La lectora (1)

En esta historia de dos partes, una de mis lectoras cumple su fantasía de acostarse con su padre. Dedicado a Andrea

Hola a todos. Soy una chica joven, Me llamo Andrea y les voy a contar la historia de cómo cumplí mi mayor fantasía gracias esta maravillosa página. Desde siempre me gustó leer relatos eróticos, especialmente los de tipo filial. Me excitan mucho y si están bien escritos me suelo masturbar leyéndolos, reviviendo en mi mente las escenas descritas, conmigo como protagonista.

Hay muchos autores en todorelatos que me gustan, pero especialmente uno llamado abe21abe21. Extraño nick, pero me gusta mucho su manera de escribir. Unas veces es muy directo, describiendo el sexo de manera clara, caliente, morbosa. Otras veces le gusta ser más sutil, más erótico y menos directo. Muchas noches, en mi cama, me acaricio el coñito recordando su relato del día hasta correrme. Otras veces, si el relato es especialmente caliente, no puedo espera a acostarme y me toco mientras lo leo. Tengo unos orgasmos maravillosos gracias a abe21.

Una noche, mientras tenía mis dedos entrando y saliendo de mi mojado coñito (que es precioso, por cierto), recordando un relato suyo en el que una chica le hacía una paja a su padre, se me ocurrió que sería estupendo salir en uno de los relatos de abe21. Podría poner fotos mías, o incluso ser yo la protagonista de una de sus historias. Pero en su perfil no aparece su e-mail. Debe de ser para preservar su intimidad, no sé. El caso es que no podía ponerme en contacto con él.

A partir de ese día, siempre que me acariciaba por las noches pensaba en el relato y también es salir yo en ellos.  Aún no sé porque no se me ocurrió antes hablarle mediante un comentario. Le dije que me gustaría, si él quería, que pusieses fotos mías en alguno de sus relatos, y le puse mi e-mail.

Pensé que no me contestaría, pero lo hizo. Me encantó que me contestara. Me dijo que le gustaría mucho poner fotos mías, así que le mandé unas cuantas. Eran fotos normales. Yo en la playa, con amigos, etc...Le gustaron mucho, Me dijo que era muy guapa y que tenía un lindo cuerpo. Jejeje, tiene razón.

Empezamos a escribirnos. Le conté muchas cosas de mí, como que el sexo anal me gusta mucho. Tengo un culo bien puesto, la verdad. Y sensible. Si me lo follan bien tengo unos orgasmos muy fuertes.

Abe21 me pidió una foto especial, pero no tengo cámara digital y aún no he podido mandársela. En otro mail me preguntó si tenía micrófono en el ordenador. De eso si que tengo. Me decía que le gustaría conocer mi voz, así que le grabé unas frases de saludo y se las mandé

En seguida me contestó diciéndome que mi voz hacía juego con mi cuerpo. Que era una voz sexy. Que le digan a una que tiene la voz sexy es....genial.

Por la experiencia que tengo, cuando me escribo o chateo con hombres de internet, enseguida me piden sexo. Sin embargo, abe21, a pesar de escribir lo que escribe, me trató siempre con respeto. Nunca me pidió nada sexual. Fui yo la que le comenté las cosas. Es un caballero, no cabe duda.

Una tarde, mientras leía uno de sus relatos, se me ocurrió una idea. Acerqué e micrófono me empecé a grabar. Esta es la transcripción, más o menos literal, de lo que le grabé

" Hola Abe. Estaba leyendo tu último relato y como siempre me has puesto...cachonda. Me encanta como describes como el prota le folla el culito a su tía. Tengo las piernas abiertas y no llevo braguitas. Mi coñito está muy mojado, por ti. Sabes? Lo huelo desde aquí. Seguro que su olor te gustaría mucho. Y su sabor. ¿Me comerías el coñito, abe? ummmmm creo que sí.

Voy a ...aggggg meterme dos dedos dentro... si pudieses ver lo mojadita que estoy....Tengo los dedos húmedos...¿Quieres que me los chupe?....Ummmmm que ricos...Me encanta el sabor de mi coño, Abe, y me gustaría probarlo de tus labios, después de haberme corrido en tu boca...

Ummm que gustito Abe....Esta pajita que he estoy haciendo es por ti... Es una lástima que vivamos tan lejos..aggggg porque desearía que me follases el culito. Voy a meterme dos dedos en el culito y pensaré que es tu polla....agggggg ya....Me estoy follando el culito....que rico..

Estoy a punto de correrme....Estoy haciendo como el padre le hacía a su hija en tu relato. Me follo en coñito y el culito a la vez....ahhh....Aahhhhh ahhhhhhhhhhh"

La corrida que tuve fue colosal. Antes de mandarle el archivo lo escuché. Me gustó oírme  a mí misma. Pasé el día nerviosa, esperado su respuesta. Lástima que nuestro horarios sean tan diferentes, Llegó al día siguiente y la abrí.

Me decía que no se lo esperaba, pero que le había encantado. Que se había excitado mucho y que se masturbó oyéndome. Me sentí muy bien al haber provocado placer al hombre que tanto placer me había provocado a mí.

Me dijo que quería chatear conmigo, así que buscamos una hora que nos fuera bien a los dos. De noche para él y por la mañana para mí. Al fin podría hablar con él en vivo.

-Hola Andrea.

-Hola Abe...al fin

-Gracias por el archivo. Me ha gustado mucho mucho.

-Para mí fue un placer hacerlo.

-Y para mi oírlo.

-Te voy a escribir un relato.

-¿De verdad? Gracias, Abe. ¿Y de qué tipo?

-Del que tú quieras.

-Me encantaría uno filial de un padre con su hija.

-¿Te excitan de ese tipo?

-Ummmm, mucho. Me hacen...mojar enseguida.

-Pues será un relato de un padre con su hija..

-Que bien...

-¿Nunca has pensado hacerlo de verdad?

-¿El qué?

-Hacerlo con...tu padre.

-N...no

-¿Seguro?

-Bueno...tal vez alguna vez...sí

-¿Te has tocado pensando en él?

-Abe....

-Venga mujer...estamos en confianza.

-Sí..lo he hecho.

-¿Y no te gustaría que él...te tocara?

-Ummmm, si..

-¿Y qué te comiera el coñito?

-Sí.

-Andrea...

¿Umm?

-Estoy cachondo.

-Y yo.

-Me he sacado la polla.

-¿Te vas a hacer una paja?

-Sí. ¿Tú?

-Ya lo estoy haciendo...

-Ummmmm que bien...Piensa en tu padre. En lo que te gustaría que te hiciera, en lo que te gustaría hacerle.

-Me gustaría chuparle la polla.

-Ahh, seguro que a él le encantaría que su hermosa hija le chupase la polla.

-Abe....estoy muy muy mojada...pensando en la polla de mi padre en mi boca...en mi coño..y ummmmm en mi culito.

-¿Dónde le harías correr?

-Ahhhh no...lo ...sé...en donde él quisiera....¿Y tú? Si yo fuera tu hija en donde te correrías?

-Ya te dije que tenías una cara preciosa...Me correría en tu linda carita..

-Ahhhh Sí...papi...córrete en mi carita...llénamela de lecha calentita....

-Andrea...me voy a ...correr..

-Y yo......

Nos corrimos a la vez. Me encantó oír su voz mientras se corría. Después seguimos hablando,

-Está claro que deseas a tu padre. ¿Por qué no lo intentas?

-Me da vergüenza.

-¿Vergüenza?

-Además, no sé cómo hacerlo.

-Y te puedo ayudar.

-¿Cómo?

-Ayudándote a seducirlo.

-Vale, Lo intentaré. ¿Qué hago?

-Esta noche, cuando puedas estar a solas con él, ponto una bragas ajustadas y le preguntas si tienes el culo grande, Que qué opina de él. Mañana a la misma hora me cuentas, vale?

-Vale.

-Hasta mañana, preciosa.

-Hasta mañana, Abe.

Al fin le había confesado alguien mis más íntimos deseos. No sabía si sería capaz de seguir adelante con el plan de Abe. Lo pensé y al final me dije que no.

Pero esa misma noche, estaba en mi cama leyendo cuando mi padre entró en mi habitación para preguntarse sobre algo de la cocina. El corazón me empezó a latir con fuerza. Me dije que podía hacerlo. Me levanté y di la vuelta, mostrándole mi culete a mi padre. Llevaba un pantalón corto de pijama muy ceñido. sin bragas.

-Oye papi...¿Tengo el culo gordo?

El se quedó sorprendido. Me miró a mí y luego al culito.

-Esto....pues..no. No lo tienes gordo.

-¿De verdad que no? Pues a mí me lo parece.

-Que no, Andrea. Que no lo tienes, gordo. Tienes un culete precioso

-¿De verdad?

-Sí

Le di un abrazo y un beso en la mejilla.

-Gracias, papi. Eres un sol.

-De nada. Buenas noches.

Si se hubiese fijado, habría visto la mancha de humedad que tenía en la entrepierna. Me tumbé en la cama y me toqué el coñito, Me corrí enseguida. Mi padre me había dicho que tenía un culo precioso.

Al día siguiente, a la hora señalada, me encontré otra vez con Abe. Se lo conté todo.

-Estupendo. La cosa va muy bien. Esta noche el volverá a tu cuarto con cualquier excusa. Los hombres somos así

-¿Tú crees?

-Sí

-Y que hago?

-Esta vez ponte una braguitas que se trasparenten. Espéralo boca abajo, para que cuando entre te vea bien el culito. Luego te sientas y abres las piernas como descuidadamente.

-Uf, Abe.. No sé.

-Hazme caso.

-Lo intentaré.

Seguimos hablando hasta despedirnos hasta el día siguiente. Por la noche otra vez dudé, pero ya había empezado, así que continué. Encontré las bragas adecuadas y me las puse. Encima un top de pijama. Me puse a leer boca abajo.

Como Abe había predicho, mi padre apareció. Noté su mirada clavada en mi culo. Me di la vuelta y me senté en la cama.

-Hola papi.

-Hola cariño. ¿Qué tal el día?

Nunca venía a preguntarme nada por las noches. Abe es brujo, seguro. Como me pidió, abrí un poco las piernas

-Muy bien, papi

Su mirada se clavó en mi coñito. Se notaba bastante bajo la braga. Al estar yo muy mojada, seguro que mi padre notaría una mancha de humedad. Abrí un poco más las piernas. Casi se le salen los ojos. Se le puso la polla dura. Noté claramente como se formaba un bulto en su entrepierna. Le había puesto la polla dura a mi padre.

Nos miramos a los ojos. Yo esperaba que se lanzase sobre mí y me follara, pero no lo hizo.

-Buenas noches, Andrea.

-¿No me das un besito?

-Cla...claro.

Se acercó y me besó la mejilla. Yo moví la cabeza y el beso casi fue en los labios. Otra vez nuestras miradas se cruzaron, y yo le sonreí.

En cuanto se marchó, me toqué hasta correrme. Tuve que apretar la cara contra la almohada para no gritar. Estaba ansiosa por hablar con Abe y contárselo todo.

Al día siguiente noté que mi padre me miraba mucho. Lo sorprendía varias veces mirándome el culo. Si nuestras miradas se cruzaban, yo le sonreía. Llegó la hora de Abe, y le conté lo que pasó por la noche

-Estupendo. Ya está todo a punto para que te folle

-¿Tú crees?

-Seguro. Anoche después de estar contigo o fue al baño a hacerse una paja o se folló a tu madre pensando en ti.

-Ummm. ¿Qué tengo que hacer hoy?

-Hoy te pones las mismas bragas que ayer. Te tumbas boca arriba en la cama y te haces una pajita. Abre bien las piernas y mete la mano bajo la braga. Y cuando él entre, que entrara, no quietes la mano. Sólo para y lo miras.

-Uf.....

-Si pide disculpas y se va, malo. Tendremos que seguir intentándolo. Pero si se queda y cierra la puerta, ya está.

-Deseo que se quede.

-jejeje, se quedará.

-Gracias Abe.

-¿Po qué?

-Por ayudarme.

-Es un placer para mi, Andrea.

-Y para mí. Lástima que vivamos tan lejos... si no..

-¿Si no que?

-Si no iría a verte para...para que me follaras.

-Ummmmm me encantaría follarte, preciosa.

-Abe....estoy cachonda...me estoy tocando el coñito.

-Y yo la polla.

Seguimos hablando y oyéndonos gemir hasta que nos corrimos, Luego nos despedimos hasta el día siguiente. Me dijo que esperaba que tuviese muchas cosas que contarle.

Siguieron las miradas entre mi padre y yo. A medida que llegaba el momento me iba poniendo más nerviosa. Cuando me acosté y empecé a tocarme estaba hecha un flan. ¿Y si se iba y no entraba? o ¿Si se enfadaba?

Estaba muy cachonda, muy mojada. Pero no quería correrme, así que me acariciaba suavemente...Llegó la hora. El corazón me latía a mil por hora...Pero no vino. Se estaba retrasando. Quizás se lo pensó mejor y no quería que pasase nada entre nosotros.

Estaba a punto de dejarlo cuando se abrió la puerta, Era él. Me miró y luego mi mano dentro de las bragas. Mis pezones, duros como piedras, se marcaban en la tela del top.  "Que no se vaya, que no se vaya", pensaba yo.

No se fue. Hizo lo que el brujo de Abe había predicho. Entró y cerró la puerta. Se acercó a mi cama y se sentó a mi lado.

-Hola papi.

-Hola Andrea

Me empecé a tocar otra vez. Le miraba a los ojos mientras mis dedos se movían a lo largo de mi encharcada rajita. Gemía de placer. La situación era muy morbosa. Me estaba masturbando delante de mi padre, que me miraba, hasta puso una de sus manos en mi rodilla, y lentamente fue bajando, acariciando mi piel..hasta que llegó a mi bragas. Tocó, sobre las braguitas, mi mano. Yo quité la mía y el metió la suya.

Sus dedos eran más grandes que los míos, y los movía muy bien. Me los metía en la vagina y luego frotaba mi clítoris. No pude más y me corrí. Me tapé la boca con una mano para no gritar mientras mi cuerpo era atravesado por olas de placer.

-Mi niña se ha corrido.

-Ummmm papi...que rico...Lo deseaba tanto.

-Y yo....Llevo unos días deseándote como un loco

-¿Y qué deseas?

Seguía con sus dedos en mi coño.

-Lo deseo todo.

-Ummmm y yo....Deseo que me folles, papi.

-No puedo quitarme tu culito de la cabeza.

-¿Te gusta mi culito?

-Es precioso, Andrea.

-¿Me lo follarás también?

-Claro que sí.

-No puedo más, papi..Fóllame ya.

-Aquí no puede ser, Andrea. Nos podrían pillar.

-Por favor....

-No mi amor. Mañana iremos a un hotel. Estaremos más tranquilos.

-Enséñamela.

Se sacó la polla. Era una polla preciosa. De buen tamaño. Dura, venosa. Alargué la mano y la cogí. Era caliento y suave. Empecé a hacerle una lenta paja.

-Ummm, me gusta tu polla papi.

-Oh, mi niña...que rico...

Estaba muy excitado. De la punta de su polla manaba un líquido transparente. Lo esparcí con el pulgar. El gemía, y yo, ya que sus dedos me estaban volviendo loquita otra vez. No decíamos nada. Sólo nos mirábamos y nos acariciábamos. En pocos minutos me volví a correr, cerrando las piernas y atrapando su mano entre ellas. Esta vez fue su boca la que impidió que gritara. Me besó con pasión mientras me corría y no separó su boca hasta que quedé relajada sobre la cama. En mi mano seguía agarrada su polla.

Mi padre se merecía un buen premio. Así que me acerque y me metí su polla en la boca. Se la empecé a chupar. En menos de 10 segundos me estaba tragando todo su semen, que era lanzado con fuerza contra mi garganta. Me lo tomé todo, y luego se la seguí chupando despacito para dejársela limpita.

-Ummm Andrea... que gusto

Nos besamos con pasión. Acarició mis tetas.. Cuando notó que me estaba poniendo cachonda otra vez, paró.

-Será mejor que me vaya. Si no tu madre va a sospechar. Hasta mañana, mi amor. Tenemos una cita.

-Hasta mañana, papi,

Cuando se fue tuve que ir al ordenador y contárselo todo a Abe. Le escribí un e-mail y luego me acosté.

El día siguiente iba a ser un gran día.

FIN DE LA PRIMERA PARTE