La humillación

Si veo que gusta y lo pedís habrá segunda parte….. relato muy intenso con muchas dosis de morbo

La humillación

Hola me presentaré me llamo belén soy casada, tengo 50 años, morena 165 delgada me conservo bastante bien para mi edad. Mi marido pasa mucho tiempo fuera por trabajo tenemos un hijo que esta a punto de cumplir 18 años.

Como todas las mañanas me levante prepare el desayuno me duche y llame a mi hijo y al ver que no venía fui a ver que pasaba y vi te tenía bastante fiebre entonces le dije de quedarse en la cama que yo tenía que salir hacer unas cosas.Me marche la verdad un poco preocupada según iba pasando la mañana y ya de vuelta para casa lo llame y me dijo que estaba mejor y eso me tranquilizo. Cuando iba a subir al autobús oí que me llamaban y al darme la vuelta me dio mucha alegría ver a un gran amigo de mi marido y mío la verdad hacía años que no lo veíamos, ya que no vivía en la misma ciudad. Nos fuimos a tomar un café y le pregunté que como él por aquí y me contó que hoy pasaría el día aquí por negocios, sin dudarlo le dije que se viniera a comer a casa cuando acabara y así veía a mi marido que llegaría sobre esa hora. Nos despedimos y como ya era tarde cogí un taxi y nada más llegar me fui derecha a ver a mi hijo ya tenía menos fiebre. me cambie y empecé a hacer la comida cuando de repente sonó el teléfono era pablo mi marido para decirme que no lo esperara para comer que no llegaría hasta bien entrada la noche. La verdad me dio un poco de pena porque no podría ver a marcos que era nuestro amigo en común. Como veía que se acercaba la hora y que marcos estaba a punto de llegar me fui al dormitorio a ponerme algo bonito y sexy querría estar guapa. Suena el timbre, lo recibo, nos saludamos y nos ponemos a conversar, y le dijo que no podía venir mi marido. nos ponemos a comer y una vez acabado me dijo tomaremos una copa, pero antes de eso fui a ver a mi hijo, le digo que estoy con un amigo y que me avise si necesita algo, él dice que ya va a dormir, que no haga mucho ruido y que deje apagada la luz de su cuarto. Entonces vuelvo al comedor y nos servimos unas copas. Estábamos muy felices conversando, y sin darme cuenta ya nos habíamos tomado casi toda la botella. Decidí ir a ver como está mi hijo, pero al levantarme pude notar lo ebria que estaba. Camine con dificultad hasta su cuarto, y cuidadosamente abrí la puerta, vi que está bien, entonces cierre la puerta y tranquilamente volví al comedor, A llegar al comedor encuentro a mi amigo de pie, desnudo y con la verga dura. Quedé un poco sorprendida, pero entre lo ebria, caliente y aburrida que estaba acepté la osada propuesta. Me acerqué a él, cogí su verga con mi mano, la masajee un poco, y le susurro al oído Vamos a mi cuarto. Pero no podemos hacer mucho ruido, acuérdate que está mi hijo.

Fuimos a mi habitación y follamos hasta quedarnos dormidos. A la mañana siguiente mi amigo se levantó y sin siquiera desayunar se marchó, lo acompañé a la puerta con el insoportable dolor de cabeza por lo que bebí la noche anterior, me despido de y al darme la vuelta veo a mi hijo en el salón y me dice

Mamá, necesito hablar de algo contigo, Me senté y conversamos:

-Si cariño, ¿qué pasa?

Anoche metiste mucho ruido cuando abriste mi puerta y la cerraste de golpe. Me desperté un poco asustado y salí a ver que pasaba. Me quedé congelada.

Te busqué en el comedor y luego fui a tu cuarto. Mi corazón latía deprisa, y noté una extraña sonrisa en la cara de mi hijo.

Entonces te vi follando con tu amigo.

Discúlpame Kevin, no le vayas a decir nada a…, ahí me interrumpe.

Espera un momento, no he terminado de hablar

Grabé con mi móvil todo lo que vi, y si no quieres que alguien lo vea, vas a tener que hacer lo que te pida. Estaba entre impactada y enojada, ¿cómo se atreve a decirme algo así? Entonces le dije que me pasara su móvil o lo castigaría, pero él respondió:

El video lo guardé en internet, y no necesito el móvil para enviarlo donde quiera.

Entonces pensé en que podría querer, ¿más permisos? ¿Más dinero?. Entonces le dije:

¡Está bien! ¡Me atrapaste! Voy a hacer lo que quieras, pero no le muestres el video a pablo (mi marido)

Ok. Tenemos un trato mamá. Quiero asegurarme que lo entendiste. Entonces se pone pie y se quita el pantalón del pijama y su bóxer, y se pone a sacudir su polla.

Ven aquí y hazme una mamada. Entré en pánico.

¡Pero Kevin, hijo, soy tu madre! ¡Eso está mal! ¿Cómo me pides eso!?

Entonces envío el video, si no vas a cumplir con tu parte. No tenía opción. Si pablo se enteraba me quedaría en la calle. Entonces me agaché frente a él, con mi rostro ante su polla. No puedo creer que me hagas esto, hijo. Pero no tengo más alternativa. Él empezó a azotar mi rostro con su polla.

No sabes cuanto tiempo llevo deseando algo así. Y con lo que hiciste me lo diste en bandeja. En el fondo es tu culpa

Ahora muéstrame que entendiste el trato. Y al decir eso dirige su polla hacia mi boca, y con la otra mano me toma del pelo.

Abrí mi boca y me puse a mamar su polla. Él movió sus caderas, metiendo y sacando su polla de entre mis labios,

Mientras sujetaba mi cabeza. Me sentía ultrajada, pero a la vez sentir como su pene crecía y se endurecía cada vez más me estaba poniendo cachonda. Me sentí avergonzada por eso, ¿cómo podía sentirme así con mi hijo?. Él seguía follando mi boca con mucho vigor, vigor que hombres mayores no tienen. Podía ver los músculos marcados de su abdomen y sus piernas. Me excitaba más y más. Sin pensarlo más tomé sus nalgas con ambas manos y lo presionaba a meter su polla en mi boca.

Que rico, mamá. Así me gusta. Me gustó escuchar la excitación en su voz. Pensé en hacer algo que lo pusiera más caliente, así que presioné un poco más su polla con mis labios y me puse a succionarlo con fuerza.

¡– Oh! ¡Eso está muy bueno! ¡Ah! Entonces tomó mi cabeza con ambas manos y movía sus caderas más lento. Después de un rato así se puso a jadear y a moverse más rápido que antes. Se iba a correr, y yo estaba a mil, ya no pensaba que era mi hijo, solo quería su polla explotara en mi boca.¡Y pude oír me corro! ¡Me corro! Trate de sacar su polla de entre mis labios. Pero me sujeto desde las nalgas y lo presiono hasta sentir sus espasmos y su leche caliente llenando mi boca. Saco su polla y se veía su semen sobre mi lengua, y me dijo trágalo.

Mamá, eso estuvo increíble. Parece que te gustó también.

El día siguió tranquilo hasta la noche, cuando mi hijo dice que va a dormir conmigo. Nos íbamos a acostar y me dice que me ponga solo un tanga porque lo calienta mucho. Me lo puse y me pide que lo seduzca. Él se recostó en la cama boca arriba, desnudo, y se masturbaba mientras me miraba. Verlo así me puso cachonda, me fui acercando a la cama moviéndome de forma sexy. Me subí a la cama y avancé hacia él caminando sobre mis rodillas, mientras tocaba mis tetas y frotaba mi vagina. Eso le gustaba. Estuve un buen rato apretando mis tetas, se levantó separo mis piernas, se pone sobre mí y me folla con mucho vigor, haciéndome sentir gran placer. En eso comienza a dar señales de que se va a correr, y no tiene puesto el preservativo,

¡-Kevin! ¡No te vayas a correr dentro! No estoy tomando pastillas!.

Intento empujarlo fuera, pero se resiste con fuerza y me dice:

Me quiero correrme dentro de ti, y tienes que hacer lo que yo quiera Entonces se puso a darme muy duro, jadeando con fuerza. El castigo que recibía mi coño me hizo perder la razón en ese momento. Yo estaba gimiendo de placer, tuve un orgasmo mientras mi propio hijo me follaba y se corría dentro de mí. Después de eso. A la mañana siguiente me dijo. Si quieres recuperar el video mañana tendrás que ponerte el uniforme de criada y estar muy sexy a la vez que obediente porque es mi cumpleaños y e invitado a unos amigos. Al oír eso me quede paralizada que pensarían sus amigos de mí, pero no me quedaba más remedio para poder recuperar el video y poner fin a este macabro juego suyo. Por fin llego el día del cumpleaños y con el fin de mi pesadilla. Llamaron a la puerta y fui abrir vestida con un uniforme de sirvienta muy sexy, al abrir la puerta había 2 chicos y una chica que yo no conocía los hice pasar al salón donde los esperaba mi hijo. Belén me dijeron sírvenos una copa en el salón, whisky para los cuatro. Cogí una bandeja con la botella y los vasos de whisky. Me dispuse a servir las copas. Entonces mi hijo dijo.

-belén quítate el uniforme

Obedecí y empece a servir las copas.

Mi sujetador color negro ofrecía una vista agradable de mi pecho. Cuando llegue a la chica esta, tiro violentamente del sujetador dejando mis tetas al descubierto

.

Me quede blanca sin saber qué hacer. Las palpo y sostuvo, sin querer empece anotar que se estaban endureciendo. Mire a mi hijo como pidiendo protección, pero ella me volvió la cara y dijo. No le mires a él, él esta de acuerdo con todo lo que queramos hacerte y a ti te conviene obedecer sin rechistar, de lo contrario disminuirá tu placer y aumentará el nuestro, Saco entonces una correa de perro que me puso al cuello.

Ahora desnúdate del todo quiero comprobar que tu coño y tu culo. Desnúdate o prefieres que lo hagamos nosotros. Obedecí un poco asustada. Sin embargo, empecé a excitarme. Me obligo a separar las piernas y me puso la palma de la mano en el coño, luego me introdujo un dedo comprobando que empezaba a humedecerse. Palpo mi culo, lo pellizco, lo acaricio y penetro con su dedo. Me dijo que lo tenía algo estrecho, pero que sin duda se solucionaría.

Me indico con la mirada que pasara por el resto de sus compañeros sentados en el sofá alrededor de la misma mesa, estos repitieron con demora la misma exploración.

Finalmente, llegue a mi hijo. Me hizo arrodillarme frente a él y Me dijo

  • conviene a tu condición de perra sea total para entregarte a mis amigos y Los llamaras amos y ama y obedecerás en

todo. A cuatro patas colocada frente a mi hijo que tiraba de la cadena de perra, sentí que la chica se colocaba detrás mi, y sentí sus dedos en mí culo, note como separaban mis nalgas al máximo y finalmente sentí el dolor profundo de sus dedos taladrando mi culo. Sentí mis tetas pellizcadas.

Mi hijo me ordeno que pidiera y suplicara que quería ser enculada para satisfacción de mis amos. Luego me ataron las manos a la espalda. Nos darás placer solo con la boca. Y allí estaba en medio del salón, desnuda, solo con mi correa de perra, chupetee, lamí, mame con la mayor obediencia y complacencia que pude. Dieron las doce en el reloj. Me quitaron la cadena de perra, me trajeron unas medias negras y un liguero que mi hijo había elegido, unos zapatos negros de tacón alto y me ordenaron podérmelo. Al fin decidieron que era el momento de castigarme de verdad.me ordenaron ponerme a cuatro patas frente al culo de la chica y entonces oí a mi hijo decirme

-apártele el tanga y cómele el culo y métele la lengua bien dentro

Mientras le comía y lamia el culo otro me cogía las tetas me las retorcía. Y en ese momento sentí como me penetraban sin piedad uno detrás de otro hasta llenarme el culo de semen tal era la cantidad que sé salía de mi culo y se caía al suelo. Entonces la chica aparto su culo y mirándome fijamente me dijo

-lame esos restos del suelo perra, ya solo te falta el plato principal túmbate encima de tu hijo.

Mientras me tumbaba sentí como me penetraba mi hijo, y empezaba a follarme con dureza de repente se paró y pude sentir como otra polla taladraba mi culo sin piedad no podía parar de decirles que me dolía, pero de repente para no oírme me metieron la última polla en la boca y pude sentir como todos se corrieron a la vez en mi cara y boca.

Se vistieron y me dejaron encima de la cama con la cara y la boca llena de Senén. Mi hijo me ordeno que me pusiera el tanga y no se me ocurriera limpiarme la cara y fuera a despedir a sus amigos.me levante me puse el tanga y fui hacia la puerta para despedirme de ellos mientras pensaba ya se acabó por fin, me fui despidiendo de uno en uno hasta llegar a la chica que me dijo

-zorra tú y yo ya hablaremos esto no ha hecho más que empezar.

Cuando cerré la puerta mi hijo me dijo

-toma el video te lo as ganado puta …

fin

PD:Muchas y muchos me habéis preguntado si podría hacer algún relato con algún tipo de fantasía que tengáis os ponéis en contacto conmigo y yo lo haré en función de lo que me pidáis