La isla de los Incestos (Día 7)

La última pareja que cae en las redes del incesto...pero además con sorpresa final...la isla de los Incestos guardaba un secreto que promete dar mucho juego!!!

Día7

La isla es una bacanal por las noches. Ya casi nadie duerme. Tras las pruebas y una ligera cena todos se encierran en las cabañas para disfrutar de los placeres del incesto entre madres e hijos.

Las paredes de cañas no pueden contener los gemidos y aullidos de placer que emiten las hembras y sus machos en celo. En la intimidad, cada pareja da rienda suelta a la exitación y el deseo que habían acumulado durante la jornada. Los jóvenes amantes son incansables, y sus maduras madres saben mantenerlos todo el día calientes para que por la noche les den horas y horas de placer incestuoso.

Por las mañanas, todos se levantan cansados. Excepto Federico, que es el primero en acostarse. Mientras Macarena se pasa la noche en vela tocándose para intentar calmar la llama que la invade por dentro...

Macarena no puede dormir y a mitad de noche se levanta consumida por el deseo sexual. Su retoño duerme plácidamente, soñando con una orgía de disfraces en la que su anónima amante resulta tener el mismo tatuaje en el hombro que su madre.

Macarena necesita salir a tomar el aire y mientras contempla la vegetación exuberante se le ocurre una nueva forma de satisfacerse...

En la isla crecen diversas frutas tropicales de formas y colores diversos. Muy apetitosos para comer, y muy sugerentes cuando uno está tan caliente como Macarena. Esas bananas tan largas, los mangos duros y frescos...todos le hacen desear tenerlos dentro. Todos le evocan el miembro de su hijo y le hacen poner cachonda con sólo tenerlos en las manos...

Aprovechando la oscuridad, se pasa por la cocina y agarra un mango con forma fálica. Su primer impulso en llevárselo a la boca y notar su dureza. Para prepararlo, lo pela un poquito y deja una la punta sin pelar a modo de glande y el resto con la forma imaginaria del pene de su hijo Alfredo.

Con sigilo se va hacia los primeros arbustos buscando un lugar tranquilo para poder masturbarse con él. Cuando está a cubierto de cualquier mirada inoportuna, coge el mango fálico y lo introduce hasta dentro de su chorreante cavidad vaginal, que lo acoge con necesidad satisfecha. Lo mete y lo saca profiriendo grititos gozosos mientras cierra los ojos e imagina la polla de su nene. Cuando está bien cachonda, lo lleva a su orificio anal y comienza a dilatarlo poquito a poco mientras se pajea .Nunca lo había hecho por ahí, pero quiere entregarle esa virginidad a su hijo del alma. Comprueba que no es placentero, porque el esfínter protesta con la intrusión, pero va notando cómo se dilata progresivamente ayudado por los flujos. Cuando logra ensartarlo unos centímetros se queda quieta esperando a que termine de dilaterse el músculo. La relajación lleva a una sensación extraña, como si estuviese abierta en canal. En ese momento piensa en cómo le atrae la idea de que le sodomice su hijo y nota la piel suave de la furta abriéndose paso por el recto, como si éste lo estuviese masticando. Cuando se mete buena parte de la jugosa pulpa dentro, el orgasmo anal le invade como si fuese un tsunami que nace desde su culo y se propaga por sus generosas carnes....

  • Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh................................

El grito se oye por toda la selva como si fuese el de un animal más de la isla....Los monos, los tucanes y las serpientes sienten un escalofrío al escuchar el desgarrador alarido.

Aggggg...estalla con gran placer hasta que se corre abundantemente sobre la fruta...

Cuando acaba la lame entera para degustar su sabor maezclado con los jugos frutales...hoy dormirá algo mejor, espera...pero ansía tener la polla de su hijo dentro cuanto antes...

La prueba de hoy se llama el rescate...Las mujeres llegarán a la isla a bordo de una balsa de troncos como naúfragas y los hombres, tendrán que salvarlas con sus pequeñas canoas a vela hechas de juncos.

Las mujeres están ansiosas por tener que pasar un rato en medio del océano esperando ser rescatadas. Son llevadas en lancha motora hasta varios kilómetros de la costa y allí las dejan a todas en una balsa anclada al fondo para evitar que esté a merced de las olas.

A los chicos les dan la salida desde la playa y comienzan a navegar subidos a sus austeros botes. Santi y Carlos tienen más destreza con las velas y ponen rumbo directo hacia la balsa, en la que ondea una bandera roja. El resto hace lo que puede.

En el trayecto se comienza a formar una nube densa y amenazadora típicas del caribe. La tormenta amenaza con descargar en cualquier momento.

Carlos llega antes y carga a Paula en su bote para dirigirse a la playa. Posteriormente llegan Santi, Tono y Rodrigo, con más dificultades. Sin embargo, Alfredo sufre una rotura de la vela y tiene que ponerse a remar para ayudar a su bote a alcanzar la balsa. No es fuerte, pero pensar que su madre está sóla en la balsa asustada es bastante aliciente para sacar lo máximo de sí mismo. Le requiere un gran esfuerzo, pero cuando la alcanza está exhausto y feliz. Macarena lo besa en toda la cara asustada como está. Ha visto a su nene bregar contra las olas remando como un héroe.

Se sube a la canoa y ponen rumbo a tierra. Pero en ese momento se desata un chaparrón tropical que hace difícil avanzar. La lluvia cae gruesa y constante pero el mar está en calma. Empapado como están siguen intentando remar hacia la costa.

Alfredo no puede apartar los ojos del cuerpo de su madre. Tiene los cabellos chorreándole agua y mojándole todo el bañador. Con sus labios gruesos, su mirada felina y el pelo revuelto parece una amazona salvaje. Se le marcan los pezones duros por el frío, pero lo que a Alfredo más le vuelven loco son sus  grandes nalgotas. Esas carnes le ponen a mil cuando se pone agachada para buscar algo con lo que remar.

De repente una ráfaga de viento tumba el mástil golpeando a Macarena en la cabeza...La pobre, despistada, no lo ha visto venir y sufre un golpe que la deja sin sentido. Queda tendida en el suelo de la canoa con los ojos cerrados y la respiración agitada.

Alfredo salta inmediatamente a sujetarla. La agarra bien fuerte y la pone a cubierto bajo la vela.

Allí, protegidos de la lluvia por el improvisado techo ambos reposan y se abrazan.

  • Grácias, cariño...Estoy  muy mareada...ha sido un golpe fuerte...

  • No te preocupes mamá...remaré para llegar cuanto antes...

  • No, Alfredo...Deja los remos hasta que pase la tormenta...quédate aquí bajo para que no te mojes. Tengo frío...pégate a mí bebe...

Cuando se juntan notan el calor mútuo y eso les hace frotarse más para quitarse el frío. Afredo nota las abundantes carnes de su progenitora cómo le envuelven y acogen.

  • Abrázame fuerte, rodéame con tus brazos...

Ambos se funden en un abrazo carnal, sensual, filial....

  • Quítate la ropa mojada y yo también lo haré. Nos secaremos y así no tendremos una pulmonía...

  • Lo que tú digas mamá...

Ambos se quitan la ropa...El pene de Alfredo está tieso y muy brillante por el agua...A Macarena le parece un caramelo tan apetitoso...

  • Ven, ponte detrás y abrázame...

La lluvia sigue cayendo densamente, pero a ellos no les importa nada de lo que pase fuera de ese mundo en el que están ambos desnudos y excitados...

Tiernamente, guiándolo hacia el vientre materno, Macarena pone las nalgas en posición de recibir entre sus pliegues la salchicha de su hijito.

  • Abrázame fuerte....

Se pega a su cuerpo y la necesidad del calor del otro los aproxima aún más. El pirulo de Alfredo se frota contra el felpudito de la conchita de su madre. Es como una bola de ruleta buscando su casilla. Y vaya si la encuentra...El chochazo de Macarena es como un agujero negro que absorbe la verga de su retoño con fuerza. Una tierna y húmeda envoltura rodea su dureza acariciándola y engrasándola.

Como si se hubiese encendido un horno, el calor que desprende asciende por su pene y llega hasta enrojecer las mejillas del jovencito.

Ninguno se quiere mover para no romper el momento tan placentero. Los brazos veroniles rodean los femeninos llegando a contactar con la punta de las enormes mamas que tiene su progenitora.

La excitación de sentir sus pezones erectos al rozar su brazo le hace soltar  inmediatamente una descarga de semen dentro del humedal materno.

  • Ugggg.....

  • No te preocupes, hijo...abrázame fuerte y no tengas miedo. Aquí está tu mamita para protegarte y cuidarte....

Le pone una mano en cada pecho y se pone a acaricierle los huevos con las uñas....Macerena sabe cómo resucitar su soldadito y prepararlo para la batalla. Sus pezones están en pie de guerra y encendidos por la excitación. Sus dedos juguetones y sus besitos en los labios a su pequeño amante comienzan a dar sus frutos...El soldadito se convierte en ardoroso guerrero y descubre su roja cabeza pidiendo volver al campo de batalla.

Macarena decide cederle su virginidad en un momento tan bello entre madre e hijo...

  • Cariño, pónmelo aquí...mételo en el culo de tu madre....

Agarra la cabeza, le hace unas caricias con la punta de los dedos y la coloca apuntando a su coloradito ano. Aún está rojito de haber recibido las intrusiones frutales.

Alfredo no puede creer que vaya a follar a su madre nada menos que por el culo. Su polla crece un par de centímetros y su glande está a punto de estallar...

Lo apoya en la entrada y mira a los ojos a su progenitora e intenta la penetración...Ella, con todo el amor del mundo por su hijo se muerde los labios y relaja el esfínter como ha practicado.

La polla de Alfredo es más blanda, caliente y lubricada que el mango, por lo que busca el  lugar de menos presión distendiendo la musculatura anal como si fuese un globo hasta que descorcha la botella y penetra lentamente en el orificio tenebroso.

Un grito sale de su garganta al sentirse atravesada por la lanza de su niño....una barra de hierro candente que le penetra delicadamente...

Comienzan a sudar los dos y la transpiración caldea el ambiente que les protege del exterior. El acomplamiento es lento pero suave. Parace que Alfredo haya follado millones de culos, pero aunque lo hubiese hecho, ninguno sería como el de su amada madre...un culo nalgón para agarrar las caderotas y perderse entre sus pliegues.

  • Hijo, dame por mi culo nalgón....es vírgen y sólo será tuyo...

Alfredo dió un salto por el latigazo de placer, agarró bien las carnes de su madre y comenzó a perforar como un taladro el estrecho agujero. Las paredes friccionaban rasgándole la piel como si quisiese pelar bien su pequeña fruta.

Ella notaba la intrusión cada vez más profunda y gozaba del mete-saca tan tierno que le hace su nene. Su culito siempre será para él. Ese cilindro tiene el calibre perfecto para hacerla gozar sin dañarla y él tiene el amor y la ternura para porcularla sin dolor, sólo ondas de gozo con cada intrusión profunda en su intestino.

La follada está siendo larga y profunda, porque Alfredo quiere llegar a lo más hondo del culo de su madre y permanecer allí siempre.

Macarena quiere más y más polla y decide ponerse de pie.. Quita la vela que los cubre y sentándose de nuevo sobre el pene jugoso de Alfredo lo introduce hasta la empuñadura en su intestino....

  • Aaaahhhhhhhhhhh....Voy a darte todo el placer mi niño....

Como una amazona comienda a cabalgarlo de cara. Coge sus manos con las suyas y así se estabiliza para poder saltar y saltar sobre el nuevo mástil de la embarcación. Su culo está ya muy dilatado y acepta las acometidas del palo.

El espectáculo de ver a su madre con las carnes botando, los pechos golpeándole en la cara y el inmenso placer anal que siente en su picha le llevan a un orgasmo largo y profundo....

  • Mamá, me corrrrrooooooooooo...........agggggggggggggggg.................

  • Sí, mi nene....córrete en las entrañas de mamá....llénalas de tu lefa.....

  • Ahhhh......ahhhhhhhh.......

  • Vacíate, mi amor...dame toda tu leche en el orto de mamá...Ah, ah, ah....

Uno tras otro muchas lechadas van llenando el agujero posterior de su anfitriona...La madre ensartada como un pincho moruno va sintiendo las descargas por los saltitos de su pene y sigue succionando para conseguir toda la producción de sus peludos huevos.....

Todos los observan desde la costa alucinando con la escena de sexo filial....

Madres e hijos se miran con complicidad y se ríen del destino que les ha llevado a disfrutar unos de otros de un amor tan apasionado como lo han vivido...

El chaparrón se para y haber recuperado fuerzas pueden volver algo avergonzados, pero muy  felices por lo que ha pasado. Cuando vuelven a la tierra firme, todos les rodean para secarlos con toallas y preocuparse por su estado. La pareja se une en un beso de amor delante de todos sus compañeros, como si todos fuesen amigos con los que compartir un momento tan íntimo.

En ese momento empieza a sonar música de fiesta y todo el equipo de programa comienzan a saltar y a dar palmas....Los concursantes miran alucinando sin saber qué ocurre...

La presentadora cachonda, micro en mano se acerca a la pareja con una cartulina...

  • Enhorabuena....sois los ganadores del gameshow. "LA ISLA DE LOS INCESTOS"....

  • ¿La isla de los incestos?.

Todos se miran como comprendiendolo todo...el juego en parejas...las pruebas excitantes...las cabañas sin baño...la isla exótica....el premio del viaje conjunto....

  • Habéis ganado el concurso por ser la pareja que ha roto todos los tabúes y se ha unido físicamente en público, ante todos. Habéis certificado vuestra unión con un beso de amor delante de las cámaras. Por ello, vuestro premio será disfrutar de una vivienda para continuar vuestro amor y un viaje a Hawai donde se preparará vuestra boda y luna de miel en una playa desierta, esta vez sí, con total intimidad.

Los ganadores se miran con cariño y alegría desbordante...Macarena rompe a llorar y besa a su hijo profundamente....se lo come a besos y lo abraza...Afredo la toma en brazos se la lleva hacia la cabaña....

Las cámaras los siguen cuando caminan cogidos de la mano hasta que se encierran en su cabaña....

joven.daktari@yahoo.com

joven.daktari@hotmail.com