida. Mi corazón se me salía por la boca, de lo fuerte que latía. Toqué la puerta 302. Abrió él. Pasé y cerró con llave. La habitación era sencillita. Un baño, una cama de matrimonio y un ropero. No necesitábamos más.

-Has venido.

-Claro que he venido, papi

Me cogió de la mano y me llevó a la cama. Nos sentamos y nos miramos.

-Aún estamos a tiempo de dejarlo y que no pase nada, Andrea

No le respondí. Simplemente me eché sobre y lo besé. Enseguida sus manos acariciaban mis tetas mientras nuestras lenguas se lamían. Yo le acaricié su ya dura polla sobre el pantalón.

-Cuanto te deseo, mi niña..Nunca había deseado tanto a una mujer.

-Ummmm y yo a ti, papi.

Me sacó la camisa y luego el sujetador. Me admiró las tetas y pasó sus dedos por mis duros pezones. Su caricia encharcó aún más mi coñito. Me hizo tumbar y llevó sus labios a uno de mis pezones. Lo lamió y lo mordió con delicadeza, arrancándome gemidos de placer. Fue alternando de pezón en pezón. Una de sus manos acarició mis muslos y poco a poco, sin dejar de acariciar mi piel llegó a mis braguitas.

-Ummm, mi niña está muy mojadita.

-Es por ti, papi...es por ti.

Me quitó las bragas, quedando entonces completamente desnuda ante él. Me abrió las piernas.

-Tienes un coñito precioso, Andrea. ¿Se lo dejas probar a papi?

-Ummmm claro que sí...

Mi padre me hizo la mejor comida de coño de mi vida. Me corrí varias veces en su boca. Sentía su lengua moverse, sin descanso, lamiendo, chupando. A veces metía dos dedos en mi coñito. Otras la lengua. Me volvía loca cuando atrapaba mi clítoris con sus labios y lo acariciaba con la punta de la lengua

-Date la vuelta, guapa.

Me di la vuelta, quedando boca abajo.

-¿Cómo pudiste pensar que tenías el culo gordo? Es precioso, perfecto.

-jijiji, era para que me lo miraras.

-Ahhh, gamberra.

Me abrió las nalgas con la mano y así pudo ver el culito bien. Yo tenía los ojos cerrados. Sentí algo suave en mi ojete. Era su lengua. Mi querido papi me estaba comiendo el culito.

-Agggg, que rico, papi...

Empujaba su lengua e intentaba meterla. Sólo podía meter la puntita, pero a mí me daba un inmenso placer. Me metió un dedo, y luego otro. El placer era indescriptible. Pero yo quería más. Quería su polla dentro de mí.

-Papi..aggg...no puedo más....fóllame ya....méteme la polla. Fóllale el culito a tu niñita.

Oí como se desnudaba, lanzando la ropa por toda la habitación. Me hizo levantar, poniéndome a 4 patitas sobre la cama. Iba a ser su perrita. La puerta del ropero era un espejo, así que nos pusimos de manera que pudiésemos ver nuestros reflejos. Vi como se ponía detrás de mi. Vi su polla dura acercarse a mi culito. Mi cuerpo temblaba. Por fin, mi más anhelada fantasía se iba a cumplir. Mi padre me iba a follar el culito.

Apoyó la punta de su polla contra mi hoyito y apretó, y apretó, hasta que se coló dentro.

-Aggggggggggggggggg papiiiiiiii

-Que apretadito lo tienes....

-Toda...métemela toda.

Siguió empujando y poco a poco su dura polla se enterró toda en mi culito. Me sentí totalmente llena. Mi padre querido tenía toda su polla dentro de mi culito. Me corrí. No pude evitarlo. No quise evitarlo. Sentí como mi cuerpo se tensaba y estallé en un fortísimo orgasmo. Mi padre lo notó.

-Ummm mi niña se está corriendo con mi polla en su culito. Y aún no he empezado a follarla...

Con cada contracción de mi orgasmo más sentía su polla dentro. Aún no había terminado de correrme cuando empezó a moverse. Primero fue despacito. Me la sacaba un poco y la volvía a meter hasta el fondo. Poco a poco fue aumentando el ritmo hasta empezar a follarme el culito como debe ser, fuerte y profundo.

-Ummmm Andrea...que culito tienes....

-¿te gusta follarme el culito?

-Me encanta....

-Aggggg y a...mi...que me lo...folles....Será tuyo siempre que quieres..Toda...yo...seré tuya...

Para aumentar más mi placer, llevé una de mis manos a mi coñito y me toqué mientras su polla seguía enculándome. En pocos segundos me volví a correr. Fue tan fuerte que quedé sin fuerzas y me caí sobre la cama, con el cuerpo atravesado por espasmos. Al caer hacia adelante, la polla se salió de mi culito. Él también estaba a punto de correrse, porque se puso sobre mi, me la clavó otra vez y se corrió en lo más profundo de mi culo. Sentí perfectamente su caliente semen llenarme por dentro y su cuerpo estremecerse.

Mi padre se tumbó a mi lado, boca arriba. Yo estaba a su lado, boca abajo. Nos miramos y sonreímos. Los dos respirábamos agitadamente.

-Mi niña...que placer he sentido...

-Y yo papi....que bien me has follado el culito.

Me apoyé sobre él y nos besamos. Luego apoyé mi cabeza en su pecho. El me acarició el cabello.

-Jamás pensé acostarme con mi hija. Pero...me excitaste tanto.

-Yo siempre había fantaseado. Pero no me atreví hasta que ...un amigo me animó.

-¿Un amigo?

Le conté todo lo de Abe21. Como lo conocí, como empezamos a hablar y como me animó a seducirlo.

-Vaya!! Pues le debo una a ese Abe21

Llevé mi mano a su polla, que estaba flojita. Lo besé en la boca, abriéndola para poder lamer su lengua. Noté en mi mano como la polla se iba poniendo dura hasta quedar bien tiesa.

-Espera un momento, mi amor. Voy a lavarme un poco.

Salió corriendo al baño. Mi padre tiene un lindo culete. Volvió enseguida. Yo lo esperaba boca arriba, con las piernas bien abiertas, ofrecida. El aceptó el ofrecimiento. Se puso sobre mi y me penetró de un solo empujón. Casi me corro. Mi cuerpo se arqueó de placer.

-Aggggggggggg

Tenía toda la polla de mi padre en mi coñito. Sobre mi, me miró a los ojos. Estaban llenos de amor. Me besó los labios, con ternura, con mucha ternura.

-Eres tan bonita, Andrea...

Me besó la frente, como cuando era niña. Los párpados. Las mejillas...Todos besos dados con el amor de un padre a su hija. Y después me besó la boca. Un beso de pasión de un hombre a su mujer. Rodeé su cintura con mis piernas y mi padre empezó a moverse. Su polla entraba y salía de mi, despacito. La sentía frotar las paredes de mi vagina. Su pubis frotaba mi clítoris, haciéndome estremecer de placer.

Mi padre, mi querido padre, me estaba haciendo el amor. Con dulzura y con pasión. No dejaba de besarme, de acariciarme.

-Ummm Andrea...mi niña....que..rico..

-Agggg si papi...ámame..

Así, despacito pero profundamente, me estuvo penetrando durante varios minutos, hasta que mi placer fue subiendo y subiendo...

-Papi....me voy a...correr......otra vez...

Se quedó mirándome a los ojos y se movió más rápido, haciéndome estallar. Yo intenté aguantar su mirada mientras me corría, pero no pude. Los ojos se cerraron solos. Cuando los pude abrir, el seguía mirándome.

-Estas preciosa mientras te corres...

-ummmm  que gustito...

-¿Tomas pastillas?

-No.

Siempre que lo hago con alguien uso preservativos, por los embarazos y por las enfermedades. Con mi padre no usé nada.

-Bueno...pues será mejor que empieces a tomarlas..

-Córrete dentro de mi, papi.

-No mi vida...no vale la pena arriesgarse...ya lo haré cuando no haya peligro.

-Lo deseo..

-Y yo...pero hay más sitios en donde...lo deseo.

-ummmm ¿Dónde papi?

Me seguía follando, cada vez más deprisa.

-Podría...follarte otra vez el culito...

-Agggggggg síiiii

-O podría....ummm....correrme en tus linda tetitas....

-Papi...

-Agggg o en ..tu ..preciosa...carita..

-ummm mi carita llena de tu leche....

-O en tu boca...llenarte la boquita...

Que bien me follaba. Como me calentaba. Me iba a correr otra vez...Estallé, atrapando su polla dentro de mi. En ese momento mi padre se salió de mí y un primer chorro largo, potente, caliente, se estrelló en mi piel, dejando un reguero desde mi ombligo hasta mis tetas. Rápidamente se acercó a mi cara. Los siguientes me los echó en mi carita. En la frente, las mejillas, los labios. Los dos últimos, dentro de mi boca. Y durante todo ese tiempo en que me bañaba con su leche yo me estaba corriendo.

Ahora los dos terminamos agotados. Descansamos un rato. Él esparció con su mano el semen de mi barriga y mis tetas. El de la cara lo llevó con su dedo a mi boca. Me lo tomé todo.

-Te quiero, papi.

-Te quiero, Andrea...

Después de descansar, nos fuimos a duchar. Nos enjabonamos el uno al otro, riendo. Y nos besamos como dos amantes. Luego el volvió a su trabajo y yo me fui a casa. Feliz. Deseaba que llegara la hora y hablar con Abe21. Tenía tanto que contarle...

-Hola preciosa.

-Hola abe.

-Leí tu e-mail. ¿Cómo fue la cosa?

-Abe, la cosa fue....m a r a v i l l o s a

-Me alegro, Andrea.

-Jamás había sentido tanto placer. Y todo gracias a ti.

-Bueno, yo sólo te di un empujoncito. Lo demás lo hiciste tú. Cuéntame. ¿qué te hizo?

-De todo..

-¿Te folló el coñito?

-Ummm sí....bien folladito.

-¿Y el culito? ¿Te folló el culito?

-Fue lo primero que hizo..Me lo llenó de su leche calentita...

-¿Y te comió el coñito?

-Me derretí en su boca

-Oye..le hablé de ti.

-¿Sí? ¿Y qué dijo?

-Que te debía una.

-Pues dile que te compre una cámara digital.

-Ya veremos...

-¿Me contarás todo lo que hagáis?

-Claro.

Ahora se lo cuento todo a Abe21, ya sea por mail o chateando. Le conté que esa misma noche me comió el coñito en mi habitación y luego yo se la chupé hasta tragarme toda su rica lechita.

Tenemos mucho cuidado para que no nos pillen. Sólo hacemos cosas rapiditas. Dos o tres veces por semana vamos a un hotel o en su coche a un sitio tranquilo y follamos a gusto. Tomo pastillas, así que ya se puede correr dentro de mi cuando quiere. Me encanta sentir como su polla me llena el coñito de su caliente semen.

Hemos hecho unas cuantas locuras. Por ejemplo, una noche, de madrugada, me desperté muy cachonda. Me masturbé recordando como mi padre me folló el culito por primera vez. Después de correrme quería más, así que sin hacer ruido me fui al cuarto de mi padre. Entré a gatas, y me puse en su lado de la cama. Oía la respiración profunda de mi padre y mi madre. Los dos dormían profundamente.

Metí mi mano por debajo de las sábanas y la llevé hasta la polla de mi padre. La empecé a tocar y se puso poco a poco dura. Él se despertó y en la penumbra me vio. Me habló muy bajito. Casi no lo oía.

-¿Pero que haces?¿Estás loca?

-Es que no podía dormir. A lo mejor un poco de leche caliente me da sueñito.

-Que nos va a pillar tu madre. Vete a dormir.

-Quiero mi leche.

Estaba claro que no me iba a ir sin lo que había ido a buscar. Así que mi padre se puso de lado justo al borde de la cama, levantó un poco la sabana y sacó su polla del pijama. A 4 patitas me acerque y me la metí en la boca. No la veía, pero la sentía. Le hice una lenta mamada mientras él acariciaba mi pelo. Si mi madre se movía, los dos nos quedábamos un rato quietos, hasta que pasaba el peligro. Luego continuaba mamando. Conseguí mi premio. Se corrió abundantemente en mi boca y me lo tragué todito. En el silencio de la noche se oyó perfectamente el sonido de mi garganta al tragar. Como él no podía gemir ni moverse, toda su tensión escapaba por la punta de su polla.

Esto lo he repetido varias veces. Ya no hablamos. En cuanto siente mi mano bajo la sábana, se coloca en el borde de la cama y me da su biberón. Esas noches duermo muy bien.

Todo esto se lo debo a un maravilloso escritor y maravillosa persona, que me ha hecho encontrar la felicidad.

Gracias, Abe21abe21

FIN